¿Llave del éxito o estafa piramidal?

¿Llave del éxito o estafa piramidal?

Se presentó en el Centro Cultural de la Cooperación “Criptomonedas: un desafío al Estado y a los bancos”, el nuevo libro de Sofia Scasserra y Martín Burgos. La ilusión de ser millonario sin trabajar.

“Esta promesa de que a través del trading te podés hacer rico genera en los jóvenes la falsa idea de que sin trabajar se puede vivir”, afirma Sofia Scassera antes de la presentación de Criptomonedas: un desafío al Estado y a los bancos, libro que escribió junto a Martin Burgos. La presentación se llevó a cabo en el Centro Cultural de la Cooperación “Floreal Gorini», ubicado en pleno microcentro porteño, frente a un público de ámbitos diversos y con la presencia del exsecretario de Finanzas y exdirector del Banco Central, Diego Bastoure; la periodista especializada en tecnología, Irina Sternik, y la socióloga Mónica Peralta-Ramos que dialogaron con los autores y ofrecieron su punto de vista.

Sternik dió inicio a la presentación y rescató lo didáctico del libro, siendo un “genial material de consulta” para gente no iniciada en el tema por la capacidad de los autores de definir de manera sencilla un concepto tan complejo y multifacético como es la criptomoneda. “Yo estoy todo el tiempo comunicando estafas y eso tiene que ver con que es un tema muy difícil de explicar y hay mucho humo alrededor de las criptomonedas, entonces la gente no lo termina de entender”, manifestó la periodista.

Peralta-Ramos por otro lado, expresó su preocupación con respecto a que los dirigentes políticos desconozcan y subestimen el tema, alegando que debe ser puesto en el centro de la discusión política: “Hay que empezar a mirar a las cripto desde las estructuras de relaciones de poder para observar qué es lo que se esconde detrás de este fenómeno”.

Los autores hablaron de una necesidad imperante de escribir Criptomonedas… por la manera en que este fenómeno se ha masificado tanto en los últimos años, atrayendo a un público cada vez mayor y cada vez más joven. “Cuando empezamos a pensar este libro, el valor del Bitcoin estaba en veinte mil dólares y ahora está en noventa y cuatro mil”, bromeó Burgos y añadió: “Nos pareció importante escribir sobre el tema porque, a pesar de su masividad, no se encuentra en las agendas de las universidades como una problemática a trabajar”.

Scasserra, por su parte, habló de una necesidad de “poner paños fríos sobre el asunto y decir las cosas como son”, para tener una mirada crítica sobre lo que nos quieren vender aquellos que pregonan el milagro de las cripto. “Es un tema que nos preocupa porque vemos que hay mucho humo, muchos gurúes de las finanzas y poca realidad”, mencionó la autora.

Otro tema que ronda una y otra vez la mesa es el “clima de época” con discursos que nos dicen que estas nuevas herramientas, como la inteligencia artificial, van a resolver todos los problemas del Estado. Criptomonedas…, dicen sus autores, viene a criticar esta postura y a otros discursos similares que postulan a las nuevas tecnologías como algo que le va a sacar el empleo a la gente y las va a reemplazar. Con relación a esto, Scasserta comenta: “Cuando vos empezás a escuchar estos discursos de que no hay necesidad de estudiar porque podes hacer un curso de programación y pasás a ganar en dólares trabajando para Silicon Valley, se empieza a armar un clima de época donde jóvenes que no encuentran un trabajo decente terminan confiando en este tipo de cosas porque los convencen de que no tiene sentido estudiar y trabajar”.

Scaserra dialogó con ANCCOM previo a la presentación: “El desafío es la regulación, es tratar de poner orden en el mercado y resolver el problema de las estafas con criptomonedas”. La autora, además, explicó la dificultad de regular este fenómeno cuando activamente se trata de excluir al Estado de ese mercado. Por esta razón, los Estados no pueden ayudar a la población como ocurre en el sistema financiero tradicional, donde si un banco quiebra, el Banco Central responde por tus ahorros. Esto no sucede en el mercado cripto.

“Es importante para nosotros hablar de cómo funcionan las criptomonedas y para qué son útiles realmente, porque de lo contrario esto va a seguir dañando tanto en el sistema financiero como en las finanzas personales de un montón de argentinos que han caído en estafas en los últimos tiempos por culpa de esta fantasía de que con cripto vamos a ser todos ricos de la noche a la mañana”, afirmó la autora.

En este sentido, Scasserra explica que no funcionan de manera muy distinta a cualquier otro activo financiero, que con sus fluctuaciones se puede ganar o perder un rédito económico, pero que eso está muy lejos de las promesas de hacerse rico sin trabajar como venden muchos influencers financieros. “Esto es lo mismo que ir a un banco a pedir un crédito. Cuando uno ingresa con la información necesaria, podés manejarte de mejor manera y podés hacer inversiones mucho más seguras que si te lanzás simplemente porque te dijeron que te ibas a hacer millonario sin demasiado esfuerzo”.

Otro de los desafíos que genera el fenómeno cripto es la fuga de capitales y la evasión fiscal. Ante esta problemática, Scasserra advierte: “Es un problema muy grave que los Estados tienen que empezar a atacar porque si no van a terminar funcionando como un paraíso fiscal y eso sería un problema en términos de ingresos del Estado”. La autora también señala que ya hay intentos por parte de diferentes Estados de regular este fenómeno. En el libro se menciona el caso de la Unión Eropea que está tratando de regular a las billeteras digitales a través un sistema de intercambio de información con muchos países del mundo para empezar a tener una base de datos unificada a nivel global respecto a la tenencia de criptomonedas y cómo tasarla. Otro caso a observar es el de China, que tiene una moneda digital, pero no es una criptomoneda propiamente dicha, sino que cuenta con un respaldo del Estado.

Por último, a modo de cierre, Scasserra invita a otros autores a escribir sobre el tema y añade: “Criptomonedas no es la  palabra final, ni la conclusión de hacia dónde tiene que ir la República Argentina. Me parece que es una provocación para tratar de seguir pensándolo en conjunto porque la salida siempre es colectiva”.

Poesía que brota entre los desechos

Poesía que brota entre los desechos

Literatura, artesanía y reciclado confluyen en las obras de Alejandra Bosch, escritora, tejedora, recicladora y creadora de Ediciones Arroyo, editorial autogestiva santafesina.

Alejandra «Pipi» Bosch es la poeta, editora y gestora cultural santafesina detrás del proyecto Ediciones Arroyo, una editorial autogestiva de poesía contemporánea que utiliza la basura como material principal para producir sus libros. Gestada en Arroyo Leyes, un pueblo costero ubicado a 20 kilómetros de la capital santafesina, la editorial ha publicado más de 130 libros de poetas nacionales e internacionales desde su creación en 2016.

Se destaca por sus llamativas ediciones artesanales: las tapas de los libros tienen un fondo negro con distintos bordados en color que las cubren de pájaros, flores y camalotes y con collages de letras. Son libros-objetos; no sólo es el texto poético, sino también una obra de arte única en cada portada. Para crearlas, Bosch recicla cajas y sachets de leche que juntan para ella una red de recolectores de distintas ciudades. Darle una segunda vida a lo que para otros es basura es la premisa.

Ediciones Arroyo es, en palabras de su creadora “un proyecto absolutamente ajeno a todo el canon y de lo que se entiende por una editorial comercial”. Alejandra y su hijo se encargan artesanalmente de todo el proceso de edición; desde la selección y curaduría de autores y poemas, la creación de ilustraciones, a la impresión, diseño y creación de las artísticas tapas. Otra característica que la hace única es que los textos son cedidos de palabra. “Los libros circulan por el ambiente literario argentino, por librerías, ferias y universidades, pero nosotros jamás hemos registrado un derecho autor. Nos mandan los textos por correo, armamos los libros, series breves de entre tres a diez poemas con alguna ilustración y el trabajo de las tapas que es lo que nos caracteriza” explicó Bosch en una entrevista para ANCCOM.

El proyecto surge de la confluencia de distintas facetas de su creadora; además de poeta, viene de un linaje de bordadoras y estudió artes visuales como primera carrera. Después de vivir 15 años en Brasil, Bosch volvió a Santa Fe y presentó un proyecto al municipio para dar talleres sobre el reciclado de los desechos  domiciliarios en donde las personas podrían aprender a tejer en crochet con bolsas de plástico y otros residuos. “Me dediqué a tejer y enseñarle a la gente a reciclar el plástico. En una oportunidad, una alumna en vez de cortar las tiritas para el tejido me trajo un sachet de leche entero y ahí se me ocurrió hacer una tapa de libro; vi que daba el tamaño justo para un libro de poesía pequeño”. Para ese momento, Bosch ya estaba en el circuito literario santafesino y había publicado su primer libro, Niño pez, en 2015. “Me inventé el trabajo perfecto porque pude cruzar mis dos pasiones: el arte y la poesía” declaró la coordinadora de Ediciones Arroyo.

La experiencia de Ediciones Arroyo trascendió fronteras y captó la atención de algunas instituciones académicas como la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), donde la editorial cartonera es vista como una referente en su campo. Esta institución brasileña, a través de su Programa de Posgrado en Ciencias de la Literatura, no solo incorporó libros de la editorial en su biblioteca, sino que ha invitado a Bosch a compartir su obra.

El encuentro fue organizado por Eduardo Cohelo, Luciana di Leone –profesores de la UFRJ– y Mabel Boechat Telles, estudiante que lleva adelante su tesis doctoral sobre la obra de la poeta. En septiembre, Alejandra viajó a Río a compartir tanto el proceso editorial que lleva adelante en Ediciones Arroyo, como su propia experiencia como autora y la relación de su obra con las prácticas artesanales de bordado que heredó.

Tras descubrir a Bosch a través de una traducción en el sitio «Mulheres Que Escrevem», Boechat Telles se interesó no solo por su poesía, sino también por su labor como editora y artesana. El reciente encuentro en la Facultad de Letras de la UFRJ fue, para ella, un momento clave en su investigación: «Escuchar y conversar con Alejandra y ver sus libros hechos a mano fue muy enriquecedor para mi investigación» declaró Boechat Telles en una entrevista para ANCCOM. La estudiante señaló también la importancia de construir redes entre escritores latinoamericanos, esencial para seguir profundizando en las intersecciones entre poesía, edición y artesanía. Para Alejandra, la invitación representa un reconocimiento al trabajo autogestivo y artesanal que lleva desarrollando durante casi una década. En sus palabras, «esto indica que todavía hay gente interesada en los circuitos no comerciales, en tender puentes y redes».

La red es clave en este proyecto: una de las patas más interesantes del proyecto es la organización para la recolección de la “basura”, que luego Alejandra convierte en piezas de arte. Un gran grupo de recolectores de Arroyo Leyes, Rincón, Santa Fe, Rosario y otros puntos del país recuperan las cajas y los sachets, y se encargan de hacérselos llegar a la editorial. “Nosotros no podríamos existir si no tuviéramos a estas personas que desde el primer momento, cuando consumen un lácteo en sus casas, lo lavan, aplastan y secan para después hacérnoslos llegar” declaró la editora.

En cuanto a los autores, el catálogo empezó recuperando autores locales que habían sido publicados anteriormente y tenían cierto peso en la comunidad.  “Investigué cuales eran las voces que convocaban para las lecturas y las publicaciones en el momento. Con ese criterio seguí invitando a publicar los primeros años. Las primeras ediciones de Arroyo fueron dentro de la serie Dos Poemas. Comenzamos publicando a José Villa, Walter Lezcano, Analía Giordanino, Francisco Bitar, Fernando Callero, Santiago Venturini, Agustina Lescano y Larisa Cumin. Más tarde lo fui abriendo a otros autores no tan conocidos. Hemos dado la oportunidad a poetas nuevos que nunca habían publicado” aclaró Pipi Bosch.

Hoy en día el catálogo está abierto a quién tenga interés de publicar, la premisa es hacerlo lo más horizontal y amplio posible. Durante todo este año está abierta la convocatoria “Fluviales”, para la publicación de libros dobles, que incluyen a un poeta de Santa Fe y a otro de Paraná, fortaleciendo el diálogo literario entre ambas regiones. Para quienes deseen más información sobre esta convocatoria o quieran presentar su obra, pueden escribir a alejandraboschotero@gmail.com.

En el otro extremo de la cadena editorial, la distribución en Ediciones Arroyo es artesanal como los libros mismos: “Llevamos los libros a distintos festivales, encuentros, lecturas y ferias de literatura y poesía,  y ahí vendemos. No trabajamos con muchas librerías porque este género no es tan comercializado en el circuito mainstream. Ahora queremos exportar los libros también, pero siempre llevándolos  nosotros o los mismos poetas para que expongan su trabajo mientras los ofrecen. Siempre fuera de lo esperado en el circuito comercial”, aclaró Bosch.

En un tono reflexivo sobre la situación actual de la cultura, Bosch manifestó: «A pesar de las dificultades hay que seguir adelante y batallar, planteando nuevas formas para resistir. Nosotros somos trabajadores de la cultura que estamos en el territorio, no ganamos premios ni estamos en altas esferas. Nuestra construcción es comunitaria». El ambiente literario, según explica, es un espacio de gran resistencia, donde se forjan alternativas al dominio del canon tradicional. «Estamos permanentemente armando redes con otras editoriales, autores y universidades, tanto locales como internacionales», agrega, convencida de que el trabajo en comunidad es el camino para hacer circular la palabra poética de forma más horizontal y menos condicionada por intereses comerciales. En este sentido, Ediciones Arroyo se presenta como un modelo de cómo se puede hacer literatura desde una perspectiva más inclusiva y accesible.

Bosch concluye con una visión que trasciende lo literario: «Nos mueve el deseo, la necesidad de dejar un legado. Hay que hacerlo igual, independientemente de las circunstancias, de las becas o ayudas estatales, premios o concursos que haya. Obviamente, todo eso ayuda, pero si no está, no podemos perder el territorio». Para ella, la clave está en no abandonar los espacios que se habitan, asumir la militancia desde la vida cotidiana y entender que, como sujetos políticos, la cultura y el arte son herramientas esenciales para la transformación social.

«El gobierno no es democrático porque desconoce a su adversario»

«El gobierno no es democrático porque desconoce a su adversario»

Rocco Carbone, autor de Lanzallamas: Milei y el fascismo psicotizante, analiza la posibilidad de emancipación que sobreviene a las fuerzas destructivas y el conflicto universitario como elemento pedagógico.

¿Por qué es relevante hablar y pensar el fascismo en la escena argentina contemporánea? Con esta pregunta, a la vez abierta y comprometida, abre los fuegos el filósofo Rocco Carbone, autor del libro “Lanzallamas: Milei y el fascismo psicotizante”, publicado este año por la editorial En Debate. A lo largo de sus tres capítulos y algo más de cien páginas de extensión, el texto plantea que el gobierno de Javier Milei debe ser comprendido como una experiencia fascista, ya no como un sistema político, sino una metodología.

“El lobo se viste de cordero pero actúa de lobo —dice Carbone en diálogo con ANCCOM—. El fascismo, tanto el arqueológico como el contemporáneo, es un poder integrado por una dualidad plena, contradictoria, y esa dualidad la encontramos permanentemente en las elaboraciones discursivas y políticas del presidente Milei, que dice: ‘No intervengo en el mercado’, pero luego interviene; dice: ‘No hice confiscaciones’, pero sigue confiscando los ahorros de la clase media. Entonces es eso: el fascismo es un poder que hace dos cosas al mismo tiempo, que dice dos cosas al mismo tiempo que se contradicen y se chocan.”

Y es que, siguiendo a Carbone, filósofo italiano que reside en Argentina desde hace veinte años, y es además docente e investigador del Conicet, la dualidad del poder fascista se condensa en dos grandes atributos: psicotizante y celular. El libro desarrolla ambos términos en un lenguaje conciso, pero de gran densidad conceptual. La cuerda ofrecida al lector es bajarlos a ejemplos de la práctica.

“El fascismo es un doble poder permanente: en el Estado y contra el Estado social. Entonces, organiza un doble aparato. ¿Cómo funciona ese doble aparato? Corrompe a los trabajadores, por un lado, y por otro los reprime —explica Carbone, que después puntualiza—. El gobierno de La Libertad Avanza ha elaborado un aparato de corrupción de las clases trabajadoras. Y se verifica como liquidación del patrimonio nacional: ataque a los sindicatos, porque son ‘chorros’; ataques a las organizaciones sociales; ataques a los modos de contratación; ataque a los bienes y servicios públicos. Y esa es una modalidad de lucha, es una modalidad de combate contra la clase trabajadora. Y se organiza esa manera de corromper lo público para que los avances del pasado no sean ni siquiera imaginables en el presente. Para que el pibe de Rappi no imagine jamás la posibilidad de un aguinaldo.”

De entre esos avances del pasado, la universidad pública aparece como referencia obligada: “El conflicto universitario en este momento es un elemento pedagógico —afirma Carbone—, una dimensión altamente pedagógica para la sociedad nacional. Porque demuestra efectivamente cómo piensa y cómo opera el gobierno de La Libertad Avanza y cómo opera el presidente Milei.”

Según el autor, lo que distingue al fascismo de una derecha tradicional es su completa desconsideración por el adversario. Así, en su reacción al conflicto universitario, el gobierno mostraría su verdadera cara: “El presidente Milei, ante ese antagonismo democrático, ¿qué dice? ‘¡No! Ratifico el veto a la Ley de Financiamiento a la Universidad’, e hizo de todo para generar un bloque en el parlamento con los diputados y diputadas macristas para ratificar el veto. Por eso, digo, es interesante ver cómo opera la cabeza de un neoliberal mafioso como Macri y la cabeza de un fascista como Milei: frente al antagonismo popular, ¿qué hace? Avanza. Por ende, estamos frente a un tipo de poder que está por fuera del régimen democrático. Porque el régimen democrático reconoce una otredad, en cambio acá hay una negación permanente hacia la otredad. Tanto que quisieron matar a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner el 1º de septiembre del 2022. Y ahora, en la ultimísima entrevista al presidente Milei, le escuchamos nuevamente decir que a él le agradaría muchísimo poner el último clavo en el cajón donde está Cristina Fernández de Kirchner”.

“La universidad —concluye Carbone— sofistica su aparato pedagógico y le enseña a la sociedad argentina que Milei y el gobierno de La Libertad Avanza no son democráticos, sino que están por fuera de los confines retóricos y operativo-políticos de la democracia. Porque desconocen a su adversario y lo convierten en un enemigo a quién hacer perecer; a quién matar.”

El ‘Momento Arlt

Contingencias aparte, el libro dialoga en su tercer capítulo con dos grandes novelas de Roberto Arlt: Los Siete Locos (1929)  y Los Lanzallamas (1931). Estas obras le sirven de imaginario y disparador a partir de dos personajes: Erdosain y el Astrólogo. Hay en el primero la expresión de un hombre sensible y frustrado, aplastado por la depresión económica y su propia ineptitud para con las relaciones humanas. En el segundo se condensan los atributos propios de un líder falaz y totalitario, una especie de flautista de Hamelin que pergeña la creación de una “sociedad secreta”; el lugar de los locos. Y es aquí donde Carbone reconoce los límites del poder fascista: “¿Cómo se puede interpretar ese título: Los Siete Locos? Primero, que hay locura. Que una disociación con la realidad existe. Existen varios personajes que son locos, pero al mismo tiempo son siete. O sea, es una locura bastante difundida pero es una locura finita, es una locura que tiene un techo, o sea, un límite. No todo el mundo está loco: algunos están locos efectivamente pero hay otros y otras que no lo son. Bueno, de ese campo, del campo de los y las que no son locos ni locas, efectivamente puede sobrevenir la emancipación”, sostuvo el autor.

Quizás en esta línea se expresa uno de los aportes más propios de Lanzallamas. Como parte de la vorágine de ensayos, biografías y opinologías que han surgido en torno a la figura de Milei, éste libro, siguiendo a la obra de Arlt, consigue explicar eso íntimo que se vive por dentro de la contingencia política: el agobio, el saltar de la indiferencia a la rabia, de la rabia al hastío, el no entender por qué se dice una cosa y luego la otra, la polémica detrás de la polémica, y el vértigo que se siente al pisar sin escalón. Y esa explicación viene con un halo de calma, porque siempre es tranquilizador entender esa cosa inquietante que se nos escapa. Nombrar la palabra, escribe el autor, es a la vez una pedagogía y una estrategia de liberación. Liberación que, volviendo al título, está presente en el germen de la obra:

“Y me interesaba también la palabra del título de Arlt: Lanzallamas —cierra Carbone—. Porque es una palabra abierta: remite a ellos, a las fuerzas destructivas, a las fuerzas fascistas, pero también puede remitir a las fuerzas emancipatorias populares. Porque si el fascismo es una latencia en la historia de los pueblos, también lo es la emancipación. Lanzallamas es plurisémico, puede referir literariamente a ellos, al fascismo clásico, a la experiencia del presidente Milei, pero también a la posible emancipación que, como latencia en la historia, puede sobrevenir al momento reaccionario. Esa emancipación también se podría verificar bajo la forma del lanzallamas.”

“Es un sueño inventar todo un universo automovilístico”

“Es un sueño inventar todo un universo automovilístico”

En medio del resurgimiento de la popularidad de la F-1 tras la aparición de Colapinto, Sofía Minatel publicó “Marcas en la pista”, su segunda novela que cuenta la historia de una piloto argentina que llega a la máxima categoría.

Desde 2018, Sofía Minatel quería escribir una historia sobre autos, “como inventar una competencia o algo así”. Entonces, fue a lo más cercano que tenía, la Fórmula 1, porque algo conocía de mirar documentales y películas. Empezó a investigar y justo coincidió con el nuevo boom de la categoría, tras la llegada de Franco Colapinto al equipo Williams. Entrevistada por ANCCOM, la joven autora cuenta de qué se trata Marcas en la pista, su segunda novela, presentada recientemente, y cómo es autopublicarse en plena crisis económica.

 

¿Qué podés adelantar de Marcas en la pista?

Es un libro new adult, está dirigido a personas en sus veinte años. Es sobre la vida de un piloto italiano y una piloto argentina en un nuevo equipo tras algunos problemas que tuvieron con otra escudería, con dramas dentro y fuera de la pista. Se consigue en físico y en formato digital en Libros Creativa.

 

¿Alguien que no sabe nada de Fórmula 1 lo puede entender?

Explico lo suficiente todo el contexto como para que se entienda. No bombardeo con cosas técnicas porque no tiene sentido, no voy por ahí.

 

¿Cómo empezaste a escribir?

Empecé desde muy chica, a los seis o siete años. Tengo el recuerdo de tener ciertos cuadernos o agendas donde iba escribiendo, también era de leer mucho y eso influenciaba. Al principio escribía cuentos cortos sobre cualquier cosa y después eran historias de fantasía.

¿Cómo fue la experiencia con tu primer libro, La causa?

Se me ocurrió hace diez años, en el boom de las novelas y películas distópicas. Tenía la idea de una historia de aventura, pero no se me terminaba de ocurrir qué. Me contacté con Editorial Dunken de casualidad, porque había averiguado en otras. Les dije que tenía la novela terminada y necesitaba editarla, me pasaron los contactos de varios editores, me contacté con una y me editó la novela. Hasta que llegó la pandemia y tuve que parar todo. Cuando retomé volví a contactarme con Dunken. El proceso fue rápido porque quería publicar lo antes posible para llegar a la Feria del Libro.

 

¿Hubo diferencias con la publicación de Marcas en la pista?

Siempre publiqué de manera independiente porque no tengo una editorial atrás que me diga “me gusta tu idea” y me compre los derechos. Hace un año estoy con Creativa, que es una agencia de servicios literarios que además publican. Tienen editoras y diseñadoras que trabajan para ellas. Creativa hace el marketing del libro, me sirvió mucho hacerlo para La Causa. Estoy muy conforme. Ahora tengo más control, hay otra confianza y cercanía, no es un equipo grande como una editorial, entonces me fue más fácil estar encima de todo. Soy detallista, quería ver lo que pasa y aprender de eso.

 

Estás por graduarte en la carrera de Ciencia de la Comunicación de la UBA con una tesina sobre los fanatismos en la Fórmula 1, ¿se cruzaron los proyectos?

Sí, sobre todo con la manera de plantear determinados temas. Ahora tengo el peso de la carrera atrás, incluso está implícito en la historia. Trabajando en la tesina me di cuenta que tenía que ser neutral, no podía meter todo lo que pienso sobre determinada cuestión porque no funciona así. También hablo de los fanfics (“ficciones de fans”) en la tesina. Muchos creen que son las historias de “Rayita” (novelas de Wattpad donde la protagonista es la propia lectora en el universo de sus artistas favoritos) pero es un mundo más amplio. No hay que subestimar a los fanfics como escritura.

 

¿El panorama está cambiando para los nuevos autores por las redes o plataformas como Wattpad o Archive Of Our Own?

Las redes sociales ayudan un montón porque te dan la facilidad de llegar al público de otra forma, más rápido. Subiendo videos o contenido llegás a gente que de otra forma no hubiera dado con vos, incluso si el libro ya está publicado. Creo también que el fenómeno booktok (usuarios con cuentas dedicadas a reseñas de libros) hay que tomarlo con pinzas, porque no todo lo que se hace viral vale la pena. No digo que todo sea malo, pero uno cree que porque un libro es viral es buenísimo y a veces no es así. También pasa todo lo contrario, capaz es un libro bueno, pero no se lo conoce mucho.

 

¿Cómo manejás el bloqueo creativo?

Tengo dos posibilidades: releo cosas ya escritas, como escenas importantes o avanzo a algo que quiera escribir. O también dejo todo y me voy a hacer otra cosa, a caminar, escuchar música, dejo todo ahí.

 

¿Y cómo te ves de acá a cinco años?

Ojalá que siga escribiendo y pueda vivir de esto. Que sea la carrera o profesión para el resto de mi vida. Ahora es complicado, al pagar todo yo para editar e imprimir, ganancia real no tengo porque no logré aún cubrir los costos. Quiero escribir fantasía, tengo una historia que nunca termino de darle la vuelta. También me gustaría una romcom (“comedia romántica”). De Marcas en la pista me gustaría que se escriban fanfics.

 

¿Qué tal te llevás con las críticas?

Con mi anterior libro, La causa, hubo alguien que no le gustó mucho, le puso dos estrellas en Goodreads (página web para reseñar libros, popular entre los jóvenes lectores) y me indigné. Pero estuvo muy educada y la entiendo, yo también leí libros que no me engancharon. En Goodreads hay gente que reseña con una estrella sin decir por qué. Ahora me acostumbré y lo tengo asumido, pero al principio pensaba en eso todo el día.

 

¿Estás preparando la segunda parte de Marcas en la pista?

No lo iba a hacer, es autoconclusivo el libro. Pero mientras escribía a los personajes ideé una historia a futuro que en tres libros se termina perfectamente, tipo trilogía. Estoy en la mitad de la segunda parte. Es un sueño inventar todo un universo automovilístico.

Instrucciones para leer a Cortázar

Instrucciones para leer a Cortázar

La Biblioteca Nacional ofrece un recorrido por la obra del escritor con la intención de llegar a chicos y grandes a través de un referente de la literatura fantástica argentina.

El Centro de Literatura Infantil y Juvenil de la Biblioteca Nacional Mariano Moreno inauguró la exposición Julio Cortázar. Instrucciones para viajar  que invita a conocer parte de la vida y obra del famoso escritor argentino de una manera lúdica y amena con el fin de acercar su lectura a las nuevas generaciones. 

Las curadoras Eugenia Santana , Solana Schvartzman y María Ragonese proponen un primer acercamiento a la obra de Cortázar para chicos y jóvenes. La muestra cuenta con tres salas:   “Instrucciones para leer”,  donde se aprecia una línea de tiempo con sus datos  más relevantes y donde se exhiben manuscritos originales de Cortázar: el  cuaderno de trabajo donde fue apuntando Rayuela,  capítulos mecanografiados, dibujos y pasajes de esa  novela que nunca fueron publicados.

En la siguiente sala  “Instrucciones para explorar”, se aprecia  el trabajo del autor de Bestiario como traductor, las cartas enviadas a sus afectos desde distintas partes del mundo y algunos de sus libros traducidos en diferentes idiomas.  En la última sala  “Instrucciones para jugar”, el equipo de diseño de la Biblioteca Nacional construyó una biblioteca donde los más pequeños se pueden sentar a leer los libros que el escritor leía en su infancia,  pintar y jugar. En esta sala se exhiben  ilustraciones realizadas por la artista plástica argentina Isol sobre algunos cuentos del escritor, mientras se escucha jazz, música favorita del autor de Final del juego.

Al igual que Rayuela, el recorrido de la muestra se puede comenzar por la sala que más guste o convenga,  un homenaje tan lúdico y fantástico al estilo  de Julio Cortázar  para celebrar los  110 años de su nacimiento.

ANCCOM conversó con Eugenia Santana y  Solana Schvartzman dos de las curadoras.

¿Cuál fue la inspiración de la muestra?

Solana Schvartzman: Por un lado es el año Cortázar, pero la idea fue justamente que sea una puerta de entrada distinta de lo que se hace en otras instituciones o museos. Tenemos el cuaderno de bitácora, las cartas manuscritas de Cortázar, tenemos capítulos que él escribió y descartó, tenemos materiales que son riquísimos que pertenecen a la institución y era hora de mostrarlos y exponerlos pero también era una oportunidad de exponerlos no solo para un público interesado en la obra de Cortázar sino especialmente para chicos y jóvenes, los que tal vez no lo leyeron que comiencen a leerlo, la idea es que se acerquen a este autor de una manera distinta.

¿Cuál es el enfoque principal que eligieron?

Eugenia Santana: El enfoque principal de la muestra es, justamente,  recuperar el aspecto lúdico de las instrucciones, la idea de viaje que nos pareció muy amigable para los chicos en general  pero sobre todo el enfoque es casi de divulgación, es como decir cómo hacemos que estos materiales se vuelvan accesibles a los chicos , cómo contemplamos este nuevo público que queremos traer a la biblioteca.

Sch.: La idea se llama “ Instrucciones para viajar” tiene que ver con distintos viajes que hizo Cortazar a lo largo de su vida. Nace en Bélgica muere en París pero más allá de esto la idea también es pensar a la muestra como un viaje, por eso es que tiene tres alas muy distintas pero que se pueden recorrer en un orden o en otro de manera lúdica, como él mismo pensaba en sus libros.

¿Hay alguna obra de Cortázar que haya sido especialmente significativa en el proceso de la curaduría?

E.S.: Para mí fue Los autonautas de la cosmopista que yo no lo había leído antes de hacer esta muestra, había leído bastantes cosas de Cortázar, pero no Los autonautas y cuando entré, dije: “Claro, esto está buenísimo”. Todos estos títulos, medio fantasiosos, refieren a los viajes, había momentos que me hacía mucha gracia, habían registrado todo lo que habían comido en el día, el café, las medialunas, esto, lo otro con lujo y detalle y me pareció espectacular también por eso. Yo decía que lo del viaje es muy importante porque también lo veía en su obra.

S.Sch: En la muestra tienen un lugar muy protagonista  El manual de instrucciones, Historias de cronopios y de famas, de ahí sacamos el título de la muestra y así están escritos los textos de cada una de las salas. Obviamente tienen un protagonismo muy importante Rayuela porque es imposible que no lo tuviese, pero también tienen libros que uno no pensaba , en mi caso por ejemplo Silvalandia, donde se ve un estilo Cortázar que uno piensa que lo escribió para los chicos, es un escritor que se ríe mientras escribe y esa también es una impronta que queríamos que marcase de alguna manera el recorrido de la exposición.

¿Qué aspectos de la vida personal consideran relevantes para entender la obra?

S.SC:  Yo remarcaría muchos datos fundamentales de cuando él era chico, que escribe una primera novela a los 8 años, que lee a Poe a esa edad y el director de su escuela le dice a la madre que por favor lo aleje de los libros, que no le están haciendo bien, que vaya a tomar sol. Pero la madre responde que confía en los libros y confía en Cortázar. Con ese gusto en la lectura es que después se hace escritor y de alguna manera concreta, concretar muchos de sus sueños porque él quería ser marinero y se hace escritor, y de alguna manera viaja por todos lados y con la traducción viaja con sus libros.

E.S.: Una, generalmente, conoce como el producto acabado de Julio Cortázar, alto con barba como una especie de prócer de la literatura y está bueno también mostrarlo más desarmado. Pensamos en su infancia, por eso hicimos esa reconstrucción de la biblioteca para pensarlo a él en la situación de lectura cuando era chiquito: qué cosas lo atraían, le interesaban. Hay muchos viajes que para él son muy significativos: su viaje a Cuba no está tan presente en la muestra, pero si está en la línea de vida, la centralidad de ese viaje para sus ideas políticas, pero también el viaje de la imaginación, poder viajar sin moverse del lugar.

¿Cómo creen que Cortázar influyó en la literatura contemporánea?

E.S.: En Argentina es imborrable su huella, el lugar que ocupa en la literatura fantástica es inédito, en comparación con el resto del mundo. Muchas veces hay cierto desprecio por el género fantástico, que se considera una especie de género menor y acá entre Cortázar y Borges es el centro de nuestro canon. Creo que es muy significativa su influencia, también en sus traducciones de Poe porque las traducciones de Cortázar se siguen editando y la mayor parte de los chicos que leen Poe, probablemente lean la traducción de Cortázar.

S.Sch.: No por nada es un autor que se lee en la escuela, especialmente los cuentos, pero Rayuela, que hoy se lee menos, es una novela que si la lees no te la olvidás y en ese sentido marca a quien la lee y creo que va a perdurar en la literatura Argentina.

E.S.: Es un autor inicial, uno está dando los primeros pasos en la literatura y generalmente  alguien te va a acercar un texto de Cortázar y eso también es impresionante, es un autor que abre muchas puertas, si leés a Cortázar después leés otras cosas.

S.Sch.: Atrapa a chicos pero es Interesante como atrapa a adolescentes también, es nuestro esfuerzo que los chicos entren a Cortázar, pero en los adolescentes no hace falta ni hacer ese esfuerzo, entran enseguida.

La exposición “Julio Cortázar. Instrucciones para viajar” se puede visitar hasta el 3 de noviembre de 2024, de lunes a viernes de 9 a 21 y sábados y domingos de 12 a 19 en la Sala Leopoldo Marechal de la Biblioteca Nacional. Entrada libre y gratuita.