Detienen a una familia de refugiados y la liberan

Detienen a una familia de refugiados y la liberan

Violando la normativa internacional, las fuerzas federales allanaron el domicilio de los Villalba, acusados por el Estado paraguayo. Mientras se realizaba una conferencia de prensa para denunciar la situación, los dejaron en libertad.

Durante la madrugada del viernes 12 de abril, se llevaron a cabo múltiples allanamientos de forma simultánea en los hogares de los miembros de la familia Villalba. Estos operativos fueron ejecutados con un despliegue de las fuerzas federales en las residencias de José, Rosa y Myriam Villalba, ubicadas en diferentes áreas del Gran Buenos Aires. Todos los integrantes de la familia cuentan con el estatus de refugiados, otorgado por la CONARE (Comisión Nacional para los Refugiados), y poseen documentos de identidad argentinos. A pesar de esto, Myriam, Rosa y Tania Villalba fueron detenidas con fines de extradición a solicitud del Estado Paraguayo, según lo dispuesto por el juez federal Julián Ercolini.

La familia Villalba ha sido objetivo del Estado paraguayo. En 2019, a través de una unidad militar especializada conocida como las Fuerzas de Tareas Conjuntas (FTC), creada para enfrentar grupos armados insurgentes, llevó a cabo un asalto a un campamento del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). En dicho asalto, fueron capturadas, torturadas y ejecutadas las niñas María Carmen y Lilian Mariana Villalba, para luego ser disfrazadas como guerrilleras con el objetivo que el presidente paraguayo de ese momento, Mario Abdo Benítez, pudiera fotografiarse victorioso. Tras ese operativo, también desapareció Carmen Elizabeth «Lichita» Villalba, de quien no se sabe nada desde el 30 de noviembre de 2019. Entre las allanadas el viernes se encuentran Anita y Tania Villalba, ambas sobrevivientes de la cacería librada por el Estado Paraguayo. Anita, además, es melliza de “Lichita”.

Tanto Laura Villalba –presa en Paraguay, acusada de violación del deber de cuidado, educación y violencia familiar” y por “asociación terrorista, tentativa de homicidio y portación de armas de guerra”– como Myriam Villalba, son las mamás de las dos niñas asesinadas. Cuando se produjo el allanamiento, Myriam estaba al cuidado de sus nueve niños, cuyos derecho fueron vulnerados por los uniformados hasta que fueron puestos a resguardo en la ONG Pelota de Trapo. Tania también tiene una bebé de un año y medio. La Gremial de Abogados y Abogadas hizo las gestiones judiciales e internacionales a fin de hacer cesar la detención e intentar hacer valer el refugio de toda la familia Villalba en el proceso de extradición que Paraguay pretende.

Ayer, a las 18:00 horas, se llevó a cabo una conferencia de prensa virtual –de la que participaron unas 90 personas, entre ellas los activistas de derechos humanos Adolfo Pérez Esquivel y María Elena Naddeo– con el propósito de informar sobre la detención de Myriam, Rosa y Tania, y coordinar acciones para su liberación. Gustavo Franquet, perteneciente a la Gremial y abogado de la familia Villalba, denunció: “Si la persona que es requerida, es refugiada, como lo es la familia Villalba de Paraguay, y el pedido de extradición viene de dicho país, el Artículo 20 de la Ley 24767 dice que el Ministerio de Relaciones exteriores tiene que devolverlo sin más trámite. El pedido no tendría que haber llegado al juzgado, y ni hablar de la detención”. Cuando le preguntaron sobre cuáles son las acusaciones por las que Paraguay las requiere, el letrado dijo no conocerlas porque no había tenido acceso al expediente pero insistió en que “no importan porque son refugiadas”.

El Artículo 20 de la Ley 24767 de Cooperación Internacional en Materia Penal dice que si la persona requerida poseyera condición de refugiado, y el pedido de extradición proviniera del país que motivó el refugio, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, procederá a devolver la requisitoria sin más trámite con explicación de los motivos que obstan a su diligenciamiento.

Si les revocan el estatus de refugiados, tampoco pueden ser extraditadas a Paraguay bajo ninguna circunstancia, ya que la Ley Argentina lo prohíbe terminantemente, en virtud del principio de «no devolución» que rige en el derecho internacional. Una vez que a una persona se le concede el estatus de refugiado en un país, es posible revocar ese estatus, pero no se puede retornar a esa persona al país del cual se ha refugiado. En ese caso, la intervención de la ONU sería necesaria para elegir un tercer país que pueda ofrecerles asilo.

Franquet aclaró que, apenas golpearon la puerta, Myriam pensó que intentaban robarle, debido a los «brutales golpes» en plena madrugada. «Rompieron las dos puertas, las rejas, destrozaron candados y entraron con armas en la mano, apuntando a los niños», agregó. A pocos minutos del inicio de la conferencia de prensa virtual, en la cual Franquet y Laura Taffetani de la Gremial estaban hablando desde un automóvil estacionado frente a la sede de Delitos Internacionales donde estaban las Villalba presas, ingresó al vehículo Eduardo Soares, también abogado de esa agrupación, con una sonrisa contó que no las había podido ver porque le informaron que el juzgado había dictado su liberación.

Alrededor de las 18 horas, Laura, Tania y Rosa Villalba fueron puestas en libertad. Sin embargo, la opinión preponderante de quienes integran la Campaña Internacional contra la persecución a la familia Villalba fue que este hecho “impune e ilegal que viola las leyes y el derecho internacional, representa un ataque del gobierno paraguayo, que posiblemente no sea el último”.

Mientras tanto, en Paraguay, los titulares del medio ABC Color, se refirieron a la familia Villalba como un “Clan del Ejército del Pueblo Paraguayo -EPP-”. Se lo consideró como un operativo “anti-terrorista”, al ensañarse con la familia Villalba, y definirla como un “brazo logístico del EPP”, el grupo insurgente armado paraguayo.

Condenaron al exDT del Boca femenino

Condenaron al exDT del Boca femenino

Jorge Martínez recibió un año de prisión en suspenso por abusar de la e jefa de prensa de la institución, Florencia Marco, quien llevó adelante la denuncia después de que el Departamento de Igualdad del club no se acercara a protegerla.

Este miércoles, en los tribunales de Comodoro Py, el juez Sergio Paduczak dictó sentencia por el juicio iniciado por Florencia Marco, exjefa de prensa del Club Boca Juniors, contra el exentrenador del equipo femenino, Jorge Martinez, por abuso sexual simple. El acusado fue sentenciado a un año de prisión en suspenso al ser considerado culpable y, en el plazo de tres años, deberá realizar un taller de integridad sexual, trabajos sociales y se le prohibió todo tipo de contacto con Florencia Marco, cuya denuncia fue, finalmente, escuchada. Durante cuatro horas, antes de la sentencia, las partes desarrollaron sus alegatos. 

Flor Marco llevaba once años como jefa de prensa, a cargo del cuidado de la imagen de  Boca hasta que Jorge Martinez, en enero del año 2022, asumió como DT del equipo femenino. A los dos meses de que el nuevo DT había ingresado, Marco fue víctima de abuso según se probó durante el juicio. Luego de varias situaciones de acoso verbal y físico, Florencia afirmó que el hecho tuvo lugar el 30 de marzo de 2022 cuando Martínez se acercó a ella y le tocó el glúteo derecho con la excusa de sacarle el celular del bolsillo trasero. 

Marco, en varias ocasiones, acusó a la institución de mirar para otro lado y de no protegerla. De hecho, cuando realizó la denuncia ante el Departamento de Inclusión e Igualdad de la institución, se limitaron a ofrecerle una licencia con goce de sueldo, corriendo a la víctima de su lugar laboral en vez de accionar con el acusado quién continuaba asistiendo y realizando la labor de su empleo. Tras un año de no ser escuchada, la exjefa de prensa decidió acudir a la Justicia, y, con el caso ya bajo la mirada de todo el público fue que Boca decidió tomar cartas en el asunto, desplazando de sus funciones a Martinez, al ver perjudicada la imagen del club. Sin embargo, en reiteradas ocasiones, Florencia afirmó que ninguna autoridad de la institución se comunicó con ella. ‘’El error fue minimizar todos los hechos por no saber cómo tratarlos’’, sostuvo la abogada de Marco, Andrea Lucangioli, durante el alegato.

En septiembre de 2021, Boca informó la aprobación del Protocolo de Prevención y Acción Institucional en casos de discriminación, acoso y violencia por razones de género y/u orientación sexual dentro del club; protocolo que busca sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres pero que no se puso en práctica ni protegió a la víctima, según sostuvo Lucangioli durante el juicio.

Se hizo justicia. Los gritos que se escucharon en la sala después de la lectura del fallo dejaron en claro la aprobación del público. Del lado de Marco, las mujeres que estaban allí sentadas se lanzaron hacia ella para celebrar el resultado, mientras la denunciante se fundía en un abrazo con su abogada. Entre festejos y agradecimientos, finalmente, Marco dejó la sala.

 

Con el agua al cuello

Con el agua al cuello

La zona sur del conurbano bonaerense fue noticia hace un mes por las inundaciones y los posteriores cortes de luz. Los comerciantes, que ya venían golpeados por la crisis económica, hoy no saben siquiera cómo van a afrontar el pago de los servicios.

Bocas de tormenta tapadas por basura, casas y negocios inundados y hasta el cuerpo de un hombre fallecido flotando en Valentín Alsina fueron parte del paisaje que se vio en el conurbano bonaerense hace unas semanas.

En marzo, el AMBA padeció dos fuertes temporales que rompieron el récord de precipitaciones de los últimos 17 años con 315 milímetros de agua. Tal como lo anticipó el Servicio Meteorológico Nacional antes de sendas tormentas, los partidos de Lanús y Avellaneda fueron los más perjudicados. Allí, los cortes de suministro eléctrico debido a las inundaciones y a las fuertes ráfagas de viento también alteraron la rutina de los vecinos.

Según Edesur, las cámaras subterráneas estuvieron inundadas por días y no contaban con los recursos necesarios para sacar el agua a tiempo. Como consecuencia, los barrios siguieron sin servicio aún días después de las tormentas. En promedio, los cortes en distintos barrios de Lanús duraron una semana, mientras que en Avellaneda fueron menos días. Casas particulares y comercios sufrieron no sólo por la falta de suministro sino también por la inestabilidad de la tensión eléctrica, que provocó en muchos casos roturas de electrodomésticos.

Según vecinos consultados por ANCCOM, las autoridades municipales brillaron por su ausencia. Las cuentas oficiales de Instagram y Facebook del municipio de Lanús se llenaron de comentarios que reclamaban su presencia en distintos barrios donde el agua había entrado a las casas o habían caído árboles. También había quienes pedían por la asistencia de Defensa Civil, mientras que otros reclamaban por la falta de limpieza en las alcantarillas, que causó inundaciones nunca antes vistas en ciertas intersecciones.

Tras la tormenta del 12 de marzo, la intendencia de Julián Alvarez difundió los Centros de Evacuación disponibles y videos del personal municipal limpiando los pasos bajo nivel. Las redes sociales del municipio de Avellaneda, cuyos comentarios están limitados, no publicaron nada al respecto.

Los comerciantes de la zona aducen que los anunciados aumentos de los servicios, de más del 100 por ciento en el caso de la luz, serán imposibles de afrontar, sobre todo después de estar tantos días trabajando a pérdida después de las inundaciones y los cortes.

Raúl, que tiene su peluquería hace 23 años en el barrio de Gerli, que se reparte entre Lanús y Avellaneda, confirma que ninguna autoridad municipal ni de Defensa Civil se acercó a proporcionar ayuda o a escuchar los reclamos. Su peluquería estuvo seis días sin poder trabajar de forma completa, sólo realizaban cortes de cabello bajo luces de emergencia a los clientes que podían acercarse, ya que la mayoría que tenían turno seguían estando con las calles inundadas.

“De diez turnos que tenía para ese día, se me bajaron todos. Nunca me había pasado en todos estos años”, se lamenta Raúl, quien si bien pudo reacomodar su agenda para estos días, calcula que su pérdida entre las dos tormentas de marzo fue del 60 por ciento.

A unas cuadras, del lado de Lanús, la dueña de una carnicería cuenta que estuvo sin luz durante una semana, lo que impidió que pudiera abrir su negocio. Y en voz alta se pregunta cómo va a pagar la tarifa de luz, que le subió 30 mil pesos de un mes al otro. Además, denuncia que debido a la baja tensión se le quemó una heladera del negocio y que al llamar a Edesur no hay respuesta humana, sólo la contestadora automática.

La preocupación en los comercios también está en los precios, que deben ser “retocados” todos los días. “Antes, con un corte de pelo me compraba dos kilos de carne, ahora no llego ni a uno”, afirma Raúl. La situación económica de sus clientes, que también son sus vecinos, no le permite aumentar el precio como las peluquerías de otras zonas.

“La gente consume menos, siguen viniendo porque necesitan verse bien, pero no se hacen todo el mismo día. Quizás un mes se cortan, al otro se tiñen, es todo espaciado”, explica. Lo mismo sucede en los comercios de comestibles, donde los clientes ya no compran en grandes cantidades. De un kilo de carne o fruta, se pasó a comprar por unidades.

Mónica está al frente de una zapatería familiar hace 30 años. El negocio abrió sus puertas hace 50 años en Lacarra y Caxaraville, cerca de la estación de Gerli. Por encontrarse en una avenida comercial, sólo estuvo dos días sin luz y las inundaciones no llegaron a su puerta, aunque sí a las esquinas. El aumento de tarifas tampoco llegó de manera exorbitante por el momento. Pero las ventas de comienzo de clases, en comparación a años anteriores, bajó al menos un 50 por ciento.

“No vendí ni un par de zapatos colegiales de varón, sí para nenas. Eso me llamó la atención. Igual las cosas vienen de peor calidad”, remarca. El descuento para el pago en efectivo es su jugada para convencer a los clientes indecisos, sobre todo a las familias numerosas. “El año pasado no me daban las manos para cambiar los precios, tenía la vidriera desactualizada. Ahora se calmó un poco”. Ella misma debió achicar su propia economía doméstica: “Ahora no compro por comprar. Tengo tres hijas. Antes, les compraba útiles nuevos todos los años, ahora no puedo”. Todos los comerciantes consultados de la zona coinciden en que lo que ganan no les alcanza para mantener el nivel de vida que tenían.

Cuestión de piel infantil

Cuestión de piel infantil

Las nuevas generaciones pasaron de jugar con muñecas a obsesionarse con el “skincare”, o cuidado de la piel. La obsesión de muchas niñas con productos de belleza dedicados a la piel ha permitido un gran negocio.

Resulta cada vez más llamativo el deseo de las niñas por productos para la piel influenciados por las redes sociales. “Get ready with me”, “hauls” o “mi rutina de skincare” son algunos de los reels o videos principales que utilizan influencers de Tik Tok e Instagram para publicitar diferentes productos de belleza: maquillaje, cremas, tónicos, mascarillas, masajeadores faciales, entre otros. La paradoja es que las cremas y tratamientos prometen una piel suave como la de una niña, algo que ellas ya son: “Es mucho más frecuente que niñas y adolescentes utilicen productos de cuidado de la piel desde edades muy tempranas, desde los ocho o nueve años en adelante, ya sean productos que encuentran en su casa o piden a las familias que les compren”, comenta al respecto la dermatóloga pediatra Jimena Martínez.

Actualmente, el mercado internacional de productos de belleza y cuidado personal es un negocio que no deja de incrementarse. Y la Argentina no es una excepción: según un estudio realizado por la empresa de investigación Mordor Intelligence, se estima que en 2024 se alcance los 2.770 millones de dólares y crezca a una tasa compuesta anual del 2,88% hasta alcanzar los 3.190 millones de dólares en 2029.

En el mundo, los números resultan superiores. Allied Market Research detalla que el mercado global de cosméticos se valoró en 429.000 mil millones de dólares en 2022 y prevé que alcance los 864.000 millones de dólares en 2032. Según el estudio, este incremento se debe en gran medida por el aumento del uso de internet en estos últimos años.

Los jugadores clave que forman parte del mercado elaboran estrategias de marketing en plataformas para atraer clientes específicos. Las mujeres todavía predominan como las principales consumidoras. Diferentes marcas de productos de belleza y cuidado para la piel procuran establecer campañas de marketing con influencers, en muchos casos también menores de edad, que atraen al público juvenil e infantil. Las redes sociales no solo alientan un consumo inesperado de estos productos, sino que además pueden apurar una preocupación por el envejecimiento que los niños no tienen por qué sufrir.

 

Pieles sanas

“Ya está instalado hace un par de años que inicien a edades tempranas con el cuidado de la piel” explica Jimena Martínez, quien también es pediatra. “En este último tiempo surgió en redes sociales con ‘Sephora Kids’, un negocio donde venden productos que ahora son diseñados específicamente para niños y niñas. A raíz de eso las familias vienen a consultar para orientar a sus hijas”. El impacto de la campaña de Sephora Kids generó muchísimos debates en redes sociales. De pronto, por todo el mundo, las tiendas de esta marca se convirtieron en uno de los intereses principales de las más chicas.

La especialista en dermatología infantil aclara que no suele observar daños físicos en sus pacientes por el uso de estos productos. Sin embargo, algunos con contenido abrasivo como el retinol, salicílico o glicólico resultan propensos a provocar irritación, inflamación o cambios de coloración en la piel. Sobre el fenómeno, opina: “Este aumento de preocupación en niñas y adolescentes por cuidarse la piel únicamente del rostro, porque no se cuidan la piel de todo el cuerpo, está impulsado a través del uso de redes sociales, las cuales provocan mirar videos repetidos compulsivamente. Es claro que las niñas empiezan a aprender de estos videos, al mismo tiempo que les genera una necesidad”.

Por su parte, Cristina Pascutto, médica dermatóloga y secretaria general de la Sociedad Argentina de Dermatología dirige su crítica hacia los creadores de contenido: “Hay muchísima gente que no tiene ningún tipo de capacitación o de formación profesional y aconsejan un sin número de cuidados inadecuados para la piel que realmente no son necesarios para niños o adolescentes”.

Ambas especialistas coinciden en que pieles tan jóvenes sólo deben ser cuidadas con protector solar en verano a menos que tengan alguna patología. Como mucho, Martínez recomienda una crema hidratante sin ningún activo antiage. En sus consultas prioriza el cuidado de la salud de forma integral, con el objetivo de llegar a un fin saludable y no estético. Lo que más le concierne son las consecuencias a largo plazo: “Muchas veces la imagen que se brinda en redes es una imagen distorsionada. Tiene filtros o la persona de la foto está muy maquillada. Ahí es donde la realidad se confunde. El ideal al que quieren llegar es inexistente. Trato de informar, especialmente a los adultos responsables, que los productos que se muestran en redes sociales se están vendiendo aunque parezca que no. Simplemente se realizan canjes para que del otro lado de la pantalla alguien lo quiera comprar” explica. La especialista asegura que, obviamente, está a favor del cuidado de la piel pero la práctica se está volviendo obsesiva: “Las niñas comienzan a copiar estos videos de influencers repitiendo frases sobre el envejecimiento mientras están en pleno desarrollo. Con toda esta información que están manejando, me preocupa lo que pueda llegar a pasar cuando sean adultas”, concluye.

 

Riesgos en la salud mental

Efectivamente el bombardeo constante de contenido en redes sociales es un problema que trae consecuencias. Un ejemplo concreto es el estudio realizado por Facebook sobre el impacto que genera su aplicación Instagram en millones de usuarios jóvenes. El estudio interno, publicado en un artículo del Wall Street Journal, asegura que el uso constante de estas plataformas incrementó la tasa de cuadros de ansiedad y depresión en jóvenes, mientras uno de cada tres usuarios puede desarrollar problemas con su imagen corporal. En Estados Unidos un 6% de los adolescentes informaron tener pensamientos suicidas originados por lo que ven en Instagram, mientras que en Reino Unido llega a un 13%. Si bien algunos ejecutivos de la empresa minimizan los riesgos y se niegan a hacer públicos los estudios sobre el efecto en la salud mental de los niños, es de vital importancia generar conciencia sobre sus posibles riesgos.

Diana Novominsky es psicóloga clínica y directora del centro “Vivir más liviano”, un equipo dedicado a tratar niños y adolescentes con trastornos en la imagen corporal. Al respecto señala que las redes sociales definitivamente fomentan este tipo de trastornos: “Por un lado es importante recalcar el desarrollo de una niñez donde se pueda jugar y divertirse sin tener que ocuparse de temas aún innecesarios. Sin embargo, pueden aparecer estos trastornos de ansiedad o ideales del deber ser” y agrega: “Me parece que empezar a ver ciertas características propias como defectos  adelantan todos estos problemas”. Sobre una posible “adolescencia temprana” en las niñas de esta generación Novomisky cree que el término correcto es más bien una “malformación” que “complica el desarrollo”. Considera que los padres son responsables de lo que consumen sus hijos, pero que existen otros factores culturales y generacionales que han cambiado el panorama de las infancias: “Hay cuestiones culturales a lo largo de la historia, que siempre han afectado a las mujeres, pero inevitablemente se traen a colación nuevos problemas. Por ejemplo, el tema de la autocrítica en esta generación se ha potenciado con las redes sociales. Todas las miradas parecen multiplicarse y antes eso no pasaba”, reflexiona. 

 

Captadas desde niñas

Evidentemente los avances de la tecnología permiten el bombardeo constante de contenido, que inclusive se autogenera, sobre todo en aplicaciones como Tik Tok. Estas plataformas profundizan los posibles conflictos que tienen las niñas con su cuerpo y su piel. Los mandatos del sistema patriarcal se refuerzan con internet al resultar evidente que el objetivo siguen siendo las mujeres.

“Estos productos no son juguetes” sostiene Esther Pineda, Doctora en ciencias sociales y escritora del libro “Bellas para morir. Estereotipos de género y violencia estética contra la mujer” entre otros. Pineda, plantea que “este malestar o miedo no es natural” sino “impuesto por las campañas mediáticas de productos de belleza” y afirma que: “Desde muy temprana edad les están diciendo a las niñas que su valor social y condición de mujer se organiza en torno a la belleza. Si bien esto siempre ha existido en las diferentes etapas del proceso histórico social, en la actualidad se ha profundizado como consecuencia de la hiperconexión y la ausencia de regulaciones en las redes sociales”.

Valentina Arias, también doctora en Ciencias Sociales y autora del libro “Mandar Fotitos. Mujeres jóvenes, imagen y sexualidad en la era digital” reflexiona sobre cómo ciertos mandatos se reconfiguraron estos últimos tiempos: “Funciona esta idea del cuerpo como un proyecto en donde siempre se lo puede mejorar. Y sobre lo mejorado podés mejorar más. Entonces: ¿qué vas a hacer hoy por tu cuerpo? Siempre tenemos que encontrar la manera de estar óptimas», asevera. La escritora lo describe como “generaciar el envejecimiento” donde no resulta una sorpresa que las campañas de belleza para niñas tengan tanto éxito: “Promueven ‘el hacerse cargo del propio cuerpo’ como un proyecto para aumentar el capital estético, por lo que es necesario prepararlo con la mayor anticipación posible”, remata.

Así como sucede con las infancias, las edades se van acortando en lo que respecta al uso de cirugías estéticas y en la actualidad es cada vez más usual el uso de ácido hialurónico, fillers o botox en jóvenes de 20 años. A pesar de que las rutinas de skincare en un principio parecen un juego inofensivo, resulta fundamental informarse sobre estas problemáticas para orientar no solo a los más chicos, sino también a los adultos responsables. 

Despidos que recortan derechos

Despidos que recortan derechos

El Ministerio de Justicia dejó en la calle a más de un centenar de trabajadores de los CAJ, espacios de apoyo a las comunidades de barrios populares en cuestiones judiciales, psicológicas y vinculadas al trabajo social. El recorte perjudica a miles de vecinos.

La ola de recortes de trabajadores del Estado llegó también a los Centros de Acceso a la Justicia (CAJ). Decenas de sus empleados iniciaron el fin de semana largo de Pascua con la noticia de que habían sido despedidos. Algunos no recibieron el telegrama de cesantía y recién cuando quisieron ingresar a sus lugares de trabajo se enteraron de la desvinculación. Sin una cifra oficial por parte de las autoridades, se estima que alrededor de 130 personas fueron  cesanteadas. 

Olga, de 52 años, es de San Juan. Su hija padece de anorexia nerviosa desde el año 2018; en el 2022, con un cuadro severo, llegó a pesar 35 kilos. Como no existían clínicas especializadas en su provincia, fue derivada al Hospital Durand en la Ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, allí se negaron a tratarla pese a tener obra social, que tampoco quiso cubrir su tratamiento aludiendo que no tenía residencia porteña. Estaban casi a la buena de Dios, en un lugar desconocido, en el medio de un brote de covid-19 y en una situación crítica de salud. “Casi”, porque ahí estuvo el CAJ para evitar males ulteriores.

El CAJ de Villa 31 facilitó los trámites para que una pareja de migrantes egipcios pudiesen obtener documentación tan importante para ejercer otros derechos como son los del empleo formal y la educación gratuita, una historia que marcó a Agustín Lagos, trabajador social despedido de ese Centro. “Tienen un desarrollo importante en función de dar respuesta a muchas situaciones, sobre todo la cuestión migrante”, manifestó el excoordinador del mismo CAJ, Javier Martinez. 

Desde la asesoría para tramitar la beca Progresar, hasta la atención de madres solas que padecen el incumplimiento de la cuota alimentaria, y pasando por una mediación de un conflicto entre vecinos, los CAJ son dependencias del Ministerio de Justicia de la Nación que ofrecen servicios legales básicos y sin costo. Psicólogos, trabajadores sociales, abogados y administrativos desarrollan su labor de manera conjunta en las más de 109 oficinas que están distribuidas en todo el territorio nacional. Así, constituyen un vínculo directo entre el sistema legal y la vida cotidiana, entre los derechos existentes y el pleno ejercicio de aquel que es dueño de un derecho.

“Lo mío era un caso de vida o muerte. Ellos actuaron. Todo el tiempo fue resolverlo lo antes posible y gracias a Dios mi hija todavía está conmigo. Estudia  para tripulante de cabina y está haciendo natación. Sigue con tratamiento ambulatorio. Es un antes y un después”, concluye Olga.  

Del total de empleados afectados, 21 corresponden a las oficinas de CABA: 10 administrativos, 5 abogados, 4 trabajadores sociales y 2 psicólogos. Como consecuencia,  el funcionamiento interdisciplinar se daña y las asistencias integrales a los consultantes, se dificultan. 

 Daysi es de la República Dominicana, adulta mayor con fotofobia que permaneció en la Argentina por un tiempo. Vendía ensaladas de frutas en la calle, en el barrio de Constitución. Si bien consiguió radicarse por cuestiones humanitarias, no pudo integrarse a nivel local en materia de inserción laboral, vivienda y seguridad alimentaria. La opción que vio más conveniente fue regresar a su país natal y reencontrarse con su hija. Sin la participación del CAJ de Once, no hubiese sido posible su repatriación. 

Con 13 años de servicio en el Estado nacional y hace dos años en el CAJ, pudiendo haber permanecido en un escalafón superior, una de las trabajadoras sociales despedidas, quien decidió preservar su identidad, detalla que eligió ir a desempeñar su labor a un Centro por “convicción ética y política”. Acerca del ajuste en el Estado, sostiene que “no es conmigo, es con el trabajo social en el territorio. Hago una lectura más amplia. El gobierno, simbólicamente, es un genocida social”.

“Es como que te sacan la identidad, porque primero soy trabajadora social. No solamente arruinan la parte material de un trabajador, sino la parte simbólica, psicológica, de salud mental. Lo que me angustia es que socialmente se legitime, el festejo. La tarea como sociedad empieza ahora: concientizar de que el Estado somos todos”, comentó la trabajadora social

Sobre la delicada condición de salud, Olga explicó: “Mi hija iba con un bajo peso extremo, necesitaba una internación inmediata. Empecé a buscar ayuda en la justicia y ahí es donde encuentro a esta niña [se refiere a una profesional del CAJ]  que yo le digo que es como un ángel. No tenía a nadie allá que me pueda ayudar, o sea, estaba sola;  porque no tenía dinero para contratar un abogado. Ella me guió en todo.”

En un lapso de 48 horas, a través de la mediación del Centro de Acceso a la Justicia se logró que la obra social cubriera el tratamiento. Inmediatamente, la hija de Olga entró en terapia  intensiva durante 14 días. El milagro tiene nombre: Estado presente.  

“Cuando la gente me dice gracias, yo le digo ‘gracias no, es un derecho’. Yo soy solamente una intermediaria entre la consulta, la demanda y el Estado”, argumentó la trabajadora social despedida.

La asistencia no se agotó en conseguir que una obra social cumpla sus compromisos, sino también en el trajín de haber estado cinco meses a 1500 kilómetros de distancia del hogar. El trabajo interinstitucional de los CAJ permitió que Olga pudiese seguir costeando su estadía en el hotel y hasta el remis para trasladarse junto a su hija. “Eso fue ella para nosotros, porque hay mucha gente que es profesional en distintos ámbitos, pero profesional y humano son pocos”, dice Olga.

El CAJ Eva Perón es el modelo a seguir para otros Centros. A dos cuadras de la estación Once, punto neurálgico del AMBA, es uno de los que más consultas recibe a diario. Posibilitando el trabajo interinstitucional, en un mismo edificio se encuentran otros organismos del Estado como ANSES, la Defensoría del Pueblo y RENAPER. A pesar de ello, el contrato de alquiler de la locación se vence el 15 de abril próximo y todavía no hay información acerca de su reubicación. Se trata de una problemática que afecta a varios CAJ del país. 

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hay 16 Centros de Acceso a la Justicia, y más de la mitad se encuentran en barrios vulnerables. Antes de ingresar en uno de los CAJ del barrio Padre Carlos Mugica (Villa 31), Agustín Lagos trabajó en la Agencia Nacional de Discapacidad: “Como quería volver a tener el contacto con la gente y con el territorio, hace ya dos años y medio que estaba trabajando en el CAJ de la Villa 31”, mencionó el trabajador social despedido la semana pasada.

“A mí nadie me comunicó que yo estaba desvinculado. Lo único que hicieron fue prohibirme el acceso a mi herramienta de trabajo que es el SICAJ, que es un programa propio del Ministerio de Justicia. Esa fue toda la comunicación que yo tuve y por la cual interpreto que me despidieron -especificó-. Por una lista que circulaba por WhatsApp, te enterabas si eras despedido o no. Todo bastante poco empático”.

“Antes hacía un laburo parecido pero de escritorio. Yo necesitaba conocer las historias de primera mano, que son historias muchas veces muy duras y que, obviamente, a nosotros nos cargan un montón -sostuvo Agustín-. Es tener la gratificación de poder estar cambiándole la vida a las personas con aveces un simple trámite. Eso es lo más lindo del trabajo, esa red que uno va construyendo donde los vecinos después te reconocen y toman como referencia”.

“Estas modalidades precarias en las contrataciones son un cáncer que inoculó el menemismo. Hay que decirlo: ni los gobiernos kirchneristas, ni el gobierno de Macri han logrado resolver esto, y el último gobierno tampoco. Hemos dejado un tendal de trabajadores y trabajadoras desprotegidos”, sentenció Carpineti.

La ex titular de la Dirección Nacional de Promoción y Fortalecimiento para el Acceso a la Justicia (DNPFAJ) del Ministerio de Justicia, la abogada Gabriela Carpineti, explicó la manera en que  se concretaron las desvinculaciones: “Primero les bloquearon los usuarios a los trabajadores cuando llegaban a las oficinas. No aparecían las autoridades en la sede central y no había comunicación de ningún tipo de por qué se está despidiendo, cuál era el criterio”.

Muchos despedidos no recibieron todavía sus telegramas correspondientes. El ajuste en el  Ministerio de Justicia ya habían comenzado desde finales de diciembre en el área de la Línea 137. Luego en la primera quincena de marzo  se vieron afectados otros 28 empleados de la Secretaría de Derechos Humanos (la mayoría de Prensa). Poco más de la mitad fueron reincorporados. El recorte en los CAJ resultaba inminente.

En 2008, en el marco de la reestructuración del entonces Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, fue creada la Dirección Nacional de Promoción y Fortalecimiento para el Acceso a la Justicia (DNPFAJ). En 2010 se inauguró el primer CAJ ubicado en la Villa 1-11-14 de la mano de la DNPFAJ. Así, por primera vez el Estado se propuso achicar las brechas sociales, económicas y culturales, un proceso para revertir la exclusión institucional y garantizar el conocimiento y ejercicio de los derechos.

Al respecto, Agustín Lagos amplió: “Es muy importante el acceso territorial, esa facilidad de encontrarte con la institución a la vuelta a tu casa. Sobre todo en lugares donde sabemos que, por ejemplo, muchas veces los colectivos no llegan, o que no hay acceso a internet ni buenas líneas de comunicación. Por eso, la importancia de tener el Estado cerca, principalmente en los barrios populares”. En consonancia, Gabriela Carpineti sintetizó: “Eso es el Estado, es el espacio común para resolver problemas que solos no podemos resolverlos”.  

En algunos casos, Carpineti indicó que “eran ellos mismos los que tenían que llamar a los entes para ver si seguían activos y si se les iba a depositar el sueldo”. Asimismo aclaró que “es importante remarcar que no hay despidos en el Poder Judicial ni en el Legislativo: están atacando el Poder Ejecutivo”.

Desde el inicio de la gestión de Mariano Cúneo Libarona, actual Ministro de Justicia, la actividad de los Centros se vió afectada. Al día de la fecha todavía no se nombró a ninguna autoridad para que desempeñe el cargo de Director en la DNPFAJ. El ajuste del personal del Estado comenzó desde que el Gobierno nacional publicó el Decreto N°84/2023, el cual dispuso que no se renovaran las contrataciones de personal efectuadas durante el año 2023 en todo el ámbito de la Administración Pública Nacional de acuerdo con la Ley Marco de Regulación del Empleo Público Nacional N° 25.164. Además, estableció que el 31 de marzo fuera la fecha de finalización para los contratos realizados antes del 1° de enero de 2023.

Hace más de dos décadas que se perpetúan en el ámbito estatal estos tipos de contratos. En diálogo con ANCCOM, la abogada laboralista Natalia Salvo catalogó de “fraudulentas” dichas modalidades utilizadas: se contrata personal permanente pero con una figura temporaria. Son más conocidos como ‘Contrato Artículo 9’”. Pasan los gobiernos y las relaciones laborales no se regularizan. Javier Martinez, el ex coordinador del CAJ de Villa 31, durante casi dos años trabajó ad honorem y su cargo nunca se logró gestionar. Trabajadores con más de cinco años de antigüedad que aún así fueron despedidos sin causa justificada. 

“Estas modalidades precarias en las contrataciones son un cáncer que inoculó el menemismo. Hay que decirlo: ni los gobiernos kirchneristas, ni el gobierno de Macri han logrado resolver esto, y el último gobierno tampoco. Hemos dejado un tendal de trabajadores y trabajadoras desprotegidos”, sentenció Carpineti. Consecuentemente, al momento de litigar sus puestos laborales las personas quedan en un vacío legal: “Para discutir judicialmente no es lo mismo que despidan una planta permanente, que despidan a un contratado”, agregó.

Al mismo tiempo que se descapitaliza al Estado de profesionales valiosos, Carpineti argumenta y conceptualiza que se trata de un “proceso de lumpenización del Estado para que efectivamente sucedan lo que ellos quieran: que exista un Estado ineficiente, que no nos conduzca a una prosperidad o una mejor calidad de vida y que, en definitiva, se acreciente la distancia del pueblo con el Estado”. 

“Esto es la traducción de una decisión política de achicar el Estado, empezando por lo que ellos llaman ‘gasto social’, que en realidad  es inversión social y construcción de ciudadanía” formuló la trabajadora social despedida.

Sobre la administración actual de Javier Milei, la ex directora del DNPFAJ, opinó que “nos gobiernan personas que odian el Estado, que odian a la política y que el espejo que nos devuelve no solo es el odio y la perversión de ellos, sino también uno de una perversión que tuvo causa y posibilidad de desarrollo producto de las faltas de todos los gobiernos de la democracia hasta la fecha”.  

La trabajadora social complementa: “Gabriela golpeaba puertas a gente de mucho poder queriendo intentar que la escuchen, y muchas veces le han cerrado la puerta”. 

“El problema es que se agarran de que terminó el contrato y ya está. Es el propio Estado el que precariza. Es una gran discusión que se viene dando y que es difícil de saldar”, apuntó Javier Martinez. También explica que los delegados, a través de ATE y UPCN,  aún no pudieron entablar una mesa de diálogo con los altos mandos del Ministerio. Además,  informó que ni siquiera existe todavía un interlocutor que lleve a cabo la mediación. Las reincorporaciones todavía siguen latentes.

Los despedidos sean unidos

Los despedidos sean unidos

Un grupo de despedidos comenzó a reunirse en Parque Centenario para organizarse y exigir la reincorporación. Cuestionamientos a la CGT.

El sábado 6 de abril tuvo su segunda reunión en Parque Centenario el grupo Unidxs Contra los Despidos que congrega trabajadores afectados por las olas de despidos de la administración de Javier Milei, y también del sector privado. La reunión contó con una larga lista de oradores, tanto del sector público como del privado, y culminó con una votación de mociones sobre los pasos a seguir.

Entre las conclusiones de estos empleados y trabajadores está la exigencia de la realización de asambleas abiertas en todos los espacios de trabajo, el cese de los despidos y la reincorporación de quienes fueron echados, el llamado a un paro general y un plan de lucha unificado desde la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), y la denuncia del involucramiento del Grupo Techint en la Secretaría de Trabajo.

“Recibí un mail que decía que no me iban a renovar el contrato y que se me hacía la liquidación final, sin indemnización”, comentó a ANCCOM Larisa Pérez, despedida el miércoles 31 de enero de la Secretaría de Trabajo, y una de las organizadoras del grupo Unidxs Contra los Despidos. “Nosotros en la Secretaría de Trabajo sabíamos que iba a haber despidos y entre grupos de Whats App vimos que éramos como 500 en la misma situación. Hablamos con conocidos del Ministerio de Educación que también habían sido despedidos ese día y con compañeros de mi sector que aunque no fueron despedidos, solo les habían renovado el contrato por tres meses”. Pérez denunció que el fin de los despidos no es solo reducir el número de trabajadores, sino “avanzar con el plan político de la reforma laboral, con el que buscan transformar lo que queda de la Secretaría de Trabajo y del Estado para ciertos negocios». Y agrega: “Nosotros denunciamos que los funcionarios que hacen las listas de despidos no saben de qué trabajamos ni quiénes somos. Es gente de Techint con intereses en sus propias empresas, por lo que no está conectado lo que pasa dentro de la Secretaría con lo que está pasando afuera”. 

En lista de oradores estuvo el dirigente histórico del Astillero de Río Santiago y del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) José Montes, quien resistió las privatizaciones de la década del 90 bajo las administraciones de Carlos Menem y Eduardo Duhalde. “Tenemos que pensar cómo hacer para llegar a todos los sectores, convencer a los compañeros de que se puede pelear, porque solos no vamos a poder parar los ataques del gobierno. Los trabajadores somos una fuerza poderosa pero dispersa». Montes hizo hincapié en la importancia de crear una agrupación de los trabajadores desde abajo, no solo contra la administración de Milei sino también contra la burocracia sindical. En referencia a la inacción de la CGT y la CTA, Montes afirmó “son expertos en desmoralizar y dividir. Los trabajadores son la única fuerza del Estado que ni Menem ni Duhalde pudieron privatizar”.

 En consonancia con esto, Pérez afirmó: “Vemos que no hay ninguna respuesta a todos los reclamos que hicimos salvo estigmatizarnos en los medios, decir que no trabajamos, que entramos por gestiones políticas del gobierno anterior, entonces vemos que lo que surge es salir a las calles a reclamar y dar vuelta el discurso. No es solo un ataque a los trabajadores del sector público sino que también están atacando a empleados privados.”

También habló Erika Lederer, abogada y mediadora prejudicial despedida del Ministerio de Justicia, donde trabajó por once años. “Estamos luchando ante los despidos masivos, la inminencia de nuevos despidos y la restitución de nuestros puestos de trabajo”, dijo. “Realizar estos encuentros es una salida necesaria ante la burocracia sindical, a través de cuyos pulmones respira este gobierno. Los sindicatos le están dando gobernabilidad a la administración de Milei y no están tomando las medidas urgentes que hay que tomar como un paro nacional activo ya”. Lederer remarcó la importancia de visibilizar lo que está ocurriendo y la necesidad de tomar las calles. Y concluyó que “no nos deben encontrar inmóviles, los sindicatos burócratas están paralizados o haciendo un lavado de cara en actos pero no es nada más que pura retórica, en lo personal esto me encuentra de pie y no de rodillas, lucho por la reinstalación de mi puesto así como el de mis compañeros”. 

El encuentro, que duró toda la tarde, culminó con una votación abierta de propuestas. Entre los principales puntos se decidió constituirse como una asamblea unida contra los despidos, hacer un fondo de lucha y conformar una comisión de enlace para articular con compañeros de otros sectores, además de participar en una columna independiente en caso de que la CGT convoque a una movilización el primero de mayo, y coordinar una tercera reunión para el próximo sábado 13 de abril a las 12 del mediodía.