¿Por qué a Milei le resulta tan fácil despedir a los empleados públicos?

¿Por qué a Milei le resulta tan fácil despedir a los empleados públicos?

Ana Castellani, la exsecretaria de Gestión y Empleo Público del gobierno de Alberto Fernández reflexiona tras el despido de 15.000 trabajadores del Estado en un fin de semana. Cuestiones de hecho, limitaciones legales y problemas típicos del empleo público.

Mientras que la marea de despidos en el Estado por parte del nuevo gobierno nacional sigue en aumento y los expulsados se reúnen para organizarse, aumenta la tensión que desemboca en represión y una creciente presencia policial. Este recorte súbito conlleva también el de numerosas funciones estatales.

La desvinculación forzada de 15.000 trabajadores del ámbito público abre una serie de interrogantes sobre el funcionamiento de la administración nacional. ¿Es realmente sostenible una ola de despidos masivos de este calibre? ¿Cuáles son las medidas de prevención de las que disponemos?

ANCCOM se reunió con Ana Castellani, ex-Secretaria de Trabajo de la gestión Fernández-Fernández, para discutir sobre el funcionamiento y las cuestiones de hecho que rodean este periodo marcado por la incertidumbre.

¿Qué posibilita este manejo de la cuestión pública dentro del marco legal? ¿Qué actitud frente a la construcción previa encontrás?
Milei en campaña fue muy claro sobre lo que pensaba del Estado, de las funciones que tenía que asumir: un ámbito de acción mucho más restringido que el planteado por cualquier otra fuerza política con anterioridad. También dejó en claro lo que pensaba del empleo público: se opuso, hasta formalmente, a la realización de concursos en el marco del programa de regularización de la dependencia.
Es importante aclarar que la relación de los despedidos era totalmente formal porque es una relación de dependencia, enmarcada en la Ley de Empleo Público. Son contratos de renovación anual, no una relación informal o de dependencia encubierta. El tema es que no tiene la misma estabilidad y ha sido una herramienta que los distintos gobiernos del siglo XXI han usado de forma excesiva.
Durante nuestra gestión, cuando hicimos el diagnóstico de la situación, identificamos un problema importante: 36 mil personas que trabajaban en la administración pública con contratos en renovación hace 5 años o más. Estos cargos, evidentemente no correspondían a un proyecto transitorio, sino para cumplir tareas sustantivas. Para eso diseñamos un plan de concursos ambicioso que quedó sin efecto con la decisión del gobierno de no patrocinarlo.

Hay mucha confusión con el tema de los concursos, una demanda genuina de las personas empleadas en el sector público, que después se utiliza como demanda política, pero que tiene un problema de implementación elemental: o vas por un DNU que los pase a planta para que venga otro presidente y los saque o vas a un proceso de concursos que lleva en el mejor de los casos un año.

Ana Castellani

Y Milei trunca ese proceso…
Milei retoma el manual de los noventa. No es como el macrismo que consideraba que había ingresado militancia al sistema que había que purgar, la grasa militante. El Estado, que hoy tiene 76 organismos descentralizados, según ellos no tiene que existir y hay que echar gente bajo distintos contratos. Si están bajo el régimen de Ley de Contrato de Trabajo, hay que indemnizarlos. Por eso es más fácil ir contra los llamados Artículo 9, porque son los de menor costo económico. Sencillamente se desvinculan por cese de contrato, más allá de que después haya embargos colectivos y acciones individuales. Pero eso no pasa con todas las reparticiones: había gente vinculada hace 30 años y fue desvinculada a las apuradas, sin ningún registro ni análisis.

Parece que la idea es barrer con todo y después ver cómo seguir… ¿Cómo hacer para seguir avanzando ante tanta incertidumbre?

Lo que pase en empresas regidas por la Ley de Contrato de Trabajo es una cosa. Necesitás pasar por el Congreso. Lo de una dependencia de un ministerio es otra cosa, porque se enmarca en el empleo público. Es muy importante aclarar que no se pone a la gente en la planta de la Administración Pública Nacional. La Ley estipula que solo se ingresa a la planta permanente por un mecanismo de selección abierto, donde el mérito y la idoneidad es evaluada mediante un proceso ya construido. El concurso, en el mejor de los mundos, lleva un año desde que se empieza a armar el expediente que inicia el proceso y su cierre con una designación. No es sencillo colocar a una persona en planta permanente. Hay mucha confusión con eso, porque es una demanda genuina de las personas empleadas en el sector público, que después se utiliza como demanda política, pero que tiene un problema de implementación elemental: o vas por un DNU presidencial que los pase a planta para que venga otro y los saque o vas a un proceso de concursos que lleva tiempo. No hay una varita mágica de pase a planta en la Ley Marco del Empleo Público. Si bien todo empleado público tiene garantizada la estabilidad en la Constitución, cuando tenés un marco regulatorio que establece que cualquiera de las partes puede prescindir de la otra y que presenta la posibilidad de indemnización, se presenta esta inestabilidad. La política de Milei la usa para recortar las funciones del Estado.

 

¿Es esta inestabilidad parte de la irregularidad del marco legal que le da lugar a este tipo de discursos, que estigmatizan el trabajo público?
Acá no hay ningún criterio. Se ha despedido a gente que trabajaba. Nadie puede creer que todas estas personas a las que se está despidiendo efectivamente no iban a trabajar o eran militantes. Como el empleo público es muy vasto y heterogéneo la ciudadanía solo registra que uno hace un trámite y no sabe si es de la nación, provincia o municipio. El empleado público de nación es particular: un 57% de ellos tienen estudios superiores, un porcentaje más alto que los del sector privado, y realizan tareas que requieren de alto grado de profesionalidad. El sistema político tiene que decidir el tipo de administración pública que necesita y cómo sostenerla a lo largo del tiempo. Por ejemplo, al dejar el Instituto Nacional de la Administración Pública (INAP) sin conducción, toda la oferta que dejamos construida para la capacitación queda sin implementar, porque nadie la firma y no puede ponerse en marcha.  Entonces no se quiere hacer un Estado más eficiente si no se aprovechan los recursos ya armados. No le interesa mejorar el Estado, sino privarlo de sus funciones.

¿Cuáles son los sectores más golpeados? ¿Cuáles consideras que eran más predecibles?

En primera instancia, Milei gobierna lo nacional. Indirectamente, que no manden fondos a las subdependencias también afecta el salario de sus trabajadores, pero no es una acción directa. La única herramienta federal con la que puede afectar trabajadores públicos de otros sectores es mediante la capacitación federal y eso está totalmente parado. Esta estrategia de no-gobierno es una forma de dejar morir a distintos organismos.

La ciencia y tecnología es uno de los sectores más atacados que todavía no pueden cerrar porque se crearon por ley o por decreto. Además porque tienen demasiado prestigio como para ir contra ellos de forma abierta en esta primera etapa. Pero la desfinanciación, la designación de una dirigencia de baja jerarquía, los deja sin forma de conseguir nada.

La Agencia de Promocion Cientifica y Tecnologia venía mejorando mucho a nivel instrumentos, pero ahora no está funcionando y el sistema científico queda en órbita de un Ministerio de Capital Humano que es un experimento raro, un amalgama de funciones de Trabajo, Educación, Cultura, Mujeres, Género y Diversidad, un mega ministerio imposible de gobernar, puesto a cargo de gente sin antecedentes. Esto va a presentar un problema severo para hacer que se implementen medidas desde él.

Todo gobierno tiene problemas para coordinar la acción del Estado pero este caso es realmente inédito, con muchos cargos aún sin designar y altísima cantidad de renuncias a cargos políticos de autoridad. Esto no pasó nunca, es una inestabilidad de rotación del cuadro inusitada. No es gratis cargarte gente de 15 o 20 años de antigüedad, porque cumplen funciones específicas de una trayectoria al interior del Estado. Eso explica la cantidad de errores de gestión. Esto habla de una fragilidad en la administración de la cosa pública que va a ir en aumento con el correr del tiempo.

 

¿Cómo te parece que le llega al resto de la población? ¿Ves posibilidades de un juicio político?
Es un panorama malo, pero no desolador. Las cosas buenas que tiene la Argentina son activos que no hay que destruir. En esa medida se puede construir arcos de alianza en los reclamos. Por lo demás, el mercado laboral que tenemos ya tenía problemas y ahora empieza a tener otros mayores. La gente no está mejor, eso es objetivo. En algún momento, ya pedís un resultado y sin un sendero de mejora que te dé un horizonte de posibilidad, no vas a resistir mucho.Ahí es que todo esto que fue gracioso y llamativo y le permitió a Milei llegar se vuelve totalmente en su contra: las canchereadas de los funcionarios, los paseos, los premios, los aviones… todo alimenta la indignación. Si no se resuelven los problemas materiales, es difícil que el gobierno consolide el marco de apoyo. Yo lo veo totalmente frágil. Ellos sostienen que esa fragilidad es una virtud. Yo creo que no es una virtud la fragilidad en una fuerza política, es una flaqueza del estilo de liderazgo. Si a eso le sumás la falta de trayectoria, la no posibilidad de articulación y la dinamización de estas articulaciones lo único que les queda es ir a por todo rápido, desatar un “ahora o nunca”. El fracaso de la administración se paga con disconformidad social. El juicio político vendrá después. Si vos echas 11 mil o más empleados estatales, eso se derrama en problemas sobre el sector privado, sobre todos los trabajadores. Toda esa gente entra a competir con vos por un puesto de trabajo y también baja su nivel de consumo. Estabilizar lo macroeconómico no sirve si no tenés un mercado laboral dinámico, porque solamente le sirve a los que están adentro, quienes quedan afuera del mercado laboral, ¿cómo compran alimentos?

 

¿Considerás que algún sector que no conoce el trabajo formal dio pie a este avance a nivel ideológico ?

Si en algún punto hubo sectores que tuvieron funcionamientos que habilitaron esto, no creo que esta sea la solución. Al menos debe acompañarse de cierto armado legal, porque este proceso habilita una gran cantidad de movimiento, pero deja a mucha gente desempleada en una economía ya frenada. La república tiene sus contrapesos, pero ahora no están funcionando como uno esperaría porque todavía hay una idea de que el presidente cuenta con el aval popular. No hay que estar urgido, esto no es el club del helicóptero. Independientemente de cómo le vaya en el gobierno, la llegada de Milei instala ideas muy distintas a las que creíamos parte de la identidad nacional. Esto no es un fenómeno exclusivo de Argentina. Es un fenómeno mundial, donde se corren los límites de lo posible en materia discursos. La fragilidad de la democracia que no ha sabido dar respuestas al resto de problemas cotidianos de la ciudadanía abre el juego político. Todo es cuesta arriba en la gestión. Hoy estás en el mejor momento, mañana estarás peor. La gestión es ardua y cada vez se hace más compleja. Argentina, a diferencia de otros países de la región, sigue teniendo un montón de mecanismos de solidaridad y construcción colectiva como los sindicatos. Por eso se los ataca tanto. Sin tener una visión idílica de ellos, obviamente también son conflictivos, los sindicatos son una forma poderosa de organización colectiva. Eso y los demás sectores que se organicen para hacer frente, son acciones muy importantes. La gente necesita ocuparse con tranquilidad de su vida familiar, doméstica, cotidiana. Ir a trabajar, ir al colegio, hacer un asado cada tanto, juntarse con sus amigos. Pero entre tantos paros, escasez y otros malestares, es todo palo y nada de zanahoria.

La Argentina no es una sociedad suicida. Cuando está peor, sabe decir “Ya basta”. Siempre ha sido así. No pudo la dictadura desmantelarla, con todo lo que se hizo. Así y todo se sigue dando pelea. Imagínate con un gobierno que cada dos años tiene que ver como reválida en las urnas. Ni este ni ningún otro.

La vida después del incendio

La vida después del incendio

Este jueves se estrena en el Gaumont «Tormenta de fuego», un documental que muestra cómo siguió la vida de las personas que perdieron todo en los incendios patagónicos.

La Patagonia se quema todos los años y esto no parece significar gran pérdida para el poder político que administra los recursos nacionales. ¿Pero qué pasa con los habitantes locales una vez que el fuego se apaga? ¿Cómo se vive después de haber perdido hasta la última foto familiar? ¿Qué se hace cuando no hay donde volver?

Tormenta de fuego es el nuevo largometraje de Luciano Nacci y Axel Emilien, dos directores patagónicos que se unieron para cocrear este relato que busca encarnar una voz local. A través de la utilización de planos aéreos de los suelos chamuscados logran transmitir la dimensión de lo ocurrido en el verano de 2021 en distintas localidades de Chubut como algo inabarcable, irreparable.

El documental, que se estrena este jueves en el amenazado Cine Gaumont, toma una perspectiva íntima al narrar qué es lo que sucede detrás de cada incendio, qué significa para los habitantes locales perder sus hogares, ver su vida arrasada por el fuego.  Axel, habitante de El Hoyo, mira a cámara y expresa: “Todo lo que tenía en la vida se estaba quemando, prendiendo fuego, desapareció en un instante. Cuando empezó a arder de repente se ve todo un bosque de 200 metros de ancho por 100 de largo convertido en una sola llama, era el infierno en carne propia. Lo único que queríamos era seguir vivos, todo lo material no vale nada, la vida vale mucho más.”

Con un montaje inmersivo y sombrío, Nacci y Emilien logran presentar un relato sensible, poniendo voz y cara al costo de los incendios. En diálogo con Nacci, comenta sobre la decisión de narrar lo ocurrido desde la perspectiva de sus habitantes: “Cuando llegamos a la zona arrasada por el fuego nos encontramos con que ya habían hecho un montón de entrevistas a la gente que estaba ahí. Y generalmente lo que nos decían es que las entrevistas, eran amarillistas o más banales, y esto dolía. Nos comentaban que lo que más pesaba era que esto ya había sido olvidado por el ojo público, ya había dejado de estar en agenda.”

El realizador agrega: “Entonces, lo principal que encontramos en la película era la posibilidad de dejar ese registro, lograr que no se olvide. Ahora, el 9 de marzo ya se cumplen tres años desde el incendio, y la mayoría de la gente no volvió a construirse su casa.”

El documental muestra el trabajo de los guardaparques y brigadistas de la zona por defender los territorios incendiados, hogares de muchos de ellos que trabajaron horas inhumanas por rescatar a las más de 500 familias que perdieron sus hogares en el fuego. La duda que ronda toda la proyección es la intencionalidad del incendio, un misterio que hasta la fecha no fue resuelto y aún pesa como saldo pendiente ante una comunidad que lo perdió todo.

El largometraje ha impactado a lo largo del globo, con participaciones en festivales como el de Fonfria, España, donde obtuvo el premio a mejor documental; el Overcome Film en Estados Unidos,  donde obtuvo el quinto lugar a mejor documental, y el de Cine de Trieste, Italia, entre tantos otros, donde lograron acumular un numero impensado de premiaciones para un largometraje independiente. “El incendio es algo universal, por culpa de la ausencia estatal o la mano humana son cuestiones que se replican en otras partes del mundo, y esto genera mucho interés en públicos muy diversos”,  expresa Nacci.

La producción fue realizada a pulmón por los directores, que al ver el incendio sintieron la necesidad de estar en el territorio, colaborar de alguna manera con gente que lo había perdido todo. “La película está financiada en su mayoría por la gente local, los habitantes de El Bolsón y de El Hoyo que nos dieron alojamiento, comida, vino, que fue necesario y también merienda. Fue muy tremendo, estás haciendo una entrevista a alguien que perdió todo. Y en plena pandemia, toda la gente en sus casas, y acá la gente afuera, sin tener donde ir”, dice Naicch y agrega: “Por suerte el Fondo Nacional de las Artes colaboró, y después el Instituto Nacional de Cine, y Artes Audiovisuales (INCAA) dio la posibilidad de poder estrenar en el Gaumont, un espacio que la administración nacional quiere cerrar”.

La proyección trae a la escena una discusión que está en boga sobre el cierre tanto del INCAA como del Fondo Nacional de las Artes, dos organismos cuyo funcionamiento da la posibilidad a productores independientes de construir una narrativa por fuera del epicentro de la capital federal. “Ahora ya ni siquiera eso, estamos discutiendo de cortar todo tipo de apoyo a un instituto que es autárquico. Consideran a la cultura como si fuese un enemigo. En realidad lo que hacemos es mostrar la realidad de lo que está sucediendo subjetivamente, pero es una forma de mostrar nuestra identidad”, aporta Nacci y denuncia: “Lo que se está intentando hacer es borrar la identidad nacional cultural, y no lo vamos a permitir, vamos a las calles a defender estos espacios”.

Tormenta de fuego es un relato íntimo de los vecinos, pero también es una denuncia social y el llamado a alzar la voz por lo perdido, un reclamo ante la desidia gubernamental y las decisiones políticas a espaldas del pueblo. El documental finaliza con paisajes impactantes y un llamado de la comunidad a la acción colectiva, a velar por el bien común y por el futuro de la humanidad y volver a encontrar un cauce común en la reconstrucción del lazo social.

Un banquete de película

Un banquete de película

La road-movie documental de La Renga, Totalmente poseídos, cuenta el motoviaje de más de cinco mil kilómetros de la banda, tras la pandemia, cuando presentaron por todo el país su último disco, “Alejado de la red”.

Motores, ruta, amistad y mucho rock and roll es lo que transmite Totalmente poseídos, el documental de La Renga, dirigido por su líder, Gustavo “Chizzo” Napoli, y Diego Stokelj. El filme muestra cómo un grupo de amigos –los integrantes de la banda– organizaron la vuelta a los escenarios después de la pandemia para presentar su disco “Alejado de la red”.

Atravesando todo el país con sus motos, como es su tradición, el grupo de amigos sigue buena parte de la Ruta 40 para ofrecer en distintos puntos del país sus clásicos “banquetes” (como se conoce popularmente a sus recitales). Así, desde Salta hasta Río Negro, se escribieron las páginas de un diario de viaje lleno de aventuras que parece no tener final.

Ezeiza es el kilómetro cero, donde la banda se reúne para gestar la idea de una gira federal y en moto trazando el mapa de la Argentina. Para emprender el camino planificado, preparan sus motos en distintos talleres mecánicos. Pueblos, montañas, valles, ríos y desiertos ilustran el viaje motorizado de más de cinco mil kilómetros para realizar cuatro recitales multitudinarios en Córdoba, Salta, San Luis y Río Negro.

Además de los diversos paisajes de nuestro país, los planos abiertos –que abundan en la película– van mostrando parte del itinerario de La Renga con la voz en off del propio Chizzo. Un punto alto del documental son los ensayos de la banda a orillas del Cañón del Atuel, junto con otras escenas donde se alcanza a apreciar la relación de amistad entre ellos.

La sonorización de la película incluye canciones nuevas producidas exclusivamente para ser escuchadas en las salas de cine. Los flamantes temas y toda la música fueron grabados y mezclados especialmente para poder ser reproducidos en todos los formatos de audio que brinda el cine, por eso Totalmente poseídos no sólo es para ver, sino para escuchar y sentir.

Producida y realizada por La Renga, Totalmente poseídos dura 93 minutos y se estrena el jueves 7 de marzo en cines de todo el país. Apta para mayores de 13 años.

La lucha campesina en Mendoza

La lucha campesina en Mendoza

La ópera prima de Mariano Cócolo, La calma, muestra la realidad del pueblo huarpe a través de la historia de una joven que tiene que retornar a su tierra natal para cuidar a su padre.

 

La película La calma, del director mendocino Mariano Cócolo, cuenta la historia de Nancy, una joven que vuelve a su pueblo para cuidar a su padre que acaba de sufrir un ACV. Interpretada por la actriz Tania Casciani, Nancy se había mudado a la ciudad para estudiar Derecho y, al mismo tiempo, trabajar en una fábrica de botellas, pero tras el accidente cerebrovascular de su padre se ve obligada a volver a su pueblo natal, no sólo para atenderlo, sino también para resguardar sus tierras, que están bajo amenaza de los terratenientes.

Rodado en Lavalle, provincia de Mendoza, el filme busca visibilizar a la comunidad huarpe, cuyos miembros todavía hoy trabajan la tierra, viven de la crianza de animales y luchan diariamente con las inclemencias del lugar, sobre todo contra la crisis hídrica que padece el secano mendocino. “Me impactó la manera que resisten ese estilo de vida y cómo pelean día a día. A partir de las charlas, empezaron a salir problemáticas en relación a los abusos del poder, que despertaron algún tipo de inquietud y necesidad de contar una historia en torno a esa realidad”, expresa Cócolo en diálogo con ANCCOM

El proyecto, según el cineasta, nace en el campo, lo cual no es una experiencia nueva para él, ya que desde chico ha recorrido distintos parajes rurales. Sus padres, además, le transmitieron el amor por las tradiciones, el folklore y la gauchesca. Pero, aclara Cócolo, siempre fueron visitantes: disfrutaban ciertas actividades y volvían a la ciudad. Por esta razón, el director sintió la necesidad de compartir y escuchar a las personas de la comunidad huarpe para mostrar su coyuntura y sus costumbres, que van pasando de generación en generación.

El árido paisaje se exhibe, en la película, en blanco y negro. Si bien se filmó a color, el monitor lo tenían con un registro visual clásico, para quitarle artificio al entorno. Querían poner el foco en el personaje y la realidad que vivía, sacándole cualquier tipo de color. De alguna manera, el blanco y negro resumía lo que pasaba allí. Algunas de las escenas, tal como cuenta Cócolo, estuvieron inspiradas en el director soviético Andrei Tarkovsky, a modo de homenaje estético.

La calma propone una experiencia visual y sonora que permite al público reflexionar y conmoverse. «A veces, por amor, uno deja muchas cosas atrás para estar con la persona que ama. En este caso, Nancy se quedó con su padre y lo cuidó hasta el día de su muerte. Al ver que él estaba sufriendo, ella dejó sus estudios y su trabajo, eso realmente me emocionó”, afirmó Facundo Coronel, un espectador de la película.

Durante el rodaje, el equipo debió afrontar distintos desafíos, como el intenso frío por las noches. El actor Miguel Ángel Borra, quien interpretó el padre de Nancy, vivió en carne propia tales inclemencias y llegó incluso a enfermarse, no tanto, por supuesto, como su personaje. Asimismo, estuvieron días sin poder ducharse, por las pocas comodidades de las que disponían y por el estricto cuidado del agua en el lugar.

“El desafío más grande es llevar adelante una película con pocos recursos. Pero uno encuentra justamente en eso la posibilidad de tener al lado gente maravillosa, a la que voy a estar agradecido siempre”, remarca Cócolo.  El rodaje, señala, se realizó en dos etapas: 11 jornadas a partir de julio de 2018 y, casi un año después, en 2019, dos jornadas más. En total fueron trece jornadas junto a un equipo “muy talentoso y hermoso”, como lo define Cócolo.

Distinguida con diversos premios en Argentina y en el exterior, La calma se puede ver en la Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín, Av. Corrientes 1530, CABA.

La experiencia singular de Ediciones Bonaerenses

La experiencia singular de Ediciones Bonaerenses

Fundado hace tres años y con tres decenas de títulos publicados, el proyecto provincial incluye a escritores como Roberto Arlt y Haroldo Conti, concursos y textos escritos desde el economista Aldo Ferrer hasta internos de un taller literario del penal de Olmos. Los libros, que se distribuyen en ferias y bibliotecas, también pueden descargarse gratuitamente.

Creada en mayo de 2020 mediante un decreto del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Ediciones Bonaerenses es la primera experiencia de una editorial estatal en el distrito. Guillermo Korn, director editorial, explicó: “El rol de una editorial de estas características es visualizar algunas producciones que la provincia tiene. Existe una responsabilidad, el carácter público hace que también tenga una cosa más plural, que busque ser más representativa que lo que un catálogo de una editorial independiente o comercial busca representar”.

En una maniobra doble, rescatar autores y autoras de la provincia y llegar a cada uno de los bonaerenses, la editorial hace una apuesta a la territorialidad. En una entrevista con ANCCOM, Agustín Arzac, coordinador general, afirmó: “La provincia es muy amplia y diversa. La cuestión identitaria bonaerense tiene sus pliegues y repliegues, no pensamos en una identidad monolítica como una totalidad, sino también en esa diversidad”.

En los tres años de vida de la editorial se publicaron casi treinta títulos, que pueden encontrarse en más de 450 bibliotecas distribuidas por todo el territorio provincial. Entre sus impresiones se destacan obras de Roberto Arlt, Haroldo Conti y algunas propuestas únicas de la editorial, como el Catálogo Razonado del Museo Pettoruti o Ruta Salomone. “La propuesta inicial también tenía que ver con fortalecer vínculos de mediadores de lectura como son las bibliotecas populares de la provincia, que son muchísimas y hacen un trabajo cotidiano muy importante por el fomento de la lectura”, planteó Arzac. Además de los puntos físicos dispersos en la provincia, los libros de Ediciones Bonaerenses se pueden encontrar en su página web en formato digital para ser descargados gratuitamente.

«El carácter público hace que la editorial sea más plural”, explica Guillermo Korn.

Actualmente se está trabajando en el plan de edición 2024 que proyecta seguir con el ritmo de impresión actual, reforzar el perfil de la editorial y fortalecer algunas de las colecciones. “Queremos estar en más bibliotecas, en más ferias, acompañar a la provincia en ese crecimiento también cultural, que es una propuesta de este gobierno”, aclaró Arzac en cuanto a los objetivos a corto plazo. La idea es que «proyectos como este no puedan ser desarticulados nunca más. Es un aporte muy importante para la provincia tener una editorial, hay pocas experiencias de editoriales estatales en el país, muy pocas en Latinoamérica también. Hay que cuidarla y en ese sentido cuidarla es darle vida”.

 

Concursos

Una parte de los libros que Ediciones Bonaerenses imprime se originan en concursos de escritura. Algunos son llevados adelante por organismos fuera de la editorial, como es el caso del Concurso Haroldo Conti, para jóvenes narradores; o Buenos Aires Fantástica, que explora historias del género; o el concurso Aldo Ferrer, que busca el desarrollo económico de la provincia. En el caso de este último, uno de los títulos próximos a salir es Estudios sobre el desarrollo económico provincial, que fue trabajado en conjunto con el Ministerio de Hacienda.

El sello cuenta también con su propio concurso: el Premio Hebe Uhart de novela inédita, que pretenden llevar a cabo anualmente. En la edición 2023 se presentaron 284 obras de las cuales se eligieron dos ganadoras: A ningún lugar de Nelson Mallach, narrador y dramaturgo platense, que se llevó el primer puesto con una renumeración de 800.000 pesos, y la novela Moscú ya no existe, de Marina Berri, investigadora y docente, mereció el segundo puesto que consiste en la publicación dentro de la colección “Nuevas Narrativas” de la editorial. “Estas dos novelas están en fase de impresión y se estima que salgan antes de noviembre”, anunció Arzac. 

Catálogo

Una de las prioridades de la editorial es conformar un catálogo plural, amplio y que pueda cubrir de la mejor manera posible eso que hace al patrimonio y al acervo cultural del bonaerense. El sello combina entre sus publicaciones archivo, investigación y ficción organizadas en ocho colecciones que apuntan a lectores de todas las edades.

Territorios e Identidades, por ejemplo, rescata la riqueza de la provincia en reflexiones sobre sus singularidades y la identidad. Entre sus publicaciones se encuentra Ruta Salamone, uno de sus proyectos más interesantes, centrado en la obra de este singular arquitecto, que se gestó desde cero en la misma editorial. “Nos parecía que era muy importante porque vincula varias cuestiones que tienen que ver con la historia de la provincia”. El libro propone cuatro rutas en base a cuatro registros, que van desde lo ensayístico, lo histórico, pasando por lo ficcional y hasta la reflexión introspectiva de los autores que formaron parte del proyecto. “Queríamos que el libro le proponga al lector salir a recorrer la provincia, el lector puede hacer el viaje que quiera”.

La colección Donde Hay Una Necesidad, por su parte, que propone albergar trabajos ligados a reivindicaciones y derechos, estrenó su primer ejemplar Monólogo del tanque en mayo de este año. Este libro surge de una propuesta del taller de literatura del penal de Olmos. Carlos Ríos, coordinador del taller, explica: “En el taller empezamos una reflexión sobre el patrimonio cultural tangible, hablamos sobre qué significado tenía para una comunidad determinada tener esos monumentos”. El tanque del penal, que vigila panópticamente los pabellones, fue propuesto por los alumnos como un monumento y de ahí surgió la idea de “pedirle al tanque que cuente su visión, su percepción, su historia”. Monólogo del tanque es un relato que le otorga voz al tanque de agua del penal para que hable de lo cotidiano, de los padeceres, del sufrimiento y también de las esperanzas de la gente que se aloja en ese penal penitenciario.

Para los que participaron en el libro su impresión fue algo que los llenó de orgullo. “Ver reflejadas sus palabras, su trabajo en un libro, además con un reconocimiento institucional, fue muy importante para ellos. Hay mucha satisfacción, mucha alegría y la confianza también de que ellos pueden escribir y también pueden volcar en la palabra escrita gran parte de su pensamiento. Eso es trabajo de inclusión muy importante”, concluyó Ríos.