La izquierda salió quinta y obtuvo una banca

La izquierda salió quinta y obtuvo una banca

El Frente de los Trabajadores-Unidad obtuvo el 3,16% de los votos. No logró su objetivo de ganar dos escaños pero dejó atrás a Lula Levy, Ramiro Marra, Alejandro Kim y Juan Manuel Abal Medina.

“Estamos contentos porque la izquierda va a seguir teniendo una voz independiente al interior de la Legislatura que va a seguir acompañando la pelea de las y los trabajadores, de las juventudes, de las mujeres, de las disidencias y renovar también nuestro compromiso de que la lucha es en las calles y que vamos a seguir poniendo el cuerpo contra el ajuste de Javier Milei”, dijo Agustín Romero, candidato a legislador por el Frente de Izquierda de los Trabajadores-Unidad (FIT-U) tras conocer los resultados de las elecciones porteñas. De este modo, la izquierda alcanzó el 3,16% de los votos, estando por delante de candidatos como Ramiro Marra y Lucille Levy. Así, logró sumar una banca más en la Legislatura porteña, que será ocupada por Vanina Biasi. En conferencia de prensa, la candidata electa destacó la importancia de ocupar este lugar para lo que viene: “El desafío nuestro es hacer crecer en la población la conciencia de clase, la lucha política por el salario -que es estratégica en nuestro distrito- y en todo el país. Vamos a pelear con eso desde las bancas y en las calles también”.

Desde las primeras horas, tras haber finalizado la votación, fuera del búnker de la izquierda se iban desplegando los banderines de la militancia en la calle. Ansiosos por los resultados, las primeras personas se iban acercando expectantes en una de las elecciones más reñidas de los últimos tiempos y que pocos se animaban a nombrar un ganador. Pero, lo que muchos se preguntaban era si perderá la hegemonía el PRO, quien ha sabido gobernar la Ciudad de Buenos Aires durante más de tres décadas. Así, entre la euforia y los aplausos al darse a conocer -cerca de la noche- los resultados provisorios que confirmaron que Biasi tendrá un lugar en la Legislatura, Lospennato, quien encabezaba la lista del PRO, terminó quedando tercera, detrás de Adorni (“La Libertad Avanza”) y Santoro (“Es Ahora Buenos Aires”). “Hay dos derrotados claros -aclaró Celeste Fierro, también candidata del FIT- ante este escenario. Uno es el PRO, por supuesto, que ha perdido la elección en la ciudad luego de varios años. Y el otro es el proyecto del peronismo, claramente, con un discurso moderado que corrió su agenda a la derecha para hablarle al electorado.” Y añadió: “El PRO muestra algo que nosotros venimos planteando que es que más derecha no puede enfrentar a la ultraderecha. Es con la izquierda y creo que eso también se muestra en que logramos conquistar una banca con Vanina Biasi”.

Por otro lado, uno de los aspectos centrales a destacar de estas elecciones fue la baja participación ciudadana en donde votó tan solo el 53% del padrón, siendo una de las más bajas en el territorio en los últimos 20 años. En diálogo con ANCCOM, la candidata Celeste Fierro sostuvo: “Es reflejo del hartazgo con este sistema político y con los partidos tradicionales”. Y Romero agregó: “Quedó demostrado que la política tradicional desgasta y genera indiferencia en un sector muy grande de trabajadores y trabajadoras que hoy no se acercaron a votar como producto del desgaste de las propias internas y de esta especie de polarización que se genera desde los partidos”. Al mismo tiempo, Mercedes Trimarchi, otra de las candidatas a legisladoras indicó que esto debe interpretarse como un mensaje político: “La gente no fue a votar porque no le resultaban atractivas las propuestas de las listas o porque vio que han destinado millones de pesos a las campañas y no tenían ninguna propuesta que vaya a solucionar sus problemas”.

En este sentido, Trimarchi destacó la posibilidad que se le presenta a la izquierda para orientar esta bronca generalizada: “Nuestra principal fortaleza es justamente organizar las luchas. Nosotros hemos acompañado todos los miércoles a las jubiladas y a los jubilados, estuvimos con las enfermeras en la pelea por su reconocimiento en la carrera profesional y defendiendo la educación pública junto a las docentes y a los estudiantes. Entonces la mejor manera de canalizar ese descontento es fortalecer las luchas que sin duda tenemos que dar como clase trabajadora frente al ajuste y la represión del gobierno”. Al mismo tiempo, Luca Bonfante -el joven candidato- afirmó, en la conferencia de prensa, que “los centros de estudiantes y los sindicatos tienen que jugar un rol fundamental para discutir qué salida vamos a tener para enfrentar esta crisis. Y yo creo que ese es el debate que tiene que tener la izquierda en este momento. Mañana deberíamos ir a las escuelas, a las universidades y a los lugares de laburo a abrir esa reflexión sobre cómo podemos hacer para pelear por mayores paritarias o cómo podemos hacer para mejorar el presupuesto universitario”.

Mientras los candidatos terminaban de dar sus discursos a los medios y de sacarse fotografías, en la calle la militancia esperaba expectante. Con bombos, banderas y cánticos las personas allí presentes recibieron con alegría a los integrantes de la lista del FIT-U a pesar de no lograr las dos bancas que se propusieron alcanzar a lo largo de la campaña. Pero, en unas elecciones donde se presentaron un total de 17 listas y que únicamente 5 hayan logrado ocupar un lugar en la Legislatura y que una de ellas haya sido la de la izquierda fue motivo suficiente de festejo. Entre mensajes en defensa del pueblo palestino y solidarizarse por la situación de paro indeterminado en Tierra del Fuego, Fierro, en un escenario en la calle, junto con los demás candidatos, concluyó: “Nuestra elección tiene por resultado haber quedado como quinta fuerza en la ciudad, haber combatido esa derechización. Nosotros vamos a combatirla entre los sectores populares, porque no queremos xenofobia, racismo, ni queremos ser parte de esta política derechista cuyo objetivo es llevarse y cargarse a toda la clase obrera destrozando sus convenios colectivos de trabajo, sus salarios y todos sus derechos conquistados. Pero obviamente vamos a reflexionar, tenemos que presentarnos frente a la población trabajadora como organizaciones serias que miden exactamente lo que ha ocurrido en esta elección y que se comprometen a pelear, a luchar y a reflexionar profundamente para conquistar a esa ciudadanía que tiene que pelear para que esta ciudad sea recuperada para sus trabajadores”.

«No se lidera solo desde el resultado, también desde la convicciones»

«No se lidera solo desde el resultado, también desde la convicciones»

El PRO, con Silvia Lospennato a la cabeza, salió tercero en el distrito que gobierna y perdió por primera vez desde 2005. ¿El ocaso de Mauricio Macri?

El PRO enfrenta una encrucijada tras terminar tercero con su lista encabezada por Silvia Lospennato en las elecciones legislativas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El oficialismo de la ciudad obtuvo el 15,9% de los votos, logrando sólo 5 bancas, y quedó detrás de Manuel Adorni, primero con el 30,09% y Leandro Santoro, segundo con el 27,4%. La jornada fue marcada por una baja participación, con el 53,45% del padrón asistiendo a votar, el porcentaje más bajo desde el 2007.

Tomando los resultados al momento del cierre de esta nota, el oficialismo porteño enfrenta una legislatura muy dividida y en minoría, a donde tendrá que ir a buscar acuerdos. El PRO tendrá solo 11 representantes, mientras que el peronismo porteño ostentará 20 bancas y La Libertad Avanza contará con 14.

La dirigencia salió a reconocer la derrota unos minutos después de las 19 horas, instantes luego de que se publicaran los primeros datos oficiales. La primera en hablar fue la propia Lospennato, quien reconoció que los resultados no fueron los esperados y agradeció a la militancia y a los fiscales. Destacó que fue una campaña difícil, “llena de insultos y noticias falsas” y que “no obedeció las reglas de la democracia”.

A su vez, destacó que la noche de hoy es un punto de inflexión para el partido, que el PRO apostó por la renovación y que “toda semilla necesita tiempo para crecer”. En ese sentido, destacó que “no se trata del resultado de hoy, sino de un cambio con equilibrio y sin crueldad”. También, afirmó que “no solamente se lidera desde la victoria sino también desde las convicciones” e instó a la militancia del PRO a “no rendirse”.

El segundo orador fue el jefe de gobierno Jorge Macri, quien felicitó a Adorni y a Santoro por su elección. El mandatario manifestó que siempre se tiene que ser fiel a sus valores e instó a la nueva conformación de la Legislatura a no obstruir la gobernabilidad. Condenó que la elección se nacionalizó y resaltó que por esto se complicó dar discusiones locales, pero reconoció que la ciudadanía reclamó una conformación más diversa en el poder legislativo local.

En ese sentido, afirmó que quedan dos años y medio de gobierno en donde tendrán que ir a buscar acuerdos a la cámara y festejó que el partido en sí tendrá más legisladores que antes, aunque  el bloque oficialista quedó debilitado tras el quiebre de la alianza entre el PRO y el radicalismo de la ciudad.

En el escenario también estaba Mauricio Macri. El expresidente se paró al lado del atril en donde Lospennato y su primo Jorge brindaron sus discursos y se fue sin declarar. Luego de los discursos, la poca militancia que llegó hasta el bunker se dispersó rápidamente y para las 20 horas ya estaban desmontando el escenario.

Esta noche, a diferencia de lo usual locación, el PRO decidió que su búnker sea en la sede central del partido sobre calle Balcarce, con un pequeño lugar reservado al público y un escenario a mitad de cuadra. El clima fue de mucha cautela durante todo el día, con una muy baja presencia de la militancia. La primera en hablar fue María Eugenia Vidal, unos minutos después de las 18 horas. La exgobernadora de Buenos Aires declaró que fue una campaña muy intensa y evitó hablar de bocas de urna. Para ese momento, en las sedes de La Libertad Avanza y Ahora Buenos Aires se manejaba cierto ambiente de euforia.

Es la primera vez que el partido pierde en la Capital desde su fundación en 2005. Desde entonces, cosechando su primera victoria en las elecciones a jefe de Gobierno del 2007 con la fórmula integrada por Mauricio Macri y Gabriela Michetti, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ha sido el fuerte del PRO. Tras los resultados de esta noche y considerando el derrotero que arrastra las filas de Mauricio Macri en los últimos dos años, la jefatura de gobierno en el 2027 es una incógnita.

Esta derrota toca bastante fuerte en las filas del PRO, tras el recrudecimiento del enfrentamiento entre Macri y el presidente Javier Milei. En las últimas semanas el titular del PRO puso el cuerpo y participó tanto de varias recorridas con Lospennato como también rondas de entrevistas junto a ella. Por eso, es muy difícil que pueda desmarcarse de esta mala noche electoral.

La jornada empezó con Macri acusando al gobierno de campaña sucia. El expresidente denunció la divulgación de un video generado con inteligencia artificial, en el que una representación de él anuncia la baja de la candidatura de Lospennato en favor de Manuel Adorni. En el desayuno del partido, acompañado por María Eugenia Vidal y su candidata, afirmó que esto fue la maniobra “más vil y perversa” que vio en sus 20 años de actividad política.

Los resultados de esta noche y los últimos dichos de Milei sobre el PRO, a quienes describió como “amarillos fracasados” en el cierre de campaña de Adorni, ponen el foco en el posible acuerdo en la provincia de Buenos Aires entre el gobierno nacional y dirigentes del PRO. Allí las conversaciones están avanzadas con Diego Santilli y Cristian Ritondo, quien estaba en el escenario cuando Lospennato y compañía salieron a reconocer la derrota.

Marra, afuera

Marra, afuera

El fundador de La Libertad Avanza compitió por fuera del espacio oficialista encabezando la lista de la Unión del Centro Democratico y quedó afuera. Obtuvo menos del 3% de los votos en una elección con apenas el 53 por ciento de participación.

Durante el día de hoy, los porteños acudieron a las urnas para renovar 30 de las 60 bancas de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. Entre los candidatos se encontraba Ramiro Marra, quien, tras ser echado de La Libertad Avanza (LLA) a principios de este año, buscó renovar su banca legislativa bajo el sello de la Unión de Centro Democrático (UCEDE), el partido fundado en 1982 por Alvaro Alsogaray. Los resultados fueron desalentadores para el exdirigente de LLA, que logró conseguir nada más que el 2,6% de los votos, insuficientes para llevarlo a la Legislatura. 

Sus últimos movimientos no le alcanzaron para detener lo que parecía una derrota cantada. El viernes pasado a las ocho de la mañana comenzó la veda electoral, sin embargo, a media mañana, Marra la violó a través de un comunicado audiovisual en X, donde anunció que, en lugar de esperar los resultados en un búnker, usaría el dinero del alquiler de ese espacio para realizar un sorteo entre las personas que se anoten a través de un formulario virtual. También se refirió a la estructura de la campaña: “Fuimos pocos, pero le metimos mucho esfuerzo. Sin estructuras, como en 2021. Nos propusimos cambiar la ciudad, hablar de soluciones reales. No discutir entre los que pensamos parecido, porque después necesitamos de esos acuerdos para hacer realidad los proyectos”.

Después de haber votado, ante la pregunta sobre las tensiones de campaña y su relación con LLA, Marra sostuvo: “No agredí ni confronté con los que piensan igual, creo que los acuerdos son fundamentales. Hay una madurez política de mi parte. Las agresiones no ayudan, y más en una elección legislativa, donde después hay que sentarse a votar proyectos en común”. Además, reforzó la idea de que el kirchnerismo es su principal adversario.

¿La libertad avanza?

Ramiro Marra formó parte del grupo fundador de la LLA, el partido que llevó a Javier Milei a la presidencia. Fue electo diputado en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires en 2021 y ocupó la presidencia del bloque de La Libertad Avanza. Dos años más tarde, fue candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y salió tercero, con el 12,96% de los votos.

El pasado 30 de enero, tras desobedecer las directivas de Karina Milei y romper con el bloque de legisladores de LLA para apoyar al PRO en la aprobación del presupuesto 2025, el partido encabezado por Javier Milei comunicó que expulsaba a Marra de su espacio. La información se conoció a través la cuenta oficial de LLA en la red social X: “El legislador Ramiro Marra ya no forma parte de La Libertad Avanza a nivel nacional ni en ningún distrito del país, de manera irreversible, como consecuencia de no seguir los lineamientos del partido y haber votado a favor del inaceptable aumento de impuestos en la Ciudad de Buenos Aires, que contradice los ideales del presidente Javier Milei».

La casta es el otro

Marra anunció su candidatura el 27 de marzo de 2025, apenas dos días antes del cierre del plazo para la presentación de listas. Fue el primero en la lista bajo el sello de la UCEDE, bajo el lema de «Libertad y Orden». En su anuncio, a través de un video publicado en redes sociales digitales, expresó: «Es hora de hacer una Ciudad liberal», y lanzó críticas tanto para el kirchnerismo como para el actual jefe de Gobierno, Jorge Macri.

En el marco de la campaña electoral, se refirió a la situación en la Ciudad de Buenos Aires: «Chorros por todos lados, basura en las veredas, ratas en las escuelas, trapitos extorsionadores, villas que esconden narcotraficantes, fisuras durmiendo en la calle». Además, a través de su cuenta de X publicó un spot en el que propuso “terminar” con los trapitos en la Ciudad de Buenos Aires: “Estamos cansados de esos que se creen vivos y pretenden cobrarnos por estacionar nuestros autos en la vía pública. Por eso vamos a incorporar en el código contravencional la figura de extorsión implícita, que implica 48hs de arresto para cualquiera que intente cobrarnos por usar el espacio público”. Además, aseguró que deberían aplicarse multas a las personas en situación de calle y expuso su contradicción cuando reconoció la dificultad por parte de aquellas personas para hacer frente a una multa: “Yo no estoy diciendo que esto es de la noche a la mañana. Si no es multa, tendría que ser una detención. Y la multa quedaría pendiente para cuando tenga un ingreso y se pueda insertar en la sociedad”.

Su discurso opuesto a Karina Milei, pero amigable con el Presidente, lo transformó en una segunda marca de LLA: no le alcanzó con la crueldad de su discurso para atraer votantes y entrar a la Legislatura de la Ciudad.

“Una de nuestras propuestas es el impuesto a la vivienda ociosa”

“Una de nuestras propuestas es el impuesto a la vivienda ociosa”

Luca Bonfante tiene 26 años, es militante universitario de Historia y se presenta como candidato a legislador como segundo en la lista del Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad. Su vínculo con las redes sociales.

Estudiante de Historia de la UBA, fue allí, en la Facultad de Filosofía y Letras, donde comenzó a ganar popularidad durante el conflicto y las marchas universitarias de 2024. Esta notoriedad fue acompañada por un aumento de seguidores e interacciones en sus redes, ya que suele usar sus cuentas de X, Instagram y TikTok para subir videos de militancia o informativos y debatir con sus opositores políticos, especialmente libertarios. En unas elecciones legislativas donde el componente universitario está muy presente, Bonfante obtuvo un lugar expectante en la lista del FIT-U, compuesto por cuatro partidos: el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), al que pertenece, el Partido Obrero (PO), Izquierda Socialista (IS) y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST). Será el segundo candidato en la nómina encabezada por Vanina Biasi.

 

¿Cómo fue pasar de la militancia universitaria a ser candidato?

Fue bastante repentino. El movimiento universitario que se puso de pie el año pasado, de manera muy abrupta. Veníamos movilizándonos en defensa de la educación pública después del 23 de abril y del 2 de octubre, pero la toma de facultades fue algo que se extendió de forma notablemente rápida no sólo en Buenos Aires, sino por todo el país, y ahí muchos militantes estudiantiles, no sólo en mi caso, ganaron una importante exposición política y mediática. Una particularidad de la izquierda es que siempre trata de reflejar las luchas en las listas, y creo que la visibilidad mía muestra también la simpatía que hay de un sector de la población hacia los estudiantes, por el reclamo universitario. Además, ese tema expone una de las principales debilidades del Gobierno.

¿Cuál fue la respuesta que recibiste en tu facultad a partir de tu candidatura?

Fue muy buena y me siento respaldado por los estudiantes porque formamos parte de un proceso colectivo. El movimiento estudiantil se caracteriza por tener métodos asamblearios, por organizarse en los cursos desde abajo, con comisiones de base y con los docentes, entonces muchos compañeros me dicen que sienten que están haciendo campaña por “uno de los nuestros”.

En caso de entrar en la Legislatura, ¿qué ofrece tu espacio que los demás no?

Lo que nos diferencia es cómo actúan nuestros espacios políticos. Hablando lisa y llanamente, el radicalismo habla mucho en defensa de la educación pública, pero después a la hora de las votaciones y cuando las papas queman, terminan dándose vuelta o panquequeando, como pasó con el senador (Eduardo) Vischi cuando se trató de poner en pie una comisión investigadora por la cripto estafa. También cuando se debatió la Lley de Presupuesto Universitario hubo radicales con peluca que votaron en contra y a favor del veto de Milei, y lo mismo sucedió cuando se trató el aumento de jubilaciones. Lo que diferencia a nuestro espacio político del resto es que nosotros no nos vendemos, no panquequeamos y tampoco nos pueden comprar. Si bien hay muchas personas que no comparten el 100 por ciento de nuestras ideas, sí reconocen las convicciones de nuestra parte.

La campaña de tu espacio es fuerte en las redes, ¿qué rol le asignan?

Las redes sociales juegan un rol muy importante partiendo de la base de que en estas elecciones no hay espacio publicitario gratuito en radio ni en televisión. Desde ese punto de vista estamos forzados a involucrarnos en ese mundo. Es cierto que ahí la derecha venía sacando ventaja, pero desde la izquierda hemos podido ponernos a la altura de las circunstancias y tomar ese desafío de lleno. Los propios resultados los reflejan: hoy las cuentas de la izquierda, particularmente la de Myriam Bregman y la mía, están a la misma altura, o incluso más, que las de candidatos que ponen muchísima más plata para hacer publicidad. Me meto de lleno en el proceso creativo, porque mis cuentas las manejo yo. Tenemos un grupo de compañeros que saben filmar, pero las ideas las pensamos entre todos.

¿Cuál es el objetivo de esos contenidos?

La idea en primer lugar es llegar a más personas que no piensan como uno, entonces ahí hay que intentar romper el cerco mediático que se arma con la izquierda y después tratar de meterse en la discusión de la actualidad, pero con una perspectiva diferente y tratando también de reflejar otros valores. Nos empeñamos en hablar distinto al lenguaje libertario, que usa siempre la expresión “domado” y todas referencias al sometimiento. Nosotros buscamos inculcar otro lenguaje que enseñe nuestros principios más solidarios, no homofóbicos, de no dejar a nadie tirado, y creo que cómo se dice habla mucho de lo que uno quiere decir.

Afirmás que, si bien una parte de la juventud está con las ideas libertarias, hay otra gran porción que está del otro lado, ¿qué te lleva a asegurar eso?

Hay varios ejemplos que demuestran que no toda la juventud se volvió libertaria. El año pasado hubo dos movilizaciones universitarias masivas, hubo tomas de facultades como hace mucho tiempo no había. Y también lo vemos este año, en la movilización que hubo el 1 de febrero después de los dichos de Milei en Davos. Las calles del país se llenaron de jóvenes que repudiaban profundamente lo que dijo porque no están de acuerdo con la homofobia. El gobierno de Milei quiere instalar una agenda que puede garpar en Estados Unidos, pero no en este país que tiene una gran tradición en defensa de los derechos humanos y las libertades democráticas. Además, se viene reflejando en distintas situaciones, como en la calle acompañando a los jubilados, que una parte importante de la gente joven no se volvió de derecha. Yo a lo sumo opino que hay polarización y que hay una tendencia hacia eso, no solo en la Argentina sino en todo el mundo. En las elecciones que hubo en Alemania hace muy poco se vio eso: en el rango etario de 18 a 24 años la ultraizquierda salió primera e inmediatamente la ultraderecha salió segunda. Entonces creo que ese es el fenómeno global.

¿Cuáles serían tus proyectos primordiales en la Legislatura?

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hay un gran problema ligado al transporte y a la vivienda. En ese sentido, una de las cosas que nosotros planteamos desde la izquierda, y por eso hemos presentado distintos amparos, es contra los aumentos en el subte. De hecho, muchas veces se han tenido que retroceder los tarifazos porque participamos de las audiencias públicas cada vez que hay aumento. Somos la única fuerza política que forma parte, porque el peronismo no lo hace, lo cual también refleja bastante cómo vienen cogobernando con el PRO. El peronismo maneja el 20 por ciento del presupuesto en esta ciudad, tiene 18 legisladores y como oposición se le conocen muy pocos logros. Eso habla de una complicidad con el oficialismo que no se puede negar. Además, hay que frenar el asbesto de forma inmediata, no puede ser que un material cancerígeno prohibido en varios países siga estando en el subte y se cobre la vida de varios trabajadores. El problema de la vivienda hay que resolverlo de forma inmediata y ahí el impuesto a la vivienda ociosa es una de las propuestas que planteamos de la izquierda. Consiste en poner un impuesto a estos grupos inmobiliarios que tienen 10, 15, 20 departamentos vacíos para que justamente les sea más redituable ponerlo en alquiler que usarlo para la especulación inmobiliaria.

¿Las críticas a la gestión de Jorge Macri más la fragmentación de la derecha pueden facilitar que la izquierda gane terreno en la Legislatura?

El conjunto de todo el escenario electoral refleja una fragmentación de todos los espacios políticos, porque si uno ve incluso las listas del 2023 y las de hoy, ve que todos se cambiaron de logo, de color y de nombre, salvo la del Frente de Izquierda Unidad. Si bien tenemos diferencia entre nosotros, priorizamos la unidad sobre todo en este momento. Las elecciones legislativas en general son una oportunidad para que la izquierda crezca, pero también veo que hay partidos políticos que quieren instalar que son ejecutivas, que se elige jefe de Gobierno y eso no es así. Se eligen 30 legisladores y la izquierda para conseguir dos necesita 120.000 votos.

“Nuestro lugar en la Legislatura servirá como punto de apoyo para las luchas que se den fuera del recinto”

“Nuestro lugar en la Legislatura servirá como punto de apoyo para las luchas que se den fuera del recinto”

A días de las elecciones legislativas porteñas, ANCCOM dialogó con Vanina Biasi, Celeste Fierro y Agustín Romero candidatos a legisladores del Frente de Izquierda de Trabajadores-Unidad para conocer sus propuestas. ¿Qué hacer con las viviendas ociosas?

“Hay que construir una verdadera alternativa por izquierda, democrática y hecha por y para las y los trabajadores, que no arrugue con los empresarios y corporaciones”, dice Celeste Fierro, militante del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y candidata por el Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad (FIT-U) de cara a las próximas elecciones legislativas para la Ciudad de Buenos. En un territorio que durante años ha sido gobernado por el PRO y que actualmente tiene a Jorge Macri como Jefe de Gobierno, el FIT-U busca sumar más bancas en la Legislatura para hacer frente a la derecha. Al respecto de este contexto, Vanina Biasi, actual diputada nacional y quien encabeza la lista del FIT-U, señala que en la ciudad “hace falta defender realmente los intereses de quienes vienen siendo golpeados por estos gobiernos. Por eso planteamos que a Macri y a Milei hay que pegarles con la izquierda, porque tanto en las bancas que ocupa el FIT-U como en cada movilización somos consecuentes con lo que planteamos y la defensa incondicional de los trabajadores”.

Con la eliminación de las PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y la fragmentación de los partidos tradicionales, como el peronismo, el PRO e incluso La Libertad Avanza, los habitantes de la ciudad tienen un total de 17 listas para elegir en las próximas elecciones. Ante este escenario, Biasi afirma que esta “fragmentación es producto de la crisis política de varios de los partidos tradicionales e incluso de los que gobiernan hace tan solo dos años. La situación económica a la que nos han llevado y el rechazo de la población a estas medidas ha producido esta pelea por ver quién se salva y logra capitalizar este descontento”.

“Una ciudad para unos pocos”

Estas elecciones porteñas se realizan en un periodo en donde la gestión actual (el PRO) está siendo fuertemente cuestionada por varios espacios políticos, incluida obviamente la izquierda. “La reforma antieducativa, la precarización del sistema de salud, trabajadores municipales que cobran por debajo de la línea de pobreza y en muchos casos sin estabilidad laboral, entre tantos otros motivos. Son suficientes para evaluar la gestión del PRO como pésima”, señala Biasi. Y agrega: “Esa es la orientación que han sostenido estos 18 años de gobierno: una ciudad para unos pocos y expulsiva para las mayorías”. Al mismo tiempo, Fierro reflexiona sobre la relación entre el gobierno de la Ciudad y el nacional: “En represión, Jorge Macri ha sido el mejor alumno de Milei y Bullrich, es más hasta le entregó la autonomía de la Ciudad en ese sentido, todo para reprimir a jubilados y a quienes luchan por sus derechos”.

Para hacer frente a esta situación, entre las principales propuestas que se plantea la izquierda se encuentran tres problemáticas a abordar: la salud, la educación y la vivienda. Agustín Romero, quien también se presenta como candidato a legislador y es militante del MST, recalca que las propuestas fueron realizadas de manera colectiva: “Fuimos elaborando con vecinos, trabajadores, estudiantes, mujeres y disidencias, porque nuestra manera de hacer política es colectiva, las bancas abiertas y siempre al servicio de quienes nunca fueron y son escuchados”.

Por otra parte, Biasi destaca tanto la urgencia de incorporar a las enfermeras y enfermeros a la carrera profesional de salud como la real aplicación de la Ley 448 sobre salud mental. Asimismo, Fierro expresa la necesidad de llevar adelante un sistema único de salud en donde se ponga fin a los negociados privados en la materia.

También, para hacer frente a la situación habitacional en la ciudad, la izquierda plantea la incorporación de los más de 200 mil inmuebles ociosos en la ciudad al mercado de alquileres. Esto sería sobre la base de un impuesto progresivo a la vivienda ociosa para los grandes acaparadores que hacen negocio sobre la base de la expulsión de los trabajadores en el territorio. En simultáneo, Fierro habla sobre la idea de establecer “alquileres sociales, es decir sea solo el 15% del salario del inquilino”.

Y sobre la educación, Biasi menciona la derogación de la reforma “BA Aprende”, que no solo degrada los contenidos que se enseñan, sino que ataca la estabilidad docente de la mano del cierre de varios cursos. Además, “sostenemos -afirma Biasi- la defensa de la ESI frente al intento de imponer una regimentación de los estudiantes ante la realidad que viven con la educación pseudoemocional, aprobada en la Legislatura con el apoyo de todos los bloques políticos, con excepción del FITU, a fines del año pasado”.

Una alternativa

“La izquierda tiene que organizar la pelea para que se vaya Milei, un gobierno incompatible con los reclamos populares, que desde que asumió mantuvo un ataque constante sobre las mayorías, y para que los trabajadores intervengan con sus propios reclamos por el salario, las jubilaciones, el derecho a la salud, la educación y la vivienda”, dice Biasi. Y añade: “Nuestro lugar en la Legislatura servirá como punto de apoyo para las luchas que se den fuera del recinto y un canal para su organización. En la medida que logremos desarrollar esa perspectiva crecerá el voto al Frente de Izquierda”.

Además, Fierro subraya la necesidad de la unidad y cuestiona la oposición encabezada por el peronismo en la ciudad: “La salida hoy para echar a Milei es la unidad en las calles. Es organizar la bronca desde abajo, autoconvocarnos en cada sector de laburo, de estudio, en cada barrio, porque la CGT ya demostró no estar a la altura de esta tarea. Ni tampoco los dirigentes políticos del peronismo, como Santoro, que ni una palabra dijo desde que es diputado nacional y ahora se planta como la salvación de la derecha”.

En sintonía, Romero concluye: “Es necesario que la izquierda se postule como una alternativa, no solo electoral, sino también en todos los espacios que intervenimos. El proyecto de la izquierda no es personalista, sino que se construye colectivamente, democráticamente y sobre todo desde las bases. Porque la pelea contra la derecha, su plan de ajuste y de represión se lo enfrenta en las calles, así como lo hacen los jubilados, los sectores en lucha como el Bonaparte, el Hospital Garrahan y los piqueteros”.