El arte de hacer memoria

El arte de hacer memoria

Se estrenó “Memoria Futura. Las voces de las Abuelas” en el Parque de la Memoria. La performance que trae al presente las historias de ocho Abuelas de Plaza de Mayo estará esta semana y la siguiente y en octubre se estrena en Berlín.

“¿Dónde dormirán?”, era una de las tantas preguntas que Delia Giovanola, una de las doce fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo, se hacía a diario luego de la desaparición forzada de su hijo Jorge y de su nuera Stella Maris, embarazada de ocho meses. Este jueves en el Parque de Memoria se estrenó La Memoria Futura. Las voces de las Abuelas, una performance conmemorativa que narra y reconstruye las historias de ocho Abuelas de Plaza de Mayo.

El sol estaba escondido por las nubes, el Río de la Plata se perdía entre la niebla y el pasto se encontraba cubierto por el roció, producto de la humedad; “¿Lloverá?”, se preguntaron un par de amigas que paseaba por el parque. La performance es interpretada por Florencia Bergallo, Gaby Ferrero, Karina Frau, Juliana Muras, Andrea Nussembaum, Susana Pampín, María Inés Sancerni y Frida Jazmín Vigliecca; minutos antes de comenzar se podían observar a lo lejos a algunas de ellas vocalizar y repasar sus líneas.

Las historias narradas pertenecen a Josefina Fracchia, Delia Giovanola, Petrona Izaguirre, Rosalía Muñoz, Buscarita Roa, Irma Ramacciootti, Sonia Torres y Elsa Sánchez de Oesterheld. A pesar de ser el inicio de la primavera, se relatan las vidas de aquellas mujeres que perdieron a sus hijos y nietos en manos del terrorismo de Estado.

La pieza artística dirigida por Luciana Mastromauro, con asistencia de Marisa Salton, cuenta con cuatro recorridos que ocurren en simultaneo y cada uno narra la historia de dos Abuelas, con grupos de no más de 15 personas como espectadores por recorrido son guiados a lo largo del parque.

La Memoria Futura tiene como fuente las entrevistas que estas mujeres realizaron para el Archivo Biográfico Familiar de las Abuelas de Plaza de Mayo, fundado en 1998 cuando las Abuelas decidieron crearlo con el objetivo de grabar sus testimonios para aquellos nietos que aún no habían sido encontrados y que pudieran conocer no solo parte de su historia sino también de su identidad. En la actualidad el archivo cuenta con fotos, cartas y más de 2.200 entrevistas de las cuales 144 pertenecen a las Abuelas. Algunas pudieron reencontrase con sus nietos, otras siguen buscando, muchas fallecieron en la lucha.

“Yo estaba familiarizado con el proyecto, el Archivo Biográfico, y ver trasladado ese texto a la voz de la actriz, produce una potencia y tienen un efecto artístico verdaderamente impresionante”, expresó Iván Fina, nieto de Muñoz. Fina tenía ocho meses cuando sus padres Víctor Hugo Fina – hijo de Muñoz – e Isabel Angela Carlucci, embarazada de seis meses, fueron secuestrados en 1976. “Son historias de pérdida, pero también son historias de búsqueda y de lucha. Me voy emocionado y muy conmovido”, finalizó Fina luego de presenciar la obra.

“¿Cuándo tienen frío cómo hacen?”, se repreguntaba por las noches Giovanola. Juliana Muras, actriz que personifica a Delia Giovanola mencionó que siente “responsabilidad y honor de poder tener la posibilidad de ser una voz, de poder conocer la historia”. Muras también confesó que “la primera función con tanta gente, tenerlos tan cerca es muy conmovedor”.

 La encargada de interpretar a Elsa Sánchez de Oesterheld es la actriz Susana Pampín y reconoció que es “una gran responsabilidad civil y artística ponerle voz a esto” porque interpreta a un personaje “que vivió y no cualquier persona que vivió sino una persona icónica que llevó adelante una lucha”. Además, destacó: “Veníamos como sociedad pensando y dando por sentado que estas cosas ya no tenían discusión y de pronto se vuelve a poner en duda, y hay que volver a hablar”. Elsa Sánchez de Oestherhel perdió a nueve familiares en la dictadura, su compañero el guionista y escritor argentino Héctor y sus cuatro hijas con sus yernos, dos de ellas embarazadas. A sus hijos los siguen buscando.

La actriz Virginia Innocenti estuvo presente entre el público y destacó a la obra como “una oportunidad para quienes no conocen el Parque de la Memoria” porque es “un espacio que es muy conmovedor donde el arte nos hace conocer un poquito de nuestra historia, recordarla a los que ya la sabemos y saber entender a los que no tienen muy claro cómo han sucedido los hechos”.

La Memoria Futura_Las voces de las Abuelas se presentará en el Parque de la Memoria los días 21, 22, 23, 28, 29 y 30 de septiembre a las 16 y tiene una duración de 90 minutos. El acceso es gratuito y se requiere inscripción previa a través de Alternativa Teatral. Además el 28 de octubre también tendrá un estreno en Ballhaus Ost, Berlín.

Si dudas de tu identidad o conoces a alguien que podría ser hijo de desaparecidos, comunícate con Abuelas www.abuelas.org.ar

La memoria argentina es patrimonio de la humanidad

La memoria argentina es patrimonio de la humanidad

La UNESCO declaró al Sitio Memoria ExEsma como patrimonio mundial. Es un reconocimiento, además, a las políticas de derechos humanos desarrolladas por la Argentina durante los 40 años de democracia. La mención llega en un momento donde proliferan los discursos negacionistas en medio de la campaña electoral.

La UNESCO declaró este martes al Museo Sitio de Memoria ESMA Patrimonio de la Humanidad, en la 45° sesión extendida del Comité del Patrimonio de la Humanidad en Riad, Arabia Saudita. Desde la secretaría de Derechos Humanos de Nación, el secretario de esa cartera, Horacio Pietragalla Corti, señaló: “Se trata de un hecho de una relevancia única dentro de la historia argentina y regional, que sienta un precedente para seguir dando ejemplo en el mundo con las políticas de Memoria, Verdad y Justicia”. Expresó además que el Museo representa a todos los Espacios de Memoria del país y de la región, y que esta declaración se trata de un homenaje a “esos miles de desaparecidos que tiene nuestro continente”. Además, señaló que “constituye una contundente respuesta frente a los discursos que niegan o buscan relativizar el terrorismo de Estado y los crímenes de la última dictadura cívico-militar”.

 La votación

El Comité, que comenzó a sesionar el 10 de septiembre último, ha estado votando desde el 16 del mismo mes las propuestas para nuevas incorporaciones a la lista de Patrimonios de la Humanidad, para la que el Museo había presentado su expediente de nominación en enero de 2022. Esta votación está a cargo del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos, por sus siglas en inglés).

Alrededor de las 11 de la mañana del martes, el comité comenzó con la revisión de la propuesta argentina para la inclusión del Sitio Memoria a esta lista, sobre la que ANCCOM ya ha publicado anteriormente. El presidente del Comité, el doctor Abdulelah Al-Tokhais, comenzó señalando que al expediente se habían integrado algunas correcciones factuales, y explicó dónde se encuentra la ex-ESMA y lo que ocurrió allí durante la última dictadura cívico-militar argentina, marcándola como uno de los sitios más emblemáticos del terrorismo de Estado en el Cono Sur. Como tal: “Es de suma importancia para la memoria de las víctimas y es significativo por la resonancia global de los eventos de ese período de la historia argentina”, aseguró. Icomos también marcó que “la nominación incluye una expansión del área protegida”, lo que implica no sólo el resguardo de lo que fue el Casino de Oficiales, donde se mantuvo cautivas a más de 5000 personas, sino que contempla el resguardo del predio de la Esma, que lo contiene.

Icomos recomendó que el sitio sea incluido a la lista, basándose en el sexto de los criterios de selección de la UNESCO para la inclusión de un sitio a su lista de Patrimonios de la Humanidad, que “trata sobre sitios directa o concretamente asociados con eventos o tradiciones vivas, con ideas o con creencias, con trabajos artísticos y literarios de destacada importancia universal”. Luego, representantes de otros países presentaron sus comentarios. Los embajadores de Japón ante la UNESCO expresaron que se trata de una de las nominaciones más aptas y que es un ejemplo a seguir para otras naciones. Los embajadores belgas marcaron la importancia del momento como un hito, agregando que esperan que la exESMA sea un precedente, por lo que felicitaron a la Argentina por este reconocimiento. El último comentario fue de parte del embajador de México, quien utilizó una cita del escritor Julio Cortázar para marcar el peso histórico del momento, felicitando también a la Argentina y expresando la necesidad de no olvidar lo sucedido durante las dictaduras latinoamericanas.

 

Finalmente, el presidente del comité declaró al Museo Sitio de Memoria como parte de la lista de Patrimonios de la Humanidad de la UNESCO. Acto seguido, los embajadores de la Argentina agradecieron y anunciaron la transmisión de un mensaje del presidente Alberto Fernández, quien agradeció a la UNESCO y expresó: “Se trata de un paso muy importante” y remarcó la importancia de mantener viva la memoria para que las malas experiencias no se repitan. El presidente destacó a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo por su lucha y remarcó que la lucha por los derechos humanos en Argentina estuvo liderada por mujeres que “nunca claudicaron”. Agregó que Madres y Abuelas “nos enseñaron a no buscar venganza, sino a pedir justicia”. Respecto a la coincidencia de esta declaración con los 40 años de democracia, el presidente expresó que este no se trata de un dato más y que esta declaración le da tranquilidad de que el horror no será olvidado. Además, destacó el trabajo de la embajadora argentina ante la UNESCO, Marcela Losardo, por la candidatura y aseguró que este reconocimiento nos permite avanzar hacia un futuro mejor, que nos hará una mejor sociedad. “La UNESCO puede tener certeza de que ha hecho justicia, porque preservar la memoria hace del mundo un lugar mejor”, aseguró el mandatario

En diálogo con ANCCOM, el abogado y activista Guillermo Pérez Roisinblit, nieto restituido e integrante de la Comisión Directiva de Abuelas de Plaza de Mayo, señaló lo importante que es que una organización como la UNESCO, que forma parte de la comunidad internacional reivindique “la lucha que ha llevado adelante nuestro país, empoderando tanto la memoria, la justicia y distintos mecanismos de no repetición” en un contexto en el que proliferan los discursos negacionistas y en el que hay “personas y candidatos presidenciales que reivindican el accionar de los genocidas, el Estado represor y como maquinaria sanguinaria, que desapareció y torturó a 30 mil personas y que además se robó aproximadamente 500 nietos y nietas”. Roisinblit, quien nació durante el cautiverio de su madre secuestrada y desaparecida en la Escuela de Mecánica de la Armada, considera que la exESMA es un centro clandestino emblemático en base a su ubicación, la cantidad de desaparecidos que pasaron por él, de los cuales él es uno de los 200 sobrevivientes, y la magnitud de la crueldad que se ejercía allí.

 

 

Por eso, Pérez Roisinblit destacó la importancia del nuevo estatus del Sitio como Patrimonio de la Humanidad ya que “es algo que ya no se va a poder tocar, que va a perdurar para siempre como prueba irrefutable de lo que fue el genocidio en nuestro país, como prueba indiscutible de a dónde nos puede llegar a llevar la intolerancia, el odio y la disparatada idea de que al otro para anularlo lo tenés que hacer desaparecer”. También, sostuvo que “es enaltecer y reivindicar las distintas posturas que ha estado llevando adelante nuestro país en estos últimos cuarenta años de democracia , porque si hay algo que no puede desconocer el resto de los Estados parte, el resto de los países del mundo, es todo el proceso que ha llevado adelante argentina en materia de los derechos humanos”.

ANCCOM también consultó a Soledad Astudillo, copresidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, quien declaró que este se trata de un logro del movimiento de derechos humanos, un “reconocimiento que demuestra que el camino realizado desde los organismos de derechos humanos de buscar la verdad sin ninguna clase de venganza, es el correcto” y que “es un incentivo a seguir trabajando en este camino de la Memoria, la verdad y la Justicia”.

La directora ejecutiva del Museo Sitio Memoria Ex Esma, Mayki Gorosito fue parte de la delegación que viajó a la capital saudí y expresó a través de la redes sociales del Museo: “Es un día lleno de orgullo y agradecimiento” y agregó: “Orgullo porque logramos con nuestro trabajo dar continuidad a la lucha de los organismos de derechos humanos transformado en política pública”. La directora agradeció a las personas que prestaron apoyo constante en el camino hasta este logro y también extendió sus gracias a las personas que apoyaron y reconocieron su “trabajo para dar cuenta y testimonio del terrorismo de Estado basado en la desaparición forzada de personas”.

Deslizá para ver la Galería. 

«Mientras que Julio López no aparezca, el Nunca Más será incompleto»

«Mientras que Julio López no aparezca, el Nunca Más será incompleto»

Al cumplirse 17 años de la segunda desaparición de Jorge Julio López, hubo una nueva marcha en La Plata reclamando ante la impunidad del caso. También se estrenó el microdocumental «Arana sin olvido», filmado en uno de los centros clandestinos donde estuvo secuestrado en la dictadura.

Jorge Julio López declaró en 2006 ante el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata.

Jorge Julio López fue víctima de desaparición forzada durante la última dictadura militar –cuando la patota que comandaba el jefe de Investigaciones de la Policía Bonaerense Miguel Osvaldo Etchecolatz lo secuestró de su casa de Los Hornos, el 26 de octubre de 1976–, y por segunda vez el 18 de septiembre de 2006, cuando se estaba por presentar en el Salón Dorado del Palacio Municipal de La Plata para escuchar los alegatos del juicio contra su verdugo, contra quien había declarado en el proceso judicial.

Este lunes se estrenó el microdocumental sobre el ex centro clandestino Pozo de Arana, donde estuvo cautivo López. Su director, Cristian Jure, describió que es un film de ocho minutos, que estará disponible en el canal de YouTube de la Universidad de La Plata y formará parte de la serie de seis capítulos llamada ¿Quién Soy?, grabada en distintos excentros clandestinos de detención y tortura. Jure habló con ANCCOM y destacó la particularidad que tienen estos episodios. “Funcionan en redes, por eso tienen ocho minutos, están destinados a las nuevas generaciones”, dijo. Además, destacó que realizan estos documentales “para que los 300 nietos y nietas que todavía no han conseguido restituir su verdadera identidad, logren hacerlo. Apuntan a que los hijos de esos nietos no recuperados, para que cuando lo vean pregunten a sus padres: ‘¿Mami quién fue tu mamá, tu papá?’. Esta es una temática transversal a todas las audiencias, pero particularmente estaba vinculado a las nuevas generaciones que tienen un acceso a estos discursos a través del Tik Tok, Instagram y particularmente YouTube”.

En 2014 el genocida Miguel Angle Etchecolatz fue fotografiado con un papel en la mano con el nombre de Jorge Julio López. 

 

El director cinematográfico realizó esta serie como proyecto audiovisual de la Asociación Miguel Bru (AMB), en coproducción con UNLP TV, y fue seleccionado por el Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual (Fomeca) y el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) en el concurso «Identidad» de Abuelas de Plaza de Mayo. Los otros capítulos estuvieron dedicados a La Cacha, la ex comisaría 5ta de La Plata, la quinta de los Méndez (Tandil), Faro de la Memoria (Mar del Plata) y el Pozo de Banfield.

López pasó por varios campos de exterminio pero la elección de Arana es fundamental porque en diciembre de 2021, en el marco del juicio conocido como «Arana II», el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) reveló el hallazgo de tres fosas comunes, algo que el testigo había contado en su testimonio de junio de 2006 y que hasta ese momento no se sabía. En los ocho minutos de la obra de Jure dialogan el hijo de López, Ruben, y Ana Laura Mercader, hija de Mario Miguel Mercader y Anahí Silvia Fernández de Mercader, detenidos y desaparecidos que estuvieron en ese mismo centro clandestino. 

“A esta nueva generación queremos brindarle argumentos para el diálogo y el debate, nuevos elementos que le permitan tener acceso a estos relatos tan importantes, sobre todo en estos tiempos de negacionismo, donde empezaron a surgir planteos que creíamos que ya estaban totalmente resueltos”, destacó Jure. “Fue muy duro hacer todos los capítulos pero particularmente este, porque Jorge Julio López es un desaparecido en democracia y eso es una diferencia con el resto de todos los demás, lo que hacen es cuestionar él Nunca Más y decir que mientras López no aparezca el Nunca Más es incompleto”, agregó. 

En tanto, en la Plaza Moreno de la capital bonaerense, el aniversario 17 del segundo secuestro y desaparición forzada de Jorge Julio López fue el motivo convocante para una nueva movilización convocada por la Multisectorial La Plata, Berisso y Ensenada. Es el mismo colectivo de organizaciones que a pocos días de ocurrido el hecho llegó a juntar cinco mil personas en ese lugar, bajo una lluvia torrencial. 

Daniel Satur, periodista platense de La Izquierda Diario, dijo a ANCCOM que “lo más importante de esta convocatoria es que hace 17 años que no se sabe nada o mejor dicho la sociedad no sabe nada, la familia de López no sabe que probablemente funcionarios o ex funcionarios, policías o expolicías sí saben lo que pasó con López”. A su criterio, “hubo una decisión de no decir lo que pasó, se calcula que 200.000 personas de todo el país participan de alguna u otra manera del aparato genocida y hay que tener en cuenta que en el momento que López desaparece una quinta parte de la policía bonaerense estaba conformada por ese personal”. Satur, que siguió durante años el caso, afirmó que “son 17 años de impunidad absoluta, hay quienes un día como hoy no hacen ni un mea culpa, siguen hablando de los derechos humanos, sin la dignidad de admitir que no hicieron nada”.

Satur recordó el momento vivido en 2006 y relató que “en esos días estaba por terminar el juicio Etchecolatz, por cada audiencia de juicio se llenaba de gente porque muchísimos querían presenciar ese hecho histórico”. En su memoria vuelve la mañana en que López nunca llegó a la audiencia donde se iban a presentar los alegatos, un momento muy esperado por él porque finalmente le vería la cara de nuevo a Etchecolatz. “Cuando no llega los abogados denuncian inmediatamente la desaparición de López. Esa noche nos concentramos frente a la gobernación exigiendo que se encontrara ya a López. Obviamente solo hubo discursos para salir del paso, y el viernes dos días después, llovía torrencialmente. Sin embargo, miles de personas caminaron por La Plata exigiendo la aparición con vida de López”, evocó Satur. 

“Desde que desapareció el 18 de septiembre de 2006 los 600 días posteriores la investigación estuvo a cargo de la policía bonaerense que era la principal sospechosa de la desaparición. Esas cosas llevan a esa indignación popular, que durante muchos meses las marchas fueron masivas. Llegando hasta el día de hoy donde el caso está ausente de la agenda pública”, expresó el periodista. A su criterio, la marcha de ayer tuvo el valor simbólico de “una vez más salir a las calles para recordarle a todo el mundo que López hace 17 años está desaparecido y que el Estado es responsable de no haberlo encontrado”.

José Pepe Rusconi, referente de la Asamblea Vecinal Barrio Norte y de Sobrevivientes 2-4-13, también se refirió a aquella primera marcha cuando López desapareció por segunda vez. “Estuvimos en la gobernación y no nos atendían. En esos primeros momentos de mucha tensión e incertidumbre, se organizó la marcha. Fue un día de lluvia, nos empapamos muchísimo pero fue masiva donde también hubo muchos compañeros de otros lugares. Todos bajo la lluvia marchando, una columna sólida, muy poblada, marchando de Plaza Moreno a Plaza San Martín”, recordó. Para él, “López era un compañero platense”, y lo que le hicieron “fue claramente un mensaje por parte de Etchecolatz, esto es lo que pasa a los que vienen a testificar en contra de los genocidas”. 

La bronca y angustia para los vecinos de La Plata es que no haya ni una pista sobre su destino, sino un pacto de silencio. Rusconi destacó que “esta ciudad movilizada ha logrado desde tirar a la dictadura militar hasta conseguir algunas cuestiones como que Etchecolatz fuera preso, esto se logra todo a través de la movilización popular. Lo que espero es que se mantenga firme, porque es la única garantía de frenar a todos aquellos que añoran esas épocas oscuras que hemos tenido en el país”.

 

El pogo de la memoria

El pogo de la memoria

Los estudiantes secundarios marcharon para conmemorar el 47 aniversario de La Noche de los Lápices. En un contexto marcado por el resurgimiento del discurso negacionista, la manifestación estuvo signada por las consignas contra el avance electoral de la derecha.

Por el espacio que sus apretados cascos permiten,  un par de hombres miran con desconcierto y detienen sus motos sobre Belgrano y Solís. Cientos de estudiantes cruzan la calle dando saltos. Una de ellas aminora la marcha, se detiene sobre la senda peatonal  y les grita mientras agita sus brazos “Tocá bocina si apoyas la educación”. Uno a uno,  se le suman sus compañeros, ninguno tiene más de 17 años. Cuando el coro es imposible de ignorar, llegan tímidas las bocinas. Satisfecho, el grupo festeja la victoria y sigue la columna.

 Este 15 de septiembre fue la víspera de un nuevo aniversario de La Noche de los Lápices que significó la desaparición, en la ciudad de La Plata,  de seis estudiantes secundarios y militantes.  La quietud que predominaba en las proximidades del sitio de memoria y ex centro clandestino de detención, en Virrey Cevallos 630, se interrumpió a las 15:40, con la llegada de los primeros centros estudiantiles. Organizados detrás de banderas que distinguían sus colegios, cantaban: “Tomala vos, damela a mí, por el boleto estudiantil”. Cuando el agite parecía disminuir, otros proponían: “No seas facho, no seas gil, los compañeros siempre fueron 30.000”. Desde los balcones se veían los primeros vecinos curiosos. 

 El horror de la dictadura se transformaba en cada grito en la fuerza que los movilizaba. Los rostros impresos de quienes los precedieron, y eran estudiantes como ellos, circulaban pegados en los carteles. En sus brazos, llevaban dibujados los pañuelos de las Madres y, en las mochilas, telas pintadas rezaban “Ni olvido, ni perdón”. Todo se mezclaba entre abrazos, pogos y rondas.

 Los docentes también se hicieron presentes, como  Maximiliano, miembro de AGD UBA: “Acompañamos al centro de estudiantes del colegio Carlos Pellegrini que nos da ánimo para venir  y mantener viva la memoria”.

Julia Auchterlonie, estudiante y secretaria general del colegio Lenguas Vivas, conversó con ANCCOM sobre el contexto en que se daba la marcha: “Es un día especial, este año se cumplen 40 años de democracia, pero vemos el avance de la derecha. Las baldosas que recuerdan a les desaparecides aparecieron vandalizadas con grafitis que decían “Milei 2023” o “zurdos de mierda”. Son cosas que nos hacen reflexionar, disputar el espacio,  y entender que ahora, más que nunca, hay que salir a las calles”. Además, destacó que “en la ciudad más rica del país, el presupuesto en educación se recorta todos los años. Hoy continuamos el reclamo al Gobierno de la Ciudad por las condiciones edilicias de nuestros colegios: los techos se caen, hay ratas o alacranes, faltan calefacción y vacantes.”

El colegio María Claudia Falcone, cuyo nombre recuerda a una de las estudiantes desaparecidas, se ubicaba en la cabecera donde los rayos de sol todavía llegaban. En el centro  de la ronda, una joven de pelo corto  y anteojos golpeaba su redoblante al ritmo de “A ver, a ver, quién dirige la batuta, los estudiantes o los bien hijos de yuta, yuta, yuta”. La energía vibrante se replicaba y parecía aumentar con cada salto. Algunos para refrescarse compartían helados de todos los colores.

“El sadismo no es una ideología política”, se podía leer en el cartón que Valen, con un perfecto delineado y flequillo colorado, sostenía . “En octubre la derecha o los derechos”, decía el que agarraba su compañera. Ambas formaban parte de la agrupación “La Che Guevara” y vivían la fecha como “resultado de la acumulación de dichos negacionistas que explotó con el acto de Villarruel”.

Cuando la cuadra ya estaba repleta de gente, empezó el primer acto y representantes de la Coordinadora de Estudiantes Terciarios, Familias por la Escuela Pública, la Federación Universitaria de Buenos Aires, Nietes y Cooperativas en movimiento, tomaron la palabra para reivindicar la lucha estudiantil. Atentos, los secundarios escuchaban y estallaban en aplausos cuando el discurso los interpelaba.

A las 17:40 comenzó la marcha hacia Plaza de Mayo. En cada grupo alguno dirigía el andar con un “apúrense chicos”. Si aumentaba mucho el espacio entre un colegio y otro, los últimos corrían mientras se reían a carcajadas. Cuando la caminata se detenía, buscaban rápidamente el lugar para trepar, copando tachos y postes de luz, desde donde cantaban con más fuerza. La columna ocupaba una cuadra y media.

En el recorrido se sumaron las wiphalas del Malón de la Paz y sus representantes luego tomaron la palabra: “Acompañamos a los estudiantes porque son el futuro, uno con libertad y democracia. En Jujuy estamos sufriendo persecuciones como en la dictadura, exigimos la nulidad de la reforma de Morales”.

Con la Casa Rosada a sus espaldas, los integrantes de la Coordinadora de Estudiantes de Base (CEB)  armaron el escenario que daría lugar al cierre de la jornada. Banderas argentinas sobre el asfalto,  las fotos de los desaparecidos hace 47 años y un micrófono. Representantes de los centros de estudiantes secundarios se turnaron para leer el documento, ante la atenta escucha de quienes  permanecían sentados en el piso.

Las arengas apuntaban contra la injusticia y el modelo neoliberal, a la vez que señalaban la importancia de no resignarse: ”Ahora más que nunca es nuestro trabajo decirles a los discursos de odio, a la derecha negacionista, a los vendedores de la libertad y las propuestas de convertir la educación pública en negocio: ¡Nunca más!”.

Aplausos y gritos de emoción fueron el preludio del último gran pogo al ritmo de “Jijiji” y el Himno Nacional. Sonrientes y orgullosos, todavía cargaban sus consignas. Violeta, estudiante de la escuela de teatro Niní Marshall, se apuraba para sacarse la foto que había quedado pendiente y posó con el cartel que sostenía: “Sigamos escribiendo el futuro que ellos siempre soñaron”.

 

Nunca más es nunca más

Nunca más es nunca más

Organizaciones políticas, sociales y defensoras de los derechos humanos se manifestaron frente a la Legislatura porteña para repudiar un acto negacionista que organizó La Libertad Avanza, el Partido de Javier Milei.

Diversas agrupaciones sociales se congregaron ayer frente a la Legislatura porteña para repudiar la actividad organizada por la legisladora de La Libertad Avanza Lucía Montenegro y promovida por la precandidata a vicepresidenta Victoria Villarruel. El edificio amaneció protegido por un operativo en conjunto de la Policía de la Ciudad y el cuerpo de Infantería porteño para realizar un homenaje a víctimas de los grupos insurgentes Montoneros y Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), desde una visión sesgada del “terrorismo”, volviendo a tratar de instalar la Teoría de los Dos Demonios que predomió cuando se sancionaron las leyes de impunidad. Por eso, desde las 16, las agrupaciones de derechos humanos se concentraron en el centro porteño con pañuelos blancos y carteles que recalcaban “son 30.000”.

“Marchamos en repudio a la actividad que se va a llevar adelante en la Legislatura”, afirmó la Presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (A.P.D.H), Soledad Astudillo. “En las instituciones hay un consenso de qué cosas no deben ocurrir. No corresponde que esta entidad permita esto”, sentenció mientras avanzaba junto a la asociación civil que atiende, ad honorem, consultas jurídicas sobre asuntos relacionados a violaciones a los derechos humanos.

La convocatoria recién estaba empezando, por lo que los manifestantes debían hacerse lugar en el tránsito ajetreado y de hora pico de la Avenida de Mayo, que aún no había sido cortada. Sin mayores discusiones, pudieron agruparse y encaminar su marcha hacia el Poder Legislativo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Adultos, personas ya muy ancianas y jóvenes se unían en una misma voz y cantaban: “Alerta, que están vivos: todos los ideales de los desaparecidos”. Entre bastones y celulares, elevaban el mismo reclamo. Inés, de la Villa 21-24 (Barracas y Nueva Pompeya) marchó “en contra de que levanten las banderas de los milicos que desaparecieron a compañeros”. La joven contó que en su barrio hubo cuatro desaparecidos, además de detenidos y asesinados. Contra el evento negacionista, replicó: “Tenemos que levantar las banderas de la memoria”.

La convocatoria promovida por Victoria Villarruel, postulada como vicepresidenta de La Libertad Avanza, estaba prevista para las 17. Casi coincidentemente, las campanas de una iglesia cercana comenzaron a sonar, recordando la crítica y repudio de los Curas Villeros de CABA y GBA contra los dichos del candidato a presidente Javier Milei. Por ello, este martes 9 celebraron una misa en desagravio al Papa Francisco en la parroquia de la Virgen de los Milagros de Caacupé, en la mencionada Villa 21-24. “Fue blanco de toda clase de injurias, mentiras e insultos provenientes del candidato a presidente”, según aseguraron en su cuenta de Twitter.

Leonardo Miranda, miembro del colectivo Historias Desobedientes conformado por hijas, hijos y familiares de genocidas, que ahora luchan por Memoria, Verdad y Justicia sostuvo: “Venimos a sumar nuestra voz al rechazo de esta actividad. Es un mensaje tramposo –continuó– que pretende engañar: simula un homenaje pero, conociendo la historia de Villarruel, busca reivindicar el terrorismo de Estado y la dictadura”. 

Victoria es hija del teniente coronel Eduardo Marcelo Villarruel, y sobrina de Ernesto Guillermo Villarruel, detenido por su actuación en el centro clandestino El Vesubio. También es presidente del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv), el cual partió de la Asociación Unidad Argentina (Aunar), fundada en 1993 por militares de la dictadura. La agrupación Historias Desobedientes recordó esta relación existente y en su comunicado oficial constató que “es una hija obediente del genocidio, que obedece los mandatos filiatorios de lealtad familiar que perpetúan el silencio y justifican los más atroces crímenes cometidos en la última dictadura cívico militar”.

Miranda cuestionó que se retome la Teoría de los Dos Demonios y confirmó que “esto atrasa la historia argentina”. Por eso, se reunieron con otros organismos en esta manifestación: “Vinimos a defender la democracia”, concluyó.

Los grupos estaban encendidos en la entrada y salida de los asistentes al evento. Demasiadas caras largas y protestas hacían que un hombre, vestido de traje negro y con un papel blanco en mano, rechace a quienes no contaban con autorización para ingresar. Dos jóvenes que trabajan con un legislador fueron rechazados más de una vez, aún tratándose de su lugar de trabajo.

El clima transcurría tenso en las calles y tranquilo en un restaurante a pocos metros, donde una gran cantidad de personas disfrutaban de una merienda y miraban con atención los movimientos policiales y de manifestantes, que solo se juntaban para cantar contra los organizadores. Para quienes estaban resguardados de ese vidrio, la escena era casi un teatro dramático a punto de llegar a su punto de conflicto.

Una vez que la calle quedó más vacía. Detrás de la protección de la Policía de la Ciudad salió Lilia Lemoine, candidata a diputada nacional por La Libertad Avanza. En los primeros instantes de tranquilidad aseguró que “no es un acto para reivindicar el terror, perdón –se corrigió–, el terrorismo de Estado, es para pedir por las victimas”. 

“Estoy en contra de la dictadura”, afirmó Lemoine. Una señora la cuestionó: “Entonces, ¿por qué estamos reivindicando a gente que está a favor?”. Con un celular en mano, grabando a quienes la increparon, y visiblemente molesta por la situación, gritó en su cara: “Es mentira, infórmese bien”.

Los momentos de tensión ascendieron abruptamente, al punto que sus colaboradores la sostuvo del brazo y le insistió «tenés que entrar porque te van a armar quilombo». No bastaron más de unos segundos para que los gritos de la candidata a diputada cesen contra los manifestantes y estos se dispersen cuando dos personas rociaron combustible a todos los presentes –no sólo Lemoine como luego replicaron según sus dichos algunos medios–. Estos fueron inmediatamente detenidos por efectivos policiales.

“Repudio ese tipo de hechos, nada tienen que ver con lo que hacemos quienes estamos en contra de las ideas de la derecha y la ultraderecha”, aseguró Claudio Morresi, Legislador de la Ciudad de Buenos Aires. Defendiendo esta postura desde adentro del edificio en cuestión, confirmó que el Bloque de Legisladores y Legisladoras de Unión por la Patria (UxP) llevó a cabo una reunión y firma de un documento a las autoridades competentes en protesta por la actividad propuesta por Victoria Villarruel.

El exsecretario de deporte apuntó al espacio político de Javier Milei: “Este no repudia la dictadura militar, la avala”. A la vez, confirmó que hubo una clara utilización del dolor de algunas familias “para modificar la historia real de lo que sucedió en la Argentina. Buscan la liberación de exmilitares y policías que cometieron crímenes de lesa humanidad torturando, asesinando y desapareciendo a miles de personas”.

Con retraso, el evento pudo llevarse a cabo con la presencia de Villarruel, acompañada por Lucía Montenegro, Lorenza Ferrari, madre una estudiante que murió por la explosión de un coche bomba de Montoneros, Graciela Saraspe, hija de un encargado de bar asesinado en Santa Lucía (Tucumán) por el ERP y Arturo Larrabure, hijo de un militar secuestrado y asesinado por el ERP en tiempos del gobierno de Isabel Martínez de Perón bajo la sombra de la Triple A dirigida por el comisario de policía y ministro de Bienestar José Lopez Rega, que obró como antesala de la dictadura. Sin embargo, los disturbios no quedaron aislados en la calle: dentro del antiguo edificio, líderes del Frente de Izquierda y de los Trabajadores como Gabriel Solano y Vilma Ripoll, replicaron los cantos que los manifestantes enunciaron durante toda la jornada. En clara protesta, levantaron carteles que firmaban: “fue genocidio, no guerra”.