Desregula y aumentarás

Desregula y aumentarás

Los servicios de telefonía e internet aumentaron este mes casi un 16 por ciento, cinco puntos más que la inflación. Con un decreto de necesidad y urgencia, el gobierno de Javier Milei desreguló las tarifas y los usuarios quedaron a merced de tres grandes empresas.

Mientras que la inflación de marzo fue del 11 por ciento, el incremento de los precios de las comunicaciones fue del 15,9, lo que significa un aumento acumulado del 80,9 en lo que va del año y una variación interanual del 336,7. Según el INDEC, el aumento se debe a las subas en servicios de telefonía e internet.

En este marco, tras derogar el DNU 690/2020 de Alberto Fernández –que declaraba servicios públicos esenciales a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC)–, el actual gobierno desreguló las telecomunicaciones a través del decreto 302/2024.

La nueva disposición modifica la Ley Argentina Digital y establece que las empresas licenciatarias de servicios de TIC van a tener la «libertad de fijar sus tarifas» y así «promover la competencia» en el sector.

Diego Rossi, profesor de Políticas y Planificación de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires y director de la Cátedra Libre Conectividad en la Universidad Nacional de La Plata, afirma, en diálogo con ANCCOM, que “Macri en diciembre del 2015 hizo una desregulación de las tarifas muy similar a la que Milei está haciendo ahora, con la diferencia de que no existía el DNU 690”.

El DNU 690 –que quedó paralizado por su judicialización repuso la condición de servicio público en competencia para las telecomunicaciones y, además, fijó que el Ejecutivo era quien debía indicar los aumentos de las tarifas. El Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) era el organismo responsable del control tarifario y de que se garantice la prestación básica universal.

El mercado de las telecomunicaciones es un mercado oligopólico compuesto por tres grandes empresas: Telefónica, Claro y Personal. Por eso el sector festeja la medida que adoptó el gobierno de Milei. A contramano, el diputado de Unión por la Patria y presidente de la Comisión de Comunicaciones e Informática de la Cámara Baja, Pablo Carro, alerta que la derogación del DNU 690 representa un “salto al vacío” en la regulación de las telecomunicaciones en Argentina.

“La ausencia de una regulación inteligente que contemple las distintas modalidades de prestación del servicio (empresas corporativas, Pymes, cooperativas y emprendimientos comunitarios) deja a los usuarios a merced de la arbitrariedad de las grandes empresas”, advierte el diputado Carro.

Rossi, por su parte, sostiene que “Milei refrenda el criterio que ya venía trabajando Macri y que, en realidad, venían exigiendo e imponiendo las empresas desde principios del siglo XXI”: “Que nadie se meta con las promociones que estamos haciendo, con nuestra estrategia de mercado, los que van a decidir las inversiones somos nosotros”, dicen a las empresas.

En ese sentido, la intervención del ENACOM congeló todo los planes de fomento de la conectividad que se venían desarrollando. “Con este combo se restablece una situación de dominancia de los principales prestadores”, asegura Rossi.

“Con los DNU de los últimos tres gobiernos –agrega– se perdió la capacidad pública de densificar los debates, estamos en debates demasiado finalistas e ideológicos. Por querer imponerse drásticamente, las tres empresas oligopólicas nos demolieron las capacidades estatales de regulación. Paradójicamente, en Chile, se está por aprobar, después de cuatro años de debate, la designación de Internet como servicio público, pero evidentemente con otro marco de discusión entre las fuerzas políticas y el sector privado. En Argentina salimos perdidosos porque quizá la única manera que encontró Alberto Fernández de disponer una forma regulatoria para las telecomunicaciones, fue la confrontación. En ningún lugar del mundo es sencillo el diálogo con las empresas, pero en otras partes la política logró algún tipo de diálogo. Acá están desmantelando el ENACOM y se restablece el esquema de incapacitar al sector público para la regulación y fomento de las telco”.

Según Carro, “no basta con que haya accesibilidad al servicio, sino que es necesario garantizar que sea asequible para los bolsillos de cada familia. Se desregula argumentando la libertad y se deja al zorro en el gallinero. Es necesario que el Estado regule esa relación dentro de un mercado con precios distorsionados por la voracidad y la arbitrariedad de quienes los imponen”.

En cuanto a las consecuencias de la desregulación, Rossi subraya que “la situación de no planificación y no desarrollo de alternativas para la conectividad, hace que quedemos rehenes de la empresa o cooperativa que nos toque. El esquema desregulatorio favorece a los grandes. Las empresas adoptan un sistema de tratar de cobrar lo más posible, lo cual es ilegal, porque en el mismo barrio pueden convivir personas con el mismo plan y pagando boletas totalmente distintas producto de su capacidad de negociación con el call center del momento o de situaciones azarosas que tienen que ver con promociones”.

“El corazón del negocio de las empresas telefónicas es la perversidad de atomizarnos como usuarios. Esta medida necesariamente no va a encarecer los servicios, pero sí nos va a volver más rehenes de las empresas”, concluye.

 

«Un debate saldado»

«Un debate saldado»

La Libertad Avanza presentó en la Cámara de Diputados un proyecto para derogar la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. ¿Un guiño al Papa antes de la visita? ¿Una cortina de humo para tapar el enorme ajuste que propone el gobierno?

el 7 de febrero se hizo oficial el ingreso a la Cámara de Diputados de un proyecto de legisladores de La Libertad Avanza para derogar la Ley 27610 de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). La nueva propuesta prevé, además, la modificación de los Artículos 85, 86 y 88 y la derogación del Artículo 85 BIS del Código Penal de la Nación.

Impulsado por la diputada Rocío Bonacci (Santa Fe), el proyecto cuenta con las firmas del titular de la bancada, Oscar Zago, la mediática cosplay Lilia Lemoine y Manuel Quintar, Beltrán Benedit y María Fernanda Araujo.Pero, en lo que parece un sello de LLA, Lemoine negó ante Somos Corta haber aportado su firma.

Entre las modificaciones que concibe el proyecto sobre el Código Penal, se contempla: dejar de hablar de “persona gestante” para llamarla “mujer”, dejar sin efecto la prisión e inhabilitación del funcionario público o personal de salud que obstaculice la práctica y establecer prisión e inhabilitación a miembros del cuerpo médico y farmacéutico “que abusaren de su ciencia o arte para causar el aborto o cooperaren a causarlo”, además de aplicar prisión sobre la mujer que “causare o consintiere” su propio aborto.

El gobierno ya mostró gran falta de experiencia política con sus intentos para aprobar la Ley Ómnibus sin generar previamente los consensos y alianzas necesarias. En este caso, ¿el gobierno vuelve a mostrar que está verde?

¿Un guiño al Papa?

Ante la novedad de la presentación, María Alicia Gutiérrez, socióloga, feminista, docente e investigadora de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, sostiene: “No es ninguna novedad que va a ir contra la ley. Lo dijo en la campaña, en los discursos, en Davos. Con respecto a si el momento es el más propicio, no parece” y sugiere que, a apenas dos meses de estar gobernando, el gobierno puede querer llevar esta medida por dos razones: “Esto puede ser real de manera que sea una especie de guiño que Milei le haga al Papa o puede ser, ante el fracaso de la Ley Ómnibus, que haya un intento de distraer con otro tema que no tiene nada que ver con lo que estaba discutiendo”.

Según el Informe Anual 2022 y con actualización a abril del 2023, el número de IVEs/ILEs ascendió a más de 96.600 distribuidos principalmente entre Provincia de Buenos Aires (40.880), Ciudad de Buenos Aires (9-961), Santa Fe (6.645), Salta (4.721), Tucumán (4.701), Mendoza (3.893), Córdoba (3.015), Jujuy (2.580) y Entre Ríos (2.444). El aumento de intervenciones superó el 70% respecto de 2021.

Para Mariángeles Guerrero, miembro de la Campaña por el Aborto Legal, la intención del espacio de LLA de derogar la ley “habla de la falta de timing para establecer los debates: “Fue una ley ampliamente debatida y consensuada, que requirió mucha movilización social y puesta en común de los argumentos. La sociedad ya dio este debate”, afirma y complementa: “El gobierno espera que estemos presas por un aborto o que nos muramos desangradas. ¿Realmente volver a penalizar el aborto es unaurgencia en un país que tiene hambre? ¿Es una prioridad volver a encarcelar y perseguir mujeres y que volvamos a usar perejil y agujas de tejer? Es el proyecto político de que volvamos al siglo XIX, con penas más duras. Hoy el eje político es el de las dificultades que tiene el Gobierno nacional para establecer un diálogo con los distintos actores, porque el Congreso es un espacio ‘para hacer un trámite’ y cuando el trámite no sale bien entonces se insulta a diputados y diputadas. Han demostrado una vocación muy grande por no respetar los acuerdos democráticos”.

Por su parte, Marta Dillon del colectivo NiUnaMenos, considera que se trata de “un gobierno con muy poca gimnasia institucional, donde esto solamente se puede leer como una provocación. Pretenden detener enemigos para echarle a su base electoral, ahondar en la fractura social y presentar antagonismos que puedan mantener la adhesión de su electorado”. La periodista y escritora está segura de que “no va a haber una derogación. Es una discusión saldada” y no ve “por qué tenemos que adelantarnos a algo que no ha sucedido”.

Al igual que Gutierrez, Dillon visualiza un panorama que busca ganarse las simpatías del Papa: “También está el convenio con las iglesias evangélicas para darle ayuda alimentaria a sus comedores, cuando no se los entregan a las organizaciones o el viaje a Roma, con la visita al Papa Francisco, que me parece que tampoco tiene tan poca habilidad política como para no leer en esto una provocación”.

Cuando aún no lleva dos meses completos en el mandato este gobierno parece muy “verde”, paradójicamente, a la hora de generar consensos antes de intentar presentar o derogar una ley que en

este caso, además, supo ser marea y ganarse las calles. Si soplan fuerte, se levantarán olas.

El FMI también es responsable del cambio climático

El FMI también es responsable del cambio climático

Un informe realizado por el CONICET junto con la ONG ACIJ establece un vínculo directo entre las deudas públicas y los daños ambientales.

Nafta al fuego. Deuda y cambio climático en Argentina, es un informe realizado por investigadores del CONICET en coordinación con la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia que denuncia una relación directa entre la deuda pública y el cambio climático.

El 23 de febrero de 2023, el Valle de Punilla se llenó de jóvenes de todo el país que durante dos días se congregaron a escuchar un amplio repertorio de bandas entre medio de las sierras y el paisaje cordobés. Hoy, ocho meses más tarde, mientras una nueva tanda de jóvenes se prepara para viajar a otra edición del Cosquín rock, el valle volvió a prenderse fuego.

Ya suman casi 7.645 las hectáreas quemadas únicamente en esta provincia en lo que va del año, y aun no asomaron los días más calientes. Resuena otra vez la duda de que irá a pasar este nuevo verano con las que, dicen, serán las temperaturas más altas jamás vividas.

Francisco Cantamutto, licenciado en Economía y Juan Pablo Bohoslavsky, doctor en Derecho, realizaron un informe que propone una relación entre el cambio climático y la deuda externa, o la falta de política ambiental en pos de otras cosas “más urgentes”. La línea es directa: “El 93% de los países con crisis climática están en crisis de deuda o con altas posibilidades de entrar en ella”, declara Cantamutto en la presentación del informe junto a ACIJ. “El cambio climático genera necesidades de inversión muy concretas que en términos de adaptación y mitigación no siempre los Estados tienen la posibilidad de fondear”, dice.

como es el caso del Medio Ambiente que, en el presupuesto nacional, tiene asignado un escaso 0,4% del PBI frente al 3% que se lleva únicamente el pago al FMI. Sobre esto,  Cantamutto comenta: “El FMI cumple un rol catalítico en términos de la gestión de la deuda, porque opera expresando con total apertura las exigencias del resto de los acreedores, y a través de sus recomendaciones y su auditoría funciona como señalizador para el resto de los inversores tanto oficiales como privados”. Pero esta no es la única consecuencia del acuerdo: “El principal camino que ha adoptado el Fondo Monetario Internacional ha tenido que ver con el rol de facilitador y forzar a los Estados a que se sumen a este rumbo de inversión privada”, remarca.

Esta no es una problemática exclusiva de Argentina. En el informe se demuestra que son los países pertenecientes a la mal llamada “periferia global” los que tienen más problemas, no solo para financiar políticas ecologistas, sino que también son los que comprometen un mayor porcentaje de su PBI al pago de deuda. Esta es una problemática que se evaluó en 1994 por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, donde las principales potencias firmaron un acuerdo en el que se comprometían a colaborar económicamente con el cuidado ambiental de países del tercer mundo.

En la COP15 de Copenhague, en 2009, se acordó una meta colectiva de financiamiento climático de unos 100.000 millones de dólares por año desde 2020. En la actualidad se calcula que se han entregado menos de un cuarto de los fondos comprometidos, y que casi tres cuartos del financiamiento han llegado en forma de crédito, aportando al incremento de los niveles de deuda con los que ya cuentan la mayoría de los países tercermundistas.

La deuda no es cosa de pobres únicamente, pero sí representa un porcentaje del PBI que resulta vital a países con mayores dificultades económicas, donde sería mejor invertido en mejorar la calidad de vida de su población, garantizar el cumplimiento de los derechos humanos y una correcta industrialización que genere trabajo sin rifar el futuro de su población.

“No es solamente al momento del pago que la deuda genera un impacto en términos de las posibilidades de los estados de actuar frente al cambio climático, sino que además lo hace al exigir o proponer, por parte de los acreedores, reformas estructurales. Y modular de esta manera, a través de las políticas económicas, la forma que adopta el crecimiento”, plantea Francisco. Esto no es algo azaroso, ya que “en la en la mayor parte de los casos se trata de los países de la periferia o del sur global que, como los quieran enmarcar, tienden a especializarse en modelos productivos que exportan bienes que suelen tener tendencias hacia el extractivismo y no están asociados a un proceso de cambio estructural basado en una transición socio energética justa”, finaliza Cantamutto.

Los autores finalizan el informe con una serie de recomendaciones a tener en cuenta para mitigar en alguna escala lo irreversible del desastre climático; entre sus propuestas se encuentra exigir a los países de altos ingresos que cumplan con el compromiso económico de ayudar a otros de menores ingresos y que esta ayuda sea efectiva y no por medio de una nueva deuda; incorporar al análisis de sostenibilidad de la deuda, particularmente la del FMI, la dimensión de daño y riesgo ambiental; y avanzar hacia una reforma tributaria progresiva que mejore la capacidad recaudatoria, de cara a reducir la dependencia frente a la deuda.

Pueden leer todas las propuestas en el informe “Nafta al fuego. Deuda y cambio climático en Argentina” que encontrarán en la página de ACIJ.

Cupo laboral trans: una ley que no se cumple

Cupo laboral trans: una ley que no se cumple

El registro de aspirantes ya superó los 6000 inscriptos mientras los monitoreos sobre el Sector Público Nacional no superan los 500 empleos efectivos. La “Fundación Trans Argentinxs” reclama un Observatorio por el lento cumplimiento de la norma.

El 7 de julio de 2021 se promulgó la Ley de Promoción del Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgénero «Diana Sacayán–Lohana Berkins». A más de 18 meses de la sanción, la norma presenta ambigüedades en su aplicación , tornando efímera la ampliación de derechos en el sector más vulnerable de  la comunidad LGTB+.

En septiembre de 2020 el Decreto 721/2020 estableció que el Estado debía incorporar en sus espacios de trabajo al menos un 1% de personal con personas travestis, transexuales y transgénero. En julio de 2021, con la sanción de la Ley 27.636, se reglamentaron las condiciones de contratación y reserva de puestos para garantizar ese cupo laboral. También, la ley instauró el Registro Único de Aspirantes, en donde aquellas personas que deseaban conseguir empleo podían cargar sus datos.

Lautaro Lucas Cruz, presidente de la Fundación Trans Argentinxs hace énfasis en que “muchos adultos trans fueron expuestos a la situación de prostitución sin poder decidir. Con esta ley buscamos reparar y contener a las juventudes trans y no binarias para que puedan tener acceso a un trabajo formal”, explica en diálogo con ANCCOM.

Se trata de una población en extremo vulnerable y que por su bajo número de inscriptos esa situación puede ser resuelta con celeridad, pero en la práctica la realidad no ha cambiado mucho según los datos estadísticos.

Al cumplirse un año de la sanción de la Ley, el Departamento de Género y Diversidad de ATE Nacional y la Asamblea TTNB por la Salud Integral presentó un estudio y estableció que en julio de 2022 ese porcentaje era suficiente para la contratación de 5.551 personas que expresaron su necesidad de trabajo. Sin embargo, solo 313 personas habían sido incorporadas.

Según los resultados del monitoreo realizado por el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, dispuesto el 30 de septiembre del mismo año, 480 personas trans son las empleadas en el Sector Público Nacional, sólo 167 personas más desde el monitoreo de julio. Según el mencionado estudio realizado por ATE Nacional y la Asamblea TTNB de Salud Integral
se cubrieron el 8,65% de las vacantes laborales disponibles.

Dentro de este numero total, la cantidad de personas Travestis, Transexuales y/o Transgénero que fueron contratadas antes del Decreto 721/20 es de 64 personas, mientras que 112 se sumaron entre el Decreto y la sanción de la Ley N° 27.636. Siguiendo esos datos –tras un pedido de acceso a la información realizado por ANCCOM– se observa que antes de la norma ya había un total de 176 personas con empleo. En términos porcentuales el empleo creció un 36,7% del total, tomando como referencia las 480 personas registradas hasta el 30 de septiembre de 2022, pero en números concretos menos del 10% de las personas que pidieron un trabajo digno pudieron salir de la marginalidad laboral y/o social.

Desde el Mocha Celis procuran instancias de inclusión que reconozcan las horas de estudio. Foto: ARCHIVO

En la Fundación Trans Argentinxs donde también acompañan y asesoran a niñxs, adolescentes y juventudes trans de todo el país que tienen entre 3 y 24 años, aseguran que “se dificulta que entren las personas a trabajar porque no hay decisión política. Además, es preciso que el cupo laboral sea implementado de manera federal”.

En la provincia de Buenos Aires y CABA se contrataron 356 personas, mientras que en el resto de las provincias sólo se contrataron 83 nuevos empleados y empleadas, quedando un restante de 41 personas que no fueron contabilizadas según su jurisdicción. “Para que en el interior se pueda cumplir la ley haría falta una adhesión de las provincias”, advierte Lautaro Cruz.

Mientras tanto la demanda de trabajo sigue creciendo. El Registro Único de Aspirantes contabiliza al cierre de esta edición 6.807 personas Travestis, Transexuales y Transgénero inscriptas. En otras palabras, la respuesta del Estado sigue siendo lenta en relación con el ejercicio pleno del derecho. Así, tomando los datos dispuestos por ATE Nacional y la Asamblea TTNB, los 5.551 puestos de trabajo ya podrían estar cubiertos con mayor compromiso de las autoridades del sector público y atender la demanda de nuevas solicitudes.

Este registro tiene la finalidad de que aquellas personas que estén interesadas en cubrir vacantes en el marco de la ley puedan brindar sus datos para establecer una orientación de adecuación profesional. Este solicita el nombre autopercibido, los antecedentes educativos y laborales y las aptitudes y preferencias laborales de las personas aspirantes. Es allí donde surge la trampa burocrática. El perfil de los puestos no coincide con la formación de los aspirantes y no existen mecanismos ni resortes reglamentarios formales para que se capaciten mientras acceden a los puestos de trabajo.

La Asociación Civil Mocha Celis y su Bachillerato Popular trabaja para revertir esta situación desde hace más de una década, en especial porque la discriminación tiende a expulsar a las personas trans de los ámbitos educativos cuando atraviesan la enseñanza secundaria. Desde la Mocha saben que la inserción laboral no es sencilla y procuran instancias de inclusión que impliquen el reconocimiento de horas de estudio como estrategia.

Cruz insiste en la importancia de la ley para este colectivo. “Cuando lees que tu expectativa de vida es de 35 o 40 años –explica– te da un poco de miedo… Saber que vas a tener un futuro, que vas a tener la posibilidad de elegir donde trabajar y/o estudiar, te da un poco de tranquilidad. Es el saber que vas a estar bien. Eso es lo importante”.

La Ley de Promoción del Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgénero «Diana Sacayán – Lohana Berkins» establece un incentivo tributario para aquellos empleadores privados que contraten a trabajadores y trabajadoras de la comunidad trans travesti con el fin de fomentar el acceso al empleo. Además, los organismos que están comprendidos dentro de la normativa deben llevar a cabo acciones que faciliten una sensibilización y comprensión sobre la perspectiva de género y de diversidad sexual en los ámbitos laborales.

La norma surge frente a la ausencia de una ley integral –como en el caso uruguayo– de igualdad de género. En Argentina las minorías sexuales fueron conquistando derechos por partes.. En 2012, la Ley de Identidad de Género estableció un marco legal en el cual se asienta que no se necesitan diagnósticos médicos o psiquiátricos, ni operaciones de cambio de sexo para acreditar la identidad. Dentro de los grupos que lucharon por esta ley se encontraba el Frente Nacional por la Ley de Identidad de Género, una alianza de más de 15 organizaciones. En ella se encontraba Lohana Berkins, una activista travesti que buscó en esa norma dar un acceso pleno a la atención sanitaria para que aquellos que soliciten intervenciones médicas o tratamientos puedan obtenerlos.

 

Por otro lado, la Ley Diana Sacayán aprobada en 2015 en la Provincia de Buenos Aires fue un gran antecedente. Esta última institucionalizó el cupo laboral travesti trans, utilizando como nombre a la primera travesti en recibir su DNI con la inscripción del género femenino en 2012 y el de Lohana, ambas activistas en el proyecto de Promoción del Acceso al Empleo Formal para Personas Travestis, Transexuales y Transgénero.

Sobre la aplicación real de la ley se destaca que el Ministerio de Economía es aquel que más personal travesti y trans tiene, contando con un total de 92. Por su parte, el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad cuenta 19 personas y el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social 39. El Ministerio de Educación es aquel con menor cantidad de contratados, solo con 1 persona contemplada bajo las condiciones de esta norma.

“Es necesario un Observatorio de la ley de cupo laboral trans y travesti. En todas las políticas públicas que tienen que ver con este colectivo es necesario”, concluye Lautaro Cruz.

Un tema tabú que es necesario enfrentar

Un tema tabú que es necesario enfrentar

El suicidio es una temática compleja no solo por lo doloroso, sino también las múltiples causas que pueden generarlo. Hay señales de que está creciendo entre los jóvenes, pero las estadísticas no resultan demasiado confiables. ¿Cómo se ayuda a una persona que no soporta más el dolor que le produce vivir?

Distintas instituciones estatales, ONG y profesionales que tratan sobre la salud mental coinciden en que aumentaron los casos de suicidio durante la pandemia, pero también en que es un tema complejo, multicausal y que se registra de forma poco sistemática, por lo que no es fácil contar con estadísticas confiables. Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de junio de este año menciona que las consultas por depresión y ansiedad aumentaron más de un 25% sólo en el primer año de la pandemia. La Iniciativa Especial de la OMS en el Área de Salud Mental del 2019 a 2023 propuso una cobertura sanitaria universal que considere las desigualdades sociales y económicas, las emergencias de salud pública, la guerra y la crisis climática como una de las amenazas estructurales globales para la salud mental. 

Es que, según la OMS, el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes. En París por la pandemia hubo un crecimiento de 300% en los casos de menores de 15 años. Las estadísticas del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) realizó una encuesta durante el momento más crudo de la pandemia en Estados Unidos y concluyó que un 25 % de los jóvenes tenía pensamientos suicidas. 

Más datos: según el reciente informe sobre el suicidio en España, realizado por el Observatorio Biopolítica (formado por Profesionales para el Bien Común), el suicidio sigue siendo la principal causa de muerte no natural en España, produciendo el doble de muertes que los accidentes de tráfico, once veces más que los homicidios y setenta y dos veces más que la violencia de género. Es también, después de los tumores, la principal causa de muerte en la juventud española (15 a 34 años).

De acuerdo con las Estadísticas Sanitarias Mundiales del 2019 realizado por OMS, 97.339 personas murieron por suicidio en las Américas en 2019 y se estima que los intentos de suicidio pueden haber sido veinte veces esa cifra. Los hombres representaron alrededor del 77% de todas las defunciones por esta causa y, si bien se han hecho progresos en la prevención del suicidio, varios países siguen teniendo tasas crecientes. 

“Perder a un ser querido por suicidio es desgarrador y es algo que podemos prevenir”, afirmó Oliveira e Souza Jefe de Salud Mental y Consumo de Sustancias de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). El proyecto  “Vivir la vida” se propone ayudar con los impulsos de cada país para reducir a un tercio las estadísticas a nivel mundial de suicidios para 2030. Podemos observar que aún está por actualizar los datos después de la pandemia, y desde la OPS se sigue trabajando en campañas con esta temática.

Pese a lo fragmentario de los datos y las dificultades para interpretarlos, algunas señales invitan a seguir pensando.

 En Argentina

 Los datos globales sirven como referencia para la Argentina donde, afirman los profesionales entrevistados, aun faltan estadísticas confiables. 

En 2018, en el 6º Encuentro Nacional de Epidemiología Pediátrica de Argentina, se explicaba que la primera causante de muerte de adolescentes en Argentina son los accidentes y en segundo lugar los suicidios. Según este informe, las provincias de la Región NOA son las más afectadas. Un equipo del Hospital Nacional Posadas realizó un informe en 2019 en el que aseguraba que en la Provincia de Buenos Aires los suicidios se triplicaron en los últimos 30 años, hasta llegar a los 12,7 por cada 100.000 adolescentes de entre 15-19 años de edad  y constituye la segunda causa de muerte en la franja entre 10 y 19 años.

Para hacer frente a este problema, el Ministerio de Salud tiene un servicio especializado en la atención por salud mental y consumos problemáticos de Niñas Niños y Adolescentes, hasta los 18 años. El servicio cuenta con atención a la demanda espontánea, ambulatoria y ambulatorio intensivo brindando servicio por medio de actividades grupales a los pacientes y sus familias. 

“Toda difusión es prevención, es tarea de todos prevenir. El suicidio es multicausal, nunca hay una sola razón”, afirma Fernanda Azcoitía, presidenta del Centro de Atención al Suicida (CAS) en Buenos Aires. “Todos podemos ser preventores estando atentos a nosotros mismos, a nuestros propios procesos y al entorno de los que tenemos cerca en cualquier espacio en que participemos. Estando atentos, mirando y escuchando a los demás, aún cuando estemos ocupados, vamos a notar que algún compañero puede empezar a apagarse, a tener una mirada más triste. Lo podemos captar  con una mirada atenta”. Según la especialista, los chicos están hoy en un mundo que les resulta particularmente complejo.  Entonces aparecen tentaciones para aliviar sufrimientos y dolores como el alcohol, consumos problemáticos, de vínculos o relaciones complejas.

Para Azcoitía, “no todos los intentos y no todos los suicidios son registrados como tales, con lo cual se piensa que las estadísticas están subvaluadas y esto es más preocupante aún”. El suicido es un punto en un proceso que empezó mucho antes del impulso o en el momento en que se toma una decisión, explica Azcoitía. “Si hay varios problemas que generan un colapso y va creciendo una crisis totalizadora del Yo, que lo abarca por completo. La persona lo que quiere es eliminar ese sufrimiento y dejar de sufrir. Si la persona no estuviera sufriendo eso, no querría  acabar con su vida”, concluye.

El camino de los jóvenes

El suicidio, “afecta a todas las edades, pero en particular a los jóvenes”, explica Amilcar Matosían, autor de EnREDAdos y Licenciado en Relaciones del Trabajo. “Si hay una muerte, hay familia, amigos y una sociedad que sufre. La tendencia es que los suicidios siguen aumentando. Los datos que tenemos es que hay más suicidios que homicidios en Argentina, aunque depende del juez que la causa de mortalidad quede correctamente registrada. Hay un año que sube más y otro puede bajar, pero la problemática es la tendencia y es global”, explica Matosian a ANCCOM. Hay una negación cultural del Occidente exitista que dificulta enfrentarnos a los fracasos y problemas. En Latinoamérica nos cuesta medir con números. Somos más románticos y medimos con las sensaciones, en cambio en el mundo anglosajón se valora más porque los números son objetivos”, afirma. 

“Uno de los mitos es pensar que la persona afectada por la ideación suicida, no sale. O que la persona que comete un intento, no puede recuperarse. Pero hay que dar el mensaje que sí es posible recuperarse y tener una vida plena en cuanto afectos, a proyección de futuro. Hay mucho prejuicio, mucho temor  a ser estigmatizado. La enfermedad mental tiene un estigma que no sucede con la enfermedad cardiaca, por ejemplo”, comenta Matosian, quien trabaja con un equipo de profesionales multidisciplinario: “Psicólogos, médicos de distintas especialidades, sociólogos, bomberos y otros profesionales”, comenta. 

“Después de la pandemia hay más llamados y las temáticas son muy diversas. Hay casos de personas que llaman con situaciones muy difíciles y complejas, sumado a todo un sistema de salud que no siempre está en condiciones de responder a la demanda que supone el aumento de toda una situación difícil en términos de salud mental y esto se da no en el sistema público y el sistema privado”, cuenta Azcoitía. 

Sandra Ledesma, psicóloga de niños y adolescentes, trabaja en la Asociación de Psicología Social Clínica de Argentina (APSCA). Según la especialista los cambios físicos de la adolescencia, la autoestima, la pertenencia, las primeras obligaciones, dudas del futuro y la plena construcción de la identidad, producen un movimiento muy grande por dentro, sin que necesariamente haya una relación directa con el contexto particular. Al tener problemas sin resolver, cosas dolorosas por expresar, la sensación es de muerte. “Luego de la pandemia fue muy difícil para los adolescentes retomar las clases, compartir salidas. La falta de cercanía los ha afectado mucho”, explica. Como especialista, Ledesma, sugiere fomentar espacios tranquilos y relajados, de diálogo con los niños y adolescentes. Recomienda que los adultos se dispongan a la escucha activa y, en la medida de lo posible, tener los aparatos electrónicos silenciados. 

Matosian y Azcoitía, Ledezma, insisten en la multicausalidad de los casos de suicidio invitan a estar atentos y evitar que los niños y adolescentes se aislen. También comparten la idea de trabajar de forma interdisciplinaria, porque la persona es un todo (su entorno social, político, familiar, emocional, espiritual, económico). Quitar el estigma a las cuestiones de salud mental, también puede ser un paso importante.