Abr 12, 2017 | DDHH
La Justicia falló por segunda vez contra la revista Barcelona, instándola a pagarle 70 mil pesos a Cecilia Pando, la activista que defiende a los genocidas de la última dictadura. La mujer, esposa del Mayor (re) Pedro Rafael Mercado, acusó a la publicación de haber afectado su honor. El fallo, tildado de arbitrario por diversas instituciones, abogados y especialistas en comunicación, pone un límite peligroso a la libertad de expresión.
La causa se origina cuando en agosto de 2010 la revista publicó en una contratapa una foto trucada de Pando que la mostraba desnuda y atada, en obvia y satírica referencia a las mujeres que, lideradas por ella, se encadenaron al Edificio Libertador para pedir la libertad de los militares condenados por delitos de lesa humanidad.
Mariano Lucano, diseñador gráfico, ilustrador y director de la revista, muestra su preocupación: “Estoy realmente anonadado. A lo mejor este fallo no es otra cosa que un ejemplo de humor absurdo. Tantas veces he dicho que la revista hace periodismo lisérgico, y quizás ahora estemos bebiendo un poco de nuestras propias drogas.” Y agrega, ya más serio: “Se debe llevar este caso hasta las últimas consecuencias, ya que lo que está en juego es, además de la continuidad de la publicación, la libertad de prensa.”
De hecho, la sentencia en segunda instancia dictada por la Sala D de la Cámara Civil de Apelaciones, aumenta en 30 mil pesos el monto indemnizatorio fijado en el fallo anterior. “70Setenta lucas para un medio grande no es nada, pero para un medio autogestionado es la quiebra”, comenta Pablo Marchetti, ex director de Barcelona y editor responsable en el momento en que se publicó la contratapa en cuestión. Y defiende el estilo de la revista: “Una cosa del fallo que me llama muchísimo la atención es lo del exceso de ironía. ¿Cómo se mide eso? Siempre me preguntan si hay un límite para el humor y ahora, con este fallo, parece que sí. Es un precedente de mierda, muy muy jodido”.
Andrés López Cabello, abogado miembro del equipo de litigio y defensa legal del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), pone el foco en la autocensura que puede suceder a este tipo de decisiones judiciales: “Es un precedente preocupante y un retroceso en materia de libertad de expresión. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Suprema han dictaminado que las sanciones civiles tienen un efecto inhibitorio igual o más fuerte que las sanciones penales”. Y continúa con su explicación: “Puede llevar a que los periodistas como personas naturales y las revistas como personas jurídicas se autolimiten y autocensuren al momento de tocar determinado tema o hacer una sátira”. Sobre este punto, Fernando Sánchez, periodista y co-fundador de Barcelona aclara: “No podemos autocensurarnos, este es el laburo nuestro. Si vamos a pensar dos veces antes de hacer una parodia, no hacemos más la revista y listo”.
López Cabello, además, critica el fallo de la Cámara: “Carece de una fundamentación sólida, por un lado, de la razonabilidad de la condena, y por otro, de la existencia del daño.”
Sobre esta arbitrariedad del fallo también opina Martín Becerra , Doctor en Ciencias de la Información e investigador del CONICET, quien afirma que los jueces de cámara Patricia Barbieri, Osvaldo Onofre Álvarez y Ana María Brilla de Serrat no comprenden la importancia decisiva que tiene la regulación en materia de libertad de expresión. “Esta cámara es muy ignorante, y no lo digo peyorativamente sino en términos descriptivos. Han sido muy poco atentos a esta tradición que citan, y comentan fallos que van en contra de lo que resuelven”.
A su vez, Analía Eliades, abogada, periodista y especialista en Derecho a la Comunicación, sostiene que por sus múltiples contradicciones el fallo contra Barcelona tiene vicios de sentencia arbitraria, y que la revista puede buscar allí un fundamento para que sea revertido en el Tribunal Superior. Muchos de los fallos citados en la sentencia, por otra parte, son de la década de 1990, cuando existía una Corte Suprema de Justicia muy cercana al presidente Menem. Y, según comenta López Cabello, “son fallos que luego terminaron en la CIDH por violaciones a la libertad de expresión. Un ejemplo es el caso de Fontevecchia que aparece allí, y terminó con una condena durísima contra la Argentina”.
El CELS, según López Cabello, mira el caso muy de cerca y eventualmente participará como amicus curiae. “Si bien la Corte tiene mucha jurisprudencia sobre libertad de expresión, sobre los límites de la parodia política tiene muy poco, y eso puede ser muy importante”, advierte el abogado.
Otro organismo que expresó su preocupación respecto del tema es la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), que emitió un comunicado luego de conocida la sentencia. Andrés D’Alessandro, su Director Ejecutivo, opina que es un fallo de características preocupantes, ya que deja jurisprudencia y afecta la continuidad de un medio de comunicación. “Analizamos el fallo y vimos que se contradice. Barcelona tiene otro tipo de vinculación con la realidad, que es a partir de la parodia, pero es periodismo”.
Autoridades de la revista informaron a ANCCOM que el martes último se presentó una nueva apelación a la Cámara Civil, y de no ser aceptada, se presentará un recurso de queja para poder elevar el caso a la Corte Suprema de Justicia.
Actualizado 12/04/2017
Abr 7, 2017 | Trabajo
“Contundente”, para la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT). “Innecesario e inoportuno”, para el gobierno de Mauricio Macri. El primer paro nacional contra la política económico-social de Cambiemos concluyó con ese diagnóstico enfrentado de la conducción sindical y la Casa Rosada. Fue en el cierre de una jornada que mostró a una ciudad con escaso movimiento y con clima de día feriado. La convocatoria de la CGT contó también con el apoyo de las dos vertientes de la CTA, los movimientos sociales y la izquierda sindical y partidaria.
Por la mañana, organizaciones sociales realizaron cortes en los accesos a la ciudad. Los bloqueos se multiplicaron en Puente Puerreydón, Puente La Noria, Panamerica y ruta 197, el Acceso Oeste y la autopista Buenos Aires-La Plata. La Gendarmería reprimió a los manifestantes de la Panamericana con gas pimienta y camiones hidrantes. “Hoy aplicamos el protocolo antipiquetes en un 100 por ciento”, se ufanó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. El operativo dejó cuatro manifestantes heridos y otros seis detenidos.
La CGT evaluó la “contundencia» del paro en dos conferencias de prensa en la que también reclamó al gobierno que «cambie su manera de actuar con relación a la política económica que lleva adelante». “No estamos promoviendo una fogata social, ni que termine el mandato de nadie; no hay especulación política ni partidaria. Si hay mafias, que las busquen en la especulación financiera”, subrayó Juan Carlos Schmid, integrante del triunvirato que conduce la central obrera junto con Héctor Daer y Carlos Acuña.
La adhesión de los gremios del transporte fue una llave fundamental para la medida de fuerza. El secretario general de la Unión Tranviaria Automotor (UTA), Roberto Fernández, -un dirigente de buen diálogo con funcionarios del Gobierno nacional- estimó que en su sector el respaldo a la huelga fue “del cien por cien”.
«El paro es contundente, con un alto acatamiento, tal como lo planificó la CGT», completó Daer. El triunvirato cegetista acompañó su balance final con un nuevo pedido al gobierno para que “llame a una mesa diálogo”.
El gobierno buscó mostrar hiperactividad. El presidente Mauricio Macri y la mayor parte de su gabinete participaron de la inauguración del Foro Económico Mundial sobre América Latina en el Hotel Hilton. “Qué bueno que estemos todos aquí, trabajando”, subrayó el mandatario en obvia alusión al paro contra su gestión. Y agregó: “El país empezó a crecer. Estamos decididos a apostar por el futuro, a poner los problemas sobre la mesa, encararlos y resolverlos”.
Por la tarde, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, realizó el balance oficial. “Fue un paro inoportuno e innecesario”, concluyó. El oficialismo insistió en subrayar que el acatamiento al paro estuvo empujado por la falta de transporte público. “El diálogo sigue siendo nuestra prioridad. Hay que apoyar el diálogo antes que el paro, en definitiva, hay que parar de mentir y de agredirnos”, dijo en conferencia de prensa.
Calles vacías
La “agenda” del primer paro general contra el gobierno de Cambiemos fue múltiple: el rechazo al ajuste, los despidos masivos, la inflación, pero, sobre todo, la defensa de las fuentes de trabajo amenazadas por el modelo económico y social.
El paro fue total en todo el país. En Buenos Aires se hizo sentir en las calles –no hubo colectivos, trenes, subtes, ni vuelos-. El gobierno porteño liberó los peajes y los estacionamientos fueron gratuitos, y reforzó la presencia policial en las calles.
En los barrios, algunos comercios eligieron atender con normalidad. Y hubo trabajadores -en su mayoría del sector privado- que decidieron llegar a sus lugares de trabajo en bicicleta o en autos particulares. Muchos lo hicieron por las presiones patronales, otros impulsados por una campaña viralizada por las redes sociales bajo el lema “Yo no paro.
“El paro me arruinó un día de trabajo. Me tuve que tomar un taxi, empecé el día gastando y no hice ninguna venta”, le dijo a ANCCOM Juan Carlos, encargado de un puesto de flores en Avenida Rivadavia al 6500.
Por el contrario, Jorge, empleado de una vineria en la misma zona de Flores, reivindicó el “derecho” de los sindicatos a convocar a una huelga, pero advirtió sobre las “pérdidas” para el país.
Otras voces
El titular de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma, Pablo Micheli, repudió la represión de los piquetes por parte de la Gendarmería. “Esperemos que el gobierno convoque a una mesa de diálogo”, sostuvo.
Para Hugo Yasky, secretario general de la CTA de los Argentinos, el paro fue “histórico”. Y subrayó: “Fue una huelga para rechazar las políticas de hambre y expresar lo que la gente está reclamando. Es un paro para que cambie la política económica».
Todos los gremios que ayer adhirieron al paro nacional festejaron también la noticia con la que desde mañana deberá lidiar el gobierno: la orden judicial para que el Ejecutivo convoque a la paritaria nacional docente, el reclamo de base del dilatado conflicto entre el poder central y los maestros.
Actualizada 06/04/2017
Mar 25, 2017 | DDHH
“La realidad puede ganarle a cualquier negacionismo, porque en definitiva, después, a cada uno le va llegando, tarde o temprano. Es como el agua, que avanza y un día te toca los pies, pero cuando te querés acordar, la tenés hasta el cuello”. Guillermo Villanueva, hijo de Santiago Villanueva, militante de la JUP, desaparecido el 25 de julio de 1978, reflexiona con la mirada en la multitud.
La histórica Plaza de mayo, todas sus calles y avenidas quedaron desbordadas. Madres, hijos, nietos, familiares, amigos, organizaciones sociales, políticas, sindicales, auto-convocados dieron cuerpo a una marea abrumadora, memorable y multitudinaria en un nuevo aniversario del golpe cívico-militar. Un potente y transversal grito vociferó de las gargantas de las miles de personas que se manifestaron este 24 de marzo: “Fueron 30.0000”.
Al reclamo constante y permanente de Memoria, Verdad y Justicia, los organismos de Derechos Humanos expresaron y denunciaron los retrocesos que en esa materia se dieron durante el gobierno de Cambiemos: “miseria planificada, la persecución política, la represión y el encarcelamiento de militantes, la pérdida de la soberanía política y económica”.
“Hoy vemos cómo Mauricio Macri retrocede y se niega a hablar de los desaparecidos. A la par, vemos cómo sus funcionarios se reúnen con asociaciones que reivindican el terrorismo de Estado y además ejercen el negacionismo, como (Juan José) Gómez Centurión o Darío Lopérfido”, declararon en el documento conjunto leído desde el escenario montado a espaldas de la Casa de Gobierno. El pedido de libertad a la dirigente social Milagro Sala, el apoyo a lucha docente, el repudio a ley inmigratoria, también se plasmaron en tal documento.
Desde antes del mediodía, los espacios de la plaza fueron colmados por organizaciones políticas, tales como el Movimiento Evita y la CTEP, quienes contaban ya con muchos militantes en sus columnas cercanas al escenario.
“Estoy acá por mis hijos y por mí, por la lucha de todos los compañeros, porque no es uno solo sino que son 30 mil. Por más que no quieran, lo vamos a seguir diciendo. Por los nietos que faltan, la lucha continúa y esto no termina hasta que no aparezca el último de ellos”, dijo Ana María Fernández, madre de dos hijos desaparecidos en 1978, en diálogo con ANCCOM.
A lo largo de las cuadras de Avenida de Mayo, cientos de siluetas de numerosos colores cincelaban los bordes. Sobre el asfalto se multiplicaban los pequeños pañuelos blancos pintados. “Esta marcha es especial, porque este es un gobierno que quiere negar que el golpe del ´76 fue un genocidio”, le dijo a ANCCOM Gerardo, docente y sociólogo, mientras marchaba con su familia. Indicó, además, que el actual gobierno “quiere reducir el número de desaparecidos”, hacer parecer “que no fueron tantos, que no fue tan importante” para denostar “a los organismos de derechos humanos y así quitarle la importancia que tienen”.
El compás de las columnas que encabezaba la organización Madres de La Plaza estuvo a cargo de los tambores y bombos de los músicos de “La Chilinga”. De guardapolvos blancos y en distintos puntos de la marcha, los chicos de organización barrial “La Garganta Poderosa” invitaban a elegir entre fragmentos del diario Clarín, La Nación y la Nueva Provincia, hacer un bollo y embocarlo en los ceros de un cartel que decía son 30 mil.
“En este momento se está poniendo en juego las mismas políticas que dieron origen al golpe de Estado. Es fundamental seguir defendiendo los derechos humanos en toda su amplitud”, afirmó a esta agencia Liliana, docente universitaria y arquitecta. Llevaba un cartel de unos de los 13 compañeros que egresaron con ella en 1976. “Hay toda una de ola negacionismo por parte del gobierno nacional que es muy peligrosa. Están queriendo arrasar con todas las conquistas sociales y los movimientos populares”, puntualizó.
Arriba de una estructura publicitaria, dos niñas sostenían un cartel sin inscripciones, que sólo contenía una caricatura del presidente Mauricio Macri, con bigotes y orejas de gato y otro con los dedos en V. “Ningún gobierno nos quitará la voz de la memoria”, enunciaba un cartel que llevaba una mujer con su pequeña hija en brazos. “Los que han contribuido a los golpes, hoy están en el gobierno” tenía inscripto en un afiche un hombre acompañado por su hijo adolescente.
Los gremios docentes aglutinaban en sus columnas a una innumerable cantidad de convocados, entre las que destacaban las organizaciones SUTEBA y CTERA, detrás de ellos, se hallaba una enorme masa de personas referidos en la CTA, en el comité por la liberación de Milagro Sala y en organizaciones kirchneristas como Nuevo Encuentro y La Cámpora. Atravesando la Avenida 9 de Julio, la marea popular continuaba con miles de personas con banderas de organizaciones tales como CORREPPI, Red contra la Violencia Institucional, H.I.J.O.S, entre otros.
La lectura del documento se realizó a media tarde y arriba del escenario, estuvieron Estela Carlotto y Victoria Montenegro, de Abuelas de Plaza de Mayo, Taty Almeida de Madres de Plaza de Mayo, Lita Boitano y Graciela Lois por Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, José Schulman por la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, Paula Donadío y Ana López por H.I.J.O.S y Fernando Suárez por el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos.
“Porque detrás del negacionismo está el intento de olvido, y detrás del intento de olvido está la intención de desmovilizarnos, de volver a ´ foja cero´ las luchas. No nos han vencido: ¡estamos acá, en unidad, con el pueblo, con las banderas de los 30.000 en alto!”, culminó.
Mar 23, 2017 | Vidas políticas
A fines de 2015, luego de un largo trámite y de dilataciones impuestas por la Unión Tranviaria Automotor (UTA), la Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro (AGTSyP) obtuvo la personería gremial. En marzo de este año, la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo resolvió retirarle la personería y darle lugar a una apelación presentada por la UTA hace más de un año.
Roberto “Beto” Pianelli, Secretario General de AGTSyP, denunció la falta de argumentos de la UTA -y por ello también del fallo de la Cámara- quién impidió en tres oportunidades la realización de la prueba necesaria para determinar cuál es el sindicato con mayor representación. El martes, la AGTSyP presentó una apelación al juzgado para que este caso sea tratado por la Corte Suprema de Justicia.
Luego de considerar el fallo como parte de una decisión política del gobierno de atacar a los sindicatos opositores, Pianelli reflexionó sobre el rol de los sindicatos en la actualidad y acusó de colaboracionistas a algunos gremios de la CGT que se vieron forzados a actuar.
¿Qué estableció la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo?
Dio lugar a una apelación presentada por la UTA, que sostiene que en el trámite administrativo no se le dieron los suficientes elementos para poder defender su personería gremial. Eso es mentira. La UTA estuvo tres años impidiendo que se haga la comparación entre los gremios, para ver cuál era más representativo. Hubo tres fechas para la compulsa, y en las tres interfirió. En la última, directamente no se presentó. Sin embargo, el fallo dice que no hubo suficientes garantías, y manda el trámite de vuelta al Ministerio de Trabajo para que convoque a una nueva fecha. Obviamente, es un fallo de características políticas. Este Ministerio no va a llamar jamás a una compulsa, porque la UTA es aliada del gobierno actual. Es un fallo hecho a medida, ya que se resolvió en siete días. La UTA presentó hace un año la apelación, pero el Ministerio de Trabajo la tuvo frenada. Cuando decide mandar el expediente, se resuelve en siete días. Es escandaloso, porque claramente no hubo tiempo de haber leído un expediente que lleva años de trabajo, con idas y vueltas, con documentos cruzados y apelaciones, en siete días. Estuvo un año parado, y casualmente lo resuelven en un momento donde hay una ofensiva sindical contra el gobierno. Creemos que es un fallo a medida, un fallo de época.

¿Cómo es el trámite para acceder a la personería gremial y cómo fue en este caso?
Primero es necesario inscribir al sindicato y que te den esa inscripción, en un proceso que no puede durar más de tres meses. En nuestro caso, producto de la presión de la corporación sindical, en vez de tres meses duró casi tres años. Después de la inscripción, debés tomar la decisión, en el momento que consideres adecuado, de pedir una compulsa para tratar de demostrar que tenés mayor representación que el otro, porque le dan la personería gremial al que tiene más representación. Se mide seis meses para atrás, desde el día que decidís compulsar: en esos seis meses tenés que tener 20 por ciento más de afiliados que el sindicato que tiene la personería. El día que nos presentamos para hacer la compulsa, teníamos 40 por ciento más de afiliados. Si bien el cómputo se considera desde el día solicitado hacia atrás, la compulsa se realizará cuando el trámite administrativo lo considere. Cuando nosotros pedimos la compulsa y el Ministerio de Trabajo lo comunica, la UTA apela y empieza a hacer todo tipo de maniobras jurídicas, logrando demorar más de un año el trámite. Llega un momento que el Ministerio decide poner otra fecha, pero la UTA judicializa el trámite. Era improcedente, pero el Ministerio no tiene otra alternativa que mandarlo a la Justicia que, luego de un año, termina diciendo que era improcedente. Entonces el trámite vuelve al Ministerio, que fija una nueva fecha y debe levantarla porque la UTA vuelve a apelar. Finalmente, pone otra fecha y nosotros nos presentamos. No hay tiempos establecidos para este tipo de trámites, aunque en general suelen demorar un año. Nosotros tardamos tres, pero hay gremios a los que no convocan nunca, por decisiones políticas.
¿Cómo se mide la representación de afiliados?
Tenemos que presentar los libros con la cantidad de afiliados que cotizan en el sindicato. Y ellos tienen que traer sus libros, demostrando también la cantidad de afiliados cotizando. En su caso es más fácil, porque los descuentos de cotización se hacen en el recibo de sueldo. Nuestro caso es más difícil, porque la empresa se niega a descontar del recibo de sueldo. Entonces nosotros descontamos vía CBU. Tuvimos que llevar los libros y un montón de papeles que demostraban que durante seis meses, registrado por escribano público y el banco, ingresaba ese dinero de cotización por la cantidad de compañeros. Nosotros llevamos eso, pero la UTA no vino. Como no se presentó, el Ministerio nos dio la personería gremial a nosotros. Cuando termina el trámite administrativo y ya nosotros tenemos la personería gremial, la UTA va a la justicia y dice que no se garantizaron sus derechos durante el trámite. Esto lo hizo la UTA no bien asumió Jorge Triaca como ministro, y sobre esto es que falló a favor la Sala II.
¿Cómo decidieron abrirse de la UTA y formar AGTSyP?
Todos nosotros éramos delegados de UTA. Y la crisis que duró 10 años tuvo que ver con que nos oponíamos a aceptar firmas de convenios que empeoraran las condiciones laborales o implicaran despidos. Siempre dijimos que íbamos a hacer lo que digan nuestros compañeros y eso fue lo que hicimos. Eso generó una contradicción muy fuerte con la conducción. Hubo huelgas organizadas por nosotros, a las que la UTA se oponía y venía a romper con patotas a punta de pistola. Y bueno, llegó un momento en que nos quisieron echar a todos los delegados, y decidimos formar otro sindicato.
¿Cuáles son los próximos pasos a seguir?
El martes presentamos la apelación al juzgado pidiendo ir a la Corte Suprema. El juzgado puede darnos lugar o puede decir que no. Lo más probable es que diga que no. Entonces podemos ir a la Corte, en queja con el juzgado. Ese es el trámite administrativo, ir a la Corte Suprema de Justicia para que resuelva sobre este tema. Pero puede durar años. Eso desde el punto de vista jurídico. Pero vamos a ir a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a presentar una queja por falta de libertad sindical. A los únicos que nos están cuestionando los derechos es a nosotros, porque habíamos ganado la personería gremial y nos la sacaron de una manera trucha. Mientras tanto, vamos a seguir haciendo lo que hicimos siempre. En caso de que quieran llevar esta resolución arbitraria a los hechos y nos quieran impedir que participemos de las paritarias o defender a nuestros compañeros, obviamente vamos a actuar.
¿Cree que esta decisión forma parte del contexto político?
Sí, de un gobierno que está intentando hacer retroceder las conquistas de los trabajadores y de los sectores populares, conseguidas durante los últimos años. Hay una política de flexibilización laboral que intenta bajar las condiciones salariales de los trabajadores, y está recibiendo la reacción de un sector importante del sindicalismo. Pasó con los bancarios a principio de año, y está pasando en este momento con los docentes. Nosotros creemos que este fallo tiene que ver con una política que busca disciplinar a las organizaciones opositoras, y beneficiar a las colaboracionistas, como es el caso de la UTA. Consideramos que es una decisión simbólica-política, en contra de los sindicatos que se enfrentan al gobierno y a favor de los sindicatos que colaboran con la reacción de los grupos económicos concentrados de ir en contra de los laburantes y los sectores populares.

¿Cuál debe ser el rol de los sindicatos?
En este contexto en particular, los sindicatos tienen que salir a defender las condiciones conquistadas por los trabajadores. Y obviamente, como siempre, un sindicato lo que tiene que hacer es defender los intereses colectivos e individuales de sus trabajadores e intentar mejorar las condiciones, no evitar que las empeoren. Por suerte hay un montón de sindicatos que hacen eso, aunque otros desgraciadamente no.
¿Cuáles son los sindicatos que efectivamente están actuando para defender a sus trabajadores?
Podemos decir que hay sectores como las dos CTA, sectores como la Corriente Federal de la CGT y otros gremios que tienen una política de defensa de los compañeros y han salido a a la calle. Pero también vemos gremios de la CGT –sobre todo la conducción de la CGT– que durante el año hicieron todo lo posible para no enfrentar las medidas del gobierno. Es más, colaboraron. El caso más escandaloso fue cuando se discutió el impuesto a las ganancias. Había una ley que había salido por mayoría de Diputados y, cuando iba a ir al Senado, la CGT arregló una ley que era peor. Fueron a salvarle las papas al gobierno, que había perdido por mayoría en Diputados. En vez de exigir a los senadores que aprueben esa ley, fueron y arreglaron empeorando la ley que ya estaba. Por eso hoy el impuesto a las ganancias es una de las promesas incumplidas de este gobierno, que sacó todos los impuestos para los grupos económicos concentrados y dejó los impuestos que pagan los trabajadores. Hoy los únicos que siguen pagando son los laburantes. Eso se dio gracias a la colaboración de un sector del sindicalismo, cuya mejor expresión quizás es el triunvirato de la CGT, que tiene una política peor que la que tuvo el massismo.
¿Cómo interpreta el conflicto ocasionado durante la última movilización de trabajadores para fijar la fecha del paro nacional?
Nunca en la historia pasó que en una movilización convocada por la CGT o convocada por una conducción que mueve 500.000 personas, esa multitud te corra del escenario y te grite: “Poné la fecha, la puta que te parió”. Es una situación política de descontrol, producto de que los tipos se estaban haciendo los boludos. Yo creo que ese fue el límite. Si hay algo que no querían hacer, era parar. Pero la gente está cansada, está viendo cómo pierde su poder adquisitivo cotidianamente. Va al supermercado y ve que no alcanza. Hay mucha gente que perdió y pierde su trabajo, y muchos que están suspendidos. Veníamos de discutir paritarias que mejoraban nuestras condiciones de vida, y pasamos a quedarnos sin trabajo y con paritarias que te bajan esas condiciones. El año pasado, los que mejores firmamos obtuvimos más del 30 por ciento y la inflación fue de 40. Y este año quieren hacer una maniobra, que es lo que están intentando con los docentes, discutir la inflación futura y no la que perdimos. Hay gremios que aceptan esas condiciones. Por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires UPCN acepta lo que hoy están rechazando los docentes. Aceptó firmar el 18 o 19por ciento, también aceptando la pérdida de lo obtenido el año pasado, que había firmado por el 20 por ciento. Por suerte, los docentes decidieron que no van a permitir eso.
¿Qué opina del protocolo antipiquetes anunciado por Patricia Bullrich?
Si querés empeorarles las condiciones laborales a los trabajadores y a los sectores populares en general, obviamente lo que vas a intentar es acallar la protesta social. Como no quieren acallar la protesta social cediendo a los reclamos de los trabajadores, recurren a los palos. Es la otra pata de la misma política, esa es la tarea que hoy está llevando adelante la tristemente célebre Patricia Bullrich. Como no pueden persuadir a la gente de que vivan cada vez peor, lo van a intentar hacer con garrotes.
Actualizada 23/03/2017
Mar 22, 2017 | DDHH
«Provocativamente le hemos puesto Primer Encuentro, para obligarnos a que haya un segundo», dijo el fotógrafo Julio Menajovsky, integrante del colectivo organizador del Primer Encuentro de Fotografía y Derechos Humanos que se realizó el viernes y sábado pasado en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex ESMA). Las treinta muestras fotográficas atravesaron temas como la “identidad y lucha de los trabajadores”; los pueblos originarios; el conflicto social y la inmigración, entre otros, junto a seis foros-debate sobre los temas que convocaban las fotografías.
Dentro del encuentro del sábado se realizó la charla «Representación, conflicto social y cerco mediático» que reunió a medios autogestivos y/o contrahegemónicos para pensar el rol del fotoperiodismo como vocero de los derechos. ANCCOM formó parte de la mesa debate junto a la Cooperativa lavaca; el Movimiento Argentino de Fotógrafos Independientes Autoconvocados (M.A.F.I.A) y Emergente.

Mesa sobre «La fotografía en el territorio» moderana por Ezequiel Torres
El encuentro atravesó preguntas sobre el tipo de agenda que cada medio busca construir y desde qué lugar. Diego De Charras, director de la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la UBA explicó que el proyecto de ANCCOM, la agencia de noticias de prácticas pre-profesionales para alumnos de la carrera, es particular porque pretende alternativa pero surge desde el Estado, en el ámbito de la universidad. Victoria Gesualdi, editora/docente del área de fotografía de ANCCOM explicó que desde el comienzo se planteó una perspectiva con eje en la defensa de los derechos humanos y una agenda social que busca mirar “de costado”, mostrando lo que los medios grandes no muestran. «En los medios hegemónicos muchas veces la fotografía tiene un rol secundario: acompañar la nota. En ANCCOM la vocación del área de fotografía de querer darle voz a todo hizo que tenga un gran protagonismo. Para esto se necesita de mucha presencia en la calle», dijo la editora.
El colectivo fotográfico M.A.F.I.A explicó que su manera de abordar la realidad es darle protagonismo a los actores de los conflictos sociales: «Nos armamos como grupo para cuestionar la representación de los medios cómo ‘la gente’. Queríamos mostrar un poco más, decir algo más sobre la mujer u hombre que estaba en un cacerolazo. Nos gusta preguntarnos a través de las fotos y sacarle la solemnidad», explicó Lina Etchesuri, miembro del colectivo.

La mesa de ANCCOM, MAFIA, LAVACA, EMERGENTE Y SIPREBA.
Desde el medio Emergente -describieron- buscan darle voz a los hechos cuidando, el enfoque y la selección de imágenes. Se generan debates dentro del mismo medio sobre qué imágenes publicar, si representa lo que se quiere mostrar y si no perjudica a ningún actor. También participan de proyectos como ‘No a la baja’, campaña comunicacional para que no se baje la edad de imputabilidad. Los integrantes de la cooperativa Lavaca -que edita, entre otras publicaciones la revista Mu- pusieron en cuestión el término ‘alternativo’ para definirse. «No queremos pensarnos como alternativos a nadie. Queremos construirnos como medio en sí mismo, que logre el mayor alcance posible», fue la definición de Ignacio Yuchark, miembro de la cooperativa.
La mesa también problematizó el nuevo escenario técnico para la circulación de información de los últimos años. Diego De Charras apuntó: «Las nuevas tecnologías permiten una calidad que antes no era pensada en los medios autogestivos. Pero no hay que olvidar que la circulación muchas veces se da por plataformas privadas regidas por normas jurídicas de otros países, como Facebook. Hay que tener presente que puede aflorar la censura por esta razón».

Pablo Piovano
Tomás Eliaschev, Secretario de Derechos Humanos de SiPreBA, participó de la mesa para problematizar los derechos propios de los trabajadores de prensa. Para él, una de las contracaras de las nuevas tecnologías es que los medios grandes quieren que lo que antes hacían cuatro personas, ahora lo haga una. «Es muy importante el surgimiento de los medios autogestivos, porque ya sabemos cómo los grandes medios buscan representar sus intereses. Los trabajadores denuncian que se está bajando la calidad de las coberturas. No se mandan reporteros a los lugares y se saca información de las redes que luego termina siendo falsa». También reflexionó que en los medios masivos la grieta no existe, que las líneas patronales pueden variar, pero que todas terminan estando en contra de que los trabajadores reclamen sus derechos. Allí hizo referencia a la lucha de los empleados de Perfil, AGR- Clarín, y la precarización en Télam. «Por suerte en los trabajadores hay una conciencia clara de que somos algo distinto al medio donde trabajamos», dijo Eliaschev.
Julio Menajovsky, además de organizador de Derechos en Foco, fue el moderador de la mesa. En dialogó con ANCCOM hizo el balance del Primer encuentro de fotógrafos que reunió a cientos de profesionales y amateurs: «El debate colmó las expectativas. A la diversidad de medios que se reunieron hoy los une el informar con verdad, calidad y la poética desde la imagen».
Actualizada 21/03/2017