Liberaron a las mapuches de Villa Mascardi

Liberaron a las mapuches de Villa Mascardi

Las cuatro mujeres habían sido detenidas en el violento desalojo de octubre pasado. Se firmó un acuerdo por el que recuperan su espacio ceremonial y sus viviendas.

Luego de ocho largos meses, Betiana Colhuan Nahuel, Romina Rosas, Luciana Jaramillo y María Celeste Ardaiz Guenumil obtuvieron, el 5 de junio pasado, su libertad. Habían sido detenidas durante el violento desalojo  de los integrantes de la comunidad índigena Lafken Winkul Mapu en octubre del 2022, en Villa Mascardi. El operativo había terminado con la destrucción de viviendas, la toma de su rewe (espacio ceremonial) y el procesamiento de las cuatro mujeres por la jueza federal María Silvana Dominguez, quien las acusó del delito de usurpación. 

Las lamngen (hermanas) estuvieron encerradas en condiciones de hacinamiento junto a sus nueve hijos e hijas, en una vivienda insalubre, sin cloacas, con una calefacción insuficiente, sanitarios deficientes, instalación eléctrica riesgosa. A este contexto deplorable se le debe sumar el hecho de que una de las mujeres debió dar a luz con custodia policial. Desde el Instagram “Wiñotupe Taiñ Machi ñi Rewe mew”, donde se brinda información sobre las presas políticas mapuche puelche, se dio a conocer la noticia de su libertad y se publicaron fotos de su firma. “Ocho meses de injusta prisión, con montajes, con estigmatización, con todas las violencias que el estado ejerció y demostró que puede ejercer”, dice la descripción que acompaña la imagen. “Sin embargo, aquí estamos, ahora firmando la libertad que se consiguió gracias a la larga historia de nuestro pueblo que una vez más se propuso parlamentar, la lucha y la organización”.

Frente al sexto pedido de excarcelación por parte de los abogados de las mujeres, la resolución por parte del Tribunal Oral Federal de General Roca plantea que “no se podrá recurrir a una prisión cautelar cuando la pena prevista para el delito imputado no sea privativa de la libertad” y les otorga la excarcelación bajo caución juratoria a las cuatro mujeres implicadas con la imposición de ciertas reglas de conducta a cumplir. La abogada Laura Taffetani, defensora y miembro de la Gremial de Abogados y Abogadas, en diálogo con ANCCOM dijo que legalmente no correspondía que estuvieran presas por ser un delito excarcelable y por su condición de Pueblo originario. Se esperó con la intención de negociar “en términos desventajosos para ellas”. 

Esta buena noticia se da días más tarde de la concreción de la Mesa de Diálogo, tan prometida como postergada, que reunió al secretario nacional de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, al presidente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas Alejandro Marmoni y otros funcionarios del gabinete de Alberto Fernández, junto a representantes indígenas –Orlando Carriqueo, Isabel Huala y Soraya Guitart, entre otros– y veedores de organismos de derechos humanos como Nora Cortiñas y Adolfo Pérez Esquivel. El 1 de junio en la sede de la secretaría de Derechos Humanos en la EXESMA, acordaron lo que ya había sido prometido en febrero en la Casa Rosada y que estuvo a punto de no concretarse. El retorno de la machi (autoridad espiritual) Betiana al rewe, la construcción de tres viviendas que fueron destruidas al momento de la represión, para que ella y su familia vivan allí y puedan ejercer sus tareas espirituales y medicinales con sus asistentes.

Desde el lado mapuche se aceptó la reubicación del resto de la comunidad en tierras que aún no fueron definidas pero que serán cedidas por Parques Nacionales. Pero uno de los puntos más importantes fue el compromiso de firmar un “acuerdo de conciliación” entre las partes, que destrabara el proceso judicial por el cual estaban detenidas las mujeres, objetivo que en la actualidad está logrado y que implica el reconocimiento por primera vez del Estado nacional a la comunidad y a la autoridad de la machi. 

Por otra parte, el Ministerio de Seguridad se comprometió a garantizar la seguridad del rewe que en la actualidad se encuentra vulnerado. Las mujeres mapuches, luego de recorrer su territorio se han encontrado con destrozos, abandono y la ausencia de la armonía que implicaba ese espacio para la comunidad. “Estamos libres pero aun queda camino para que esto termine. No hay reparación para los graves daños que atentaron contra nuestras vidas y de nuestrsx hijxs”, escribieron las lamngen en su último comunicado.

La Sala de Redacción de ANCCOM recibió el nombre de Viviana Mariño

La Sala de Redacción de ANCCOM recibió el nombre de Viviana Mariño

En el Día del Periodista, la Carrera de Ciencias de la Comunicación y su agencia de noticias homenajearon a la colega fallecida el año pasado. Había sido una de las pioneras de ANCCOM y también ejerció la docencia en la Facultad de Ciencias Sociales. Hasta su muerte, fue gerenta de Noticias de Télam.

Un Día del Periodista distinto, especial, centrado en el recuerdo, la pasión y en la figura del legado, que atraviesa fronteras físicas y temporales, cuestionando y rompiéndolas en el camino. Durante la tarde del miércoles 7 de junio, colegas y amigos homenajearon a Viviana Mariño con palabras y con la inauguración de una placa con su nombre, que ahora brilla resplandeciente en la entrada de la Sala de Redacción de ANCCOM, en la Facultad de Ciencias Sociales.

Viviana -o para muchos, Vivi- era graduada de la Carrera de Ciencias de la Comunicación y docente del Taller de Expresión III. Fue un espíritu clave en la fundación de la agencia de noticias ANCCOM, coordinando e iluminando el camino de periodistas practicantes, y gerenta periodística de la agencia nacional de noticias Télam. También fue una protagonista fundamental en la recuperación del diario Tiempo Argentino, a través de la conformación de una cooperativa que lo autogestiona hasta el día de hoy. Falleció el 24 de junio del 2022 a los 51 años, a raíz de una enfermedad que pocos sabían que estaba atravesando, y que nunca llegó a apagar la luz que Vivi llevaba con ella a donde iba. “Esa, la enfermedad, fue la única noticia que se resistió a dar”, reflexionó Diego Rosemberg, coordinador de ANCCOM y colega cercano a Vivi. La luz, casi un año después de su fallecimiento, sigue brillando. 

“Para nosotros y nosotras era muy importante hacer el homenaje a Viviana Mariño -explicó Larisa Kejval, docente y directora de la Carrera de Comunicación- porque de algún modo es una forma de seguir procesando colectivamente la partida de una compañera y de una gran amiga, pero, fundamentalmente, porque queremos dejar una huella, una marca institucional que recuerde su legado. Su legado como gran gran periodista que honró lo mejor el oficio, y su legado como gran, gran docente, generosísima en la formación de las nuevas generaciones”. Larisa cuenta que, antes de ser colega, Vivi era una amiga. Empezó siendo la compañera de las clases de los lunes, después la compañera de los jueves, hasta llegar a ser la compañía de las pizzas de viernes por la noche, y de algún asado de domingo. Así también la recuerda. 

“Vivi era una de las nuestras – reflexionó Larisa-. Me puse a pensar qué quiere decir esto, que Vivi haya sido y sea una de las nuestras. Quizás sea una referencia al hecho de que éramos parte de una misma generación, quizás sea una referencia a ser mujeres intentando romper techos de cristal, quizás signifique que Vivi expresaba perfectamente el resultado de esa rara avis que genera nuestra carrera. La capacidad de embarrarse y comprometerse políticamente desde el ejercicio de la profesión, la capacidad de enseñar y reflexionar sobre la propia práctica, la capacidad de gestar y gestionar el propio medio, de defender y construir lo público”.

Aún sin tener tiempo, cuenta Larisa, Vivi se las arreglaba para lograr todo esto. Aparecería luego en el homenaje la palabra “pulpo”, en un intento de entender y caracterizar la forma en que lograba estar en todo, y en todos lados, todo el tiempo. Siempre sonriente, siempre sabiendo qué hacer, qué caminos tomar y explorar sin miedo. 

Luego tomó la palabra María Rosa Gómez, titular de una de las cátedras de Taller de Expresión III. “Cuando hablamos de Vivi siempre aparece la palabra pasión”, destacó. Cuenta que era una apasionada por el periodismo, por todo lo que aseguraba la calidad y el valor de la práctica -apasionada por la búsqueda de la mejor información, de las mejores fuentes, pasión por estar en los cierres- pero cuenta que, sobre todo, era una apasionada por enseñar el periodismo, cosa que hizo eso de manera sobresaliente.

“No tengo mucho más para decirles -dijo María- la extrañamos -se le llenaron los ojos de lágrimas y la voz se le quebró-, la adoramos, por sus hermosos ojos, y por su sonrisa. Gracias”. Las manos de los presentes respondieron a las palabras de María: todas aplaudieron, aunque varias tuvieron que interrumpir intermitentemente su propia ovación para elevarse, aproximarse a los ojos y secar las lágrimas. 

Diego Rosemberg admitió, al igual que Larisa, haber escrito sus palabras con anticipación para prevenir lo más posible la imprevisibilidad de la emoción. Se refiere a la labor de Vivi en ANCCOM como la acción de tomar diamantes en bruto y pulirlos. “Estaba convencida de que los jóvenes no son el futuro, sino el presente -recuerda Diego-. Siempre nos decía: `Tenemos que escuchar a los pibes`, así decía ella, `a los pibes`. Y este es un lugar donde se forman los pibes, pero también donde se los escucha”. Luego, fuera del momento frente al micrófono, Diego destacó particularmente esta dedicación a la juventud que le salía naturalmente a Vivi, una dedicación atravesada por una admiración y un respeto muy profundo por los jóvenes.

Lamentó que los homenajes no se hagan en vida, pero reconoció la importancia del acto para los presentes, en tanto abrigo que podría, momentáneamente por lo menos, brindar un poco de ayuda para afrontar una partida tan temprana. 

“Darle a la redacción de ANCCOM el nombre del Vivana Mariño – explicó Diego – es casi una síntesis perfecta de los atributos identitarios de Anccom. Vivi era un torbellino lleno de adrenalina, y esta adrenalina es lo que nosotros intentamos transmitir en este espacio a los estudiantes. Este homenaje nos va a dar el abrigo porque nombrar es dar existencia, una identidad, y aunque suene paradójico, nombrar es dar vida”. 

Las mapuches de Villa Mascardi más cerca de la libertad y de recuperar su espacio ceremonial

Las mapuches de Villa Mascardi más cerca de la libertad y de recuperar su espacio ceremonial

El Estado y la comunidad originaria firmaron un acuerdo por el cual se le reconoce sus tierras y se desistiría de las causas penales por las que ocho mujeres están en prisión domiciliaria.

Betiana Colhuan Nahuel, Romina Rosas, Luciana Jaramillo y María Celeste Ardaiz Guenumil son los nombres de las mujeres pertenecientes a la comunidad mapuche que se encuentran encerradas con sus hijos e hijas en condiciones lamentables desde octubre del año pasado cuando se produjo un violento desalojo en Villa Mascardi en manos del Comando Unificado de fuerzas represivas. Desde hace casi ocho meses están cumpliendo prisión domiciliaria en una casa de Bariloche, luego de haber sido procesadas por la jueza federal María Silvana Domínguez. Pero a partir del acuerdo firmado ayer durante la tercera Mesa de Diálogo entre el Estado nacional y referentes de las comunidades indígenas de la Patagonia se encuentran más cerca de la libertad, y sobre todo de recuperar su rewe (espacio ceremonial) en un sector del Parque Nacional Nahuel Huapi, territorio que reclaman como propio. ANCCOM habló con su abogada y reconstruyó estas últimas intensas horas.

Luego de sucesivas postergaciones, en la sede de la secretaría de Derechos Humanos en la exESMA poco después de las 14 comenzó la reunión encabezada por el anfitrión, el secretario nacional del área Horacio Pietragalla, el presidente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas Alejandro Marmoni y otros funcionarios del gabinete de Alberto Fernández, junto a representantes indígenas –Orlando Carriqueo, Isabel Huala y Soraya Guitart, entre otros– y veedores de organismos de derechos humanos como Nora Cortiñas y Adolfo Pérez Esquivel. La firma del acuerdo había sido prometida en febrero en la Casa Rosada y estuvo a punto de no concretarse. Tras un cuarto intermedio y cerca de las 20 llegaron a la redacción final que hará posible el retorno de la machi (autoridad espiritual) Betiana, al rewe, lo cual implica un reconocimiento como sitio sagrado, y la construcción de tres viviendas, que fueron destruidas al momento de la represión, para que ella y su familia viva allí y pueda ejercer sus tareas espirituales y medicinales con sus asistentes. 

La parte mapuche aceptó que los demás integrantes de la comunidad que fueron desalojados en octubre de 2020 sean reubicados en tierras aún no definidas, asunto a abordar en la próxima mesa de diálogo. Asimismo, el Ministerio de Seguridad se comprometió a garantizar la seguridad de rewe, recientemente vandalizado. Pero uno de los puntos más importantes fue el compromiso de firmar un “acuerdo de conciliación” entre las partes, que podría destrabar el proceso judicial por el cual están detenidas con prisión domiciliaria las cuatro mujeres integrantes de la comunidad, quienes recuperarían su libertad.

Este ítem se refiere a la llamada “causa madre” del 2017, cuyo querellante es Parques Nacionales, y a la que se abrió en 2022. Las comunidades y el Estado llegarían a esta “conciliación” según los términos del Artículo 34 del Código Procesal Penal. Este contempla como “no punible” a aquel que obra en defensa propia o de sus derechos. Laura Taffetani, defensora y miembro de la Gremial de Abogados y Abogadas, en diálogo con ANCCOM dijo que “la conciliación entre las lamngen (hermanas) que son las imputadas y Parques Nacionales, la parte damnificada, permitiría que se extingan las causas penales, pero aún dependemos de lo que haga la justicia con este acuerdo, tenemos una lucha más que dar”. En el caso de que cualquiera de las partes no cumpla con dichas pautas, el acuerdo conciliatorio cae y por lo tanto resurgirán las causas penales. Sin embargo, Taffetani destacó que “en este acuerdo por primera vez el Estado nacional reconoce a la comunidad y a la autoridad de la machi”.

Puertas afuera del encuentro, el Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir” transmitió en vivo la palabra de dos de las mujeres detenidas. Con la consigna “Libertad a las presas políticas Mapuche” primero Romina y luego la machi Betiana aclararon que se encuentran “prisioneras del Estado que ha sembrado el terror, sin tener una condena y que, en caso de que existiera un juicio y una pena, esta sería excarcelable”. Dijeron que se las acusa de “usurpadoras cuando el pueblo mapuche tiene el derecho a tener estas tierras que hemos habitado desde siempre”. Desde Bariloche, las mujeres reclamaron nuevamente la acción del Estado para que cumpla la promesa que estuvo postergando. “Confiamos en que quieren solucionar el conflicto pero nos han mentido y se han burlado”, señaló Romina, quién al momento de la represión se encontraba transitando un embarazo de 40 semanas y tuvo que parir bajo la mirada de la custodia policial.

Betiana se lamentó por las condiciones de su espacio ceremonial sagrado que hoy se encuentra militarizado y que sufrió el martes 30 de mayo un acto de vandalismo denunciado por Lof Lafken Winkul Mapu. Recordó también lo sucedido en el 2017 cuando fue asesinado por la espalda Rafael Nahuel, joven del Alto barilochense que estaba transitando su proceso de reconocerse mapuche. “Él sigue allí presente, en ese territorio que no se vende ni se negocia, la lucha sigue mientras nuestra sangre resista”, aseguró la machi. Para ella, “la mal llamada Conquista del Desierto hoy continúa con represión, castigo y presos políticos por defender y luchar la vida de los territorios libres, queremos que nuestros hijos sean libres y que tengan un espacio para poder desarrollarse y crecer”. Y Romina apuntó: “El problema son los intereses que hay detrás, el Estado termina siendo un títere y por eso nos ven a nosotras como terroristas cuando en realidad estamos cuidando el territorio”.

El miércoles 31 de mayo se había producido un reclamo con cortes intermitentes del tránsito en Viedma por parte de integrantes de los pueblos originarios y de la CTA Autónoma de Río Negro, con la finalidad de pedir la liberación de las cuatro mujeres, que se sumó a cantidad de convocatorias en distintos puntos del país para continuar protestando y visibilizando por ellas, a quienes consideran “presas políticas”. Desde Rosario hasta la Embajada de Argentina en Chile, los “vecinos conscientes”, o los wenuy (amigo blanco) no quieren quedarse afuera del reclamo. 

De todas ellas, Celeste Guenumil está más cerca de la libertad dado que la Cámara Federal de Casación Penal hizo lugar al recurso presentado por su defensa y atendió al “principio de interés superior del niño” en relación a sus tres hijos. Guenumil, a diferencia de sus compañeras, no está imputada en la llamada “causa madre” por la usurpación del territorio.

Por su parte, Orlando Carriqueo, coordinador del Parlamento Mapuche-Tehuelche,  dijo a TeleSISA que “en el contexto de “criminalización del pueblo mapuche y de un ataque fascista de la derecha lograr la devolución del rewe es un objetivo impensado años atrás”. También hizo hincapié en la importancia de hacer públicas las conclusiones, “que la sociedad esté al tanto de lo que está en juego para lograr un debate social sobre las falencias de la democracia” y “discutir la verdadera identidad de la Argentina”.

 

Los vecinos de Floresta, a un mes del derrumbe

Los vecinos de Floresta, a un mes del derrumbe

Recién pudieron recuperar lo que quedaba de sus pertenencias, fueron alojados en hoteles y denuncian el robo de dinero y artículos electrónicos.

«Por ahí no”, “Se va a caer”, “¡Cuidado abajo!”, le gritó una vecina a otro mientras este deslizó una cama de dos plazas desde el balcón del primer piso a la planta baja tan solo con una cuerda delgada y floja de nudos, pero sujeta a la esperanza de poder reutilizarla en su nuevo hogar temporario. “¡Apúrense!, ¡Ya, de una vez!, ¡Ya nos vamos!”, exclamó uno de los efectivos de chaleco amarillo flúor que, a pesar de la intensidad de su voz y la presión que ejerció sobre la gente que sostuvo en brazos lo que les quedó de pertenencias, no desvió la atención principal de todos los transeúntes: los vecinos del derrumbe de Floresta por fin recuperaron sus pertenencias,  aunque con amargas e “indignantes” sorpresas, luego del impactante colapso estructural que cobró la vida de tres personas. 

 A poco más de un mes del derrumbe que ocurrió el pasado 25 de abril en la casa ubicada en la Av. Rivadavia 8750, la acera continuó húmeda por las fuertes tormentas de aquellos días y los vecinos, sin importar el pronóstico del tiempo, trabajaron a la par, todos juntos y así recuperaron lo que les quedó debajo de los escombros, desmoronamiento que enlutó a tres familias de la colectividad peruana residentes en la Comuna 10 de la Ciudad de Buenos Aires. 

 Con el cielo gris que amenazó un segundo round meteorológico, Fidel Gamarra, representante de la cooperativa de sus vecinos, brindó una entrevista a ANCCOM, único medio presente a 30 días del fatal suceso en donde fallecieron la nena Gabriela de 12 años, el joven Jefferson de 19 y Felícitas de 72, una mujer adulta mayor que fue hallada tres días después entre los escombros. “Somos casi 35 familias, de las cuales pudimos ingresar una parte solamente a recuperar cosas personales, pero hubo mucho faltante de dinero”, expresó. 

 “Después del derrumbe, vino un Grupo Mitre de la empresa tercerizada del Gobierno de la Ciudad y trabajó con las excavadoras, un amigo del edificio vecino nos contó que estaban robando nuestras cosas en bolsas”, aseveró, hecho que los indignó ante el “saqueo” en medio de la desgracia. “Yo hablé con el comisario César Bustos y le mostré el video. Luego sorprendimos a los siete personales con chaleco amarillo que estaban bolsiqueando todos los bolsos. Todos los dólares y pesos se los metieron al bolsillo”, continuó. 

Narrado el hecho de cómo fue la requisa a los trabajadores que, en vez de excavar y sacar los escombros extrajeron algo más para su propio beneficio, Fidel asentó: “Ese día los sorprendimos con 200.000 pesos en los bolsillos, pero ellos vinieron a trabajar días anteriores”, por lo cual los vecinos aseguraron que la suma total del “robo” monetario sería muchísima, ya que son más de 35 familias las que vivían de manera hacinada en la casa de Floresta. Los vecinos ya tomaron cartas sobre el asunto contra los que fueron descubiertos “robando” en la casa de Floresta y denunciaron el hecho, acusación que sigue en curso.

 Con el reloj en contra, los damnificados ingresaron a las corridas a la casa y sacaron, en incontables bolsas negras, toda una vida que se desplomó de un momento a otro y sepultó el sueño de muchas familias de salir adelante lejos de su tierra natal, ya que, como les gusta subrayar, “todos son laburantes y buenos vecinos” de la zona. “Somos manteros, remiseros, albañiles, amas de casa, gasfiteros, cuidadores de ancianos. Todos trabajamos honradamente”, recalcó el Julio Cabezas, suegro del joven de 19 años que falleció a tan solo dos meses de su llegada a la Argentina en búsqueda de un futuro mejor. 

 Por si fuera poco, “la dueña no apareció”, razón por la que Fidel exigió “una charla con la heredera de la casa para llegar a un acuerdo”, pues, el Gobierno de la Ciudad puede reconstruirles la vivienda, pero el terreno no es de la propiedad de los inquilinos afectados. 

 “Entré por primera vez después del derrumbe y toqué las paredes mientras caminaba lentamente. Yo la pinté, hice toda la iluminación, algunas conexiones de agua y membranas. Conozco todos los rincones”, relató el vecino Fidel, mientras que Julio aún no sacó de su memoria el insólito momento en el que su hija enviudó: “Jefferson estaba al lado mío en el sillón. Se empezó a escuchar como si cayera granizo, y lo que sucedió es que se estaba partiendo por debajo. Yo le dije ‘voy a salir a ver que pasa’. En ese mismo momento que salgo, se cae todo abajo, ¡parecido a las películas!. Mi yerno no tuvo la suerte de sobrevivir. Estoy triste”. 

Incluso Persy Manga Fernández, secretario de la cooperativa de vecinos que piden una solución habitacional por medio de un préstamo para adquirir un hogar digno, también se manifestó al decir que están dispuestos a pagar por vivir en una nueva casa, pedido al que también se le sumó el representante Fidel, “Nosotros queremos una solución ahorita. La solución es que nos den una casa a cada familia que pueda pagar, siempre y cuando haya una propuesta”, aclaró. 

 Poco a poco y con las aisladas gotas de lluvia que cayó al atardecer, las pesadas bolsas las cargaron hombres, mujeres y hasta niños. El flete se llenó a tope con heladeras, placares, juego de mesa, muebles, televisores, ollas de cocina, lámparas, camas, colchones, maletas, etc., y fueron derivados a sus nuevos hogares temporales, hoteles para damnificados que les brindó el Gobierno de la Ciudad, pero con fecha de expiración.

 Si bien los representantes del Consulado peruano “no dieron ayuda moral, económica ni atención psicológica” para sus connacionales más que agilización con trámites de documentación que perdieron en el derrumbe, el Gobierno de la Ciudad les brindó alojamiento en hoteles del centro porteño hasta terminar mayo con las tres comidas incluidas, además de un subsidio económico por familia. 

 Por otro lado, les ofrecieron también un galpón para que dispongan de él y guarden sus pertenencias, pero les resultó poco confiable luego de que experimentaron el robo de algunos aparatos electrónicos y de dinero en la casa, tema que ya es tratado por los abogados de la cooperativa al tener material audiovisual que respalda la versión de los vecinos. 

La nostalgia y la incertidumbre los invadió por completo y reconocieron que han perdido mucho más que un hogar con el derrumbe. Que la “impotencia de no vivir más” en la avenida Rivadavia es algo que no se irá de la noche a la mañana, pero, muy devotos al cristianismo, agradecieron “a Dios por estar vivos”. 

 Los damnificados de la casa de Floresta que fueron reubicados en hoteles, tenían como fecha límite para irse el pasado miércoles 31 de mayo. Llegado el día, los vecinos charlaron con las autoridades del Gobierno de la Ciudad quienes les dieron la siguiente solución: Distribuirlos en cuatro hoteles de ayuda —en los barrios de Flores, Almagro, San Telmo y el Centro de la ciudad— y un bono de 350.000 pesos por familia solo sí presentan papeles para un nuevo alquiler.

 Sin embargo, los vecinos no están conformes con la solución brindada. “Hay hoteles de ayuda que no son aptos para vivir porque tienen suciedad, cucarachas, telarañas y hasta humedad, cosas que no son buenas para los niños”, sostuvo Fidel Gamarra. 

 Por último y no menos importante, si no hay solución a los pedidos de la mesa de trabajo, sumado a la precariedad de los nuevos hoteles, los vecinos están decididos a “acampar pacíficamente a las afueras de la casa” de Floresta en modo de protesta este primer fin de semana de junio:  “Vamos a cerrar la Avenida Rivadavia. Vamos a seguir luchando porque quedaron 15 vecinos que no sacaron sus pertenencias y no nos han dado una solución definitiva al problema”. 

«Ningún amor propio va a salvar al mundo»

«Ningún amor propio va a salvar al mundo»

A cuatro años de la aprobación de la Ley Nacional de Talles la activista y modelo de talles grandes, Brenda Mato, habla sobre las principales deudas de la sociedad respecto a la diversidad corporal.

Yo sé conscientemente que mi vida sería más fácil sí yo no fuera gorda, no sería mejor, sería más fácil”, dice la activista Brenda Mato. La sociedad tiene tan negada la diversidad de cuerpos que “todo lo que no es flaco, es gordo”. Pero destaca que la falta de derechos sigue presente, lo único que mejora cuando dejas de ser una persona gorda “es el trato de la sociedad”.

Desde su contenido en redes sostiene que “es posible tener una vida más allá de esperar a adelgazar”. En Gordes Activistas de Argentina encontró espacios seguros y entendió que lo que le pasaba era colectivo por lo que las respuestas no podían ser de otra forma.

¿Cómo y cuándo empezó tu activismo?

Yo no buscaba ser activista, buscaba alguna respuesta. El activismo es una respuesta a mi propia historia. Crecí en un cuerpo que estaba por fuera de la norma y mi percepción del cuerpo siempre fue dismórfica. Con el tiempo, entendí que muchas personas estaban atravesadas por las mismas cosas que yo, pero lo único que compartíamos era una corporalidad, por lo que era algo más grande lo que había que cuestionar. Lo que pude es sacarme de encima el peso que más me pesaba: el de la sociedad y llegar a un acuerdo con mi cuerpo. Igual cada vez tengo más preguntas (risas).

 

¿De qué manera comenzaste a participar en Gordes Activistas por Argentina?

El camino del activismo es poco solitario en un principio, pero la realidad es que los cambios sustanciales se dan desde el activismo colectivo. Y las respuestas tienen que ser colectivas porque ningún amor propio va a salvar el mundo. Que yo me ame a mí misma, no le va a cambiar el mundo a nadie más que a mí. Es buenísimo hacer ese trabajo, pero no cambia la realidad. Igual voy a salir a la calle y me van a gritar gorda puta desde un auto o no voy a encontrar talles o voy a ir al médico y me va a mandar una dieta, aunque me duele el oído.

Cuando lo que vivís es compartido con otres no deja de doler, pero duele menos. Laura Contrera dice algo que me encanta: para un gorde no hay nada mejor que otre gorde. No es una cuestión sectaria, sino que no hay nadie que te pueda entender mejor en este camino que alguien que está atravesando las mismas cuestiones que vos.

 

¿Cuáles son las principales denuncias, demandas y propuestas de la organización?

La principal demanda es la despatologización de la gordura. Dejar de pensar que todos los cuerpos gordos están enfermos y que la única respuesta a mis problemas de salud sea mi peso. Hay una baja calidad de atención médica a las personas gordas. Pudimos participar de las guías de obesidad que se le presentan a los médicos de todo el país y en la escritura de cuadernillos de sensibilización de corporalidades gordas. Hay que aprender de la existencia de la diversidad corporal, a cómo tratarnos, cómo preferimos ser llamados.

Es increíble estar en 2023 y todavía estamos pidiendo ser personas. A poder existir en el cuerpo que tenemos. Cuando reclamamos derechos molestamos y nos tratan de minorías, pero cuando hay que vender dietas y violentarnos somos mayorías.

Respecto a la Ley de Talles, ¿cuáles son los logros y las deudas?

El logro principal es haber puesto el tema en agenda. También la descolonización sobre nuestros cuerpos de la tabla de talles europea. Por primera vez en 200 años de historia, hay una tabla de talles que analiza cómo son los cuerpos en nuestro país desde el Estado y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). Es increíble que sea información pública y para todes. Pero el mismo Estado que reconoce por un lado ser gordofóbico, por el otro tiene guardado en un cajón la Ley de Talles que está lista para salir y seguir trabajando. Es una ley que va a cambiar realidades porque el acceso a la ropa es un derecho fundamental que para muchas personas no se cumple. No tenemos respuestas, es un silencio matador y agotador.

 

En abril realizaron la primera Diversa Feria, ¿cómo viviste este evento? ¿De dónde surge?

Diversa Feria es una condensación del activismo de la Ley de Talles. Es poder crear un espacio seguro para la gente y decirle “para vos sí hay”. Tiene un rol social y político importante: todos los emprendimientos son nacionales y de confección propia, liderado por mujeres en su mayoría, con la participación de personas de la diversidad sexual y de la cooperativa de la Garganta Poderosa. La condición es que todos tengan al menos cinco talles. Hacer talles para todes no es una cuestión de plata, es una cuestión de compromiso y entendimiento de las necesidades de la sociedad. Es un evento que brinda espacios necesarios y que se va a repetir en julio de este año.

 

Brenda Mato invita a reflexionar sobre estas temáticas. “Las personas gordas vivimos en pausa. Estamos todo el tiempo pensando en que mi vida va a empezar cuando baje de peso, voy a tener novio, voy a hacer este viaje”. Destaca que es importante entender que no es necesario tener otro cuerpo para hacer las cosas que querés. “Ahora ya tenés un vida plena”.

Lo que mata es la inflación

Lo que mata es la inflación

Aunque en mayo parece desacelerar el aumento de los alimentos, el incremento de los precios regulados haría que el próximo índice no traiga buenas noticias. Por qué el acuerdo con el FMI es inflacionario.

Pese a los intentos del Gobierno por contener la suba de precios con medidas como el nuevo rol del Mercado Central para evitar subas irregulares y la creación de unidades para Monitorear el Comercio, los alimentos y bebidas siguieron en alza este mes.

Después del índice de inflación del 8,4% que marcó abril, el Ministerio de Economía decidió otorgarle un nuevo rol al Mercado Central, y a partir de ahora importará alimentos de forma directa. El objetivo es reducir el precio efectivo de venta al público de productos frescos (frutas, verduras, hortalizas y carnes) y productos secos no perecederos (alimentos de primera necesidad) para “defender el consumo de las personas” y eliminar los costos de intermediación.

Además, se decidió crear una Unidad de Monitoreo para controlar irregularidades. La disposición fue publicada este lunes en el Boletín Oficial y explica que se trata de un sistema de seguimiento de las operaciones de compra y venta de bienes y servicios en el comercio interno y externo; la promoción con equidad de estas últimas, evitando posiciones dominantes; la verificación de la trazabilidad de los bienes objeto de comercio y la correcta tributación en cada etapa; y la orientación al consumidor, atendiendo las variables obtenidas en el proceso de seguimiento.

El precio de los alimentos aumentó 6,5% en mayo y se desaceleró tras el pico de abril que informó el INDEC. Según la Consultora LCG (Labour, Capital and Growth), en la cuarta semana de mayo la suba de precios de los alimentos promedió 0,32%, desacelerando un punto respecto a la semana anterior.

Ocho categorías de alimentos relevados se ubicaron muy por encima del promedio semanal (aceite; azúcar, miel, dulces y cacao; productos lácteos y huevos; productos panificados, cereales y pastas; condimentos; bebidas e infusiones; comidas listas para llevar; frutas), pero la caída en las categorías de carnes y verduras frenaron la suba global de la canasta. Sin estos, el aumento semanal habría sido del 2,4%.

Más allá de la desaceleración de los alimentos, restará saber de qué forma incidirá en el Informe que publicará el INDEC a mediados de junio. Es que los precios regulados pueden mantener a la inflación en niveles superiores, incluso a las estimaciones de mercado. Según el último relevamiento de expectativas de mercado que difunde el banco Central, para mayo se proyecta una inflación del 6,1%.

Agustín Mario, Licenciado en Economía (UBA), Magíster de la Universidad de Buenos Aires en Economía y Doctor de la Universidad de Buenos Aires en Ciencias Sociales, sostiene que “lo que pasa con los precios en alimentos está totalmente atado a lo que pasa con el dólar. Somos un país que exportamos lo que comemos, entonces básicamente la cotización del dólar marca mucho el ritmo de lo que pasa con los precios de los alimentos. En la medida en que el precio del dólar tiene que ajustarse según la inflación por el propio acuerdo con el FMI, es imposible porque entramos en un círculo vicioso. Suben los precios, eso nos obliga a aumentar el tipo de cambio, lo cual hace que vuelvan a subir los precios, lo cual nos vuelve a obligar a subir el tipo de cambio, y de ahí no se puede salir”.

En medio de la crisis signada por la gran inflación y la tensión cambiaria, la Secretaría de Comercio, conducida por Matías Tombolini, oficializará en horas el programa “Precios Justos Barriales”, tras negociaciones para sumar aproximadamente 100 productos de primera necesidad que tendrán una actualización de precios al 3,8% mensual.

La primera etapa comenzará a regir hoy, jueves 1 de junio, y finalizará el 31 de julio. Hasta el momento se alcanzó acuerdo con 30 fabricantes para conformar una canasta de 97 artículos de consumo masivo (alimentos, bebidas, tocador y limpieza), que serán ofrecidos en todo el país por las cadenas mayoristas y grandes distribuidores.

Esta nueva versión de “Precios Justos” expresa la preocupación oficial por la escalada inflacionaria de los últimos meses. Los números reflejan la escasa y nula eficacia del programa original para establecer precios de referencia y amortiguar el alza constante de los precios, razón por la cual las empresas desconfían de este nuevo intento por extender los precios regulados. El temor es la dificultad para controlar los niveles de abastecimiento y los precios de venta en autoservicios, almacenes, tiendas y ferias a lo largo y ancho del país.