Trovadoras del Siglo XXI

Trovadoras del Siglo XXI

La primera mujer –ya que se esperan varias- se mueve sigilosamente hacia el micrófono ubicado en el punto medio del escenario e irrumpe sin previo aviso. Tiene en su mano izquierda un símil a unas castañas, con tiras de colores brillosos en contraste a la oscuridad del ambiente y de la noche de un jueves ocho de marzo. Las luces sobre el escenario se atenúan y ella, sonriente, canta a capela mientras da leves golpes a su pecho, cual latido de corazón o cajón peruano. Cierra los ojos y su voz se escucha, retumba en el Club Atlético Fernández Fierro abarcando los rincones y las mesas y vasos del público en silencio. La tonada es limpia, clara y acompaña la letra con escasos movimientos de sus brazos. A su alrededor: un piano, dos guitarras –criollas y eléctricas- un laúd, un bombo, y micrófonos para más compositoras invitadas. Quien está en escena culmina su primera interpretación, y acto siguiente convoca a otra mujer a cantar junto a ella una canción en honor a Violeta Parra. Antes de eso, menciona la importancia de la fecha, su significado, y resalta además la “coparticipación de todas las presentes, dentro y fuera del lugar, junto con las que vendrán en el resto de la noche”. Hay, efectivamente, trovadoras en escena.

Las Mujeres Trovadoras en escena.

Un trovador era aquel personaje poeta y cantautor del medioevo que componía su música con letras allegadas al amor, aunque también en ocasiones su prosa contenía discusiones políticas, o miradas críticas sobre lo social. Y aún característico de la Europa de los siglos XII y XIV, su labor como nexo entre la canción y los conflictos sociales se retoma actualmente desde una perspectiva contrahegemónica y disruptiva: la mirada femenina.     

Mujertrova es un Movimiento de Mujeres Trovadoras de Argentina que se fundó en 2013 gracias al trabajo de Paula Ferré y Alejandra Rabinovich (esta última desvinculada actualmente), ambas trovadoras a nivel local. Si bien el concepto de trovadora no es comúnmente mencionado en los medios masivos de comunicación, para estas mujeres resignifica más que una forma de llamar a una cantora. Los padrinos del movimiento son el trovador cubano Vicente Feliú Miranda, y la trovadora local Teresa Parodi. Ambos fortalecieron el movimiento desde su nacimiento y contribuyeron al crecimiento colectivo.

Carolina Wajnerman es integrante del movimiento desde los inicios, y aclara ante todo la impronta latina de las trovadoras en su afán de visibilizar la canción creada por mujeres. “Nosotras nos plegamos a un movimiento a nivel latinoamericano de un género no solo musical, sino también social y político en relación a la canción y la música”. Ella fue la primera en subir al escenario a tocar en la última fecha de Mujertrova en Capital Federal por el Día Internacional de la Mujer. Ese mismo encuentro se dio en simultáneo junto a otro realizado en Córdoba y un tercero en San Rafael, Mendoza (con la presencia de Paula Ferré), lo que denota el perfil del movimiento como una red conectada en distintos puntos del país. “Siempre Mujertrova es principalmente un encuentro con las compañeras, con la canción, con el decir y el compromiso de todas con lo que sucede alrededor”, agrega Carolina.

Silvia Gers en el concierto del grupo Mujeres Trovadoras en el Club Atlético Fernández Fierro.

Hay ciertos rasgos que caracterizan a una trovadora. Que su música sea de su autoría, o que recorra nuevos lugares para que sus letras se esparzan entre la gente. Sin embargo, un aspecto se destaca y manifiesta como premisa ante toda trovadora: canta para hacer saber lo que sucede. Y es ahí donde reside un mensaje diferente a la frivolidad mediática y naturalizada.

Para Mijal Guinguis, pertenecer a Mujertrova es un punto de inflexión. Es una joven cuya dicción y pronunciación son predilectas, lo que anticipa su calidad como cantante y la prolijidad de la voz. “Encontré en esta agrupación –hace ya muchos años-  algo muy significativo para mí, como grandes cambios en pequeñas acciones”. Ella es pianista, y como muchas otras integrantes lleva editados álbumes solistas de forma independiente.

Mijal fue la segunda en subir a escena en la noche en Buenos Aires, quien a cargo del piano y de espalda al público, le cantó a la crudeza de vivir y la simpleza de seguir luchando como trovadora –y como mujer- en el día a día. “Es bueno saber que si una flaquea, hay otra para sostenerla”, sostiene ferviente.

A las periódicas presentaciones de Mujertrova, se añade un “Encuentro Nacional de Mujeres Trovadoras”. Cada año se organiza un festival de dos o tres días con la participación de entre treinta y cincuenta trovadoras argentinas, en las que además de compartir su música, gestionan talleres gratuitos, realizan actividades comunitarias y se comprometen en contribuir a barrios carenciados. “Cada año se proponen diez trovadoras nuevas, diez integrantes nuevas para grabar un CD nuevo con la canción de cada trovadora”, añade Mariana Brito, asistente del movimiento y gestionadora de las redes sociales, una herramienta clave para la organización de los eventos.

A sala llena, en la noche en el Fernández Fierro

Mujertrova tiene además un reconocimiento estatal. En septiembre de 2017 el Congreso de la Nación Argentina otorgó al movimiento la distinción “Juana Azurduy” en conmemoración al trabajo colectivo, el compromiso por el bien común y su labor cultural. A casi seis años de su fundación, el Movimiento de Mujeres Trovadoras Argentinas se encuentra en la sazón de su momento, en un contexto de advenimiento y concientización sobre el rol de la mujer en sociedad. Y sus ejemplos se ejecutan con cuerdas o vientos en escena.

Sobre el final de la noche en el Fernández Fierro se presentaron Sara Mamani y Silvia Gers. Una es la contracara de la otra. Mientras Sara es callada y discreta, Silvia habla, y agrega aún más. Empero, ambas se complementan, son equidistantes al cantarle y tocar al nacimiento de una flor, o a una oleada de mujeres movilizadas en las calles. Sara es de Salta, la mayor de todas en escena, pero no flaquea ni un instante en transmitir la sequedad y la verdad de sus letras, acompañada por una guitarra eléctrica hueca y la voz como estandarte de protesta. “Una fecha movilizante la de hoy”, dice por lo bajo fuera de libreto.  Silvia es la morocha de mechones con puntas rojizas. Se para desafiante en medio del escenario y rasguea acordes como si de rock crudo se tratase. Pero también invita al público una y otra vez a no quedarse de brazos cruzados. Vuelve  a la crudeza, pero esta vez en las letras como baldazos de realidad y agua fría. De cualquier forma, ya se presencian tres trovadoras en los tablones y faltan más. Cuatro. Cinco, seis. Ocho y la trova comienza de nuevo.

 

Mauricio Macri: “elegimos el cambio con gradualismo”

Mauricio Macri: “elegimos el cambio con gradualismo”

En su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso Mauricio Macri afirmó que Argentina dejará de endeudarse y que la inflación de este año será menor a la del 2017. Siendo las 11 de la mañana el presidente entró al Congreso de la Nación por la puerta principal, sobre la avenida Entre Ríos y pasó custodiado por granaderos por el Salón Pasos Perdidos. Se dirigió al Salón Azul y firmó el Libro de Honor de la Cámara de Diputados y el de la Cámara de Senadores.

A diferencia del año pasado, en el que el presidente dio un discurso de mayor intensidad y definió su lema de campaña, “no aflojemos”, esta vez Macri intentó calmar un poco la tensión que, en parte, quedó de diciembre pasado. “Elegimos el cambio con gradualismo. Tenemos metas para bajar la inflación y bajar el déficit. Vamos a dejar de endeudarnos y va haber inversiones”, dijo.

Acompañado por la vicepresidenta, Gabriela Michetti, y el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, Macri entró al recinto cinco minutos después de la hora pautada. Allí se encontró con su gabinete y con Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda, jueces de la Corte Suprema, que también lo acompañaron. Comenzó su discurso recordando a los desaparecidos del submarino Ara San Juan. A su izquierda estaban la gobernadora de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta y algunos intendentes.

El presidente no eludió hablar sobre el aborto y ratificó que está “a favor de la vida pero que es necesario un debate donde se escuchen todas las voces”. Algunos legisladores de la oposición exhibieron el pañuelo verde que representa a la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. La diputada del Frente de Izquierda, Romina del Pla, opinó al respecto que “cuando el gobierno dice que da libertad de conciencia al bloque, no está dando libertad de conciencia para resolver un problema de necesidad y urgencia como es terminar con los abortos clandestinos”, y agregó que “el presidente tiene que garantizar que se aborde el derecho al aborto legal, seguro y gratuito como una necesidad y urgencia de todas las mujeres que hoy estamos siendo víctimas de los abortos clandestinos, tiene que impulsar que su bloque apruebe el aborto. Por su parte, la diputada Graciela Camaño manifestó que “cuando se instala que el problema de las mujeres es el aborto no se visualiza que el problema es la falta de pan en la mesa”.

“Vamos a enviar un proyecto de Ley sobre Telecomunicaciones y Tecnología de la Información para mejorar la competencia, bajar los precios y mejorar el servicio a los usuarios”, anunció el mandatario esta mañana en su discurso. Sobre esto conversó ANCCOM con el titular del Sistema Federal de Medios Hernán Lombardi: “se está armando un borrador de nueva ley para poner la nuevas tecnologías al servicio de la comunicación. Evidentemente esto va a ser un proyecto de ley que requerirá consensos pero se está trabajando intensamente”, adelantó.

Macri le pidió al Congreso “que tenga la Ley de Financiamiento Productivo entre sus prioridades para este año” que “es para darle más herramientas de ahorro a los argentinos”. El proyecto de dicha ley fue presentado en noviembre del año pasado por el Poder Ejecutivo y propone un régimen nuevo para financiar las Micros, Pequeñas y Medianas Empresas.

El ex ministro de Economía y actual diputado Axel Kicillof opinó sobre los anuncios del jefe de Estado: “creo que viene a desarrollar lo que dijo – el Ministro de Hacienda – Nicolás Dujovne, que el pico de endeudamiento dura hasta 2020; quedan 3 años de fuerte endeudamiento”.

Por su parte, el diputado de Unidad Ciudadana Hugo Yasky sostuvo que “fue un discurso que de manera sistemática evitó hacerse cargo de los problemas que hoy vive el común de la gente” y contó que él pensaba en qué habrá imaginado durante el discurso un jubilado, “si pudo llegar al final del discurso, si algún pequeño empresario de los que hoy no pueden pagar las tarifas y estaba esperando que hoy el presidente anunciara un salva vida, algo que le permita seguir pronunciado”. “No hubo ninguna mención a los problemas inmediatos que tenemos el común de los argentinos”, manifestó.

Una vez finalizado su discurso el presidente volvió a la Casa Rosada y retomó sus actividades a las 12.30.

Música con la garra charrúa

El 15 de febrero, como un proyecto independiente y autogestivo, Almagro le dio la bienvenida al “Otro Carnaval”. Por primera vez en Buenos Aires, los conjuntos murgueros al estilo Uruguay rompieron el molde y organizaron, junto con el Club Atlético Fernández Fierro (CAFF), un espectáculo que reunirá en total a dieciséis murgas en ocho fechas en el local del barrio porteño de Almagro.

Tres cantantes de la murga 5 Pal Peso

La murga 5 Pal Peso participó en el festival del barrio de Almagro.

De manera natural, y un tanto espontánea, las murgas fueron organizándose para construir un espectáculo sin antecedentes. “La movida es la primera que se hace de esta manera. Hace muchos años era muy subterráneo el género. En la década pasada, con bandas uruguayas que crecieron como ‘La Vela Puerca’, y ‘No te va a Gustar’, se le dio un empuje a la música uruguaya, que se instaló también en el público y se afianzó un poco más esa movida del carnaval.” comenta Martín Fuente, director de 5 Pal Peso.

Bruno Ferreccio, director de Floja de Papeles y La Rara Ira, comenta que muchas de las murgas presentes en el ciclo nacieron de grupos que asistían a talleres y otras de juntadas espontáneas de amigos. La idea era organizar una alternativa a la escena montevideana, reflejando el estilo uruguayo y a la vez diferenciándose de él.

“Originalmente en el Carnaval montevideano, donde las murgas compiten, hay un montón de reglas, como que el espectáculo no puede durar más de 45 minutos o que hay que incluir cuestiones de la realidad diaria del país. En Argentina, como no tenemos competencia de murgas, eso no pasa, entonces tenemos mucha más libertad para construir”, afirma Gustavo Rosetti, otro integrante de la Floja de Papeles. Una de las murgas que se presentaron en el ciclo (que continúa hasta el 3 de marzo) es La David Hasselhoff, que evoca desde su nombre el actor de la serie Baywatch y en la que sus participantes tocan vestidos de guardavidas. 5 Pal Peso, en cambio, se caracteriza por disfraces más teatrales y festivos y en su espectáculo “Suerte”, presentado en el CAFF, la murga agregó el componente de La Rueda -una especie de rueda de la fortuna de kermesse-, donde se determinó no solo qué canciones se escucharían en vivo, sino además qué intervención debería hacer el público durante la función.  

La murga 5 Pal Peso en un escenario realizando su performance

La murga 5 Pal Peso incluye canciones de crítica social en su repertorio.

“Cada uno encuadra lo que quiere decir. Es un género que no solo tiene que ver con el canto, sino con todo lo teatral. Es una propuesta muy completa”, afirma Martín Fuerte. Bruno Ferreccio agrega: “Y al presentarse en teatros y no en tablados hace que el género tome otro perfume. Al haber teatro, hay un poco más de clown, es decir de cosas más chiquitas que en un teatro se aprecian”. Mientras que algunas murgas se corren un poco del espacio de denuncia social, otras tienen una orientación política más marcada. 5 Pal Peso, cuyos integrantes son de Quilmes, es un ejemplo de esa tendencia con canciones con una fuerte crítica al gobierno argentino.

“Esto salió porque fue una necesidad también de juntarse. Entre las crisis surge la necesidad de juntarse”, comenta Fuente. “Principalmente está la consideración de que cualquiera puede hacer murga. Somos todos hijos, vecinos, no está esa imagen del rockstar que está allá en un pedestal. Eso ya te marca la cancha para un montón de cosas, como para lo que vas a decir. Hablamos de las cosas que nos pasa a nosotros y a la gente que nos viene a ver”, concluye.

Toda la programación del ciclo se puede consultar en www.caff.com.ar

Moyano: “no sigan aplicando políticas que hambrean a la parte más sensible de la sociedad”

Moyano: “no sigan aplicando políticas que hambrean a la parte más sensible de la sociedad”

Una multitud que, para los organizadores, rozó las 400 mil personas, le dio forma ayer al acto convocado inicialmente por el Sindicato de Camioneros, al que se sumaron otras organizaciones sindicales de la CGT y las dos CTA y movimientos sociales, en contra de la política económica del gobierno nacional. Con el escenario en las avenidas 9 de julio y Belgrano, mirando al sur, el líder histórico del Sindicato Camioneros, Hugo Moyano, tomó la palabra a las 15.15. “Dicen que vienen a respaldar los problemas legales que yo tengo. No estoy implicando en ningún tema de corrupción, por ahora. Pero les quiero aclarar lo siguiente, si tuviera un problema tengo las suficientes pelotas para defenderme yo solo”, enfatizó al comienzo de su discurso.

 Moyano remarcó que  “el objetivo es decirle al gobierno que no siga llevando adelante políticas que hambrean a la parte más sensible  de nuestra sociedad, a nuestros queridos jubilados, los han engañado con la reparación histórica”. Sobre la política económica opinó que es para perjudicar a los que menos tienen, a los trabajadores, a los más pobres, a los jubilados. “La responsabilidad que nosotros tenemos es defender a todos esos sectores de la sociedad”. Finalizó su discurso sin mencionar la reforma laboral ni las paritarias del 2018.

Facundo Moyano, diputado de UNA, acompañó a su padre y habló con ANNCOM. “El gobierno va a intentar desprestigiar y descalificar a los dirigentes sindicales, es la única que les queda. Pero la masividad del acto es la respuesta a todo eso que pretende el gobierno”. Sobre la alianza sindical que tiene el gobierno con algunos gremios, el diputado dijo: “Llamativamente son los mismos que estaban alineados con el gobierno anterior, esperemos que eso no le sea suficiente al gobierno para implementar un ajuste”.

El secretario general de Suteba, Roberto Baradel, también estuvo en el acto. En medio de la negociación salarial con la provincia de Buenos Aires afirmó que la multitud que se movilizó ayer le da sostén y confianza a la hora de negociar el salario docente. “Unidos y con los trabajadores en la calle somos invencibles”, arengó. Sobre el comienzo de clases dijo que la preocupación de los docentes es comenzar las clases el 5 de marzo y le exigió al gobierno que dé muestras de querer arrancar el 5.

Los oradores previos al principal convocante del acto fueron Juan Carlos Schmidt, triunviro de la CGT y dirigente de Dragado y Balizamiento; Sergio Palazzo, secretario general de la Asociación Bancaria; Pablo Micheli, secretario general de la CTA Autónoma; Esteban Castro, secretario general de CTEP y Hugo Yasky, secretario general de la CTA y diputado.

Durante sus discursos llamaron a la unidad de la clase obrera, criticaron las políticas económicas del gobierno, incentivaron al paro internacional de mujeres para el 8 de marzo y reprobaron el manejo salarial de los trabajadores estatales. “Los compañeros del Estado que acá en Buenos Aires les ponen el revolver del despido en la cabeza para obligarlos a aceptar a el 12 por ciento. Lo que pide cada despedido es poder trabajar con dignidad”, manifestó Yasky.

El bloque de diputados de Unidad Ciudadana salió a las 13 desde el Congreso. La diputada Gabriela Cerruti opinó que Moyano y Cristina Kirchner tuvieron diferentes momentos en las construcciones políticas y que hay que hacer alianzas estratégicas porque el límite hoy es el macrismo.

Si bien desde el gobierno de la Ciudad habían anunciado que la policía tenía órdenes de actuar en caso de que se dañe el espacio público, la desconcentración fue tranquila, sin necesidad de la intervención policial. Al finalizar el acto sonaron «Ji Ji Ji» y «Un Ángel para tu Soledad” de Los Redondos.

“El Isauro visibiliza que hay personas que viven en situación de calle en el distrito más rico de nuestro país”

“El Isauro visibiliza que hay personas que viven en situación de calle en el distrito más rico de nuestro país”

Las aulas del Centro Educativo Isauro Arancibia, ubicado en Paseo Colón y Cochabamba, hoy son escombros. El Gobierno de la Ciudad lo mudó provisoriamente al ex edificio del INDEC. Aquí se encuentra Evangelina Aguilar, junto a la directora Susana Reyes y otros compañeros, planeando el programa para el ciclo lectivo que está por empezar.

Evangelina trabaja en esta escuela desde hace 12 años. Se desempeña como maestra de nivel primario, dando las cuatro asignaturas básicas: prácticas del lenguaje, matemática, ciencias sociales y naturales. Sentada en un aula despintada, con bancos sucios, sin muebles ni pizarrones, habla del constante avasallamiento del proyecto educativo.

Evangelina Aguilar, docente de la Escuela.

-¿Cómo surge “El Isauro”?

-Esta escuela comenzó como un Centro Educativo de nivel primario para adultos, dependiente del área de Educación de Adultos y Adolescentes. Se creó para lo que era el sindicato de la CTA, para AMMAR (Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina) y el MOI (Movimiento de Ocupantes e Inquilinos), porque se había detectado que había mujeres que no habían terminado la escuela. La modalidad de “centro educativo” es funcionar dos horas, con una maestra única, y así lo abrió Susana Reyes. Lleva su nombre por Isauro Arancibia, maestro tucumano, militante y fundador de CTERA, que fue asesinado el 24 de marzo de 1976.

-¿En qué momento pasó a ser más que un “centro educativo”?

-A partir de que las trabajadoras sexuales le comentan a Susana que había muchos jóvenes en las calles de Constitución, sin hacer nada. Se fue difundiendo el proyecto de boca en boca, y empezaron a llegar cada vez más adolescentes con sus hijos. Al multiplicarse la población del Isauro, empezaron las mudanzas. Primero al interior del edificio de Independencia y Piedras, después al MOI de Constitución y después la UOCRA. Los estudiantes decían que querían pasar más tiempo en la escuela y tener las mismas materias que una primaria común, de la que ellos seguramente fueron expulsados o no pudieron continuar. Y así, terminamos haciendo turnos tres horas, con un primer turno donde hay jardín maternal y agregamos talleres de arte, comunicación y oficios. A la vez fue creciendo la cantidad de docentes, porque fuimos sumando gente que pertenece a diferentes áreas del Ministerio de Educación.

-¿Ahora el proyecto está reconocido como de educación formal?

-El Isauro es una escuela pública. Depende por un lado de la Supervisión de Asuntos Educativos y, por otro lado, del área de Programas Socioeducativos. Ambas áreas dependen del Ministerio de Educación.

El Centro Educativo Isauro Arancibia está ubicado en Paseo Colón y Cochabamba.

-¿Cómo es la modalidad de enseñanza?

-La educación primaria de adultos es distinta a la de niños. Se van armando proyectos que tienen que ver con la realidad que ellos viven, formar una mirada crítica y también poder influir y transformar: esa es la base de la educación popular, que es nuestra pedagogía. Todos los años elegimos un eje distinto, el de este año va a tener que ver con la situación ocupacional que estamos atravesando.

-¿De qué contexto provienen los estudiantes?

-Todos vienen de situaciones de extrema vulnerabilidad. Muchos viven en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires; algunos tienen sus familias en la zona sur, y hay otros que vienen de Guillón, Florencio Varela. Muchos tienen trabajos informales y una red armada de comedores y estaciones de subte donde piden ayuda. Hay familias que vienen desde hace tres generaciones socializando en la calle. Ahora, con esta nueva crisis que recrudece la organización económica y familiar, estamos viendo mucha más gente sin hogar. Nosotros tenemos comedor solo para los estudiantes, pero desde el año pasado empezaron a venir núcleos familiares enteros a ver si había sobrado algo.

-¿Cómo es el trabajo de los estudiantes y el modo de enseñanza durante el año?

-Muchos de ellos guardan sus cosas acá. Los armarios siempre son un faltante, porque necesitamos guardar sus cuadernos, carpetas. Muchas veces dejan de venir, la asistencia es discontinua, pero ellos saben que cuando vuelven sus cosas están acá. Trabajamos mucho el tema de sus derechos: vivienda, educación, salud, trabajo. Partimos de sus historias de vida y el derecho a la educación, y analizamos porqué como consecuencia de la última dictadura hay muchos jóvenes y adultos que no pudieron terminar la escuela. Ahí ven que no es una situación personal, porque lo que le pasó a uno es muy parecido a lo que vivió otro compañero.

Las aulas del Centro Educativo Isauro Arancibia, hoy son escombros.

-¿Traen arraigados sus problemas personales a clase?

-Siempre. Nosotros tenemos el momento del desayuno, charlamos, y es el momento en que ellos comparten lo que les pasó cuando salen de acá. Son relatos muy crudos para los maestros, muy difícil escuchar, porque nosotros los vemos como estudiantes. Imaginate: ver a ese joven que tiene la carpeta impecable, que te pide colores para subrayar, que quiere escuchar un cuento, que escribe poemas. A esa misma persona la noche anterior le levantaron los colchones, o la policía lo golpeó. No podemos naturalizar esto.

-¿Qué pasa cuando sus aspiraciones a continuar estudios universitarios o trabajar no corresponde con sus condiciones materiales?

-Es muy difícil sostener la escuela y el trabajo viviendo en la calle. No tener lugar donde higienizarse. No tener despertador. No poder dar una dirección en un trabajo. No tienen un lugar seguro. Nosotros armamos una asociación civil, donde pensar en un lugar seguro para armar un proyecto de vida. En 2016 empezó a funcionar el Centro de Integración La Milagro Sala. Es un hogar de transito en Boedo, donde hay un grupo de estudiantes que viven ahí, hacen talleres, armando sus curriculums, se los ayuda con documentación, salud.

-¿Qué es lo que hace tan importante a la sede original de “El Isauro”?

-Ese edificio lo ocupamos en 2011 después de mucha lucha. Nos habían dado solo la planta baja. A partir de ahí, y porque la Legislatura designó $14 millones a la puesta en valor y acondicionamiento es que conseguimos todos los espacios necesarios para todos los proyectos. Tenemos nivel inicial, maternal, primaria de niños y niñas, primaria de jóvenes y adultos, y nivel secundario (un FINES que depende de la Universidad de Avellaneda). La defensa de ese edificio tiene que ver con esto. Con el tema del Metrobús, primero nos dijeron que iban a ocupar casi completamente el edificio, que nos iban a reubicar. Después, que una parte del proyecto se iba a dividir en dos edificios: cosa irrisoria de pensar porque los padres tienen que estar cerca de sus hijos. Muchos tienen su “ranchada” acá cerca, están cuidando la escuela, fueron ellos los que nos avisaron que estaban mudando nuestras cosas. A nosotros oficialmente no nos notificaron que iba a ser así. Fueron los estudiantes que viven en frente de la escuela los que nos avisaron.

Depósitos con todos los materiales que se usaban antes de la demolición.

-Al desalojarlos sin notificación previa, ¿hubo algún tipo de compensación?

-El año pasado habíamos acordado que al Isauro lo íbamos a extender para un costado del terreno, donde funcionaba la Editorial Distal. Iban a seguir con las obras pero nosotros nos íbamos a quedar en ese edificio que quedaría acondicionado para funcionar. La primera etapa de esa obra tenía que estar terminada para febrero de 2018. Nosotros terminamos un mes antes las clases. Embalamos todas nuestras herramientas de trabajo. Dejamos todo ordenado en el edificio para que la obra no lo arruine. Pero no respetaron los tiempos de la obra, nos mudaron las cosas sin avisarnos. Todo lo que embalamos con tanto cuidado y cariño, está arrumbado acá de piso a techo: los libros que a nosotros nos cuesta muchísimo conseguir, las revistas que los estudiantes hacen desde hace diez años, todo tirado por ahí. Todo sucio. Donde va a funcionar el jardín no hay piso, está lleno de vidrios rotos. La gente que tenía que limpiar no está. Nosotros ahora tendríamos que estar en nuestro edificio pensando los proyectos del año e inscribiendo a los alumnos. Y estamos otra vez armando una escuela.

-¿Las autoridades del Gobierno de la Ciudad tienen noción de la realidad socioeconómica de estos estudiantes?

-Para nosotros todo este proyecto cobra sentido a partir de quiénes son nuestros estudiantes, cuáles son sus necesidades. Es algo que todo el tiempo hay que explicarlo, porque es un sujeto pedagógico que tiene sus características particulares y quienes no vinieron al Isauro no entienden. Ellos hacen mucho esfuerzo por “rescatarse”. Los estudiantes son los primeros que están ahí, levantándose de la calle con el compromiso que implica pasar la noche en situaciones de violencia e invisibilización. Las autoridades no las entienden tan fácilmente. O no las quieren entender.

-¿Cuál es la posición de la Ministra de Educación porteña frente a este desmantelamiento? ¿Pudieron acudir a ella?

Soledad Acuña nunca visitó el lugar. El año pasado el juez Gallardo dictó una cautelar que decía que no se podía derrumbar, destruir ni total ni parcialmente el edificio, y que se tenían que terminar los arreglos que habían quedado pendientes de la puesta en valor, con la plata que destinó la Legislatura. En el marco de esa causa, ella fue citada, y dijo que había un error, porque nosotros no éramos una escuela, sino un Centro Educativo. Tenemos esa dificultad, que la normativa no se corresponde con lo que en realidad hacemos. Nosotros ya no somos eso, porque se fue multiplicando la población. El armado es el de una escuela. Todos ven que es una escuela, y la normativa tendría que ser tal, tendría que tener un número, una cooperadora, recursos destinados a este proyecto, pero lo cierto es que no lo respetan. Hay falta de voluntad política.

-¿Por qué crees que miran hacia otro lado?

-El Isauro visibiliza una situación que el gobierno quiere desconocer: que hay personas que viven en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico de nuestro país. Incomoda que nosotros en los registros públicos, en la parte de dirección tengamos que poner “en situación de calle”. Hay un avasallamiento contra la educación pública en general, un vaciamiento de los programas, sobre todo los más inclusivos. El Isauro viene a molestar, a poner en la mesa una realidad que se quiere disfrazar. Y nosotros defendemos una lógica que es la de una educación pública, popular, emancipadora, que va en contra de los lineamientos que tiene este gobierno.

-Con el conflicto salarial a nivel nacional, y su situación ocupacional, ¿cuándo tienen pensado empezar las clases?

-El inicio está pautado para el 1 de marzo. En principio ese día vamos a hacer un acto, en la puerta de nuestro edifico central, dando inicio al ciclo lectivo 2018, las 3 de la tarde. Y después está convocada una movilización al Ministerio de Educación, por el reclamo salarial pero también en defensa de la educación pública en general.