«Lo que está en discusión es una patria para todos o para unos pocos»

«Lo que está en discusión es una patria para todos o para unos pocos»

Con la UCR atravesando una crisis identitaria y el libertarismo avanzando con el DNU, el peronismo da pelea y dice no a la Ley Bases.

Mientras en el Senado de la Nación se llevan a cabo las examinaciones y disección de las bases del gobierno de Javier Milei, el peronismo intenta frenar la sanción de la ley que, en palabras del legislador porteño Matías Barroetaveña, cambiaría la forma en la que vamos a explotar nuestros recursos naturales y golpearía a los sectores más vulnerables. “¿Qué va a pasar con Vaca Muerta, por ejemplo, y qué va a pasar con nuestro sistema de Seguridad Social, con nuestros futuros jubilados? ¿Qué pasa con el trabajo en la Argentina?”, interpela.

El legislador considera que la ley trae aparejadas serias consecuencias muy concretas. Una es que aquellos grupos extranjeros que quieran explotar nuestros recursos naturales, no tengan que liquidar sus dólares ni que tengan que comprar las maquinarias acá, apostando por la industria nacional, sino que podrán ingresar sin pagar impuestos, destruyendo 300 mil puestos de trabajo en la industria metalmecánica.

“Por otro lado, aquellos adultos y adultas mayores que podían acceder a una jubilación gracias a la moratoria, un plan de pago provisional, ya no lo van a poder hacer. Siete de cada diez personas que se jubilaron este año lo habían hecho con ese mecanismo, ahora no van a tener posibilidad de jubilación. Se van a perder más de 600 trabajos registrados que hay en el sector PYMES, porque ahora esos empleados van a ser colaboradores o monotributistas, sin ningún tipo de derecho laboral. Es una ley en contra del pueblo argentino -continúa Barroetaveña-, en contra de la posibilidad de que crezcamos con trabajo y producción, y a favor de que seamos una colonia. Por eso es tan importante movilizarnos como se movilizó la gente el pasado 1º de Mayo con el contundente paro, también junto a la juventud con la masiva marcha universitaria, porque solo la movilización de nuestro pueblo logrará hacer que aquellos que dicen una cosa en los medios pero después vienen y votan otra cosa con el oficialismo, como Margarita Stolbizer, Lilita Carrió y Martín Lousteau, cambien de idea y den vuelta sus votos”.

Lorena Pokoik, diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires, postula que esta ley es completamente anticonstitucional y atenta contra toda la sociedad. “Se puede tratar de enumerar los sectores directamente damnificados, pero son realmente muchos. Por eso hemos decidido convocar a una Radio Abierta, el pasado 10 de mayo en la Plaza de los dos Congresos, a diferentes personas que representan sectores directamente damnificados por esta norma y por el DNU 70/23, para que puedan expresar lo que ya han expresado en diversas ocasiones en la Cámara de Diputados. Seguiremos luchando hasta el día de la votación para que el pueblo entienda que esta ley afecta a su vida cotidiana, atraviesa su casa, la educación de sus hijos, su centro cultural, su club, su trabajo. A muchas personas les cuesta entender qué tiene que ver todo esto, y la realidad es que impactan en su vida cotidiana”.

Las principales consecuencias

El exembajador de Argentina en El Vaticano y diputado nacional Eduardo Valdés cree que, por lo pronto, significaría la destrucción de organismos del Estado que están creados para mejorarle la vida a las personas, no para empeorársela. “Los científicos y los investigadores de la salud, los educadores, los actores de la cultura -los cuales se están suprimiendo junto a organismos indispensables para producir cultura-, serán completamente perjudicados”, dice.

“A estos sectores se suman los jubilados y trabajadores a los cuales se les impone de vuelta el régimen de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias. Además, la Ley Bases favorece a los lavadores de dinero con ese régimen de incentivo de las grandes inversiones, podrán venir con millones de dólares y comprarán la Argentina. Estos son daños concretos -añade Valdés- por eso le decimos no, no y no a la aprobación en general de esta ley”.

Por su parte, el senador Mariano Recalde, votará en contra de la ley esperando que los representantes del resto del país emulen su voto, afirmando que perjudica en gran medida a las provincias y a sus habitantes.

Las motivaciones del Gobierno

El senador Recalde sostiene que el Gobierno nacional busca imponer un modelo de país colonial, de entrega de los recursos naturales y estratégicos de las empresas del Estado a los grandes grupos económicos, a los fondos de inversión y los amigos del poder.

Pokoik afirma que la política del Gobierno conlleva la concentración del poder y la riqueza, “porque esto ya no se asemeja más a la idea de una de una nación -explica-, sino de una colonia en donde el Presidente es un representante y empleado del poder real, que en este caso no está en la Argentina, al ser las grandes corporaciones financieras transnacionales las que están detrás de esto. Se está aplicando en la Argentina un proyecto que también se está dando en otros países de Latinoamérica con el avance de las derechas. Lo que está en discusión es una patria para todos o una patria sin nación para unos pocos, donde el Presidente, pueda hacer lo que quiera, firmar lo que desee pasando por encima de lo que la Constitución establece. Por lo tanto, creemos que lo que el Presidente está buscando es tener la suma de todos los poderes para poder completar un proyecto de Colonia y destruir el Estado Nacional tal como lo conocemos”.

Los cinco diputados por la Ciudad de Buenos Aires, el senador Mariano Recalde, legisladores junto a comuneras y comuneros de Unión por la Patria acompañaron la radio abierta frente al Congreso. Peronismo por la Ciudad, La Cámpora y Nuevo Espacio de Participación también se hicieron presentes sobre la avenida Entre Ríos. La acción fue ideada por distintas organizaciones políticas de la Ciudad y diversos sectores afectados por el ajuste como jubilados, jóvenes y el movimiento de mujeres para pedir por la negativa de la ley.

 

 

Inés Molina, jubilada autoconvocada, comparte la importancia de salir a las calles para reclamar por la situación de los mayores. “Me hago presente porque soy jubilada, y porque es el cuarto gobierno del neoliberalismo que tengo sobre las espaldas. En cada uno de ellos perdí dinero y trabajo, ahora pierdo mi jubilación. Lo único que cambian son los nombres, este es el mismo liberalismo de Alsogaray, de Martínez de Hoz, de Menem, de Macri y ahora de Milei. No pueden vender al país y arruinar así a la patria, ese es mi mensaje para dirigentes y políticos del campo nacional y popular, es decir, para los peronistas que están dando vueltas, y al radicalismo, que hoy está absolutamente prostituido”.

Con un ajuste inédito y un ataque particular a las jubilaciones, llegar a fin de mes parece una guerra cotidiana. “Me ayudan mis hijos o gasto mis ahorros, pequeños ahorros que tiene un jubilado que se mudó de una casa más grande, a un departamento chiquito. Vivir de esos ahorros me produce una incertidumbre enorme porque tengo que pensar: ´¿Me voy a morir antes o después que se terminen los ahorros?´ Yo trabajé toda mi vida, en educación y salud, tengo una jubilación con 30 años de aportes, pero ahora si se aprueba esta ley las mujeres que se han jubilado por las moratorias serán las últimas en poder hacerlo”, concluye Inés.

El reino de Milei

El reino de Milei

El presidente presentó su libro y realizó un show musical en el mítico Luna Park. Sus seguidores, que llenaron el estadio, reconocen el sufrimiento económico pero se esperanzan con el sacrificio.

El presidente de la nación Javier Milei presentó su nuevo libro Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica: de la teoría política a la acción política, el miércoles 22 de mayo en el Luna Park. Lejos de seguir el formato tradicional para estos eventos, el acto fue acompañado por una banda de música cuyo cantante fue el mismísimo jefe de Estado. Al evento asistió parte de su gabinete: el vocero presidencial, Manuel Adorni; el diputado nacional por la Libertad Avanza, José Luis Espert; el ministro de Economía, Luis Caputo; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y la vicepresidenta Victoria Villarruel, entre otros. El gran ausente fue su jefe de ministros, Nicolás Posse. También lo miraban y aplaudían orgullosos desde la primera fila sus padres: Norberto Horacio Milei y Alicia Luján Lucich.

“Gracias a la Feria del Libro y a los kirchneristas. No pudieron opacar la fiesta”, fue una de las primeras frases de Javier Milei al iniciar la presentación, en referencia y volvió a denunciar un supuesto “boicot” que se le hizo en Feria Internacional del Libro, en la que el mandatario iba a presentarse el 12 de mayo pero no quería ocuparse de su seguridad como jefe de Estado. Alicia Gallach de 75 años comentó al respecto: “Yo sabía que Milei tuvo problemas con La Rural y me dio bronca porque ya se habían negado también a que se presenten ciertos escritores. No soportan la libertad de expresión”.

Después de su presentación fallida en La Rural, el Presidente redobló la apuesta y organizó su “fiesta de la libertad” privada. Previo a que se iniciara la ceremonia, hubo hombres y mujeres de todas las edades haciendo filas para conseguir las entradas que se prometieron vía redes sociales para acceder al evento postergado, convertido en un insólito show.

Desde tempranas horas de la tarde en la Plaza Roma, a unos pocos metros del Luna Park, miles de personas se agolparon para obtener el ticket que les permitiría asistir al evento. En ese amontonamiento, Cristian García, de 32 años, explicó por qué estaba allí: “De los políticos es de los únicos que me genera algún tipo de esperanza, después de lo que fue una época de retroceso. Las medidas ya hechas sinceraron lo que ya estaba sucediendo”.

El movimiento en la Plaza Roma era constante y la diversidad etaria de los asistentes, notable: hombres y mujeres mayores y adolescentes. Todos unidos por el color amarillo y violeta adoptado por la Libertad Avanza, desplegado en prendas, banderas y carteles. Muchos y muchas decidieron llevar las frases de su líder o el apoyo a él en sus remeras: “Las fuerzas del cielo”; “Apoyo total a Milei”; “Dejen gobernar, Ley de Bases ya”. La musicalización de la escena, acompañada de bombos y platillos, era constante. Y una de las canciones más escuchadas: “Vota a Milei/ ya fue/ vota a Milei”.

La performance de los jóvenes que llevaban peluches o llaveros de Pochita -el personaje de anime icónico de la motosierra que enfundó al presidente en campaña- llamaba la atención aunque no sorprendía, ya que suele ser un ícono distintivo de su público. Tampoco faltaron los patitos amarillos que se han hecho virales en el último tiempo, pero en este caso con un detalle: traían cabello, queriendo hacer referencia a la “peluca” del presidente. Adolescentes de no más de 16 años, con fiel entusiasmo militante, fueron los encargados de afiliar al partido libertario a quienes esperaban conseguir su entrada en las largas colas.

Lucas, Manuel y Agustín son estudiantes de la Escuela de Comercio-N°16. Al salir de las clases fueron directamente a Plaza Roma para conseguir sus tickets. “Yo quiero entrar y verlo, es mi ídolo, por él tengo esperanza en este país”, repetían uno tras otro. Consultados por ANCCOM mencionaron su apoyo a medidas como el “proceso de reorganización” de los medios públicos, al que, a través de un comunicado de prensa el mismo día de la presentación, el gobierno sumó la baja de sitios webs y redes sociales. “Queremos que no se gaste plata en algo que nadie ve, me parece bien que busquen solucionar el problema”, opinó Lucas Santillán.

Las famosas entradas nunca aparecieron. Muchas personas se quedaron fuera del predio, aunque a las 20.30 dejaron ingresar a gran parte de quienes no habían accedido al ticket. Ya dentro del Luna Park con las luces, música alta y gente cantando, se palpitaba que ese día Milei iba a realizar nada más ni nada menos que un show. Entre el público podía verse personas que habían asistido disfrazadas desde el famoso ratón de Disney hasta el representativo león libertario. Tras una de las tantas máscaras del león libertario se encontraba Analía Roldán, de 47 años. Su militancia desde el inicio de la carrera política de Milei la llevó hasta el Luna Park: “Quiero verlo, siempre tiene algo para decir, transmite honestidad y transparencia que no es algo común entre los políticos. Dice la verdad aunque te duela”. Además, frente a la difícil situación económica dijo: “Desde que asumió creo que todos estamos ahorcados, pero él desde un inicio avisó que iba a ajustar mucho, no me parece mal, es una forma para que no se juegue con el dinero de la gente”.

Minutos antes de que comenzara el show, la multitud del campo lanzó un rugido levantando los brazos derechos al grito de: “Viva la libertad carajo, ¡viva!”. A las 21 comenzó el espectáculo, la multitud gritó fuerte “Libertad” y acompañado al ritmo de la batería, decorada en su tambor con la imagen de Juan Bautista Alberdi. Al sonar la canción de La Renga, Panic Show, todos dieron por sentado que Milei estaba por aparecer. Fue así, pero sorprendió a todos con su ingreso entre la multitud, generando la ovación de todo el Luna Park.

Guido Barrichi, quien fue candidato a Intendente de Luján por la Libertad Avanza, conversó con ANCCOM: “Tenemos muchas expectativas, obviamente estamos acompañando a nuestro presidente. Además de la presentación del libro, este acto va a ser totalmente disruptivo y eso es a lo que nos tiene acostumbrados”. Y analizó: “Su forma de irrumpir en la política nos salvó, los políticos que estaban quedaron totalmente obsoletos, no escuchaban a la gente, y eso es lo que lo diferencia a Milei”.

El momento libro

Luego de que el presidente cante y baile por todo el escenario, se sacó el sobretodo y se ubicó detrás del atril para empezar, ahora sí, a hablar de su nuevo libro. Con terminologías económicas y la mención a los autores que admira y declama –la escuela económica austríaca que tan en boga ha puesto-, la euforia del público empezó a disminuir. Muchas personas se paraban, otras usaban el celular y abrían diferentes aplicaciones. Aunque, a la hora de festejar provocaciones, despertaban del letargo. “El problema es el Estado”; “el socialismo es la peor peste”; “los fallos del mercado”; “no la ven”; “Marx”; “C5N”, esas frases y otras hacían que el silencio del auditorio se transforme en puros gritos, festejos o abucheos.

Alicia Gallach, la señora de 75 años que hizo la cola desde  temprano, entre el público, asiente a los comentarios y gritos de la multitud: “Vine porque estoy con él, porque lo apoyo, le ruego a Dios que lo ilumine y que nos ayude a salir del fondo del abismo que nos dejó el peronismo”. A unos metros, Cristián Chapu Martínez, presidente del Movimiento Social Republicano (MSR) de Morón, explica qué significa el liberalismo popular que lleva como bandera: “Lo llamamos popular porque dejó de ser sectario, el liberalismo con Milei se masificó. Lo implementamos llevándolo a muchos lugares, una de las formas es enseñarles oficios que puedan ayudarlos a salir adelante mediante herramientas de conocimiento y no mediante el Estado”.

La entrada final

En la siguiente parte del acto, ingresó aplaudido Manuel Adorni. Se colocó detrás del atril para presentar como alguien “que la vio” a José Luis Espert, también ovacionado. Al aparecer nuevamente Milei, Adorni lo definió como “el máximo exponente de la libertad”. La tríada de hombres en traje se sentó en los sillones para seguir debatiendo sobre el contenido del libro. Al iniciar la charla sobre lo que este gobierno considera economía liberal, se escuchaba solo silencio en el estadio. Hasta que el presidente mencionó la Ley de Bases y la intención de llevar adelante más reformas que cambien la estructura del país. En ese momento, el público nuevamente se levantó para apoyar los dichos con gritos y cánticos. Guido Barrichi, quien quiso ser intendente de Luján, explicó su postura: “La Ley de Bases original era fundamental para que se puedan llevar a cabo los cambios que permitirían que la Argentina crezca realmente”. Además, el presidente de MSR de Morón afirmó: “Milei es un referente político pero sobre todo vemos un revolucionario que vino a cambiar todo, eso es lo que necesitamos”.

Milei dio por finalizado su acto a las 23, con su clásico grito: “Viva la libertad carajo”, acompañado por la canción de la Bersuit “Se viene”, que anuncia un estallido. Agitando sus manos y volviendo a correr por todo el escenario. El ambiente se tornó eufórico, todos saltaban, corrían y cantaban. No obstante, el próximo destino era la puerta de salida, para volver a enfrentar la realidad. Dejar ese espacio de alegría encapsulada, con luces y música movida se contraponía con el afuera, no tan agradable. Entre quienes salian, Cristian García comentó a ANCCOM: “Yo tengo comercios y veo como cada vez más bajan los números. Estos últimos meses fueron de los más difíciles pero hay una esperanza latente y es por eso que hoy estoy acá, es una confirmación de mi apoyo”. Una esperanza al momento encapsula, como el acto del Luna Park; ya que hasta el momento en la calle sólo se conoce aumentos en tarifas y transportes; y el índice de pobreza, que este mes alcanzó el 55 por ciento. De eso no se habló en el acto.

La crisis estalló en Misiones

La crisis estalló en Misiones

Docentes, policías y tafereros tienen en jaque a la provincia con paros, marchas y cortes de ruta. Los salarios por debajo de la línea de indigencia encendieron la mecha. El personal de la salud tomó el Ministerio. El Gobierno nacional se limitó a enviar gendarmes y prefectos.

La tensión en Misiones continúa y son cada vez más los sectores que salen a reclamar por mejoras salariales. La provincia es, hace ya varios días, el epicentro de una lucha social que se materializa a través de paros, marchas, cortes de ruta, y cánticos contra el gobierno. Hugo Passalacqua, el gobernador, no ofreció aún muchas respuestas y el Gobierno nacional se limitó a enviar efectivos de Gendarmería y Prefectura, mientras se desligó del asunto.

El lunes por la tarde, Udpm (Unión de Docentes de la Provincia de Misiones) y Sidepp (Sindicato de Docentes de Educación Pública de Gestión Privada) aceptaron el acuerdo ofrecido por el Gobierno que promedia entre el 23% y 50%, bastante por debajo del 100% exigido. Por ello, el resto de los gremios rechazaron la propuesta y continuaron con las protestas. El gobierno provincial se iba a reunir ayer por la tarde con quienes no la aceptaron pero, de manera unilateral, la administración suspendió la mesa de diálogo, empeorando la relación entre ambos. 

Un maestro misionero que recién comienza en la docencia percibe un sueldo aproximado de no más de 250.000 pesos, cifra que lo coloca por debajo de la línea de indigencia. Con el aumento prometido, esa situación no se modifica. 

La comunidad educativa viene con este reclamo hace ya varios meses, aunque estas últimas semanas escaló de manera exponencial. El pasado jueves cientos de ellos marcharon hacia la Legislatura e increparon a los diputados. Hubo forcejeos entre la policía y los maestros, quienes lograron frenar la sesión.

 El lunes por la tarde, luego de que trascendiera la noticia de que los sindicatos más allegados al poder habían pactado una cifra bastante por debajo de la reclamada, el resto de los gremios anunció un paro sin asistencia a los lugares de trabajo, por lo menos, por 48 horas. La medida, en algunos casos, se extendió hasta hoy y mañana. “Nosotros rechazamos la propuesta porque no soluciona nada. Hoy, la Policía se está levantando porque cobra 450.000 pesos y no les alcanza. Y esa misma cifra nos ofrecieron a nosotros. Es ridículo”, exclamó Rubén Ortíz, docente, historiador y Secretario General de MPL (Movimiento Pedagógico de Liberación).

Durante el día de ayer, desde bien iniciada la mañana y hasta pasadas las 18, dos columnas educativas marcharon hacia el acceso este del puente, del lado de la localidad de Candelaria. Allí se concentraron miles de personas. Luego, muchos de ellos se sumaron al reclamo de las fuerzas de seguridad en el centro de Posadas. Es decir, lejos de imaginar un acuerdo, los diferentes sectores sociales comienzan a unirse y apoyarse entre ellos, logrando así una lucha colectiva que se observa a lo largo y ancho de la provincia. “La situación ha empeorado. En virtud de que la protesta ha crecido enormemente y hoy se puede decir que todo el territorio de la provincia está paralizada”, afirmó el referente de MPL.

Esta tarde, los maestros realizarán una marcha de antorchas en la ciudad de Posadas, en las avenidas Mitre y Uruguay, a pocos metros del despliegue de las fuerzas de seguridad que ya lleva cinco días de acampe. Por otro lado, mañana se unirán al paro nacional docente convocado por los gremios de la CGT, en defensa de la educación pública. Al respecto, Ortíz agrega: “Tenemos una sola universidad pública acá en el norte, la vamos a defender a muerte. Sobre nuestros cadáveres van a cerrarla. Nosotros estamos dispuestos a todo, esto no es solo por nuestros salarios”, sentenció. 

También la policía

Si bien fueron los docentes quienes tomaron la posta de este reclamo salarial, la noticia tomó impacto nacional cuando se unió un sector impensado: las fuerzas de seguridad. 

El viernes por la madrugada, un grupo de policías autoconvocados, activos y retirados, tomaron el Comando Radioeléctrico, en el centro de Posadas, y al menos siete patrulleros cortaron la avenida Uruguay. Al igual que los docentes, reclaman un incremento del 100% en sus haberes. El sueldo más básico de un policía en la provincia de Misiones no supera los 450.000 pesos, por lo tanto entra en la línea de pobreza ya que no alcanza a cubrir ni siquiera la canasta básica.

Durante el fin de semana se especuló con un posible acuerdo entre las partes que, finalmente, no llegó a buen puerto. Según trascendió, la oferta fue del 15% contra el 100% reclamado.

La respuesta de Nación fue la creación de un Comité de Crisis, encabezado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y por el gobernador Passalacqua, para “aliviar” el descontento social. Además, la ministra decidió enviar más de 200 gendarmes a Misiones para hacerle frente a los uniformados que acampan y resisten en Posadas. De todas formas, se desligó de la problemática y resolvió que es la provincia quien debe solucionar el asunto. 

El domingo por la tarde, los efectivos se reunieron con el ministro Coordinador del Gabinete, Ricardo Ller, pero la negociación pasó a un cuarto intermedio. Hoy, miércoles, la situación sigue trabada. El Gobierno afirma haber ofrecido lo máximo posible, pero las fuerzas de seguridad continúan exigiendo, mínimamente, el doble. Además, la tensión crece por los patrulleros en la avenida principal, los policías se niegan a retirarse. Al contrario, son cada vez más, no solo de las fuerzas, sino de otros sectores. 

Por otro lado, también solicitaron una “amnistía” a los sancionados por las manifestaciones para evitar problemas a futuro. Fue en 2012 la última vez que las fuerzas de seguridad protagonizaron una situación similar. En ese entonces, arreglaron un acuerdo en los salarios y a los cinco meses comenzaron a separar a los efectivos que estuvieron involucrados. Esta vez, quieren evitar esa situación.

El fin de semana, además, se sumaron al reclamo los trabajadores de la salud. Al igual que docentes y fuerzas de seguridad, reclaman un 100% de recomposición salarial, mientras tanto los principales hospitales de la provincia se encuentran de paro desde el 18 de abril y, de momento, solo atienden emergencias.

Un trabajador del sistema de salud, con la categoría más baja, como un chófer de ambulancia o un trabajador de ordenanza, está cobrando hoy por hoy 373.000 pesos, un enfermero sin antigüedad 388.000 pesos y un médico 455.000 pesos. Todos, por debajo de la línea de pobreza.

Hasta ahora, las propuestas habían estado muy lejos de lo exigido: 16%, 20% y 22%. Pero, al contrario de lo que reclama la mayoría, muchos de los trabajadores de la salud se llevaron la sorpresa de que ayer por la tarde, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN) firmaron un acuerdo con el ministro de Salud, Héctor González, por un aumento del 18% para el mes de mayo, una suba del 10% al básico, y un 8% de equiparación salarial. Por eso, esta mañana decidieron instalar una carpa frente al Ministerio de Salud exigiendo respuestas. Una vez allí intentaron gestionar una reunión con las autoridades, pero la misma quedó trunca, generando aún más malestar. Ante esta situación decidieron ir más lejos e ingresar al edificio de manera pacífica. Allí permanecen, en la planta baja, reclamando que el Ministro los reciba. 

Uno de los sindicatos que lleva adelante esta ocupación es la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma de Misiones. Jorge Duarte, su secretario adjunto, conversó con ANCCOM, desde la toma, y se manifestó al respecto: «Los salarios de los trabajadores de la salud están por debajo de la pobreza y no llegamos ni siquiera al día 10 de cada mes. Estamos cada vez más en un círculo vicioso de endeudamiento, gastando por adelantado nuestro salario”, indicó. 

Por el momento, Héctor González les pidió la entrega de un petitorio por escrito. Los gremios ya lo entregaron y ahora aguardan una reunión mañana a primera hora.

Mientras tanto, el referente de CTA Autónoma Misiones rescata la solidaridad del pueblo misionero que, a pesar de verse imposibilitado a realizar algunas de sus tareas diarias, constantemente se acerca a los centros de acampe con alimentos y palabras de aliento.

Por otro lado, rechaza de manera tajante el accionar del Gobierno nacional: «Nosotros repudiamos la decisión de la ministra Patricia Bullrich. Repudiamos la creación de un Comité de Crisis para enviar fuerzas federales para disciplinar la protesta social. Lo que nosotros creemos necesario es la creación de un comité para resolver los problemas sociales y salariales que estamos reclamando en estos momentos”, exclamó. Al mismo tiempo, disparó directamente contra Adolfo Safrán, ministro de Hacienda provincial, a quién acusó de recibir el dinero pero no repartirlo como corresponde. 

En cuanto a los yerbateros, la situación no parece tan fácil. Al contrario, parece venir de larga data. Rubén Ortíz (MPL), además de docente es historiador y afirmó al respecto: “El productor de la yerba mate hoy está al borde del hambre porque Milei abrió las importaciones”. Y agregó: “Lo que está reventando acá en nuestra zona, en el norte de la provincia, es que la pobreza nos ha castigado de manera tremenda. El extractivismo nos mató. El salario no es lo único a resolver”, finalizó, desnudando así una problemática aún más grande que la ya planteada.

«Más allá de las cataratas y la selva -describe Duarte-, en Misiones hay una población sumergida en la pobreza, en las necesidades, sin acceso a viviendas, agua potable y cloacas», la provincia del norte del país, famosa por su tierra colorada, hoy está paralizada y siendo observada por el resto del país por los reclamos salariales de los sectores que la mantienen en pie. Por su parte, tanto el Gobierno provincial como el nacional continúan mirando para otro lado.

Los amigos de Mugica

Los amigos de Mugica

A 50 años de su asesinato a manos de la Triple A, vecinos de la Villa 31 -actuales y de otras épocas- recuerdan la vida cotidiana junto al cura de los pobres.

“Llegué a la Villa 31 a mis 12 años. Teníamos una habitación y un colchón para tres. No teníamos tele ni radio, ni siquiera cocina. Mis papás enseguida consiguieron trabajo y yo me la pasaba sola, por eso conozco la villa de punta a punta”. La que habla es Miriam Ríos, quien ahora tiene 64 años, pero recuerda su infancia en el barrio con nitidez. “Para mí la villa era una casa grande con patio. Escuchaba las campanas de la capilla porque vivía a una cuadra, por eso iba siempre a misa, y ahí fue cuando conocí al padre Mugica”, completa.

Esto fue en 1972, dos años antes de que lo asesinaran a la salida de otra misa que daba en una iglesia en el barrio porteño de  Villa Luro. “Era una persona muy tierna y cálida, todos los chicos nos peleábamos por agarrar la mano de él al rezar”, detalla Miriam.

Como ella, también están Aniceto Mogro, que tiene 70 años, y Horacio Hilario López, de 73. Los tres viven actualmente en diferentes ciudades, pero algo tienen en común: recibieron a uno de los curas villeros más influyentes de Argentina en sus primeros pasos por la Villa 31. Hoy esta historia los une y los enreda en una amistad profunda, llena de imágenes, historias y anécdotas.

ANCCOM habló con quienes conocieron a Carlos Mugica como amigo antes que como cura. Ese chico rubio, de ojos claros, porteño, que no reconocían y que con los años se volvería su compañero y confidente. Ese cura que, con el tiempo, lograría habitar un barrio que terminaría llevando su nombre.

El día es sábado. Los invitados son varios, más de veinte. El motivo es el aniversario número 50 del asesinato de Carlos, quien los vio crecer a cada uno de ellos y hoy los reúne en un almuerzo en el comedor de Teófilo “Jony” Tapia en el Barrio Mugica, más conocido como la Villa 31. Llegan de diferentes puntos de la provincia de Buenos Aires en autos, trenes y colectivos. No fue una decisión dejar de vivir allí: se tuvieron que ir, en su mayoría, al conurbano producto de la erradicación que hubo en la Villa 31 durante la última dictadura militar.

A medida que llegan se saludan y se reconocen. Los años pasaron, pero aún conservan sus apodos de la infancia, esos por los cuales también los conoció el sacedorte. Los abrazos son largos como el tiempo que pasaron sin verse. Comparten un plato caliente de estofado y una oración en nombre del padre Mugica.

Horacio recuerda la presencia de Carlos con cierta ambivalencia, como un extraño que se hacía sentir propio. “Empezó a andar como si nada, como un chabón común y corriente. Tenía una pinta de la gran puta, si vos lo veías a Carlos, te enamorabas”.  Para él, Carlos nunca pasó desapercibido, incluso dice que fue el primer cura que le cayó bien. “Como mis padres eran muy católicos, estábamos obligados a ir a misa todos los domingos, no quedaba otra. Entonces empecé a ir a la capilla del barrio, y ahí estaba siempre él”, dice.

Carlos Mugica fue muy cercano a la familia de Horacio, tanto que contrató a su madre como cocinera en su casa en el barrio porteño de Recoleta. “Mi mamá me contaba que él no entraba por la puerta principal, sino por la puerta del servicio. Y no comía con los padres; comía con mi mamá en la cocina, donde comían los sirvientes”, recuerda.

Pelota y corazón

Si había algo que compartían los chicos de la 31 con Carlos, además de los días en la capilla, era el fútbol. Incluso este los solía invitar a jugar y pasar la tarde en su casa en Recoleta. En la cancha no importa quién sos y eso se notaba en estos partidos, que solían volverse calientes y con rispideces. “Me acuerdo que una vez alguien le pegó una patada fuertísima, y él se enojaba, incluso casi que llegaba a putear, pero al instante decía ´perdoname Señor’, juntando sus manos y mirando al cielo. Nos hacía reír a carcajadas todos”, dice Horacio.

Carlos Mugica le regaló sus primeros botines. “Yo me estaba probando en Racing y trabajaba en un mercadito sobre Las Heras y Pueyrredón. Él vivía en la esquina, entonces todos los días lo cruzaba a Carlos. Cada vez que me veía, me gritaba: ‘Dale, negrito, ¿vos sabés lo lejos que vas a llegar?’”. A su vez, lo describe como “un tipo sensible, tranquilo, que se cagaba de risa y contaba chistes”. La vocación de Carlos estaba dentro de la capilla, pero no era solo eso: pensaba actividades por fuera de ella y con los chicos, como cualquier grupo de amigos. “Él siempre decía: ‘Terminé de ser cura. Me saqué la sotana. Ahora soy Carlos’”, agrega Horacio.

Foto con historia

“Hay una foto que apareció muchos años después, o por lo menos yo la descubrí muchísimo después de su muerte. No sabemos ni quién la sacó”, relata Aniceto. “Fue un domingo a la tardecita. Inicios de los 70, éramos chicos y nos dice: ‘Che, chicos, ¿no quieren venir a ver una película?’”. En ese momento íbamos seguido a cines que estaban ubicados sobre la calle Lavalle o Florida. No me acuerdo el nombre de la película, pero era sobre la historia de un cura que trabajaba en las favelas. Lo que me acuerdo es que él se quedó con nosotros y la vimos todos juntos”.

Otra vez, pero ahora desde las palabras de Aniceto, aparece una manera ambivalente a la hora de describir a Carlos: “Era distinto, no sé cómo decirlo, era un loco lindo, revolucionario. Él se dio cuenta que era parte de todo esto de lo que también éramos parte nosotros”.

Ni santo ni héroe

“Carlos era primero ser humano, y después hijo de Dios. No te puedo decir que fue un santo, fue un ser humano que realmente vivió para la gente, que entregó la vida para la gente”, dice Horacio entre lágrimas. “Yo era muy chico cuando lo conocí, pero a medida que fui creciendo, tuve esa imagen de grandeza de él, de que no caminaba al divino cohete, sino que caminaba de verdad”. Tenía recién 10 años cuando conoció a Mugica, pero con el tiempo identificó que no se trataba solo de un cura. “Desde el primer día que vino empezó a hablar con todo el mundo: o te juntabas por fútbol, o por religión, o por política. Carlos era todo junto”, dice. Por su parte, Aniceto complementa: “Yo siempre agradezco la política, no la política en sí, sino la llegada de Carlos. A medida que nos íbamos involucrando, había una sensación de que había que estar”.

La muerte de Carlos fue impactante, pero no inesperada. Las amenazas comenzaron cuando renunció como asesor de Villas en el Ministerio de Bienestar Social. En un principio, Carlos había asumido el cargo ad honorem en representación de los vecinos de la 31. Uno de los objetivos que tenía, era llevar a cabo la construcción de viviendas y que sean los propios vecinos quienes participen de las obras organizados en cooperativas populares. Pronto esta idea entró en conflicto y trajo discrepancias y enfrentamientos con el ministro -y jefe de la Triple A- José López Rega, ya que este quería que la construcción de las viviendas quedase a cargo de empresas privadas.

 Mugica fue asesinado poco después de esa renuncia. Luego de salir de la parroquia porteña San Francisco Solano, un integrante de la Triple A lo mató con 14 disparos de  ametralladora, tal como demostró la Justicia argentina. El crimen anticipaba una época sangrienta que terminaría de tomar forma con la última dictadura militar de nuestro país en 1976.

La memoria

Sus amigos conservan los recuerdos de una manera difusa. Algunas fechas no son exactas sino aproximadas, pero hay huellas que no se olvidan. Carlos Mugica es una especie de ausencia viva, presente en todos los que lo vieron llegar y convertirse en una de las personas más influyentes de nuestro país. Sus restos descansan en la Parroquia Cristo Obrero, ubicada en la Villa 31.

“Caros no murió, acá está muy vivo. Se fue su cuerpo, pero todo lo que dejó vive en el barrio. Es, fue y será un grande. No por su santidad, sino por su humanidad”, concluye Horacio.

A 50 años de su asesinato, el legado de Mugica sigue más presente que nunca. Es por ello que este domingo se llevará a cabo una caravana hasta el Luna Park, en Retiro, donde habrá una misa y un festival que incluirá murga y música en vivo, desde las 13 y 30.

Milei consiguió las bases para su gobierno

Milei consiguió las bases para su gobierno

La Cámara de Diputados aprobó la ley que precariza los derechos laborales con los votos de La Libertad Avanza, el radicalismo, la Coalición Cívica y Hacemos Coalición Federal. La norma, si el Senado la convalida, habilita las privatizaciones de empresas públicas, le concede al Poder Ejecutivo facultades delegadas por un año y deroga la movilidad jubilatoria. Además, vuelve el Impuesto a las Ganancias, habrá blanqueo de capitales y un regimen de grandes inversores que puede convertir a la Argentina en un paraíso fiscal.

Tras un maratónico debate que comenzó el lunes 29 de abril al mediodía, en la mañana del martes 30 la Cámara Baja aprobó de manera general la Ley de Bases con 142 votos afirmativos, 106 negativos y 5 abstenciones. Luego de cinco horas más de exposiciones destinadas a la votación en particular, La Libertad Avanza (LLA) consiguió delegar facultades al Poder Ejecutivo Nacional en materia económica, financiera, tarifaria, energética y administrativa, la capacidad de disolver organismos públicos y avanzar con las privatizaciones. Además, de instalar una reforma laboral regresiva para los derechos de los trabajadores y dar por tierra con la moratoria jubilatoria.

Con una serie de medidas que promueven la precarización laboral, se aprobó eximir a los empleadores de multas por trabajo no registrado, reemplazar las indemnizaciones por despidos por un fondo de cese laboral mediante un acuerdo entre empresarios y sindicatos, extender el período de prueba de trabajadores -que actualmente era de tres meses- hasta un año, una reforma agraria que también extiende los períodos de prueba a los trabajadores rurales, un cambio en el régimen de jubilaciones que elimina las prestaciones previsionales y amplía la edad jubilatoria.

Además, el gobierno logró la aprobación de un paquete de reformas fiscales como la reinstauración del impuesto a las ganancias, la disminución de la alícuota de bienes personales y el blanqueo de capitales.

Por otro lado, los despidos masivos también fueron considerados necesarios para impulsar este modelo económico, convirtiendo en víctimas del desempleo a una gran cantidad de empleados públicos. Este recorte del personal estatal fue ejecutado con la justificación de promover la inversión privada, para así asegurar una eficiencia económica, aliviar la carga fiscal y poder mejorar la calidad de los servicios básicos y necesarios para el crecimiento de una sociedad. Eduardo Falcone, del partido Movimiento de Integración y Desarrollo, respaldó la estrategia propuesta por el oficialismo con respecto a disminuir el gasto público y recalcó que apostando a la privatización se les garantizaría un sueldo en blanco a los empleados con los derechos laborales que esa contratación implica.

Tanto Myriam Bregman -diputada del Frente de Izquierda- como Celia Moreau -de Unión Por La Patria- coincidieron en que la aprobación de estas medidas económicas se asemejan a políticas aplicadas previamente por el ministro de la dictadura militar José Alfredo Martínez De Hoz, y que por ende, los resultados no serían beneficiosos para el pueblo argentino.

En su intervención, Bregman hizo especial hincapié en la amenaza a los derechos laborales de las mujeres ya que el proyecto de LLA anunció que se les quitaría la oportunidad de acceder a una jubilación digna, aumentando su edad jubilatoria hacia los 65 años. De hecho, la diputada insistió en que el trabajo de las amas de casa no es valorado como corresponde, ya que estas se encargan de las tareas del hogar y las de cuidados de niños y adultos. Por último, resaltó la existencia de una brecha de género como una realidad que debe ser solucionada para lograr equidad y que no se debe apuntar al ataque a las mujeres trabajadoras.

Otra temática sujeta a debate fue la propuesta de reinstaurar el impuesto a las ganancias a la cuarta categoría, en la cual Unión por la Patria se posicionó en contra. Carlos Heller, presidente del Partido Solidario, también en oposición, acusó al oficialismo de querer bajar los impuestos a los sectores ricos sin importar que las grandes mayorías populares se vieran perjudicadas por ello mientras que se los aumenta a los trabajadores.

De cara a las declaraciones de la izquierda, Martín Tetaz -diputado de la UCR- manifestó que el acompañar la aplicación sería una forma de estafa electoral, y finalizó su discurso advirtiendo que, en su momento, Javier Miei dijo que iba a bajar el gasto, pero en la campaña no dijo que iba a volver al impuesto a las ganancias, y sugirió que el Estado debe apuntar a un plan de estabilización.

Desde la oposición denunciaron el carácter entreguista de la Ley. “Dicen que buscan atraer inversiones pero acá existen poderosos intereses extranjeros, quienes vienen por el agua y nuestros recursos. Vamos a regalar nuestra riqueza a cambio de nada y nos lo presentan como el puntapié del desarrollo económico” expresó Itaí Hagman, diputado de Unión por la Patria.

Uno de los puntos más discutidos de la Ley de Bases fue la creación del Régimen de Incentivo a Grandes Inversiones (RIGI) que otorga beneficios a las grandes corporaciones, como libres importaciones y exportaciones, exenciones impositivas y la imposibilidad de aplicarles precios oficiales que regulen el mercado y prioricen el autoabastecimiento interno. Entre los sectores beneficiados se encuentran la agroindustria, la infraestructura, el forestal, la minería, el gas, el petróleo, la energía y la tecnología.
Luego de una maratónica sesión de un día y medio, la Ley de Bases tiene media sanción y pasa a ser evaluada por la Cámara de Senadores, lo que seguramente deba ocurrir antes del denominado “Pacto de Mayo” a través del cual Javier Milei seguirá intentando consolidar su poder.

Las bases se manifestaron en contra de la Ley Bases

Las bases se manifestaron en contra de la Ley Bases

Organizaciones sociales, partidos de izquierda y personas autoconvocadas permanecen en una vigilia frente al Congreso para rechazar la normativa que el Gobierno de Javier Milei quiere votar junto a las bancadas aliadas. Una reforma laboral regresiva, la caída de la moratoria jubilatoria, facultades delegadas al Ejecutivo y un paquete fiscal que favorece al empresariado propone el proyecto que se votaría en la madrugada del miércoles.

La Ley de Bases volvió a entrar al Congreso, tras algunas modificaciones consensuadas con aliados del Gobierno para intentar que avance su tratamiento en Diputados. Implica otorgarle facultades delegadas al presidente Javier Milei durante un año, una reforma laboral regresiva que prorroga el período de prueba y despenaliza a los empresarios que tengan empleados en negro; también elimina la moratoria jubilatoria, permite la privatización de una decena de empresas estatales, entre otros aspectos. Además, llega atada a un paquete fiscal que habilita el blanqueo de capitales, el ingreso de grandes inversores con capitales de dudoso origen mientras que los trabajadores volverán a pagar el Impuesto a las Ganancias a la vez que disminuye la alícuota de Bienes Personales. 

Por la mañana ya se podían ver en Avenida Entre Ríos banderas, pecheras y distintas agrupaciones. «Ni una sola propuesta para combatir la pobreza. No hay libertad cuando no hay nada en la mesa», explicaba una bandera de La Garganta Poderosa. «Aerolíneas no se vende”, “¿Urgente y necesaria? La emergencia alimentaria», eran algunas de las consignas que se leían desde temprano.  

En sintonía con el clima que transita entre las nubes y el sol, la atmósfera de la calle oscila entre la preocupación y el optimismo. «Cuando tenés fechas de lucha siempre sos optimista», cuenta a ANCCOM Mónica Schlotthauer, delegada del ferrocarril Sarmiento. Y agrega: «Después de la marcha universitaria me parece que tenemos que estar todos optimistas».

Poco antes del mediodía, los diputados comenzaron a llegar al Congreso. Varios radicales e integrantes del bloque Hacemos Coalición Federal no la tuvieron fácil. Ingresaron mientras los manifestantes les gritaban traidores y bajo una lluvia de insultos.

Lo que dejó la marcha universitaria

Varias agrupaciones, destacan el valor que tuvo la marcha en defensa de la educación pública del pasado martes 23 de abril. En este mismo sentido, Ernesto, jubilado del hospital Garrahan, sostiene: «Por algo vino tanta gente y va a seguir viniendo, porque el reclamo es lo que nos queda. Como los universitarios. Tenemos que estar, porque nosotros también estudiamos y queremos que nuestros nietos también estudien».

Un trabajador de Barricada TV coincidía: «La marcha estudiantil fue muy importante para entender que sectores que han votado a este proyecto empiezan a estar un poco en línea con quienes venimos advirtiendo que este proyecto es de entrega, que está hecho para las empresas y no para los trabajadores. Eso va a dañar a la gran mayoría mientras se benefician unos pocos».

«La motosierra, si esto sale, va a tener un camino de vía libre», afirma Ileana Celotto, Secretaria General del Sindicato Docente Universitario y Preuniversitario de la UBA. «Lo que se está discutiendo en este momento en el Congreso es un ataque a los trabajadores con aspectos que tienen que ver con reforma laboral, pero también es un ataque al jubilado de hoy y también al jubilado de mañana».

A medida que transcurre la tarde, se van sumando más agrupaciones y sindicatos. Al llenarse las calles frente al Congreso se empiezan a ocupar los costados de la plaza. Siguen llegando banderas y bombos. Aunque los cánticos no están alineados, siempre se escucha algún redoblante y la charla es constante. Los policías emprenden su desfile y se instalan alrededor de los manifestantes sobre la Avenida Callao.

Trabajadores de la cultura

«La situación para nosotros, como para muchos de los trabajadores del país, es angustiante”, detalla el trabajador de Barricada TV. “Se recortó la pauta publicitaria a todos los medios y todo tipo de fomento a los medios comunitarios. Muchos de nuestros canales están con pocos meses de recursos para poder seguir existiendo. Nos parece importante no solo por lo que nos atañe a nosotros, sino a la Argentina en general, venir a manifestar nuestro repudio a este proyecto de Javier Milei».  Y agrega: «La comunicación y los medios comunitarios, son importantes en esta gran batalla cultural que tanto le gusta nombrar a Javier Milei. Es importante identificar que otras voces pueden seguir existiendo y están en peligro. Y por qué hay que defenderlas».

Octavio Morelli, delegado gremial de ATE en INCAA, explica: «Nosotros venimos en un plan de lucha bastante largo, desde el mes de marzo, cuando asumió Carlos Pirovano al frente del organismo. Vino a llevar adelante las políticas que ya había anunciado este Gobierno para con el sector, que es básicamente achicar el presupuesto del INCAA. Esta ley, viene a agravar esta situación que nosotros ya la tenemos».

Uno de los primeros discursos que se pronuncian en el escenario que está ubicado en la plaza, es de un integrante de la TV Pública quien explica: «Estamos acá en defensa de los medios públicos. Esta ley no es democrática. Entre otras cosas, está la privatización de nuestro querido Canal 7, que desde 1951 ininterrumpidamente ha sido un lugar de expresión y donde deben estar representadas todas las voces. Entre otras cosas, eso es lo que se perdería: la voz federal «.

«Todos somos jubilados, es cuestión de tiempo»

Ernesto, quien trabajó durante 31 años en terapia intensiva del Hospital Garrahan, cuenta: «Amo al hospital Garrahan. Los que trabajamos ahí dimos mucho para que sea lo que es. Pero es el único hospital en el país especializado en infancias. Debería haber más. Porque la atención de los niños debe ser privilegiada y no lo es hoy. Necesitamos que el pueblo empiece a tener lo que realmente se merece y no lo está teniendo con este gobierno». Ernesto, organizado con jubilados de ATE, asegura: «Queremos que haya medicación gratuita y atención como corresponde para los jubilados. Porque realmente es un costo enorme ante el salario ínfimo que tenemos», y finaliza: «Los jubilados estamos y siempre vamos a estar. Porque es nuestro deber estar. El pueblo necesita que estemos todos juntos».

Nora, es parte del plenario de trabajadores jubilados. Todos los miércoles, se reúnen con otras organizaciones de jubilados. Ni bien se enteraron de que se iba a tratar la Ley Bases, acordaron asistir a la protesta: «Nos incumbe en forma brutal, por eso decidimos volver a poner la carpa«. Afirma: «Queremos la anulación de la Ley de Bases, todo su contenido. Los súperpoderes a Milei, que nos parecen peligrosísimos. La reforma laboral, que tiene su capítulo previsional que anula la moratoria, que es el recurso de millones de trabajadores para jubilarse en un país donde más de la mitad de trabajadores está en negro o precario o le echaron de un trabajo en blanco y tiene que terminar su vida laboral en negro. La anulación de la moratoria es un ataque enorme a las mujeres. Te mandan a la PUAN, eso no es jubilación«.

«No nos pueden decir que los héroes son empresarios fugadores. Los héroes son los que mantienen los hospitales, las escuelas, los que ponemos de pie este país todos los días», sostiene con convicción la delegada del ferrocarril Sarmiento frente al micrófono.

De parte del Plenario de Trabajadores Jubilados afirman: «Se necesita la intervención del conjunto de la población para derrotar una política que nos hace retroceder 100 años. Vos fíjate que la ley jubilatoria se conquistó en 1924. A 100 años de la ley estamos peleando por los mismos puntos. Porque la ley establece un salario diferido y no un bono«.

La manifestación, seguirá frente al congreso lo que dure la tratativa de la ley. «Convocamos a todos a salir a la calle. El 23 demostramos que sí estamos todos podemos», afirma Celotto.