Liberan al último preso por manifestar contra la Ley Bases

Liberan al último preso por manifestar contra la Ley Bases

Luego de estar 85 días detenido en el penal de Ezeiza, la Cámara Federal ordenó la excarcelación de Roberto de la Cruz Gómez. El fiscal Stornelli sigue maniobrando para que no se cierre la causa.

Roberto de la Cruz Gómez llevaba detenido más de 80 días en el Complejo Penitenciario Federal de Ezeiza. Esta mañana, los jueces Eduardo Guillermo Farah, Roberto José Bocio y Martin Iruzun ordenaron su excarcelación. Las condiciones para su salida serán la utilización de un dispositivo electrónico de rastreo, la retención de sus documentos de viaje junto con la imposibilidad de salir del país y la obligación de no ausentarse de su domicilio.

El pasado viernes, de la Cruz Gómez fue notificado de que permanecería detenido por poseer antecedentes penales, luego de que 

Daniela Calarco Arredondo, fuera liberada. De esta manera, de la Cruz Gómez era la última persona que quedaba en prisión por manifestarse contra la Ley Bases. 

En un comunicado dirigido a la jueza María Romilda Servini de Cubría que presentó el lunes, expresa que su detención es injusta y falta de méritos. Además, afirma sobre los videos que se presentaron como prueba de los delitos: “Solo se ve que nos estamos cubriendo de balazos de goma y gases lacrimógenos que arrojó la policía del lado de la valla en donde se nos permitía protestar constitucionalmente.” 

En ese mismo comunicado, de la Cruz informa su decisión de ponerse en huelga de hambre: “No como un hecho de rebeldía, sino como una forma de protesta ya que me dejan detenido por marchar constitucionalmente”,  expresó. 

La policía acusó a de la Cruz Gómez de prender fuego tachos de basura e incentivar a otras personas a intentar lo mismo, en el marco de las movilizaciones en contra de la aprobación de la Ley Bases. Sin embargo, un fotógrafo que estaba allí al momento de los hechos, mostró una fotografía donde se lo ve a de la Cruz Gómez  en el lugar de su detención, y en ella no figura ni un tacho en llamas, ni tumulto de personas. “Se ve sí a la PNA y la brutalidad policial al detenerme, como está en mí declaración”, aclara en el comunicado. 

En diálogo con lavaca contó que la policía comenzó a avanzar sobre los manifestantes tirando balas de gomas, por lo cual la multitud retrocedió:  “Seguimos retrocediendo, diciendo, ¿hasta dónde van a tirar balas? Llegamos hasta 9 de Julio. Ahí estaban las motos, la Policía Federal. Estaban deteniendo personas, había un grupo de chaleco azul que manoteaba gente” relata. Al intentar volver hacia Plaza de Mayo, los efectivos policiales le negaron el paso, dejando a los manifestantes atrapados entre las motos de la Policía Federal y el cordón que había hecho la propia fuerza.  “Al lado del cordón me agarran, no es que me corrió la policía ni nada”, cuenta. 

Desde la asunción de Patricia Bullrich como ministra de Seguridad y la implementación del «protocolo antipiquetes” avalado por un discurso oficial que pregona la criminalización de la protesta, son numerosas las movilizaciones ocurridas a lo largo de este año donde los manifestantes son reprimidos, resultando heridos, gaseados y golpeados.

De la Cruz fue detenido el 12 de junio, en el marco de las protestas contra la denominada Ley Bases. En aquella movilización la policía detuvo a 33 personas. Esa misma tarde, el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich compartieron un comunicado publicado por la Oficina del Presidente donde felicitan a las Fuerzas de Seguridad por “su excelente accionar reprimiendo a los grupos terroristas que intentaron perpetrar un golpe de Estado”. 

A diez de las personas detenidas las imputaron por delitos federales, quedando a disposición de la jueza Servini de Cubría. El fiscal Carlos Stornelli  pidió prisión preventiva para todos los detenidos y los acusó de delitos contra el orden público, sedición y acciones terroristas, en sintonía con el planteo oficial. Servini de Cubría desestimó los expedientes presentados por el fiscal, dejó  en libertad a 28 de los detenidos por falta de mérito, y resolvió el procesamiento para cinco de ellos de los cuales tres fueron excarcelados en el mes de julio. Sólo quedaron dos detenidos: Daniela Calarco Arredondo -liberada hace unos días- y Roberto de la Cruz Gómez. 

Con la excarcelación de de la Cruz, ya no quedarían detenidos por manifestarse aquel 12 de junio. Sin embargo, Myriam Bregamn dirigenta del Frente de Izquierda, denunció vía X que Stornelli está tratando de involucrar más personas para mantener abierta la causa, llamando a prestar declaración a nuevos imputados. 

Las víctimas toman la palabra y buscan justicia

Las víctimas toman la palabra y buscan justicia

En una nueva audiencia del juicio que investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos en la Comisaría 5ª de La Plata, declararon el sobreviviente, Carlos de Francesco y el nieto apropiado y restituido Leonardo Fossati, quien nació en ese Centro Clandestino.

En una nueva audiencia del juicio por los crímenes de lesa humanidad ocurridos en la Comisaría 5ª durante la última dictadura militar, ante el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, ayer brindaron testimonio Leonardo Fossati, nieto restituido nacido en ese centro clandestino de detención, tortura y exterminio y Carlos de Francesco, uno de los pocos sobrevivientes. Mientras tanto los imputados Jorge Bergés, Pedro Muñóz y José Saravia Day se conectaron mediante videoconferencia . Este juicio investiga los crímenes contra 131 víctimas, entre ellas embarazadas desaparecidas, además de nietas y nietos apropiados que fueron restituidos. Los ex policías Cecilio Reinaldo Gómez y Néstor Ramón Buzzato también estaban imputados en esta causa pero fallecieron antes de llegar a esta instancia.

Colleen Torres abogada querellante de Abuelas de Plaza de Mayo y representante de Fossati en este juicio expresó en relación a los dos testimoniantes: “Son dos miradas distintas, dos experiencias diferentes de lo que fue el terrorismo de Estado. La importancia que tienen son la inmediatez de que los jueces, juezas y personas presentes puedan conocer en primera persona lo que fueron estas historias, no solamente por las que fueron victimizados, sino también las consecuencias que tiene para las familias de las víctimas”.

 Leonardo Fossati nació el 12 de marzo de 1977 en la Comisaría 5ª de La Plata. Él inició la jornada de testimonios guiado por las preguntas de Colleen Torre: “Desde el 11 de agosto de2005, en estos tribunales, el juez Corazza me informó que yo había nacido en la Comisaría 5ª. Me brindó el expediente y me dijo que no me habían abandonado, como yo creía, sino que mi mamá y mi papá aún están desaparecidos desde la última dictadura militar”. Sobre las dudas de su identidad, desde que era pequeño, por las diferencias físicas, repasó: “En marzo del 2004 me acerqué por primera vez a la filial La Plata de Abuelas de Plaza de Mayo. Ahí inició la investigación con los documentos que pude llevar. Me realicé un estudio de sangre para confirmar que mis padres son  Inés Beatriz Ortega y Rubén Leonardo Fossati”.

Leonardo es el nieto restituido número 81, gracias a los testimonios de Adriana Calvo y de otros testigos que compartieron cautiverio con sus padres, pudo reconstruir su historia: “Mis papás eran muy jóvenes, mi mamá tenía 17 años, estaba embarazada de siete meses y era militante en la Unión de Estudiantes Secundarios de Parque Castelli, mientras que mi papá tenía 22 años y militaba en la Juventud Peronista. Los secuestraron en Quilmes, un 21 de enero de 1977, se supo que llegaron a esa esquina varios Falcon verdes y que cuando los interceptaron cada uno se fue corriendo para lados contrarios, pero cuando agarraron a mi mamá, mi papá vuelve para entregarse”.

Fueron llevados a la Comisaría 5ª y es ahí donde nació Leonardo: “Adriana Calvo compartió celda con mi mamá, dijo que realizó el trabajo previo de parto, que llamaba insistentemente para que vaya un doctor, y fue recién a la tarde fue el médico que supuestamente era Bergés. También me dijo que a mi mamá la ataron de manos y pies en la mesa de la cocina, y mientras yo nacía la escupían y se escuchaban los insultos de los policías. Parir también era una tortura”, detalló Leonardo sobre las condiciones en las que su madre lo dio a luz en esa “maternidad clandestina, que de maternidad no tenía nada”.

También pudo saber, gracias al testimonio de Calvo el breve momento que estuvo con su madre: “Me dijo que no estuve mucho tiempo con ella, se cree que solamente un día. Hasta que entraron en la celda y dijeron que el coronel me quería conocer, desde ese momento nunca más la vi. Le dijeron a mi mamá que me llevaron con mi familia materna”. Pero eso nunca ocurrió.

Fossati pudo encontrarse con su familia recién en 2005, luego de haber iniciado su proceso de búsqueda, que lo llevó a enterarse de que era hijo de personas desaparecidas: «Fue muy lindo y también doloroso. Porque me encontré con un montón de compañeros y amigos de mi papá y mi mamá, pero también muy doloroso, porque supe que no los iba a encontrar. Y por el dolor en mi familia», describió su proceso de restitución “que sigue hasta el día de hoy”. La abogada Collen Torre agregó: “Son delitos que trascienden generaciones, porque no solo se restituyó la identidad de Fossati sino también de su hijo, que en 2005 tenía 8 años”.

Al finalizar su testimonio, Fossati mostró imágenes de sus padres en los momentos más cercanos a su desaparición: «Son pequeños tesoros -dijo- porque buscaron borrar todo. Pero ese legado sigue en pie”. Entonces la sala entera respondió a su cierre de pie: “¡30.000 compañeros detenidos-desaparecidos, presente! ¡Ahora y siempre!”.

Luego de un cuarto intermedio declaró Carlos De Francesco que fue detenido ilegalmente en la Comisaría en Arana y luego trasladado a la Comisaría 5ª de La Plata: “Yo fui detenido un 9 de diciembre de 1976. En ese momento estaba haciendo mi tesis de física química y era docente. Yo no tenía intereses políticos, ni era afiliado de partidos políticos. Era solamente un investigador científico”. Además agregó: “Primero me llevaron a una Comisaría en Arana pero a los días me trasladaron en auto a la Comisaría 5ª, ahí me torturaron con picana eléctrica. Todo era una tortura, dormíamos sobre cemento, no nos daban nada para taparnos y teníamos que brindarnos calor entre nosotros, aparte nos daban de comer cada 3 días, yo baje 20 kilos en 4 meses”.

Luego de reconocer a algunos desaparecidos que la fiscal Ana Oberlin le fue nombrando durante la audiencia, recordó a la mamá de Leonardo Fossati -a quien luego del parto le hicieron limpiar el espacio- y se detuvo unos segundos con los brazos cruzados y con la voz entrecortada dijo reiteradas veces: “Hay que ser muy malas personas para hacer eso”. Luego de unos minutos prosiguió con el testimonio: “Había detenidas mujeres también y muchas embarazadas. Adriana Calvo nos pasaba la información de lo que pasaba en el sector donde estaban las mujeres. Lo más relevante que nos dijo fue de un nacimiento de un chico en la mesa de la cocina. Y ese chico era Leonardo Fossati. El padre estuvo con nosotros un tiempo; era hijo de un ordenanza del Departamento de Física, muy querido por todos”. Finalmente, en abril de 1977 fue liberado junto a otros compañeros de celda: “Cuando el auto se alejó y nos dimos cuenta que no nos iban a tirar un tiro, nos sacamos las vendas y nos abrazamos”.

Un Espacio de Memoria

Leonardo Fossati durante su testimonio explicó cómo se logró llegar a que la Comisaría 5ª se transforme en un espacio para la memoria: “Con Abuelas de Plaza de Mayo solicitamos colectivamente que la Comisaría sea un espacio de memoria para que el lugar no sea impune y para recordar a las víctimas que pasaron por ahí. Hoy soy coordinador de este espacio. Es un orgullo formar parte de ese equipo”, señaló. Sobre su lugar en Abuelas de Plaza de Mayo describió: “Para mí es parte de un proceso de sanación que lo he visto en familiares, Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, que es poner todo ese dolor en acción, en generar las herramientas para que esto no ocurra nunca más y que se haga justicia”.

Colleen Torres agregó, en diálogo con ANCCOM: “La resignificación del dolor, del terrorismo de Estado se ve reflejado en que funciona como un espacio de memoria y también allí está la filial de La Plata de Abuelas de Plaza de Mayo. En ese lugar hoy buscamos a los nietos y nietas que no conocen su verdadera identidad. Allí se cuenta todos los días a muchos jóvenes la historia de lo sucedido para que puedan conocer la historia del centro de detención y de las personas que pasaron por ahí”.

El personal del Garrahan bajo la línea de pobreza

El personal del Garrahan bajo la línea de pobreza

Los trabajadores del hospital pediátrico hicieron un paro de 24 horas. Piden salarios dignos, mejores condiciones laborales y mayor presupuesto.

Técnicos y profesionales del área de salud del Hospital Garrahan realizaron un paro de 24 horas en reclamo de mejoras salariales. La medida de fuerza, que tuvo un acatamiento total, se extendió desde las 7 del miércoles 3 hasta las 7 del día siguiente.

Según Norma Lezana, médica nutricionista especializada en pacientes diabéticos, delegada y vocera de la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT), es una burla lo que el gobierno de Javier Milei quiere darle a los trabajadores de la salud, “un aumento de un dos o tres por ciento”, cuando desde el gremio están pidiendo una recomposición del 100 por ciento y así llegar a un monto mínimo de 1.400.000 pesos.

“Es una vergüenza que funcionarios de altos cargos se sigan subiendo el sueldo como si nada, con desfachatez, mientras que los trabajadores del área de salud, tanto del Garrahan como de los diferentes centros hospitalarios del AMBA y el resto de las provincias, siguen teniendo un salario por debajo de la línea de pobreza”, manifestó Lezana, en diálogo con ANCCOM.

Un profesional de la salud, refirió Lezana, cuenta con formación académica específica y sigue especializándose a lo largo de su carrera, tomando cursos para estar cada vez más preparado.“Que el Gobierno no valore el esfuerzo y la capacidad en el área de salud, también hace que los jóvenes profesionales estén un tiempo y luego renuncien, en busca de mejores oportunidades salariales, ya sea en clínicas privadas o fuera del país. Esto es una pérdida lamentable y una fuga de cerebros”, agregó con angustia en su voz.

La protesta del personal, que dio comienzo al paro, tuvo lugar en las afueras del Garrahan, sobre la calle Combate de los Pozos, durante la mañana del miércoles. En una muestra de compañerismo y unidad, participaron trabajadores de las distintas especialidades –nutrición, radiología, kinesiología, neurología, neonatología, farmacia, lactarios–, así como de enfermería y mantenimiento, entre otros.

La convocatoria incluyó a referentes políticos, sociales y sindicales que se acercaron para manifestar su apoyo y la presencia de un grupo de cantantes líricos que transmitieron fuerza y esperanza a los trabajadores.

Fundado en 1987, el Hospital Garrahan, de gestión compartida entre la Nación y la Ciudad de Buenos Aires, es el centro pediátrico de referencia en salud pública, gratuita y de alta complejidad de la Argentina y de la región. El sistema funcional del establecimiento se basa en el cuidado del paciente, lo que significa que su estructura de servicios debe satisfacer las necesidades médicas, de enfermería y de todos los sectores, ya que cada uno brinda atención de calidad en cada etapa de la enfermedad, con equipos de trabajo constituidos para realizar las diferentes tareas asistenciales.

El Garrahan asegura a toda la población un acceso público e igualitario, ya que sus pacientes no solamente pertenecen al área metropolitana, sino también del resto del país.

Los trabajadores continuarán luchando por los que consideran un reclamo justo, por salarios dignos, mejores condiciones laborales, y que el Gobierno otorgue un mayor presupuesto a la salud pública y valorice la labor de cada uno de los profesionales, entre los que se cuentan los del sector de enfermería, que aún no es considerado como profesional.

A lo largo de las 24 horas de paro, el hospital funcionó con guardias mínimas similares a los días domingos y feriados.Tras la protesta del miércoles por la mañana, los trabajadores culminaron la jornada de lucha con un semaforazo, sobre la calle Pichincha, vestidos con sus ambos y delantales blancos, sosteniendo pancartas y carteles, acompañados por ciudadanos comunes que se acercaron en solidaridad. Al final del día, los representantes gremiales se reunieron en una asamblea para evaluar la medida y los próximos pasos.

Para los jubilados hay muchos palos pero poca plata

Para los jubilados hay muchos palos pero poca plata

Por segundo miércoles consecutivo, el Gobierno de Javier Milei reprimió a los jubilados que se manifestaban en contra del veto presidencial a la ley que reforma el índice de actualización de haberes y que permitiría recuperar una parte del poder adquisitivo que perdieron. Heridos, desvanecidos y hospitalizados.

Apenas quedaban pequeños grupos en las esquinas de Entre Ríos y Rivadavia cuando todo volvió a empezar. En frente del Congreso nacional se encontraban, nuevamente, los jubilados con sus reclamos y la Policía Federal. Adentro, en el recinto de Diputados, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, daba su primer informe a los legisladores y respondía preguntas.

Este lunes, Javier Milei vetó la Ley de Reforma del Sistema de Jubilaciones que actualizaba -apenas una pequeña parte- pensiones y jubilaciones después de la pérdida del poder adquisitivo de la clase pasiva que se profundizó con el ajuste del nuevo gobierno. Solo en el primer semestre de este año, el haber jubilatorio perdió un 27,7 por ciento de poder de compra.

‘’Si hay veto, hay calle’’ advirtieron la semana pasada los jubilados, después de recibir palos y gas pimienta. Este miércoles, las fuerzas de seguridad dirigidas por Patricia Bullrich hicieron caso omiso a la edad, las muletas de algunos, los bastones y cargaron con saña contra los jubilados y organizaciones políticas que los apoyan en sus reclamos.

Antes de la hora convocada, ya el clima permitía advertir que el reclamo preocupa al Gobierno de Javier Milei. La Federal y Gendarmería formaban cordones que preanunciaban una encerrona. Algunos cálculos antes del pandemónium hablaban de entre 800 y 1000 uniformados. 

Los cánticos enardecidos empezaron a resonar contra las paredes de los edificios. “¡Policía Federal, la vergüenza nacional! ¡Policía Federal, la vergüenza nacional!”, fue el que se escuchó con más énfasis.

La confirmación de la letra no se hizo esperar. Habrán pasado 10 o 15 minutos desde que se dio por iniciada la concentración, cuando empezaron los palos. Las columnas de uniformados encerraron a los manifestantes, bloqueando las salida de la Plaza del Congreso, mientras el repique de los bombos y los gritos por un nuevo paro general iban en aumento.

La represión que había provocado varios heridos la semana pasada, se repitió. Palos y gas pimienta, a mansalva provocaron alrededor de 30 heridos, jubilados desvanecidos en plena calle, algunos atendidos en el lugar, y otros trasladados a los hospitales disponibles. Los palos derivaron, además, en que se levantó la sesión en Diputados ante la que exponía Francos. 

En la calle, la que iba a ser marcha hacia Plaza de Mayo quedó trunca. Con la represión los manifestantes se dividieron y luego se fueron disgregando. Patricia Bullrich envió un mensaje a los manifestantes: “Hicimos cumplir la ley”. Quedó claro que para la ministra se trata de la selva.

Al promediar la tarde, lo que quedó en las retinas y en la información que sobrevolaba en las calles es que la represión al sector más débil de la sociedad y el levantamiento de la sesión en Diputados que derivó de los palos dejó al Gobierno expuesto en una síntesis: la crisis la pagan los jubilados.

Un documental sobre los vuelos de la muerte

Un documental sobre los vuelos de la muerte

Este jueves se estrena el documental «Traslados», de Nicolás Gil Lavedra, una recopilación cronológica de archivos, testimonios y evidencias de uno de los procedimientos de aniquilación más feroces utilizado por la última dictadura argentina.

El jueves 6 de septiembre se estrena  el documental Traslados, una obra dirigida por Nicolás Gil Lavedra y basada en una idea de la actriz y productora Zoe Hochbaum que reúne, por primera vez en Argentina, material de archivo, testimonios y recreaciones para relatar y contextualizar los vuelos de la muerte, uno de los más atroces métodos de exterminio que se llevó a cabo durante la última dictadura cívico-militar en nuestro país.

El término “traslados” es un eufemismo que utilizaban los represores asesinos de la dictadura para referirse al método genocida que consistía en subir a los prisioneros secuestrados a un avión, drogarlos y, en estado de somnolencia, arrojarlos vivos al mar o al Río de la Plata. “Dentro de la ESMA, ellos realmente nos decían que la gente iba a ser trasladada a una finca al sur del país en donde iban a poder estar al aire libre, donde iban a tener mejores condiciones de detención”, contó Miriam Lewin, periodista y sobreviviente de la dictadura, en diálogo con ANCCOM. Y sentenció que: “‘Traslados’ no quería decir para nosotros eliminación o solución final, ni mucho menos para la sociedad que no conocía la terminología. Era un término que utilizaban para enmascarar el asesinato de las y los desaparecidos”.

“Traslados” funciona como una especie de rompecabezas cronológico que pretende, exitosamente, exponer las evidencias que se recolectaron a lo largo de estos casi 50 años acerca de los vuelos de la muerte. Para lograrlo, la obra se vale de material de archivo, de testimonios de exdetenidos, familiares, periodistas y especialistas, y de recreaciones que muestran una ficcionalización de lo que los entrevistados relatan. Entre ellos, se encuentra la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, el juez federal Daniel Rafecas, el piloto y director cinematográfico Enrique Piñeyro y la ya mencionada Lewin; estos dos últimos relevantes, además, por su rol decisivo en la localización y la repatriación de uno de los aviones utilizados para llevar a cabo dichos vuelos, el Skyvan PA51. “Este es un documental donde los hechos son lo más importante porque lo que hace es demostrar, a través de testimonios y pruebas, este método de exterminio”, recalcó el cineasta y guionista Gil Lavedra.

En este sentido, el director destacó que “Miriam es una de las entrevistadas centrales que tenemos” ya que tanto su testimonio como su libro Skyvan. Aviones, pilotos y archivos secretos sirvieron para la investigación del documental. Lewin relató que, en 2007, se acercó a ella un fotógrafo italiano que le hizo una propuesta que marcaría su vida de allí en adelante: buscar a los aviones de los vuelos de la muerte para identificar a los pilotos asesinos. “Durante mucho tiempo yo no había querido investigar sobre temas que tengan que ver con mi experiencia personal en la dictadura. Pero después de un taller de ética periodística que hice, y justamente no muy lejos de donde estaba el avión Skyvan, entendí que más que un impedimento era un deber que yo tenía, o cierta ventaja en cuanto a sensibilidad, por ejemplo, para entrevistar a otras víctimas de otros genocidios”, expresó la periodista. El avión se encontraba en el Estado de Florida, Estados Unidos y con el tiempo se pudo comprobar que fue el mismo que se utilizó para arrojar a las monjas francesas Léonie Duquet y Alice Domon, y a las integrantes fundadoras de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor, María Ponce de Bianco y Esther Ballestrino de Careaga, por órdenes de Alfredo Astiz. El año pasado fue repatriado y ahora se encuentra exhibido en la exESMA.

El director también reflexionó acerca del título del documental: “Era lo suficientemente potente como para representar lo que estábamos contando. Es un término muy específico y me parece que ahora se va a hacer un poco más conocido en la gente”, recalcó el cineasta y guionista. Asimismo, recordó que el título y la idea original surgieron por parte de Zoe Hochbaum, actriz con quien anteriormente había participado en otros proyectos. “Ya en la adolescencia, Zoe quería hacer un trabajo sobre los vuelos de la muerte. Ella había empezado a hacer un audiovisual sobre el tema y a juntarse con gente, pero por alguna razón el proyecto se puso en pausa. Cuando lo retomaron, me llamaron a mí”, explayó Gil Lavedra.

“Estaba familiarizado con la temática, pero no específicamente con los vuelos. Sabía que tiraban gente al mar o al río, pero no de manera tan específica como después de involucrarme en la investigación y de hacer este documental. Con el tema de la dictadura ya había trabajado, y también por mis viejos es un tema que siempre me conmovió y me interesó abordar audiovisualmente”, mencionó el cineasta. El hijo del abogado y juez del Juicio a las Juntas Militares, Ricardo Gil Lavedra, y el también director de la biopic de Estela de Carlotto, agregó: “Desde hace unos años, los documentales cobraron otra importancia con las plataformas en el sentido de la difusión. Me parece que había algo de eso y de cómo se estaban haciendo los documentales en Argentina en estos últimos años que le llamaba la atención a Zoe. Por eso también quería hacer un material sobre los vuelos de la muerte que era algo que no existía en tono de documental”.

Además, tanto el director como Lewin aludieron a la relevancia de un film como este en tiempos donde los discursos negacionistas y hasta reivindicadores de la atrocidad se expresan con completa impunidad. “Cuando lo empezamos a hacer era otra la Argentina. Una película o documental que hable de nuestra memoria siempre es importante. Pero se fue volviendo mucho más necesario. Más ahora que hace unas semanas nos enteramos que hubo una visita de diputados a represores, entre ellos Astiz es aún más importante para que la gente pueda saber qué es lo que nos pasó”, sentenció Gil Lavedra. Lewin, por su parte, retomó como clave la vuelta al país del Skyvan y aseguró que: “En épocas de negacionismo, un avión desde el que se tiraron madres y en donde se asesinaron monjas es una evidencia de que aquellos a los que quieren reivindicar los integrantes de este gobierno no merecen reivindicación alguna. Son meramente asesinos. Esto no fue una guerra en absoluto. Esto fue un proceso de aniquilación de la sociedad civil. Por esto también es muy necesario este documental”.

“Traslados” se podrá ver en la sala Cine Arte Cacodelphia y estará disponible solo por dos semanas.