Esta vez gasearon a los curas

Esta vez gasearon a los curas

Una procesión de religiosos de distintos credos acompañaron este miércoles a los jubilados que reclaman aumento de haberes y la gratuidad de los medicamentos. Las fuerzas de seguridad no le tuvieron piedad y también los reprimieron. El padre Paco Olveira termino en el piso, apaleado y con gas pimienta.

Otro miércoles con un nuevo hito en la represión a las marchas de jubilados: Francisco Olveira, el Padre Paco, fue golpeado y rociado con gas pimienta por segunda vez en el lapso de una semana. El hecho se dio en el marco de una convocatoria a organizaciones religiosas y culturales que, siguiendo el comunicado de la Mesa Ecuménica, acudieron con vestimentas y símbolos religiosos a las inmediaciones del Congreso Nacional, donde los jubilados se concentran periódicamente desde fines del 2024. En agitado diálogo con ANCCOM, todavía afectado por los gases, el sacerdote declaró: “Pasó lo que pasa todas las semanas: una represión absolutamente indiscriminada a los jubilados. Este miércoles era el campito de la fe: musulmanes, judíos, católicos, evangélicos y cristianos en general, acompañando el reclamo de los jubilados. Tienen miedo a los curas: vallaron todo el Congreso; la Bullrich violando su propio protocolo. Eso es lo que pasó, ni más ni menos”.

La marcha se fue gestando a la sombra de un fuerte operativo de seguridad, que implicó el cierre total de las avenidas Rivadavia y Callao por efectivos de la Policía Federal, Prefectura y Gendarmería. Los jubilados fueron los primeros en enfrentarse al Congreso vallado, todos con lienzos de la organización respectiva. La comitiva de los curas entró por la calle lateral: con estolas sacerdotales, un hábito franciscano e imaginería de la Virgen de Luján. De ahí en más se desencadenó la represión, chorros de gas pimienta desde la fila de escudos, hasta que el Padre Paco, tras verse rodeado por la policía, terminó recibiendo asistencia contra la cortina metálica de un kiosco, golpeado y rociado tres veces en la cara. Al levantarse, sin embargo, se lo veía sereno: “Acá estamos, por eso nos tienen miedo —afirmaba—. Tienen miedo al Dios que derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes”.

Y es que la marcha mezclaba un tono a la vez combativo y eclesiástico: en una vereda, un anciano que recibía primeros auxilios no se quería acostar, “tirado como un muerto”; en la vereda contraria, el Padre Rodolfo de Merlo, gaseado en sus hábitos franciscanos, daba un sermón ante los escudos de la PNA: “¡Éste trabajo los bestializa a ustedes! ¡Se están portando como bestias, gracias a la bestia que los está mandando!” Se mezclaban sotanas con camisetas de Chacarita, cacerolas y cantos gregorianos, mientras Gendarmería barría la calle hacia un lado, la Federal iba al trote hacia el otro, y los voluntarios de primeros auxilios atendían a ancianos que se descompensaban. Siguió el padre Paco: “Tenemos que decir que todos deberíamos tener dignidad para vivir, y sobre todo los jubilados y las jubiladas. El Papa Francisco repetía: ‘En ellos está la sabiduría de nuestro pueblo. Piden justicia y les dan gas pimienta’. Hoy nos volvieron a dar gas pimienta”.

Ya cerrando la tarde, tras una foto grupal, los sacerdotes, feligreses y manifestantes corearon el Himno Nacional, al que siguió un Padre Nuestro. El policía encargado del rifle se estaba fumando un cigarrillo, y el padre Paco, vistiendo una remera de El Eternauta, saludaba y atendía a los medios en el camino de vuelta al Instituto Patria, que sirvió como centro de asistencia a los afectados. La misma Cristina Fernández de Kirchner bajó a comprobar el estado de Nicolás Capresi, dirigente del Frente de Trabajadores Excluidos que fue herido en la cabeza al defender a Paco de la policía. El Padre que apenas de recuperarse arengara: “¡Francisco está feliz: jubilados haciendo lío!”

Esta marcha se suma a las de todos los miércoles para demandar, entre otras cosas, un aumento en los haberes jubilatorios, la cobertura del PAMI a medicamentos esenciales y la prórroga de la moratoria previsional. Las concentraciones se repiten todas las semanas desde septiembre del 2024 a partir del veto a la reforma jubilatoria por el presidente Javier Milei, y tuvieron como hito repudiable el ataque al fotoperiodista Pablo Grillo que, tras pasar por terapia intensiva, aún se recupera del impacto de un cartucho de gas en la cabeza. Francisco Olveira ya había sido golpeado en la marcha del pasado miércoles 7 de mayo, resultando herido en la ceja, y encabezaba la convocatoria a organizaciones religiosas que emprendiera la Mesa Episcopal.

«No hay libertad de prensa sin trabajo digno»

«No hay libertad de prensa sin trabajo digno»

El Sindicato de Periodistas de Buenos Aires montó una olla popular frente al diario Clarín para exigir la reapertura de paritarias. El primedio salarial de los trabajadores de prensa escrita es de 520.000 pesos.

Este martes, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) realizó una olla popular bajo la consigna “ollas del hambre”, frente al diario Clarín, en Tacuarí al 1700. La protesta se debe a la delicada condición salarial a la que se enfrentan los trabajadores de prensa, y a la negativa de las empresas mediáticas a negociar recomposiciones de sueldos, a pesar de haber pasado más de tres meses desde las últimas paritarias.

La protesta pacífica también se centró en los ataques del gobierno de Javier Milei al periodismo, en referencia a las denuncias penales que el mandatario realizó la semana pasada hacia Carlos Pagni, Viviana Canosa y Ari Lijad. Además, entre los presentes en la actividad se encontraba Fabian Grillo, padre de Pablo, el joven fotógrafo víctima de la represión en la marcha de jubilados el 12 de marzo, que recibió un disparo que le impactó en el cráneo y lo dejó en terpaia intensiva hasta ahora.

Frente a su lugar de trabajo, los trabajadores de Clarín y los integranes de SiPreBA se van organizando para la actividad convocada para las 14. Un carril queda disponible para el paso de autos y los colectivos, que tocan su bocina en señal de apoyo a la protesta. Entre varios manifestantes, logran colocar dos garrafas, un anafe y una gran olla en el asfalto, dando inicio a la cocción del guiso de lentejas. Trajeron todo: ingredientes y banderas. Solo queda reunirse con un mate al calor del hervor de la olla.

“Estamos haciendo una olla contra el hambre. La idea es recorrer otras redacciones también, en tanto sigamos sin poder firmar una paritaria que nos saque de la situación angustiante que estamos viviendo como trabajadores de prensa, con sueldos ya no solamente debajo de la canasta básica, de pobreza, sino sueldos abajo de la línea de indigencia. Frente a un conglomerado empresario que parece no importarle tener trabajadores indigentes. Nuevamente están empujando la paritaria, y nos quieren forzar a firmar un acuerdo por debajo de la inflación. Negocian de mala fe”, afirma Sebastián Díaz, trabajador de Clarín en la redacción de Olé y delegado de SiPreBA.

De acuerdo con el último informe de escala salarial publicado por el sindicato, el promedio de los trabajadores de prensa escrita gana alrededor de 520.000 pesos por una jornada laboral de al menos seis horas y media por día.

Paula Ongaro, trabajadora en el medio desde hace casi 27 años y delegada desde octubre del año pasado explica: “En noviembre de 2024, hicimos un relevamiento de salarios mostrando los recibos concretamente y complementando esa información con los datos del nivel del cargo, del nivel de formación y de la antigüedad. Teníamos gente con más de 15 años de antigüedad que era encargada de un producto, cobrando por debajo de los 600.000 pesos. Hoy en el diario tenemos para las jornadas de 7 horas, un piso de 700.000 pesos brutos. Cuando vos haces las deducciones, ese salario de bolsillo, te da por debajo de los 600.000”.

El nivel de los salarios explica la necesidad desesperante que lleva a los periodistas, cualquiera sea su trayectoria, al pluriempleo para poder llegar a fin de mes. “Muchas veces se nos percibe como un sector privilegiado de la sociedad, asimilando la situación de los y las trabajadoras a la de los empresarios dueños de medios. Necesitamos que se entienda bien que nosotros somos parte de la clase trabajadora, y una parte particularmente castigada por años”, agrega.  

Esta situación de precarización laboral no solo lleva al deterioro de los trabajadores, sino también al de la calidad del debate en democracia y la información periodística. “Vos no podés hacer bien tu trabajo si estás pensando que terminás acá y tenés que ir a otro laburo, y terminás ahí y vas a otro, y que así quizás llegás a un ingreso que te permita vivir”, señala Díaz. “Lo que está en juego es la libertad de expresión, no hay libertad de prensa sin trabajo digno”, refuerza Ongaro.

A medida que pasaron los minutos, fueron muchos los trabajadores que se reunieron con sus compañeros para compartir el pan en platos descartables. Lo que importaba era estar presente en esa comunión. A este encuentro se sumó Fabián Grillo -recibido con afecto por todos-, quien megáfono en mano dio el parte del estado de salud de su hijo.

Finalizando el acto, Francisco Rabini, delegado, llamó a la organización de una colecta para conseguirle una nueva cámara a Pablo. Por otro lado, se continuó con el reclamo del encuentro, señalando la gravedad de las acciones legales y las incitaciones de odio del presidente para la libre empresa.

Rabini remarcó la dificultad de ejercer el oficio, frente a un gobierno que constantemente reprime y denuncia. “En el caso de Ari Lijalad, fue por una nota que escribió. Por lo tanto, estamos traccionando que todo aquel que quiera, firme esa nota. Que sea una nota escrita no por un periodista, sino por cientos de periodistas. Si al presidente no le gusta y va a denunciar a un periodista, que denuncie a todos. Tenemos que ser capaces de ejercer una defensa colectiva, una defensa común”. Ya lleva casi 400 firmas en la nota del periodista denunciado.

Con respecto a los últimos dichos de Milei rechazando la compra de Telefónica por parte de Clarín, Rabini declara: “Dicen pelearse, pero lo cierto es que cuando vamos a firmar paritarias, el que nos pone el techo es el gobierno. O sea, el gobierno defiende a los empresarios. La lealtad de clase la tienen muy clara”. Y agrega: “Estos ataques son la mejor manera de tener un periodismo manso, hambreado. Estamos hablando de personas que tienen 30 años de oficio y dejan la actividad. Un compañero se fue a trabajar con su familia en una distribuidora de papel higiénico. Estamos ante la posibilidad de la extinción del oficio como lo conocemos”, concluye.

Ongaro sostiene en sus declaraciones finales: “El sueldo ha convertido a esta actividad en un hobby. Se han ido muchos compañeros buscando nuevos horizontes, pero también sufrimos dos despidos masivos en los últimos cuatro años. Luchamos contra la desesperación, y a veces es difícil convertir la bronca y la angustia en combustible para tomar medidas de fuerza”.

Al interior de las redacciones ella describe la dificultad: “Con los compañeros con menos trayectoria tenemos que salir a dar la pelea porque hay toda una generación que solo conoce el trabajo en términos precarios. Son pasantes, son contratados por poco tiempo. Las redacciones están llenas de esas figuras grises, variantes de la precarización. A esos compañeros hay que salir a buscarlos y a conquistarlos, a convencerlos de que la única salida posible es colectiva”.

Un papa con alma andina

Un papa con alma andina

El nombramiento como sumo pontífice del estadounidense Robert Prevost –desde ahora León XIV- fue celebrado por millones de fieles en todo el mundo, especialmente en Perú, donde fue obispo. El padre Elky Segura Gonzales, quien trabajó junto a él, dialogó con ANCCOM sobre su personalidad y su misión en su “querida diócesis de Chiclayo”.

Aunque Prevost pasará a la historia como el primer estadounidense en convertirse en jefe de la Iglesia católica, su camino hacia el papado no puede entenderse sin su profundo vínculo con Perú. Vivió más de dos décadas en el país andino. Durante los años ochenta y noventa, estuvo en localidades como Chulucanas y Trujillo, y regresó en 2014, cuando el papa Francisco lo nombró administrador apostólico de Chiclayo. Un año más tarde, fue designado obispo de esa ciudad, cargo que ocupó hasta 2023.

Allí fue donde conoció al padre Elky Segura Gonzáles, a cargo de la Parroquia Señor de los Milagros de la Diócesis de Chiclayo y profesor de Teología en la Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo (USAT), donde el nuevo líder de la Iglesia fue Gran Canciller. “Mi primera impresión de monseñor Prevost fue la de un hombre sabio, atento y muy comprometido”, aseguró, y agregó: “Entre sus muchas cualidades destacaría la del diálogo. Es una persona muy dispuesta a escuchar a todos, sin importar el momento o cuál era la inquietud. Esto, junto con los años que llevaba viviendo en nuestro país, le dio experiencia suficiente para comprender a nuestro pueblo, desde los que vivimos en la ciudad hasta los que están alejados en las montañas”.

Según el sacerdote, su obispado no se limitó al intercambio verbal, sino que también se expresó en la acción: “Él recorrió a pie y a mula muchos rincones de nuestra provincia para estar con las personas, oír sus testimonios y prestar ayuda. Recuerdo dos momentos en particular: durante la pandemia de coronavirus, que fue muy dura para nuestro pueblo, lideró una campaña para que la diócesis consiguiera dos plantas de oxígeno, y al final lo logramos. Después, cuando estaba a punto de irse a Italia en 2023, fue a Illimo —una localidad de 3.000 habitantes al norte de Chiclayo— durante las inundaciones, para asistir y comenzar otra campaña. Nunca dejó de importarle la situación de la gente”.

«En la pandemia, muy dura para nuestro pueblo, lideró una campaña para conseguir dos plantas de oxígeno; al final lo logramos», recuerda Segura, ubicado en la foto atrás de Prevest durante una misa de Chiclayo (2022). 

La llegada de Prevost al norte de Perú no fue una casualidad, sino parte de una larga tradición. “Es una tierra misionera, por lo que solemos recibir a muchos extranjeros, como españoles, italianos, franceses y, por supuesto, estadounidenses”, señaló Segura. A diferencia de otros enviados, el nacido en Chicago “fue un peruano más en la comunidad, en parte por su gran conocimiento del idioma. Como se vio en su discurso, habla perfectamente español y además conoce algo de quechua. También siempre disfrutó de las costumbres nacionales, como la cultura y la comida”.

Sobre el momento de la elección de Prevost como obispo de Roma, Segura afirmó que en Chiclayo hubo reacciones similares pero también distintas: “Para el pueblo fue una bendita sorpresa, hay un ambiente de júbilo en la calle y la gente se acerca emocionada a las misas que estamos celebrando. Por otro lado, en la diócesis también estamos muy felices, aunque unos días antes ya sabíamos que había una posibilidad concreta de que fuese nombrado, viendo sus últimos pasos en Roma”. En 2023, el entonces obispo fue nombrado cardenal por Francisco y recibió el cargo de prefecto del Dicasterio para los Obispos, lo que lo llevó al Vaticano. Su llegada a la Santa Sede lo acercó al poder y lo convirtió en uno de los candidatos al cónclave para suceder al pontífice argentino. Aunque su nombre no figuraba entre las predicciones mediáticas, dentro de la Iglesia era tenido en cuenta. “Teníamos la esperanza de que iba a suceder y nos aferramos a ella hasta que vimos al cardenal protodiácono anunciarlo por televisión”, confesó el padre.

Fue en su discurso desde el balcón de la Plaza de San Pedro donde el flamante papa rompió una tradición de siglos: por un instante, dejó de hablar en italiano y en latín para dirigirse en español a su comunidad. “Si me permiten también una palabra, un saludo, en español. Y de modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo, en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo”, exclamó. En ese momento, la mayoría de los millones de personas que escuchaban las palabras de León XIV descubrieron la existencia de la capital de la región de Lambayeque. “Al principio fue inesperado, pero luego nos miramos entre todos y nos emocionamos. Nos sentimos bendecidos de que toda la gente en la Plaza de San Pedro y en el mundo entero pueda saber de nuestra pequeña y humilde diócesis”, expresó Segura.

«Recorrió a pie y a mula muchos rincones de nuestra provincia para estar con las personas, oír sus testimonios y prestar ayuda», subraya el párroco de Chiclayo.

«Desde el jueves estamos revolucionados por la cantidad de periodistas nacionales e internacionales que llegaron a Chiclayo. En la diócesis estamos aprendiendo sobre la marcha a dar entrevistas y a cómo salir ante las cámaras”, bromeó Segura.

La ciudad del noroeste peruano pasó a ser conocida mundialmente y se convirtió en un punto clave para comprender la trayectoria de Prevost. “Desde el jueves estamos revolucionados por la cantidad de periodistas nacionales e internacionales que llegaron aquí”, comentó Segura, y bromeó: “En la diócesis estamos aprendiendo sobre la marcha a dar entrevistas y a cómo salir ante las cámaras”.

La gran incógnita sobre el nuevo sumo pontífice es si continuará con la doctrina y las tareas de su predecesor. Para el párroco no hay dudas: “Él era cercano a Francisco; mantenían un buen contacto incluso desde antes de llegar a Chiclayo, y luego su amistad se fue fortaleciendo. Compartían la visión de una Iglesia pobre para los pobres, de que hay que ponerse siempre al servicio de ellos. No tengo dudas de que monseñor Prevost es el indicado para seguir el gran legado que nos dejó Francisco”.

Desde el 9 de mayo, monseñor Prevost es el papa León XIV. En solo un par de años pasó de recorrer los límites de la cordillera de los Andes y de la selva amazónica a liderar a más de mil millones de católicos en todo el mundo desde el Vaticano. Con su espíritu dialogante, su capacidad para hablar varios idiomas y su cercanía con la gente, el primer pontífice estadounidense y peruano buscará continuar su misión como lo hacía en la pequeña diócesis chiclayana.

«El mal no va a prevalecer»

«El mal no va a prevalecer»

El cardenal estadounidense Robert Prevost  fue elegido como nuevo papa y adoptó el nombre de León XIV. Con pasado misionero en Perú, parte del discurso en español y un fuerte llamado a la paz, su perfil refleja una continuidad con el legado de Francisco, pero con una impronta propia ante un mundo fracturado.

En un Vaticano colmado de fieles expectantes, el cardenal Dominique Mamberti pronunció la tan famosa y esperada frase: “Habemus Papam”. Luego, presentó al nuevo máximo representante de la Iglesia: León XIV.

Nacido en Chicago en 1955, Prevost ingresó a la Orden de San Agustín en su juventud. Su vocación misionera lo llevó a pasar gran parte de su vida pastoral en Perú, en la diócesis de Chulucanas, a quienes dedicó parte de su discurso hablando en español. “Se lo notaba conmovido. Fue sobrio, humilde, pero también determinado”, opinó al respecto Federico Tavelli, historiador, politólogo y teólogo docente en la Universidad Católica Argentina y en la Universidad de Friburgo. “Se mostró como un claro continuador de Francisco: una Iglesia abierta para todas las personas”, dijo.

En su primer mensaje como papa, Prevost no solo saludó afectuosamente a Bergoglio, sino que también hizo un fuerte énfasis en la paz: «Yo también quisiera que este saludo de paz entrara en vuestros corazones, llegase a sus familias, a todas las personas, en todas partes, a todos los pueblos, a toda la tierra. La paz sea con ustedes. Una paz desarmante, humilde y perseverante que viene de Dios.»  Siguió invocando la figura de Francisco: «Aún mantenemos en nuestros oídos esa voz débil, pero siempre valiente, del papa Francisco bendiciendo en Roma… El mal no va a prevalecer.”

Tavelli también destacó el simbolismo del nombre elegido: “El nombre que toma un papa siempre habla de sus prioridades. El último León, a fines del siglo XIX, gobernó en tiempos de grandes cambios: el nacimiento de los Estados nacionales, el colonialismo, el capitalismo y la revolución industrial. Fue un papa que supo ser un punto de unión entre todos esos actores y el impulsor de los primeros programas sociales de la Iglesia”.

La elección de Prevost tiene además una dimensión geopolítica que no pasó desapercibida. “El mundo mira al papa, y hay una esperanza puesta en su figura. Los cardenales hicieron una elección acertada. Europa hoy está desbordada entre la guerra en Ucrania y las presiones de Trump. Y ahora ahí tenemos un papa americano en Europa. En un momento donde se exacerban los nacionalismos y los países tienden a encerrarse, este papa tiende puentes. Muestra otra forma de globalidad”, analizó el académico.

Aún resta saber cómo será su relación con la Casa Blanca. Como cardenal Prevost se mantuvo con un perfil marcadamente cercano a la visión social de la Iglesia, polemizando con la perspectiva de J.D. Vance, vicepresidente de los Estados Unidos. En una entrevista en Radio Con Vos, José Alejandro Godoy, analista político peruano, comentó sobre esto: “Definitivamente habrá un intento de aprovechamiento, pero probablemente cuando Trump se dé cuenta de la guía del nuevo papa no sé si va a querer estar muy cerca”.

Desde el sur

Más allá del Vaticano, la elección de León XIV también resonó en voces locales. El padre César, conocido también como “el cura rockero”, consultado por ANCCOM, ofreció una mirada terrenal sobre el nuevo papa y su vínculo con Bergoglio: «Francisco fue Francisco, pero indudablemente necesitábamos una continuidad. No se podía ir para atrás. Va a continuar las transformaciones… y quién te dice que no las profundiza. No va a tener el rock and roll de Francisco, pero tiene el blues de Chicago».

Para César, el contexto global exige un liderazgo espiritual firme pero abierto. Así lo expresó al reflexionar sobre los desafíos del presente: «En un mundo atravesado por las armas, las guerras, la venta de drogas, es importantísimo que alguien se pare y diga: ‘que haya paz’. Se trata de ser continuadores de la obra de Jesús. Invitando a la gente, no importa quiénes sean ni de dónde vengan».

En un mundo cada vez más dividido, la figura del papa vuelve a estar en el centro de una conversación que trasciende lo religioso: una conversación humana. Francisco supo tender puentes en medio del ruido y ahora León XIV hereda esa tarea. Con una historia marcada por la misión y por predicar en los márgenes, restará ver cómo hace para hablarle a un mundo al que le cuesta escuchar, pero que todavía necesita, más que nunca, palabras de paz.

“Los trabajadores que sostienen el Espacio para la Memoria son fundamentales”

“Los trabajadores que sostienen el Espacio para la Memoria son fundamentales”

Frente a la demora en el pago de salarios del mes de marzo a los trabajadores del Ente Público Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos ex-ESMA, el Directorio de Organismos de Derechos Humanos publicó un comunicado advirtiendo sobre la política oficial de desfinanciamiento y ajuste en el área.

En vísperas del 1º de mayo, Día del Trabajador y la Trabajadora, el Directorio de Organismos de Derechos Humanos, conformado por organizaciones sociales, publicó un comunicado para expresar su preocupación por la demora en el pago de salarios del personal del Ente Público Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos ex ESMA.

En dicho documento, se explica que recién el 15 de abril el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación transfirió fondos para cubrir sólo el 60% del salario del personal y apenas el miércoles 30 de abril se completó la transferencia total. Esta situación genera preocupación, a su vez, frente al pago de haberes del mes de abril, que debería concretarse antes del 8 de mayo.

“Nosotros estuvimos de paro todo este mes por incumplimiento del pago del salario. Esto se debe a que demoraron las partidas presupuestarias en una decisión totalmente ilegal. La situación está en estos días normalizada y esperamos que los próximos salarios lleguen en tiempo y forma. Confiamos también en la representación del Directorio de Organismos de Derechos Humanos que al formar parte de la gestión están haciendo todo lo necesario para que la situación se normalice”, señala Gabriel Armenio, delegado de ATE.

Si bien se habían realizado los reclamos a través de los medios correspondientes, la respuesta no había sido satisfactoria, como explica a ANCCOM Ana María Soffiantini, quien forma parte del Consejo Asesor de Sobrevivientes, organización que acompaña el reclamo: “No es la primera vez que hay demoras. Esta vez además de demoras sólo se pudo pagar el 60% de los sueldos. Recién el 30 de abril pasado se completó el saldo correspondiente. Nunca contestaron nuestros reclamos, sólo intentaron desacreditarnos. Alberto Julio Baños, secretario de Derechos Humanos de la Nación,  siempre intenta ningunear nuestros pedidos.” A su vez, aporta su visión sobre las consecuencias de estos atrasos de los pagos salariales: “La intención, además de desfinanciar, es quebrar moralmente a nuestros trabajadores que, sin recursos, no tienen forma de trasladarse al trabajo. En esta situación es inevitable el desfinanciamiento para sostener contenidos pedagógicos y construcción de espacios de reflexión crítica, memoria y desarrollo de políticas de promoción de Derechos Humanos. La gravedad de dejar sin recursos presupuestarios conlleva consecuencias respecto al mantenimiento y la conservación del lugar, así como también retrasos en los pagos a proveedores.”

Graciela Lois, perteneciente a la asociación Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas que también acompaña el reclamo, dijo: “El espacio lo vamos a seguir sosteniendo como sea. Nosotros no vamos a aflojar así nomás. Y por supuesto, esto descansa en el compromiso y sacrificio de todos los trabajadores. Porque en este momento es un sacrificio ir por lo que reporta económicamente en este contexto donde todo te aumenta menos los sueldos. Y encima, no te lo pagan”.

Frente a la pregunta sobre cuáles serían los pasos a seguir en caso de que esta situación se repita con los haberes de abril, Graciela respondió: “Hemos preparado varias cosas para presentar. Lo que pasa es que, como esto es un tira y afloja permanente, muchas veces te pasa que pensás ¿Y si lo presento y se arma más lío? ¿Y si en lugar de esperar 30 días más te la hacen más larga? No es temor, pero es cuidado. Más que nada por la responsabilidad que nos cabe a nosotros de no perjudicar más la situación de los trabajadores. Repito: para nosotros las personas, los trabajadores que sostienen el espacio son fundamentales.”

Los trabajadores reclamaron en las calles

Los trabajadores reclamaron en las calles

Decenas de miles de personas marcharon por el bajo porteño para conmemorar el Día del Trabajador y protestar contra las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei. También hubo un homenaje al fallecido Papa Francisco.

 

Este miércoles 30 de abril y en la antesala del Día del Trabajador la Confederación General del Trabajo (CGT) marchó acompañada por la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina (CTA), agrupaciones de jubilados y demás organizaciones sociales. Por su parte, la UTA estuvo ausente nuevamente argumentando que estaba inhibida por la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo de la Nación.

Los motivos de la movilización fueron al menos tres: celebrar el Día del Trabajador, homenajear al Papa Francisco y continuar con los sostenidos reclamos ante el ajuste del gobierno de Javier Milei. La marcha comenzó a las 14 en la intersección de las avenidas 9 de Julio e Independencia y se dirigió hasta el Monumento Canto al Trabajo, en la Avenida Paseo Colón. La marcha fue multitudinaria, cuadras enteras repletas de manifestantes, banderas por lo alto que flameaban y chalecos de distintos colores que evidenciaban las diversas organizaciones que se acercaron. En Independencia y Perú un cura realizó una oración y se gritó “¡Viva Francisco, viva nuestro pueblo trabajador!”.

Luego se siguió con el recorrido mientras se entonaba la marcha peronista. A las pocas cuadras hizo su aparición Hugo Moyano quien caminaba siempre rodeado de su gente de confianza. Moyano no estuvo muy cerca de la gente, algo que va de la mano con lo que dijo Celia Pereira, venida desde La Plata a la marcha: “Falta dirigencia. Necesitamos una vanguardia que canalice esto que pasa y enfrente al gobierno. La CGT es bastante traidora, viene acompañando en silencio, atrás de la gente. Los dirigentes tienen que estar en la cabeza del proceso. Falta la unidad del campo nacional y popular en todo sentido”.

“A la carnicería voy una vez por mes y en el supermercado compro cada vez menos cosas, ya no es como antes. Y los remedios ni te cuento, soy jubilada y los medicamentos los voy comprando de a poco. Me quitaron los que antes tenía gratis, entonces cada vez que los voy a retirar tengo que ver cuál es el urgente”, comentó Juana Calcena, de 68 años. La caída del consumo se volvió moneda corriente para la mayoría de la población. Incluso productos que antes eran cotidianos hoy son un lujo y para acceder a ellos hay que esperar mucho tiempo o recortar por otro lado. “En mayo tenemos solo un aumento del 3,70% y las cosas como aumentan, como la luz o el alquiler, yo conozco gente que se ha quedado en la calle”, sentenció Calcena.

“La situación de los trabajadores en la era Milei es peor que en el 2001. Yo represento al gremio UPCN; nuestro salario bajó un 30%, más la cantidad de despidos que quiere seguir llevando adelante de la mano de Sturzenegger con el concepto de destruir al Estado”, criticó Viviana Ciadella.

En este contexto de caos laboral, también se encuentran los trabajadores informales, que, según el INDEC, a finales de 2024, sumaban el 39% del total. Al respecto Ciadella aseguró que esa es una gran deuda y que hay que hacer una autocrítica también en el Estado, porque muchos trabajadores estatales seguramente están con planta transitoria, contratos informales y que eso le da la posibilidad a “la derecha” de poder despedir livianamente: “Ni hablar de la sociedad en general, que seguro casi la mitad está informal. Eso hace que un “outsider” como Milei gane porque puede prometer cualquier cosa porque la gente no tiene aportes jubilatorios, obra social y forma una memoria a corto plazo”. 

Franco García, estudiante universitario explicó su punto de vista: “Los trabajadores en la era de Milei obtuvimos miseria, se vulneran nuestros derechos, la plata no alcanza y cada vez te explotan más: yo me quedé sin laburo hace un mes. Y los que ganan con esto son los amiguitos del presidente, todo esto que hace es para beneficiar a los empresarios que se llenan los bolsillos”.

Por otro lado, hay gente que no se muestra de acuerdo con la marcha. “Hay que hacer ajustes, por ejemplo, ¿cuántos días sin laburo? La Semana Santa, esta semana también: eso es pérdida, hay que trabajar”, expresó Viviana Ghersi, docente que dice que se acercó a “chusmear la marcha” cuando ya estaba terminando. “Lo lógico es que haya un crecimiento o un decrecimiento suave, no el doble y de golpe, pedir algo que duplique ya te da la pauta de ilógico”, concluyó al referirse sobre el fracaso del acuerdo de la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVyM) este martes. Desde la parte sindical pretendían elevar el piso salarial a $657.703 (en este momento no llega a los $300.000), pero el sector empresario hizo su oferta en $306.500.

La CGT se hizo presente para liderar los reclamos como le demandan desde hace tiempo trabajadores y organizaciones. Su rol es importante para dar más peso e institucionalidad a las movilizaciones. Mañana, 1ro de mayo, tocará descansar y evaluar si este rol se profundizará en el futuro.