Despidos en Clarín: la lucha continúa

Despidos en Clarín: la lucha continúa

Los despedidos de Clarín y Olé reclaman su reincorporación en otras empresas del grupo.

A un mes del despido de 65 trabajadores del Grupo Clarín, se realizó un “bondiolazo” en las puertas del multimedio ubicado en Tacuarí 1846. El evento fue convocado por el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) quienes junto con los despedidos buscan visibilizar el problema y crear una bolsa de trabajo para reubicar a los empleados desvinculados.

El típico aroma de carne asada invade el lugar. Música de fondo, personas tomando cervezas y conversando entre risas pareciera indicar que se está celebrando algo. Sin embargo, la realidad es totalmente diferente. Luego de un mes exacto de que Clarín despidiera a 65 de sus trabajadores, entre el matutino principal y el deportivo Olé, y tras haberse logrado la reincorporación de cuatro de los afectados la protesta está lejos de llegar a su fin.

Tato Dondero, delegado de Página 12 y Secretario General de SiPreBA, en conversación con ANCCOM manifestó: “Lamentablemente el nivel de la negociación con Clarín no está a la altura de nuestras expectativas. La reincorporación de solamente cuatro compañeros es muy poco, por eso el conflicto sigue en medio de este contexto gremial y nacional muy difícil”. Además, Dondero reflexionó sobre la crisis en la que se encuentra sumergido el periodismo y opinó que es mucho peor que la de 2001 debido a que si bien hay un cambio cultural en cómo comunicarse que afecta al papel, las políticas de este Gobierno son mucho más salvajes y afectan tanto a los periodistas como a toda la clase obrera.

Se cumplió un mes de la nueva ola de despidos de Clarín y Olé.

Por otro lado, Matías Cervilla, delegado del diario Clarín, indicó que unos de los reclamos de los trabajadores despedidos consiste en la apertura de una bolsa de trabajo para incorporarlos en otras compañías del Grupo. “Negociamos con la empresa y cedieron, así que actualmente están pidiendo curriculums y haciendo entrevistas. También hicimos un cese de tareas para seguir visibilizando el problema y continuamos pidiendo la reincorporación de más compañeros y la mejora de nuestras condiciones de trabajo”, aseguró Cervilla.

“Hay un gran apoyo de compañeros de todos los medios de prensa escrita: de Tiempo Argentino, Página 12, Infobae, Telam, despedidos de Grupo 23, se han solidarizado y han ayudado a la visibilización de este conflicto”, repasó Cervilla. Mientras tanto, los trabajadores involucrados aún no tienen ninguna garantía de su futuro. Uno de ellos es Ricardo Sapia, quien formó parte del equipo de redacción de Olé durante 23 años. “Me quedé sin laburo, mi único trabajo era éste. Sabemos que lo de la bolsa de trabajo no es algo fluido, pero yo al menos le pongo alguna ficha a eso”, confesó.

Ricardo, quien fue unos de los encargados de la parrilla de este encuentro, también contó cómo sobrelleva el tema del despido: “Es un día a día, por momentos tenés mucha bronca y tristeza debido a que pensás que hay determinadas coberturas que las podrías estar haciendo, porque era lo que hacías anteriormente. Sin embargo, también hay momentos como hoy en donde estás un poco mejor porque estás entre compañeros que se encuentran en la misma situación. Además, varios ex colegas también bajaron de la redacción para estar con nosotros”.

Otro de los afectados es Pablo Cerolini, reportero gráfico y editor de fotografía, quien entre un poco de humor y tristeza cuenta cuál es su situación: “Se podría decir que estoy de año sabático, me echaron y hasta ahora no encontré trabajo. Si bien personalmente uno puede tener bronca yo no analizo la situación en términos personales, sino más bien colectivamente. Es muy importante el apoyo de SiPreBA y de otros sindicatos porque uno se siente contenido”. “Hasta que no haya una decisión de finalizar la lucha yo voy a seguir   apoyando esta causa, creo que hay que molestar y que hay gente acá dentro que tiene que saber lo que es esta empresa, por eso hay que seguir insistiendo por la reincorporación”, dice Cerolini muy convincente.

¡Qué mal se TV!

¡Qué mal se TV!

En 2017 y 2018, los trabajadores de la TV Pública recibieron solo un 15% de aumento.

Tenemos una pantalla devaluada, nos redujeron el sueldo, y buscan editores afines para editorializar las noticias”. Agustín Lecchi, delegado de la TV Pública y Secretario de Organización del Sindicato de Prensa de Buenos Aires dio tres conceptos sobre la situación en el canal público en un año con fuerte marcación electoral. Como parte de la política de vaciamiento de los medios estatales que viene desarrollando la gestión actual, por primera vez en la historia del canal fueron desplazados todos los conductores del staff regular del noticiero de la Televisión Pública Argentina.

La estrategia impulsada por el gobierno busca desmantelar a los medios de comunicación públicos. Desde el 1° de abril, las autoridades del canal dispusieron la contratación de presentadores externos y la marginación de los profesionales que venían desplegando este rol en la pantalla. Contratados de manera directa, violan la normativa por la cual es obligación llevar a cabo concursos públicos para la contratación del personal. El argumento del Secretario de Medios Públicos, Hernán Lombardi, y del gerente de noticias, Néstor Sclauzero, es que se trata de una cuestión artística, porque son la cara visible del programa. Sin embargo, no dieron ninguna explicación oficial a los periodistas desplazados.

En diálogo con ANCCOM, Agustín Lecchi, delegado de la TV Pública y Secretario de Organización del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SIPREBA), subrayó tres puntos fundamentales sobre la situación que están atravesando. En un primer aspecto, el ajuste económico sobre los trabajadores: «No solamente nos congelaron el salario, sino que nos lo redujeron, porque comenzaron a violar de un día para el otro artículos del Convenio Colectivo que hacían a la conformación salarial. Todo esto, sumado a una paritaria cero en 2017, en el que hubo 25 % de inflación, y en 2018 que hubo un 47,6 %. Recién ahora se logró un aumento del 15 % sobre los salarios de 2017, pero esto no alcanza».

«La pantalla está devaluada, con menos producción, con menos capacidad de seducir a las audiencias», dice Agustín Lecchi.

Un segundo aspecto se da sobre la programación: «Si se observa la pantalla, está devaluada, con menos producción propia, con menos capacidad de seducir a las audiencias. Tenemos en el noticiero, con la excusa de la problemática presupuestaria, la imposibilidad de cubrir un montón de noticias que suceden más allá de la General Paz; ni que hablar en otro país, visitas del Papa Francisco a América Latina, el hallazgo en su momento del Ara San Juan. No hay noticieros informativos los fines de semana. Recién ahora hay algunos flashes en situaciones muy particulares, pero aún así no pudimos cubrir ni las elecciones PASO en San Juan, ni las de Chubut. Tampoco los festejos de Racing, ni las finales de River-Boca en la Copa Libertadores, y así un montón de noticias que día a día el canal no cubre con este pretexto».

Por último, la intensa política de desguace también repercute en el equipamiento, tanto edilicio como material: «No hay un mantenimiento adecuado. No se invierte en tecnología para el sector como se hacía en la gestión previa. No se cuidan correctamente equipos que son costosos ni se mantiene la infraestructura».

Los trabajadores denuncian abiertamente su situación a través de comunicados y videos en su espacio web y por medio de manifestaciones en marchas y huelgas.  De la misma manera, y a forma de proyecto alternativo para evitar la censura y lograr ejercer de forma real el derecho a la libertad de expresión y opinión, impulsaron Noti trabajadores, un segmento de noticias producidas por los trabajadores, respaldado por el SIPREBA y con gran acompañamiento de Radio Nacional y Télam. Hasta el día de hoy, se emitieron más de 55 noticieros denunciando el apagón informativo que se da en el canal, así como también evidenciaron lo sucedido en otros medios públicos y privados y en algunos sectores de la sociedad.

Por los recortes, la TV Pública no cubrió los viajes de Francisco por América Latina, las PASO en Chubut y San Juan, la final de la Copa Libertadores ni los festejos de Racing Campeón.

Como representante de los trabajadores de la TV Pública, Lecchi sostuvo: «Este gobierno llegó con un discurso republicano de pluralidad de voces, con lo cual tienen un problema cuando nosotros le planteamos la obligación de cubrir determinadas noticias. A ellos les cuesta decir que no. Las noticias en general se cubren, lo que hay es menos capacidad para hacerlo. Si bien es una decisión económica, también repercute en una decisión política, ya que el presupuesto, en definitiva, depende del Estado, y ellos eligen a qué otorgarlo. Y por otro lado, desplazan a todos los conductores regulares para poner conductores afines y poder editorializar todas las noticias que nosotros cubrimos en la calle». Asimismo aclaró: «La gestión siempre pone algunos conductores y elige a los de planta que más les interesan, pero es la primera vez en la historia que son todos nuevos. No es casual que esto ocurra en un año de elecciones, justo después de un año de mucha conflictividad, vinculado con una fuerte presión política y como parte de la censura que venimos denunciando».

Sin embargo, desde la Secretaría de Prensa de SIPREBA afirmaron que no se han registrado despidos como consecuencia directa de la lucha de las y los trabajadores del canal.

El conflicto aún permanece en pie, planteándose cada vez más restricciones para el ejercicio periodístico profesional. La web del canal quedó fuera del control de los periodistas del noticiero, generando una escisión total entre lo que son las noticias en la pantalla chica y en la web. El canal emite programas enlatados de otros años, un política que termina beneficiando a los canales comerciales.

El gran despedidor argentino

El gran despedidor argentino

«Acá solo somos un número», dijo Rubén Digilio, uno de los despedidos.

Las cámaras ya estaban transmitiendo y el grupo electrógeno del sonido llevaba rato encendido, pero la conferencia de prensa aún no podía iniciar porque restaba ocupar una silla justo en el centro de la mesa de los oradores. Llaman entonces a Rubén Digilio para que tome asiento. En cuanto mencionan su nombre, la audiencia comienza a aplaudir enfáticamente. Y es que Rubén, su trayectoria y su simpleza, son la prueba empírica de que no hubo razón o criterio en ninguno de los 65 despidos del Grupo Clarín.

Si bien la conferencia estaba anunciado para las doce del mediodía, no fue sino hasta cerca de la una que se le dio inicio, al grito de “Unidad de los trabajadores”. La conferencia tuvo diez oradores y duró 35 minutos. Ya pasaron 7 días desde que anunciaron a los 65 despedidos, de entre los cuales 18 son del área de fotografía, que tiene 24 fotos expuestas en 6 de las 37 vallas que aún rodean la redacción de Tacuarí al 1800. Es todo una cuestión de cuentas y Digilio lo sabe muy bien: “Acá sos un número”. Es toda una cuestión de cálculos porque esa parecería ser la única razón que le encuentran los trabajadores a su sorpresiva desvinculación. “Perder nunca pierden. Cada vez quieren ganar más”, asegura el reconocido fotógrafo. Clarín ha sido el mayor beneficiario de la pauta oficial en los últimos tres años. Según informó a la prensa Matías Cervilla, delegado de la Comisión Interna de Trabajadores del Grupo Clarín, la empresa ha recibido millones de pesos del presupuesto estatal durante 2018.

El caso del despido de Rubén Digilio fue uno de los más emblemáticos, ya sea por su larga trayectoria en el medio, porque le faltaban únicamente dos años y tres meses para jubilarse o porque no le llegó a tiempo el mail que le notificara del despido, razón por la que se enteró en la puerta del edificio, mientras pretendía ingresar a su trabajo, tal como hacía todas las mañanas desde hacía 21 años. Lejos está él, sin embargo, de considerarse emblemático: “Acá, somos todos números y no les importa. No les va a importar nunca porque acá se ha ido gente grosa. No solo de fotografía, se han ido redactores que son grosos. Tipos que tienen una pluma increíble y no les importó. ¿Y por qué les iba a importar yo? Un dolor llegar acá, que no te dejen entrar, una angustia tremenda”. Y sigue “Obviamente, yo no vuelvo. Ni aunque me tripliquen o cuatripliquen o quintupliquen el sueldo. Yo le dediqué todo (al diario). Tal vez sea muy extremista; del amor pasé al odio. A todos nos gustaba el laburo. Si nos teníamos que quedar tres horas más, no importaba, porque nos gustaba. Y no lo supieron aprovechar. Te sentís desvalorizado y muy dolido”. El clima general durante la jornada -y desde hace una semana- es de dolor e incertidumbre, de tristeza, pero también de solidaridad.

Durante el paro, los medios del Grupo Clarín continúan saliendo por el trabajo de los prosecretarios de redacción.

La conferencia de prensa de ayer sigue en línea con el Camarazo que se llevó a cabo el lunes al mediodía. El área de fotografía es una de las más golpeadas por los despidos, al haber desarticulado al 40% de los reporteros gráficos. Allí estuvieron presentes también el Frente Popular Darío Santillán, el Frente de Organizaciones en Lucha y el Movimiento por la Unidad Sudamericana y el Cambio Social. El padre de Darío Santillán hizo uso de la palabra para remarcar la importancia de los fotoperiodistas, recordando que el lente de José “Pepe” Mateos fue esencial en el juicio del asesinato de su hijo.

Horas después del Camarazo del lunes se decidió por unanimidad en la asamblea de trabajadores un paro de 48 horas, que se extenderá desde la conferencia del martes hasta el mediodía del jueves. Frenar todas las tareas y detener las actividades laborales en las redacciones de Clarín, Olé, las revistas Elle, Viva y demás portales y productos de AGEA fue la medida votada por quienes siguen trabajando para la empresa en apoyo a sus compañeros. Esto no significa, no obstante, que los medios gráficos y los portales digitales dejen de salir y actualizarse durante estos días. Las tareas quedarán a cargo de prosecretarios que seguirán asegurando la vigencia del medio. Quién explica esto es Victoria de Masi, todavía redactora de Revista Viva: “Entendemos también que los productos tienen que seguir saliendo. Es nuestra fuente de trabajo. La queremos cuidar es pos de las audiencias. Nosotros somos servidores públicos. Los que pierden también son los lectores, los oyentes, los televidentes, los usuarios de redes sociales. Es decir, esto no es una movida individualista o de nicho, sino que está en juego la responsabilidad social que implica nuestro trabajo, que tiene que ver con informar. Ni más ni menos. Y el derecho a la información y el deber cívico que implica estar informado”.

Los trabajadores de Clarin recibieron el apoyo solidario de colegas de todos los medios.

La palabra audiencias parecería aún resonar en la cabeza de muchos. Al comienzo de la semana que culminaría con trabajadores en la calle, Clarín anunció el rediseño de su redacción con el objetivo de acelerar la transformación digital, apostar a la calidad y hacer crecer su audiencia. El resultado pareció ser una brutal reducción de personal. Claro está, que todo esto se enmarca en un contexto de crisis, cambios e incertidumbre en el ecosistema mediático. El conflicto en Télam del pasado año, el vaciamiento de la TV Pública, el paro en Página 12, los sueldos de C5N, la crisis en Radio Nacional son algunas de las situaciones todavía vigentes a las que ahora se suma la de Clarín. De Masi observa con preocupación este hecho: “De alguna manera pensamos que esta serie de despidos en Clarín es habilitante para que en otras empresas periodísticas pase lo mismo. Eso es poner al periodismo en riesgo. El periodismo es un oficio muy modesto pero también es muy complejo, y tiene una responsabilidad social. Por eso también es una invitación para que el resto de las redacciones estén en estado de alerta”.

Los trabajadores de Clarín no han recibido ningún tipo de respuesta por parte de la empresa. Adentro hay guardias civiles que custodian los pasillos, menciona Francisco “Paco” Rabini, dirigente de SiPreBa, durante la conferencia brindada ayer. También fueron oradores Clara Uranga, redactora y delegada de SiPreBa y AGEA, Walter Correa, del Frente Sindical para el Modelo Nacional, Nicolás del Caño, diputado por el Frente de Izquierda, Hugo Yasky, Secretario General de la CTA, Romina del Plá, diputada por el Frente de Izquierda, Roberto Baradel, Secretario General del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires, Miguel Funes, diputado por UC-FPV-PJ, Manuela Castañeira, precandidata a presidenta por el Nuevo Más y Tato Dondero, Secretario General de SiPreBa.

Hoy a las 16 horas se realizará  un Festival de bandas y la semana que viene participarán de la movilización y el paro del 30 de abril.

Héctor Magnetto, CEO y uno de los propietarios de Clarín, fue el principal blanco de las protestas.

Día del Periodista precarizado

Día del Periodista precarizado

Como antesala de un nuevo aniversario del Día del Periodista en Argentina, este 6 de junio se llevó adelante la Movilización Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de Prensa, que partió desde  Avenida 9 de Julio y Belgrano. Los motivos de la marcha son, a esta altura, harto conocidos: despidos y cierre de espacios de trabajo, vaciamiento de los medios públicos y persecución a los trabajadores de prensa.

La movilización contó con la convocatoria y el respaldo de la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa, conformada por la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), el Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (CISPREN) y el Sindicato de Prensa Rosario (SPR), entre otros. Todos se unieron bajo una misma bandera: la defensa del Estatuto del Periodista Profesional y los convenios colectivos de trabajo. Las distintas columnas cruzaron la Avenida Belgrano para dirigirse a las dos grandes cámaras patronales: la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA, comandada por La Nación y Clarín) y la Asociación de Diarios del Interior de la República Argentina (ADIRA).

Personas marchando con banderas.

La movilización contó con la convocatoria y el respaldo de la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa en defensa del Estatuto del Periodista Profesional y los convenios colectivos de trabajo.

Fernando “Tato” Dondero es secretario general del SiPreBA, delegado y trabajador del diario Página/12 desde hace 31 años. En diálogo con ANCCOM, sostuvo que “en la semana del Día del Periodista nos juntamos con todos los sindicatos del interior para hacer una marcha, con todos los reclamos acumulados durante este año, y fundamentalmente para repudiar la política de vaciamiento que está llevando adelante Hernán Lombardi” (titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos de la Nación). Dicha política de vaciamiento de los medios públicos puede ejemplificarse con los despidos en la Agencia Nacional de Noticias Télam, que se suman a los perpetrados en enero en Radio Nacional, además de los recortes presupuestarios efectuados sobre Canal 7.

En tanto, en un medio privado como Página/12 se abrieron retiros voluntarios, pero no despidos. No obstante, “el año pasado hubo atrasos en el inicio del pago paritario y aún se nos debe plata: como trabajadores estamos padeciendo un deterioro profundo de nuestro nivel salarial”, destacó Dondero.

“Pedimos paritarias libres y defensa de nuestro estatuto y convenio -afirmó secretario general del Sipreba-, pero hicimos una mención también a los medios comunitarios, alternativos, populares y barriales que están padeciendo una situación muy dura porque el gobierno no cumple con lo pautado en cuanto a los dineros de fomento y, obviamente, porque les pega de lleno toda la política de ajuste y tarifazos que ya todos conocemos”. Por eso, también acompañó a la movilización la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA).

Personas marchando con bombos.

La Movilización Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de Prensa partió desde Avenida 9 de Julio y Belgrano para dirigirse a las dos grandes cámaras patronales, ADEPA y ADIRA.

Además de la Red, adhirieron y manifestaron su apoyo gremios tales como el Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas de Capital Federal y Gran Buenos Aires (SIVENDIA), y la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE). Para el cierre, Dondero expresó la necesidad de realizar “un llamado a las centrales sindicales para que organicen un paro general con plan de lucha porque pensamos que este plan ajustador del gobierno viene por los trabajadores, y necesitamos una máxima unidad en la acción”.

Por su parte Cecilia Claps, productora periodística y delegada por SiPreBA en Radio del Plata, manifestó que actualmente “el conflicto en la radio no escapa al conflicto de los medios en general, conflicto que ya lleva dos años y medio, con pago de salario en cuotas, deudas, falta de insumos para el trabajo, y falta de elementos de higiene en las emisoras; en suma, un claro vaciamiento por parte de los empresarios. La idea de ellos es que de los 120 trabajadores que iniciamos el conflicto queden en la emisora solamente 60”.

En este marco la semana pasada se despidieron a 30 empleados, entre los cuales se incluía a la propia Claps, aun siendo delegada. “Cuando recibimos los telegramas de despido, no nos dicen nada de la indemnización, porque ellos aducen un problema económico, y que el accionista no va a poner más plata”, recordó (dicho accionista es en referencia a Electroingeniería SA). Al ser considerado un despido masivo intervino el Ministerio de Trabajo y dictó la conciliación obligatoria, retractó los 30 despidos y todos pudieron volver a sus puestos de trabajo.

Vista desde el escenario de la marcha y las banderas, se ven personas de espalda sobre el escenario observando la marcha.

El escenario se ubicó frente a las sedes de ADIRA y ADEPA.

Compromiso social

Desde un escenario montado frente a las sedes de las cámaras patronales ADIRA y ADEPA, habló Edgardo Carmona, secretario general del SPR (Sindicato de Prensa Rosario). Frente a un duro panorama, eligió iniciar sus palabras con un sesgo esperanzador: “Me decían en la marcha que no teníamos nada para festejar. Pero sí, tenemos mucho para festejar: la tercera marcha, la consolidación de este espacio que es la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa, donde hemos depuesto nuestras diferencias circunstanciales para coincidir en los ejes fundamentales que hoy afectan a los trabajadores de prensa”, aseguró eufórico.

Luego, al emprender un breve recorrido por los pilares del ajuste macrista, declaró: “Para que ese plan sea viable, este gobierno entregó en el altar de uno de sus dioses que es Clarín, la Ley de Medios, destruida a decretazos de necesidad y urgencia. Este gobierno sabe como nadie que para poder implementar su plan de exterminio del pueblo argentino debe consolidar el blindaje mediático”.

Al finalizar su discurso, Carmona reconoció que el periodismo va mucho más allá de un salario, un convenio colectivo o un estatuto: “El periodismo es mucho más que todo eso, es la liberación, la garantía de la información plural, el compromiso social con nuestro pueblo”, sostuvo.

Personas en la marcha con banderas.

Los sindicatos repudian la política de vaciamiento que está llevando adelante Hernán Lombardi en los medios públicos.

Las cifras del recorte

Publicado recientemente por SiPreBA, el informe sobre puestos de trabajo en los medios inpacta por su contundencia. La crisis que atravesaron los medios de comunicación en 2016, con 1.300 empleos perdidos sólo en el ámbito porteño, no finalizó (como era de esperar) en 2017: se registraron 500 nuevas desvinculaciones en el sector, entre despidos directos, “retiros voluntarios” y jubilaciones anticipadas.

“Fue un año signado por cierres tales como el de la histórica Agencia Diarios y Noticias (DyN), que dejó a 96 trabajadores de prensa en la calle; o Revista 23, donde de las 14 personas que hacían la revista, la empresa solo reubicó a dos; o el de Artes Gráficas Rioplatenses (AGR), la planta impresora de Clarín que dejó a centenares de trabajadores en la calle”, detalla el documento.

Las empresas que mayor cantidad de trabajadores despidieron o pasaron a retiro fueron La Nación y Clarín, superando el centenar. En suma, desde 2016, a nivel nacional se perdieron cerca de 3.000 puestos de trabajo en los medios. Realidad preocupante porque, como bien destacó Claps, “menos trabajo es menos voces, y menos voces es menos libertad de expresión”.

Mujer sosteniendo un cartel de reclamo salarial.

El informe publicado recientemente por SiPreBA sobre puestos de trabajo en los medios impacta por su contundencia.

Mujer sosteniendo un paraguas de Sipreba.

Desde 2016, a nivel nacional, se perdieron cerca de 3.000 puestos de trabajo en los medios.

Martín Fierro: el otro lado de la fiesta

Martín Fierro: el otro lado de la fiesta

Anoche, mientras se celebraban los premios Martín Fierro, cientos de trabajadores se agruparon en las afueras del hotel Icon Alvear para reclamar contra el recorte presupuestario, el vaciamiento de contenidos y los despidos en los medios públicos.

Representantes de TV Pública, de Radio Nacional y de la agencia oficial de noticias Télam, junto a todos sus sindicatos de prensa y televisión, se manifestaron en la entrada del lugar bajo la consigna “Que no te apaguen los medios públicos”, a raíz de la difícil situación que están pasando sus empleados.

Sebastián Struciat, integrante de la producción de Encuentro y de Paka Paka, explicó a ANCCOM respecto de la movilización que “hace más de dos años que existe el conflicto y no estamos teniendo respuestas claras ni de (el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos) Hernán Lombardi ni del gobierno. La intención es generar un vaciamiento de los contenidos. Desde su punto de vista, como no produce ganancia, todo lo que tiene que ver con lo público no merece presupuesto. Por esto hoy nos encontramos en la lucha”.

Manifestación de trabajadores de la TV en la puerta del Hotel Alvear durante la celebración de los premios Martín Fierro.

Durante la entrega de premios, algunos actores y periodistas mostraron un cartel con la leyenda «que no te apaguen los medios públicos».

Y mientras los famosos pasaban solo a metros de las banderas y del agite, Cecilia Bachetta, delegada gremial de APJ (Asociación del Personal Jerarquizado), quien fue despedida por considerar que su labor sindical no era compatible con el que hacía en TV Pública, comentó: “esto viene complicado, mirá la gente que hay acá. Son más de trescientos despidos, con ajuste y recorte”.

A su lado, entregando folletos que informaban los motivos de la lucha, Agustín Lecchi, representante de SiPreBa (Sindicato de Prensa de Buenos Aires), agregó que el próximo miércoles 6 de junio tendrá lugar la marcha federal del periodista junto a los trabajadores de prensa de todo el país.

Una marcha para que en la TV Pública, en Radio Nacional y en Télam no haya más despidos ni vaciamientos. Para que vuelvan a ser vanguardia, y para que vuelvan a ser de calidad.