Mazazo pero no massazo

Mazazo pero no massazo

Sergio Massa le ganó a Grabois con amplitud, pero solo le alcanzó para ser el segundo candidato más votado a nivel nacional, detrás de Milei. Unión por la Patria obtuvo el 27% de los votos y se ubicó en el tercer lugar, un punto debajo de Juntos por el Cambio y tres de La Libertad Avanza.

17% para Massa, en la primera y nunca asertiva boca de urna que se escuchó en el bunker de Unión por la Patria, a las 19:22. En la Capital Federal se sigue votando. Voto papel, voto electrónico, voto papel, voto electrónico. El primer vocero en el UxP, Matías Lammens pide “buscar responsables políticos de lo que pasó” -en Capital Federal-. La cita es en Corrientes 6271, Complejo Art Media, el ya habitual espacio de encuentro poselectoral del frente oficialista.

Twitter: Milei presidente. Massa segundo. En el bunker de UP se escucha: “¿A Larreta le fue mal?” Casi las 20:00. Daniel Scioli llamó a ampliar el espacio para ofrecer una propuesta que represente al campo nacional y la producción. Milei arrasa en la Provincia de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. Dicen. La policía de la Ciudad alerta sobre una amenaza de bomba en la Rosada. Justo al mismo tiempo que en el búnker de UP crece el miedo por el cuco de Milei. “¡Qué país, hermano!”, se escucha ahora.

“Nuestro candidato sacó un buen resultado. Tenemos que seguir ampliando la fuerza.” Dijo Cecila Moreau, con una voz casi quebrada.

20:25. Massa 29 puntos. ¿29 puntos? Después del primer nerviosismo, un poco de paz. Pasaron cinco minutos, 20:30. Se escuchan bombos por primera vez. Un periodista preguntó textual, con asombro: “¿Qué es eso?” La carpa de prensa es una burbuja.

Milei, el más votado de la oposición. Bullrich le gana a Larreta. Llega Julián Domínguez al búnker de UP. 20:50. Juró por el campo, la producción y el futuro en un minuto y medio. A esperar, a esperar. Se levantó y se fue. Así lo hace un profesional.

Antes de que se termine de ir el vocero de las 20:50, un periodista que escucha con las rodillas en el piso, de traje negro y remera escote en v, también negra, se levanta mientras entra de lleno en el aire de Crónica: “Sí, sí, clima de velorio, todos con caras largas”, dice. Todo es preocupación. ¿Pasa el 25% Massa a las 21:03? Ya no se escuchan bombos. No lo sabíamos pero esa declaración de un minuto fue la última hasta los números de las mesas testigos dados por Agustín Rossi en el escenario.

Pero vamos de nuevo. El Tribunal Electoral tiene algo para decir. 

21:48. Los primeros datos oficiales, vienen de la Ciudad de Buenos Aires: Macri, Jorge, no el expresidente, le gana a Lousteau por un punto, 28,26% para el primero y 26,90% para el radical. El otro radical, ahora en Unión por la Patria, Leandro Santoro, 22,19%, salió tercero. Con el 64,3% de las mesas escrutadas. Massa y Rossi llegaron al búnker de UP.Vuelven los bombos con más intensidad pero es evidente que no es un acto de Cristina. A las 20:50 fue la última declaración. Son las 22:38. Habla Agustín Rossi en el escenario abierto a la militancia: “Queremos darle el resultado de nuestras mesas testigo, son 2002 mesas: Milei 30%, el compañero Sergio Massa: 23%, Bullrich 16%. Larreta 13%.” Ganó Milei, efectivamente.

La cuenta del tiempo se detiene. hasta las 0:50 del lunes 14 de agosto, hablaron para un público sin color ni euforia Juan Grabois, Leandro Santoro, Axel Kicillof y Sergio Massa. Las ausencias de Alberto Fernández y Cristina Kirchner le dan sentido al cambio de nombre, ese frente ya no es el Frente de Todos. Un subibaja de intensidades y tonalidades, que representan casi todas las de un frente multiverso que gobierna y pretende seguir gobernando el país.

Juan Grabois arrancó con potencia y destacó que “ganamos la Provincia de Buenos Aires, loco”. Como diciendo: “Che, pasó algo bueno”. El público lo acompañó, por única vez y cantó: “Olé, olé, Axel, Axel.” Antes se escuchó un tímido “no nos han vencido”, como reflejo de un pasado que no termina de irse. Y frente a ese público, Juan Grabois. Que necesitaba que a sus consignas las acompañe un aplauso, le sobraron silencios ahí donde el orador descansa con el aplauso. Manifestó su disciplina partidaria y le entregó a Segio Massa, junto a su vice, Paula Abal Medina, el plan de gobierno que presentó en la campaña.

Al timbre alto que propuso Grabois le siguió el “radicalismo” de UP. Suave primero para ir enojándose hacia el final, Santoro denunció las irregularidades del voto electrónico, que no hay vacantes para los pibes en las escuelas y que no se invierte en el subte. Marcó que la única opción para sacarle la ciudad al PRO es UP y le dejó el micrófono a Axel.

Habla largo. Nada que patear ni festejar a pesar de los sólidos 36,4% de los votos obtenidos en la provincia. Lee, se extiende, explica y desarrolla los slogans de su campaña. Está ahí y es, el único ganador de ese escenario. Obra pública en rutas y escuelas, notebooks y cunitas repartidas, kilómetros recorridos. El abrazo con Massa concluye su discurso.

Habla el candidato a presidente, El mejor candidato, según el propio Axel. Tranquilo, vuelve a bajar excesivamente el tono de su antecesor. Habla de ampliar, de juntar y seguir creciendo en consensos. Le habla a su público, porque en el búnker de Unión por la Patria el color del público es el del Frente Renovador. En su discurso impone la idea de inicio de campaña. Quedan 60 días y “empieza a discutirse qué país vamos a construir en los próximos años”. Comparó, una vez más, las elecciones con el fútbol. “Falta el segundo tiempo, el alargue y los penales”, dijo para convencer a la militancia que aún no se perdió el partido a pesar de Unión por la Patria fue la tercera fuerza votada, un punto debajo de Juntos por el Cambio y tres de La Libertad Avanza.

Grabois acompaña

Grabois acompaña

Tras haber sido derrotado en la interna de UxP, el líder de Patria Grande comprometió su apoyo a Sergio Massa. Obtuvo más de un millón de votos Al cierre, se dirigió al bunker donde se concentraba su opositor.

Tras reconocer su derrota, Juan Grabois se acercó al bunker de Sergio Massa y se comprometió a acompañarlo en la campaña electoral que se avecina para evitar que Javier Milei o Patricia Bullrich lleguen al gobierno. Le entregó sus propuestas al ganador de la interna y se comprometió con sus militantes a luchar por la ampliación de derechos.

Antes, Grabois recibió los resultados en su propio bunker, el Teatro Verdi de La Boca.

“Sabemos que hay ciudades y pueblos de la Patagonia en las que nuestra lista ganó las elecciones -dijo allí-. En Lago Escondido nosotros ganamos las elecciones y derrotamos a Monsanto.” El líder de Patria Grande se declaró ganador a pesar de perder la interna contra Sergio Massa. En su discurso, lo acompañaron Paula Abal Medina, precandidata a vicepresidenta, Lucia Klug, Fernanda Miño y Ofelia Fernandez. 

“No voy a decir gracias ni agradecernos entre nosotros, no hay subordinados ni empleados. Todos somos uno, somos un pueblo que pelea por sus derechos. Por los datos que tenemos hoy, hemos superado nuestras expectativas con un millón de votos.” continuó Grabois. 

El dirigente social hizo hincapié en la historia del Teatro Verdi, donde se realizó el encuentro del cierre, porque fue el lugar donde se formó la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular: “Esta será la cuna de una corriente política revolucionaria. Nosotros y nosotras, como decía el Che, sentimos en lo más hondo, cualquier injusticia en cualquier rincón de la patria y ahí estamos para poner la cabeza y el corazón que le ponemos siempre.” 

Entre colores patrióticos y banderas de todo tipo, el Teatro Verdi, en La Boca, se viste de imágenes que simbolizan al partido Unión por la Patria: Figuras como San Martín, Eva Duarte, Juan Domingo Perón y el Gauchito Gil protagonizan las paredes. Junto a ellos, las figuras de Maximiliano Kosteki y Dario Santillán, militantes asesinados por la policía en 2002.

Con cánticos como “Juangra presidente” y “Juangra tiene aguante” con trompetas, bailes de festejo y bombos de fondo por parte de los militantes y familias que ofrecen su apoyo, Grabois insistió: “Tenemos las tres banderas históricas: Justicia social, Independencia económica y Soberanía política. La reforma agraria por nuestros campesinos y pueblos originarios y el salario básico universal para todos los trabajadores y trabajadoras de la economía popular.” 

Asimismo, expresó su furia y total desacuerdo con seguir pagándole al FMI: “Lo seguiremos diciendo, hay que cancelar este acuerdo leonino y criminal con el Fondo Monetario Internacional y que los bienes comunes sean del pueblo argentino”. 

Como resultado de la interna, Grabois, como anticipó en los medios, apoyará a Sergio Massa en su búnker ubicado en Chacarita: “Un agradecimiento muy importante para la compañera Cristina que nos permitió competir en las PASO. Le costaron la persecución y proscripción a pesar de ser la candidata más votada.” 

El lema de las “3T” presente en el lugar, expresa una de las principales propuestas de Juan Grabois como precandidato a presidente: “Ningún campesino sin tierra, ninguna familia sin techo y ningún trabajador sin derechos”. 

Canciones de grupos del rock nacional como Las Pelotas, La Renga, Los Redonditos de Ricota y Sumo resonaron durante toda la jornada, mientras las familias, militantes y niños que improvisaban una pelota de futbol para pasar el tiempo, esperaban los resultados y la presencia de los precandidatos a presidente y vice, acompañados por mate y charlas expectantes entre ellos. 

A la hora de despedirse, el abogado y militante social fue gentil y atento con el apoyo de su gente: “Los y las quiero mucho, de corazón, compañeros y compañeras, nos vemos en la lucha.” 

Frente a él, colgado en un lugar central entre todas las banderas, un letrero ocupaba el centro del palco del teatro. “No se puede amar lo que uno no ama y no se puede amar lo que uno no conoce”, se podía leer.

«No compremos perlas truchas sin chistar»

«No compremos perlas truchas sin chistar»

“Te aseguro que a los medios concentrados los arruino, chau pauta, chau exenciones impositivas”, dijo Juan Grabois en una rueda de prensa de medios comunitarios, alternativos y universitarios. En la recta final de la campaña el precandidato a la presidencia de Unión por la Patria aseveró que, de perder la interna, apoyará a Sergio Massa, aunque no sería ministro de un eventual gobierno.

En la última semana de su campaña de las Primarias Abiertas para Presidente de la Nación, el precandidato de Unión por la Patria Juan Grabois se presentó en una rueda de prensa para medios populares, alternativos y universitarios en Barricada TV. “Para caretas ya están los demás”, dijo el abogado y activista social, que respondió todas las preguntas y, tras citar una canción del Indio Solari, se declaró ricotero. A continuación, tramos salientes del intercambio con los periodistas que participaron de la conferencia.

 Dentro de un programa de gobierno, ¿qué cosas se pueden implementar para que quienes hacemos comunicación comunitaria estemos en espacios de definiciones políticas y de contribuición a la causa popular?

Nosotros predicamos y practicamos que la gente que tiene un fuerte lugar de decisión es está embebida en la temática por su experiencia vital, no únicamente por conocimientos académicos. Promovemos una cartonera diputada y también una cartonera directora de reciclado o una villera para que dirija la organización de los barrios populares. Tenemos esa concepción doctrinaria de que sólo el pueblo salva al pueblo. En relación a los recursos que se destinan, no sé cuánto va a ir para los medios comunitarios, pero para los medios concentrados te aseguro que los arruino, chau pauta y chau extensiones impositivas. Los medios están exentos de IVA, no van a seguir recibiendo guita del Estado. Efectivamente creo que debe haber un sistema de pauta; primero que aplique un criterio de discriminación inversa, más para el más débil; segundo que sea transparente, porque se utiliza de una manera que no es ética; y tercero, yo soy muy crítico de nuestro propio movimiento de economía popular, entonces aparece el dilema sobre cuál es la función de los medios comunitarios. Si ser un canal de comunicación masiva que dispute sentido, si ser un espacio de apertura local de la consciencia y acceso al trabajo y a la formación en medios audiovisuales. Los medios comunitarios son trincheras de resistencia social que construyen a partir del acceso que tienen un montón de pibes a un mundo desconocido que es el de manejar una consola, agarrar un micrófono. Si el conjunto de los medios comunitarios va a construir una contrahegemonía comunicacional, no lo sé; y tampoco me desvela, porque tampoco creo que la economía popular tenga que competir en términos de productividad con el sector privado capitalizado. Creo que su productividad es alternativa y creo que hay una mitología gorila, meritocrática, de que todos tenemos que tener el impacto del grupo Clarín. Y si todos tuviéramos ese impacto seríamos una máquina de manipulación, porque para tener ese impacto hay que manipular, construir formas adictivas como las redes sociales.

 ¿La radicalidad de tus propuestas podrían jugarte en contra? ¿Te ves como un candidato fuerte para las próximas elecciones?

Si no hiciera las propuestas que hago sería un mentiroso, porque son las cosas en las que creo. Quiero que si la gente nos vota lo haga por nuestras convicciones e ideas y no porque la careteamos mejor; porque además para caretas ya están los demás, y les sale bárbaro. En relación a la candidatura digo lo que siento, esto lo digo y lo hago; hay cosas de las que estoy seguro, como de que no voy a ser ministro de Massa, y de que si gana Massa las PASO lo vamos a apoyar. Si a nosotros nos va muy bien, sí creo que quedará un piso armado; y si nos va muy mal lo que me corresponde es decir «che a la gente no le caí muy simpático, no le gustó la forma en que yo transmitía, busquemos otro compañero o compañera». Del resultado de esta elección depende para mí la interna, cómo queda la relación de fuerzas dentro de Unión por la Patria, porque si nos va muy mal va a quedar todo corrido para la derecha; y también depende de la construcción de un liderazgo para el futuro. Vi tanta gente que arruinó organizaciones y grupos queriendo siempre estar, con pésimos resultados… Yo voy a tratar de no reincidir en ese rol que siempre critiqué.

¿Qué valoración haces de la Ley de Equidad de Género en los medios? Y en relación a la libertad de expresión, ¿qué posición tenés sobre los discursos violentos y de odio?

Salvo en los medios comunitarios, la primera vez que vi en un medio público, en un medio grande, a una mujer con una cámara, fue en la TV Pública. Me dijeron que fue una lucha ganada por SiPreBa para que haya mujeres con cámaras. Yo creo que hay que avanzar con eso y también creo en los sistemas de cupos, siempre creí que tiene que haber un cupo para personas que viven en barrios populares, pueblos originarios, personas con discapacidad, etc, porque hay siempre un corte de clase que queda afuera, ahí sí banco fuerte. Con respecto a los discursos de odio no tengo una posición tan firme porque lo que tengo claro es que están mal en torno a las discriminación de grupos que tienen vulneraciones específicas, nacionalidad, clase; pero en términos de política, salvo que sea una amenaza directa contra la integridad física de una persona, creo que hay que bancársela; si es contra un dirigente político.

 Hay algo que aparece mucho en tu campaña, una minoría intensa que te acompaña. ¿Cuál es el mandato para esa minoría y cuáles son las tareas que se vienen en la nueva etapa de Argentina?

Es difícil contestar si no podemos caracterizar la etapa y el resultado electoral va a tener una incidencia fuerte en esa caracterización. Una etapa gobernada por Bullrich es distinta a una gobernada por Massa. Creo que la tarea fundamental de la militancia popular desde hace años es unir a los sectores excluidos. La prioridad es levantar la bandera de los que están socialmente excluidos, de los más empobrecidos y por otro lado, la prioridad es, hoy estoy un poco ricotero, no comprar perlas truchas sin chistar como dice la canción. Comprala, ¡pero chistá! Porque si no estamos en una especie de narrativa disociada, entregando y arrastrando todas las banderas, y prácticamente con una estrella roja en la boina.

El primer adelantado del Frente de Todos

El primer adelantado del Frente de Todos

Juan Grabois se convirtió en el primer precandidato presidencial oficialista en lanzar formalmente su campaña. Habló en Ferro, enunció su programa y cuestionó a Massa.

Juan Grabois es católico, peronista, marxista, abogado, zapatista, referente social, precandidato a presidente por el Frente de Todos. Hijo de la generación diezmada desde la que se concebía Néstor Kirchner según recuerda Cristina Fernandez cada vez que puede. Hijo del 2001. Amigo del Papa. Todo eso, en 2 horas de discurso.

“Hoy no se puede hacer choripan porque hay lluvia, se te apaga la parrilla,  hermano. Qué grande Cristina, por Dios”, dice Ofelia Fernández, antes de presentar al flamante precandidato en el microestadio techado de Ferrocarril Oeste.

Oficialmente, Grabois va a disputar las PASO del Frente de Todos en la categoría presidencial. Porque –dice- no puede ser que haya un 110 por ciento de inflación, que la desocupación sea del 6 por ciento y la pobreza supere el 40 por ciento. Porque –sigue diciendo- es mentira que si crece el PBI crecemos todos y todas; porque no puede ser que los recursos naturales se lo lleven las multinacionales, que le paguemos al FMI lo que le pagamos al FMI, que exportemos semillas e importemos tomates. Que una ministra en ejercicio que pertenece al campo nacional y popular diga que con los chicos no cuando el 60% de los pibes y pibas son pobres.

El Frente de Izquierda no supo, no quiso o no pudo darle la suficiente voz por izquierda al reclamo que encuentra en Javier Milei una canalización por derecha. Por eso hay una vacante. Por eso Grabois grita en el mismo tono que Milei, por eso habla de castas, por eso se reconoce libertario, de una libertad que no es la de la escuela de Austria, mientras describe su Argentina Humana. Los libertarios que define Grabois son “los que liberan a los pibes y las pibas de la esclavitud de las drogas, de la narcoestructura, del infierno de la cárcel, del infierno de la reincidencia”.

La carrera en el Frente de Todos comenzó, finalmente, después de las bajas de dos de los tres acreedores centrales del espacio, fundamentalmente la de Cristina Fernández de Kirchner. Esa carrera se resume en ver a quién le entra mejor el nombre en el canto Cristina presidenta. En el caso de Grabois, el público cantó Juangra presidente.

Pero falta la definición del ministro de Economía: el más atacado en el happy hour de Ferro. El textual de Grabois lo resume a la perfección: “Nuestros adversarios, la gente de Sergio Tomás. ¿Saben lo que hizo hoy? AYSA debe una obra de agua en la CABA hace años. Fue una vecina a reclamarle a la presidenta. ¿Saben lo que dijo? ‘Andá a pedirselo a Fernanda Miño’ -primera villera que ocupa una secretaría nacional, la de IIntegración Socio Urbana en el Ministerio de Desarrollo-. Hay que ser mala gente, eso es de mala gente. Eso es pegar debajo del cinto. Metete conmigo Sergio, no seas tan cobarde.”

La escena termina con el canto del público: “Oh sos cagón, sos cagón, Massa sos cagón.”

La volteada le llega a casi todos en mayor o menor medida, con Massa a la cabeza por amplia diferencia. Pero hay una unidad necesaria: la de los trabajadores de la economía popular y del movimiento obrero organizado porque “todos y todas se están cagando de hambre”.

JuanXXIII reconoce una contradicción entre la organización popular de base y la lucha política, que no es ni más ni menos que una maduración del “que se vayan todos” del 2001, año que terminó de darle entidad a los llamados movimientos sociales. 

Emilio Pérsico es la personificación de esa contradicción. Silbado al ser nombrado por los presentadores y aplaudido tímidamente cuando Grabois pidió un aplauso para él, la cara más filmada de la tarde noche después de la de JuanXXIII.

Pasada la hora de discurso, el público del microestadio de Ferrocarril Oeste empezó a dispersarse en una de las tribunas. El campo, antes completamente colmado, mostraba espacios para sentarse o caminar con comodidad. 

¿Están cansados en el fondo? Ahí está la puerta, dice Grabois  Todavía falta el plan. Porque hay plan. La Argentina Humana de Juan Grabois, JuanXXIII, se apoya sobre 4 ejes generales: 1) Principios rectores; 2) Orden socioeconómico; 3) Orden Político; 4) Orden soberano-energético. El objetivo: Tierra, Techo, Trabajo.

Sin repetir y sin soplar: la plataforma que propone se centra en el acceso a la tierra por medio de una reforma agraria, reforma del Poder Judicial, no pago al FMI, nacionalización de los recursos naturales con participación de las provincias, moneda regional, reforma impositiva, salario básico universal, reforma urbana y reformas en los sistemas de salud, seguridad y educación.

Porque, dice: “La única manera de dejar la falopa es con tierra, techo y trabajo”.

Santo y seña para un fuerte reclamo

Santo y seña para un fuerte reclamo

La impactante cifra de medio millón de personas marchó bajo la consigna «Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo». Muchos lo hicieron desde Liniers a Plaza de Mayo y otros se sumaron directamente en la 9 de Julio. La unidad de los movimientos sociales se expresó en San Cayetano.

Gorras, camperas y el vapor de mates calientes cubrieron las caras dormidas de los compañeros que esperaban en avenida Rivadavia y Cuzco desde las ocho de la mañana. En la mañana fría de Buenos Aires el encuentro y los abrazos acompañaron al sonido de los redoblantes ya ansiosos de movimiento. 

Este año, bajo la consigna “Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”,  los movimientos sociales conocidos como “Los Cayetanos”  convocaron una vez más a movilizar el 7 de agosto, día de San Cayetano, patrono del trabajo.

Entre el manto de banderas que ya desde temprano comenzaban a cubrir la avenida, la bandera grande de la UTEP se impuso al frente y al centro mostrando en letras grandes la “Unión de los trabajadores y trabajadoras de la economía popular”. Las banderas de las organizaciones sociales Corriente Clasista y Combativa (CCC), Somos Barrios de Pie, el Frente Popular Darío Santillán, el Movimiento Evita, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y de la Vía Campesina, entre otras, ya teñían la calle de colores.

Algunos arrancaron a caminar desde Luján el martes, otros en las asambleas populares del sábado, también estaban los que se sumaron en Liniers, el domingo a las ocho y en avenida de Mayo y 9 de Julio ya los últimos esperaban desde temprano la llegada de sus compañeros para realizar el acto central. 

“El 7 de agosto, día de San Cayetano, es una fecha que nos abraza a todos y todas quienes formamos parte de la UTEP, pero también es la fecha en donde pudimos construir nuestro sindicato. Nosotros arrancamos siendo el triunvirato, después el cuarteto y bueno, así se conformó la UTEP. Gracias a esta fecha que nos abrazaba de manera conjunta. Este es ya el séptimo año en que nos movilizamos”, dijo Dina Sánchez, secretaria general de la UTEP.

Cruzando las vías sobre Cuzco, dejando atrás a las pecheras de colores y los redoblantes, el santuario de San Cayetano tenía una cuadra de fila para ingresar. A un costado, una línea de carpas blancas donde vendían chapitas, colgantes, cuadros y estatuas del santo. “Se vende mucho hoy”, dijo María mientras le entregaba un collar rojo a una pareja que quería un recuerdo de la fecha. 

“Hay espigas, espigas, espigas ¿Qué va a llevar mi príncipe?”, se escuchó de fondo.

El olor a sahumerio y palo santo inundaba la cuadra. “Dos por cien las espigas”, grita un señor. El santuario decorado de blanco y amarillo convocaba a un centenar de fieles que esperaban ser bendecidos con “pan y trabajo”, como decia el pasacalles ubicado frente al mismo. 

 De vuelta en la avenida Rivadavía, se escuchó gritar “agarremos al medio”, mientras un grupo se acomodaba al centro de la columna que ya ocupaba tres cuadras. 

 “Frente a la agenda del sector concentrado que continúa pujando por sus intereses particulares en detrimento de las mayorías, especulando y remarcando sin resignar nada; nosotros y nosotras estamos en la calle para imponer nuestra agenda, que puja por los intereses y las necesidades de los y las de abajo. En un contexto de persecución a las organizaciones, seguimos fortaleciendo la unidad, profundizando la organización y peleando por Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”, decía el comunicado de la UTEP.

 “¡Qué onda Tano!”, gritó uno a su compañero, que con una sonrisa se acercó a abrazarlo mientras le daba pequeños golpes sobre la campera con la frase “Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores”.

 Las espigas se colaron entre mochilas, dedos y abrazos, con la intención de bendecir a los portadores. Previo a salir se escucha la bendición del cura que cierra con “buena marcha hermanos”. 

 “Acá tenés a los peregrinos de Francisco, a los movimientos sociales, a los samaritanos y a samaritanas ¡Arrancamos compañeros!”, gritaron desde el parlante al mismo tiempo que los pies se ponían en marcha para comenzar la caminata.

Primero avanzó la Virgen sujetada por Juan Grabois y rodeada de dirigentes y creyentes. Unos pasos más atrás, la seguía una fiesta de tambores y banderas, acompañada por la militancia. 

Del altavoz de la camioneta que lideraba la marcha sonaba un chamamé. Los “Misioneros de Francisco” acompañaron a la Virgen con su barredora celeste y blanca desde Luján. Frenando cuando se necesitaba para esperar a las organizaciones sociales que seguían atrás, religiosos y militantes avanzaron por avenida Rivadavia. 

Adelante, aparecieron las banderas de los santos populares: Evita, Maradona, Néstor y Cayetano. En la barredora de “Pan, Paz, Tierra, Techo y Trabajo” comenzaba el agite de trapos y el estruendo de las baquetas golpeando los tambores.

“Venimos con un escenario económico social bastante complejo. Nosotros en la economía popular organizada tenemos mucho trabajo, lo que no tenemos son derechos. Eso es lo que venimos a plantear, la Ley Integral de Tierra, Techo y Trabajo -dijo Dina-. El privilegio de comer no lo tienen todas las personas. Creemos que hay que levantar la voz, porque sino pasa lo que pasó hace un par de semanas. El campo levantó la voz y tuvo rápida respuesta, no fue así con los sectores populares. Hay un sector que la está pasando realmente mal y hay que avanzar con respuestas concretas. En los últimos anuncios lo único que hemos obtenido son respuestas para el mercado y para el campo, pero para las organizaciones la única respuesta que hay es la auditoría”.

“Se instaló la idea de que nuestros compañeros no trabajan y yo los veo laburando todo el día”, dijo Esteban “Gringo” Castro, secretario general de la UTEP, quien inició su caminata desde Luján. “Es momento de que le dejemos un mensaje a esa derecha dura que nos viene persiguiendo. Porque se viene el 2023 y claramente ellos van a querer volver. Nosotros les estamos demostrando que estamos organizados y organizadas”, agregó Dina Sánchez. 

Pasando la autopista, entre risas, se escucharon las voces coordinadas de un grupo de mujeres gritando “Ehhhhh”,en el momento en que se cortó el chamamé y se subió el volumen de una cumbia. “Y cuando no estás / me falta el aire”, sonaba y los cantos de las compañeras acompañaban la letra mientras manos y pies se movían al ritmo de los aplausos. “¡Vamo’!”, grita uno al avanzar. La columna no dejó una cuadra de Rivadavia sin recorrer.

 Mientras tanto en avenida de Mayo y 9 de Julio se escuchaba cantar: “Unidad de los trabajadores / Y al que no le gusta se jode, se jode / Unidad de las trabajadoras / Y al que no le gusta que se joda, que se joda”. Tambores, trompetas y columnas de banderas marcaron la pasarela al escenario y dispersaron detrás suyo a miles de militantes que esperaban la llegada de sus compañeros. Siguiendo por la 9 de Julio un mar celeste, azul y blanco se extendía hasta rodear el Ministerio de Desarrollo. 

 “Compañeros, la columna que viene desde Liniers y desde Luján está llegando a la Plaza Congreso. Ya estamos para recibirlos ¡Vamos compañeros que ya llegan! -gritan desde el escenario-. Hoy salimos para mostrarles que además de trabajar venimos con propuestas concretas”. 

 “Compañeros, recibimos a la columna que está marchando desde las ocho de la mañana por Tierra Techo y Trabajo”, se escuchó desde el escenario mientras miles de suelas gastadas dejaban su huella en la avenida de Mayo y, entre aplausos, las rejas se abrían para dejar pasar a los caminantes. 

 Se esperaba una multitud y una multitud llegó. Cerca de medio millón de personas ocuparon la 9 de Julio. El mar de banderas, devotas del viento, rodearon el escenario y se extendieron por cuadras hasta el Congreso.  

 “Una vez más, los compañeros trabajadores de la economía popular, esos que un puñado de chetos llaman planeros, nos hacemos presentes, como cada 7 de agosto para reclamar por políticas públicas concretas -decía Nicolas Caropresi, referente del MTE, desde el escenario -:Tierra, techo y trabajo. Esas reivindicaciones convertidas en proyectos de ley y hoy movilizadas en la calle a través de las organizaciones sociales que convierten los derechos en una reivindicación política”.. 

El acto comenzó oficialmente con la lectura del documento de la UTEP, que subrayaba que “en estos tiempos donde apremia la pobreza y donde se ha profundizado la persecución judicial contra los movimientos populares, reivindicamos nuestra unidad en la diversidad, en la defensa de los intereses de los de abajo”.

 Desde el escenario los y las referentes de los movimientos populares dieron sus discursos. “Lo que nos falta no es trabajo, son derechos laborales”, dijo Gildo Onorato, dirigente del Movimiento Evita, mientras arrancaba el acto. Por su lado, Juan Carlos Alderete, coordinador nacional de la CCC y diputado por el Partido del Trabajo y el Pueblo en el Frente de Todos, dijo que “esta jornada, como las anteriores, alumbra y nos da fuerza, porque la situación se va agravando para nuestro sector”. “El amor por nuestro pueblo, eso es lo que nos motoriza a salir todos los días a la calle”, subrayó Norma Morales, referenta de Barrios de Pie y secretaria adjunta de la UTEP, entre los aplausos de sus compañeros. 

 El cierre del acto, al terminar el discurso del “Gringo” Castro, cerró con un millón de pies saltando al ritmo de “No lo soñé”, mientras la parrillas seguían levantando su humo y las banderas se agitaban con el viento.