
Un piñón al mentón del Gobierno
En un día con varios temas sensibles a tratar y con muchas personas expectantes afuera del Congreso, la Cámara Alta aprobó por unanimidad la Emergencia en Discapacidad. También se dictó la ley que aumenta los haberes jubilatorios y la moratoria previsional. Además, los legisladores rechazaron al veto de la ley que establece un fondo de emergencia para Bahía Blanca y dieron media sanción al proyecto que obliga al gobierno a distribuir entre las provincias los Aportes del Tesoro Nacional retenidos y parte de lo recaudado por Impuesto a los Combustibles Líquidos. Todo al revés de lo que la Casa Rosada quería. Milei promete vetar las iniciativas.

No era un día fácil para el gobierno pero le salió peor de lo que esperaba: el Senado aprobó una serie de leyes muy sensibles para el gobierno: aumento para los jubilados, restitución de la moratoria previsional, además de dar la media sanción que faltaba para la Ley de Emergencia en Discapacidad. También se rechazó el veto presidencial al fondo de emergencia para Bahía Blanca. El presidente Javier Milei, desde la Bolsa de Comercio, anticipó que vetará todas las leyes que pongan en peligro el equilibrio fiscal. También acusó a la vicepresidente Victoria Villarruel de traidora por ser parte de la sesión. Horas antes ya se habían cruzado acusaciones en las redes con la ministra Patricia Bullrich.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, consideró que lo que ocurrió en el Senado fue “un golpe institucional” y amenazó con judicializar las leyes, lo que da cuenta de que el golpe del Congreso dolió en el Gobierno.
La emergencia en discapacidad
Como todos los jueves en que era posible el tratamiento en Diputados de la Ley de Discapacidad, confirmada la fecha de sesión en la Cámara Alta, la vigilia se hizo sentir. Frente al Congreso de la Nación, desde temprano se congregaron personas con discapacidad, familiares y trabajadores del sector en una nueva manifestación por la Ley de Emergencia en Discapacidad.
Para aprobar esta norma, el voto en la Cámara de Senadores fue unánime. La Ley de Emergencia en Discapacidad pasó con 55 votos afirmativos, 0 negativos y 0 abstenciones, con la ausencia del oficialismo libertario y sus aliados del Pro. Además, fallaron los intentos oficialistas de boicotear la sesión aduciendo su nulidad, denunciando un golpe de Estado, apagando monitores y otros manotazos de ahogado. Como ya contaba con media sanción de la Cámara Baja la ley quedó aprobada.
Ante los resultados de este arduo conflicto, al ser consultada por ANCCOM, Laura Alcaide integrante de la Asamblea Discas en Lucha, comentó: “La Ley de Emergencia en Discapacidad es un punto de partida en nuestras luchas. Después de organizarnos desde abajo, de sostener cinco días de paro de los trabajadores, y hacer cuatro marchas federales en un montón de puntos del país, nos encontramos con mucha fuerza y mucha organización. Sabemos que este proyecto logró unirnos en la lucha aunque no sea el que nos garantice todas las condiciones de vida necesarias. Y aún con la situación que nos aqueja, sabemos que las demandas de las personas con discapacidad y nuestro sector han tomado visibilidad”.
Mientras tanto, el presidente desde la Bolsa de Comercio manifestó su profundo rechazo a casi la totalidad de las medidas tratadas en el recinto, como la mejora en las jubilaciones y la vuelta de la moratoria, “vamos a vetar, y si se cae, vamos a judicializar”, afirmó el mandatario en su discurso en la BCBA.
La votación de esta Ley fue a las 18:44 y en la Plaza de los Dos Congresos corría la alegría pero también se vigorizaba la fuerza: “La realidad es que no podemos quedarnos con este logro. Vamos a exigir que Javier Milei no vete la ley, lucharemos otro tanto si se judicializa. Pero fundamentalmente vamos a exigir que todas y cada una de las leyes de nuestro marco normativo de avanzada se cumplan. Levantaremos cada vez más alto nuestras banderas, que no son solamente el cumplimiento de nuestras terapias, el sostenimiento de nuestras pensiones, sino también el acceso al trabajo, a la educación, la cultura y la salud. Básicamente nuestra exigencia es por vidas dignas” enfatizó la militante disca Laura Alcaide.
“Nuestra calidad de vida no es estrictamente la aprobación de una ley, por lo cual nos seguiremos encontrando en las calles”, resaltó Alcaide entre alegre y combativa.

iMás golpes al gobierno: aumento de jubilaciones
Otro de los temas calientes del día fue el tratamiento del aumento a jubilados y pensionados y la restitución de la moratoria previsional. En este caso, el Senado aprobó en general el 7,2 por ciento de aumento para los jubilados, elevó el bono de 70 mil a 110 mil pesos con 52 votos a favor, 4 abstenciones y 16 ausencias, entre las que se sumaban al bloque oficialista algunos aliados que proclamaron la invalidez de la sesión por no haber sido convocada formalmente por la presidente de la Cámara Alta, Victoria Villarruel. Sin embargo, al momento de la votación en particular de la extensión de la moratoria, los porotos cambiaron. Se aprobó con 39 votos afirmativos, 14 negativos y 1 abstención. De los 9 legisladores de la UCR que habían apoyado el aumento, 8 votaron en contra de la prórroga a la moratoria previsional y el restante, Martín Lousteau se abstuvo. No fue el único cambio en la votación por artículo por artículo, donde hubo otras bajas.
Emergencia en Bahía Blanca
El Senado también rechazó con 51 votos afirmativos el veto presidencial a la declaración de Emergencia Social, Económica, Sanitaria, Ambiental y Urbana en el municipio de Bahía Blanca. La iniciativa que le propone al Ejecutivo destinar una partida extraordinaria de 200 mil millones para asistir a la ciudad devastada por el temporal, había sido aprobada por 230 votos afirmativos en Diputados. Además, la declaración de emergencia establece la suspensión por 90 días de juicios y procedimientos de cobro de acreencias vencidas ante esta situación garantizando la tranqulidad de familias, comerciantes y productores.
Sobre el cierre de la sesión, los senadores también dieron media sanción al proyecto de ley que obliga al Poder Ejecutivo a distribuir en las provincias los recursos retenidos correspondientes a los Aportes del Tesoro Nacional y de los impuestos a los combustibles líquidos, que tienen una asignación específica destinada al mantenimiento de las rutas y que el gobierno embolsó para sostener el déficit fiscal.
La Cámara Alta aprobó todo lo que el gobierno no quería por primera vez desde que Milei es presidente. ¿Será un cambio definitivo en la relación con los gobernadores o solo una escaramuza para medir la relación de fuerzas?