Libros versus motosierra

Libros versus motosierra

Las bibliotecas populares de todo el país se organizan frente a la pérdida de autonomía que implica el reciente Decreto 345/25 que desregula organismos culturales.

Desde la publicación del Decreto 345/25, la resistencia de las Bibliotecas Populares continúa en marcha. La norma tiene por objetivo desjerarquizar y desregular diversos organismos culturales, entre ellos, la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) que pierde tanto autonomía presupuestaria como representatividad federal. Esto llevó a que distintas bibliotecas se organizaran en un frente de lucha.

Verónica Barbera, integrante del colectivo de la Biblioteca Popular La Chicharra (ubicada en Barrio Meridiano V, La Plata), contó: “En este momento nos encontramos en estado de alerta y movilización. Estamos fundando redes con otras bibliotecas populares que nos permitan fortalecernos, difundir esta problemática y poder resistir los embates del gobierno nacional.”

Uno de los frentes organizados que se creó es el Movimiento de Bibliotecas Populares en Lucha. Desde allí, se está buscando derogar este decreto desde distintas vías de acción. Eric Winer, bibliotecario, integrante del Movimiento, trabaja en la Biblioteca Popular Por Caminos de Libros (ubicada en el barrio popular Ramón Carrillo de Villa Soldati), explicó en diálogo: “La vía más urgente que identificamos es la incidencia parlamentaria. Al ser un decreto, nos interesa incidir en los legisladores que tienen la posibilidad de anular el decreto que perjudica tanto en la CONABIP como otras instituciones. Desde el punto de vista de las bibliotecas populares, al estar desperdigadas por todo el país, capaz tenemos posibilidad de llegar a algún legislador provincial que tiene alguna cercanía desde su propia jurisdicción o comunidad, para tratar de hacerle reflexionar sobre el impacto de esta medida. La verdad es que está difícil”. Sin embargo, el accionar no se agota en el ámbito parlamentario: “Estamos también pensando en judicializar el decreto porque va en contra de la ley que constituye la CONABIP. No somos los únicos, varios actores también avanzan por la vía judicial tratando de generar una cautelar, un amparo. Y después tenemos otras estrategias, como tratar de generar impacto en las redes, entre los movimientos. Y bueno, nos queda la vía de manifestación en las calles”, amplió el referente.

De hecho, la pasada semana María Nieves Dalponte Ayastuy -presidenta de la Biblioteca Popular Tupac Amaru Infanto Juvenil de La Plata- presentó una acción declarativa de inconstitucionalidad colectiva (ADIC), patrocinada por el constitucionalista Andrés Gil Domínguez, en el Juzgado N° 2 en lo Civil, Comercial y Contencioso Administrativo Federal de La Plata. Se demorará de quince a treinta días hábiles en recibir una respuesta y, pasado ese período, se traslada la demanda al Estado nacional. La Unión de Escritoras y Escritores expresó su apoyo a la iniciativa.

A su vez, diversos organismos se han solidarizado con la situación actual de las Bibliotecas Populares. Entre ellos, IFLA LAC (División Regional de América Latina y el Caribe de la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios e Instituciones), que en un comunicado expresó su “respeto por la institucionalidad argentina” y “respaldo a todos los esfuerzos orientados a preservar el valioso trabajo de las bibliotecas populares como espacios fundamentales para la vida democrática, cultural y social”.

A nivel legislativo, los diputados Marcela Passo, Carlos Daniel Castagneto y Jorge Antonio Romero, pertenecientes al bloque Unión por la Patria, presentaron un pedido de informes al Poder Ejecutivo sobre el estado de los distintos organismos afectados tanto por el Decreto 345/25 como el 346/25. Sin embargo, hasta el momento de la publicación de esta nota el diputado Romero confirma que no han recibido ninguna respuesta.

ANCCOM intentó contactarse con las autoridades gubernamentales responsables de la CONABIP, pero hasta la fecha no se recibió respuesta.

¿En qué perjudica el Decreto 345/25?

Uno de los artículos del decreto 345/25 que más alerta ha generado es el 8°, que reemplaza a la anterior autoridad de aplicación de la Ley N° 23.351 de Bibliotecas Populares, la CONABIP, por la Secretaría de Cultura: Esta nueva situación constituye una profunda pérdida de autonomía. Cecilia Bona, periodista y coordinadora a cargo del proyecto de promoción de la lectura @porqueleerok, explicó: “Desde la época de Sarmiento (1870) la CONABIP maneja su propio presupuesto y toma sus propias decisiones. Todo es decidido en una comisión compuesta un representante de cada una de las provincias y la Ciudad de Buenos Aires. Eso hace que tanto las decisiones como la conversación entre las bibliotecas sea muy federal. Ahora, tanto presupuesto como decisiones pasan a formar parte de la Secretaría de Cultura que, además, podría decidir asignar ese presupuesto a las bibliotecas o no. Puede hacer con eso lo que quiera (…) Lo más perjudicial es esta quita de autonomía presupuestaria y toma de decisiones”.

En relación a la pérdida de representatividad federal, Mercedes Botana, voluntaria de la Biblioteca 3037 de Lago Puelo, Chubut, expresó su preocupación: “Perder representatividad nos parece realmente preocupante. Que cinco personas -puestas por la Secretaría de Cultura- decidan las políticas públicas desde la Ciudad de Buenos Aires no está bueno… Nosotros estamos en la provincia de Chubut ¿Qué saben de lo que pasa acá? ¿Qué saben de la idiosincrasia, de la población? Hasta el decreto, la CONABIP tenía veinticuatro representantes, uno por provincia, elegidos también democráticamente dentro de cada jurisdicción. Esto no va a suceder más. Van a ser cinco personas a dedo, que no sabemos cómo transitaron bibliotecas populares, si es que alguna vez pisaron una. Nos parece importante tener una voz y un voto en las decisiones de las políticas públicas que tienen que ver con estos proyectos comunitarios”.

Los programas brindados por la CONABIP son de vital importancia para el desarrollo de las actividades y el abastecimiento de las bibliotecas, como cuenta Paula Epstein, quien forma parte de la Biblioteca Popular Roffo de Villa del Parque, CABA: “La CONABIP ayuda al sostenimiento de las bibliotecas a través de subsidios para hacer frente a gastos corrientes como servicios, conectividad a internet, compra de libros. Brinda también asesoramiento y capacitaciones. Nuestra biblioteca participó desde la primera edición del Programa Libro%. Una iniciativa valiosísima que nos permitió, frente al costo que tienen los libros, mantenerla actualizada”.

¿Cuál es la importancia de las bibliotecas populares? 

La particularidad de las Bibliotecas Populares, frente a otros tipos de bibliotecas, es que las mismas se crean por iniciativa zonal, vecinal, por los miembros de una comunidad. Para Verónica Barbera “una biblioteca popular se diferencia de una biblioteca, por ejemplo pública, por el modo de constituirse y de financiarse. Está impulsada y conformada por miembros de una comunidad y financiada con cuotas societarias y alguna que otra línea de financiamiento de otros orígenes, que pueden ser públicos o privados, pero fundamentalmente está sostenida por su comunidad.” Por eso, considera que la relación con el territorio “es muy fluida. Nosotres abrimos de lunes a viernes y de manera excepcional también los sábados con actividades especiales. Pero la biblioteca tiene una impronta local muy grande. Está en vínculo con diferentes instituciones y espacios culturales del barrio. Por ejemplo, trabajamos desde hace 18 años haciendo promoción y mediación de la lectura con la Escuela Secundaria N° 44, que está justo en frente de nuestra biblioteca”, mencionó Barbera sobre las características de las actividades de La Chicharra.

En esta misma línea, Braian, integrante de la Biblioteca Popular Sarmiento de Villa Italia, Tandil, detalló la multiplicidad de actividades que se realizan en el espacio del que forma parte: “En nuestra biblioteca trabajamos con planificación estratégica y diferentes ejes: la promoción de derechos, la promoción de la lectura, también tenemos un espacio formativo de talleres, proyectos vinculados a la alfabetización digital y el acceso a la información, servicios de información ciudadana, más todos los ciclos que realizamos en la biblioteca de manera anual, algunos de promoción de artistas y autores locales, referentes de diferentes expresiones artísticas.” Al enumerar estas acciones destacó la importancia de las bibliotecas populares en las comunidades: “Algunas tienen más de 100 años. La presencia y la referencia son muy importantes, porque termina siendo un espacio de articulación en cada una de las localidades y barrios. En algunas localidades más chicas, que pueden estar en lugares alejados, a veces es el único lugar, no sólo donde hay libros, sino donde hay internet, donde hay un espacio para reunirse. El escenario de las bibliotecas tiene una fuerza impresionante.”

“Hago lo que me propuse y eso ya es un éxito”

“Hago lo que me propuse y eso ya es un éxito”

Luego de una etapa signada por rupturas, cambios profundos y un proceso de reinvención personal, la artista marplatense Cintia Belén presenta Puente, un disco que nace desde el dolor. “Las letras son un reflejo de quién soy y mi vínculo con las personas”, asegura.

Resultado de la fusión entre danza, poesía y música, Cintia Belén acaba de lanzar su segundo disco, un material profundamente introspectivo. Si bien ya había debutado como compositora con Descargo, confiesa que este álbum es el primero que siente como completamente propio.

Puente, presentado el viernes 13 de junio en Nün Teatro Bar, invita a confiar en los procesos de cambio y en la posibilidad de renacer emocionalmente, incluso después de las etapas más oscuras.

En diálogo con ANCCOM, la artista repasa su proceso creativo, la importancia de mantener su autenticidad sin dejarse influenciar por otros y los desafíos de integrar todas sus facetas artísticas en un solo proyecto.

¿Cómo nació Puente?

Este disco surge de la necesidad de expresar todas las experiencias que atravesé, las emociones que despertaron mis relaciones y lo que ellas me enseñaron. Si bien ya había publicado mi primer álbum, Descargo, en este proyecto me tomé más en serio hacer música y sentarme a pensar qué quería para mi vida. Venía de una crisis profunda, atravesada por dos grandes separaciones y un movimiento territorial ya que viví una temporada en el sur, lo que implicó dejar mi casa, mi familia y mis espacios de contención. Este álbum trae ciertas verdades sobre cómo me afecta la mirada del otro y cómo me relaciono con los vínculos. También habla de transformación y de agradecer experiencias que, aunque en su momento no fueron amables, hoy me permiten comprender que sucedieron por alguna razón. No tengo todas las respuestas, pero este proceso me trae a un presente distinto. Hay certezas consolidadas, pero también nuevas preguntas que abren caminos hacia futuras transformaciones. En mi caso, lo logré fusionar a través de la música, el arte y la composición.

 

¿Cómo fue su proceso de creación?

En general, parto de la necesidad de poner en palabras o transformar sensaciones para crear la canción. Generalmente compongo con la guitarra, siempre buscando un patrón melódico impulsado por la necesidad de expresar algo y si surge una letra, la anoto para desarrollarla luego. Obviamente no lo trabajo sola, siempre hay aportes técnicos, compositivos y artísticos de colegas. Durante el proceso, hago que gente cercana escuche las maquetas y estoy abierta a devoluciones, pero trato de no guiarme por opiniones externas para no perder autenticidad. Para mí, el mayor tesoro es que la canción transmita el mensaje a través de la letra y la melodía. Aunque mi camino en la música es corto, tengo un largo recorrido artístico y he trabajado con artistas increíbles en proyectos exitosos. Sin embargo, hoy me toca bajar mis expectativas y entender en qué lugar estoy con este proyecto, que es el primero puramente personal. Muchas veces los artistas nos ponemos muy exigentes con nuestro material y nos cuesta mostrar los resultados, pero llega un momento en que hay que decidir que la canción está terminada y compartirla así. Eso me permite seguir creciendo.

¿Y qué rol ocupa la recepción del público?

Componer canciones implica compartir un mundo muy íntimo e interno, lo que mueve muchas fibras. No es solo un proyecto o un negocio alrededor del arte, sino una expresión profunda de identidad. Las letras son un reflejo de quién soy y mi vínculo con las personas, por eso trato de no influenciar la composición con opiniones externas. Me conmueve ver cómo el público recibe el mensaje, que tiene distintas capas. Algunos escuchan lo profundo, otros se quedan en lo superficial, pero en todos los casos hay fibras que se tocan. Creo que eso se debe a la poesía y la magia del arte. Sobre todo, en vivo, siento que conecto profundamente con la gente. Muchas veces, después de conocerme, se acercan y me agradecen por la profundidad de las letras y mi mirada.

¿Cómo surgió la idea de integrar poesía, música y danza?

Siempre soñé con concretar esta fusión de todas las cosas que me gustan hacer. A veces aparecía una creencia limitante de que debía enfocarme en una sola cosa, porque quien mucho abarca poco aprieta, pero no entendía por qué, si era buena en varias áreas, debía elegir solo una. Como me gusta escribir poesía y conectar con la profundidad del texto, empecé a compartir textos relacionados con las letras. En la parte audiovisual me saqué las ganas de bailar y logré que el cuerpo representara todo lo que vienen a traer las letras. El gran aprendizaje de este álbum fue juntar todo en un mismo frasco y mostrarle al público quién soy y qué me compone.

¿Qué desafíos te trajo?

Hubo momentos que he disfrutado muchísimo y otros difíciles, que me hicieron preguntarme de qué manera me relaciono con mi propio arte. Es muy valioso permitirse explorar todos esos mundos que nos dan curiosidad para luego reflexionar sobre cómo uno se siente en ese proceso. Siento que estoy haciendo lo que en algún momento me propuse y eso ya es un éxito para mí. Es importante valorarse, hacer una retrospectiva y celebrar el presente.

¿Qué le aportaron a tu universo artístico las dos colaboraciones que decidiste sumar?

Con Sofia Macchi, que vivió conmigo en el proceso de reencontrarme, hicimos una colaboración muy cercana. Le pedí que hiciera coros en Cantar hasta morir y aceptó con alegría, porque somos como hermanas y nos apoyamos mutuamente. En ese tema, ella aporta su color dentro de mi universo, ya que la letra es mía. Fue hermoso que me haya acompañado con su arte y experiencia. En cambio, Desnuda, el tema que comparto con Kris Alaniz, lo compuse mientras estaba en el sur y nace de un vínculo que despertaba en mí la necesidad de abrirme desde el corazón. Para mí desnuda significa mostrarte todo: lo bueno y también mis sombras para poder compartir momentos desde esa vulnerabilidad, sin miedo. La letra, aunque a primera vista narra un encuentro desde el deseo y la atracción, tiene una capa más profunda que habla del permiso y de romper con los ideales tradicionales del amor. Terminé de componerla en un taller de mi amiga Clari, del dúo Fémina, y fue ella quien me sugirió agregar un rap para darle un matiz más lírico y contundente. Cuando volví a Buenos Aires, pensé en Kris para ese espacio, le mostré el beat y la letra, y aceptó de inmediato. Para mí fue increíble que una artista que ya tenía un recorrido y una gran audiencia aceptara colaborar conmigo, que estaba remando con pocos oyentes. Creo que es muy valioso, sin importar en qué momento estés de tu carrera, abrir la posibilidad de conectar con otros artistas que te resuenan. Al final, eso es lo que realmente importa y se transmite. Yo no la llamé por sus números, sino porque la conocía, y por suerte todo fluyó muy rápido. En su caso, aportó muchísimo al disco, dándole un color que le faltaba y compartiéndome, con mucho amor y humildad, parte de todo su recorrido.

Tu estilo tiene marcados tintes flamencos marcados, ¿de dónde nace esta conexión?

No fue algo buscado, sino que apareció naturalmente desde mi autenticidad a la hora de componer e interpretar. Mi apellido, Torres García, tiene raíces españolas, y recién después de publicar la canción A mis ancestros supe que tenía parientes en Andalucía, cuna del flamenco. Eso confirmó lo que ya sentía en mi música. Igualmente, no me apropio del género, me reconozco cien por ciento argentina, pero me encanta la fusión que surge. Me atrae el dramatismo y la teatralidad del flamenco, su profundidad y la forma de proyectar la voz, con la que me siento muy identificada.

¿Qué mensaje te gustaría que le quede a quien lo escuche?

Que se puede volver a confiar en el amor y en la vida y que siempre es posible renacer. Al entregarnos a las emociones que nos atraviesan, surge una fortaleza interna, especialmente tras las muertes que atravesamos en la vida. Las experiencias más oscuras pueden llevarnos a lugares más hermosos si aceptamos el proceso. El mensaje de este álbum es que la vida es un constante ciclo de muerte y renacimiento y debemos entregarnos a ello. Aunque propone cambios, siempre nos vuelve a dejar en el mismo lugar de preguntarnos quién somos, solo que cada vez con mayor madurez, entendimiento y autoconocimiento de uno mismo.

Presentan un proyecto para declarar monumento histórico a la Parroquia San Patricio

Presentan un proyecto para declarar monumento histórico a la Parroquia San Patricio

En ella se perpetró la masacre de cinco religiosos de la comunidad palotina a manos de represores de la última dictadura militar. El lunes ingresa la iniciativa al Congreso.

Este lunes se presentará en la Honorable Cámara de Diputados de la Nación un proyecto de ley para declarar Monumento Histórico Nacional a la parroquia San Patricio de Belgrano, donde se perpetró la masacre de cinco religiosos de la comunidad palotina a manos de represores de la última dictadura militar. El proyecto es impulsado por los diputados Eduardo Valdés, Sabrina Selva y Ricardo Herrera.

El 4 de julio de 1976, un grupo de represores ingresó a la parroquia y asesinó a los sacerdotes Alfredo Leaden, Alfredo Kelly y Pedro Dufau y a los seminaristas Salvador Barbeito Doval y Emilio Barletti. Además, colocaron alrededor de los cadáveres una imagen de Mafalda señalando el “palito de abollar ideologías” de un policía, y escribieron en las paredes del templo: “Estos zurdos murieron por ser adoctrinadores de mentes vírgenes” y “Por los camaradas dinamitados en Seguridad Federal. Venceremos. Viva la Patria”.

El proyecto para preservar el patrimonio cultural de la parroquia es una iniciativa conjunta impulsada desde al año pasado por Eduardo Valdés, Mónica Capano, quien hasta hace poco fue presidenta de la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos (CNMMLH), el fundador de Palotinos por la Verdad, Memoria y Justicia, Ramiro Varela, y por el párroco a cargo de San Patricio, Juan Sebastían Velasco. Este año, a través de un decreto del gobierno nacional, la CNMMLH dejó de ser un ente autárquico y se trasladó a la Secretaría de Cultura, donde funciona como unidad organizativa.

Varela, en conversación con ANCCOM, expresa sus expectativas respecto a la aprobación del proyecto, al tratarse de un sitio con una fuerte carga simbólica: “Es el lugar donde aconteció el mayor atentado contra la Iglesia Católica argentina, uno de los crímenes más emblemáticos del terrorismo de Estado y sus víctimas son cinco religiosos que están en proceso de canonización a partir de una causa canónica que inició el Papa Francisco en 2005, cuando todavía era Arzobispo de la Ciudad de Buenos Aires. La realidad es que los requisitos para que la parroquia reciba esta declaración están más que dados y más que fundamentados”.

La propuesta impulsada por Valdés es una forma de anclar la memoria al espacio público, pero también de mantener en la agenda la causa canónica y penal, dando cuenta del “evidente valor histórico que adquiere el complejo arquitectónico integrado por la parroquia San Patricio del barrio de Belgrano, su templo y su instituto parroquial, como así también la necesidad de que el Estado nacional garantice su debida protección patrimonial”.

Sin embargo, Varela reconoce las dificultades frente a un gobierno desinteresado por los derechos humanos y la proliferación de discursos negacionistas: “El contexto es difícil y no ayuda en absoluto, es sumamente adverso. Hoy es de público conocimiento el vaciamiento de políticas de Memoria, Verdad y Justicia por el Estado nacional, un ejemplo claro de ello es la degradación de la Secretaría de Derechos Humanos a Subsecretaría y el despido en masa de los trabajadores que formaban parte de ella. Es muy adverso el panorama en todo sentido, pero no por ello vamos a claudicar nuestro reclamo de justicia, la búsqueda de la verdad y la construcción de la memoria”.

A 49 años de la masacre, la causa judicial sigue abierta. A lo largo del tiempo, se impulsaron diversas iniciativas en el espacio público para mantener presente el recuerdo de los cinco religiosos asesinados y reforzar el reclamo de justicia. Entre ellas se destacan la declaración de la parroquia como patrimonio cultural de la Ciudad de Buenos Aires por parte de la Legislatura porteña, el agregado de la denominación “Mártires Palotinos” a la estación Echeverría del Subte B, y la colocación de baldosas conmemorativas en la vereda del templo.

En la víspera del aniversario, Varela y el abogado Pablo Llonto presentaron un escrito para pedir que se cite a declarar a los funcionarios judiciales y policiales que encubrieron los asesinatos. Señalan especialmente al primer juez de la causa, Guillermo Rivarola, y a los efectivos de la Comisaría 37, que en ese momento estaba a cargo del oficial ayudante Miguel Ángel Romano, acusado de haber liberado la zona para que pudiera cometerse la masacre. Actualmente, la causa está en manos del juez Daniel Rafecas, quien la investiga como parte de los crímenes cometidos por Coordinación Federal, dentro de la Megacausa del Primer Cuerpo del Ejército.

Respecto al escrito, Varela afirma: “A partir de esta presentación que acabamos de efectuar esperamos que el juzgado actúe con celeridad y prontamente, y finalmente estas personas sobre las cuales estamos haciendo el pedido sean llamadas a indagatoria para que respondan por su responsabilidad en lo que tiene que ver con el hecho.”

Por el 49° aniversario de la masacre de San Patricio se llevarán a cabo una serie de actividades que incluyen la colocación de una baldosa en memoria de Alfredo Kelly en la Parroquia Nuestra Señora del Rosario, en Suipacha, y una misa presidida por Monseñor Alejandro Pardo en la Parroquia San Patricio, hoy desde las 19:30. Además, el sábado a las 17 se realizará una función especial de la obra El crimen de San Patricio, de Elba Degrossi en la Casa por la Identidad en el Espacio Memoria y Derechos Humanos ex ESMA, con entrada libre y gratuita. La jornada culmina el lunes a las 18 con la presentación del proyecto de ley en el auditorio de la Cámara de Diputados.

Nueve personas en situación de calle ya murieron este invierno en todo el país

Nueve personas en situación de calle ya murieron este invierno en todo el país

Los datos los recopiló la ONG Proyecto 7, que el pasado fin de semana realizó un nuevo censo de las personas sin techo de la ciudad. Estiman un notable aumento de personas en esta condición.

La asociación civil enfocada en problemáticas de la vivienda Proyecto 7 realizó el Tercer Censo Popular de Personas en Situación de Calle de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El estudio se desarrolló en toda la ciudad a las puertas de la que sería, al menos hasta el momento, la semana más fría del año. En paralelo, la organización continúa con desayunos y ollas populares en Plaza Constitución y Once.

Horacio Ávila, fundador y referente de Proyecto 7, en diálogo con ANCCOM contó: “Fueron tres días consecutivos trabajando en conjunto con 800 voluntarios. Fue difícil por el frío, por las situaciones muy tristes con las que nos encontramos. Llevamos infusiones calientes y frazadas. Hay muchas abuelas y abuelos, muchas familias y pibes”.

Según esta organización, la cantidad de personas que habitan la calle no deja de crecer. Eso se pone de manifiesto cuando se compara la cantidad de lugares a donde pueden recurrir por un plato de comida caliente, por un espacio donde dormir. En 2019 había 26 dispositivos en CABA, en la actualidad 48. Desde el Gobierno de la Ciudad manifiestan públicamente que ellos tienen espacios pero que las personas prefieren estar en la calle, que no quieren ir porque hay horarios que cumplir.

Pero, por otro lado, cuando los vecinos de la ciudad llaman al 108, Línea de Atención Social Inmediata, para denunciar que una persona está en situación de calle y necesita asistencia, la respuesta es que no hay vacantes. Entonces, ¿preferencia o desidia del Estado? 

También hay problemas particulares. Por ejemplo, muchas familias que están en la calle no tienen espacio porque hay sólo dos dispositivos gubernamentales que pueden albergarlas. El resto son sólo para hombres o para mujeres y niños. Además, no son aptas las mascotas ni tienen lugar para dejar los carros que utilizan para cartonear.

A la espera de las cifras, Ávila estimó que, en relación al Censo que realizaron en 2019, “debemos tener por lo menos un 50 por ciento más de personas en situación de calle”. En ese entonces se contabilizaron 7251 personas. Esperan tener los datos para la semana entrante, cuando realizarán una conferencia de prensa para comunicar otras acciones.

La semana que inició con ola polar ya dejó el saldo de dos personas fallecidas por el frío. Las cifras arrojan que el invierno pasado murieron 11 personas en situación de calle en Capital Federal y 28 en todo el país. En los diez días que van de este invierno ya se contabilizan nueve fallecidos. En CABA son tres, dos en Mendoza, uno en Misiones, uno en Gral. Roca, uno en Santa Fe y otro en Mar del Plata.

Justamente en este distrito de la costa los vecinos denunciaron a las cuadrillas que responden a la intendencia de Guillermo Montenegro y que monitorean la calle, porque corren a las personas y les quitan lo poco que tienen. Al respecto, Ávila manifestó que “hay una impunidad y ausencia del Estado generalizada”. Recordó que Montenegro “fue el ideólogo de la UCEP”, la Unidad de Control del Espacio Público que monitoreaba las calles de CABA con prácticas ilegales, denunciada por el Centro de Estudios Legales y Sociales, y agregó que “está copiando lo mismo en Mar del Plata y lo postea y repostea en sus redes sociales ufanándose de que está limpiando la ciudad”.

 

Manta corta

A los excluidos del mapa el invierno los encuentra surfeando a la muerte. Mientras tanto, la ministra de Capital Humano Sandra Petovello retiene 75 mil frazadas en los famosos depósitos de alimentos. El referente de Proyecto 7 asegura: “Hicimos un amparo y no tuvimos respuesta del Ministerio”. Y agrega que “es una provocación intencional, que cada vez haya más pobreza y más personas en la calle, es un contexto de violación de derechos, no sólo del gobierno de Jorge Macri, de Montenegro, sino que es a nivel nacional”.

Las organizaciones estiman que hay por lo menos cuatro generaciones en situación de calle. A los desayunos y ollas que realiza Proyecto 7 cada vez recurren más personas. “El lunes hicimos 10 ollas, que cada vez cuestan más, y en menos de una hora nos quedamos sin nada. Es muy triste ver que vas con una cantidad y que no alcanza”, se lamenta Ávila.

Desde esta organización también apelan a la solidaridad: “Antes de salir, para lo que sea, mirá bien, fíjate, revolvé, buscá, esa campera que tiene un poquito gastado el puño y ya no usas, esas bufandas que ni sabías que estaban…ponelos en la mochila, en el bolso… llevalo con vos, a alguien vas a cruzar, cuando se lo des míralas a los ojos, tomate ese segundo, vas a ver ese dolor, esa angustia y esas lágrimas contenidas que se niegan a salir porque si salen se congelan y convierten  en perlitas de cristal, no lo pensés, ¡hacelo!”, versa uno de los comunicados de la organización.

Cada vez hay más personas en la calle pidiendo alimentos, plata, tratando de juntar para alimentarse y refugiarse del frío. Una pieza de 2×2 con baño y cocina compartida sale 400 mil pesos por mes. ¿Quién puede en este contexto? La calle no es un lugar para vivir y tampoco para morir.

¿Por qué si la inflación baja el salario cada vez alcanza para menos cosas?

¿Por qué si la inflación baja el salario cada vez alcanza para menos cosas?

La demora de la actualización de la fórmula de medición del IPC hace que no se tomen en cuenta nuevos consumos, como las plataformas, y estén subvaluados otros, como las tarifas servicios, que subieron muchos más que, por ejemplo, los alimentos.

El índice de precios al consumidor (IPC) volvió a bajar en mayo. El mes pasado la inflación fue del 1,5%, manteniendo la tendencia a la baja de abril. Pero, a su vez, el salario real registrado ha caído un 6,02% según el INDEC y el poder adquisitivo del salario mínimo se desplomó un 32% desde noviembre del 2023. En este contexto, acechan dudas sobre el dato que difunde mes a mes el instituto estadístico. ANCCOM dialogó con especialistas para entender que tanto asidero tiene esta sospecha y si hay un desfase entre el dato y la realidad.

 

Ponderación desactualizada

El cálculo del IPC se basa en la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo), que desagrega qué porcentaje de los ingresos se destinan a determinados bienes y servicios. La misma contribuye al desarrollo de la canasta básica que se utiliza para calcular la inflación. La utilizada actualmente data del periodo 2004-2005.

Según Haroldo Montagu, exsecretario de Política Económica y docente de la Universidad Nacional de Moreno, la antigüedad de la encuesta genera que “haya gastos que no están contemplados con el peso que la sociedad le asigna actualmente”. En ese sentido, señala que “el peso de los servicios ha crecido 10 puntos porcentuales más en relación a los bienes y hoy la canasta que mide el INDEC tiene mayor ponderación en bienes”.

Esto no determina, de todos modos, que la inflación esté mal medida. Para Montagu, “no es que haya algo sospechoso, sino que la ENGHo utilizada está simplemente desactualizada”. Reforzando este punto, Esteban Rafele, periodista especializado en economía, concluye que “no es que hay mucha más inflación y se oculta debajo de la alfombra. Lo que puede ocurrir es que, si se renueva la ENGHo, como pesan más los servicios la inflación debería ser un poco mayor”.

La ENGHo de Macri

El dato de color es que ya se realizó un trabajo de actualización de la ENGHo durante el gobierno de Mauricio Macri. Rafele destaca que “hubo consenso en que fue un trabajo bien hecho. Lo que pasa ahora es que el gobierno viene demorando la actualización”.

Montagu asegura que “esto es muy llamativo y acá surgen los cuestionamientos al índice. La información está. Podrían, incluso, actualizarla nuevamente. Por ejemplo, la Dirección Estadística de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires tiene una canasta de consumo del año 2021”.

A propósito de esto, Rafele señala el ejemplo del gasto en plataformas, el cual es mucho mayor y más significativo que hace 10 años. “Esas cosas ya las perdés de vista pero mientras más se demore más va a ser el desfase”, señala.

Por su parte, Franciasco Mascitelli Massa, economista del CEPA, asegura que “actualmente estamos manejando ponderadores que están perdiendo precisión cada vez más por cómo están aumentando los precios. El tema no es que la inflación esté o no bajando, sino dónde está bajando y cuánto”. En ese sentido, subraya que “el sendero de desinflación está reflejado pero está decreciendo en exactitud”.

Las consecuencias

Esta subestimación del dato termina afectando la puja distributiva. Montagu resalta que “si se hubiese actualizado la canasta, la inflación en el año 2024 hubiese sido 16 puntos mayor a la que fue”. Es por esto que “cualquier precio o salario que se actualice con el IPC se actualiza con un valor que tal vez no refleje los patrones actuales de consumo. Esto abre las dudas con respecto a las subas de los salarios de los trabajadores, los jubilados, las AUH y todos los ingresos que se reformulen según este porcentaje”.

“Convalidar una inflación mayor atentaría contra la política de no homologar paritarias”, destaca Rafele, recordando que el Ministerio de Economía no homologó la paritaria del Sindicato del Comercio, cuando la inflación de dicho periodo fue del 3,7% y el aumento del 1,7%. “Si el porcentaje es mayor, los salarios deberían subir más para no perder terreno en un momento en donde el gobierno quiere pisarlos. La discusión por el ingreso sería otra, estaría un escalón más arriba”, remarca.

“Si vos ves el promedio del salario privado registrado y lo refractás por inflación da que está apenas por encima de lo que era en noviembre de 2023. Si a ese dato lo reponderás con la ENGHo actualizada, son casi 10 puntos de caída del poder adquisitivo que no se van a recuperar”, observa por su parte Mascitelli Massa.

Los porqué

El propio Marco Lavagna, director del INDEC, declaró a fines de abril que se está trabajando en la aplicación de la ENGHo del 2017-2018. De todos modos, no se avanzó hasta ahora en ese sentido. Mascitelli Massa recuerda que incluso el FMI ya señaló que el porcentaje estaba mal ponderado y debería actualizarse.

En este contexto y tras las declaraciones de Lavagna, la autarquía del instituto sufre serias dudas. Según Rafele, “ya hubo más de 12 meses de prueba, hay un registro bien acabado de cómo debería ser el empalme y se testeó todo lo que se tenía que testear”. En ese sentido, advierte: “Por lo que hablo yo con los técnicos (del INDEC), está todo listo para que, cuando el gobierno o el organismo dispongan, se empiece a comunicar el nuevo índice actualizado. Cuando consulto en fuentes oficiales, me responden que todavía falta terminar de cerrarlo”.

En consecuencia, opina que el principal motor del gobierno para dilatar la actualización es consolidar el sendero desinflacionario. “Cuando esté en un punto y medio estable, hacer el salto sería más sencillo, sobre todo porque el salto fuerte en los servicios ya ocurrió a principios del año pasado. Y si le sumamos otra arista, están esperando a que pasen las elecciones. Entiendo que es una decisión política más que técnica”, subraya.

Mucha alegría para combatir tanta crueldad

Mucha alegría para combatir tanta crueldad

Una nueva Marcha del Orgullo se desarrolló en el Congreso, pero sobre las veredas porque el protocolo de Bullrich impidió la colocación de un escenario en la calle. A diez años del asesinato de la referenta Diana Sacayán, el colectivo LGTBIQ+ se congregó para seguir exigiendo vivir con dignidad.

Hace 56 años ocurrían las revueltas de Stonewall de 1969, donde un grupo de personas LGBTIQ+ se rebeló contra la policía en Estados Unidos. Desde ese día, cada 28 de junio se rememora este acontecimiento con distintas movilizaciones en diferentes partes del mundo que demuestran que el orgullo es revolución.

La tarde del sábado, un arco iris iluminó el Congreso, poco a poco se empezó a colmar la plaza que daba la bienvenida a todos los manifestantes. El comienzo sufrió algunas complicaciones ya que los agentes de urbanidad le prohibieron a la asociación organizadora armar un escenario para poder dar los discursos y hacer las presentaciones.

Pese a estos contratiempos, se pudieron desplegar sobre la vereda los altavoces, las luces y los micrófonos, y al rato un DJ puso a muchos a bailar al ritmo de la electrónica, cimentando así el ambiente que se potenciaría más tarde.

Yarali Nescano, activista trans analizó en diálogo con ANCCOM, las problemáticas que enfrenta el colectivo en la actualidad: “Seguimos reivindicando la reparación histórica, porque las compañeras adultas mayores de nuestro colectivo no tienen ni siquiera una jubilación mínima, viven con lo que pueden y algunas todavía se siguen parando en las esquinas”.

La Ley de Reparación Histórica, es un reclamo del sector desde hace muchos años para las adultas mayores sobrevivientes de más de 50 años que fueron perseguidas, no sólo en la dictadura, sino posdictadura a través de los edictos contravencionales. “Se trata de un reconocimiento no sólo económico, sino también simbólico a la persecución sistemática de un Estado cruel y violento contra nuestras identidades, contra nuestras existencias y contra nuestras vidas”, explicó Yarali.

Según la publicación Análisis de 12 sentencias a 10 años de de la Ley de Identidad de Género de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres, solo una de cada dos sentencias por homicidios de mujeres trans o travestis fueron calificadas con encuadres jurídicos susceptibles de visibilizar la particularidad de las violencias por motivos de género y prejuicio contra la identidad trans/travesti. En correspondencia con esto, María Rachid, exlegisladora de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dialogó con Anccom y explicó: “Hay mucha resistencia por parte de la justicia para aplicar estos agravantes, los jueces en general no consideran la motivación del odio hacia la orientación sexual, identidad de género y de expresión al incluir los agravantes, falta capacitación, protocolos que le den perspectiva de diversidad a los crímenes de odio”.

Por otro lado, un conjunto de organizaciones activistas por los derechos de la comunidad LGTBIQ+ crearon un observatorio de crímenes de odio. En su informe sobre lo ocurrido en 2024 resalta la problemática que se encuentra a la hora del registro de los casos, ya que hay un subregistro considerable. No a todas las personas trans que son asesinadas se las registra como tales, y no todos los crímenes de odio de lesbianas, gay, bisexuales y de personas de identidades no hegemónicas se visibilizan como tales; sino que por el contrario, en muchos casos, se oculta la orientación sexual y la pertenencia a esta comunidad.

La marcha se caracterizó por denunciar a través de manifestaciones artísticas la realidad que atraviesa el colectivo: bailarines y cantantes tuvieron su momento en el escenario. El folklore fue protagonista de la velada, y al ritmo del chamamé y la chacarera muches se animaron a bailar y los que no, alentaban con las palmas y zapucays.

Cari Perotti, cantante de folclore, habló con ANCCOM sobre el cruce entre la música y la militancia: “No concibo la música sin militancia, siento que tenemos que estar presentes, hoy más que nunca, en las calles y a través del arte, porque el arte es transmisión de emociones, y en este caso, con los tiempos que corren, y con tanto discurso de odio hacia la comunidad, siento que es necesario también transmitir un poco de alegría. Creo fuertemente que estas son las pequeñas revoluciones y sin alegría no es posible, y menos trascender estos tiempos que corren”.

Otra presentación destacada fue la de el grupo Invisibles que busca transformar los conceptos arcaicos del folclore más relacionados a la tradición heteronormativa y los lleva hacia un lugar que contemple la diversidad, además de ser un espacio de denuncia social. La canción que presentaron en el festival que se armó en la marcha: “Del poder sos el gatito mimoso/ Les jubilades son tantos, entre comer o remedio/ Y vos golpeando y vetando”. .