«¿Está Télam?»

«¿Está Télam?»

Bajo el título “Fotoperiodismo de necesidad y urgencia”, la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA organizó un encuentro con trabajadores de Somos Télam, ARGRA y SiPreBa para debatir acerca de la importancia de la Agencia Nacional de Noticias.

Periodistas, fotorreporteros, docentes y estudiantes, convocados por el apagón de Télam, debatieron la importancia de los medios públicos y de una comunicación democrática y con pluralidad de voces. Bajo el título “Fotoperiodismo de necesidad y urgencia”, el encuentro se realizó el pasado viernes 12 de abril en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.

El 14 de abril de 1945, Juan Domingo Perón determinó la creación de la que años después se convertiría en la mayor agencia de noticias de Latinoamérica. A 79 años de su fundación, Télam se ha consagrado como la principal proveedora de información periodística para más de 800 abonados y nueve millones de usuarios que consultan diariamente su página web.

“Es importante pensar en los procesos represivos que los reporteros gráficos están sufriendo actualmente, porque tienen un rol fundamental en el relato cotidiano contemporáneo de los conflictos que atravesamos como sociedad”, afirmó la directora de la carrera de Ciencias de la Comunicación y anfitriona, Larisa Kejval. De hecho, uno de los ejes de la charla fue el ataque violento a trabajadores de prensa acaecido el pasado 10 de abril, en el que un grupo de periodistas y reporteros gráficos fueron reprimidos por la policía en una manifestación de movimientos sociales en reclamo de comida.

El pasado 1° de marzo, durante la Asamblea Legislativa, el presidente Javier Milei anunció el cierre de la agencia, la cual sería intervenida por personal policial días después. Hasta hoy, los cientos de trabajadores dispensados de sus labores llevan a cabo un acampe fuera de ambas sedes de la agencia. Desde el apagón, aseguran, la soberanía informativa ha sido puesta en riesgo.

Alfredo Luna, parte del colectivo de trabajadores Somos Télam y delegado del SiPreBa, estuvo presente el día que la policía procedió al vallado de la agencia: “Es difícil de entender lo que estamos viviendo. Télam no es solo nuestro lugar de trabajo, sino nuestro lugar de pertenencia. Lo que sentí más violento fue entrar a la página de la agencia y ver un cartel que dice ‘Página en reconstrucción’. Hoy sigo entrando al portal, esperando, por las dudas. Vamos a seguir acampando pacíficamente fuera de las dos sedes, resguardando nuestro patrimonio, que es el de todos”.

Igor, reportero gráfico de ARGRA, en diálogo con ANCCOM, expresó: “Es muy importante estar acá para ver cómo nos encontramos en la calle ante la represión que viene impulsando el Gobierno hacia los periodistas. Por otro lado, hay que resaltar la importancia de los medios públicos y las agencias como Télam, que permite que miles de medios locales e internacionales compren radio cables y difundan una material informativo impresionante. Esto crea la posibilidad de que Argentina tenga soberanía en términos de comunicación”.

“El fotoperiodismo permite contar lo que está sucediendo en la calle constantemente con una imagen –agregó–, a través de las fotografías se puede construir en un futuro un archivo para documentar lo que fue sucediendo a lo largo de la historia. Ningún período es ahistórico, todo se enmarca en la construcción de una historia colectiva y para que nosotros podamos entender lo que sucedió, por ejemplo en la época de la dictadura, las imágenes son clave para difundir ese relato”.

Por su parte, Victoria Gesualdi, fotoperiodista de Télam y una de las coordinadoras del equipo fotográfico de ANCCOM, subrayó la importancia de entender la situación de los medios en una coyuntura de represión y precarización: “Para pensar qué hacer con Télam, que es sin duda la mayor expresión de memoria y patrimonio visual que tenemos, hay que entender que en un contexto de precarización estructural de los medios la lógica de un periodismo con función social y comprendido como un servicio público, está totalmente en jaque. La circulación de las imágenes hoy compite con fuentes como Twitter o Instagram en una trama de inteligencia artificial. En esa coyuntura hay que poner en valor lo que implica la agencia pública de noticias y el producir imágenes desde una perspectiva federal y soberana como sucede en Télam”.

Analía, fotógrafa de Télam, explicó para todos el funcionamiento del área de fotografía: “Télam produce entre 200 y 300 fotografías por día, 90 mil por año. Somos 51 fotoperiodistas de todo el país, con 21 corresponsalías, una de ellas en la Antártida, registramos lo que sucede en cada provincia. Todo el material se sube a la cablera y se concentra en un inmenso archivo, que hoy se encuentra inhabilitado. Esta labor es fundamental para la identidad de un país, y para brindar información en y desde las localidades. ¿Qué cubrimos? De todo. En los inicios de la agencia únicamente se cubrían actos políticos, con el paso del tiempo hemos llegado a cubrir todo tipo de áreas y temáticas. Télam, entonces, como medio público, garantiza la circulación de información de interés público no sometida a presiones políticas o comerciales. ¿Para quién producimos? Para los más de 800 abonados, y para toda la ciudadanía”.

Durante la mesa de editores de pequeños portales y revistas que se llevó a cabo en el marco de la jornada, todos remarcaron el valor que tiene, para sus medios, el cuerpo de imágenes que componen el famoso archivo. La pregunta que la mayoría de ellos hacían en el lugar de los hechos, era: “¿Está Télam?”. La presencia de la agencia les garantiza a cientos de medios la posibilidad de cubrir lo que ellos llegaban, y Télam siempre está, a lo largo y ancho de todo el país. Hoy, sin su archivo, ¿qué información circula?

Ojos que sí la ven

Ojos que sí la ven

Una muestra colectiva de fotografías narra la represión de las Fuerzas de Seguridad en las manifestaciones contra la Ley Ómnibus que se realizaron frente al Congreso mientras la Cámara de Diputados debatía el proyecto. «Mostrar estas imágenes -dice el texto curatorial- es una forma de solidaridad pero también de defender el derecho a la libertad de expresión». La selección de imágenes tomadas por los 35 reporteros gráficos heridos en esas jornadas corresponde a una inciativa conjunta de ARGrA, SiPreBa, Fatpren, el Área de Fotografía de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA y la Carrera de Ciencias de la Comunicación. Entrá y mirá las fotos.

«No van a callarnos»

«No van a callarnos»

Los reporteros gráficos realizaron un camarazo frente al Congreso de la Nación para protestar por la represión sufrida mientras realizaban su trabajo periodístico durante el debate de la Ley ómnibus.

Con la consigna “¡Basta de balas de goma! ¡Basta de gas pimienta! Nuestro ojos miran”, un grupo numeroso de reporteros gráficos organizados en aRGa, FATPREN Y SiPreBA se manifestó frente al Congreso de la Nación contra la represión llevada a cabo por las fuerzas de seguridad a cargo de la Ministra Patricia Bullrich durante el debate de la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, más conocida como Ley Ómnibus.

Los trabajadores gráficos se concentraron por la tarde del 6 de febrero en la Plaza del Congreso. Llevaban sus credenciales y sus chalecos de prensa y levantaron sus cámaras al canto de “¡Unidad de los trabajadores!”.

Mediante un comunicado, SiPreBA informó que fueron más de 30 los trabajadores de prensa heridos con impactos de bala de goma y gases lacrimógenos. Desde el sindicato, se llamó a un cese del accionar represivo y se exigió que los trabajadores de prensa “puedan realizar su tarea periodística en paz, sin agresiones ni impedimentos”.

“Hay una agresión marcada a los reporteros y reporteras gráficos y a los periodistas en general. Los gases que están utilizando son más fuertes y te inhabilitan para seguir trabajando, dejas de ver -afirmó Mariana Nedelcu, reportera gráfica-. En este contexto, el periodismo gráfico tiene un rol fundamental: tenemos la responsabilidad social de documentar las atrocidades que se están cometiendo”.

Rodrigo Ruiz es reportero gráfico para Revista Cítrica, un medio gráfico cooperativo. En diálogo con ANCCOM relató cómo fue el accionar represivo de las fuerzas de seguridad el jueves pasado, cuando aún en el Congreso se debatía la Ley Ómnibus. “En un momento sorpresivo, la policía motorizada enciende los motores de sus vehículos y dispara. Sentí un impacto en la pierna izquierda. Levanté la mirada y alrededor mío solo había colegas, fácilmente identificables, que hacían su trabajo”, afirmó. En su pierna quedó incrustado un perdigón.

Alfredo Luna, reportero gráfico de Telam, otra víctima de la represión policial durante la tarde del jueves, también brindó su testimonio: “A eso de las 19:30 llegaron unos camiones de gendarmería con muchos efectivos, que comenzaron a avanzar sobre los manifestantes que estaban en la Plaza del Congreso y en la Avenida Rivadavia. El gas que tiraron me impactó directamente en la cara y quedé enceguecido. Me costó recuperarme. Cuando lo logré, vi que las motos de la policía pasaban y disparaban sobre la gente”.

En relación a las declaraciones de la ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich y del vocero presidencial Manuel Adorni, Luna afirma que es otra forma de violencia por parte de las instituciones. Bullrich había afirmado que los trabajadores no se encontraban debidamente identificados mientras que, por su parte, Adorni subió memes en sus redes sociales que aluden a la pregunta que le realizó un periodista respecto del accionar represivo de las fuerzas de seguridad hacia los trabajadores de prensa.

“Los gases que tiraron mientras hacíamos la cobertura nos dejaron quemaduras, que duraron por horas. Eso nos saca del juego y nos imposibilita seguir con nuestro trabajo. Lo que está en juego es el derecho a la libertad de expresión, la sociedad tiene derecho a informarse. Vamos a seguir reunidos, no van a callarnos”, afirmó Leandro Teysseire, reportero gráfico de Página/12 y editor de ANCCOM, quien fue reprimido durante el debate de la Ley Ómnibus.

Desde SipreBA, afirman que la libertad de prensa es “un pilar fundamental de la democracia que debe ser defendido, garantizado y respetado por todos los poderes del Estado y por todos los sectores políticos y económicos que forman parte de nuestra sociedad”.

Mientras cae el sol pasando el mediodía, siguen los reclamos de los reporteros gráficos y una pareja de jubilados se sienta en uno de los bancos de la plaza: venden pañuelos celestes. Los pañuelos llevan impresa una consigna: “la patria no se vende”. Detrás, las vallas que resguardan al Congreso fueron intervenidas: “Traidores, la casta no anda en tren y bondi. No a la Ley Ómnibus”.

De la fiesta callejera a la tragedia de la guerra

De la fiesta callejera a la tragedia de la guerra

La 34º Muestra Anual de la Asociación de Reporteros Gráficos Argentinos se exhibe en esta oportunidad en el Centro Cultural Borges. Claroscuros de una vida política y social cargada de emociones fuertes.

La 34° Muestra Anual de Fotoperiodismo Argentino que se puede visitar en el Centro Cultural Borges exhibe las obras de 85 autores y autoras de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (aRGra) sobre los hechos más preponderantes de 2022. El Comité Editor de este año estuvo conformado por Eva Cabrera, Analía Garelli, Lorena Lucca, Aníbal Greco y Juan Foglia.

En diálogo con ANCCOM, Lorena Lucca contó sobre el proceso de selección de la muestra: «Tratamos de reflejar los hechos más importantes que ocurrieron el año pasado en el país y en el mundo. La fotografía te tiene que generar algo. Las imágenes que recibimos son anónimas. Nosotros no sabemos de quienes son, solo las vemos con un número de referencia. Para la muestra de este año vimos 2.200 fotografías que enviaron los colegas y quedaron seleccionadas 158».

La puesta abre con los festejos del mundial 2022 y la expresión de felicidad de la gente en la calle. A medida que se avanza en el recorrido, el panorama cambia y aparecen reflejos de las otras realidades argentinas. La masividad abandona el tinte festivo y se expresa y reclama ante la pobreza, la desigualdad, la falta de techo. Los incendios forestales constituyen otra de las temáticas que enmudecen la mirada: las imágenes de las llamas ocupando todo el cuadro, queman.

Para Sebastián Vricella, presidente de aRGra: «El espíritu de la muestra nace en 1981 y tiene como objetivo dar a conocer todo el talento que los medios de comunicación no editorializan. Se origina en los años ochenta y, junto con Teatro Abierto, fueron pioneros en empezar a romper con esta lógica de lo que no se muestra en estos 40 años de democracia. A pesar de que actualmente estamos transitando por una infinidad de cosas, hemos ganado un año de elecciones en arGRa. Esto nos ayuda a tener fuerzas y seguir adelante con iniciativas nuevas y renovadas frente a la coyuntura política actual”.

A medida que se avanza en la muestra toma protagonismo una crisis que no se circunscribe solamente a Argentina. Las imágenes del hambre, la precariedad y el terror que se vive tras la guerra de Ucrania y Rusia son unas de las más impactantes. La decadencia que genera el capitalismo protagoniza las escenas e impregna cada una de las imágenes más allá de su ubicación geográfica: el imperialismo y la batalla por monopolizar el poder se hacen presentes.

La reportera gráfica Natacha Pisarenko habló con ANCCOM sobre algunas de sus imágenes que formaron parte de la muestra y de lo que implica el oficio. «Esta profesión hace que un día estés en la cancha de fútbol en una final y otro día estés fotografiando la vida en Kiev. No tiene nada que ver una cosa con la otra. No son ni comparables las sensaciones que tenés en ese momento. En Kiev me pasó ver el esfuerzo de la gente por seguir, acostumbrándose al miedo, con ganas de continuar con la vida que tenían, pero distinta. Eso es impresionante. Los niños no dejaban de jugar aunque estaban en escenarios bombardeados. Todos tenemos cosas dentro que quedan plasmadas en cómo vemos y lo que vemos, pero trato de dejar todos mis prejuicios, opiniones, trato de ir a fotografiar como con la cabeza de un niño para encontrar cosas que me sorprendan».

En relación al espacio donde tiene lugar la muestra, Martin Bonavetti, subsecretario de Gestión de Espacios y Proyectos Especiales del Ministerio de Cultura de la Nación, sostuvo: «Para nosotros es una celebración. Hace cuatro años cuando propusimos recuperar el Centro Cultural Borges para el Ministerio de Cultura tomamos una decisión a partir de nuestra convicción: las instituciones públicas tienen y deben actuar en coyunturas complejas, pero sin lugar a dudas no tienen que estar resignadose a segundos planos o invisibilizandose por debates que muchas veces ensombrecen al empleado público».

ticulando con esta idea, la lucha de los trabajadores está también plasmada a lo largo de la muestra: la disconformidad de las multitudes en relación a una respuesta política se evidencia en las imágenes y explica los resultados electorales de agosto. Aparece una vinculación entre la batalla que enfrentó el Centro Cultural Borges y la que día a día libran los trabajadores de prensa en otros campos. Para Bonavetti: “Esta es la casa del fotoperiodismo. Estas muestras no solamente tienen un alto valor artístico, sino que permiten visibilizar demandas de sectores, sujetos y trabajadores. Los trabajadores fotógrafos siempre han sido los que levantaron la bandera de la dignidad del trabajo frente a otros periodos donde el periodismo se ha sentido tal vez un poco prostituido e intervenido por intereses más espurios. El trabajador fotógrafo está precarizado, perseguido, reprimido y para nosotros es fundamental desde el Ministerio de Cultura asumir una política pública que exprese su trabajo y que le dé voz a todas esas demandas que en la mayoría de veces las editoriales deciden obturar».

 

Orgullo de ANCCOM

Las diversidad de las imágenes muestra desde los textos que son parte del cuerpo de Kike Ferrari, retratado por Leandro Teysseire -editor de fotoperiodismo de esta agencia-, hasta una Moria Casán festejando el día del orgullo subida a una carroza en la obra de Camila Godoy -fotoreportera formada en ANCCOM-. También incluye desde un retrato de una madre que abraza a su hijo en la conmemoración del Día de la Trabajadora Sexual hasta otro de la diputada del Frente de Todos, Cecilia Moreau, tras ser electa para presidir cámara baja, en un hecho histórico. Entre todos, construyen un verdadero rompecabezas que sintetiza el año noticioso.

Graciela Calabrese pertenece al colectivo aRGra desde 2003, fue miembro de su Comisión Directiva durante 2017-2021 y actualmente es coordinadora de las visitas educativas de la muestra anual: «Cada año durante la muestra realizamos en los días hábiles visitas educativas con la presencia de reporteros gráficos que reciben a los estudiantes para recorrerla”. Por otro lado, la muestra pretende tener un alcance federal, tanto en los hechos que se exhiben como en hacerla itinerante. “Nos encargamos de que la muestra recorra todo el país, desde Neuquén, Viedma, Rosario, Tucumán hasta Santa Fe y el sur», agregó Calabrese.

La muestra se puede visitar de forma gratuita en el Centro Cultural Borges, Viamonte 525 CABA, a metros de Galerías Pacíficos, de miércoles a domingos de 14 a 20 horas, hasta el 23 de septiembre.

“Es nuestra propia editorial sobre lo acontecido, por lo menos fotográficamente”

“Es nuestra propia editorial sobre lo acontecido, por lo menos fotográficamente”

La 33º Muestra Anual de Fotoperiodismo organizada por aRGRa se exhibe hasta el 7 de agosto en el Centro Cultural Borges, mañana también se suma la presentación del anuario que cuenta desde el lente de los reporteros gráficos lo que ocurrió durante 2021.

Los reporteros gráficos muestran, a través de imágenes, la realidad que vivió el país en 2021 en el Centro Cultural Borges en la 33º Muestra Anual de Fotoperiodismo Argentino de aRGRa, la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina. Este año está integrada por 130 fotografías y permanecerá abierta hasta el 7 de agosto.

El 2021 fue marcado por las secuelas de la pandemia que llevaron a la urgencia de vacunación masiva, acompañada de la apertura de actividades y la situación de los humedales del Paraná arrasados por incendios, todo eso se ve reflejados en la 33 Muestra Anual Fotoperiodismo Argentino organizada por la aRGRa. Las imágenes reconstruyen la memoria colectiva de un país que festejó con la llegada de la vacunación masiva contra COVID 19, el triunfo de la Copa América, y el festejo de los 70 años de Charly García; pero que también sufrió tragedias ecológicas, casos de gatillo fácil y femicidios.

En 2020 se cumplieron 40 años de la primera muestra en 1980, a partir de la cual se comenzó a realizar la Muestra Anual de aRGRa. Esta exhibición es única en la historia de la fotografía argentina, un hecho bisagra, ya que durante la dictadura cívico militar comenzaron a exhibir fotos de las Madres de Plaza de Mayo y visibilizar su lucha. Se mostraron las fotografías que los medios no mostraban. Esta muestra “es nuestra propia editorial sobre lo acontecido, por lo menos fotográficamente”, cuenta Sebastián Vricella, vicepresidente de aRGra.

La convocatoria para socios y socias de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (aRGra) se realiza con diferentes ítems: actualidad, vida cotidiana, naturaleza, medio ambiente, deporte, artes y espectáculos. Las fotografías son enviadas por los socios -en este caso participaron 1700 fotos- y el comité editor conformado por Daniel García, Silvana Colombo, Inés Quinteros Orio, Candelaria Lagos y Emiliana Miguelez fueron los encargados de seleccionar 130 fotografías para la exposición.

En el marco de la celebración de los 80 años que cumplió aRGa, la asociación también celebra que por primera vez tiene como presidenta a una mujer, Eva Cabrera. En 2020 se constituyó una comisión de género que viene trabajando desde 2019. “Por el lugar en general que tiene y tuvo el rol de las reporteras gráficas, tanto en la calle como en las redacciones y en el ámbito laboral, que por suerte son cada vez más”, remarca el vicepresidente Vricella.

Sobre los temas sobresalientes de la edición 2021, el Vricella explica: “Hace más de 15 años que se vienen mostrando fotos de incendios, contaminación y problemas ambientales. Decidimos darle la prioridad que quizás todos los años se relegaba en la muestra. Los incendios y los cambios climáticos es una realidad que nos afecta hoy y lo pusimos de relieve en ese sentido”.

La muestra

El recorrido inicia con la fotografía a gran altura del fuego avanzando los humedales que rodean al Río Paraná en la provincia de Entre Ríos, capturada por Tomás Cuesta. El fotógrafo cuenta la dificultad de poder tomar la foto, ya que no había manera de llegar a donde estaba el incendio que fuera por vía aérea: “Fue muy difícil de hacer esa foto porque había brigadistas y algún que otro funcionario volando por helicóptero. No había manera de llegar a donde estaba el fuego a pie o en auto, era por helicóptero. No conseguimos que nadie del Ministerio nos llevara”. Sin embargo, con sus compañeros consiguieron que un joven que estaba haciendo el curso de piloto los lleve: “Nos dejó el precio de la hora de vuelo”, señala.

Con respecto a la elección de las imágenes Cuesta relata el proceso: “Normalmente para un concurso se eligen las fotos más lindas, pero en una muestra como aRGra es un poco distinto, porque creo que se trata demostrar lo que sentimos, lo que no se pudo mostrar en los medios donde que laburamos. En el caso ambiental, mandé muchas fotos de ese tema porque me parece que, si bien se habla cada vez más, no se le da la entidad que tiene”.

Sin moverse del Litoral y con la peor bajante del Paraná en 70 años se encuentra el retrato de la pescadora y referente de la Cooperativa de Trabajo «Fisherton-Pueblo Esther», María Barrios, que parece quedar atrapada por las redes vacías de peces, aunque finalmente consigue su objetivo. En el trabajo fotográfico de Celina Mutti Lovera, la pescadora del Paraná muestra orgullosa el resultado de su tarea.

Las imágenes que rescatan la campaña de vacunación se reflejan bajo el lente de Sebastián Granata, quien muestra a personas mayores disfrutar de películas de Chaplin, antes y mientras se vacunan en el reformado cine Lumiere de Rosario. Esteban Collazo, captura al presidente Alberto Fernández descubrir su brazo para recibir el refuerzo de la vacuna contra el COVID. Es su mismo lente, el que retrata al primer mandatario con una gran sonrisa, mientras muestra entre sus dedos un pequeño frasco con la fórmula contra el virus.

La euforia del fútbol también atraviesa la exhibición, con la imagen de Gustavo Pagano, que retrató a Lionel Messi con la Copa América en el brazo, poniendo punto final a una racha de 28 años sin títulos. La ola feminista aparece en el trabajo de Josefina Nicolini, quien captura la integración deportiva de Mara Gómez, la primera jugadora trans de la liga profesional de fútbol argentino, luego de firmar su pase a Estudiantes de La Plata.

También aparece el primer aniversario de la muerte de Diego Armando Maradona, bajo el lente de Mariana Nedelcu, quien captura a un niño con una peluca negra de rulos ensortijados descansando en un banco, dentro del santuario en el barrio porteño de La Paternal. “Yo había ido a hacer otra historia. Habíamos ido a Villa Fiorito a la casa de la infancia del Diego. Me imaginaba una foto que nunca existió porque llegamos ese día, un día lluvioso, frío y no había nadie. La foto del santuario terminó siendo la última del día, porque nos fuimos de ahí con material escaso. Fuimos a la casa de Enrique García Medina para editar y Enrique muy generosamente me dijo ‘te falta material’”, reconstruye y revela que de ahí ambos decidieron ir a La Paternal: “La verdad que gracias a él hicimos un buen equipo. Fue un poco por su propuesta que pude tener esa foto”, confiesa Nedelcu.
“Una de las miradas que adoptamos como colectivo de aRGRa, es una mirada contundente, que invite a reflexionar. Lo que pasa es que la gente la ve y se acuerda de cosas que pasaron. Se pierde un poco de noción de todo lo sucedido”, explica Lucía Merle, docente en aRGra y fotógrafa encargada de retratar la movilización de trabajadores y trabajadoras de la salud del AMBA pidiendo aumento de salarios en el Puente Pueyrredón. Lucía Merle también es la autora del retrato de la madre de Úrsula Bahillo despidiendo a su hija, víctima de femicidio en la ciudad de Rojas, Provincia de Buenos Aires.

Merle describe el rol de la muestra: “Es importante que estén estas fotografías dentro de la muestra. 2020 fue la pandemia y el 2021 fue la vacunación. Tocan dos temas que fueron muy importante y necesarios de visibilizar. (Que la muestra) Aporte un poquito a visibilizar no solo lo que vimos todo el tiempo como el presidente con la vacuna, o el centro de vacunación, como lo obvio, sino estas otras cosas”. A su vez, como docente rescata la incorporación de los más jóvenes a la Asociación: “potencias que enriquecen el cruce de los fotoperiodistas profesionales y de los que se están formando desde otro lado, diferente del que formó a mi generación. Es súper enriquecedor”.

El área de la exposición dedicada al espectáculo comienza con el retrato de Palo Pandolfo. En julio de 2021, previo a su muerte, el rockero con un sombrero negro, cubierto con un poncho rojo y un echarpe azul, sostiene en su mano derecha un gallo de cresta roja y en la otra tiene un ramo de flores violetas. Fue capturado por Leonardo Vaca. Otra imagen para destacar es la de Fernando Gens que capta al músico Charly García en el festejo de sus 70 años en el Centro Cultural Kirchner, cuando emerge con sombrero y anteojos detrás de un piano sobre el escenario, levanta su mano derecha con los dedos en V y sonríe.

La muestra de 130 imágenes compone la historia argentina sucedida en 2021, el espectador es libre de organizar el recorrido de la muestra según sus intereses. La exhibición se puede visitar de miércoles a domingos, de 14 a 20, hasta el domingo 7 de agosto, en Viamonte 525, Ciudad de Buenos Aires.

El Anuario

Además de la tradicional muestra, como cada año, la Asociación presenta el Anuario Fotoperiodismo Argentina, “un momento de pausa para poner en la mirada lo acontecido en el 2021”. Este evento, se realizará mañana, 9 de Julio, a las 17, también en el Centro cultural Borges, donde está alojada la muestras, todo con entrada gratuita.