«Japonesa, japonesa»

«Japonesa, japonesa»

Ichika Egashira se incorporó a Excursionistas y se convirtió en la primera nipona en llegar al fútbol argentino. ¿Qué diferencias percibe entre su país natal y el que la recibió?

El 2023 empezó de manera intensa para Excursionistas. El conjunto del Bajo Belgrano firmó un convenio con la Universidad de Tres de Febrero (UNTREF) para que sus jugadoras puedan realizar una carrera universitaria a la par de la futbolística. Días después , las redes del club anunciaron el desembarco de Ichika Egashira, la primera jugadora japonesa en arribar al fútbol argentino femenino.

Su llegada generó tantas expectativas que tuvieron que armar una presentación con conferencia de prensa y su primer entrenamiento a puertas abiertas para el público. 

Casi un mes después, Ichika intenta aprender español para comunicarse mejor con sus compañeras. Entrena todos los días de 12 a 14 en el estadio de Excursio. Mientras camina normalmente hacia la calle La Pampa junto a Fernando Moya, preparador físico y entrenador que vivió varios años en Japón y gestó su llegada, se cruzan con una gran cantidad de hinchas con bombos y camisetas del equipo. Mientras se dispone a practicar, varios micros se preparan para salir desde la cancha y alentar al plantel masculino de Excursionistas quien debe enfrentar a Gimnasia de La Plata por Copa Argentina.

Ante un ruido estremecedor de fondo, sale con la pilcha de entrenamiento del vestuario. Nació para las cámaras, sonríe ante cada gesto de sus compañeras que la invitan a posar con un mate, luego con una pelota y todo lo que esté a mano. La hacen sentir cómoda, el idioma del fútbol es universal. Un poco ansiosa por su debut oficial, parece exigirse un poco más, lo que la obliga a entrenar diferenciado por unos días. Pedro Lacal, su entrenador, le da unas indicaciones a Moya para que se las pase a Ichika. Mientras sus pares se distribuyen en el césped , a ella le toca el gimnasio. 

Tiene tan solo 20 años por lo que mudarse al otro lado del mundo no fue una decisión fácil. Con respecto a la reacción de sus padres, Ichika le comenta a ANCCOM: “Sabían que quería jugar en el extranjero pero no se imaginaron que tan lejos. Se preguntaron por qué no me fui a Europa. Yo lo tenía decidido, no les di chance a que se negaran”. 

El fútbol femenino comenzó a tener mucho más preponderancia en varios países potencia hace muy poco. En Japón, la WE League, primera división y de carácter profesional, tuvo su primera edición en 2021. Para jugar a la pelota, Ichika vivía rodeada de chicos. “Hasta la secundaria superior jugaba en equipos de varones. Los contrarios se sorprendían con que hubiera una chica. Si me hacían una falta decían: ´Pero sos chica ¿Que haces jugando acá?´”, sostiene Egashira. 

Muy parecido a Tokio, la extensión de Buenos Aires hace que las personas no se conozcan mucho entre sí.  Egashira vivió toda su vida en Kansai, Shiga, un lugar perfecto para evitar el ruido constante, ubicado entre Kioto y Tokio, donde abundan castillos, templos y la naturaleza. “Vivía en medio de la montaña, en un pueblo alejado de la ciudad. Es una comunidad muy unida. Todos los adultos cuidan a los niños. Esa creo que es la gran diferencia con un lugar como Tokio, donde es tan grande que nadie se conoce con nadie. Las personas de mi lugar son mucho más efusivas”, afirma Ichika. 

La jugadora japonesa se permite conocer Buenos Aires como turista y hasta como youtuber. Rápidamente observa lo caótica que puede ser. Fuera de su departamento en Parque Chas para evitar el ruido constante está su nueva familia, sus compañeras en Excursionistas, que le dan cariño como si estuviera junto a sus padres.

No le hizo falta mucho tiempo en el país para notar varias diferencias que se dan entre las mujeres japonesas y argentinas. “Acá son muy efusivas, abiertas y directas en el trato. En Japón, al ser chica no podías gritar o expresarte de esa manera. Me acuerdo que en el colegio, una profesora decía que era una señorita y que tenía que comportarme más adecuadamente. Me intentaban marcar una especie de camino. Me siento mucho más cómoda aquí con la naturalidad con la que pueden manejarse”, subraya Egashira.

Entre otros detalles, destaca que puede vestirse como quiere que nadie la va a juzgar. Así como se podía observar en el mundial a los japoneses limpiando los estadios con una disciplina notable, no logra entender como los baños públicos no son como los de su país. 

A la par de su personalidad detallista, Ichika dice: “En Argentina uno tiene que pensar todo el tiempo cómo rebuscarse para las cosas cotidianas, en Japón tenes casi todo al alcance de la mano, no necesitas pensar o renegar con todo. La forma de vida de los argentinos siento que me va a hacer crecer mucho”. 

Excursionistas forma parte de la primera división del fútbol femenino argentino. De 20 equipos, paradójicamente, sólo dos son dirigidos por mujeres. Ichika llegó en un momento donde la semilla va creciendo día a día. En 2019, AFA anunció la semi profesionalización de la primera división, donde en cada plantel deben existir por lo menos doce contratos para las jugadoras. Los sueldos son equivalentes a jugadores masculinos de la primera C, por lo que muchas chicas tienen otro trabajo. Varios clubes tradicionales comenzaron a darle entidad a las mujeres e incluso muchos de ellos tendrán inferiores. Algo que debería ser normal llegó mejor tarde que nunca. Aun así, se necesita mucho más para una completa profesionalización. 

Su debut con la hinchada se fue posponiendo pero ella ya piensa en su futuro, su sueño está organizado. Con su esfuerzo espera convertirse en referente para otras chicas japonesas que quieran jugar al fútbol y viajar al extranjero. “Quiero estar en Argentina tres o cuatro años y después jugar en Barcelona, como Messi. Quiero ser una jugadora top en Europa, ese es mi sueño” sostiene la número 28 de Excursionistas. 

Teniendo en cuenta el entusiasmo y su talento mostrado, no va a ser una sorpresa si en algunos meses consigue hablar un perfecto español y en unos años se ponga la azulgrana tal como lo hizo el astro rosarino. Ichika Egashira puede convertirse en el lazo perfecto entre la perseverancia argentina y la organización japonesa. Es cuestión de tiempo escuchar que coreen su nombre en el bajo Belgrano. 

Pasión de multitudes

Pasión de multitudes

El Museo Histórico Nacional inauguró la muestra “Pasión de multitudes”, un repaso por la historia del futbol en nuestro país a través de objetos de todas las épocas. Un recorrido que abarca desde el 20 de junio de 1867 con el registro del primer partido jugado hasta la obtención del mundial de Qatar hace pocos días.   

La exhibición comienza con el amateurismo, los clubes británicos, la popularización del deporte y pueden observarse camisetas utilizadas por Alumni, el multicampeón de aquel entonces. Asimismo, recortes periodísticos ayudan a comprender el apogeo del futbol y las huelgas de los futbolistas que contribuyeron a la profesionalización en el año 1931. “La muestra intenta ampliar el repertorio del Museo a través de temas de la cultura popular para que cada vez más gente se acerque”, dice Daniel Sazbón, historiador y curador de la muestra.

A partir del profesionalismo, la historia se cuenta por décadas y allí se exhiben distintos elementos constitutivos de cada época, junto con una reseña que ayuda a contextualizar el momento histórico.  Desde camisetas de “La máquina”, aquel equipo de River que hegemonizó el futbol durante la década del ‘40, el folleto del partido de Racing conquistando la Copa Intercontinental en el año 1967, la pelota Pintier como elemento representativo del futbol en los ‘70,  pasando por los ‘80 y los botines de un apoteótico Diego Maradona, los ‘90 y la privatización del fútbol y los 2000 que marcaron la época dorada de Boca Juniors donde se exhiben camisetas de Martín Palermo y botines de Juan Román Riquelme, entre tantos otros objetos. 

“La idea de la exhibición es que tuviera una dinámica propia vinculada a la historia del deporte en sí mismo, pero al mismo tiempo mostrar las características más importantes del momento histórico”, agrega Sazbón. 

En ese sentido, en el subsuelo se puede observar un espacio dedicado a los lazos del fútbol y la política, desde Perón y el récord de entradas vendidas hasta Mauricio Macri y su carrera como presidente en Boca que le sirvió como trampolín para llegar al Gobierno de la Ciudad.

En el mismo lugar, existe un espacio dedicado Mundial 1978,  organizado por la Dictadura Militar. Allí, se puede ver una reseña que nombra y homenajea a aquellos jugadores detenidos-desaparecidos.

Existe también una sección dedicada al fútbol femenino. Si bien se profesionalizó recién en 2019, el primer partido entre mujeres se llevó a cabo en el año 1913 y la AFA las incluyó en el año 1991. En el museo, se puede ver la camiseta utilizada por Betty García en el Mundial 1971, (organizado por una marca comercial y en la que el equipo nacional viajó sin ningún equipamiento ni DT), hasta una carta de la AFA dirigida a Liliana Rodríguez en el año 1993, donde se justifica su ausencia en el trabajo por haber disputado un partido con la selección (aunque finalmente le descontaron el día). Estos elementos ayudan a contextualizar históricamente las distintas luchas que fueron llevando a cabo las mujeres en la disciplina.

Finalmente, se encuentra un homenaje dedicado a Diego Maradona a través de un mural y varias de las camisetas que vistió a lo largo de su carrera. En el cuarto contiguo, se exhiben todas las remeras utilizadas por la selección nacional desde el año 1924 y los títulos obtenidos por nuestro país a lo largo de la historia.

Entre los visitantes adultos, la sección de Maradona y el recorrido por las distintas décadas significa un viaje a la nostalgia, como es el caso de Fernando, que se acercó desde San Telmo para ver la muestra. “Para mí,  que soy un poco más grande, la colección de camisetas del Diego es lo que más me gustó», dice, y después agrega : «También me gustaron mucho las camisetas y los botines del recorrido década por década» e hizo referencia a lo distintas que son comparadas con las de hoy en día. 

Para los más chicos, aún emocionados por la obtención del mundial de Qatar, todo lo referido al seleccionado capitaneado por Lionel Messi es motivo de felicidad. Tal es el caso de Valentín, de 9 años, que quedó impresionado con la foto del “Dibu” Martinez ahogándole el festejo de gol a Kolo Muani en el minuto 122 de la final. “Me gustó mucho la copa y la foto del ‘Dibu’ atajando la última», le cuenta a Anccom.

“La muestra está orientada a público de cualquier tipo y de cualquier edad, incluso a los que no les gusta particularmente el deporte. En ese sentido, intentamos mostrar como el fútbol está presente en muchos aspectos de nuestra cultura como el cine, la literatura y la música”, dice Sazbón.

“Pasión de multitudes” se puede visitar de miércoles a domingos, de 11 a 19, en el Museo Histórico Nacional (Defensa 1600, CABA) hasta el 31 de agosto de 2023.  Entrada gratuita

«No me molesta que me griten puto»

«No me molesta que me griten puto»

Futbolista amateur en una liga bonaerense, Nicolás Fernández es el primer jugador en hacer pública su homosexualidad. “Con mis compañeros se me hizo fácil porque me conocieron como persona primero”, afirma. Entrevista publicada el 20 de julio de 2022.

Nicolás Fernández, 27 años, fue el primer jugador argentino en reconocerse gay en un ámbito tan homofóbico como el fútbol. Arquero en Huracán de Pellegrini de la Liga Trenquelauquense, en diálogo con ANCCOM cuenta como hizo público su elección sexual en un vestuario frente a sus compañeros, su relación con las hinchadas y su lucha constante por la visibilización del amor homosexual.

¿Cómo empezaste en el fútbol?

Arranqué de chico a jugar en mi pueblo, Pellegrini (provincia de Buenos Aires, en el límite con La Pampa). Debuté a los 15 años en primera y me mantuve hasta los 18. Luego de dos años sin jugar estuve en Barrio Alegre de Trenque Lauquen, en la liga amateur. En 2017 pasé por la Liga Cultural de La Pampa, un año y medio por Deportivo Rivera, medio año en Anguil y seis meses en Atlético Belgrano, de Santa Rosa. Me rompí ligamentos cruzados y volví en 2020 a atajar en Belgrano. Hicimos toda la pretemporada y pude jugar sólo un partido, porque nos agarró la pandemia. Después me mudé a La Plata y empecé a jugar en Universitario de Berisso, en la Liga Platense. Luego de ocho años de haber dejado de jugar en Huracán de Pellegrini, volví al pueblo y al club y estoy viajando todos los fines de semana a jugar.

 

El capitán del equipo me preguntó delante de todos mis compañeros si los pibes que vivían conmigo en la pensión eran gays. Yo le dije que hacía tres años que salía con un chico.

Nicolás Fernández

¿Cómo fue el momento en que declaraste ser gay en un vestuario?

Cuando jugaba en Rivera, estábamos jodiendo con el capitán del equipo y delante de todos mis compañeros me preguntó si con los que yo vivía en la pensión, que eran tres compañeros, eran gays. Me preguntó delante de todo el plantel. Yo le blanqueé lo mío, que hacía tres años que salía con un chico y si había algún problema que me lo dijeran. Por suerte quedó todo ahí, la mejor. Se me hizo fácil porque siempre me conocieron como persona primero, y después mis gustos o elecciones sexuales. Más tarde, en un boliche, estaba con mi expareja y decidí hacer una publicación en Facebook, y ahí se viralizó

¿Te acordás qué decía?

“Soy feliz. Gracias a quienes lo entienden. Y perdón a quién no. Un género no determina nada y mucho menos habla de quién soy como persona. Estoy enamorado y sí, de alguien de mi mismo sexo”. Justo coincidió con que era un 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGTB, pero no me di cuenta, no fue a propósito.

De un día para el otro te convertiste en una figura mediática…

Recibí apoyo de todo el mundo, de personas que creía que no se iban a arrimar o no iban a decir nada. Me han escrito futbolistas amateurs de España, Perú, Estados Unidos, diciéndome que era un paso adelante para ellos, que les había servido un montón.

El arquero siempre está cerca de las hinchadas, ¿cómo reaccionás ante los insultos?

Es parte del folklore del fútbol, lo tomo así. No me molesta que me griten “puto” o “qué lindas medias tenés”, porque yo antes usaba medias rosas a propósito. Al contrario, me doy vuelta y me río, lo tomo a chiste. No me tomo nada a pecho porque es en joda, y si lo dicen de verdad, habla mucho más de ellos que de mí. En este 2022 me ha tocado participar de clásicos de Huracán de Pellegrini con Atlético, que es uno de los más grandes de la zona. Van más de 2 mil personas. Siempre está la expectativa de que te griten cosas, pero el último clásico fue con mucho respeto, nadie me dijo nada respecto a mi sexualidad, sí ha pasado con otros equipos, pero no le doy bola, no presto atención, disfruto, más cuando el partido termina con un triunfo nuestro.

 

 

 

¿Cómo sigue tu futuro en el fútbol?

Disfrutando. Volví a compartir cancha con mi mejor amigo que es como mi hermano, después de ocho años. Estoy en el club del cual siempre fui hincha y siempre quise estar, jugando siempre en el fútbol amateur, veremos cómo sigue, por el momento sólo disfrutar y que se den los resultados para que estemos más tranquilos

¿Hay alguna reflexión que te gustaría transimitir?

Siempre digo lo mismo: cada uno tiene que vivir en la forma en que le toca y elija, sin miedo a lo que puedan llegar a decir. La gente va a hablar siempre, para bien o para mal. Es cuestión de disfrutar y no prestar demasiada atención a cosas que no tienen importancia.

El abrazo del pueblo

El abrazo del pueblo

Cinco millones de personas, según cálculos oficiales, salieron a la calle a saludar a los campeones del mundo. El recorrido de la caravana quedó trunco ante la falta de organización. Pero el clima festivo no se detuvo.       

La Scaloneta salió a celebrar con el pueblo argentino su triunfo en la Copa Mundial de la FIFA 2022. Cuatro horas de caravana sobre un micro descapotable se vieron interrumpidas por el desborde organizativo y terminaron con los jugadores sobrevolando en helicóptero el Obelisco y la Avenida 25 de Mayo. Alrededor de cinco millones de personas –según distintos cálculos imprecisos- se manifestaron en la calle de forma espontánea. Esta vez los helicópteros, un 20 de diciembre, simbolizaron alegría. 

Aguardaban con los brazos abiertos y las banderas en alto. La caravana comenzó a las 11:30. desde el predio de la AFA y tenía previsto bordear la Ciudad de Buenos Aires y pasar por el Obelisco, pero su recorrido se modificó cuando la multitud desbordó todas las proyecciones.

Así este martes, tras el Decreto N° 842, que declaró feriado nacional para compartir con la Selección el título de Qatar 2022 se escuchó el grito de “Olé, Olé, Olé, Olé, Olé, Olé, Olá”. Algunas personas se ubicaron en el corazón de Av. Corrientes y Av. 9 de Julio, mientras otras estaban en la Autopista Riccheri. Todos esperaban que pase el micro descapotable con los jugadores a bordo. Luego de que la caravana comenzó, el canal de Twitter oficial de la Selección Argentina publicó el recorrido, confirmando que no pasarían por el Obelisco ni por la Casa Rosada. Tras el anuncio y para las 12:15, ya había grandes grupos en Constitución. Messi, De Paul, Di María, entre las principales figuras desafiaban al sol sentados en la parte detrás del descapotable mientras sus compañeros arengaban a la multitud.

Los campeones tenían bombos, sombrillas, banderas y bebidas. Entre ellas, se encontraba el clásico “viajero”, un fernet con refresco de cola preparado en botellas cortadas. La alegría se contagiaba entre la multitud y los futbolistas. Se tiraban mutuamente espuma para festejar. La Copa Mundial pasó de mano en mano entre el plantel, quienes la alzaban frente a las personas que los saludaban y les arrojaban regalos.  

Roxana, vecina del Barrio Olímpico en CABA, cuenta a ANCCOM que lloró cuando vio pasar el micro: “Fue una locura hermosa, no hubo amontonamiento, estuvo tranquilo. Estoy embarazada, así que no me acerqué mucho, pero se veía bien. Mis hijos, que mucho no entienden, nos veían llorar y lloraban también, fue una fiesta. Estábamos desde las 12 en Autopista Ricchieri esperando y el micro pasó a las 15”.

Ariel está en el Obelisco. “Somos de La Plata, vinimos a festejar con la selección con mi hijo y mi esposa, estamos muy felices. Viví el mundial 86 y en el mundial 90 ponía fotos en el pizarrón de Sergio Goycochea atajando los penales”, relata eufórico. Agrega: “El 86 no tiene punto de comparación, esto es una fiesta”. En 1978 los jugadores no realizaron festejos ni se acercaron a la Casa Rosada, siendo el dictador Jorge Rafael Videla el único que celebró en el balcón presidencial. En cambio, en 1986 el plantel del cual Diego Maradona era parte, se acercó directamente a la Casa Rosada, donde saludaron desde el balcón a la multitud que cantaba con ellos. Según la prensa de esos años, un millón de personas se acercaron a la Plaza de Mayo.

En el Obelisco, Martín, oriundo de Wilde, se encuentra con su hijo Iván: “Viví tres mundiales, en el 78 tenía 6 años. Me acuerdo de Argentina campeón en el 86 y afirmo que soy maradoniano, aunque no comparo a Messi y Maradona. Más bien tenemos que ser agradecidos que estos dos grandes son argentinos y campeones del mundo”, asegura.

Todo es euforia y festejo. “La alegría es colectiva y estamos dentro de un paréntesis de todo lo que vive el pueblo argentino, en lo económico y en lo sanitario. Argentina es campeona del mundo con total justicia, con un cuerpo técnico extraordinario y con Lionel Messi en su mejor momento”, cuenta a ANCCOM la relatora y conductora Viviana Vila.

Emanuel y Blanca esperan ver el micro con los campeones del mundo, mientras tanto, recuerdan el festejo de Argentina campeón en el 86: “Fue parecido a esto, pero hoy se festeja de otra manera, es otra juventud, otra gente. En el 86 todavía estábamos angustiados de lo que habíamos pasado en el 78 como sociedad. Yo no dejé salir a festejar a mi sobrino, hoy la calle está llena de juventudes”. 

Unas horas antes de escribirse esta historia, en diálogo con ANCCOM, el relator y periodista Victor Hugo Morales imaginaba: “Lo que sucederá seguro será la fiesta más grande de todos los tiempos, no va a ocurrir algo que sea tan espléndido como lo que va a ser el encuentro de los jugadores con su pueblo. Un pueblo legítimamente agradecido, que ha vivido unas semanas de orgullo, de ponderación, de sueños que se hicieron realidad”. 

“Todo ha sido altamente satisfactorio para la Argentina. Se cumplió el sueño máximo. Enhorabuena, se lo merece el técnico, los jugadores, y el muy futbolero pueblo argentino”, asegura la voz que inmortalizó el segundo gol a los ingleses con un barrilete cósmico.

El seleccionado arribó al país en la cálida madrugada de martes. Miles los esperaban en las inmediaciones del aeropuerto Internacional de Ezeiza, acompañados del grupo musical de Guillermo Novellis, más conocido como La Mosca, al ritmo del ya clásico “Muchachos, ahora nos volvimo a ilusionar”. Luego, la marea celeste y blanca los acompañó hasta el predio de la AFA. Mientras tanto, la vigilia en el Obelisco no se hizo esperar con acampes improvisados desde la tarde anterior.

El “Aladino eterno», en palabras de Victor Hugo Morales, es Lionel Andrés Messi Cuccittini, el máximo jugador con presencia en las Copas del Mundo. El jugador se encuentra en cuarto puesto entre los principales goleadores, tras superar a Pelé en el partido de la final del domingo. 

Messi fue elegido mejor jugador. Con  35 años de edad y 17 representando al seleccionado. Es el jugador que más minutos jugó dentro de la cancha. Debutó en el año 2005 contra Hungría donde permaneció tan solo 1 min 42 segundos porque lo expulsaron. Al 20 de diciembre de 2022, participó en 172 partidos y convirtió 98 goles. Pasó a Gabriel Batistuta como goleador en las Copas del Mundo. Messi se convirtió el domingo en el único futbolista hombre que hace goles en octavos, cuartos, semifinal y final en un mismo torneo. A su vez, convirtió dos goles en la final, un récord que nadie había logrado cumplir hasta el momento.

Para Victor Hugo Morales, “el fútbol tiene un genio y ese es Messi. Esto es un cuento con un final feliz donde triunfan los nobles, donde triunfa el genio. Ha sido una final estupenda, una actuación que deslumbró en el primer tiempo y que mereció la victoria en todo el desarrollo del partido. Es la mejor que yo haya recordado por lo menos de los campeonatos del mundo y que le puso una muy buena nota al balance de este mundial”.

Este 20 de diciembre la calle respira bienestar. No hay bastones ni situaciones de violencia. Solo sobre el final, la Policía de la Ciudad realizó un desmedido operativo para desalojar a cuatro personas que habían ingresado al Obelisco y terminó reprimiendo desproporcionadamente, con balas de goma y gases lacrimógenos, a un grupito de borrachos que aún quedaban en la noche, tras un día de festejos.

 El torneo, entre otras cosas, deja imágenes y videos de personas que lloran, familias enteras que se congregan en las calles para celebrar la victoria y postales de una ciudad que se viste de banderas argentinas  A 36 años de aquella vuelta que ya no será sólo una historia para que te la cuenten otras generaciones.