¿Por qué a Milei le resulta tan fácil despedir a los empleados públicos?

¿Por qué a Milei le resulta tan fácil despedir a los empleados públicos?

Ana Castellani, la exsecretaria de Gestión y Empleo Público del gobierno de Alberto Fernández reflexiona tras el despido de 15.000 trabajadores del Estado en un fin de semana. Cuestiones de hecho, limitaciones legales y problemas típicos del empleo público.

Mientras que la marea de despidos en el Estado por parte del nuevo gobierno nacional sigue en aumento y los expulsados se reúnen para organizarse, aumenta la tensión que desemboca en represión y una creciente presencia policial. Este recorte súbito conlleva también el de numerosas funciones estatales.

La desvinculación forzada de 15.000 trabajadores del ámbito público abre una serie de interrogantes sobre el funcionamiento de la administración nacional. ¿Es realmente sostenible una ola de despidos masivos de este calibre? ¿Cuáles son las medidas de prevención de las que disponemos?

ANCCOM se reunió con Ana Castellani, ex-Secretaria de Trabajo de la gestión Fernández-Fernández, para discutir sobre el funcionamiento y las cuestiones de hecho que rodean este periodo marcado por la incertidumbre.

¿Qué posibilita este manejo de la cuestión pública dentro del marco legal? ¿Qué actitud frente a la construcción previa encontrás?
Milei en campaña fue muy claro sobre lo que pensaba del Estado, de las funciones que tenía que asumir: un ámbito de acción mucho más restringido que el planteado por cualquier otra fuerza política con anterioridad. También dejó en claro lo que pensaba del empleo público: se opuso, hasta formalmente, a la realización de concursos en el marco del programa de regularización de la dependencia.
Es importante aclarar que la relación de los despedidos era totalmente formal porque es una relación de dependencia, enmarcada en la Ley de Empleo Público. Son contratos de renovación anual, no una relación informal o de dependencia encubierta. El tema es que no tiene la misma estabilidad y ha sido una herramienta que los distintos gobiernos del siglo XXI han usado de forma excesiva.
Durante nuestra gestión, cuando hicimos el diagnóstico de la situación, identificamos un problema importante: 36 mil personas que trabajaban en la administración pública con contratos en renovación hace 5 años o más. Estos cargos, evidentemente no correspondían a un proyecto transitorio, sino para cumplir tareas sustantivas. Para eso diseñamos un plan de concursos ambicioso que quedó sin efecto con la decisión del gobierno de no patrocinarlo.

Hay mucha confusión con el tema de los concursos, una demanda genuina de las personas empleadas en el sector público, que después se utiliza como demanda política, pero que tiene un problema de implementación elemental: o vas por un DNU que los pase a planta para que venga otro presidente y los saque o vas a un proceso de concursos que lleva en el mejor de los casos un año.

Ana Castellani

Y Milei trunca ese proceso…
Milei retoma el manual de los noventa. No es como el macrismo que consideraba que había ingresado militancia al sistema que había que purgar, la grasa militante. El Estado, que hoy tiene 76 organismos descentralizados, según ellos no tiene que existir y hay que echar gente bajo distintos contratos. Si están bajo el régimen de Ley de Contrato de Trabajo, hay que indemnizarlos. Por eso es más fácil ir contra los llamados Artículo 9, porque son los de menor costo económico. Sencillamente se desvinculan por cese de contrato, más allá de que después haya embargos colectivos y acciones individuales. Pero eso no pasa con todas las reparticiones: había gente vinculada hace 30 años y fue desvinculada a las apuradas, sin ningún registro ni análisis.

Parece que la idea es barrer con todo y después ver cómo seguir… ¿Cómo hacer para seguir avanzando ante tanta incertidumbre?

Lo que pase en empresas regidas por la Ley de Contrato de Trabajo es una cosa. Necesitás pasar por el Congreso. Lo de una dependencia de un ministerio es otra cosa, porque se enmarca en el empleo público. Es muy importante aclarar que no se pone a la gente en la planta de la Administración Pública Nacional. La Ley estipula que solo se ingresa a la planta permanente por un mecanismo de selección abierto, donde el mérito y la idoneidad es evaluada mediante un proceso ya construido. El concurso, en el mejor de los mundos, lleva un año desde que se empieza a armar el expediente que inicia el proceso y su cierre con una designación. No es sencillo colocar a una persona en planta permanente. Hay mucha confusión con eso, porque es una demanda genuina de las personas empleadas en el sector público, que después se utiliza como demanda política, pero que tiene un problema de implementación elemental: o vas por un DNU presidencial que los pase a planta para que venga otro y los saque o vas a un proceso de concursos que lleva tiempo. No hay una varita mágica de pase a planta en la Ley Marco del Empleo Público. Si bien todo empleado público tiene garantizada la estabilidad en la Constitución, cuando tenés un marco regulatorio que establece que cualquiera de las partes puede prescindir de la otra y que presenta la posibilidad de indemnización, se presenta esta inestabilidad. La política de Milei la usa para recortar las funciones del Estado.

 

¿Es esta inestabilidad parte de la irregularidad del marco legal que le da lugar a este tipo de discursos, que estigmatizan el trabajo público?
Acá no hay ningún criterio. Se ha despedido a gente que trabajaba. Nadie puede creer que todas estas personas a las que se está despidiendo efectivamente no iban a trabajar o eran militantes. Como el empleo público es muy vasto y heterogéneo la ciudadanía solo registra que uno hace un trámite y no sabe si es de la nación, provincia o municipio. El empleado público de nación es particular: un 57% de ellos tienen estudios superiores, un porcentaje más alto que los del sector privado, y realizan tareas que requieren de alto grado de profesionalidad. El sistema político tiene que decidir el tipo de administración pública que necesita y cómo sostenerla a lo largo del tiempo. Por ejemplo, al dejar el Instituto Nacional de la Administración Pública (INAP) sin conducción, toda la oferta que dejamos construida para la capacitación queda sin implementar, porque nadie la firma y no puede ponerse en marcha.  Entonces no se quiere hacer un Estado más eficiente si no se aprovechan los recursos ya armados. No le interesa mejorar el Estado, sino privarlo de sus funciones.

¿Cuáles son los sectores más golpeados? ¿Cuáles consideras que eran más predecibles?

En primera instancia, Milei gobierna lo nacional. Indirectamente, que no manden fondos a las subdependencias también afecta el salario de sus trabajadores, pero no es una acción directa. La única herramienta federal con la que puede afectar trabajadores públicos de otros sectores es mediante la capacitación federal y eso está totalmente parado. Esta estrategia de no-gobierno es una forma de dejar morir a distintos organismos.

La ciencia y tecnología es uno de los sectores más atacados que todavía no pueden cerrar porque se crearon por ley o por decreto. Además porque tienen demasiado prestigio como para ir contra ellos de forma abierta en esta primera etapa. Pero la desfinanciación, la designación de una dirigencia de baja jerarquía, los deja sin forma de conseguir nada.

La Agencia de Promocion Cientifica y Tecnologia venía mejorando mucho a nivel instrumentos, pero ahora no está funcionando y el sistema científico queda en órbita de un Ministerio de Capital Humano que es un experimento raro, un amalgama de funciones de Trabajo, Educación, Cultura, Mujeres, Género y Diversidad, un mega ministerio imposible de gobernar, puesto a cargo de gente sin antecedentes. Esto va a presentar un problema severo para hacer que se implementen medidas desde él.

Todo gobierno tiene problemas para coordinar la acción del Estado pero este caso es realmente inédito, con muchos cargos aún sin designar y altísima cantidad de renuncias a cargos políticos de autoridad. Esto no pasó nunca, es una inestabilidad de rotación del cuadro inusitada. No es gratis cargarte gente de 15 o 20 años de antigüedad, porque cumplen funciones específicas de una trayectoria al interior del Estado. Eso explica la cantidad de errores de gestión. Esto habla de una fragilidad en la administración de la cosa pública que va a ir en aumento con el correr del tiempo.

 

¿Cómo te parece que le llega al resto de la población? ¿Ves posibilidades de un juicio político?
Es un panorama malo, pero no desolador. Las cosas buenas que tiene la Argentina son activos que no hay que destruir. En esa medida se puede construir arcos de alianza en los reclamos. Por lo demás, el mercado laboral que tenemos ya tenía problemas y ahora empieza a tener otros mayores. La gente no está mejor, eso es objetivo. En algún momento, ya pedís un resultado y sin un sendero de mejora que te dé un horizonte de posibilidad, no vas a resistir mucho.Ahí es que todo esto que fue gracioso y llamativo y le permitió a Milei llegar se vuelve totalmente en su contra: las canchereadas de los funcionarios, los paseos, los premios, los aviones… todo alimenta la indignación. Si no se resuelven los problemas materiales, es difícil que el gobierno consolide el marco de apoyo. Yo lo veo totalmente frágil. Ellos sostienen que esa fragilidad es una virtud. Yo creo que no es una virtud la fragilidad en una fuerza política, es una flaqueza del estilo de liderazgo. Si a eso le sumás la falta de trayectoria, la no posibilidad de articulación y la dinamización de estas articulaciones lo único que les queda es ir a por todo rápido, desatar un “ahora o nunca”. El fracaso de la administración se paga con disconformidad social. El juicio político vendrá después. Si vos echas 11 mil o más empleados estatales, eso se derrama en problemas sobre el sector privado, sobre todos los trabajadores. Toda esa gente entra a competir con vos por un puesto de trabajo y también baja su nivel de consumo. Estabilizar lo macroeconómico no sirve si no tenés un mercado laboral dinámico, porque solamente le sirve a los que están adentro, quienes quedan afuera del mercado laboral, ¿cómo compran alimentos?

 

¿Considerás que algún sector que no conoce el trabajo formal dio pie a este avance a nivel ideológico ?

Si en algún punto hubo sectores que tuvieron funcionamientos que habilitaron esto, no creo que esta sea la solución. Al menos debe acompañarse de cierto armado legal, porque este proceso habilita una gran cantidad de movimiento, pero deja a mucha gente desempleada en una economía ya frenada. La república tiene sus contrapesos, pero ahora no están funcionando como uno esperaría porque todavía hay una idea de que el presidente cuenta con el aval popular. No hay que estar urgido, esto no es el club del helicóptero. Independientemente de cómo le vaya en el gobierno, la llegada de Milei instala ideas muy distintas a las que creíamos parte de la identidad nacional. Esto no es un fenómeno exclusivo de Argentina. Es un fenómeno mundial, donde se corren los límites de lo posible en materia discursos. La fragilidad de la democracia que no ha sabido dar respuestas al resto de problemas cotidianos de la ciudadanía abre el juego político. Todo es cuesta arriba en la gestión. Hoy estás en el mejor momento, mañana estarás peor. La gestión es ardua y cada vez se hace más compleja. Argentina, a diferencia de otros países de la región, sigue teniendo un montón de mecanismos de solidaridad y construcción colectiva como los sindicatos. Por eso se los ataca tanto. Sin tener una visión idílica de ellos, obviamente también son conflictivos, los sindicatos son una forma poderosa de organización colectiva. Eso y los demás sectores que se organicen para hacer frente, son acciones muy importantes. La gente necesita ocuparse con tranquilidad de su vida familiar, doméstica, cotidiana. Ir a trabajar, ir al colegio, hacer un asado cada tanto, juntarse con sus amigos. Pero entre tantos paros, escasez y otros malestares, es todo palo y nada de zanahoria.

La Argentina no es una sociedad suicida. Cuando está peor, sabe decir “Ya basta”. Siempre ha sido así. No pudo la dictadura desmantelarla, con todo lo que se hizo. Así y todo se sigue dando pelea. Imagínate con un gobierno que cada dos años tiene que ver como reválida en las urnas. Ni este ni ningún otro.

El Gobierno recortó el 92% del programa que atiende a los pacientes con VIH

El Gobierno recortó el 92% del programa que atiende a los pacientes con VIH

Solo se ejecutó un 8% de los programas de prevención del VIH, de Infecciones de Transmisión Sexual y de Hepatitis Virales entre otros, que incluyen la provisión gratuita de medicamentos específicos. Denuncian faltantes de drogas e insumos.

La salud argentina es una variable más del ajuste libertario. Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), las áreas donde se notó una fuerte caída de ejecución presupuestaria interanual fueron el programa de Acceso a Medicamentos, Insumos y Tecnología Médica (-54%), el de Prevención y Control de enfermedades Transmisibles e Inmunoprevenibles (-45%) y el de Respuesta al VIH, Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), Hepatitis Virales, Tuberculosis y Lepra. Este sufrió un recorte presupuestario del 92%.

Este programa fue creado por la Ley Nacional 27675, aprobada y reglamentada en 2022 y plenamente vigente desde inicios del 2023. Gracias a esta normativa, se garantiza el acceso a la medicación y a los estudios de forma gratuita en el sistema de salud público y en el privado (obras sociales y prepagas) para todas las personas argentinas o extranjeras que lo soliciten. 

Con sólo un 8% de presupuesto con respecto al mismo periodo del año pasado, en todo el país comienza a haber faltantes. “El problema de que falte medicación es que muchas personas no pueden continuar con su tratamiento -denuncia Camila Arce, activista seropositiva-. Es una vergüenza porque no es algo caro lo que falta: la droga es genérica y se produce en un laboratorio nacional y privado”.

En este sentido, esta disputa es también por la soberanía. Lucas Fauno, periodista y activista VIH, lo sintetiza: “Cuando hablamos de VIH, hablamos de (no) producción pública de medicamentos, de ITS, de Educación Sexual Integral. La desfinanciación afecta a los medicamentos, pero también a los preservativos disponibles en todos lados y gratuitos, si hay información, cómo se está hablando de estos temas, cómo se evitan los nuevos casos y cómo es la calidad de vida de las personas con VIH. Vivir con el constante miedo de ir a retirar tu medicación y que no te la den, afecta tu salud”.

En febrero tenía que comenzar el proceso de licitación para la compra de medicamentos antirretrovirales, pero todavía Nación no inició los trámites.

En febrero tenía que comenzar el proceso de licitación para la compra de medicamentos antirretrovirales, pero todavía Nación no inició los trámites. Ante esta desidia planificada, los médicos cambian los componentes de los cócteles, arriesgando la adaptación de las personas ya en tratamiento. Además con las faltantes, se imposibilita el acceso a la biterapia, un esquema de tratamiento que reduce de tres a dos drogas.

Las provincias están tomando la responsabilidad de la compra de medicamentos faltantes para el sistema público. “En el caso Santa Fe estamos esperando una respuesta concreta del programa provincial, pero en Córdoba ya anunciaron que van a hacerse cargo de los medicamentos”, comenta Arce. Sin embargo, no todas las provincias tienen aceitada la implementación de los programas o el presupuesto necesario para hacer esta gestión.

Todas las aristas del cumplimiento de esta ley se resquebrajan. Por primera vez, A.T., una persona bonaerense viviendo con VIH hace más de una década, tuvo que pagar un copago de su obra social para hacerse los análisis semestrales. “La rutina de análisis es también para que me den los remedios. De nunca pagar nada, ahora tuve que pagar nueve mil pesos”, dice con indignación. Las personas con VIH deben testearse periódicamente para conocer el estado de su serología: si el virus no se detecta en sangre, el tratamiento está funcionando y es intransmisible. Si bien A.T. sigue recibiendo los remedios, teme por su continuidad.

“Es una situación que se repite históricamente: tenemos gobiernos neoliberales, de derecha y fascistas y esto es lo mismo que vivimos en 2017-2018”, recuerda Fauno sobre la desfinanciación en la gestión de Mauricio Macri. En ese momento, organismos como el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires presentaron pedidos de información y recursos legales para resolver las graves faltantes de medicación antirretroviral. En el 2018, el 70% de la población con VIH recibía su medicación del sector público, por lo que el Estado nacional estaba incumpliendo su obligación de garantizar el acceso y adherencia al tratamiento del mayor segmento de personas con serología positiva.

“Hay que pensar nuevas estrategias -propone Fauno-: reunirse y animarnos a disentir entre pares. También hay que pensar que no tiene que ver con VIH, sino con salud pública. Si a mí, viviendo con VIH me falta la medicación no significa que el área VIH falla, sino que está fallando el sistema de salud. En este caso, falla por la decisión de un gobierno”.

Los despedidos sean unidos

Los despedidos sean unidos

Un grupo de despedidos comenzó a reunirse en Parque Centenario para organizarse y exigir la reincorporación. Cuestionamientos a la CGT.

El sábado 6 de abril tuvo su segunda reunión en Parque Centenario el grupo Unidxs Contra los Despidos que congrega trabajadores afectados por las olas de despidos de la administración de Javier Milei, y también del sector privado. La reunión contó con una larga lista de oradores, tanto del sector público como del privado, y culminó con una votación de mociones sobre los pasos a seguir.

Entre las conclusiones de estos empleados y trabajadores está la exigencia de la realización de asambleas abiertas en todos los espacios de trabajo, el cese de los despidos y la reincorporación de quienes fueron echados, el llamado a un paro general y un plan de lucha unificado desde la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), y la denuncia del involucramiento del Grupo Techint en la Secretaría de Trabajo.

“Recibí un mail que decía que no me iban a renovar el contrato y que se me hacía la liquidación final, sin indemnización”, comentó a ANCCOM Larisa Pérez, despedida el miércoles 31 de enero de la Secretaría de Trabajo, y una de las organizadoras del grupo Unidxs Contra los Despidos. “Nosotros en la Secretaría de Trabajo sabíamos que iba a haber despidos y entre grupos de Whats App vimos que éramos como 500 en la misma situación. Hablamos con conocidos del Ministerio de Educación que también habían sido despedidos ese día y con compañeros de mi sector que aunque no fueron despedidos, solo les habían renovado el contrato por tres meses”. Pérez denunció que el fin de los despidos no es solo reducir el número de trabajadores, sino “avanzar con el plan político de la reforma laboral, con el que buscan transformar lo que queda de la Secretaría de Trabajo y del Estado para ciertos negocios». Y agrega: “Nosotros denunciamos que los funcionarios que hacen las listas de despidos no saben de qué trabajamos ni quiénes somos. Es gente de Techint con intereses en sus propias empresas, por lo que no está conectado lo que pasa dentro de la Secretaría con lo que está pasando afuera”. 

En lista de oradores estuvo el dirigente histórico del Astillero de Río Santiago y del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) José Montes, quien resistió las privatizaciones de la década del 90 bajo las administraciones de Carlos Menem y Eduardo Duhalde. “Tenemos que pensar cómo hacer para llegar a todos los sectores, convencer a los compañeros de que se puede pelear, porque solos no vamos a poder parar los ataques del gobierno. Los trabajadores somos una fuerza poderosa pero dispersa». Montes hizo hincapié en la importancia de crear una agrupación de los trabajadores desde abajo, no solo contra la administración de Milei sino también contra la burocracia sindical. En referencia a la inacción de la CGT y la CTA, Montes afirmó “son expertos en desmoralizar y dividir. Los trabajadores son la única fuerza del Estado que ni Menem ni Duhalde pudieron privatizar”.

 En consonancia con esto, Pérez afirmó: “Vemos que no hay ninguna respuesta a todos los reclamos que hicimos salvo estigmatizarnos en los medios, decir que no trabajamos, que entramos por gestiones políticas del gobierno anterior, entonces vemos que lo que surge es salir a las calles a reclamar y dar vuelta el discurso. No es solo un ataque a los trabajadores del sector público sino que también están atacando a empleados privados.”

También habló Erika Lederer, abogada y mediadora prejudicial despedida del Ministerio de Justicia, donde trabajó por once años. “Estamos luchando ante los despidos masivos, la inminencia de nuevos despidos y la restitución de nuestros puestos de trabajo”, dijo. “Realizar estos encuentros es una salida necesaria ante la burocracia sindical, a través de cuyos pulmones respira este gobierno. Los sindicatos le están dando gobernabilidad a la administración de Milei y no están tomando las medidas urgentes que hay que tomar como un paro nacional activo ya”. Lederer remarcó la importancia de visibilizar lo que está ocurriendo y la necesidad de tomar las calles. Y concluyó que “no nos deben encontrar inmóviles, los sindicatos burócratas están paralizados o haciendo un lavado de cara en actos pero no es nada más que pura retórica, en lo personal esto me encuentra de pie y no de rodillas, lucho por la reinstalación de mi puesto así como el de mis compañeros”. 

El encuentro, que duró toda la tarde, culminó con una votación abierta de propuestas. Entre los principales puntos se decidió constituirse como una asamblea unida contra los despidos, hacer un fondo de lucha y conformar una comisión de enlace para articular con compañeros de otros sectores, además de participar en una columna independiente en caso de que la CGT convoque a una movilización el primero de mayo, y coordinar una tercera reunión para el próximo sábado 13 de abril a las 12 del mediodía. 

Los científicos salen a la calle

Los científicos salen a la calle

En 62 puntos del territorio nacional, se desarrollaron festivales para defender el trabajo científico y comunicar su importancia para el desarrollo nacional.

Elijo Crecer: ciencia por Argentina, el primer festival federal de ciencia y tecnología, se desarrolló durante el fin de semana último, en 62 puntos del territorio nacional para reclamar por el financiamiento en ciencia y tecnología y repudiar los despidos en el Estado. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dos de estos encuentros se realizaron en el barrio de Caballito: uno en Parque Centenario y otro en ParqueRivadavia, sábado y domingo respectivamente. Allí, Investigadores del CONICET, trabajadores de instituciones públicas, de museos nacionales y músicos mostraron sus trabajos e investigaciones.

El evento tuvo como objetivo acompañar la lucha “por el cumplimiento de la Ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, manifestarse contra el desmantelamiento del sistema de ciencia y tecnología y contra los despidos arbitrarios en el Estado”, sostuvo en el discurso de apertura Valeria Edelsztein, una de las organizadoras del evento e investigadora del CONICET. Y agregó: “Este festival es necesario porque la ciencia nos da la posibilidad de ir hacia adelante, es el motor del desarrollo y por eso estamos acá. La producción de conocimiento es un valor y llevarla adelante es un trabajo y también queremos compartir la pasión que tenemos al hacer nuestro trabajo”.

En diálogo con ANCCOM, otra de las organizadoras e investigadora del CONICET Nadia Chiaramoni, contó que la iniciativa surgió cuando Edelsztein y ella se enteraron que un programa de comunicación pública de la ciencia daba de baja sus becas y seguía funcionando sin ellas, lo que las preocupó: “Realmente es algo horrible porque es un programa de primera para pibes que se forman y me parece que no hay nadie como un estudiante avanzado súper apasionado por lo que está haciendo que te explique la ciencia como te la explicaban ellos” y describió: “Dijimos: `Esto viene bastante difícil´. Y ahí decidimos hacer una movida que comunique la ciencia a la gente y decidimos hacerlo cerca del 10 de abril, que es el día del investigador científico”.

Chiaramoni también habló del carácter federal del festival; el hecho de que se realice, en simultáneo, en diferentes nodos, en distintas localidades del país. “Lo llamativo de los nodos es la diversidad de temas que se tocan, no es lo mismo la ciencia o las investigaciones que se hacen en Jujuy como la que se hace en Tandil, en el sur o en el conurbano de la provincia de Buenos Aires”. Y agregó: “Cada nodo tiene sus exponentes para mostrar a su comunidad. No queríamos que un investigador de CABA se vaya a Córdoba, queríamos que cada comunidad vea lo que tiene a su alrededor, que quizá no sabe que existe”. Respecto a la organización, Chiaramoni contó que los nodos se determinaron en base a las ubicaciones de los inscriptos y que se nombró un coordinador para cada nodo, con quienes ellas estuvieron en constante comunicación.

Victoria Basualdo, historiadora e investigadora del CONICET, se dedicó a estudiar durante quince años la influencia de las empresas en las violaciones de derechos humanos en Argentina. Así, junto con otros investigadores e instituciones lograron contribuir “en los juicios por delitos de lesa humanidad, ya que muchos de nosotros hemos ido a declarar y presentamos documentación sobre la represión en los lugares de trabajo”, explicó dando cuenta de la incidencia de la ciencia en los procesos de justicia. Y agregó: “Por eso, la ciencia es muy importante, porque permite reconstruir la historia y entender, en este caso, qué ocurrió con los desaparecidos trabajadores y el rol que jugaron las empresas, que no fueron casos individuales, sino que había toda una dinámica detrás”.

En la actualidad, la ciencia argentina se encuentra atravesada por el congelamiento presupuestario y los despidos en sus instituciones. Basualdo señaló: “Está muy difícil para nosotros hacer ciencia hoy, porque las condiciones que nos ofrecen son miserables y ridículas, pero vamos a pelearla igual porque creemos que hay que transformarlo y que este país no puede quedar así”. En cuanto a los despidos masivos en el Estado destacó: “La persecución de la ciencia y de muchas dependencias estatales tiene que ver con su enorme y con gente que está trabajando en líneas estratégicas. Por ejemplo, el caso de víctimas de trata: echar del Ministerio de Justicia a todo el equipo que hacía seguimiento a las víctimas de trata, gente que pasaba noche y día atendiendo teléfonos de gente que está en emergencia. Son cuestiones estratégicas”.

Además, esta situación se traslada a otros ámbitos científicos e instituciones, como en el caso de la Comisión Nacional de Energía Atómica. Tomás Avallone, empleado de dicho organismo, señaló que “actualmente el Estado no está destinando más presupuesto para que los trabajadores puedan llegar a su lugar de trabajo, como lo es en el caso de las oficinas de Ezeiza, que se encuentran lejos de los centros urbanos y por ende no hay transporte público para llegar allí. Antes teníamos micros para llegar, pero desde el lunes ya no van a estar. O sea que ni siquiera se está cumpliendo con lo básico, que es poder ir a nuestros puestos de trabajo. Y con esto se ven frenadas un montón de actividades complejas y difíciles: hay un montón de cuestiones regulatorias alrededor de las actividades para que la radiación esté contenida”.

También existen instituciones que requieren de la ciencia para poder existir. La Alianza Argentina de Pacientes (ALAPA) es una organización paraguas que nuclea asociaciones y personas con enfermedades poco frecuentes. Alexis Descourvieres, miembro de ALAPA, destacó la importancia de la investigación: “Nosotros queremos resolver problemáticas de salud y un camino es que la investigación clínica estudie estos temas para que los pacientes puedan tener soluciones a sus patologías”. Y detalló la importancia del trabajo científico: “Nosotros para hacer investigación la única manera que tenemos dehacerlo es con científicos y nosotros no somos científicos, por eso los investigadores son nuestros mejores aliados”.

El festival tuvo un cierre especial el domingo en Parque Rivadavia. Había terminado de tocar la última banda del día, El Quinteto de los Muertos, y las organizadoras cantaban los números ganadores de una rifa para libros de ciencia donados por las editoriales que participaron del festival. Sin embargo, la banda no se bajaba del escenario y entre el público se repartían papeles con la letra de una canción. Al final de la rifa, las organizadoras llamaron a cantar en conjunto, al ritmo de Vení Raquel de los Auténticos Decadentes, una letra de su autoría que incluía “Hay que evitar / que puedan destruirla / Si resistimos / Ellos no pasarán” y “Hay que bancar / a la ciencia argentina / porque es un / orgullo nacional”.

“La cultura genera progreso, no el dinero”

“La cultura genera progreso, no el dinero”

Más de 200 trabajadores de la Secretaría de Cultura de la Nación fueron despedidos a fin de marzo y todas las políticas del sector han sido frenadas y desfinanciadas. Este fin de semana, realizaron un multitudinario festival en la explanada del CCK como forma de protesta.

En plena Semana Santa, tras la cena del miércoles, Jesús –así se llama– recibe un telegrama que reza: “Contrato sin posibilidad de renovación a partir de abril”. Después de 18 años se acaba de quedar sin pan y trabajo. Al igual que Lucas, que Micaela y 206 compañeros más.

“Me enteré por mail”. ”Nos avisó un compañero”. Las historias de los trabajadores de la Secretaría de Cultura de la Nación que fueron despedidos en Pascuas se repiten. En todos los casos, sin justificativos y hasta sin firma de ninguna autoridad. “Me notificaron vía mail el miércoles a las 21.30. No hay nadie que dé la cara y te diga por qué motivo estamos despedidos”, afirma Lucas Cabrera, coordinador de Logística de la Dirección Nacional de Diversidad y Cultura Comunitaria y delegado de ATE Capital. “No saber cómo le voy a poner un techo sobre la cabeza a mi familia y cómo voy a pagar la comida es desolador”, agrega.

Cabrera hace casi 10 años que se desempeñaba en la Secretaría. Su tarea estaba abocada al trabajo territorial asistiendo en la producción y traslado de docentes y artistas para que puedan llegar a los eventos que organizaba la dependencia. “Todas las políticas culturales están frenadas desde que esta gestión asumió”, remarca. La cantidad de despedidos de la Secretaría de Cultura ya son 248. En diciembre fueron 40, y en Semana Santa 208. Algunos se enteraron días después porque no tenían acceso al Sistema de Gestión Documental Electrónica (GDE) y no podían ingresar a su casilla de correo.

El vaciamiento y la desfinanciación de la gestión libertaria también incluye la falta de presupuesto y de elementos de trabajo. “Hace tres meses que estamos sin caja chica, no tenemos recursos y dependemos de los insumos que fueron comprados el año pasado”, explica Gabriela Castro, trabajadora del Museo de Bellas Artes.

Desde 2006, el Programa de Orquestas “Andrés Chazarreta”, que depende de la Secretaría de Gestión Cultural, enseña a tocar instrumentos a niños, niñas y adolescentes de los barrios populares. Jesús Edgar Colque enseña en la orquesta “El Tambo” de Isidro Casanova, y tras 18 años de docencia fue uno de los cuatro profesores que recibió el telegrama de despido el miércoles por la noche: “Milei dijo que los recortes iban a ser para la casta. Yo no soy de la casta, y tampoco fueron a ver el trabajo social que hacemos. Ellos pueden ir a Isidro Casanova y comprobarlo. El objetivo era llegar a lugares muy carenciados, donde los chicos no tengan acceso a un profesor de música ni un instrumento. Hoy muchos chicos han encontrado el amor por la música y hasta son profesores de orquestas”, cuenta Jesús Colque.

Micaela Fernández fue una de las alumnas que participó del programa orquestal. Hace dos años que es profesora de contrabajo y también fue despedida. Respecto a la posibilidad de revertir los despidos a docentes, dice que es difícil conseguir una mesa de diálogo y que esta dilatación pone en peligro a la orquesta. “Queremos una respuesta, una justificación y ver cómo va a terminar esta situación, porque despidieron a cuatro profesores y cinco están sin renovación de contrato, es decir que la orquesta queda sin profesores”, concluye.

El sábado 6 de abril, en la explanada del Centro Cultural Kirchner (CCK), donde se encuentran las oficinas del actual secretario de Cultura de la Nación, Leonardo Cifelli, los trabajadores de la cartera en conjunto con la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) organizaron el Festival ARDE en defensa de la cultura y en reclamo por los despidos.

“Estamos generando diversas acciones junto a las y los trabajadores, asambleas en los sectores de trabajo, saliendo a la calle, a la espera que los funcionarios den la cara para poder concretar próximas mesas con ellos, que despiden y se escapan”, expresa Julia Pirani, delegada de la Junta Interna del exMinisterio de Cultura de la Nación y del Complejo Histórico Cultural Manzana de las Luces. “El plan de disciplinamiento que propone esta gestión es evidente –señala–. Dejan a 248 personas sin trabajo y afectan a cientos de personas que no trabajan en el Estado y que son parte de los programas desguazados como las y los alumnos de clases de música y de diversos talleres y actividades culturales”.

“Esta gestión no tiene ningún plan para la cultura, no existe para ellos. Es absolutamente cruel acompañar despidos con un plan económico tan devastador”, asegura el actor y comediante ‘Osqui’ Guzmán en diálogo con ANCCOM. “Lo que todavía no entienden las personas es que el Estado somos todos, te desfinancian el país para venderlo y lo mismo quieren hacer con las universidades. Ellos creen que el dinero genera progreso y es la cultura la que lo genera. Es la que hace que alguien agarre un hilo, una aguja y haga un poncho y genere progreso en la civilización. Nuestro espacio cultural es el de la lucha, no nos van a vender el país”, sentencia Guzmán.