El Centro porteño se llenó de wiphalas para protestar contra la reforma  de Morales

El Centro porteño se llenó de wiphalas para protestar contra la reforma de Morales

Unos mil comuneros y comuneras de la Quebrada y Puna jujeña protagonizan el Tercer Malón de la Paz, una marcha hacia la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, luego de pasar por Catamarca, Tucumán, Salta, Córdoba y Rosario, bajo la consigna «Arriba los Derechos, Abajo la Reforma, Arriba la Wiphala!» Reclaman contra la explotación del litio y la reforma de la Constitución de Jujuy por parte de Gerardo Morales, que pone en jaque varios derechos amparados por la Constitución Nacional.

A 77 años del Primero, el Tercer Malón de la Paz llegó a Buenos Aires en una histórica marcha liderada por comuneros y comuneras de la Quebrada y Puna jujeña, con el propósito de visibilizar y defender los derechos de las comunidades originarias. Inspirados por los ideales que guiaron el primer y segundo malón en 1946 y 2006, respectivamente, la movilización, que se inició el 25 de julio desde diversos puntos de Jujuy, ha sido una muestra de solidaridad y unidad, con comunidades de otras regiones que fueron sumándose a lo largo del trayecto. 

En cada ciudad que atravesaron, los manifestantes compartieron sus reclamos en asambleas, ampliando aún más el alcance de su mensaje y la visibilización de sus demandas cobró fuerza con el apoyo masivo de más de 500 jujeños y representantes de diversas comunidades de todo el país, quienes se unieron al contingente inicial.

El objetivo primordial de esta marcha fue exigir a la Corte Suprema de Justicia de la Nación que se pronuncie sobre la reciente reforma constitucional de Jujuy y pedir la intervención de la provincia, además de exigir la aprobación de la Ley de Propiedad Comunitaria. La movilización también se impulsa por el rechazo a la explotación minera en la región -impulsada por el gobierno provincial-, y la oposición a la nueva Constitución de Jujuy.

Al llegar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los manifestantes participaron en una sesión especial en el Congreso Nacional para presentar sus demandas. Armando Quispe, referente de la comunidad jujeña de Queta e impulsor activo de la marcha, expresó que “el objetivo fundamental del Tercer Malón es proteger la madre naturaleza, el agua, la vida y los recursos naturales”. Además, subrayó que “en Jujuy se vive una verdadera dictadura, lo que ha motivado la movilización en busca de justicia y cambio”.

Mientras la manifestación gritaba «Morales, basura, vos sos la dictadura»; Taty Almeida, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, abrazó al malón en Tribunales: «La única lucha que se pierde es la que se abandona”, sentención. Después dejó un pedido a la Pachamama: “paz y justicia”.

Nieto de maloneros

El 1 de agosto es un día histórico para el pueblo jujeño, y también una jornada significativa para la Pachamama, por eso realizaron una emotiva ceremonia en homenaje a la Madre Tierra y otras actividades culturales. Durante el ritual, Wili, uno de los primeros nietos de los maloneros de la paz que llegaron a Buenos Aires décadas atrás, se dirigió a la Madre Tierra para pedir perdón por los daños causados y expresó “la importancia de vivir con respeto, paz y amor para preservar un mejor futuro para las generaciones venideras”. Resaltó que sus antepasados “les legaron las montañas y el agua, razón por la cual están allí, ya que deben proteger los recursos naturales frente a la amenaza de ser vendidos a multinacionales”.

Finalmente, Wili abordó la situación similar que enfrentan las comunidades de Perú y brindó su respaldo, y destacó que los acontecimientos actuales están premeditados desde hace tiempo, con el propósito de afectar los valiosos recursos naturales de América Latina. 

El apoyo y respaldo a la marcha han sido significativos, con diversas organizaciones sociales y políticas brindando su solidaridad y acompañamiento como CTA-Autónoma, Movimiento Territorial Liberación (MTL), Movimiento La Dignidad, Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Corriente Clasista y Combativa (CCC), Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), representantes de las comunidades aborígenes de Perú y Bolivia, entre otros.

En tanto, el referente de la comunidad de Queta Armando Quispe Mayta aseguró que las protestas y movilizaciones son cada vez más fuertes en Jujuy. «A lo largo de la Quebrada del Humahuaca y la Puna de Jujuy están los cortes a la vera de la ruta, más allá de las marchas tanto de día como de noche, y seguirán hasta que la reforma sea anulada porque se vive una dictadura disfrazada de democracia, los derechos son avasallados y pisoteados», dijo. Quispe Mayta agregó que también están exigiendo “que se termine con la persecución y el cese inmediato de todas las medidas represivas y el sobreseimiento de las causas que hay hasta ahora» contra los manifestantes.

Anteriores “Malones”

El Malón de la Paz fue una marcha de pueblos originarios  del noroeste argentino a Buenos Aires, en demanda de la restitución de sus territorios, en 1946. Los marchantes hicieron cerca de 2.000 km para presentar sus reclamos al presidente Juan Domingo Perón. Ese malón estuvo integrado por mujeres y hombres indígenas de la puna jujeña y de los valles de San Andrés de Orán, Salta. El 3 de agosto de aquel año, fueron recibidos por los funcionarios y alojados en el Hotel de Inmigrantes. Hacia finales de ese mes fuerzas de la Prefectura los forzaron a tomar un tren a Jujuy. Hubo resistencia entonces la Policía Federal atacó el hotel con gases lacrimógenos para desalojarlos por la fuerza. Aunque es un oxímoron, los medios de aquella época habían acuñado el término Malón de la Paz, tomando el vocablo “malón” derivado del mapudungun que significa “invasión”. Se refiere a una incursión sorpresiva de los originarios atacando los asentamientos huincas, es decir, de los blancos. 

Como reacción al Malón en 1949 el gobierno nacional expropió tierras en la Puna y en la Quebrada de Humahuaca para devolverlas a sus originarios, pero esto jamás se concretó. El 7 de agosto de 2006, a 60 años del Primer Malón, una marcha de similares reclamos se organizó en Jujuy para demandar al gobierno provincial el cumplimiento de una orden judicial de retornar a las comunidades indígenas unos 15.000 kilómetros cuadrados de tierras. Fue el Segundo Malón.

La plataforma de Morales: garrote y prisión

La plataforma de Morales: garrote y prisión

Más de 40 militantes sociales fueron detenidos en la madrugada del jueves por haber participado de las protestas contra la reforma constitucional. Algunos de ellos son abogados que se hicieron presente para defender a dirigentes sociales. El avasallamiento de la autonomía universitaria.

Después de más de un mes de marchas y cortes contra la reforma constitucional de Jujuy, la violencia ordenada por el gobernador Gerardo Morales sigue creciendo. Desde que comenzaron las protestas se utilizó la fuerza policial para reprimir, y en estas últimas horas la fuerza judicial que responde al gobernador ordenó allanar y detener a más de 40 personas que participaron de las protestas. Se detuvieron a abogados, referentes sociales, sindicales y de pueblos originarios.

“Estas detenciones y allanamientos son el cumplimiento de un plan de criminalización que el gobierno provincial anunció muy claramente la semana pasada. Esto es identificar a estas personas, acusarlas de delitos graves y de múltiples delitos; de manera que esto sume muchos años de pena en expectativa y se pueda lograr que queden presas, como sedición o intento de secuestro”, explicó Manuel Tufró, director del equipo de Justicia y Seguridad del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), en diálogo con ANCCOM.

Las medidas fueron solicitadas por los fiscales jurisdiccionales y a pesar de ser arbitrarias, desproporcionadas y sin fundamentos, contaron con nulo control por parte de los juzgados de garantías. Lo que explican los abogados defensores de los detenidos es que, formalmente, en los allanamientos se buscan elementos de prueba y detener a manifestantes y dirigentes a los efectos de realizar la audiencia imputativa en la que se discutirá la imposición de prisiones preventivas.  

El 4 de julio último, el fiscal del Estado, Miguel Rivas; el ministro de Seguridad, Eduardo Casanova y el procurador general de la provincia, Sebastián Albesa, en una conferencia de prensa dejaron al descubierto los pasos que iban a seguir para criminalizar a las personas que pudieran identificar como participantes de las protestas. Este plan se encuentra subordinado a las estrategias del Poder Ejecutivo, donde el gobierno provincial se anunció como querellante en las causas. Además, pidió la unificación de todas las causas abiertas contra manifestantes, por considerar que en las protestas se produjeron supuestos hechos ilícitos que partirían de un plan orquestado y ejecutado por individuos y organizaciones políticas y sociales. Desde el CELS señalan la búsqueda de estrategias jurídicas para lograr las penas más altas posibles y la prisión efectiva inmediata de los manifestantes, ya que en general los delitos que se imputan en el contexto de manifestaciones públicas tienen penas bajas.

La abogada Alejandra Ceja, quien lleva la defensa de varios imputados, explicó en diálogo con ANCCOM que “es una continuidad desde el 17 de junio. Ayer fue en Humahuaca, 21 pedidos de detención y 21 allanamientos; y hoy en San Salvador de Jujuy 20 pedidos de detención y allanamientos a dirigentes. Hoy a la tarde salieron 12 pedidos nuevos para mujeres referentes de organizaciones y espacios gremiales”. Ceja además señaló que se están llevando a cabo detenciones a abogados, por ejercer su profesión, que han estado en los cortes y asesorando a quienes están reclamando, o hicieron presentaciones judiciales en contra de la reforma constitucional; acusándolos del delito de sedición. Desde el CELS advirtieron: “Esto constituye una escalada represiva de extrema gravedad en tanto se apunta a defensoras y defensores de los derechos humanos y se obstaculiza el derecho de defensa de los otros criminalizados.” Es por este motivo que, desde el colectivo Mario Bosch, abogadas y abogados de lesa humanidad, presentaron un Habeas Corpus colectivo y preventivo para que no sigan deteniendo personas.

Sebastián Sánchez, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), planteó en diálogo con ANCCOM: “Lo que se intenta hacer en la provincia de Jujuy es disciplinar a quién pertenece a una organización social o está disconforme con el gobierno. A través de la captación del Poder Judicial por parte de Gerardo Morales; se inventan, de alguna manera, una carátula que permita detener a los compañeros”.

Al mismo tiempo, el gobernador y precandidato a vicepresidente Gerardo Morales, acusó a los trabajadores de la sede Tilcara de la UBA de organizar las protestas y prometió detenerlos y expropiar las instalaciones que la universidad tiene en la provincia. No solo eso, las fuerzas policiales ingresaron a la sede de la Universidad Nacional de Jujuy, violando la autonomía expresada por la ley, mientras el Consejo Superior votaba el rechazo a la reforma constitucional que dio origen a las protestas sociales.

Desde organizaciones de derechos humanos, sindicatos, representantes de la UBA, integrantes del Senado Nacional y de la Cámara de Diputados, entre otras personalidades de la vida política y cultural del país, convocaron para mañana viernes 14 de julio, a las 12 horas, a una conferencia de prensa “frente a la grave situación que está viviendo el pueblo jujeño, con decenas de allanamientos, detenciones arbitrarias, causas armadas y la amenaza de expropiar la sede de la UBA de Tilcara”, señala la convocatoria.

 

La represión de Morales no cesa en Jujuy

La represión de Morales no cesa en Jujuy

Dos personas perdieron un ojo, cientos de militantes con causas judiciales y docentes con descuentos exorbitantes por participar de las huelgas son los mecanismos que utiliza el gobernador para desalentar las protestas que continúan. Ahora también criminaliza a la UBA.

Gerardo Morales y la provincia de Jujuy continúan siendo protagonistas. El 6 de julio el gobernador y precandidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio pidió condenas de 25 años y sanciones millonarias a quienes participaron de la movilización en la capital jujeña el 20 de junio pasado. Apuntó contra Milagro Sala y a quienes considera adversarios entre el amplio espectro de opositores. La abogada Alejandra Cejas, quien está haciéndose cargo de unas doce imputaciones, señala la actitud arbitraria de las acusaciones. El conflicto en la provincia comprende distintas aristas, se extiende al sector educativo y a las comunidades indígenas, perjudicadas por los magros salarios que su gobierno se niega a aumentar y su accionar represivo y vengativo.

La tensión en Jujuy no da respiro, la cantidad de consultas por Habeas Corpus se incrementa y todos pueden ser considerados sospechosos, según dice a ANCCOM la abogada Cejas. Lo sucedido hace unas semanas en la Legislatura dio lugar a más de noventa imputaciones que continúan notificándose y que representan multas millonarias. “Han escrachado en los medios a personas que no tienen absolutamente nada que ver: personas con discapacidad, de tercera edad, en situación de calle, periodistas, turistas de Buenos Aires”, dice la abogada y señala que el blindaje mediático que tiene Morales permite que nadie lo cuestione.

Sin pruebas directas a las cuales acceder, la abogada plantea que aún no puede decidir cómo será la defensa. En este sentido, recalca que son imputaciones vagas, generales y parte del supuesto de que son “al voleo, para justificar una situación de hecho que se trata de un escenario armado por el propio Gerardo Morales”. Cabe señalar, dice Cejas, que “ese 20 de junio cuando se votó la nueva constitución, a espaldas del pueblo jujeño, los únicos que estaban al tanto de la jura eran los militantes radicales y la policía, no había una noticia oficial. Los constituyentes entraron y salieron en clandestinidad. Había en las afueras de la Legislatura contenedores con piedras y policías de civil”. La única convocatoria programada era para las seis de la tarde en el Teatro Mitre, cuando los manifestantes se enteraron de lo que estaba sucediendo puertas dentro de la Legislatura se dio la situación ya conocida. En su opinión, se trató de un escenario montado por el propio gobierno.

La universidad, el nuevo enemigo

En este contexto, Morales no se privó de atacar y culpabilizar a la Universidad de Buenos Aires. “Son gente de afuera. A los de la Universidad de Buenos Aires que están a cargo de Tilcara les hice una presentación, si no me contestan los vamos a expropiar, la mayoría de sus empleados son los que incentivan los cortes, sabemos quiénes son porque ponían las camionetas de la universidad, son tremendos”, dijo al Canal 7 de la TV local al referirse, en realidad, a uno de sus métodos durante la represión, que es el uso de vehículos de empresarios beneficiados con negocios con su estado provincial. “Todos esos cometieron delitos y van a tener condenas, van a tener problemas porque le han hecho imposible la vida al pueblo jujeño”, agregó, en un nuevo ejemplo de cómo pretende detentar la suma del poder público.

Con relación a las maestras y maestros de la provincia, Andrés García, Prosecretario gremial del Centro de Docentes de Enseñanza Media y Superior (CEDEMS), dijo a ANCCOM que “se está viviendo una lucha histórica, un punto de inflexión en el conflicto porque el gobierno viene atacando con descuentos brutales e injustos por ejercer el legítimo derecho a huelga en una provincia donde los salarios están por el piso, entre los más bajos de todo el país”. Al difundir sus recibos de sueldo, los y las docentes evidenciaron que les quitaron entre 80 y 200 mil pesos de sus haberes.

Con grandes movilizaciones, un acampe frente al Ministerio de Educación en San Salvador y un paro de cinco semanas consecutivas, García señala que el gobierno intenta quebrar por hambre la lucha y reclama un paro nacional docente: “Es imperioso que se extienda la solidaridad comenzando por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) que ya tendría que estar convocando a un paro nacional. Este jueves habrá paritarias y van a estar los demás gremios docentes, el primer punto a discutir es que se reintegre lo descontado para poder avanzar con cualquier otra discusión”.   

Por otra parte, el violento accionar policial continúa generando situaciones dramáticas para las comunidades indígenas que no dejan de reclamar por sus derechos. Dos jóvenes, Misael Lamas de Purmamarca y Jorge Rodríguez de San Salvador, han sufrido la pérdida de un ojo producto de perdigones disparados hacia sus caras y frente a esto los integrantes del Tercer Malón de la Paz escribieron una carta abierta al gobernador de la provincia: “El gobierno dice que el camino no es la violencia. Sin embargo, las piedras, los perdigones, las balas de goma, los gases lacrimógenos apuntados directo a la cabeza y a corta distancia son hacia nosotros”. Publicada el sábado pasado, reclaman al gobernador Morales que en ocho años de gestión no hubo voluntad de entregar los títulos de propiedad comunitaria, a pesar de los pedidos existentes.

El Diario Abra Pampa difundió un angustioso episodio vivido por un niño de nueve años con la policía. Fue interrogado en pleno centro de esa localidad, en ausencia de su madre quien lo estaba buscando. Le preguntaron si él era uno de los que había participado del Malón y luego lo dejaron irse. “Desde el viernes me siento perseguida por la policía, pertenezco a la comunidad que está siendo también perseguida. Nos cuidamos entre vecinos” dije Mónica, mamá del niño, a ese medio sin dar más detalles sobre su vivienda e identidad.

Mientras Morales tiene la visión puesta en su precandidatura a vicepresidente de la Nación, los jujeño y las jujeñas siguen en pie de lucha pero sufriendo y enfrentándose a situaciones adversas que parecen no tener un final cercano. “Se están viviendo días muy tristes, se está avanzando sobre las libertades constitucionales”, concluye la abogada Alejandra Cejas.

Allanan la casa de Milagro Sala

Allanan la casa de Milagro Sala

En medio de las protestas y la represión, la policía jujeña ingresó al domicilio de la dirigente de la Tupac Amaru por orden de un fiscal que quiere acusarla de promover los conflictos que se generaron por la reforma constitucional que impuso el gobernador Gerardo Morales.

Así como en Jujuy continúan las movilizaciones encabezadas por docentes y pueblos originarios; el gobierno de Gerardo Morales persiste con el laboratorio represivo. Esta vez, la policía provincial allanó la casa de Milagro Sala, con la necesidad de encontrar cualquier tipo de prueba que le permita al relato oficialista de inculpar a la líder de la Tupac Amaru de la conflictividad que se está viviendo en la provincia.

“Desde el 20 de junio a la fecha, Milagro ha estado recibiendo ataques indiscriminados por parte del gobierno jujeño. Cuando ella tiene policía en la puerta, cuando está monitoreada por la tobillera, cuando nunca violó las normas que se la han impuesto por su calidad de detenida. Algo absurdo, porque ellos son los responsables de su seguridad”, comentó a ANCCOM Alejandra Cejas, abogada de Milagro Sala.

El allanamiento de este jueves por la mañana duró más de seis horas. Los policías a cargo de la operación secuestraron dinero en efectivo, documentos y dispositivos electrónicos. Con el objetivo de encontrar algún tipo de prueba que vincule a Sala con la acusación impuesta por el fiscal Diego Funes de “haber organizado y/o financiado” o “instigado” la movilización contra la reforma constitucional.

El lunes 26 de junio con la aparición de medidas no judiciales y con la falsificación de resoluciones, trataron de trasladar a la dirigente a una supuesta junta médica, cuando este tipo de revisiones se realizan siempre fijando fecha por parte del juez y con la antelación suficiente para que puedan participar peritos de ambas partes. “La evolución de la salud de Milagro no es de la mejor, lamentablemente. El tratamiento que lleva adelante con la Fundación Favaloro está informado judicialmente; y la junta médica está a la espera de lo que diga la fundación”, aclaró Cejas. “Que se disponga de su persona y de su libertad sin autorización judicial llama la atención. Es por esto que el martes 27 se presentó un hábeas corpus para que no sea trasladada”, manifestó la abogada.

El procedimiento del jueves fue bestial, rompieron paredes que sonaban huecas, no dejaban entrar a los abogados, desarmaron la estufa de la habitación donde el esposo de Milagro, Raúl Noro, se encuentra conectado a un tubo de oxígeno, transitando días delicados para su salud con una enfermedad terminal.

“Yo estaba muy tranquila porque no tengo nada, no soy como ellos. Y no encontraron nada”, comentó Sala a medios nacionales luego del allanamiento. La dirigente social lleva más de siete años detenida por participar de un acampe frente a la casa de gobierno de Jujuy. La prisión preventiva y la sucesión de acusaciones en su contra buscaron disciplinar a ella y a las organizaciones sociales de la provincia.

Esta situación llegó a su clímax con la sanción de la reforma constitucional que criminaliza al extremo la protesta social y afecta a las comunidades originarias y sus tierras. La situación derivó en una salvaje represión y persecución hacia quienes están en contra del nuevo texto. Hay casos de extrema gravedad, como allanamientos sin orden judicial a docentes y a personas discapacitadas. La policía se ampara bajo el concepto jurídico de la flagrancia utilizándolo arbitrariamente, les permite este accionar tan violento con metodologías de las épocas más oscuras que atravesó el país.

El gobierno provincial utiliza como excusa para su feroz represión y accionar la creación del enemigo externo e interno, acusando al gobierno nacional de mandar violentos y vincula a Milagro Sala con la quema de la Legislatura el pasado 20 de junio, cuando se estaba jurando la nueva carta magna. Morales había dicho que iba a presentar las pruebas de estas acusaciones en 24 o 48 horas. Luego de más de 10 días no hay ninguna prueba que vincule a gente de la Tupac Amaru, ni del gobierno nacional, con toda la violencia que está sufriendo el pueblo jujeño.

El juez Rodolfo Fernández es quien hizo lugar al pedido de allanamiento de la casa de Milagro. Se ampara en la declaración de una persona de identidad reservada, que manifestó haber recibido 300 mil pesos en efectivo por parte de Milagro Sala, para confeccionar cien banderas para la Tupac Amaru para utilizarlas el 20 de junio.

Se espera que este viernes, el ministro de Justicia, Martín Soria, presente ante la Corte Suprema de Justicia una acción declarativa de inconstitucionalidad de la reforma de la Constitución de Jujuy. De esta manera, el gobierno se hace eco de las denuncias por partes de organismos de derechos humanos locales e internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y el Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Derechos Humanos, también Amnistía Internacional y Human Rights Watch que sostuvo que “la reforma constitucional incluye limitaciones excesivas a la protesta que contradice estándares internacionales de DD HH”.

Se fueron las cámaras de Jujuy pero siguen la represión y las protestas

Se fueron las cámaras de Jujuy pero siguen la represión y las protestas

Un grupo sin uniforme de la Brigada de Investigaciones ingresó a la casa de los hermanos Domínguez, los jóvenes con discapacidad que habían sido golpeados y detenidos el día 20, se llevaron pertenencias y secuestraron a uno de ellos. También entraron al domicilio y agredieron físicamente a la actriz, bailarina y docente Camila Müller. Un grupo de las comunidades indígenas se reunió con Alberto Fernández. Continúan los cortes en la Ruta 9.

Integrantes de la asamblea de pueblos originarios representada por el Tercer Malón de la Paz se reunieron ayer a la mañana con el Presidente en la Quinta de Olivos por la fuerte represión policial que sigue buscando suprimir una intensa protesta desatada por varios sectores del pueblo jujeño contra la reforma de la Constitución que impuso el gobernador Gerardo Morales. Fernández escuchó las consecuencias perjudiciales para ellos que implica la modificación del texto constitucional, así como también denunciaron los actos de violencia policial ejercida contra manifestantes, por medio de persecuciones e imputaciones penales.

Ante el pedido de intervención en la provincia, el Presidente se limitó a decir que no podía obrar de esa forma, que se debe realizar por medio de la ley. Sin embargo, abrió camino a la posibilidad de visitar Jujuy, en el entendimiento de que la nueva Constitución quita derechos y no los garantiza. El referente de la comunidad de Ocumazo, Raúl Choquevilca, argumentó que la reforma tiene como objetivo la extinción de los pueblos originarios: “Vemos que hay quita de derechos y eso no lo vamos a aceptar. En el caso de las comunidades, estaríamos entregando nuestros territorios. Eso va a significar que las comunidades dejarán de existir. Nuestro objetivo es pelear por los lugares donde estamos asentados milenariamente”. 

Horas más tarde, la Secretaría de Derechos Humanos reclamó ante la justicia que se abra una investigación para determinar responsabilidades de los funcionarios involucrados en la violencia policial. El texto de la denuncia penal habla de “delitos que dan cuenta de una actuación organizada de manera ilícita desde las más altas cúpulas del Gobierno de la Provincia”.

En San Salvador y las principales ciudades, la mayoría de los docentes, estatales y municipales continúan en huelga, con marchas de antorchas por las noches, y al mismo tiempo la resistencia se expresaba en los cortes de rutas. Desde el miércoles, la policía jujeña no aflojaba con la represión a los manifestantes en Perico. Tanto Infantería como Caballería formaron una valla de uniformes para impedir el paso a docentes, campesinos, trabajadores y gauchos y evitar el corte de la Ruta Nacional 66. Sin embargo, agricultores, productores, docentes, vecinos, indígenas, alumnos, niños y niñas decidieron quedarse y retomar el corte por la tarde. La modalidad acordada con la Gendarmería nacional fue un corte de índole parcial, permitiendo el paso de vehículos cada 30 minutos.

Ayer, mientras la delegación de la Misión de Solidaridad Internacional y Derechos Humanos realizaba sus tareas de relevamiento de testimonios en el corte de El Pombo, en Perico, la policía provincial se presentó con una orden de desalojo. Gonzalo Armua, integrante de la delegación, explicó que las comunidades abrieron el paso pacíficamente pero igualmente fueron agredidas. Un rato antes, una manifestante dijo que “hoy el pueblo se dio cuenta, feriantes, comerciantes y vecinos de la ciudad, los presidentes de los barrios se juntaron todos para poder derribar a la policía, es la valentía de decir, gobernador escuchanos”.

Los cortes se siguen replicando en casi todas las rutas de la provincia. Sobre la 9 se mantienen activas manifestaciones en Purmamarca, Tilcara, en Uquía, en Huazadurazno, en el acceso a Iturbe, y en Abra Pampa y La Quiaca. La Ruta Nacional 52 -que conduce a Chile y es la vía por la que sale el litio, está cortada en al menos tres puntos: en su intersección con la Ruta 9, en Purmamarca, más arriba en Susques, y en Cauchari. Y en la 40 se mantiene el corte en Coranzuli, donde el tránsito se libera cada seis horas.

En los cortes, la solidaridad entre las comunidades se agiganta. La revuelta jujeña no cede. Los trabajadores de la mina El Aguilar “bajaron” hasta Purmamarca para poner el cuerpo en la protesta, luego de completar su turno de diez horas. “Dicen que los mineros somos callados, pero cuando nos joden los reventamos”, cantaban.

Era la 1.30 cuando rompieron la puerta sin orden de allanamiento e hicieron que toda la familia se tirara al piso. Con armas largas apuntaron a un chico de 6 años y esposaron a los mayores. Gritaban preguntando «dónde están los dos, dónde están los dos»

Secuestros en la madrugada

Anoche en la capital se volvieron a prender todas las alertas de las agrupaciones humanitarias. Un grupo sin identificar ingresó a la casa de la familia Domínguez y se llevó a uno de los hermanos que habían estado detenidos la semana pasada, Marco Antonio, que tiene una discapacidad motriz en las piernas. Él y su hermano Raúl Adrián, un joven con trastorno del espectro autista, fueron parte de los casi 70 detenidos del 20. Era la 1.30 cuando rompieron la puerta sin orden de allanamiento e hicieron que toda la familia se tirara al piso. Con armas largas apuntaron a un chico de 6 años y esposaron a los mayores. Gritaban preguntando «dónde están los dos, dónde están los dos». Revolvieron la casa, tiraron todo, y como no encontraban nada se decían entre ellos «negativo, negativo». Se llevaron a Marco Domínguez, junto con la novia Belen Ontiveros, de 17 años. Además, les robaron dinero, dos motos, un auto y los celulares de todos.
Eran ocho hombres y tres mujeres. Ninguno se identificó, solamente uno de ellos mostró una imagen, en el celular, donde supuestamente decía que debían llevarlo por flagrancia. Otro tenía un chaleco que rezaba “Investigaciones”. Vestían canguros, gorras comunes y barbijos.
En la madrugada de ayer, también, fue agredida en su propio domicilio por grupos similares la actriz, bailarina y docente Camila Müller. La denuncia pública fue realizada por el Instituto Nacional del Teatro y por la Asociación Argentina de actores.

ANCCOM se comunicó con Fabiola Suárez, miembro del Comité Local contra la Tortura, quien confirmó el relato digno de cuatro décadas atrás. “Estamos con eso, pero tenemos dos casos más”, dijo casi sin aliento. Horas más tarde, tras la presentación de sendos habeas corpus aparecieron Domínguez y Ontiveros.

Por su parte, Mariana Katz, abogada del Servicio Paz y Justicia (Serpaj) e integrante de la Red Interuniversitaria de Derechos Humanos, dijo a esta agencia que ese episodio se suma a otros sucesos que contribuyen a crear un clima de dictadura. “Existe un alto nivel de presión en los ámbitos de trabajo. Los amenazan que si van a las marchas de los docentes o si apoyan a los indígenas, se quedan sin trabajo. Porque además esta nueva constitución suspende las plantas permanentes, es decir, el ingreso personal nuevo, todos están en condiciones de ‘suplentes’», expresó. Katz comenzó a intervenir desde el viernes 16 de junio, cuando “la gente de las comunidades nos empezó a avisar de la represión en Abra Pampa».

Además de brindar apoyo legal, el Serpaj ha emitido cartas públicas dirigidas a las autoridades y presentado otra ante la vicepresidenta de la Convención Constituyente, junto con otras organizaciones de la sociedad civil. Sin embargo, la respuesta fue desalentadora. «No tuvimos ningún tipo de receptividad. La respuesta fue la no respuesta o la represión», lamentó la abogada.

El objetivo era visibilizar los casos de violaciones de derechos humanos en la región, tanto de sindicatos como de personas pertenecientes a comunidades indígenas. Katz y su equipo enviaron cartas al Defensor del Pueblo de la Nación, en relación al Acuerdo de Escazú –el primer acuerdo regional ambiental de América Latina y el Caribe, único en el mundo en contener disposiciones específicas sobre personas defensoras de derechos humanos en asuntos ambientales– y la falta de consulta a los indígenas sobre los recursos naturales, según lo establecido en el Artículo 75, Inciso 17 de la Constitución.

Sin embargo, la situación fue empeorando rápidamente. El 20 de junio, Katz se encontraba en Jujuy para charlar con Alicia Chalave, abogada que respalda el reclamo de las Salinas Grandes contra la extracción de litio. Y mientras estaban en la manifestación en contra de la jura de la Constitución, la represión comenzó una vez más. Katz recuerda el peligroso momento en el que tuvo que ser resguardada por la propia gente de las comunidades para proteger su seguridad. «Yo estuve ahí, a mí me tuvieron que sacar por mi seguridad, porque corría riesgo de que me metan presa». Aún así, se puso a filmar. «Mucha gente, cuando los filmaba o les preguntaba por qué estaban acá me abrazaban y me decían ‘visibiliza lo que nos está pasando’, ‘vivimos en la dictadura’ y yo decía no, no puede ser. Pero cuando me pasó a mí dije sí, es así. Jujuy hoy es una dictadura».

El Proceso Constituyente en curso también ha generado preocupación. Katz explica: «Esta constitución tiene muchas falencias técnicas. Morales no podría haber sido nunca el presidente de la Convención Constituyente según la constitución anterior, pero presidió la convención. Esto ha llevado a abogados de diferentes organizaciones, incluyendo a la comunidad indígena, a considerar acciones de inconstitucionalidad».

Alejandrina Barry, legisladora porteña del FIT-U e integrante del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (Ceprodh), estuvo en Jujuy para recopilar testimonios que arrojan luz sobre el agravamiento de las represiones sufridas por los manifestantes en comparación con años anteriores. Barry coincidió con Katz en que el régimen represivo impulsado por el gobernador Gerardo Morales «cada vez más está teniendo características de una dictadura, y lo digo con conocimiento de causa porque soy hija de desaparecidos”. Y agregó que sus compañeros del Frente fueron objeto de persecución, como la diputada Natalia Morales que fue detenida y arrastrada casi doscientos metros por acompañar a las mujeres de las comunidades. “Es una situación que se vive en todos los sectores que han intervenido en este proceso de ‘abajo la reforma’”. Por último, llamó a la movilización total en todo el país para que Jujuy pueda ganar su lucha contra la reforma y el gobernador Morales deje de perseguir y reprimir a su pueblo. “Solo un paro nacional en apoyo al pueblo jujeño puede parar esta masacre, y realmente lograr, como dicen ellos y ellas, ‘abajo la reforma y arriba los derechos’”.

Katz también convocó al compromiso colectivo de todo el país. «En todas las provincias se necesita que los porteños nos comprometamos, porque el agua que nosotros tomamos y que llega al Río de La Plata también baja de las montañas. La gente del, mal llamado, interior está protegiendo estos recursos para todos nosotros y necesitan que tomemos conciencia y nos comprometamos con ellos».

«Estábamos llevando frazadas y comida al corte de Purmamarca y se desató la represión, nos tiraron gases, balas de goma, no les importó que hubiera niños, ancianos. El gobierno de Jujuy es autoritario, es autocrático y nepotista», sostuvo Vanesa Vargas, del Tercer Malón por la Paz. Unas protagonistas, otras testigos privilegiadas, las mujeres consultadas por ANCCOM coinciden en la caracterización de la gestión del precandidato a vicepresidente, al lado del actual alcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta.