Mercado Libre de derechos laborales

Mercado Libre de derechos laborales

La pandemia ha sido devastadora para muchas empresas pero no para Mercado Libre (ML), una de las pocas firmas que se benefició en estos meses gracias al crecimiento exponencial del consumo online. Según el último informe de Mercado Ads en 2020, solo en Argentina se sumaron más de dos millones de nuevos compradores en la plataforma. El informe que presentó la compañía a fines del año pasado, destaca que aumentó la cantidad de usuarios activos en América Latina un 45,2% (alcanzando los 51,5 millones) y sus ingresos netos fueron de 878,4 millones de dólares. Las ventas totales registraron un incremento de 205,7 millones en diversos artículos para llegar a los 5.902,4 millones de dólares. Aun así, su negocio más floreciente durante el trimestre fue Mercadopago: la plataforma registró 559,7 millones de transacciones, lo que representa un aumento interanual del 146,6%.

En 2021 la tendencia continúa: el balance presentado a principios de mayo, correspondiente al primer trimestre de este año, registró ventas por 1.400 millones de dólares y 70 millones de usuarios activos con un crecimiento del 111,4% interanual. De las ventas totales, el 65% correspondió al negocio de comercio electrónico mientras que el 35% restante fue recaudado por el servicio vinculado al negocio Fintech, nombre que se le da a las empresas tecnológicas financieras.

¿De qué se trata este negocio? Las Fintech se distinguen de los bancos y de las instituciones financieras tradicionales por ser empresas enfocadas en hacer un uso de la tecnología para lograr la innovación en las herramientas y transacciones. Este servicio se realiza a través de una red integrada de prestamistas particulares o empresas que invierten su capital privado a cambio de un interés. Para eso utiliza la plataforma Mercado Crédito, la cual le ofrece préstamos de capital a pequeñas y medianas empresas que venden a través de Mercado libre o que procesan sus cobros con Mercado Pago. El registro es online y no requiere ninguna documentación. Para el vendedor esta operación tiene muchos beneficios ya que las condiciones son flexibles y es él quien decide el monto a pagar y sus respectivas cuotas. Mercadopago es la plataforma de pagos de origen latinoamericano más grande de la región, con más 182 millones de usuarios, 370.000 comercios adheridos y ofrece más de setenta opciones de medios de pago.

ML anunció a principios de abril que sumará más de 16.000 trabajadores en toda la región en 2021, lo que implica un crecimiento superior al 100% en tan solo un año. Entre otros objetivos, está el de ampliar la red logística en la región y para ello necesita reforzar las áreas de IT (Tecnología de la Información). En una entrevista, Marcos Galperín explicó: “Nuestro objetivo es optimizar los tiempos y formas de entrega en cada país. Un 70% de los nuevos empleos serán en los Centros de Almacenamiento y un 25% en los equipos de tecnologías de cada país, que desarrollan mejoras continuas en el servicio y la experiencia de pymes, comercios y consumidores”.

Gran lugar para trabajar

El sitio “Great Place to Work” (GPTW) reconoció por tercer año consecutivo a ML como una de las mejores empresas para trabajar en Latinoamérica. Cada año, GPTW evalúa el ambiente de trabajo en las diferentes compañías mundiales teniendo en cuenta las experiencias de confianza en sus líderes, las condiciones laborales, salarios entre otros atributos pero ¿qué tan cierto es? 

ML cuenta con diversas áreas desde Marketing, Customer Experience, Logística, Prevención de Fraudes, etc; pero las condiciones laborales parecen no ser las mismas. Sebastián Manzoni, joven despedido a principios de mayo, publicó una serie de tuits en los que relataba las duras condiciones de trabajo en la empresa, con metas que los obligaban a correr casi las diez horas que dura un turno. Como todos son contratados como personal temporario, la expectativa es rendir lo suficiente como para quedar como empleado permanente. La serie de tuits produjo cierto revuelo en la red. 

En diálogo con ANCCOM, Manzoni contó cómo es trabajar en la firma de Galperín: “En muchos sitios y medios se dijo que critiqué todo de la empresa, pero no es así. Por supuesto que tiene algunos elementos positivos como el buen sueldo que no baja de la inflación, las comidas son económicas y existe un sistema de traslado de combis que te lleva, pero no todos son beneficios”. Sebastián trabajó en el Área de Depósito desde febrero de 2021 y fue contratado junto con doce jóvenes más. Sus días laborales comenzaban los viernes por la noche y terminaban los lunes por la mañana. Respecto a esta situación, el joven expone que existen ciertas irregularidades que violan las leyes laborales: “Por ejemplo, se exceden en la cantidad de horas nocturnas y la cantidad de breaks [cortes] es menor ya que solo teníamos entre veinte minutos y media hora de descanso, lo cual era muy poco por la demanda física que implica estar en depósito”.

 Otra de las cuestiones que denuncia es el fraude laboral que existe con la eventualidad: “Es entendible que se contrate personal eventualmente en fechas como el Hot Sale pero si el setenta por ciento es eventual y realiza trabajos habitualmente, la situación es otra. A la empresa le conviene no efectivizarte porque se ahorran vacaciones, gastos, indemnizaciones, etc”.

El entrevistado cuenta que su tarea laboral se desarrollaba en el depósito que tiene cuatro niveles. Allí debía recolectar entre noventa y cien productos por hora para quedar entre los primeros puestos de productividad al final de la jornada: “Lo que sucedía es que como la mayoría es eventual, la mayor aspiración y preocupación es que te efectivicen. ¿Cuál es la lógica? ‘Doy todo, trato de quedar primero a toda costa, para que me contraten’. Entonces ves como todos los chicos corren como si fuera una maratón, compitiendo entre ellos. De hecho, a mí me echaron con una tanda de chicos que habían quedado en el primer puesto muchas veces.”

Tal como parece, uno de los motores de este sistema de productividad es el incentivo y las aspiraciones de los trabajadores eventuales. Esta situación habilita la pregunta de si ML aplica la tecnología para aumentar la productividad o si en todo caso, lo consigue por medio de la explotación y abusos laborales. En la actualidad, son muchos los jóvenes que consideran a la empresa como uno de los mejores espacios de trabajo pero ¿es así? En este sentido, Manzoni recomienda a quienes decidan trabajar en la empresa ahorrar momentáneamente y no firmar ninguna renuncia: “Van a ganar momentáneamente un buen sueldo pero esto no dura para siempre ya que nunca te terminan de contratar y vos por ahí exigiste tu cuerpo en estas condiciones deplorables. Otra irregularidad que tiene la empresa es que te seducen para que firmes la renuncia a cambio de brindarte trabajo en el futuro: Al final trabajas nueve meses de manera eventual y te vas con las manos vacías”. 

Desde ML no hubo respuesta a las consultas de ANCCOM sobre este tema. 

Juan Manuel Ottaviano, abogado laboralista y asesor de APP (Asociación de Personal de Plataformas), expresó que frente a estas promesas, “deberíamos preguntarnos en qué medida implican una mayor autonomía y qué beneficios tiene el trabajador: por ejemplo, en el Área de Depósito prevalece la jornada por horas que no es un sistema de flexibilidad para los trabajadores sino que es un sistema de flexibilidad horaria para que la empresa pueda organizar su productividad, lo cual implica menor libertad para el trabajador pero sí para la empresa”.

¿Por qué el trabajo en ML resulta atractivo para los jóvenes? Según Ottaviano, estás compañía trabajan fundamentalmente en el marketing del reclutamiento de trabajadores y se esfuerza por presentarla como una buena oportunidad laboral: “La realidad acá es que no en todos los casos pagan muy mal y no en todos pagan muy bien, porque hay labores que requieren más calificación. Por eso hay que tratar de hacer indagaciones más precisas sobre cuáles son los perfiles que estas empresas buscan ya que la tecnología agranda esta brecha”.

León Dario Piasek, también abogado laboralista, coincide con esta postura agregando que “este marketing especializado intenta dar la sensación de que uno es un emprendedor libre y no un empleado: Seducen con la idea de la libertad horaria, el trabajar desde la ‘comodidad’ de tu casa, el no tener que viajar, etc.”

Al parecer,el problema central no solo está en las contrataciones eventuales a trabajadores autónomos en vez de asalariados sino que es mucho más serio. Esto tiene que ver con especificar la clasificación de las actividades económicas que desarrollan empresas como ML, Uber, Rappi: “MercadoLibre se dedica al comercio online pero también presta servicios financieros a través de una billetera electrónica. Por tanto debería haber regulaciones en esas actividades, teniendo en cuenta también los distintos puestos de trabajos”, explica Piasek y agrega: “Hay una falta de fiscalización del Estado que debería ser más rígida sobre todo cuando se trata de derechos. Una falencia es lo que se conoce como policía de trabajo de fiscalización y de sanciones: casi no vas a encontrar empresas sancionadas por no respetar las políticas fiscales o laborales. Hoy, el 40% de los argentinos trabaja de manera informal y casi siempre el Estado juega a favor de los empleadores”.

Las plataformas son una nueva forma de hacer negocios que han acelerado su crecimiento gracias a la pandemia. El desarrollo tecnológico que promueve este tipo de compañías es clave para su crecimiento económico, pero sería necesario analizar cuánto queda si se someten a las regulaciones impositivas y laborales de acuerdo a la legislación vigente y con un Estado presente.

El bitcoin se convirtió en el nuevo depredador del planeta

El bitcoin se convirtió en el nuevo depredador del planeta

Un estudio realizado por la Universidad de Cambridge en 2020 determinó que la energía anual que se necesita para gestionar la principal criptomoneda, el bitcoin, es más que la que consumen cerca de 50 millones de argentinos para moverse, producir, calentarse, iluminar sus calles y todo lo demás. Pero ¿a qué se debe este elevado consumo?

Una de las características fundamentales de esta criptomoneda, como ya explicó ANCCOM, es la descentralización del control, emisión y regulación por parte del Estado y otros actores económicos. Sin embargo, esta no es la única condición: estas transacciones necesitan de una base de datos distribuida, segura e inviolable generada por la tecnología blockchain o cadenas de bloques, que plantean problemas matemáticos cuya resolución requiere crecientes cantidades de energía.

Pero, ¿de qué se tratan estas cadenas? Las transacciones de criptomonedas se integran en bloques virtuales que generan una marca temporal y un código propio vinculado al bloque anterior pero también al siguiente, provocando una cadena: si un eslabón es modificado, se pierde la coherencia matemática de la cadena y se hace evidente que algo no está bien. Como explica Andres Rabosto, sociólogo y becario doctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina, este proceso lo realiza el software de la criptomoneda automáticamente, el cual requiere ser verificado: “Esta validación la realizan las computadoras conectadas a la red de la criptomoneda y consiste en encontrar la respuesta a un problema criptográfico contenido en el propio bloque; aquella computadora que llegue primero a la solución cobra un premio en nuevas criptomonedas”. Esto genera que a mayor cantidad de máquinas minando (buscando la solución al problema criptográfico), menor es la probabilidad de resolver un bloque y por lo tanto, de obtener recompensas.

A medida que el precio del bitcoin sube, más tentadora resulta la competencia y por lo tanto el incentivo para utilizar máquinas más potentes y que consumen más energía eléctrica. Si no se hace de esa manera, la resolución lleva más tiempo y el premio es solo para el ganador. Todo el resto de la energía se pierde irreparablemente. Como detalla Rabosto, “la necesidad de más potencia implicó mayor inversión en infraestructura produciendo una industria concentrada e integrada verticalmente por productores de hardware”.

El bitcoin consume una cantidad de energía comparable a la que utilizan países como Holanda o Bélgica.

Actualmente, las principales estimaciones consideran que Bitcoin tiene consumos comparables a los de países como Holanda, Bélgica, incluso Argentina. Uno de los principales objetivos a largo plazo es que para 2025 todas las cadenas de bloques del mundo utilicen energía 100% renovable por el gran impacto ambiental que genera las huellas de carbono y desechos electrónicos. En la encuesta a grandes mineros realizada por la Universidad de Cambridge en 2020, los entrevistados indicaron que solo el 39% de su consumo total de energía provenía de energías renovables. Si bien el objetivo de reducir las emisiones entusiasma a los defensores de bitcoin, cabe preguntarse si no sería mejor dedicar esa energía a fines con impacto en la economía real y el bienestar de la población.

Para Rabosto hay otra cuestión clave: “La minería de criptomonedas se realiza con hardware especializado que se vuelve obsoleto muy rápidamente, aproximadamente cada un año y medio. Cuando termina su vida útil, ese hardware se transforma en una gigantesca masa de cables, fierros y placas electrónicas que van al basural”. Por esto la utilización aún si se utilizara energía renovable, bitcoin seguiría teniendo un impacto ambiental significativo.

Por otro lado, en los últimos meses empezó a difundirse por redes sociales y por las calles de Buenos Aires publicidades de criptomonedas. Respecto a este tema el investigador afirma que podría deberse al aumento de su valor: “Según creo, se debe a movimientos especulativos de corto plazo ya que, de hecho, muchos analistas esperan un movimiento correctivo a la brevedad”.

El uso y el funcionamiento de las criptomonedas no solo encendió el debate económico y tecnológico sino también trajo como problemática el impacto ambiental. Según Digiconomist, si estas monedas virtuales fueran países ocuparía el puesto número 41 en el ránking de naciones que más electricidad consumen de manera anual. En términos ecológicos, hasta el momento solo entidades reales podrían ocasionar CO2; esto nos lleva a preguntarnos si todo consumo energético implica necesariamente un impacto ambiental.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que bitcoin no puede contaminar por sí mismos, sí lo hace el consumo de energía y recursos que conlleva su gestión. No obstante, la problemática de esta tecnología no está únicamente en el consumo de energía y el aumento de su valor en el mercado financiero, sino también en lo que implica dañar el medio ambiente para no producir algo concreto.

¿Un argentino en la luna?

¿Un argentino en la luna?

 «Lo primero que hice cuando tuve una cámara fue apuntar al espacio”, cuenta Andrés Jones, realizador visual de efectos especiales, publicista, astrónomo aficionado desde pequeño y… ¿primer argentino en ir a la luna? Es pronto para decirlo, pero asegura que quiere ser uno de los ocho turistas que viaje al satélite terrestre en 2023.

Con sus primeros trabajos audiovisuales Jones compró su primera cámara reflex para capturar el cielo nocturno. Esta pasión no es mera casualidad porque estaba predestinada. Todo comenzó cuando Andres tenía unos cinco años y jugaba con un compañero, a quien su padre le regalaba juguetes de la NASA. A partir de ese momento, empezó a interesarse por el cielo. El punto de quiebre fue cuando llevó su libro favorito de astronomía al colegio y su maestra de primaria le dio una palmadita en la espalda de aprobación. Ese empuje, pero también curiosidad, sembró una semilla que creció hasta hoy, convirtiéndolo en un profesional de la fotografía.

Su pasión por el cielo se desarrolló a la par de producciones fotográficas y hasta el momento su único vínculo con el espacio era la recreación visual del espacio para documentales. Luego de unos años y ya con su Reflex en la mano, decidió dedicarse a la astrofotografía sin saber que su vida cambiaría tras el anuncio de Yusaku Maezawa, fundador CEO del negocio de moda más grande de Japón, ZozoTown: “Les invito a acompañarme en esta misión. Ocho de ustedes, procedentes de todo el mundo, viajarán conmigo a la luna”, dice el multimillonario en el video de su página oficial. El japonés habría comprado en 2018 todos los boletos para llevar a cabo el viaje privado de SpaceX que pertenece a la compañía de Elon Musk, la cual transportará a diez o doce personas.

 

Para muchos, esta propuesta fue descabellada. Andrés, por el contrario, no tardó ni tres segundos para inscribirse: «Estaba con mi pareja y le dije ‘Me inscribí para ir a la luna’. Ella incluso se anotó», comienza narrando. «Después le mandé un mensaje a mi hija contándole que me había anotado y me respondió ‘No es normal que a uno le llegue un mensaje así’”. Aun así, Andres cuenta con el apoyo de su familia para emprender esta travesía.

La última vez que los humanos alunizaron fue en diciembre de 1972, durante la misión Apolo 17, tripulada por los astronautas de la NASA Eugene Cernan, Harrison Schmitt y Ronald Evans. Durante la conferencia de prensa de lanzamiento de este proyecto, Musk dijo: “La intención es ayudar a avanzar en la tecnología de cohetes hasta convertirnos en una especie de múltiples planetas y una verdadera civilización espacial».

 

En este caso, la idea principal del japonés era que participaran pintores tradicionales. Sin embargo, cuenta en un video que durante años reflexionó sobre el concepto de «artista” llegando a la conclusión de que es “cualquier persona que haga algo creativo”. Para el astrofotógrafo esta particularidad se debe a que el empresario pone el ojo en la creatividad y no tanto en el arte clásico: “El artífice siempre transmite cosas pero en este caso, él no habla de ramas como podría ser un pintor sino de personas creativas. En este caso, yo soy creador audiovisual pero hoy me dedico de lleno a la fotografía nocturna. Esto es lo que me apasiona y por eso busco la creatividad en mis trabajos”.

 

Respecto al proceso de selección en curso, Jones detalla como fundamental el uso de computadoras actualizadas con un sistema operativo sólido para realizar diversas tareas en la página DearMoon. “Una de las primeras fue redactar nuestro proyecto de vida justificando como este viaje lo potenciaría. También tenías que enviar tres fotos personales, información sobre redes sociales y número de seguidores». En este sentido, es interesante pensar por que sería necesaria esta información para poder participar. Asimismo, detalló Spacex, la intención es generar turismo espacial con un aeropuerto en la luna. Hasta el momento, no está esa estructura así que este sería un vuelo orbital similar a lo que hizo la famosa misión del Apolo 11.

Como explicó el empresario nipón, quienes queden seleccionados, pasarán por tres instancias más que incluyen tareas, videoconferencias y chequeos médicos; a su vez Maezawa se hará cargo de todos los gastos, tanto del entrenamiento como del viaje. En cuanto a la confirmación, se estima que para junio estén los seleccionados para empezar el entrenamiento en EE.UU. “Si yo no quedo, me gustaría que algún argentino o latinoamericano quede seleccionado: esta es una gran experiencia para vivirla de cerca”, cierra el entrevistado.

 

Viajar a la luna es uno de los proyectos con más interés en los últimos años. Esto quiere decir que SpaceX no es la única compañía que trabaja en brindar unas vacaciones fuera de la Tierra, ya que otras empresas privadas han estado construyendo diversas formas de llevar turistas al espacio. Una de esas empresas es Orion Span que pertenece a Amazon y permitiría a partir del 2022 visitar la Estación Espacial Aurora. La pregunta central es qué tan caros serán los viajes y quienes estarían en condiciones de pagarlo. Las reservas ya están abiertas por 80.000 dólares, que formarán parte del total del precio, que asciende hasta los 9,5 millones de dólares por cabeza. La compañía asegura que seiscientas personas ya compraron sus pasajes, incluidas celebridades como Leonardo DiCaprio.

Todavía es pronto para saber con exactitud cuál de estas compañías encabezará este viaje. ¿Estamos más cerca de poder pasar las vacaciones fuera del planeta? En el mejor de los casos, algunos podrán hacerlo. ¿Quién ganará la carrera espacial, en versión privada, de llevar a los primeros turistas? ¿Será Andres Jones uno de los primeros junto a SpaceX y Yusaku Maezawa?

Las enfermeras de la guerra

Las enfermeras de la guerra

En conmemoración por el 39° aniversario del suceso de Malvinas, se proyecta Nosotras también estuvimos, un documental dirigido por Federico Strifezzo que narra las historias de tres de las catorce enfermeras que atendieron heridos durante la guerra en un hospital móvil en Comodoro Rivadavia.

La llegada de la pandemia y las consecuentes medidas sanitarias obligaron a posponer la presentación del documental para el 2021. Tras un año de incertidumbre y con una industria cinematográfica inquietante, este 1º de abril a las 20 se estrenó el film en la plataforma Cine.ar y este viernes, a las 22, se podrá ver en la pantalla de Canal Encuentro.

Nosotras también estuvimos relata los recuerdos dolorosos y las vivencias que marcaron para siempre la vida a un grupo de enfermeras de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) en la Guerra de Malvinas. Después de 37 años, Alicia Reynoso, Stella Maris Morales y Ana Masitto vuelven a la isla para contar sus cruda experiencia pero, además, para hacerse escuchar. Tras ser invisibilizadas por casi cuatro décadas y en un escenario machista y de discriminación, este film muestra la lucha de estas veteranas que aún hoy esperan ser reconocidas.

«Este es un documental que no te lo cuenta nadie –expresa Reynoso-: lo estamos contando quienes lo vivimos, porque a quienes debían contarlo se les olvidó por casi 30 años. Una vez que empezamos a decirlo, intentaron una y mil maneras de callarnos, de difamarnos, de agraviarnos».

Estas mujeres siguen luchando por mostrar el rol fundamental que tuvieron y ya no se callan más: “Tanto tiempo de silencio y hoy estamos aquí, vivas, sin miedo, libres y con la verdad en la mano. Orgullo en el corazón y la justicia que nos acompaña. Las enfermeras veteranas de guerra de Malvinas de la Fuerza Aérea estuvimos y estamos diciendo presentes una vez más. Quien quiera oír que oiga», señala Reynoso.

El documental busca darles voz a las enfermeras que atendieron a soldados y estuvieron en trincheras pero también visibilizar el contexto de injusticia y discriminación que sufrieron. Strifezzo, en diálogo con Télam, explicó que una de las causas de ese silencio es por tratarse de mujeres que actuaron en un escenario militar: “Ellas, como enfermeras, vieron en primera persona a los muertos, a los heridos, a los chicos con los pies congelados por no tener un buen calzado, a los que estaban mal alimentados. No solamente no las quisieron escuchar sino que también las quisieron silenciar. Ellas vienen de esa sociedad en la que la mujer tenía un rol mucho más rígido y definido, y mucho más hacia el interior de una fuerza militar. Las revistas de entonces solo mostraban a mujeres que esperaban el regreso de los soldados o a madres tristes porque sus hijos estaban en una guerra”.

A lo largo del rodaje, el director detalla que hubo momentos de emoción y catarsis como cuando las protagonistas pasaron por el hospital de Comodoro Rivadavia. “Fue un momento totalmente mágico, porque ellas caminan directamente hacia ahí, creo yo que dirigidas por el pasado. Estaban desorientadas, pero seguían caminando por ese lado. Hubo otros en los que llorábamos detrás de cámara, el camarógrafo, el sonidista y yo. Así fue el clima de la filmación”. Como señala Strifezzo, el planteo del final no es solo reconocer a estas mujeres por su lucha sino también para intentar sanarlas, como ellas hicieron con otros heridos durante la guerra.

 

El gobierno impulsa la industria del cannabis medicinal

El gobierno impulsa la industria del cannabis medicinal

Argentina legalizó el autocultivo controlado de cannabis medicinal en noviembre de 2020 permitiendo la venta de aceites, cremas y otros derivados en farmacias autorizadas. La ley incluye la autorización del cultivo personal y en red para los usuarios, investigadores y pacientes que se registren en el Programa Nacional de Cannabis. El pasado 1° de marzo, durante su mensaje ante la Asamblea Legislativa, el presidente Alberto Fernández fue más allá y anunció que impulsará un proyecto de ley para desarrollar la industria local vinculada al uso del cannabis terapéutico y con fines de industrialización.

A fin del año pasado, las diputadas del Frente de Todos, Mara Brawer y Carolina Gaillard, presentaron un proyecto de ley para desarrollar la industria del cáñamo en productos alimenticios, textiles y cosméticos. La novedad se encuentra en la regulación de esta variedad de planta que contiene bajos contenidos de THC del cual se pueden fabricar diversos derivados como fibras, papel, materiales para la construcción, bebidas e infusiones y hasta biocombustible. “De la misma manera que la sociedad entendió que el uso del cannabis medicinal no es el mismo que el recreativo, ahora todos tenemos que entender que el cáñamo es una oportunidad para el desarrollo sustentable, estamos hablando de industria. Si saldamos ese debate, solo será ganancia, generamos trabajo e industrias novedosas que se sumarán a la economía”, sostiene Brawer.

El proyecto pretende habilitar todas las acciones: sembrar, cultivar, cosechar, guardar, acopiar, almacenar, transportar, realizar extracciones, industrializar, comercializar, importar y exportar semillas con todas las partes de la planta de cáñamo, cáñamo industrial y hortícola, así como de sus extractos y producidos. En referencia a esto, la diputada agrega: “Toda la planta tiene distintas utilidades, desde los granos que se usan para disminuir el colesterol y sacar harinas que sirven como suplementos dietarios para personas mayores, a la cáscara de la semilla que es un abrasivo industrial y pasta ecológica de dientes, hasta el tallo y la raíz. Del tallo se puede hacer fibra textil, fibra larga para industrias y fibra de vidrio con el aserrín; también se pueden hacer proyectos de ladrillos para la construcción de vivienda y telas”.

Otro de los argumentos para apoyar esta regulación es su bajo impacto ambiental. La producción de cáñamo puede servir de sustituto de materiales contaminantes como plásticos y fibra de vidrio, y beneficia a la tierra ya que no requiere de agroquímicos para erradicar malezas o plagas.

Tomando esta iniciativa como referencia, el Ejecutivo decidió unificar este proyecto con el medicinal para la producción local en diversas áreas. Además, en febrero de 2021 se acordó entre el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la compañía Pampa Hemp equipos de investigación para la producción local. El foco está puesto en el desarrollo productivo de técnicas de cultivo de cannabis con diferentes variedades genéticas, así como el diseño de protocolos de producción apoyados en acciones, medidas y procedimientos técnicos que permiten identificar y registrar cada producto desde su origen hasta el final de la cadena de comercialización. Esto se complementará con inteligencia artificial aplicada, automatización, sensorización y monitoreo de cultivos. En una segunda etapa, el objetivo será el desarrollo de genéticas propias para fines medicinales y otros usos junto con la creación de un banco de semillas que permita contar con germoplasma adaptado a las condiciones geográficas y climáticas del país.

En este marco, entre 2021 y 2022 se invertirán 350 millones de pesos para potenciar la investigación y el desarrollo de la elaboración local trabajando en conjunto con la Cámara Industrial de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (CILFA) y la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEME).

Pero, ¿cómo se estima el resultado de estas investigaciones en términos productivos y de ganancias? ¿Qué elementos se tienen en cuenta para investigar y aplicar políticas públicas respecto a este tema? El Ministerio de Desarrollo Productivo encargó un informe al economista Andrés López, director del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) y profesor titular de Desarrollo Económico en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, para conocer el potencial del mercado del cannabis en el país. En diálogo con ANCCOM, López explica que para avanzar con el informe se conversó con los sectores interesados en participar de la cadena de cannabis para atender sus especificidades y sus respectivos objetivos.

El estudio tiene la intención de encontrar las oportunidades de Argentina en el rubro de cannabis medicinal e industrial, identificando los obstáculos y los eslabones principales del sector. “En lo económico, a comparación de lo médico, hay poco estudiado y por ello recurrimos a experiencias y estudios de otros países como Estados Unidos y Canadá”, detalla el economista. En el informe se estimó que la Argentina podría generar un mercado interno de 450 millones de dólares agrupando en un primer grupo a medicamentos, aceites y nutracéuticos para enfermedades crónicas; y en el segundo, cáñamo que se podría utilizar para el sector textil y fabricación de alimentos o productos veterinarios con CBD.

Si bien está permitido el autocultivo a nivel artesanal, el especialista insiste en la necesidad de un marco regulatorio que acompañe e impulse las inversiones a nivel comercial. Respecto a esto afirma que faltan muchas regulaciones: “Por un lado, un proyecto de ley medicinal que amplíe la participación de más sectores y más utilizaciones, y por el otro, una ley que habilite la plantación de cannabis con bajo contenido psicoactivo para regular el procesamiento y manipulación posterior al cultivo, como también la comercialización y el traslado”.

Además de la posibilidad de cultivar en distintas modalidades y diversos lugares del país, se busca reemplazar el cultivo de tabaco para los agricultores pequeños. López explica que “debería desaparecer el consumo del tabaco para darle oportunidad a los derivados del cannabis atendiendo los servicios que la planta requiere”. En la industria y en todo el mundo se sabe que el consumo de marihuana sigue siendo cada vez más alto, por lo cual resulta fundamental regular y controlar no solo para tener noción de lo que se consume sino para evitar el mercado negro y la manipulación, concluye.

El presidente de la Cámara Argentina del Cannabis y director de Pampa Hemp, Pablo Fazio, prevé una inversión de 600 mil dólares para poner en marcha dos invernaderos de 270 metros cuadrados cada uno, y pidió autorización al Ministerio de Salud para importar semillas. Más allá de la investigación y el acceso al cannabis con fines terapéuticos, la finalidad estará centrada en regular e impulsar la cadena productiva de un sector con gran potencial estratégico: «La Argentina tiene que aprovechar su condición de país agroexportador, su sector académico y de investigación fuerte y su industria farmacéutica», señaló Fazio al diario La Nación.

En una situación de crisis económica, el Gobierno nacional busca ampliar la matriz productiva, generando empleo y la entrada de divisas. Pero para ello antes deberá impulsar las leyes y marcos regulatorios para que estos desarrollos puedan llevarse a cabo en todo el país.