Unidos y federales

Unidos y federales

Se agota el ancho y, hasta donde se vio, el largo de la 9 de Julio. La columna sur se derrama sobre ella al ritmo de bombos lejanos. La serie de banderas, alterna colores: agrupaciones sindicales, estudiantiles, organizaciones barriales, fábricas recuperadas, PyMEs y organismos de Derechos Humanos, entre otros. Encabezada por Avellaneda, y respetando cierto orden geográfico, a medida que la columna avanza se visualizan agrupaciones del sur de la provincia de Buenos Aires y de ciudades patagónicas. La misma imagen se repite en los frentes norte y oeste: todos convergen en la 9 de julio y así comienza a concluir la Marcha Federal que se inició tres días antes, el 31 de agosto, en todo el país, bajo la consigna: «Un pueblo movilizado para terminar con el tarifazo, los ajustes y los despidos». El cierre es en Plaza de Mayo a las 17. La Marcha Federal es una de las tantas costumbres noventistas que se retoman este año.  

Entre la organizada heterogeneidad de banderas, se destaca -algunos metros detrás del telón del Frente Ciudadano de Avellaneda- la figura de San Cayetano, cargada sobre los hombros de dos manifestantes. A su paso, suspendido en el aire, va recibiendo reverencias, agradecimientos y rezos breves. La imagen del santo, ornamentada con flores blancas, sostiene un cartel que se queja: «Lo que San Cayetano te da, Macri te o quita». Encabeza ese grupo el Frente Ciudadano de Isla Maciel, con el Padre Francisco «Paco» Olivera, párroco de Nuestra Señora Fátima. 

Previo a la marcha, la columna sur se nucleó en la Plaza Alsina de Avellaneda, en dónde el intendente Jorge Ferraresi presidió un acto en el que además hablaron representantes de las provincias de Neuquén y Chubut y Jorge Baradel, titular del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Provincia de Buenos Aires (Suteba). «Fueron discursos que hablaron de la unidad del campo popular, de la lucha contra este gobierno neoliberal que nos está sacando día a día los derechos», comenta el Padre Paco, sosteniendo una bandera blanca con letras gruesas y rojas que piden por la libertad de Milagro Sala. «Tres curas de la Opción por los Pobres hicimos una pequeña oración pidiéndole fuerza a San Cayetano para que sigamos en la lucha», agrega inmediatamente, con los ojos azules distraídos en el flamear de la bandera. «Después nos sumamos a la marcha por el Puente Pueyrredón, puente histórico, dónde los trabajadores cruzaron para exigir la libertad de Perón hasta llegar a Plaza de Mayo».

A medida que avanza por la avenida, reducida a dos carriles por la doble hilera de micros estacionados, la columna se va nutriendo de otros grupos de manifestantes que desembocan desde las calles aledañas. En avenida Belgrano se desvía para encaminarse finalmente por la Diagonal Sur hasta Plaza de Mayo.

Los Curas en Opción por los Pobres, cuenta el Padre Paco, están repartidos en las distintas columnas. Algunos partieron desde Jujuy y llegarán al último punto de encuentro desde La Matanza, encarando el tramo final por Avenida de Mayo. «Nosotros no entendemos que ser cura pueda ser de otra manera. Yo siempre digo que el día que vea un alma caminando, a lo mejor cambiaré. Somos personas de carne y hueso, con necesidades. Creo en un Dios que comparte el pan, que es pan partido y compartido para todos, un Dios que dice ´no matarás y el hambre es un crimen´, un Dios que quiere que vivamos con dignidad y si no hay trabajo, aunque tengamos el pan, no estamos viviendo con dignidad. Un Dios que no quiere que explote un hermano a otro hermano».  

Inmediatamente detrás del Frente Ciudadano de Isla Maciel marcha ATECH, Asociación de los Trabajadores de Chubut. Melisa y Luján, de Puerto Madryn y Rawson, repasan el recorrido que arrancaron el 31 de agosto en Comodoro Rivadavia. Pasaron por Trelew en un acto en el Museo de la Memoria, en el lugar en donde ocurrieron los históricos fusilamientos, pasaron por Puerto Madryn, por Viedma, siguieron por Bahía Blanca, después por Tres Arroyos, Necochea y Mar del Plata, para llegar ahora, dentro de poco más de una cuadra, a Plaza de Mayo. «En todos lados se iban sumando compañeros», aclara Melisa, tan orgullosa como cansada después de tantos kilómetros. Toma mate para mantenerse a ritmo, estimulada también por la masividad de la marcha.

En relación a la situación de Chubut, Luján advierte: «Está en un momento muy crítico. Yo trabajo en la construcción y cada vez hay menos trabajo. Se pararon los planes Procrear y tampoco se están cobrando las becas Bicentenario. El gobernador (Mario) Das Neves persigue a los dirigentes sindicales. No hay derecho a manifestarse, están echando gente por sumarse a las marchas y a los reclamos”. Como docente, Melisa plantea que su situación es igual de delicada: «Los profesores y maestros estamos de paro porque la inflación ya nos comió el salario. Nuestra paritaria cerró en 24% y la inflación ya está alcanzando el 50. Pero si paramos, somos malos docentes porque no vamos a trabajar».

Una vez a orillas de la Plaza, la columna se detiene. La voz metálica y enardecida de la locutora anuncia a través de los parlantes la incansable lista de agrupaciones que están marchando para finalmente estimar una convocatoria de más de 200.000 personas. Cada grupo responde al anuncio de sus siglas con cánticos particulares, aunque hay un canto que abarca toda la plaza: «Unidad, de los trabajadores».

Arriba del escenario que fue montado de frente al Cabildo, se termina de condensar el paisaje de diversidad y la consigna de unión. Allí se encuentran gremialistas de diferentes centrales obreras, como Daniel Catalano (ATE Capital), -quien se encargará de leer una carta escrita por la dirigente jujeña ilegalmente encarcelada Milagro Sala– Roberto Baradel (SUTEBA), Sergio Palazzo, (Bancarios), Víctor Santa María (Trabajadores encargados de edificios), Eduardo Lopez (UTE), Omar Plani (Canillitas), Pablo Moyano (Camioneros), junto a los principales oradores del acto de cierre, Hugo Yasky y Pablo Micheli (CTA Autónoma). También algunos dirigentes políticos como Alejandro Godart (MST), Daniel Filmus (Diputado del PARLASUR), Carlos Tomada (FPV), entre otros. Además están presentes Estela de Carlotto y Taty Almeida, junto a otras Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, ovacionadas y reconocidas por todos los presentes.

Cuando le toca su turno, Micheli no da rodeos: «Hay que dejarse de joder con el sectarismo y con el interés individual o corporativo. Hay que pensar en la patria y en nuestro pueblo, sin perder la identidad. Las diferencias las discutimos en la calle codo a codo, no tirándonos piedras”. A continuación le responde al Ministro de Trabajo, Jorge Triaca, quién el jueves por la mañana declaró que la marcha tenía “tintes políticos e ideológicos”: “No queremos ajuste, esa es nuestra ideología”, replica Micheli, antes de rematar: “Ajuste violento o gradual, ese es el debate del equipo económico. Ni violento, ni gradual, ajuste las pelotas. No vamos a pagar con despidos, suspensiones, rebaja salarial, salario indigno, impuesto a las ganancias, precariedad laboral”.

Antes de ceder el micrófono, Micheli aborda el tema de las paritarias apuntando contra el discurso oficial: “Desde el Gobierno hablan de darles tiempo, pero cuando tienen que transferir recursos a mineras y al capital concentrado tienen una celeridad pasmosa. Mientras que, para reabrir paritarias, comienzan a poner peros”.

Hugo Yasky lo sucede en la palabra, como último orador, marcando que el acto fue posible gracias a la convergencia de movimientos sindicales y estudiantiles, organizaciones de derechos humanos, PyMEs y pequeños productores del agro, trabajadores informales, empresas recuperadas y organizaciones de izquierda. “Esta unidad”, sostiene, “es el mapa del campo popular que el neoliberalismo quiere dividido. Si construimos la unidad con la convicción de la lucha para la liberación, emancipación y justicia social, entonces somos invencibles.”

Gran parte de la ovación se convierte en abucheos cuando el titular de la CTA agradece a Pablo Moyano, diciendo que “no hubiese sido lo mismo sin tantos compañeras y compañeros de la CGT. Por debajo, la unidad entre esa central obrera y la CTA crece y se hace fuerte –continúa Yasky- y nos permite decir que estamos en el camino de la construcción de un sujeto colectivo que va a tener la agenda social que el gobierno se niega a discutir”. En sintonía con Micheli, retoma una frase repetida insistentemente por los funcionarios del gobierno de Cambiemos, y en especial por el Presidente Mauricio Macri: “No somos nosotros los que ponemos palos en la rueda. Al contrario, al Presidente le decimos que nosotros queremos sacar los palos de la rueda que metieron en nuestro salario. No queremos un bono para llegar a fin de año, queremos un salario para llegar a fin de mes”.

A continuación, Yaski refuerza en los temas abordados por Micheli y hace hincapié en las consecuencias del aumento de tarifas de los servicios de luz, agua y gas. “Necesitamos que a las PyMEs no se las desparrame con tarifazo, y que una familia no tenga que elegir entre comer o pagar tarifas”, reclama, antes de llamar a una nueva marcha de unidad sindical para el 16 de septiembre, día en que se tratarán, en audiencia pública, los nuevos cuadros tarifarios. “Las centrales sindicales, las dos CTA y los compañeros de la CGT, vamos a convocar a estar movilizados, presentes y discutiendo el nuevo cuadro de tarifas”, afirmó. De esta forma, Yaski anunció los pasos a seguir, en consonancia con lo que Micheli había advertido unos minutos antes: “Va haber paro nacional más temprano que tarde”. “O cambia la política económica o acá va a haber lucha todo el tiempo, con paro y movilizaciones, a lo largo y ancho del país. A no conceder un solo milímetro de las cosas conquistadas”.


Actualizado 04/09/2016

Los chicos fuera de juego

Los chicos fuera de juego

Sábado a la tarde en Villa Crespo, cinco categorías infantiles de Atlanta reciben a San Lorenzo por el torneo FEFI. En la canchita, se ve a niños de todas las edades vestidos con los colores amarillo y azul. También están las dos hinchadas, con banderas de por medio; frente a ellas, los dos bancos de suplentes. Las cinco categorías que van a jugar esa tarde son: 2004, 2005, 2006, 2007 y 2008. Los pibes que no juegan se divierten en la cancha de afuera, a la espera que empiecen los partidos.

Antes de salir a la cancha, los técnicos se juntan con sus jugadores en el vestuario y dan la última arenga. Después, posicionado cada uno en su terreno, los equipos arman una ronda: todos dicen que saben que lo más importante es salir a divertirse. Los chicos, los técnicos y los padres dicen saben que, ante todo, el fútbol es un juego. Lo trascendental, señalan, es inculcarles a los chicos la pertenencia a un grupo, saber comportarse dentro de él y aprender a ser buen ganador y, sobre todo, buen perdedor. “A veces se confunde la competencia con la exigencia. La competencia es propia del aprendizaje. El tema es que no es el objetivo. Ahí está el problema. Hay que tener paciencia. Lo estamos formando como jugadores y personas. Es por eso que hay que saber trabajar a través de las emociones, para no sacarles confianza”, cuenta Daniel  Bloch, entrenador en las inferiores de Deportivo Español, a ANCCOM.  Todo eso parece estar claro antes del pitido inicial. Sin embargo, la cosa cambia cuando la pelota se pone a  rodar. Cuando el juez da comienzo al partido, los murmullos aparecen. Las frustraciones de los adultos brotan en insultos hacia los niños. Las presiones, en las caras y los llantos de los chicos. Abran cancha. Cuando el silbato suena, los protagonistas ya no son los jugadores.

«Antes de salir a la cancha, los técnicos se juntan con sus jugadores en el vestuario y dan la última arenga».

Categoría 2008. Chicos de ocho años. Por un lado, los jugadores del Bohemio con su camiseta amarilla y azul. Por el otro, los cuervos vestidos de azulgrana. “La próxima enganchalo y seguí. Bien igual”, le dice el técnico a su jugador mientras lo aplaude. Minutos después, tras recibir un gol en contra, le grita al mismo jugador: “Tocala. No te entretengas con la pelota. Jugá fácil o salís”. Durante el partido, la línea que separa el aliento y los gritos tácticos con los retos es muy confusa. Tanto de parte de los técnicos como por parte de los padres. Los pibes reciben esa presión de diversas formas. Algunos siguen jugando y se divierten, otros putean hacia adentro cuando algo les sale mal y están aquellos que se ponen a llorar cuando su error provoca un gol contrario. Esos son las tres partes del triángulo que conforman el fútbol infantil actual: los chicos, los padres y los técnicos.

El chico

Córner para San Lorenzo. Un despeje deja al once de Atlanta mano a mano con el arquero y tras un puntinazo, el Bohemio se pone arriba. La hinchada grita el gol. El pibe de ocho años se besa el escudo y con las dos manos le dedica el tanto a todos los presentes. Jorge Valdano, jugador y campeón del mundo con Argentina, asegura que los chicos en la actualidad imitan lo secundario de los jugadores: sus festejos, sus vivezas. Sin embargo, lo fundamental queda de lado. “He visto a un muchacho metiendo un gol y besándose luego el anillo, como hace Raúl. Raúl se besa el anillo como homenaje a su mujer; ese muchacho no tiene anillo, ni mujer, pero tiene a Raúl como modelo y empieza por imitar lo secundario. De Raúl hay que imitar su entrega, su profesionalidad, su capacidad de superación. Su ambición. Desde ese punto de vista, es un modelo que para los chicos puede resultar muy inspirador. Pero entiendo que todo tiene que ver con una gran fantasía: todo padre quiere tener en su hijo a una gran figura en ciernes. Creo que eso termina provocando malentendidos de todo tipo”, comenta Valdano en una entrevista en el diario El País, en la que se refiere al crack español, Raúl González Blanco.

“Hoy te voy a dedicar un gol”, dice uno de los jugadores de Atlanta con quien esta cronista habló minutos antes de su partido. “Así que quedate acá así te ubico”, agrega. Al terminar el encuentro, la derrota le cambia la cara. Es cierto que el equipo contrario fue superior, pero por momentos tuvieron buenos pasajes de fútbol. “Buena jugada y mejor habilitación en el 2-3”, comenta la cronista. Su cara no cambia. “Hoy jugué muy mal”, dice. Se va sin saludar.

«Todo padre quiere tener en su hijo a una gran figura en ciernes».

El pibe se va mal porque sabe que jugó mal. Ahí no está lo importante. El pibe no se divirtió. Antes de su partido, el último de la larga jornada, había estado peloteando con sus compañeros. Su cara nada tenía que ver con la que presentaba horas después adentro de la cancha. En el prólogo de La infancia hecha pelota, Roberto Fontanarrosa retoma lo que dijo Alfredo Di Stéfano, “Nadie dice ´voy a correr al fútbol´. ´Voy a jugar al fútbol´ es la frase habitual”. Sin embargo, cuando la pelota gira por los tres puntos, nada queda de juego para algunos chicos.

Cuando se juega, ambas partes quieren ganar. Sin embargo, todos los actores declaman que lo más importante para niños de entre 7 y 11 años debería ser pasar un buen rato. “Tenemos que entender que si bien nuestro objetivo es la formación de la persona, muchas veces la cultura de la inmediatez que existe en el fútbol provoca que los chicos pongan el resultado por encima de la formación. Eso es culpa nuestra, de los adultos, que alentamos muchas veces el resultado porsobre el juego”, expresa Daniel Bloch.

En los cinco partidos de la jornada, dos arqueros diferentes se pusieron a  llorar. Primer partido, córner para los contrarios. El arquero, con el doce en la espalda, queda a mitad de camino. Su técnico le grita desde afuera mientras él, aún, está sacando la pelota de adentro del arco: “No podés dejar que te anticipen así”. La forma en que lo dice, con gestos incluidos, es lo que provoca malestar en el niño. Desde la hinchada, un grupo de chicos de 7 años reconoce que su compañero está llorando. “Mirá, se puso a llorar”, comentan entre ellos. El partido se para. El técnico, ahora sí, se acerca, lo abraza y le dice algunas palabras de aliento. Sus compañeros se acercan para motivarlo. El partido se retoma y, todavía con la cara mojada, el doce despeja un mano a mano.

Segundo partido, pelotazo desde mitad de la cancha. El arquero calcula mal y se le escabulle entre las manos. Un compañero lo mira y le hace un gesto de desapruebo. El arquero se pone a llorar y se queja con el árbitro. Pide que se cobre una falta anterior inexistente. El árbitro lo calma y su técnico entra a la cancha. Lo alienta. Entre los dos tratan de calmarlo. Cuando el juego se reanuda, el técnico le apunta al árbitro: “Era falta”. El juez lo mira incrédulo después de lo que acaba de pasar.

No todos, pero algunos pibes sientes presión cuando los puntos están en juego. “A los chicos les enseñamos a ganar y perder. Tenemos que enseñarles a que aprendan a soportar la derrota. Si el chico viene a jugar y se va llorando o sufre, es un fracaso para la institución. Sin embargo, muchas veces la presión que traen desde afuera es la que canalizan cuando algo les sale mal. A veces hablamos con los padres porque los chicos manifiestan las presiones que traen desde afuera”, sostiene Carlos Di Senzi, Coordinador de Fútbol Infantil de Altanta.

Una vez más la sabiduría de Fontanarrosa en el prólogo del libro de La infancia hecha pelota: “Lo que se busca no es alejar a los pibes de un juego que, como bien calificaron los ingleses, sus inventores, es el más lindo del mundo. Sólo se trata, me figuro, de un intento de recuperar el placer del juego por el juego mismo, el juego como finalidad en sí, sin que el chico tenga que sufrir la crispación que se va cristalizando en torno a él”.

“A los chicos les enseñamos a ganar y perder. Tenemos que enseñarles a que aprendan a soportar la derrota».

El técnico

“Antes existía el entrenador, y nadie le prestaba mayor atención. El entrenador murió, calladito la boca, cuando el juego dejó de ser juego y el fútbol profesional necesitó una tecnocracia del orden. Entonces nació el director técnico, con la misión de evitar la improvisación, controlar la libertad y elevar al máximo el rendimiento de los jugadores, obligados a convertirse en disciplinados atletas”, describe Eduardo Galeano en El fútbol a sol y sombra. En el fútbol infantil, tomando los términos del escritor, el director técnico debería abrirle la cancha al entrenador. “El rol del club y del técnico es, en primer lugar, brindarle al chico un lugar de pertenencia dentro de un grupo. Lo segundo, entrenarlo técnica, táctica y físicamente; pero sobre todo psicológicamente”, explica Di Senzi. La presión que reciben los chicos a la hora de competir, no solo afecta su rendimiento deportivo, sino también su vínculo con los compañeros y placer por el juego.

Es el técnico el que debe cumplir el rol de acompañamiento. Sin embargo, muchas veces, cuando el juego está en marcha, la adrenalina le gana a la cordura. Antes y después de terminar el partido, el entrenador se junta con todos sus jugadores en la cancha y, en una ronda, les da unas palabras de aliento. Durante el encuentro, se lo escucha felicitarlos a pesar de que la jugada haya fallado. Sin embargo, por momentos, algo estalla. “Como entrenadores tenemos que saber que el formador está por encima del entrenador. Lo principal es formar personas. Durante los partidos, me gusta alentar a los pibes y dejarles un mensaje claro. Si me voy del partido y le mando mis frustraciones a los nenes estoy dejando un mensaje erróneo. Esa situación se ve muy seguida en los partidos infantiles”, cuenta Bloch.

En el partido de la categoría 2006, el jugador con el 11 en su espalda no puede parar la pelota. Le ocurre lo mismo en dos jugadas sucesivas. En ambas oportunidades, el equipo contrario recupera la pelota. A la tercera, el técnico le grita al 22 que le pase la pelota al 11. Le queda atrás y la vuelve a perder. El entrenador, enojado, se da vuelta hacia el banco mientras larga unos insultos en voz baja. “¿Sabés? No se la pasés más. Está en cualquiera”, le grita al 22. Nuevamente, gira hacia el banco y llama a un nuevo jugador. El 11 sale reemplazado.

“Nuestra política no es ´ganar cueste lo que cueste´, pero es cierto que en varios clubes esto es así. Los técnicos les enseñan a sus jugadores que quienes tienen enfrente no son sus contrincantes, sino sus enemigos. En esos lugares, los partidos son cuestiones de vida. Por ahí pasan las frustraciones muchas veces de los técnicos. Yo me he retirado de clubes donde la hostilidad era tal que preferí regalar los puntos. No venimos a reemplazar nuestras frustraciones por una jornada”, enfatiza Di Sanzi.

“Como entrenadores tenemos que saber que el formador está por encima del entrenador. Lo principal es formar personas».

Los padres

Están los padres que llevan a sus hijos a divertirse, y los que ven en los chicos un plazo fijo, una promesa a futuro para una posible salvación económica. También están aquellos que vuelcan sus frustraciones de jóvenes en los niños. “Hace nueve años que dirijo torneos infantiles. No todos los fines de semana ocurren agresiones entre los padres, pero sí de vez en cuando. Lo más grave que me tocó presenciar fue un padre que entró a pegarle a su hijo por cometer un error en un gol contrario”, cuenta el árbitro de la jornada, Lucas Delgado.

Son pocas las situaciones extremas que se viven dentro de la cancha porque cuando eso ocurre el club es el encargado de hablar con el padre y, en un caso excesivo, echarlo. Es más común escuchar frases del estilo: “Dale, poné más huevo. Metete en el partido”, “Eso te pasa por no estar concentrado. Tenés que concentrarte”.

“Una vez tuvimos que echar a un padre del club porque agredió físicamente a su hijo. Él volcaba sus frustraciones en el chico. El pibe era arquero. Sus padres estaban separados y nos llegó el rumor que un año después se anotó en otro club para jugar de nueve. La madre y el chico lo hacían a escondidas de su padre”, recuerda Di Sanzi. Ahí está, el padre que vuelca su propia frustración en el hijo. Sin embargo, también aparecen aquellos que ven una salvación económica al tener una promesa dentro de su casa. Casi ninguno lo confiesa, pero el tema está latente. “Cinco goles metiste. Pedile lo que quieras hoy a tu papá, en un futuro te va a pedir él a vos”, se escucha al terminar el partido de la categoría 2006. La frase queda en el aire, desdibujada por las risas.

Muchas veces, cuando un padre ve que un técnico maltrata a su hijo porque cometió un error, él no se enoja. Incluso puede llegar a pensar que es buen técnico si el equipo en el que juega su hijo gana. El objetivo es que la promesa se transforme en jugador profesional. Y otra vez Fontanarrosa ayuda a describir esa disyuntiva: “¿Será posible que un chico que no llega a los 10 años pueda soportar la carga de ser sostén económico de su familia jugando al fútbol? ¿Qué diferencia hay entre eso y la explotación de menores o el trabajo infantil?”

En los últimos años, la mercantilización del fútbol dañó mucho este deporte. Algo notable en el fútbol infantil, donde los chicos no deberían ser tratados como jugadores profesionales. Carlos Tévez, a principios de julio, brindó una entrevista a Líbero y contó el panorama del fútbol argentino: “El fútbol argentino está mal en lo que refiere a inferiores, no solo Boca. Eso preocupa porque en unos años ya no van a existir los Banega, los Di María, los Mascherano. Ahora es todo resultadista. El técnico de la novena quiere salir campeón porque si no se va. Por eso, no le enseña al pibe cómo cabecear, ni a manejar la izquierda. Lo más importante hoy es que el chico corra, se lleve todo por delante y gane. Esta dinámica es así hasta llegar a primera. Se perdieron los valores del fútbol. Los chicos tienen que aprender el deporte, el fútbol. Enseñarles que se gana, que se pierde y, lo más importante, que en la mayoría de las veces se pierde. Esa cultura se ha perdido”. Si a eso se le suma la presión de los padres y los técnicos para formar un futuro crack, el pibe queda fuera de juego. “Hoy en el fútbol rige la cultura de la inmediatez, sin entender que hay un camino antes de llegar a la meta”, cuenta Bloch.  Una vez más Fontanarrosa supo ver la realidad: “Nadie tiene derecho, se me ocurre, a frustrar los sueños de un pibe. Pero también deberíamos decirle, procurando aportar una pizca de realismo a su fantasía, que a la mañana siguiente habrá que despertarse para ir a la escuela y que, en una de esas, le tomen prueba de geografía”.

Actualizado 31/08/2016

Una Guía Té surrealista

Una Guía Té surrealista

Explicar este proyecto no es tarea fácil, se corre el riesgo de que no sea comprendido, o que algún lector ansioso por las noticias del día se tome la cuestión a la ligera. Pero los casos que pasan por el programa de Anabela Ascar, en Crónica TV, existen más allá de la pantalla y “Guía Té” es una de las tantas rarezas que se presentaron en ese canal para desplegar su universo kitsch.

Su creador se llama André Demichelis, tiene 30 años, alguna vez fue estudiante de Comunicación Social, colectivero efímero y, ante todo, es un buscavidas. Oriundo de Wilde, hoy vive en Congreso y adquirió fanatismo por escribir microrrelatos ficcionales sobre distintas líneas de colectivos, luego de un breve paso como chofer de la línea 24 que une Wilde con Villa del Parque, cuando tenía 20 años. También cuenta con otra experiencia como conductor: un solo viaje en la línea 41, de Boedo a Munro, pero sin llegar a destino, “porque me volví antes”, confiesa André.

Fue en ese momento, cuando entre vuelta y vuelta, empezó a escribir situaciones que veía arriba del bondi: “Además de lo que iba imaginando en mi cuaderno, un par de veces dejé colgando una libretita y una lapicera arriba del colectivo que manejaba para que los pasajeros escribieran algo sobre sus viajes. Algunos se copaban, otros escribían insultos o figuras fálicas”.

Foto: Gentileza Guia Te

Hay producciones hechas con collage, dibujos con marcador, pinturas, y otras completamente digitales.

Demichelis cuenta que ahora ya se da maña, con Photoshop y Corel, para encuadrar y ajustar imágenes y texto, pero que al principio, cuando arrancó en 2014, no sabía cómo hacer y dependía para todo de la imprenta. Con ayuda de las redes y contactos fue escribiendo a distintos ilustradores y así cada microrelato adquirió imagen.

Hay producciones hechas con collage, dibujos con marcador, pinturas, y otras completamente digitales. Se propuso lograr que el costo de impresión se cubriera con la comercialización en bares y no con el dinero de su propio bolsillo. En esta suerte de venta ambulante “a voluntad” ha recibido de todo: “Desde gente muy entusiasta, a nada. Lo máximo fue un trueque que hice con una chica. Ella me dio una tarjeta INCAA que me sirvió para ir muchas veces al cine por 80 centavos”.

En dos años junto a más de 80 ilustradores, predominando el género femenino, André lleva realizadas 103 postales de 10×7 cm, que tienen a los colectivos como protagonistas, en este “bizarro” universo ficcional, donde cada línea tiene su propia historia, poderes y pasajeros arquetípicos.

¿Qué buscás con este proyecto?

Es como una especie de juego en relación a la verdadera Guía T. Lo que hago es para tomarse un té y perderse imaginariamente por la ciudad. Me gustaría que se arme una Guía Té en formato de libro o álbum de figuritas, pero también me gusta esta circulación de unidades sueltas, me da la sensación de que fluye más. En general, las personas me piden las postales de las líneas que se toman seguido.

¿Qué tipo de historias podemos encontrar en tu guía?

La mayoría de los microrrelatos son de humor y con final divertido, pero hay algunas historias de terror, que surgieron a partir de un taller de escritura que hice sobre ese género. Justamente lo había empezado para intentar alejarme del mundo de los colectivos, pero no pude… Y después hay algunos relatos más particulares, como el del 41, que es una historia futurista gay de un tipo que piensa que los choferes son robots. Por otro lado, lo que pasa en el 85, es puro amor y odio…

¿Qué entiende la gente cuando les das la SUBE Arcoiris?

Me miran y a veces me preguntan si va a servir de verdad. Es una sube “antimacri” y “friendly”, que genera clima amistoso dentro del bondi y se carga dejándola una tarde al sol o enterrándola en una maceta. Tuvimos una dorada que venía con WIFI, anteriormente.

«Es como una especie de juego en relación a la verdadera Guía T».

¿Cómo aparecen los ilustradores?

Surgen de una manera muy natural, entre toda la gente que conozco casualmente, o grupos de amigos. Han dibujado personas de México, Bahía Blanca, Tandil, dibujantes que se van enterando del proyecto por Internet y con quienes me escribo por mail. Lo hacen de onda, por eso debajo de la historia va siempre el nombre del dibujante. Una vez me escribió un colectivero de la 373 y me pidió una postal, y me contó cómo es el viaje de esa línea y la hicimos.

Ivana Ilguisonis tiene 21 años, estudia medicina en la UBA y dibuja desde chica como hobby. Con amigos iba seguido al bar El Imaginario, donde las meseras que traían la cuenta le dejaban las postales de “Guía Té”. “A mí me encantaban y siempre me las compraba, pero no sabía quién las hacía. Este año de casualidad vi a André repartiéndolas y ahí nos pusimos a charlar y cuando le dije que yo también dibujaba, me invitó a ilustrar. Me mandó el texto del 91, donde los colectiveros tenían un oído biónico y escuchaban todo lo que se conversaba”.

¿Qué resolviste dibujar?

Proyecté el poder en el colectivo en sí mismo y le hice unas orejas gigantes, que salían de los costados. Lo pinté con marcador negro y lápices acuarelables.

Azul Darras tiene 20 y es de Villa Crespo, estudia en la FADU Diseño Gráfico y le gusta hacer dibujos vectoriales. Iba en el colectivo 24 camino a San Telmo cuando André le repartió sus postales: “Me quedé mirándolas y me encantaron. Entonces André me invitó a ilustrar y me pasó por mail un relato de un hombre que persigue el 88, pero el colectivo nunca le abre en ninguna parada. Lo que hice fue un bondi medio psicodélico flotando en colores”.

¿Qué más hiciste?

Le pasé después unos dibujos míos viejos y le gustaron mucho, una casita que yo había hecho en Rotring y me dijo que así como yo ilustré sus palabras, ahora él iba a ponerle palabras a mi ilustración. Hizo una historia con el 181, que tiene una terminal “Puerto” en una playa. La mayoría de mis amigos pudieron encontrar las postales y lo loco es que siempre fue de casualidad. Un montón de gente conoce esta movida, que es algo súper under.

¿Qué estéticas encontrás?

Hay una gran diversidad y eso es lo que me encanta. Podes ver desde dibujos comunes pintados con marcador, algunos vectoriales con efectos, como el mío y otros acuarelados. En cada uno se nota el estilo personal y la creatividad de cada ilustrador.

¿Cuáles son los objetivos del proyecto a corto plazo?

Hace poco expusimos en Espacio Cultural Dinamo y estuvo muy bueno, teniendo en cuenta lo complicado que es juntar a tanta gente en un solo día. Estaría bueno hacer un festival para fin de año, organizado con más tiempo y también invitar bandas. Llenaríamos de postales y textos para exponer.

André suele repartir las postales de miércoles a sábado, arriba de los bondis y por bares y centros culturales como La Casona de Humahuaca, El Imaginario, El Canario rojo, El Banderín, Espacio Cultural Mi Casa, Le Troquet, Club Cultural Matienzo y Ladran Sancho. “Después de dos años, alguna cerveza me tomé con casi todos los que trabajan en los bares donde reparto”.

Actualizada 23/08/2016

 

Mucha defensa, pocas respuestas

Mucha defensa, pocas respuestas

“La única verdad es la realidad”. La frase inicial del ministro de Energía, Juan José Aranguren, provocó un irónico corto aplauso entre los diputados peronistas. Y actuó casi como un mantra argumentativo durante su interpelación por el “tarifazo” en el maratónico plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda, Energía, Consumidores y Obras Públicas de la Cámara baja.

En el reducido espacio del anexo del Congreso Nacional y ante la presencia de unos 130 diputados, el responsable de la cartera de Energía se presentó para explicar -y defender- el “gradual” aumento tarifario dictaminado por el Gobierno y que, por una decisión de la Cámara Federal de La Plata, actualmente se encuentra suspendida y a la espera de una resolución de la Corte Suprema de Justicia.

“Todos los bloques de diputados, excepto el oficialismo, estamos acá para retrotraer el tarifazo”, sostuvo taxativamente  el diputado del Frente para la Victoria y ex ministro de E-Economía Axel Kicillof.

Segundo ruidazo contra el tarifazo de Macri , el 4 de agosto pasado.

Segundo ruidazo contra el tarifazo de Macri , el 4 de agosto pasado.

En las largas mesas ocupadas por los representantes legislativos del kirchnerismo, la protesta contra el gobierno nacional se manifestó en carteles con las frases “Gobierno para ricos, tarifazo para pobres”, “Los servicios públicos son derechos humanos, el tarifazo los vulnera”, “Bajó el consumo de leche, háganse cargo”, “¿Prueba?¿Error? No somos conejillos de Indias”.

El cuestionamiento de todo el arco opositor se unificó sobre la figura de Aranguren como funcionario público por su rol como ex CEO de la multinacional Shell de la que aún forma parte como accionista mayoritario, una clara violación de la Ley de Etica Pública según la oposición.

“La madre de todas las ilegalidades es que usted está ocupando el cargo de ministro, cada decisión que tome, es para beneficio propio”, sostuvo el legislador por Rio Negro  del FPV, Martín Donaite, en unos de los varios tensos pasajes de la discusión.

Entre gritos y aplausos, exposiciones que superaron largamente los tres minutos consensuados y numerosas chicanas, principalmente entre diputados de Cambiemos y del FPV, transcurrió un intenso debate de más de seis horas que se presentó en su arranque, como “respetuoso” y “constructivo”.

Un poco más de 30 minutos duró la fría exposición informativa del ministro Aranguren. El funcionario dio cuenta de los datos que llevaron a que Argentina en estos últimos doce años haya pasado “de tener energía abundante, exportada y barata” a tener “energía escasa, importada y cara”.

“La única verdad es la realidad”, esa fue la frase inicial del ministro de Energía, Juan José Aranguren.

Según sostuvo el funcionario, el actual gobierno recibió un sector que “manifestaba un gran desorden en su funcionamiento, con roles y funciones equivocadas, alta discrecionalidad y falta de transparencia, desabastecimiento y demanda insatisfecha, causada por una distorsión de precios y atraso tarifario, uso ineficiente de energía, caída en la producción y falta de capacidad de generación”.

Entre otras cuestiones, detalló que el aumento de las tarifas se hizo “de la forma más gradual que le permitía la herencia recibida” y remarcó la importancia de la aplicación de la tarifa social, que alcanzó, según el ministro, tres millones de personas en el servicio eléctrico y  un millón en el gas. Sin embargo, evitó explicar los costos de la producción del gas y dar detalles sobre cómo el gobierno construyó los indicadores para diseñar el aumento en el servicio.

Finalizada la exposición, los diputados tomaron la palabra para indagar al ministro.

La  ausencia del ex ministro de Obras Públicas y presidente de la comisión de Energía, Julio De Vido, fue una decisión política. El jefe de la bancada del FPV, Héctor Recalde, leyó una carta del ex funcionario y advirtió que Cambiemos tenía “la clara intención de enfocar el debate sobre lo hecho en doce años en materia energética en su persona en lugar de dar las explicaciones que espera la sociedad, en relación a cuáles fueron los criterios técnicos para determinar el brutal tarifazo”.

Los abucheos y gritos de “se han robado todo” de parte de diputados del oficialismo no demoraron en aparecer. Recalde preguntó que si al momento de aumentar las tarifas el gobierno pensó “en lo que podían sufrir miles y miles de hogares argentinos que no pudieron pagar tarifas un aumento porcentual exorbitantes, de 1500 y 1700 %”.

Recalde también sostuvo que el “accionista de la multinacional Shell” realizó una especial “interpretación” de la Ley de Etica Pública al negar que exista incompatibilidad en su cargo.

Aranguren se defendió con un argumento llamativo. “Ninguna de las personas que forman parte y que han estado trabajando en alguna de las empresas en los últimos tres años o tengan participación societaria, tomen decisiones particularmente vinculadas con estas empresas, por lo que “no hay conflicto de intereses”, explicó.

“Durante estos doce años que estuve trabajando en el sector privado traté siempre de apegarme a la ley. Cada vez que desde la administración nacional ha habido una denuncia,  siempre  me presenté en la justicia y he salido eximido”, arremetió.

La diputada Graciela Camaño (Frente Renovador) sostuvo que para las decisiones que tomó el gobierno “había un mínimo de legalidad que tenían que cumplir y no lo hicieron”, ante la falta de la audiencia pública que indica como necesaria la Constitución Nacional para la determinación de nuevas tarifas.

La batería de preguntas de la diputada, que incluía el pedido de números informes al ministro, disparó las críticas del bloque oficialista al demorarse más del tiempo permitido. Camaño refutó afirmando que ella tenía “muchas preguntas como la mayoría de la gente que no tiene la posibilidad de preguntar y que no sabe de dónde se sacó el porcentaje de aumento tarifario”.

“Nosotros hemos hecho una adecuación de los cuadros tarifarios, siguiendo la capacidad que nos da la ley de emergencia pública, la 25,562, que está vigente hasta el 31 de diciembre del 2017 y en partir de un decreto 120, que se firmó del 2003, que le da capacidad al Estado nacional de ajustar el precio del gas en boca de pozo y por lo tanto todo lo que hemos hecho ha sido legal y obviamente la Corte Suprema decidirá en lo particular”, respondió Aranguren.

El legislador sanjuanino  José Luis Gioja (FPV) tomó la palabra y se permitió una de las tantas chicanas de la jornada. Aseguró que se había sentido “casi conmovido” cuando Aranguren comenzó su primera exposición con una de las frases de la liturgia peronista.

El legislador presentó una abultada factura de gas de un trabajador de la provincia de San Juan, fue cuando le consultó directamente al funcionario si sabía realmente “cuál es el costo del gas en boca de pozo en Argentina”.

En el reducido espacio del anexo del Congreso Nacional y ante la presencia de unos 130 diputados, cientos de periodistas cubrían ayer la audiencia.

“Hay distintos valores dependiendo la inversión de la empresa, según la región, me niego a dar un promedio”, respondió Aranguren. Fue uno de los momentos más tensos de la audiencia.

Gioja repreguntó y, ante la falta de respuesta, citó un informe realizado por la Fundación Bariloche que establece un costo promedio de 1,9 dólares el B.T.U de gas en boca de pozo en el país. “¿Por qué esa diferencia de 1,9 a 5,5 dólares que ustedes fijaron para las nuevas tarifas? ¿Por qué los usuarios tienen que pagar ese costo? Doña Rosa, no tiene que pagar esos costos que son excesivos”, interrogó.

También le manifestó la preocupación que le generó el destino de un grupo de trabajadores del Ministerio quienes habían iniciado una medida de fuerza ante el serio riesgo de que los despidan.

En respuesta, Aranguren remarcó que el preció del crudo lo “regula el mercado” ya que la ley argentina lo determina así y si se desea establecer un precio desde el Estado, “hay que cambiar el marco regulatorio desde el Congreso”. Respecto a los trabajadores comentó que se iba a reunir con representantes gremiales para ver que sucederá

“Rechazamos la extorsión del ministro, del gobierno a la Corte Suprema de Justicia, al Congreso Nacional, al decir que la obra pública se va a parar si no se aplica el tarifazo”, dijo el diputado del Frente de Izquierda Néstor Pitrola durante su alocución, en referencia a las distintas expresiones públicas que han tenido desde el Presidente hasta funcionarios públicos en la semana que la que el alto Tribunal fijará posición sobre el tarifazo. Faltaban apenas unas horas para que la procuradora general, Alejandra Gils Carbó, avalara los amparos contra el aumento.

“Rechazamos cualquier criterio de aumento, queremos ir hasta el hueso de un sistema que fundieron los servicios públicos en los últimos 20 años. ¿Por qué se siguen ocultando las clausulas que heredamos del negocio de (Miguel) Gallucio y Kiciloff con la petrolera Chevron?”, cuestionó Pitrola. Además, denunció que “se están despidiendo miles de trabajadores de empresas petroleras en el norte de Santa Cruz y en Chubut”.

Otro punto de tensión se sucedió con el propio Kiciloff quien fue citado varias veces por el ministro, al explicar el porqué de los precios diferenciales para la producción de gas.

“Esto está mal hecho, hay que hacer tabula rasa”, afirmó vehemente Kiciloff, quien pidió que para salir del atolladero generado por el tarifazo “hay que hacer las audiencias públicas que marca la ley”.

Remarcó que el modelo de “regulación del libre mercado” y “precios internacionales” que tuvo fuerte vigencia durante la década del 90, no es “el modelo que queremos” ya que fueron los causantes de que la cantidad de reservas de gas disminuyeran profundamente, dejando una vez finalizado ese período “reservas de gas para 10 años”.

En contraposición a lo que viene sosteniendo el gobierno nacional, el ex ministro de Economía afirmó que este año “la producción de gas subió un 5%”

Kiciloff pidió que el gobierno nacional “vaya para atrás” respecto a las subas de las tarifas y que luego se discuta “el cuadro tarifario por los próximos cuatro años” y subrayó que  “no sirve la austeridad, porque se  descarga sobre la gente y la gente no puede vivir, no puede comer, y  la industria y la economía inevitablemente se desploma”.

Al finalizar, le preguntó al presidente de la comisión y al ministro interpelado: “¿Van a volver atrás con el tarifazo? ¿Van a escuchar el pedido de las organizaciones sociales, clubes de barrio, sindicatos que ustedes dicen proteger? Porque sino esto es sólo un acto que les permite ganar tiempo para luego continuar con la misma tarifa y a querer cobrar el retroactivo por todos estos meses”.

Aranguren respondió con sequedad: “Este gobierno dio señales de escuchar y por eso están presentes en el salón”. Hubo aplausos de la bancada oficialista.

La férrea defensa del “tarifazo” por parte del oficialismo tuvo al jefe de la bancada de Cambiemos en Diputados, Nicolás Massot, como uno de sus protagonistas centrales.

Sostuvo que “a cualquier Estado le gustaría tener una política de subsidio ilimitado” pero que dicha decisión se tomó “en un momento de crisis” pero que luego se transfomó en una necesidad electoral”, en referencia al sostenimiento de los subsidios que mantuvo los gobiernos de Cristina Fernández.

“Lo peor de todo es que decidimos seguir con esa política cuando perdimos el déficit fiscal”, reafirmó Massot.

 Actualizada 17/08/2016

 

 

Hambre de derechos

Hambre de derechos

Este lunes a las 18 se inició un acampe con huelga de hambre en Plaza de Mayo para solidarizarse con la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, y denunciar la situación que atraviesa como detenida política. Al ayuno se sumaron Alejandro Gafagnini, coordinador nacional de la Tupac Amaru; Nélida Rojas, referente de la misma organización en Mendoza; el sacerdote Francisco Oliveira, de Curas en la Opción por los Pobres; Gumercinda Giménez Valdés, de Madres contra la Violencia Institucional; y Ana González, antropóloga, profesora de la Universidad de Buenos Aires y activista de derechos humanos. Después de una larga vigilia, acompañados por distintas agrupaciones que se fueron acercando a la plaza durante la noche, los cinco huelguistas dieron una conferencia de prensa ayer a las 9.

El primer orador, Alejandro Gafagnini, destacó la denuncia de Milagro Sala sobre la existencia de celdas de castigo en la prisión de Alto Comedero «que están fuertemente cuestionadas por Naciones Unidas y que no existen más en el país salvo en algunas provincias». Las celdas, precisó, «son de dos por dos, sin luz, y allí las compañeras internas tienen que dormir en el piso, sin contacto con nadie. Son celdas que tienen mucho que ver con situaciones de tortura. Es una vergüenza como argentinos que tengamos presos políticos, pero además tener estos calabozos de tortura en nuestros penales», subrayó el dirigente de la Tupac.

"Es una vergüenza como argentinos que tengamos presos políticos, pero además tener estos calabozos de tortura en nuestros penales", subrayó el dirigente de la Tupac.

«Es una vergüenza como argentinos que tengamos presos políticos, pero además tener estos calabozos de tortura en nuestros penales», subrayó el dirigente de la Tupac.

Milagro Sala lleva 214 días presa ilegalmente. El mecanismo aplicado por el Poder Judicial de Jujuy, manejado por el gobernador Gerardo Morales, consiste en renovar continuamente las causas contra ella –que ya suman nueve–, cambiando constantemente la orden de detención y así violando la presunción de inocencia (ver  ‘Milagro está presa por ser mujer, kolla y dirigente social‘, la entrevista a Elizabeth Goméz Alcorta, abogada de Sala).

El pasado viernes, Milagro y otras reclusas cuestionaron la existencia de las celdas de castigo que funcionan en el penal de Alto Comedero. Frente a esta “inconducta”, las autoridades penitenciarias la sancionaron con un “aislamiento” de diez días, tan irregular como el resto de las causas, puesto que, al no ser notificada, le negaron el derecho legítimo de la defensa. En función de esta medida, Milagro –junto a tres compañeras de la Tupac también detenidas– empezó una huelga de hambre que finalmente levantó ayer por la tarde a pedido de su familia.

Padre Francisco "Paco" Oliveira.  Acampe y huelga de hambre por la libertad de Milagro Sala en Plaza de Mayo. 16/08/2016.

Padre Francisco «Paco» Oliveira. Acampe y huelga de hambre por la libertad de Milagro Sala en Plaza de Mayo. 16/08/2016.

«Parecería que no alcanza la prisión, la estigmatización, el saqueo a los barrios de la Tupac Amaru, la persecución: han decidido además castigar a Milagro en el mismo penal y por un acto solidario», afirmó Gefagnini, quien se quejó de la falta de predisposición del Gobierno Nacional para dialogar con el Comité por la Libertad de Milagro: «Hace 15 días le pedimos una reunión al (ministro de Justicia) Germán Garavano y al secretario de Derechos Humanos (Claudio Avruj) porque sabíamos que iban a suceder este tipo de cosas. Esta es una escalada de violencia que está llevando adelante el Gobierno provincial con la anuencia de la Nación. Hace diez días echaron a la psicóloga del penal que había establecido una excelente relación con Milagro; eso le costó que la despidieran de su trabajo. La respuesta la tuvimos ayer: nos dieron la reunión para el 31 de agosto. Se ve claramente cuáles son las prioridades de estos funcionarios ante la violación sistemática de los derechos humanos y la situación que se está viviendo en Jujuy».

Gefagnini anunció que la huelga de hambre continuará hasta el lunes 22 de agosto, fecha en la cual supuestamente levantarían la incomunicación de Milagro. Representantes de las agrupaciones que apoyan el acampe se sumarán diariamente al reclamo, ayunando por 24 horas.

Parecería que no alcanza la prisión, la estigmatización, el saqueo a los barrios de la Tupac Amaru, la persecución: han decidido además castigar a Milagro en el mismo penal y por un acto solidario", afirmó Alejandro Gefagnini.

Parecería que no alcanza la prisión, la estigmatización, el saqueo a los barrios de la Tupac Amaru, la persecución: han decidido además castigar a Milagro en el mismo penal y por un acto solidario», afirmó Alejandro Gefagnini.

 

El párroco de Nuestra Señora Fátima de la Isla Maciel, el Padre Francisco «Paco» Oliveira, sostuvo: «No estoy a nombre personal, estoy en representación de los Curas en la Opción por los Pobres». Desde el 16 de enero, las cartas públicas que quincenalmente emite la organización comienzan diciendo: «Hace ya demasiado tiempo está detenida injustamente, y es una presa política, Milagro Sala». A estas misivas hizo referencia el padre Paco: «No podíamos sólo quedarnos en una carta cuando ella hace cuatro días está en huelga de hambre, nos lleva la delantera», y agregó: «No sé si vamos a tocarles el corazón, no haría falta tocarles el corazón, alcanza con la ley, la razón de los jueces que llevan adelante el tema en Jujuy, o del poder político. Por eso estamos en la Plaza de Mayo y no en Tribunales. Claramente hay decisiones políticas que hacen que hoy Milagro Sala y los compañeros  de la Tupac Amaru estén presos y perseguidos».

«Que se metan con nosotros, con los grandes, hasta se entiende. Pero que nuestros niños jujeños de Alto Comedero no se hayan podido bañar este verano en las piletas de natación que hizo la Tupac, porque les cortaron el agua, es una vergüenza, y si eso no es atentar contra los más pobres, no sé yo qué palabra podemos decir», expresó. Antes de finalizar, transmitió el apoyo de todos los Curas en Opción Por los Pobres: “Queremos que ella sienta, y que sienta toda la Tupac Amaru, que tienen nuestro abrazo, que tienen nuestra compañía porque compartimos su lucha y sus ideales».

"La violencia la está ejerciendo este Gobierno con las medidas que está tomando en contra del pueblo", remarco Rojas.

«La violencia la está ejerciendo este Gobierno con las medidas que está tomando en contra del pueblo», remarco Rojas.

Antes de la ronda de preguntas, la referente mendocina de la Tupac, Nélida Rojas, aseguró que Milagro «luchó sola, sin nada, cuando el norte del país estaba abandonado, cuando los niños se morían de hambre y el Estado no se hacía presente, hasta que con el gobierno de Néstor y Cristina pudieron realizar y concretar los sueños de miles de jujeños, y así en otras provincias, como en Mendoza, la mía». Según Rojas, lo que más ha molestado a este Gobierno es «que le hayan dado dinero al pueblo para que lo administre, y que hayamos podido hacer más que cualquier diputado que hoy se presenta en programas mediáticos ensuciando a nuestra compañera».

La Tupac es una organización pacífica, que no busca ningún tipo de confrontación violenta, remarcó Rojas y concluyó: «La violencia la está ejerciendo este Gobierno con las medidas que está tomando en contra del pueblo. Esto es una muestra de que seguimos apostando al diálogo, tratando de que entiendan que un pueblo tiene que ser libre, que sus dirigentes sociales tienen que ser libres, como están libre ellos aunque estén procesados».

Actualizada 17/08/2016