El dilema de los pilotos fumigadores

El dilema de los pilotos fumigadores

A fines del año pasado la Federación Argentina de Cámaras Agroaéreas (FeArCA) realizó una publicación en sus redes en la que recomendaba a la comunidad aeroagricola “minimizar el uso habitual del principio activo glifosato, limitándose a los casos que sean específicamente indispensables y prescriptos por profesionales agronómicos”. El vicepresidente de la Federación, Diego Martínez, sostuvo que el comunicado estuvo relacionado con una serie de prohibiciones de la fumigación aérea en distintos departamentos de las provincias con actividad agropecuaria, sobre todo Buenos Aires y Santa Fe.

Según el dirigente desde FeArCA se busca ir contra la demonización de los pilotos fumigadores y entiende que “es una actividad regulada desde lo aeronáutico y lo agronómico. Operamos y aplicamos según lo que reglamenta el SENASA. Entonces, el problema tendría que ver con los permisos que dan nuestras agencias”. Sin embargo, desde la Federación no se cuestionan si las autorizaciones del SENASA están basadas en información correcta y actualizada, aún sabiendo que existen múltiples investigaciones que prueban la toxicidad y cancerigenocidad del glifosato. Por ejemplo, en la Antología Toxicológica del Glifosato publicada en 2018 se reúne una vasta producción científica que refuta los argumentos en los que se basan las habilitaciones.

En entrevista con ANCCOM el piloto Marcelo De Dio, quien efectúa fumigaciones en la provincia de Santa Fé, sostiene que “lo más riesgoso de la actividad es el vuelo pero después el transporte y la aplicación de los químicos es segura, pero por supuesto que tiene que estar regulada para dejar tranquilos a todos”. Aunque la fumigación se encuentra normativizada tanto desde el agro como desde la aviación las pautas impuestas por los entes reguladores no siempre se cumplen. “Entramos continuamente en contacto con los agroquímicos. Lo que más intentamos es no aspirarlos. Se trata siempre de tener ventilada la sala para que se vayan los vapores. Rara vez usamos máscaras o guantes”, cuenta De Dio y le resta importancia a las implicaciones que esto puede tener en la salud de los pilotos.

Antonio trabajó largos años en el negocio de la aerofumigación y ya prestó testimonio en diversas investigaciones, a partir de allí sufrió perjuicios que hoy le hacen querer mantenerse en el anonimato. Aún así entiende que es un tema de vital importancia que debe ponerse en agenda. “En definitiva para ser piloto aeroaplicador necesitas horas de vuelo, no significa que estés en conocimiento del daño que puede provocar su actividad. Falta información para que los pilotos puedan estar al tanto del peligro al que se enfrentan”, sostiene el ex piloto en diálogo con ANCCOM y explica el por qué de la férrea defensa a esta actividad. Antonio entiende que “las aplicaciones muchas veces escapan al control del Estado y eso causa mucho daño. Habría que establecer otro tipo de controles más exhaustivos y el Estado no sé si cuenta con la infraestructura para lograrlo porque la actividad abarca mucho territorio”.

Así se pone de manifiesto la complejidad de la problemática que involucra a diversos actores, desde los dueños de los campos, los trabajadores y también consumidores, comunidades de escuelas rurales y ciudadanos en general que conviven en las inmediaciones de los campos fumigados, sin mencionar el daño que los agroquímicos producen en el medioambiente. Una modificación de la manera en que se maneja la fumigación de las plantaciones debería contemplar que muchas personas viven actualmente del trabajo de la fumigación, como es el caso de estos aviadores. “Muchas veces importa más, cómo vivimos, qué le damos de comer a nuestras familias, si no no haríamos esto”, resume Antonio.

Un primer paso en este terreno se ha dado desde el Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires donde se ha creado el Observatorio Técnico de Agroquímicos para abordar el uso de principios activos en el agro desde una perspectiva científico-técnica. “La correcta aplicación de agroquímicos, el análisis de cómo son su efectos y cuál es la regulación que debe adecuada es un problema que tiene que ser abordado por la política pública. No es algo que podamos dejar de lado”, declaró a Telam el ministro, Javier Rodríguez. El funcionario sostuvo que “hoy la información y las investigaciones están dispersas y los organismos científicos tecnológicos no encuentran un lugar en donde volcar los resultados para ponerlos en diálogo y en debate. Esa será la función del Observatorio”. De esta forma podrán realizarse propuestas para legislar conscientemente la aplicación de agroquímicos.

El activismo que busca promover buenas prácticas agrícolas para un desarrollo sustentable y el bienestar de los pueblos actualmente fumigados sigue dando duras batallas contra los magnates del agronegocio que no reconocen el problema de los agrotóxicos. Aún así la sola prohibición de la fumigación aérea, no ligada a una regulación consciente de los principios activos por parte de las autoridades correspondientes, sólo lleva al malestar y preocupación de quienes trabajan diariamente en estos rubros.

“La salud mental de este país también se la debemos a las abuelas”

“La salud mental de este país también se la debemos a las abuelas”

“La música me salvó la vida y creo que esto le puede pasar a todo el mundo», dijo Malena D´Alessio.

El Centro Cultural de la Cooperación se cubrió de recuerdos y reflexiones en el ciclo Memoria Identidad, organizado por Abuelas de Plaza de Mayo, ANCCOM y  La Cultural, un espacio de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. Allí, dos mujeres, Malena D´Alessio, cantante de hip hop -ex integrante del grupo Actitud María Marta- y Lorena Battistiol, quien busca un hermano o hermana nacido en cautiverio durante la última dictadura, compartieron el último jueves  retazos de sus historias como hijas de desaparecidos y su relación con la música. El cierre musical estuvo a cargo de las voces de D’Alessio y Mariana Debenedetti con una fusión de ritmos latinoamericanos y rap. 

“Me acerqué a la casa de las Abuelas en el año 2000 porque tenía ganas de hacerme cargo de esta historia”, comenzó diciendo Battistiol y relató el recorrido que la llevó a participar de la lucha por los derechos humanos y a continuar la búsqueda de su hermane nacide en cautiverio. Ambas entrevistadas coincidieron sobre la forma en que fue tratada la desaparición de sus padres y hermane en el caso de Lorena, y de su padre en el de Malena D’Alessio: “Fue un tema muy difícil de abordar, de muchos silencios”, explicó la artista. Sin embargo, en ambas historias fueron las abuelas quienes pudieron recordar, hablar y seguir nombrando a los desaparecidos. “Mi familia intelectualizaba mucho todo pero mi abuela hablaba y podía llorar. Lo que a uno le debería suceder ante semejante tragedia. A mi abuela le debo mi salud mental”, sostuvo la Malena. Battistiol conmovió a todos y todas las presentes al narrar la relación con su abuela, quien la crió luego de la desaparición de sus padres. “Mi abuelo tenía muchos miedos. Mi abuela salía a la calle, hacía reclamos, iba a las comisarías, a los tribunales, a los hospitales. Tenía el coraje de hacerlo”, contó entre lágrimas que contagiaron al público. Casi como una reflexión conjunta de quienes estaban en la sala quedó claro que las experiencias personales de estas mujeres eran representativas de lo que a toda la sociedad argentina le sucedió gracias a las Madres y  Abuelas de Plaza de Mayo: ellas echaron luz a un tema que estaba vedado. “Le debo mi salud mental a mi abuela, y creo que la salud mental de este país también se la debemos a ellas”, concluyó la cantante. 

“En mi caso se cruzan las dos identidades que nos convocan, me dedico a la música pero también soy hija de desaparecido”, esclareció D’Alessio sobre la relación que la música tuvo con la conformación de su identidad. La identidad es un tema que se ha replanteado mucho a lo largo de su vida. Por un lado, quiso reconocerse como hija de desaparecido y pisar fuerte para reivindicar la lucha de su padre en una sociedad que aún reproducía muchos discursos negacionistas. Su comienzo en la música se dio en paralelo a este momento de la percepción de su identidad. Pero luego advirtió que quien era no pasaba únicamente por allí y recorrió otros caminos para desetiquetarse, para acercarse a otros rincones que la hacen ser quien es hoy. D’Alessio entendió que “no soy sólo hija de desaparecido, soy un montón de otras cosas. En esa lucha de poder construir la identidad de uno es cuando transcurre la vida”. Para Lorena su acercamiento a la música fue y es muy distinto. “No tengo cultura musical, lo mío es el reggaeton, bailar. Me gusta la música pedorra”, confesó. A partir de allí el intercambio giró en torno a la pregunta de por qué desvalorizar así a una música que habla de la vida cotidiana de los pueblos latinoamericanos 

“Siempre me interesó ser partícipe de esas culturas donde el baile y la música forman parte de la vida constantemente”, reflexionó D’Alessio. Para ella, la mirada eurocéntrica que caracteriza a la Argentina siempre mira con cierto desprecio a la cumbia, al reggaeton y a otros ritmos que tienen sus raíces en las culturas afros. “No creo que sea música pedorra. La cuestión de los derechos humanos también implica cuestionarnos qué es la música culta, representada en nuestro país por un teatro llamado Colón” puntualizó, haciendo hincapié en el nivel de eurocentrismo y racismo hegemónico en la sociedad. La infancia de D’Alessio estuvo fuertemente marcada por la música: primero rock nacional, después conoció “la música negra”, hasta que ese recorrido la llevó al hip hop que le cambió la vida: “Me generó una sensación como el enamoramiento”. Ahí encontró una forma de hacer catarsis real que le reveló que no sólo podía escuchar música, sino también crearla. “La música me salvó la vida y creo que esto le puede pasar a todo el mundo, no sólo a mí. Sobre todo la música pedorra”, dijo haciendo reír al público y sobre todo a Battistiol. Las formas en que las identidades se construyen se hacen presentes en todos lados, tanto en la búsqueda de reconstruir su pasado o de conocer su historia, como al rescatar ritmos latinoamericanos que son parte de la cultura del continente y del país. 

“Los problemas no sólo hay que hablarlos, también hay que bailarlos”, le sugirió D´Alessio a Battistiol.

El momento más emotivo se dio cuando Battistiol habló de sus abuelos, de las vivencias cotidianas siendo criada junto a su hermana por ellos y con el gran peso de sus padres desaparecidos. “Había dos momentos que se repetían todos los años donde mis abuelos lloraban” empezó, con una sonrisa llena de lágrimas. El primero era cuando su abuelo les enseñaba las tablas y a ellas les costaba aprenderlas. Su abuelo lloraba de impotencia. El segundo, era todos los 24 de diciembre a la noche. “Ellos se acostaban a dormir temprano y a las doce íbamos con mi hermana a despertarlos para brindar”, contó entre lágrimas, dando a entender lo mucho que los movilizaba esa fecha. Y agregó: “Creo que era la Navidad, el nacimiento, la esperanza. Siempre preferí que llegara año nuevo para no pasar por eso todos los años”. Ante su angustia, que se contagió a los presentes, D’Alessio apoyó la mano en su pierna y le sonrió. “Es bueno hablar de las tragedias y cuestionar dogmas instalados en la sociedad como la idea de que los adultos no lloran”,  señaló. Para ella en el país no hay muchos espacios para canalizar esas cuestiones que, a veces, encuentran salida en forma de llanto, de música e incluso de baile. “Los problemas no sólo hay que hablarlos sino que hay que bailarlos”, alentó a su compañera.

En toda la charla, Malena D’Alessio y Lorena Battistiol dejaron claro que de adolescentes no se hubieran llevado bien. Sus gustos, su forma de ser y de enfrentar la cuestión identitaria que las recorre eran muy diferentes en esa época. Sin embargo, la adultez las encuentra trabajando juntas, apoyándose desde una historia compartida y colectiva que las acerca. Actualmente Lorena Battistiol forma parte de Abuelas de Plaza de Mayo, milita la causa y busca a su hermane desaparecide. “Antes yo era sólo hija de desaparecidos, a partir de mi incorporación a abuelas comprendí muchas cosas. Me hice cargo de buscar a mi hermane”, aseguró. Por otro lado, Malena D’Alessio ve la lucha por los derechos humanos de una forma mucho más rupturista: “Sentí que la mejor manera de hacer una continuidad con la lucha de mi papá era hacerlo a mi manera; recrearlo desde un lugar diferente”. Y confesó que en la agrupación HIJOS se sentía parte pero también a parte, porque el reclamo era desde una continuación de la lucha de los padres desaparecidos y para ella “la mejor manera de ser efectivo para incidir en la realidad y modificarla es rompiendo con la anterior, deconstruyendo la identidad que te viene”.

Larreta puso primera

Larreta puso primera

En el búnker del oficialismo el festejo de la noche del domingo giró en torno a la victoria de Horacio Rodríguez Larreta, reelecto como jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El candidato por el partido Juntos por el Cambio obtuvo el 55,9 por ciento de los votos, mientras Matías Lammens, postulado para el Frente de Todos, quedó relegado al segundo puesto con el 35 por ciento. Lejos de estos números quedaron el economista Matías Tombolini de Consenso Federal con el 5,37 y Gabriel Solano del Frente de Izquierda con el 3,65 por ciento.

Luego de que a las 21 se dieran a conocer los primeros resultados, Diego Santilli, vicejefe de gobierno, fue quien subió en primer lugar al escenario de Costa Salguero de la mano de su esposa. Los presentes cantaban “olé, olé, olé, Diego, Diego” acompañando las primeras palabras del funcionario que agradeció a todos los vecinos de la Ciudad. «Hoy la ciudad de Buenos Aires demostró que valió la pena el trabajo, que hicimos posible lo que nadie creía posible», dijo Santilli y al grito de “ganamos Horacio, ganamos” le cedió la palabra a su compañero de fórmula.

Horacio Rodríguez Larreta fue recibido con aplausos y el canto de la multitud que entonaba “borombombón, para Horacio la reelección”. El jefe de Gobierno agradeció a sus compañeros de gestión, a quienes trabajaron en los comicios y a los votantes. “Hoy hicimos historia en la ciudad de Buenos Aires”, sostuvo Larreta en su discurso y agregó: “Me comprometo a hacer lo que hago siempre, trabajar cerca de ustedes. Ahora más juntos que nunca para seguir transformando Buenos Aires”. El triunfo en primera vuelta del candidato oficialista era esperado dado que la Ciudad ha sido desde siempre uno de los distritos electorales donde el macrismo congrega mayor cantidad de votos, junto con las provincias de Córdoba y Mendoza. Sin embargo, los resultados de estas elecciones fueron contundentes y profundizaron ampliamente los obtenidos en las PASO de cuando Larreta aventajó en 10 puntos al candidato por el Frente de Todos. Este domingo, el reelecto jefe de Gobierno se impuso en todas las comunas porteñas, excepto en las dos más pobres, la 4 (La Boca, Parque Patricios, Nueva Pompeya y Barracas) y la 8 (Villa Soldati, Villa Riachuelo, Villa Lugano).

En el búnker del Frente de Todos, ubicado en Chacarita, el ambiente era distinto. Desde la tarde el espacio comenzó a llenarse de personas ansiosas por recibir los resultados y se entonó la ya popular canción de “Macri ya fue, Vidal ya fue, si vos querés Larreta también”. «Las expectativas están en que lleguen los resultados rápido para poder festejar con tranquilidad», dijo en diálogo con ANCCOM el candidato a senador nacional por la ciudad, Mariano Recalde, dejando en claro las aspiraciones de la jornada. El triunfo presidencial de la fórmula Fernández-Fernández se llevó toda la atención en el recinto y en las calles aledañas, en los emotivos discursos de los dirigentes no se hizo mención de los resultados en favor de Horacio Rodríguez Larreta y tampoco se escucharon discursos de los candidatos a puestos en la ciudad. El acto se centró en las grandes figuras de este domingo comenzando por Axel Kicillof, nuevo gobernador de la provincia de Buenos Aires, y luego en Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, los electos presidente y vicepresidente, quienes fueron vitoreados por la alegría de las personas que inundaron las calles del barrio porteño. Matías Lammens ni siquiera tuvo lugar en ese escenario de ganadores.

Más allá de la amplia diferencia entre la primera y la segunda fuerza por la Jefatura de Gobierno, estas elecciones permitieron posicionar en el Congreso a funcionarios del Frente de Todos, entre ellos a Mariano Recalde, Pino Solanas y Victoria Donda. Además, la noticia que tuvo mayor resonancia en el terreno legislativo para este partido fue el ingreso de Ofelia Fernández a la Legislatura porteña. De esta manera, la militante se convierte con 19 años en la persona más jóven de la región en ocupar este cargo.

Como tercera fuerza se posicionó Matías Tombolini, representante de Consenso Federal quien denunció el reemplazo de boletas de la lista de Consenso Federal por boletas truchas en la capital. «Alguien se tomó el trabajo de imprimir y reemplazar boletas en colegios de manera deliberada y sistemática. Me comunique con el defensor del pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor, que me indicó que nos va a acompañar con esto. Esto se judicializa, porque es un delito penal”,  aclaró Tombolini.

En cuarto lugar, el candidato por el Frente de Izquierda, Gabriel Solano, quien en diálogo con ANCCOM expresó: “Cada voto al Frente de Izquierda es importante para darle legitimidad a la única fuerza política que planteó que la crisis no la paguen los trabajadores sino los capitalistas”. En cuanto a la elección legislativa, el Frente de Izquierda vivió la decepción de no conseguir los votos necesarios para que la candidata a diputada nacional, Myriam Bregman, consiguiera un escaño en el Congreso, aún luego de una fuerte campaña que proponía cortar boleta en su favor.

De esta manera queda conformado el nuevo panorama de la ciudad de Buenos Aires para los próximos años. La victoria de Larreta confirma la importancia del distrito porteño para la coalición de Juntos por el Cambio como uno de los pocos lugares del país donde gana de manera tan pronunciada. El aumento de los votos que se dio desde las PASO para el partido oficialista le permitió evitar el temido balotaje y un nuevo enfrentamiento con Matías Lammens, candidato que superó el techo histórico de oposición al macrismo en la ciudad. Rodríguez Larreta por su parte, asoma como el principal líder el PRO en condiciones de liderar el espacio de la nueva oposición nacional.

 

El feminismo en movimiento

El feminismo en movimiento

«La comisión organizadora tenía la responsabilidad de impulsar el debate por el cambio de nombre», dice D´Amico.

Los días 12, 13 y 14 de octubre se llevará a cabo el 34° Encuentro Nacional de Mujeres en la ciudad de La Plata. En esta oportunidad las semanas previas al evento se encontraron atravesadas por una particular discusión que tomó fuerza al finalizar la edición anterior, en 2018: ¿El Encuentro debe pronunciarse como nacional y de mujeres o plurinacional y de mujeres trans, travestis, lesbianas, bisexuales y no binaries? Este debate es uno de los tantos que se dan dentro de los feminismos, un movimiento social heterogéneo que está vivo y, por eso, en constante transformación y autoreflexión.

La campaña Somos Plurinacional surge a fines del año pasado, al calor de las plenarias para organizar el Encuentro. En su documento fundacional se definen como “mujeres, trans, travestis, lesbianas, originarias, negras, racializadas, afro, migrantes, campesinas, disidentes” y sostienen que “a la clandestinidad y la invisibilización no volvemos nunca más”. Su objetivo es que todas estas identidades se encuentren representadas no sólo en las actividades del Encuentro, sino también en la forma de nombrarlo. “Nosotras vimos en Trelew y Chaco que había una fuerte impronta de las hermanas indígenas, trans y travestis que estaban peleando hace varios años por el cambio de nombre”, cuenta Natalia D’Amico, representante del colectivo. Según Somos Plurinacional, es esencial dar este debate como una forma de repensar el sujeto de representación de los feminismos. “Para nosotras la comisión organizadora de La Plata tenía la responsabilidad de impulsar el debate sobre el cambio de nombre. Además de relevar las escuelas y armar los talleres tenemos este debate que nos precede», sostiene D’Amico. 

Desde la comisión organizadora Yanina Pelli, afirma que el cambio de nombre “lo tienen que definir todas las compañeras en el Encuentro. Si lo define la comisión organizadora por todo el resto de las encuentreras sería una posición antidemocrática”. Pelli sostiene que “a veces se utiliza el debate del cambio de nombre para cambiarle la característica al Encuentro, que es democrático y horizontal”. Además, la organización entiende que las originarias y disidencias participan en desde hace muchos años y que este es un espacio plural donde nadie hecha a nadie porque no hay dueñas. “Me parece que si bien existen todos estos debates, no hay que focalizar sólo en esto porque son minúsculos al lado de lo que es este acontecimiento. Es un espacio que nos ayuda a avanzar”, concluye Pelli.  

«No hay que focalizar sólo en esto porque es minúsculo al lado de lo que es este acontecimiento», opina Pelli.

La problemática tuvo resonancia en las redes, sobre todo al momento de publicación de los talleres, cuando la comisión organizativa del Encuentro Nacional de Mujeres subió un listado con 87 talleres y 10 charlas. La campaña Somos Plurinacional, por otro lado, denunció que había habido un recorte por parte de la comisión de contenidos y aportó su listado con 114. Al respecto, Yanina Pelli dice que “desde la comisión organizadora vamos a garantizar aulas para los talleres que propusimos y después toda compañera que quiera venir a armar talleres, lo pueden hacer porque el encuentro es de todas”. 

Tanto D’Amico como Pelli acuerdan en que es necesario que se produzcan estos debates y se abra la puerta para repensar al movimiento feminista. “Lo positivo de que esto salga a la luz -señala D´Amico- es que en algún punto evidencia que el feminismo no es homogéneo. Enriquece al movimiento, nos complejiza y vuelve más fuertes” e invita a todas las participantes a profundizar: “Tienen que ser más y más las compañeras que estén al tanto de lo que se debate en las comisiones y en el Encuentro”. Por otro lado, dice Pelli: “el Encuentro l permite que se exprese todo, aparecen todos los debates. Es inmenso, hace a una democracia grande a la que quizás no estamos acostumbradas. Como dice Quimey Ramos, docente y activista trans, en entrevista con Somos Plurinacional: “el Encuentro se dobla pero no se rompe”.

Catarsis amarilla

Catarsis amarilla

Banderas celestes y blancas cubrieron las barrancas de Belgrano al grito de #SiSePuede en la tarde del sábado 28 de septiembre. La marcha fue convocada por el presidente Mauricio Macri, quien encabezó el encuentro y dijo: “Hoy comienza la marcha del #SiSePuede. 30 días por todo el país, sabemos que un mejor país es posible y está mucho más cerca de lo que podemos ver”.

Apenas unas horas antes de las 17, se empezaron a replicar los hashtags #YoVoy y #SiSePuede en las redes sociales, al ritmo  en que los simpatizantes oficialistas iban llenando las inmediaciones del lugar emblemático: la estación elevada Belgrano C, una de las obras públicas que la gestión macrista inauguró en 2019. Para dar comienzo al acto hablaron la diputada Elisa Carrió y el candidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto. Los dirigentes resaltaron que esta es una lucha por las libertades individuales y por la justicia. Pichetto sostuvo que “si gana Alberto Fernández gana Cristina, y va a gobernar ella” y la multitud estalló al grito de “delincuentes”.

A las 17.55 el Presidente arribó a la estación de tren que había sido cerrada por el operativo puesto en marcha para esperar su llegada desde Olivos en el ramal Mitre. Minutos antes subió a Twitter su foto en la formación junto a su esposa, Juliana Awada, acompañada del hashtag #YoVoy. “Empieza octubre de 2019. A los más jóvenes les quiero decir que en unos años sus hijos les van a preguntar dónde estaban y les vamos a contestar; ‘Estábamos haciendo patria’ «, dijo el Presidente para cerrar su discurso.

“A diferencia de otros espacios políticos, lo nuestro es por voluntad propia, venimos por nuestros medios. No venimos por el choripan o la gaseosa ni la bebida alcohólica”, dijo el Superintendente de Servicios de Salud de la Nación,  Sebastián Neuspiller. Varios carteles de la marcha reproducían estas concepciones: “No estoy acá por una ideología”; “No estoy acá porque me trajeron”; “No estoy acá porque me dieron algo a cambio”; “Estoy acá por mis valores y porque quiero una Argentina que progrese” y todos firmaban “#SiSePuede”. Los asistentes reconocieron no haber sido afectados mayormente por la crisis económica que se vive en el país. “A mi particularmente no me afectó la situación económica, entiendo que hay mucha gente que no la pasa tan bien, pero creo que hay que seguir aguantando y poniendo fuerza porque yapasó lo peor”, dijo Andrea Salatino de 46 años.

Al ser preguntados sobre las razones por las que asistieron a la marcha distintas personas sostuvieron que se manifestaban  porque no querían volver al pasado y porque tenían fe en laconstrucción de un país mejor. “El pañuelo del #SiSePuede es una esperanza, no es porqueme guste tanto Macri sino porque siento un desprecio profundo por el autoritarismo, porquese lo que pasó en Venezuela. No es justo vivir en un país en el que vos quieras salir y no te lo permitan”, contó Delia de 68 años, oriunda de Devoto. Y sí, en este momento de pañuelos-que marcan ideologías, el suyo era de color amarillo.

No sólo había banderas argentinas sino también algunas banderas venezolanas, de personas que emigraron a la Argentina. Es el caso de Soraida, de 25 años, quien contó a ANCCOM: “Hoy estamos en un momento clave en el cual se puede perder, porque creo que ningún país está exento de vivir lo que vive hoy Venezuela. Justamente porque se ha tratado de instaurar un modelo político como el cubano, que refleja algo transcrito de la Unión Soviética”. También sostuvo que era su responsabilidad como venezolana acompañar y contar lo que puede suceder si un “socialismo del siglo XXI” se instala en latinoamérica. El discurso se se repetía entre los manifestantes: “Si gana el Frente de Todos Argentina se convertirá en Venezuela”.

Las banderas albicelestes desconcentraron antes de las 19 por las calles de Belgrano cantando al unísono #SiSePuede. Los testimonios recogidos en la marcha dejan en claro los deseos del 32% de la sociedad que vota a Juntos por el Cambio. Los argumentos se centran en la esperanza –a pesar del presente osucuro- por un futuro de desarrollo económico, en la defensa de los derechos individuales y, sobre todo, en el desprecio por los pasados gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner.