Un chocolate amargo

Un chocolate amargo

Se estrena «Operación chocolate», un documental que narra la historia de un chico que envió a un soldado de Malvinas una carta dentro de una golosina que terminó vendida en un kiosco. En segundo plano, aparece la manipulación de los medios de la época.

El documental Operación Chocolate, dirigido por Silvia Maturana y Carlos Castro, expone la travesía a partir de la cual el gesto solidario de un niño de apenas siete años, Gustavo Gabriel Vidal, devino en símbolo del engaño de los medios de comunicación.

Era abril de 1982 cuando Gustavo, mejor conocido como ‘el niño del chocolate’ y protagonista del filme, decidió enviar una golosina junto con una carta escrita por él mismo a los combatientes de Malvinas. “Hice la carta como tantas otras personas en aquel momento. La gente la pegaba sobre el chocolate o el paquete de arroz. Pero a mi mamá se le ocurrió depositarla dentro del chocolate, lo cual fue el diferencial, pues no se vio”, recordó Vidal, quien observó que éste no fue un gesto aislado, sino que formó parte de una serie de donaciones que se dio a nivel nacional y con fuerte difusión en los medios.

Con la esperanza de obtener en el futuro la respuesta o visita del soldado que recibiera el chocolate, Gustavo incluyó en la carta su dirección. Sin embargo, tras el fin de la guerra, el desenlace de su acción fue completamente distinto al esperado. El chocolate nunca llegó a las Malvinas, así como tampoco tantos otros alimentos y demás objetos de valor donados: “Lo compra en un almacén de Rada Tilly una nena de siete u ocho años. Lo abre y dice: ‘Abuela, ¡una carta!’. Era la mía. Pedro Peralta, padre de la nena y un médico preocupado por el estado en que volvían los chicos de la guerra, desnutridos, fue el receptor final de la nota”.

Así, desde Comodoro Rivadavia hasta Villa Ballester, llegó a la familia Vidal una carta de Peralta alertando sobre la situación. Pronto comenzó a difundirse la historia por el barrio, hasta que “le llega a un periodista que lleva la nota a la revista Gente. Viene a mi casa, saca fotos y dice ‘mañana sale la nota’. Un escándalo, en ese momento tenía muchísima tirada. Mi papá estaba ansioso, va a Chacharita a buscarla, cuando llega a la estación estaba la cara de su hijo ahí. Casi se muere”, describió Vidal.

El ‘niño del chocolate’ se convirtió en el caso paradigmático de revelación del engaño mediático y político en el que habían caído muchas personas, en un contexto de temor profundo por la dictadura militar. A 40 años del conflicto del Atlántico Sur, el documental rastrea el viraje de enfoque de la revista Gente y otros medios masivos en lo que respecta a la Guerra de Malvinas. Primero una fuerte manipulación de la información en pos de ocultar las atrocidades que vivían los soldados, y después llegó la ‘desmalvinización’, una vez perdida la contienda.

Sin embargo, Vidal admitió haber empezado a “reencontrarse” con la historia en su adultez, puesto que tras recibir múltiples amenazas e incluso ser investigados por la Secretaria de Inteligencia (ex SIDE), su familia se desvinculó del hecho vivido, haciéndolo pasar como una anécdota más y “escondiéndolo bajo la alfombra”. Además, si bien recordó haber tenido entrevistas esporádicas a lo largo de los años, su vida se desarrolló al margen del hecho; siguiendo los pasos de su padre, farmacéutico, se desempeñó como profesional de la salud.

“Cuando pasa el tiempo y no hay documentación, la historia queda en el ‘boca a boca’, como algo cultural, ‘el mito del chocolate’. Por eso, me resultó interesante reflotarla”, comentó Vidal respecto a una comunicación que recibió en 2017 por parte de la directora de una escuela de Venado Tuerto, provincia de Santa Fe, fanática de la historia del “niño de chocolate” y ávida de que Gustavo viaje a contarla junto a veteranos de Malvinas. A partir de vivir esta experiencia, Vidal aseguró que comenzó a vincularse e involucrarse con lo que había constituido parte de su infancia.

“El documental es la reconstrucción del niño, hoy adulto. El reencuentro con esa historia y su resignificación. La idea es hacer el recorrido de la carta”, mencionó Vidal sobre Operación Chocolate. Su participación en el proyecto tiene el objetivo de validar el hecho, en tanto acontecimiento histórico, de forma que se denuncie el engaño y la desilusión frente a las donaciones que nunca llegaron a destino, pero destaca la necesidad de privilegiar el valor de la solidaridad y darle visibilidad a los veteranos.

El documental podrá verse este jueves 29 de septiembre a las 20 en el Centro Cultural de la Cooperación “Floreal Gorini”, Av. Corrientes 1543, CABA. Luego, a partir del 27 de octubre, podrá verse en el Cine Gaumont, Rivadavia 1635, CABA. Y simultáneamente será parte de los contenidos de la plataforma nacional CINE.AR Play.

La ópera y el cine también son villeros

La ópera y el cine también son villeros

Este jueves se estrenó en el Gaumont Ópera Villera, un documental que retrata la inclusión social de niños y jóvenes a través de la música lírica.

Ensayo de la ópera en noviembre de 2021.

Eran las 19 y hacía mucho frío. Poco a poco llegaba el público general y los chicos que participaron en la película que se estaba por estrenar en menos de una hora en el Complejo Gaumont del barrio porteño de Congreso. Estaban todos vestidos de forma elegante y abrigados, preparados para la ocasión. Unos con las manos en los bolsillos, otros con los hombros levantados y la espalda un poco encorvada a causa del frío, pero aun así todos emocionados por lo que se venía. A las 19.30, los empleados de seguridad dejaron entrar al hall a las decenas de personas que estaban en la entrada y a las 19.50 finalmente se acomodaron en las butacas de la Sala 2.

Ópera Villera es una película documental que muestra el trabajo que hace la Licenciada en Composición Mailen Ubiedo Myskow para introducir a niños y jóvenes de barrios populares en el mundo de la música clásica y ayudarlos a que compongan sus propias obras. El film, con esta actividad como columna vertebral, cuenta además las historias de vida de algunos de sus alumnos y cómo salen adelante gracias al apoyo que reciben. El final muestra la inauguración del Primer Festival de Ópera Villera realizado en noviembre del año pasado, una iniciativa que muestra cómo este género musical «no pertenece a una élite» y la manera en que lo viven otros sectores relegados por la “alta” cultura.

En diálogo con ANCCOM, uno de los directores del documental, Nestor Sánchez Sotelo, explicó que al momento de filmar le sorprendió a él y todo su equipo la «magia» que le pone Mailen para incentivar a los estudiantes y darles una mano en lo que respecta a la obtención de becas y orientación en exámenes de ingreso a carreras afines a la música: «Es una vocación de servicio desde todo punto de vista porque uno entiende que no está dando clases porque es un trabajo, sino que realmente le trata de abrir puertas a los chicos y que se alejen de los problemas propios de los barrios, de la droga, de la delincuencia, la inseguridad, la falta de oportunidades».

Por su parte, la codirectora y guionista, Ana Farini, añadió que Mailen tiene no solo una gran pasión por la música sino también por ayudar y que esto hace que ocupe un rol que no debería como el de asistente social al ir, por ejemplo, a un hospital y hacer una denuncia ante casos de abusos o dar alimentos durante la pandemia a quien lo necesite. «Nos preguntaron por qué no mostrábamos más la pobreza, la delincuencia o la droga”, cuenta Farini. “No quisimos caer mucho en eso porque nos pareció que nos alejaba de lo que estábamos contando y los chicos tampoco quieren ser estigmatizados. Les duele mucho ser estigmatizados, entonces no quisimos replicar eso.».

Para Mailen Ubiedo Myskow lo mejor del film es que mucha gente se va a enterar del trabajo que hace la Asociación Civil Centro Artístico Solidario Argentino (CASA) en barrios populares y eso permitirá recibir otras ayudas para brindar más posibilidades a niños y jóvenes: «Está bueno que la gente sepa que este género, la ópera, es para todo el mundo, que uno puede crearlo y no es necesario tener una formación previa para eso, que se puede consumir en cualquier tipo de lugar y estudiarlo de forma gratuita con educación pública en cualquier lugar».

Al finalizar la proyección del estreno, todos aplaudieron ininterrumpidamente por casi un minuto y luego algunos empezaron a corear el nombre de Mailen. Entonces, ella se puso de pie, agradeció a los directores del film, al público y anunció una sorpresa: «Los esperamos en el Segundo Festival de Ópera Villera que se realizará del 13 al 25 de octubre».

Hay ópera villera para rato.

 

Un Milagro que recorrerá el mundo

Un Milagro que recorrerá el mundo

«Amasando Futuro», el documental sobre las mujeres de la Tupac Amaru se proyecta este fin de semana pero también se exhibirá en Brasil, Grecia y Francia. ANCCOM entrevistó a Marta Valle, su directora.

En diciembre de 2021 se realizó el pre-estreno de Amasando Futuro en el Centro Cultural Kirchner y desde ese momento está recorriendo diferentes locaciones de todo el país. Es el documental de la realizadora Marta Valle sobre la organización Tupac Amaru de Jujuy y, en especial, sobre las mujeres trabajadoras de la organización jujeña.

Marta Valle comenzó con la idea de este documental luego de la experiencia que vivió en el Encuentro Nacional de Mujeres (ENM) de Jujuy de 2000. En esa ocasión, pudo ver cómo se organizaban las mujeres para asistir y acompañar a otras miles que llegaron a la provincia. 

El documental está seleccionado para el 30ª Festival de Cine y Derechos Humanos en San Pablo que se desarrollará entre el 16 y 21 de agosto, y en el Festival Independiente de Videos, Películas & Series en YouTube del Club de Arte “Pavlos Paraschakis”.

Las próximas presentaciones serán el sábado 13 de agosto en el Ateneo Néstor Kirchner, en la localidad de Monte Grande, y el 20 del mismo mes en Neuquén, en la Casa de la Cultura de la ciudad de Centenario.

¿De qué se trata Amasando Futuro?

El documental trata sobre la organización barrial Tupac Amaru y cómo se logró esa organización, liderada por Milagro Sala, por muchas mujeres que trabajaron y fueron los motores de esa organización que logró construir casas, natatorios, centros de salud, escuelas; que priorizó la formación primaria hasta terciaria. Son enormes logros que fueron mucho más que eso porque la hicieron los propios protagonistas, los destinatarios de la acción fueron los constructores de la acción. Y sobre todo las mujeres, que en este marco son los actores más vulnerados de la sociedad junto con las disidencias. Allí se logró un empoderamiento y un crecimiento imponente y eso es lo que nos impactó. También nos llamó la atención otro discurso que aparece reiteradamente en la película, es lo que se vive en los barrios y dicen los propios vecinos: “Yo antes me ocupaba de la ropa, de la zapatilla de moda y ahora pienso en los demás y ahora puedo construir mi casa”.

¿Cómo fue el proceso de preproducción y de conseguir las voces de los y las protagonistas?

Yo me involucré desde el día que Milagro quedó presa, en enero de 2016. Tenía alguna referencia de lo que era la Tupac, había estado en un Encuentro Nacional de Mujeres en el que luego de cada taller nos dieron una atención que me había dejado asombrada, eran muy organizadas. En 2010, cuando fue la “Marcha de los pueblos originarios» las vi en la Plaza de Mayo. Martín (Sabio, Director de Fotografía) sacó fotos, él tenía más conocimiento. Yo me fui metiendo de a poco. El 16 de enero de 2016 estábamos en una actividad en Lomas de Zamora y empezamos a juntar firmas pidiendo la libertad de Milagro. ¡Qué ingenuidad! Ahí empezamos a interiorizarnos y me incorporo a los comités. En 2017 la fuimos a visitar a Alto Comedero, junto con tres compañeros de Lomas. El encuentro fue súper emotivo, ella no nos conocía y nos recibió amorosamente. No podía creer que estaba almorzando con Milagro en el medio del penal. 

Para una “Marcha del apagón” (2010) éramos un montón durmiendo en una de las sedes, y una de las mujeres que estaban cocinando, amasando bollos, salió con las manos llenas de harina a contarnos lo que estaban haciendo y por lo que estaban peleando con una claridad emocionante. De ahí salió el Amasando. Tenía unos videitos, pero ahí ya tenía en la cabeza hacer algo más grande. Llegar a la gente es muy sencillo, dicen lo que dicen abiertamente. Nos resultó muy fácil. Hicimos un recorte de los lugares a donde fuimos. 

¿Cómo tomaron la película en Jujuy?

No hubo resistencia, fue todo muy natural. Cinco días estuvimos ahí con la preocupación de la sentencia en enero de 2019. Me apena que no pudimos tener un testimonio de Pachila (Patricia Cabana). Ella me decía “haceme la entrevista, hacémela ahora» y le dije “mañana”. “Capaz que mañana ya no me ves,”, me respondió. Y tenía razón, dos días después la visité en el penal. Ella es un personaje, como muchas de ellas que tienen una historia similar a la de Milagro, que de golpe se encontraron organizando y liderando un grupo de gente, armando una cooperativa y construyendo casas, escuelas… y pensando en el futuro.

 

¿Volvió a Jujuy después de 2019?

No, no volví. La intención es volver ahora con la película. Y que esté en algún espacio en San Salvador y en algunas de las localidades que nos recibieron. Toda es gente muy linda, muy simple y muy abierta.

¿Por qué se focaliza en el rol de las mujeres?

A mí me impresionaba. Milagro es una gran lidereza e hizo cambios en el pensar la autoestima, la revalorización y la dignidad de la persona, trabajar con la violencia de género. Jujuy es una sociedad muy patriarcal y Milagro trabajó mucho con eso y, además, valorizó otros trabajos que no son los convencionales de las mujeres y a ellas les cambia la cara cuando cuentan cómo estaban, cuando trabajaban en la construcción. Cómo podían hacer un revoque fino. En el revoque fino insisten mucho. Les decían que eran actividades que no son para mujeres y que requerían mucha fuerza y a lo mejor hacer upa a un chico, cargar bolsas del mercado es tanto o más esforzado que cargar un balde de material. Ellas disfrutaron mucho de esto, era un trabajo muy intenso. Ellas sabían y hacían.

¿Cómo cree que va a ser la recepción?

Ahora hemos recibido la sorpresa que se va a Grecia y en septiembre a un encuentro de las Humanidades en París. No esperaba la recepción que está teniendo ni que sea con esa magnitud. Yo lo que quería era mostrar, tener el testimonio de estas mujeres pese a que Milagro dice que esto no es solo de mujeres, sino que es de familia y es de varones. A mí me impactó el empoderamiento de las mujeres. 

¿Cuál considera que es la importancia del cine documental hoy en día?

Mostrar cosas que son ajenas al conocimiento de muchos. En el caso de Amasando… para mucha gente fue una novedad absoluta lo que contamos. Y no está todo, ya que nos faltaron detalles y mostrar los centros de salud. Aunque cuando fuimos ya estaba todo intrusado por Morales (Gerardo Morales, gobernador de la provincia de Jujuy). 

Doce días de ecocine

Doce días de ecocine

Este miércoles se inaugura la VI edición del Festival de Cine Ambiental. Se proyectarán más de 60 películas de 34 países bajo la consigna es #ConcienciaBiodiversa.

Hatun Phaqcha, Tierra Sana.

Desde el 1º hasta el 12 de junio se desarrollará la VI edición del Festival Internacional de Cine Ambiental (FINCA). Esta vez, en formato híbrido: las películas en competencia se proyectarán de manera presencial en la sede porteña de la Alianza Francesa y en el Cine York, en Olivos. La sección escuelas también se proyectará de forma presencial en las salas del Gaumont y habrá actividades especiales en diferentes sedes. El resto de la programación se podrá ver de manera online en la plataforma del FINCA. Tanto las funciones presenciales como las virtuales son de entrada gratuita.

Este año, la programación del festival presenta más de 60 películas de 34 países diferentes que se dividen en doce secciones: Biodiversidad, Ecofeminismo, Ecociencia y Sostenibilidad, Derechos Humanos, Finquita, Horizontes Energéticos, Juventud, Madre Tierra, Soberanía Alimentaria, Somos Agua, Justicia Climática y Escuelas. Algunas de ellas participan de la competencia en las categorías: Largometrajes Internacionales, Cortos y Mediometrajes Internacionales y Documentales Latinoamericanos.

La sección Escuelas que se proyectará en el Cine Gaumont los días 1 y 2 de junio, presenta este año 31 cortos realizados por estudiantes de 10 establecimientos educativos diferentes. Estas proyecciones requieren inscripción previa y están destinadas principalmente a otras escuelas. “Entendemos la importancia de hacer un cine hecho por los pibes, con los pibes y para los pibes”, comentó Eduardo “Koko” Elli, profesor coordinador de cortos de la escuela secundaria Instituto América Latina de Isidoro Casanova. Este establecimiento ha participado ya en otras ediciones del festival, presentando cortos de ficción, documentales, animación y experimentales, realizados por estudiantes de cuarto, quinto y sexto año. “Sabemos la importancia que tiene que los pibes y las pibas puedan apropiarse del audiovisual como una herramienta de transformación social, para generar discursos propios que desactiven de alguna manera estereotipos y estigmas que pesan sobre ellos como jóvenes”, explicó Elli y agregó: “Los pibes y las pibas esperan estas instancias para poder compartir sus cortos con otros pibes. Nosotros hacemos cine para compartir, no para competir: participamos -en este caso en el FINCA- con ese espíritu, para que el cine siga siendo una forma de encontrarnos con otros y otras, y entender un poco más cuál es nuestra propia identidad”, concluyó.

Iwanich, el diablo envenenado.

Actividades especiales

Además de las proyecciones, habrá actividades gratuitas, algunas más prácticas y otras de debate con referentes ambientalistas y directores.

La apertura del festival se realizará en la sede de la Alianza Francesa y contará con la presencia de Elías Sáez, director de la película El camino es la agroecología, quien va a participar de un luego de la proyección.

El sábado 4 se realizará una jornada sobre soberanía alimentaria en el patio de nutrición de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires. Habrá prácticas de huerta, charlas, actividad de compostaje y cerrará con la proyección de la película El camino es la agroecología.

El domingo 5 se realiza un recorrido guiado por el Área Natural Yrigoyen, en Vicente Lopez, que finaliza con una plantación de árboles nativos.

También se ofrecerá el taller Producir de manera sostenible: es cuestión de equipo para realizadores audiovisuales el jueves 9 y viernes 10 de manera online y con inscripción previa.

Por último, el sábado 11 habrá un conversatorio por YouTube sobre mujeres y bodiversidad, con la participación de referentas ambientales: Vandana Shiva, Camila Becket, Florina López Miró y Miriam Vilcay.

Arica.

Conciencia Biodiversa

La consigna de esta edición es #ConcienciaBiodiversa; Renata Camarotti, programadora del FINCA, reflexionó al respecto: “E festival trabaja temáticas socioambientales. Nunca es el ambiente como algo aislado, sino que es el ambiente en relación con. En este caso la relación de los seres humanos con el ambiente y entre ellos mismos. Entonces es una biodiversidad que abraza, no solamente la importancia de tener una diversidad en el sentido de la naturaleza, pero también de la forma de vivir; si estamos hablando por ejemplo de los pueblos originarios, y como plantean otra forma de relacionarse con la naturaleza y comunidad, estamos proponiendo un tipo de diversidad que no está acotada a lo ambiental”.

Esta edición particularmente, junto a la consigna, derivó en un homenaje a Carlos Vicente, militante ambientalista y referente de la agroecología, la soberanía alimentaria y el proyecto Acción por la Biodiversidad, quien falleció en marzo de este año. “La 6° edición ya estaba pensada con esta temática y él estaba involucrado. Durante el periodo previo de organización, lamentablemente falleció de manera muy sorpresiva y fue un gran impacto”, destacó Camarotti. “Por el rol que tuvo articulando muchos de los actores cercanos al festival, por ser un referente nacional en lo que tiene que ver con la temática y por la necesidad también de valorar su presencia y las semillas que plantó, esta edición no podía dejar de ser un homenaje a él”, finalizó.

Escena armada

Escena armada

Este jueves se estrena “El largo viaje de Alejandro Bordón”, un docuficción argentino que cuenta el derrotero de un hombre acusado y preso por una causa armada entre la Policía Bonaerense y funcionarios judiciales.

En la madrugada del 5 de octubre de 2010, Alejandro Bordón, trabajador aeronáutico residente de Monte Chingolo, fue arrestado por el homicidio de Juan Alberto Núñez, chofer de colectivo de la línea 524. Ese día comenzó un calvario para Bordón y, a la par, su lucha por recuperar la libertad. El 4 de junio del 2012, un año y ocho meses más tarde, fue absuelto, tras comprobarse que se trató de una «causa armada» por policías y funcionarios judiciales bonaerenses, en la que incluso se alteraron pruebas y testimonios.

A través de entrevistas, material de archivo y actuaciones, El largo viaje de Alejandro Bordón cuenta la historia de un hombre que debe demostrar su inocencia por un crimen que no cometió. Las imágenes de La Divina Comedia entre el infierno y el purgatorio como hilo conductor, retratan y refuerzan la oscuridad de esos días de injusticia que debieron atravesar Bordón y su familia.

En diálogo con ANCCOM, el director del filme, Marcelo Goyeneche, también integrante del colectivo de Documentalistas de Argentina (DOCA), subraya el daño que puede ocasionar el mal uso del monopolio de la violencia por uno de los poderes del Estado –la Bonaerense– en el caso concreto de Bordón.

En un reportaje reciente afirmaste que todos los días hay causas armadas, ¿qué te llamó la atención de la historia de Alejandro Bordón?

Fue un hecho de solidaridad entre trabajadores. Conocí a Susana, su mujer, en un corte que hizo en el Aeroparque Jorge Newbery. Yo era delegado en Aerolíneas Argentinas y la CTA. El primer contacto con la historia fue al enterarme lo que le estaba pasando a un compañero. Él se desempeñaba en una empresa de catering para aviones y, a partir de ahí, empezó a surgir la idea de contar la historia que se termina de consolidar cuando Alejandro recupera su libertad y le propongo hacer la película. Mientras tanto, yo iba registrando algunas marchas, pero la génesis del proyecto fue una cuestión de solidaridad de clase.

En la película aparecen imágenes de La Divina Comedia, ¿de dónde surgió la idea?

Soy un fanático de La Divina Comedia, es uno de los libros fundamentales de la historia de la literatura, así que la idea de incluirla estuvo presente desde el comienzo del proyecto. Era también hacerle un homenaje, por eso es Virgilio quien acompaña a Alejandro Bordón por ese tránsito desde el infierno bonaerense hasta ese paraíso que es recuperar la libertad. Hacer una alegoría de La Divina Comedia venía bien porque el viaje que hace Alejandro es similar al que hace Dante desde el Infierno, pasando por el Purgatorio y hasta llegar al Paraíso. A su vez, tiene esto de la representación de la realidad que está presente todo el tiempo en la película. Decidimos hacer un documental que no fuera al lugar en el que sucedieron los hechos, sino representar ese lugar con esta simbología teniendo en cuenta que todo fue una puesta en escena. Sólo dos hechos fueron reales: que Juan Alberto Núñez fuera asesinado y que Alejandro Bordón estuviera preso. El resto, todo lo que pasa en esta historia, es una escena armada. Así que la idea de la representación está siempre dando vueltas y tiene conexión con la obra de Dante Alighieri.

El largo viaje de Alejandro Bordón se puede ver desde este jueves 21 de abril en el cine Gaumont.

Como documentalista y realizador, ¿qué opinás sobre la situación actual del INCAA?

Hace unos días estuvimos en las puertas del INCAA y fuimos brutalmente reprimidos por la Policía de la Ciudad. Pedíamos la renuncia de Luis Puenzo porque hace dos años que ocupaba el cargo de presidente del organismo y no tuvo diálogo con los sectores más independientes del cine, con las pequeñas y medianas productoras, con los que realizamos cine de autor, con los que hacemos la cultura de este país. Es una situación crítica también porque si el fondo de fomento se cae, la producción de cine, las bibliotecas populares, los medios de comunicación comunitarios quedarían sujetos a la predisposición que tenga el gobierno de turno a prestarle atención a la cultura. Por eso estamos en una situación de movilización constante. Es fundamental un proyecto nacional que contenga un proyecto cultural y diverso en el que nosotros mismos podamos contar nuestras propias historias, con nuestras formas y no con modelos estereotipados impuestos. Es una contrahegemonía que viene, a su vez, en sintonía con lo que hablábamos de la película.