«El macrismo quiso cincelar el alma de los argentinos»

«El macrismo quiso cincelar el alma de los argentinos»

Feldman define el gobierno de Macri como una «cinicracia».

Luego de tres años del gobierno en funcionamiento de Mauricio Macri y sin resistencias que pusieran en jaque el abanico de medidas económicas, políticas y sociales regresivas llevadas adelante por el equipo del mandatario surgió el libro La conquista del sentido común. Cómo planificó el macrismo el “cambio cultural”, publicado por Ediciones Continente. En él, su autor, Saúl Feldman, sociólogo de la Universidad de Buenos Aires con Posgrado en Comunicaciones Sociales en Hebrew University of Jerusalem se pregunta por qué el mandato del actual Presidente de la Nación se desenvolvió sin grandes obstáculos, al tiempo que causó una cadena de perjuicios para la sociedad argentina. En diálogo con ANCCOM, en el contexto pos-PASO y con Macri de gira preelectoral por distintas ciudades, Feldman hizo un recorrido por los conceptos clave que permiten dilucidar una respuesta a tal pregunta, logrando deconstruir los mecanismos comunicacionales implementados por Cambiemos desde sus inicios.

¿Qué te llevó a escribir el libro?

La pregunta central que yo me hice es por qué en medio de un descalabro económico-social no se producía un estallido como se pensaba que iba a suceder, especialmente teniendo en cuenta a la experiencia social argentina. Este es un libro político-comunicacional, por lo tanto, me remito a buscar una respuesta en este terreno. Lo que trato de explicar es el trabajo sobre el sentido común de parte del pueblo argentino que permitió que en el 2015 ganara las elecciones Mauricio Macri. Hay varios contextos para esto: en el libro analizo cuál es el marco de expectativas que podría explicar la no-explosión del pueblo argentino. En este sentido tomo una frase de Frederic Jameson, a veces alabada y a veces criticada: “[Es] más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo.” El tema de que el capitalismo se vea hoy como un sistema que, a pesar de funcionar desastrosamente, dominado por el capital financiero, no tiene un final hace que la gente tenga un determinado horizonte de expectativas dentro de su propia conducta. Eso podría estar explicando las no-explosiones. Lo que yo creo que está pasando en los demás países y dentro de Argentina es que se ha creado la idea de que no hay alternativa para el capitalismo y que lo que aparece como hegemónico dentro de lo ideológico es el neoliberalismo. Cuando vos vas a explotar lo hacés porque considerás que es posible otra situación.

Como decís en tu libro, en el neoliberalismo actual es fundamental el trabajo sobre el sentido común…

Efectivamente. A partir de este contexto de no-explosión me propongo analizar el sentido común y por qué este se convierte hoy en el campo de batalla cultural. El sentido común es una serie de ideas, de creencias, que no están armadas dentro de un sistema sino que están disgregadas, aparecen autónomamente y de forma caótica. Son ideas simples, comunes a una comunidad, tienen facilidad para traspasar fronteras de clase social, de cultura, de edad y la capacidad de constituir parte de nuestra vida cotidiana. Entonces tienen una enorme potencial porque estas creencias están articuladas a emociones humanas como el odio, el amor, el deseo de poder, el miedo, la envidia. Esto las hace potencialmente peligrosas en su manejo. El macrismo logró desarrollar un sentido común muy articulado en lo que llamo en el libro una cosmovisión. No una ideología, sino una idea de mundo.

Para la instalación de este nuevo sistema común hablás de un necesario trabajo sobre el alma de los argentinos ¿a qué te referís?

Lo primero que hace el macrismo es que en forma explícita no se propone un proyecto económico social. Lo que ellos dijeron es que vienen a cambiar el alma de los argentinos, es decir, que los argentinos tienen una manera de pensar y de sentir nefasta para el desarrollo del país que se quiere desde el gobierno. Entonces, para un país “en serio” lo que buscaron cambiar es el alma de los argentinos. En este sentido planteo que lo que trabajó el macrismo fue el cincelamiento del alma -que viene del arte: tallar el alma- para realizar un cambio cultural y plantar así un nueva cosmovisión afín a los intereses del neoliberalismo.

«En el neoliberalismo actual la industria cultural pesa enormemente», advierte Feldman.

Otro concepto clave que planteás para entender el funcionamiento del gobierno de Cambiemos es el de cinicracia ¿qué significa?

Antes de definir cinicracia vamos a una breve diferenciación entre cinismo y mentira. Cuando vos mentís lo que intentás es obtener una ventaja, obviamente ocultando que estás haciendo eso. Entonces se produce un hecho llamativo y paradójico: en esa acción de mentir estás respetando una ley. Un ejemplo concreto: dicen que el macrismo se parece al menemismo pero esto es incorrecto. Menem tiene que ver con la mentira y Macri, con el cinismo. Esto es diferente por las consecuencias que traen con respecto al otro. Menem dijo “Si yo hubiera dicho lo que pensaba hacer, no me votaba nadie.” En este acto está reconociendo que mintió para obtener una ventaja que son los votos. Además está reconociendo que mentir no está bien y, por lo tanto, que existe una ley que él había violado. Lo de Macri es absolutamente distinto. Él dijo: “Si yo hubiera dicho todo lo que iba a hacer, votaban por encerrarme en el manicomio.” Si vos le decís “usted prometió pobreza cero”, no va a contestar que te mintió. Posiblemente, lo que va a decir es que la pobreza cero es un ideal que tenemos que alcanzar y que va a llevar unos años lograrlo. Así, está diciéndote en la cara que te está mintiendo. En el diccionario, “cinismo” significa, en línea con lo anterior, mentir descaradamente. Esta diferencia es enorme: en un caso se reconoce la ley y en el otro se dice que la ley no importa. El cinismo se basa, entonces, en hacer un uso desvergonzado del poder frente al otro: yo te miento, te muestro que te miento y no me importa. El desprecio por el otro se puso de manifiesto en distintas ocasiones antes, durante y después de las PASO. Se dijo que eran modalidades distintas, que iba y venía. No es así. Hay una estructura profunda que tiene que ver con el cinismo y el desprecio del otro que actúa en forma constante.

¿Esta forma de gobierno tuvo antecedentes?

No. Si hay una diferencia entre el neoliberalismo que desarrolla Macri y el de los 90 o del 76 del régimen militar es que por más que tuvieron una dimensión cultural y comunicacional, estas fueron un aspecto subordinado. En el neoliberalismo actual en el mundo -lo que se llama hoy capitalismo cultural- la industria cultural pesa enormemente, no solamente dentro de la economía sino además domina su sistema de funcionamiento y lo regula. Lo que tiene de nuevo el neoliberalismo a nivel global es que lo cultural constituye un elemento que define su esencia. Esto es nuevo y el macrismo es la expresión de ese neoliberalismo en Argentina. Por eso, cuando nosotros en la vida cotidiana acostumbramos a decir “esto yo ya lo viví” y hacemos referencia al neoliberalismo de Menem o al de 76 en realidad existe un error porque da a entender que el régimen neoliberal tiene que ver fundamentalmente con lo económico y en realidad en la actualidad funciona bajo reglas diferentes. Esto, sumado a que el neoliberalismo tiene una apoyatura fundamental en el sentido común hace que aquel que se plantee la superación de este sistema también tenga que tomar en cuenta este aspecto, es decir, el sentido común como campo de batalla.

¿Qué elementos tiene que tener en cuenta una resistencia que se posicione contra el neoliberalismo actual?

Hoy, la reflexión a la que se llegó es que que no se puede dejar el trabajo del sentido común al enemigo: se tiene que pensar. ¿Cómo se hace para no volver, para no repetir siempre la misma historia? Bueno, tenemos que pensar un sentido común de forma colectiva lo suficientemente articulado, fuerte emocionalmente, que no sea manipulable tan fácilmente con mentiras y actitudes cínicas. Entonces existe la obligación de pensarlo; nunca antes se habían propuesto eso. De esta manera se vuelve necesario considerar que la política necesita de la antropología, de las comunicaciones. Ese momento de reflexión sobre el sentido común tiene que ser una parte constitutiva de cualquier medida política social y económica que se tome porque de cualquier manera eso se comunica y de esta manera pasa a formar parte de aquel.

 

Nueva amenaza de desalojo para el Bauen

Nueva amenaza de desalojo para el Bauen

Con la finalización de la feria judicial, la Cooperativa de Trabajadores del Hotel Bauen reanudará las medidas de lucha para reclamar por la expropiación definitiva del edificio, luego de que la Corte Suprema rechazara a fin de año pasado un recurso extraordinario para no ser desalojados del inmueble de la Avenida Callao.

El primer golpe contra los trabajadores de la empresa recuperada se lo había dado el presidente Mauricio Macri, cuando en 2016 había vetado la ley que les efectivizaba la adjudicación del edificio. En diálogo con ANCCOM, Diego Ruorte, del Departamento de Compras de la empresa recuperada, explicó que “cuando se inicien las actividades en marzo volvemos otra vez a plan de lucha y a replantear el proyecto de expropiación en el Congreso, porque ya una vez vetado por el presidente, si el Congreso lo vuelve a avalar y a aprobar, el presidente no lo puede vetar”. Así, los cooperativistas redoblan la apuesta para defender sus puestos de trabajo.

Juan, uno de los trabajadores de la lavandería del Hotel Bauen.

El Hotel Bauen se inauguró en 1978 con motivo del Mundial de Fútbol. Para poder construirse, contó con un préstamo del Estado que nunca fue saldado y permaneció en manos de una empresa privada hasta 2001, año en que, en medio de la crisis económica, declaró su quiebra. En 2003 fue recuperado por sus antiguos trabajadores y desde ese momento hasta la fecha lo continúan gestionando. Lo hacen en permanente zozobra ante las sucesivas amenazas de desalojo. “Comprobamos que el dueño del hotel es el Estado ya que  fue adjudicado en la época de la dictadura y la empresa nunca devolvió su crédito inicial”, justificó Ruorte.

Durante los quince años que lleva el conflicto, los cooperativistas presentaron siete proyectos, en los que participaron economistas, sociólogos y abogados. “Los últimos están hechos con una conciencia económica sustentable ya que  el Bauen es una herramienta de trabajo, de inclusión y de sustentabilidad”, expresó Ruorte y agregó que “esto es una causa loable, nosotros tributamos, pagamos todos los servicios, no tenemos ni una deuda, demostramos que los trabajadores somos lo contrario a lo que fue el patrón porque generó deudas, quiebras, a los proveedores les dio cheques voladores… nosotros estamos haciendo todo al revés”.

Cuando la temporada es baja o cuenta con salones libres, el hotel ofrece el espacio para distintas organizaciones que lo solicitan. Actualmente son sede de talleres teatrales de verano. “Dentro de lo que es nuestro formato de cooperativa y asamblea, ideamos promover algunos simbolismos de los trabajadores, que son el espíritu solidario, la cooperación, la colaboración. Anteriormente se hacía solidariamente, hoy pedimos una colaboración para pagar la luz y el resto de los servicios”, agregó.

Los trabajadores Jorge , Abel y Lucas.

Además, en su interior alberga diferentes emprendimientos productivos vinculados a la alimentación orgánica y de producción nacional.  “A nosotros nos interesa, dentro del marco de lo que es el Centro porteño, donde tenés a Mc Donald’s y Farmacity por todos lados, dar visibilidad a un emprendimiento que muestre que hay otro tipo de economía y de acción, que no está motivada solo por el dinero. Como todo hotel estamos abiertos a un público mundial  y tenemos que mantener la marcas de primera línea, pero dentro de esos productos, incluimos los de las cooperativas”, contó. En esa línea, a fin de año (casi en sintonía con el fallo de la Corte), se inauguró en el hall del hotel el Almacén de la Agricultura Familiar, del Movimiento Popular La Dignidad, con el apoyo de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), que vende productos de otras cooperativas.

Ruorte forma parte de Bauen desde hace quince años, luego de suceder a su papá, que integró el staff del hotel desde su fundación. “Nunca recibimos subsidios, nunca fuimos apoyados por el gobierno en ese aspecto. La motivación nuestra es la de mantener nuestros 100 puestos de trabajo y seguir funcionando como cooperativa”.

El fallo de la Corte implica que una vez que se efectivicen las notificaciones a la Cámara de Apelaciones y al Juzgado comercial que llevan la causa de la quiebra, puede llegar la orden definitiva de desalojo. Mientras tanto, los trabajadores aguardan para dar lucha, una vez más.

 

“El FMI nunca va a aprobar un programa expansivo”

“El FMI nunca va a aprobar un programa expansivo”

“El malo de la película no es el Fondo, la impericia está del lado del Gobierno”, dictamina Emmanuel Álvarez Agis refiriéndose al acuerdo de la Argentina con el FMI. Déficit fiscal, deuda externa, inflación, dólar, tarifazo, ajuste y recesión son términos que suenan y resuenan en los medios y tiñen de incertidumbre el futuro de la población. Economista, docente de la Universidad Nacional Arturo Jauretche y director de la consultora PXQ, Álvarez Agis abre las puertas de su amplio pero sencillo departamento en el barrio de Palermo para arrojar luz sobre un debate que algunos prefieren no dar. Mientras pone el agua para el mate dentro del termo, comenta: “Son tiempos de austeridad, no vaya a ser cosa que la dejemos enfriar en la pava y tengamos que volver a prender la hornalla”.

Emmanuel Alvarez Agis, ex viceministro de economía y docente, sentado de frente.

Emmanuel Alvarez Agis, ex viceministro de economía y docente.

¿Era irremediable recurrir al FMI?

A esta crisis la defino como un tropezón que fue caída. Ni de cerca la economía estaba como para terminar con un acuerdo con el Fondo que técnicamente es el prestamista de última instancia. Lo que hicieron fue insólito, una comedia de enredos del actual equipo económico. El Banco Central agravó una corrida cambiaria, mostró debilidad y, al hacerlo, el mercado se puso nervioso.

Si usted fuera el ministro, ¿qué hubiera hecho?

Hubiera puesto una oferta de dólares muy fuerte por parte del Banco Central, con un valor deseable de entre 20,50 y 21 pesos, para estabilizarlo, hubiera subido la tasa de interés en un 40% desde un principio, y hubiera vendido todos los contratos de dólar futuro que pedía el mercado. Brasil lo hizo y la devaluación no fue ni un tercio de lo que fue acá.

Argentina es, históricamente, dependiente del financiamiento externo, ¿por qué?

En primer lugar, tenemos una estructura productiva deficitaria de base en materia de dólares, ya que el 30% de los insumos que necesita son importados. Cuando compramos un sachet de leche, un medicamento o un auto estamos consumiendo dólares, porque el componente importado para su producción es alto. En segundo lugar, está el tema financiero ya que cada ocho o doce años tenemos una devaluación fuerte. Si a esto se suma un régimen de políticas económicas que liberaliza el mercado, lo desregula y abre las importaciones, el problema se agudiza.

¿Cómo se logra mayor autonomía?

A través de una planificación sostenible, teniendo en cuenta la experiencia de países que ya se han industrializado pero que, aun así, protegen a los eslabones más débiles de sus economías. Francia lo hace con el aceite de soja, Estados Unidos con la producción de limones. Nosotros tenemos la economía invertida, nuestro eslabón débil es la industria y el fuerte es el campo. Deberíamos decir “viva el libre comercio para la soja pero no para las computadoras”, por ejemplo.

¿El gobierno de Cambiemos se apuró al abrir la economía?

El libre comercio es la panacea del funcionario público, cree que una vez ahí se puede echar a descansar. El gobierno pone de modelo a Chile, pero la producción de cobre chilena es estatal. Bolivia nacionalizó los hidrocarburos. En Argentina la soja es privada. Cuando hacés el cambio estructural de base, te podés dar el lujo de implementar políticas de libre mercado, si lo hacés antes de fortalecer los puntos débiles de tu economía, te fundís.

Emmanuel Alvarez Agis sentado de perfil, hablando con su mano levantada y un mate sobre la mesa.

“El malo de la película no es el Fondo, la impericia está del lado del Gobierno”, afirma Emmanuel Álvarez Agis refiriéndose al acuerdo con el FMI.

¿Qué opinás sobre los tarifazos?

El problema de las tarifas es el dogmatismo por parte del Gobierno. Cuando existe faltante de un producto, la solución está dada siempre por la baja de la demanda (consumir menos), o la suba de la oferta (producir más). Cambiemos, en vez de buscar generar más gas y aumentar la oferta, le dice a la gente que apague el piloto del calefón. La cuestión de fondo es para qué hacen los aumentos. La respuesta de Macri es para tener más energía en el futuro y recuperar el autoabastecimiento. Pero si mirás los números de producción de petróleo de gas (fuente de producción de la electricidad) tras un aumento acumulado de tarifas de un 1300%, el nivel de producción ha disminuido.

El Presidente vetó la Ley Antitarifazos porque, dijo, significaría un costo fiscal de 15 mil millones, ¿es así?

Es falso, ya que si bajan las tarifas la plata queda en manos de los consumidores que no evaporan o queman  el dinero, lo gastan, y al hacerlo contribuyen con el 21% de IVA. Y la empresa que les vende lo que compran paga el 35% de ganancias, por ende el fisco recauda igual.

¿Ya no sirve la excusa de “la pesada herencia”?

Cambiemos recibió una economía que tenía problemas complejos, pero la transformó en un tren fantasma. Para resolverlos virtuosa y no tortuosamente, probablemente la relación con Estados Unidos, el mercado y las empresas debía ser más tensa. Sin embargo, Macri configuró la economía para que el mercado haga y deshaga a su antojo.

¿Cuál es el impacto para la Pymes?

En los últimos dos años se han cerrado unas tres mil empresas. La situación cambia según te acerques o alejes de la General Paz. Las Pymes del polo industrial  más orientadas al mercado interno o a la sustitución de importaciones están cayendo a razón de dos dígitos desde 2016. Están al límite, se tienen que achicar a su mínima expresión y tratar de sobrevivir. En cambio, las que exportan pueden compensar la caída del mercado interno con la suba del dólar, no porque estén exportando más sino porque le dan más pesos por el mismo nivel de producción.

Emmanuel Alvarez Agis sentado en un sillón con las piernas cruzadas.

«Cambiemos recibió una economía que tenía problemas complejos, pero la transformó en un tren fantasma».

¿Cuál es la perspectiva para este año y el próximo?

Tenemos un déficit fiscal de 30 mil millones de dólares por año. Hay dos maneras de cerrar este déficit: o importás menos, achicás la economía y por ende te empiezan a sobrar dólares; o exportas más y empezás a generar más dólares por la vía expansiva. Cuando se va al Fondo la señal es “vamos a solucionar el déficit por la vía de la recesión”.

¿Por qué?

Porque el FMI nunca va a aprobar un programa expansivo en el cual la Argentina exporte 30 mil millones de dólares más en contra de EE UU, China o Europa. Argentina no le exporta a Júpiter, le vende a un país del mundo, y entonces, si exportamos más, hay un país que por definición va a producir menos. El mercado es uno y quien vende más gana mercado en detrimento de otro.

¿El economista olvida que detrás de los índices hay personas?

El economista es como un médico, la diferencia es que en vez de atender un enfermo trata con los habitantes de un país. La ideología entra cuando se piensa en que el paciente la pase mejor. Si hay un paciente con una gangrena, para que viva, el médico le tiene que cortar la pierna. El tema con un gobierno market friendly, como el actual, es que se te encarna la uña gorda del pie y te cortan la pierna por las dudas.

¿La economía maneja a la política o es a la inversa?

La economía le brinda a la política los bordes de la cancha y le indica que puede jugar dos metros a la izquierda o a la derecha. Si la política se va tres metros, queda fuera de juego. Los buenos políticos son los que juegan hasta el 2,10 del margen.

“Cuanto más dure este gobierno, más problemas estructurales va a generar”

“Cuanto más dure este gobierno, más problemas estructurales va a generar”

Si alguien despertara después de estar dos meses dormido y se encontrara con la situación actual de la economía, ¿cómo se le explica lo que acaba de ocurrir?

El problema es que Federico Sturzeneger, presidente del Banco Central, cree que la inflación es por emisión monetaria. Sostiene que el Banco Central imprime billetes, llena de pesos el mercado y eso se traduce en inflación. De esta forma, el Banco Central emitió las Lebac (Letras del Banco Central) en pesos. Cree que la mejor forma de sacar pesos de circulación es que el sistema financiero o los fondos de inversión lo compren con un determinado interés. Y para hacerlo atractivo puso una tasa de interés alta. En el 2016 llegó al 38 por ciento, cosa que es grave porque no había negocio en la Argentina que diera una tasa de rentabilidad tan alta como las Lebac. El gobierno de Macri, complementando esta medida, liberalizó la cuenta de capital de la balanza de pagos, es decir, le dio total libertad las inversiones financieras especulativas para entrar y salir en el momento que quisieran. Así se volcó toda la inversión a la Lebac y no a los dólares. Así se trajeron dólares del extranjero, se cambiaron a pesos, con eso compraron Lebac con una tasa de rentabilidad que ningún país del mundo tenía. Esto generó un crecimiento infernal del stock de Lebac al punto que la cantidad adeudada pasó a ser igual en dólares a las reservas que tiene el Banco Central, dejando a la economía argentina en una fuerte fragilidad. Y esa fragilidad quedó demostrada en las últimas semanas cuando los grandes bancos, como el JP Morgan, como no estaban conformes con ciertas políticas económicas de Macri, empezaron a vender las Lebac y a comprar dólares y se inició así una fuerte corrida cambiaria.

¿Cuál es el desacuerdo que los llevó a eso?

En principio no están conformes con la tasa interés que les pusieron, porque ellos entraron con una tasa del 38 por ciento y el gobierno en la conferencia de prensa de 28 de diciembre del año pasado la intentó bajar al 27. Otro punto importante es que no confiaban en que el gobierno genere las condiciones para pagarles la deuda y darle los dólares que querían obtener de rentabilidad financiera. Esto fue un negocio abismal para los bancos porque se fueron de las Lebacs, compraron dólares a 20 pesos y con una tasa interés de 27 por ciento y el famoso supermartes volvieron con un tipo de cambio a 25 pesos por dólar y la tasa interés al 42 por ciento, por lo que entre semana se llevaron 11 mil millones de dólares. Compraron más pesos que reinvirtieron en Lebac a una mayor tasa de interés y obligaron al gobierno a recurrir al FMI para que sea garante.

Respecto al supermartes, el ministro Luis Caputo consideró que hubo un voto de confianza a la política económica del gobierno y dio a entender que está todo bajo control. ¿Qué opinión tenés sobre eso?

Lo que hicieron los bancos es dar una tregua pero, ¿a qué costo? Pérdida de 11 mil millones de dólares de reserva, tasas por las nubes y una maxidevaluación de la moneda nacional con un recrudecimiento de la inflación. Esa tregua la termina pagando la pequeña y mediana empresa, la clase trabajadora, el jubilado. Es falso y la demostración clara es que ya el Banco Central perdió totalmente soberanía económica porque ahora cada martes que vencen las Lebac le va a tener que decir a los bancos que tasa interés quieren para poder renovarlas, porque imagínate vos que Sturzeneger le diga a los bancos que la tasa de interés no va a ser más de 42 por ciento, sino que va a ser de 16 porque quiere estimular la economía, darle crédito a las pymes. Los bancos salen a vender todas las Lebac. Si venden todas las Lebac y salen a comprar dólares el Banco Central se queda sin reservas. El Banco Central ya no maneja dos variables que son centrales para manejar la economía argentina: la tasa de interés y el tipo de cambio; ahora las va a manejar el sistema financiero del FMI.

Sturzenegger consideraba que la suba del dólar no debería impactar en el aumento de precios.

Eso ya está descartado, todos los días los diarios están reflejando el aumento de precios que estamos experimentando, sobre todo en alimentos, por culpa de la devaluación. En Argentina la devaluación siempre se traduce en inflación, porque acá la economía está fuertemente dolarizada y muchas empresas, sobre todo por insumos industriales, tienen dolarizada su tasa de ganancia con lo cual, si vos devalúas, te suben los precios y además por haber dolarizado los combustibles y las tarifas de los servicios públicos es imposible que no se traduzca la devaluación en inflación.

¿Porque los servicios públicos están dolarizados? ¿Qué significa eso?

Eso significa que los servicios públicos no sólo van a subir porque le van a quitar los subsidios que anteriormente tenían, sino que se aseguran a la tarifa a nivel internacional y en dólares. Si están dolarizados, tienen que subir la tarifa del servicio público en cada devaluación de la moneda nacional. Lo mismo pasa con el combustible, ellos toman el precio internacional del combustible y lo trasladan a la Argentina, entonces las petroleras quieren ganar lo mismo acá que en los otros países.

¿Hay algún motivo que explique la dolarización de las tarifas?

No, sólo el aumento de la rentabilidad de las empresas energéticas y petroleras con un agravante: el discurso de ellos dice que así las empresas van a invertir más en producción de petróleo gas y vamos a volver a la soberanía energética en la Argentina. Todos los datos del gobierno de Macri demuestran que está cayendo la producción del petróleo y gas y que estamos importando cada vez más energía.

Al momento de explicar la crisis los ministros recurren al argumento del factor externo y el del déficit fiscal. ¿Son esos los factores que la desencadenaron?

Es cierto que el mundo se volvió más complejo a partir de que Estados Unidos definió subir la tasa de interés de la Reserva Federal que es la referencia de todo el mundo. Eso hace subir la tasa interés a nivel mundial y Estados Unidos se transforma en aspiradora de dólares. Además se encarece el endeudamiento externo. En este contexto adverso para todos los países del mundo el país que tuvo la corrida cambiaría más fuerte y el único que tuvo que recurrir al FMI fue Argentina, con lo cual se demuestra que, si bien el contexto internacional puede ser adverso, el problema es que Macri generó un modelo económico muy vulnerable al shock externo. La fragilidad del modelo económico argentino es una construcción de Macri y cada problema que haya a nivel internacional va a terminar repercutiendo muy fuerte en la Argentina como pasaba en los ´90.

El gobierno señala que este es el camino correcto y que no queda otra. ¿Es así?

No, claramente no. Hoy necesitamos un modelo que apueste a la industrialización, que genere puestos de trabajo, que la inversión productiva esté por arriba de la financiera, proteger el mercado interno, hacer crecer los ingresos de los argentinos para que consuman. Para generar más independencia económica se necesita desendeudar a la argentina y regular el mercado cambiario, para que no haya fuga de capitales. Hay otro modelo distinto, que ya tuvimos. Y siempre es la misma pugna que tenemos que va de un modelo productivo de distribución del ingreso y generación de puesto de trabajo o a un modelo de valorización financiera y concentración del ingreso.

¿Con qué se va a encontrar el próximo gobierno y, en función de lo que describiste, como se sale de este problema?

Primero hay que ver hasta dónde llegan. Creo que uno de los objetivos es dolarizar la economía Argentina, con lo cual vas a tener más problemas. Cuanto más dure este gobierno, más problemas estructurales va a generar, más difícil va a ser salir y más difícil será para el próximo gobierno poder resolverlos. Por eso yo creo y confío que se termine lo más rápido posible porque si un gobierno con esta característica dura 8 años, los problemas estructurales que generan son un montón y con lo cual al próximo le va a costar desamar.

Si le tocara ser el ministro de economía en 2019, ¿cuáles serían las medidas que tomaría?

Lo primero que hay que hacer es ver como renegociar la deuda, porque es el gran problema que van a dejar, para que los recursos se destinen, en vez de a pagar intereses, a la obra pública, al mercado interno, a reactivar la economía y generar puestos de trabajo. El primer problema que el próximo gobierno va a tener que resolver el problema de la deuda, negociar con los bancos quita de capitales e intereses.

Los senadores votaron y Macri va por el veto

Los senadores votaron y Macri va por el veto

La Cámara de Senadores aprobó esta madrugada, con 37 votos a favor y 30 en contra, la Ley de Emergencia Tarifaria que retrotrae el precio de las tarifas al 1 de noviembre del año pasado y limita la actualización por encima del índice de variación salarial. Sin embargo, el jefe de gabinete Marcos Peña anunció esta mañana que la ley está vetada, con lo cual el aumento llegará de la mano del frío. El senador oficialista formoseño Luis Naidenoff agregó: “el veto en estas condiciones es una necesidad política”.

Después de once horas de sesión, la senadora Cristina Fernández de Kirchner cerró, con 52 legisladores ausentes, las exposiciones de los legisladores del bloque FPV-PJ. En su discurso sostuvo que “la impunidad mediática” es lo que le permite al gobierno implementar políticas económicas de ajuste. “¿Alguien se puso a pensar la angustia de la gente sentada frente a las boletas de luz, gas y agua?”, se preguntó la ex presidenta. “¿Qué inversiones trajeron ustedes si las que están haciendo son en Vaca Muerta?”, cuestionó la senadora antes de recordarle a Gabriela Michetti que ella siendo diputada se opuso a la estatización de YPF.

En su discurso le recordó a la presidenta del Senado que cuando era oposición había tuiteado: “No hay que subir las tarifas, hay que favorecer a la gente más humilde que paga muy caro los servicios”, permitiéndose la ironía que muy poco le gustó a Michetti. En otra comparación entre las obras de su gobierno y las de actual, Cristina dijo: “A nosotros nos gusta la patria, nos gustan los próceres. Ustedes pónganle el puma salvaje o el yaguareté mimoso cuando inauguren alguna”. A las 2.30 #YaguareteMimoso era trending topic en Twitter. 

Cristina Fernández de Kirchner en su banca del Senado de la Nación.

Fernández de Kirchner fue una de los 37 senadores que votaron a favor de la Ley de Emergencia Tarifaria.

La semana arrancó caliente: en un video el Presidente Mauricio Macri le pidió a la oposición que no sigan “las locuras de Cristina Fernández de Kirchner” y recomendó el uso de lamparitas led para ahorrar energía. Se reunió, luego, con senadores de la oposición para tentarlos con la baja de algunos impuestos en las tarifas. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se juntó con distintos gobernadores justicialistas para que sus senadores voten en contra. Nada de eso funcionó, el gobierno no pudo frenar la unión de los bloques opositores en el Congreso. Igualmente, Macri ya había anunciado el veto.

El primer senador oficialista en hablar en el recinto fue Esteban Bullrich que arrancó con una ironía a Cristina. Calificó de “demencial” la política del gobierno anterior y aclaró que no quería “herir susceptibilidades”. El senador retomó así la “discusión virtual” que comenzó el lunes el Presidente cuando llamó “loca” a Cristina y ella tuiteó que “tratar de loca a una mujer es típico de machirulo”.

El senador calificó a la ley de “inconstitucional, demagógica e irresponsable”. También afirmó que la propuesta de la oposición no soluciona la crisis energética.

Otro de los datos salientes de la jornada fue cuando después de 5 horas de sesión, el periodista de El Destape Juan Amorín difundió en Twitter tres fotos que le sacaron a la pantalla del celular del senador Federico Pinedo. Se veía una conversación de WhatsApp en la que el legislador recibía órdenes directas del ministro de Interior, Rogelio Frigerio. “Yo lo mandaría al frente a Pichetto (senador opositor) como autor de nuestra propuesta”, decía el mensaje que Frigerio le mandó a Pinedo a las 15.33, en plena sesión. “Así lo haré”, le respondió el obediente senador. A los pocos minutos el tuit se viralizó.

“Cuando yo era chico, interferir en las comunicaciones o violar la correspondencia era un delito. Ahora no, es una cosa más o menos normal”, aclaró Pinedo antes de obedecer la orden del ministro. “Pichetto es el autor del proyecto de rebaja de IVA, que nosotros impulsamos”, dijo.

Pinedo en su banca del Senado trabaja con su computadora personal y teléfono celular.

La imagen del celular de Federico Pinedo hizo pública una conversación con Rogelio Frigerio.

Frigerio le mandó otro mensaje a Pinedo que decía: “Lucila (Crexell) amenazó con la abstención. Creo que la convencí”. La senadora neuquina Crexell integra el bloque del salteño Juan Carlos Romero. El martes fue recibida por Macri junto con los senadores Cristina Fiore, del Partido Renovador de Salta, Guillermo Pereyra del Movimiento Popular Neuquino (MPN), y Carlos Alberto Reutemann, de Alianza Cambiemos Santa Fe.

La senadora Crexell negoció con el ministro de Agroindustria, Luis Etchevehere, y con Frigerio la prórroga de la Ley de Emergencia Frutícola a cambio de su voto en contra de la Ley de Tarifas. La senadora confirmó que Etchevehere ya firmó y Macri, al igual que Frigerio, se comprometió a que se la prorrogue. Así evitaron la abstención de la senadora neuquina, Que igualmente sostuvo que siempre estuvo entre el voto negativo o la abstención.

El senador Carlos Saúl Menem llegó al recinto a las 14 en punto, hora pautada para que empezara la sesión, acompañado por su hija Zulemita. Se sentó en la banca, se paró, cantó el Himno Nacional y se fue. Fue el único senador que no tuvo nada arriba de su escritorio en toda la sesión. El ex presidente tiene 87 años y varias causas en la justicia. Por una de ellas debería pasar 7 años en prisión por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia.

Doce horas después de haberse ido del recinto, el ex presidente volvió a entrar, escuchó una parte del discurso de Pichetto y el de Naidenoff, votó a favor y se fue nuevamente. “Si lo trajeron, es porque va a votar”, confirmaron fuentes cercanas al riojano.

A pesar de las reuniones de Macri con senadores, ministros y gobernadores con las que el oficialismo intentó frenar la unidad parlamentaria entre los bloques opositores, no pudo evitar que se votara a favor de la emergencia energética. “A la oposición la une el afán de esmerilar a un gobierno más que construir un proyecto que le sirva a la gente”, expresó a ANCCOM el senador oficialista Luis Naidenoff. Para el diputado Felipe Solá la unidad es “importantísima ante cosas que son indignantes y van en contra de la gente”.

Gabriela Michetti escucha a los oradores desde la presidencia del Senado.

En plena sesión, Cristina Fernández le recordó a Gabriela Michetti su voto en contra de la estatización de YPF.

La senadora de Río Negro del bloque Frente Progresista Magdalena Odarda opinó: “Que se hayan unido bloques que antes no encontraban puntos de acuerdo para frenar el aumento de tarifas en la Cámara de Diputados y Senadores es un buen síntoma. Es bueno que haya unión entre los que pensamos similar”.

La Ley de Emergencia de Tarifas fue una propuesta del bloque Argentina Federal y del Frente Renovador. Obtuvo media sanción el 9 de mayo cuando 133 diputados votaron a favor, 94 en contra y 3 se abstuvieron. Anoche 37 senadores aprobaron el proyecto sin ninguna modificación, tal cual venía de la Cámara Baja. Algunas horas después de aprobado, tal como lo había anunciado el ejecutivo se anunció el veto a la norma.