Posteriormente y con presencia policial debido a la activación del protocolo anti piquetes para evitar cortes en Avenida Rivadavia, los Metrodelegados marcharon desde las 13 a las oficinas de SBASE para pedir respuesta a los reclamos que realizan desde hace tres años.
Durante el trayecto, la columna no llegaba media cuadra. Algunos de los mnifestantes movilizaron con bombos y banderas representativas del gremio. Al llegar a la sede ubicada en Agüero 48, cortaron brevemente la calle hasta que se les ordenó liberar el carril, por lo que la concentración siguió en ambas veredas.
La línea B conecta el exCorreo Central (hoy Palacio de la Libertad) con el barrio de Villa Urquiza. En palabras de los metrodelegados, está en estado de emergencia debido a las malas condiciones en las que se encuentra: desde una reducción de la velocidad de la línea, hasta vías partidas, fisuradas y en el aire. Hay «un riesgo constante de descarrilamiento, desprendimiento de rieles», según Dellecarbonara.
«Las estaciones y la infraestructura en general están muy abandonadas, no se hacen las obras que corresponden. No se hace mantenimiento, muchas veces no hay ni escaleras mecánicas, ni ascensores funcionando, no hay acceso para personas con capacidades diferentes habilitados para que ingresen, lo poco que hay está roto».
En el medio, recientemente, fue cerrada la estación Pueyrredón para llevar adelante «obras de renovación integral», según fuentes oficiales. Se trata de una estación clave para varios pasajeros, ya que es una parada de combinación con la estación Corrientes de la H.