La resurrección de Tosco

La resurrección de Tosco

Es 1972 y por la ventana de la cárcel donde Agustín Tosco pasa sus días, ingresa un bichito de luz. Especie de faro esperanzador, el bichito transmuta en hombre -en una bellísima interpretación de Cristian Thorsen- y le pide a Agustín consejos sobre cómo deliberar en una asamblea. Y en ese momento, un Tosco más político emerge para darle la lección tan esperada. Una lección de supervivencia, que emana de su historia como sindicalista de Luz y Fuerza y de su participación clave en el Cordobazo.

“Hicimos una puesta con realismo mágico. Como esto es teatro y es difícil crear esos efectos especiales, decidí utilizar mapping: proyecciones sobre objetos. Y como también me parecía que a la obra le faltaba tramar quién era Tosco, hicimos como una especie de documental de tres minutos que con imágenes y audios de la Junta Militar y periodistas,  contábamos un poco qué llevo a Agustín Tosco a estar encarcelado”, dice Sebastían Berenguer, el director de la obra, y agrega: “Después hay otros recursos que utilizamos,  como una atmósfera de ensueño que tiene Tosco con un croto que le enseña a leer libros que lo van a marcar: Dickens, Balzac, José Ingenieros. Después aparece un tren en el medio de la escena, deja de ser una cárcel para a ser un sueño; y para el final aparece la imagen  con los 19 masacrados de Trelew,  porque me pareció que era importante verlos no solo nombrarlos “.

Daniel Dibiase, representa a Tosco.  Tosco, La obra teatral se esta llevando a cabo en el Centro Cultural de la Cooperación, todos los viernes de abril y mayo a las 20 hs. Dirigida por  Sebastián Berenguer y  representada por Daniel Dibiase y Cristian Thorsen. La obra trae a escena dos momentos de particular gravitación en la vida política argentina de las últimas décadas: "El Cordobazo" y "La masacre de Trelew". La historia transcurre en el penal de Rawson el 15 de agosto de 1972 y vincula ambos momentos a través de un encuentro entre el líder sindical Agustín Tosco (Daniel DIbiase) y un bichito de luz cordobés (Cristian Thorsen) que viaja cruzando el país para verlo.

Daniel Dibiase, representa a Tosco. 

Para Daniel Dibiase, quien interpreta a Agustín Tosco, “fue muy complejo, muy difícil ponerme en papel. He realizado teatro épico, personajes clásicos, en ese sentido hay una dramaturgia mucho más vasta y completa. Con Tosco fue diferente porque es un personaje contemporáneo, de una estatura ética increíble y eso a mí realmente me paralizó por momentos”. El actor agrega: “Siempre uno busca los opuestos para trabajar y armar la humanidad, pero él es tan humano que es difícil humanizarlo. De entrada dije: no lo voy a imitar, no lo hice cordobés, tuve que lograr cierta cotidianeidad en el trato, porque lo que se conoce son sus discursos y enfrentamientos políticos, también uno pone lo de uno, pero una forma de romper con ese molde tan duro que tiene Agustín es poner cosas propias y que me ayuden a conectarme con el compañero, lo que nos da más libertad para trabajar.”

La obra, escrita por Alejandro Finzi, rescata dos momentos épicos en la historia argentina: el Cordobazo, ocurrido en 1969, y la Masacre de Trelew, sucedida en 1972, momentos en los que el pueblo salió a la calle. En esos sucesos, trabajadores y estudiantes estuvieron codo a codo pidiendo y lamentablemente corrió sangre. “Agustín Tosco es el dirigente sindical más importante del siglo XX y, además, resultó una figura muy importante como referente social. Sus convicciones,  su humildad,  el hecho de ser incorruptible, de luchar por los derechos de los trabajadores en pos de una sociedad más justa y en contra de la  avanzada represiva de Onganía partir del 66’ son ejemplos imposibles de olvidar. Tosco se hace una figura muy importante en el país. Lo que ocurrió en el 69’ es un ejemplo para los jóvenes de hoy, militantes o no militantes, y  para cualquier argentino que quiera entender por qué luchar por una patria mejor”, cuenta  Berenguer.

En la obra, mientras Tosco está en la cárcel, habla con sus compañeros, detenidos por un gobierno sumamente violento. Se hacen señas: están tramando lo que iba a ser su salida. Sin embargo, Agustín decide seguir en la cárcel, resistiendo, como líder sindical.

Sebastián Berenguer, direcctor de Tosco. Tosco, La obra teatral se esta llevando a cabo en el Centro Cultural de la Cooperación, todos los viernes de abril y mayo a las 20 hs. Dirigida por  Sebastián Berenguer y  representada por Daniel Dibiase y Cristian Thorsen. La obra trae a escena dos momentos de particular gravitación en la vida política argentina de las últimas décadas: "El Cordobazo" y "La masacre de Trelew". La historia transcurre en el penal de Rawson el 15 de agosto de 1972 y vincula ambos momentos a través de un encuentro entre el líder sindical Agustín Tosco (Daniel DIbiase) y un bichito de luz cordobés (Cristian Thorsen) que viaja cruzando el país para verlo.

Sebastián Berenguer, direcctor de Tosco. 

Según Berenguer, “para realizar la obra buscamos antecedentes históricos, yo lo conocía como un tipo que había estado en el Cordobazo,  un cordobés que tenía un mameluco. Me parecía que era sorprendente y, cuando me topé con el texto, empecé a investigar y me enamoré de su personaje, porque era Secretario Adjunto de Luz y Fuerza, pero a su vez era un operario. Cuando alguien lo iba a ver a Agustín Tosco, tenía que ir al taller, no al sindicato. Él iba a la noche al sindicato, de 8 a 8 trabajaba; decía que el ejemplo había que darlo en la calle con los trabajadores, por eso fue muy importante analizar el contexto histórico donde transcurre la obra: en el 72, el día previo a la fuga de Trelew”. El director añade que buscaban “entender cómo era Tosco en su casa,  con sus hijos, con sus amigos, porque nosotro, a partir de videos, conocíamos esa figura del sindicalista, del político, del combativo  pero queríamos humanizarlo porque nuestro Tosco iba a estar dentro de una cárcel”.

Dentro de esa investigación,  el director y los actores se encontraron con Malvina y Héctor, los hijos  de Agustín, quienes les brindaron cartas  y material audiovisual inédito. Cristian Thorsen, quien hace el personaje de Saturnino, el bichito de luz, cuenta: “La obra nos llevó a investigar. Tuvimos que meternos a estudiar teóricamente a Agustín, debimos ir descubriendo y referenciando la magnitud de semejante líder sindical”.

La obra aparece en el contexto histórico actual, como necesaria puerta de entrada a la reflexión, ya que como Daniel Dibiase dice “los actos de la derecha se repiten. Onganía tomó decisiones que se parecen mucho a las que toma el gobierno actual”. En este sentido, Berenguer afirma que “ el teatro es un arte de comunicación, de revolución. Desde el teatro, estamos resucitando a Tosco, a los 19 masacrados de Trelew y a todo un accionar que nos parece simbólico y muy importante para los jóvenes de hoy. El arte es siempre un lugar de resistencia. La gente va al teatro a encontrarse con otro, es  un lugar de encuentro. Cuanto más aprieta el zapato más aparece el teatro off, de vanguardia. Cuanto más apretado te sentís, buscas un refugio. Hay  una manera de hacer catarsis que pasa por decir y comunicar lo que nos está pasando y que  tiene que ver con la violencia institucional disfrazada de alegría”.

Cuando la obra llega a su fin, las fotos de los 19 masacrados  en Trelew aparecen en escena y un Daniel Dibiase, devenido en Agustín Tosco liberado y empoderado, dice unas palabras: “Carlos Alberto Astudillo, Rubén Pedro Bonet, Eduardo Adolfo Capello, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos del Rey, Alfredo Elías Kohon, Clarisa Rosa Lea Place, Susana Graciela Lesgart de Yofre, José Ricardo Mena,  Miguel Ángel Polti, Mariano Pujadas, María Angélica Sabelli, Ana María Villareal de Santucho, Humberto Segundo Suarez, Humberto Adrián Toschi, Jorge Alejandro Ulla presentes, ahora y siempre”
La obra puede verse todos los viernes a las 22:30 horas en el Centro Cultural de la Cooperación, ubicado en Av. Corrientes 1543.

 

Actualizada  19/05/2016

De los derechos a la caridad

De los derechos a la caridad

Tras cuatro meses de inactividad, el gobierno decidió poner fin a los contratos que mantenía con la Red Textil Cooperativa (RTC). La medida afectó a 74 cooperativas textiles que funcionaban como proveedores del Estado a nivel nacional. “Nos informaron telefónicamente que el programa no iba a continuar por cuestiones presupuestarias. Desde diciembre no teníamos órdenes de compra ni encargos, cuando nos pedían paciencia lo hacían para evitar conflictos, porque la decisión la tenían tomada hace tiempo”, relató Joaquín Fernández, presidente de la organización.

   Unos 3.000 trabajadores que se desempeñaban en la confección de guardapolvos, chalecos antibalas y uniformes varios, quedaron sin empleo. Las cooperativas trabajaban con encargos realizados por los ministerios de Desarrollo Social, Educación y Seguridad. Los afectados informaron que desde el Poder Ejecutivo les reconocieron que reemplazarían las prendas producidas con productos importados más económicos. El Ministerio dirigido por Patricia Bullrich, por ejemplo, comenzó a importar -desde enero- chalecos antibalas provenientes de Israel.

Bajo la consigna «Sí a la industria nacional y el trabajo cooperativo, no a las importaciones y la desocupación», las cooperativas textiles de todo el país se movilizaron en defensa de la industria nacional y en contra de las importaciones indiscriminadas.

El fin del programa se encuadra dentro del cambio de enfoque ideológico que se produjo en el Ministerio de Desarrollo Social. Antes, las políticas eran impulsadas desde la lógica de tomar al otro como “titular de derechos” y desde ese lugar se pensaban las políticas; ahora se piensa en términos de cómo “evitar un conflicto social”.

El jueves 21 de abril de 2016 la RTC organizo la jornada "Cocer en la Calle" como forma de protesta por la finalización del programa "proveedores del Estado".

El jueves 21 de abril de 2016 la RTC organizo la jornada «Cocer en la Calle» como forma de protesta por la finalización del programa «proveedores del Estado».

 

¿Herencia pesada?

    Desde 2003, por una decisión gubernamental, las cooperativas textiles y el Estado nacional establecieron una relación comercial. Los distintos ministerios comenzaron a comprar productos fabricados en ellas. El proyecto buscaba generar trabajo genuino, capacitar a los trabajadores y lograr su posterior inserción en el mercado formal. También se pretendía potenciar el crecimiento y desarrollo de la industria nacional. Este proceso fue acompañado por la creación del registro Nacional de Efectores Sociales y Economía Social (REDLES), creado en el 2004 desde el Ministerio de Desarrollo. Su función fue facilitar, a aquellas personas que realizaban una actividad productiva y que se encontraban en una situación de vulnerabilidad, el desarrollo de su actividad. Acompañada por el Estado, la lógica de producción en cooperativas proliferó y muchas pudieron registrarse y comenzar a producir, lo que les permitió a los emprendedores incorporarse al sistema previsional, recibir los servicios de una obra social y trabajar como proveedores del Estado.

Fernández explicó que “año tras año el nivel productivo de las cooperativas fue creciendo a través de incentivos para incorporar maquinaria, capacitaciones y cursos de formación” y agregó: “Ahora todo ese crecimiento se paró, el gobierno actual no ve a las cooperativas como empresas, sino como gestos de caridad. Ellos eligen la multinacional a lo nacional, cada rollo de tela que entra de afuera es un laburo que se pierde acá”.

La RTC forma parte de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), donde Andrés Quintana trabaja como coordinador. Desde su posición denunció que la situación actual de las cooperativas es crítica: “Con la importación de productos, las cooperativas quiebran, porque nuestro mercado de consumo es el interno. Hace meses que venimos sin encargos y los que pudimos conseguir son del ámbito privado que suelen ser mal pagos. Todo parece indicar que el gobierno quiere terminar con la producción en cooperativas”.

Daniel Arroyo, actual dirigente del Frente Renovador, fue ministro de Desarrollo Social durante el gobierno de Néstor Kirchner y opinó que lo peor que puede hacer la nueva gestión es pensar una política social fundacional, lo que significa desarmar y empezar de nuevo. “Si se produce una descontrolada apertura de las importaciones, habrá menos producción nacional y más pobreza. Es claro que el gobierno gobierna con un solo ojo y que se ha complicado la situación social, en su agenda no es prioridad cuidar el empleo”.

“Los guardapolvos más caros del mundo”

  Uno de los primeros contratos afectados fue el del Ministerio de Desarrollo Social, que todos los años compraba un millón de guardapolvos a las cooperativas textiles, para luego distribuirlos en escuelas públicas y sindicatos. “La confección de guardapolvos implicaba una política directa del Ministerio orientada a las cooperativas textiles, las cuales capacitaban a su gente y contaban con supervisión del INTI.  Terminar con los contratos no sólo significa el fin del trabajo en sí, sino también todo lo que eso generaba” aclaró Judith Barchetta, ex Directora Nacional de Asistencia Crítica del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Y añadió: “Ellos no piensan en el gasto social como inversión. Yo escuché a las nuevas autoridades decir que eran los guardapolvos más caros del mundo y preguntarse para qué se gastaba tanta plata, cuando era más fácil comprarle a privados.”

El “cambio” de mirada

El Ministerio de Desarrollo Social, a diferencia de otros ministerios, no sufrió pérdida de personal, a excepción hecha de los recientes despidos en la Dirección Nacional de Juventud. “De esto se pueden hacer distintas lecturas, una podría decir que fue producto de la dura pelea que dio la junta interna partir del mismo 10 de diciembre, o porque los trabajadores organizados de Desarrollo Social lo impidieron”, opinó Barchetta. Y añadió: “Otro dato objetivo es que desde los circuitos administrativos del Ministerio, al día de hoy,  no se han puesto en funcionamiento ninguna de las líneas de políticas públicas que se venían desarrollando. Las que son de rutina, como el pago a los cooperativistas de Argentina Trabaja, sí, pero todo lo que tiene que ver con poder gestionar recursos que tengan que ver con el presupuesto 2016 no está funcionando”.

Para Daniel Arroyo, el gobierno cree en la teoría del derrame, ecuación que no sería aplicable en la Argentina, porque “lo que produce actividad económica no produce trabajo. Los sectores pobres del país trabajan en lo textil y en la construcción. Sin la presencia del Estado no se crea trabajo para esos sectores.”

Las cooperativas como proveedores del Estado estaban enmarcadas dentro de los lineamientos del Ministerio de Desarrollo Social que buscaba generar la inclusión del individuo mediante el trabajo. “Para que alguien que no está dentro del mercado pueda ingresar, tiene que existir inversión pero también una política de intervención estatal. Y es esa inversión del Estado la que no comprenden los nuevos funcionarios. Tienen una mirada empresarial de lo público, para ellos sobra gente y hay un montón de empleados que son innecesarios”, remarcó Barchetta.

Actualizada 11/05/2016

 

“Tenía una hija y no la tengo”

“Tenía una hija y no la tengo”

«He tenido una hija y no la tengo. Nietos tengo dos», afirmó Rosa Tarlovsky de Roisinblit, vicepresidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, ante el presidente del Tribunal, Alfredo Ruiz Paz, cuando le preguntó si tenía hijos. Se trataba de una pregunta de rutina antes de comenzar con su declaración como testigo en el juicio por la privación ilegítima de la libertad de su hija Patricia y su yerno José Manuel Pérez Rojo, ambos desaparecidos desde octubre de 1978. La miraban y escuchaban con atención sus dos nietos: Mariana Eva Pérez -que contaba con apenas quince meses cuando fue secuestrada junto a sus padres-, y su hermano Guillermo Pérez Roisinblit, quien recuperó su identidad hace 15 años gracias a una denuncia anónima recibida en Abuelas. Ambos constituyen querellas por separado en la causa, la de Guillermo unificada con la de su Abuela Rosa -representados por Abuelas de Plaza de Mayo-, además querellan la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires y la misma cartera dependiente de Nación.

El imputadobOmar Graffigna , exjefe de estado Mayor de la FAA, de quien dependía la Jefatura de Inteligencia, a su vez responsable directo de la RIBA.

«¿Por qué quiere Mariana volver a escuchar lo que tengo para decir? Mi argumento es siempre el mismo, vengo repitiendo lo mismo desde hace 38 años», se preguntaba la abuela el lunes a la salida de la primera audiencia del juicio, cuando se enteró de que su nieta había solicitado estar presente cuando diera su testimonio el día miércoles. Su hermano también estuvo en la sala durante su declaración, gracias a un pedido especial que realizaron los abogados de Abuelas de Plaza de Mayo  el mismo día de la audiencia: «Decidí estar presente hoy ante todo porque tenía derecho por ser querellante, y también porque quería escuchar cómo Mariana había reconstruido la desaparición de mis viejos y porque quería que sintieran que a mí me interesaba, quería dar mi apoyo», explicó Guillermo durante el cuarto intermedio, luego del relato de Mariana ante el Tribunal que duró más de dos horas en las que contó cómo dedicó su vida a averiguar quiénes habían sido sus padres y qué les había ocurrido.

Rosa Roisinblit es recibida por Eduardo Jozami.

Rosa Roisinblit es recibida por Eduardo Jozami.

En ambas audiencias, la de apertura del lunes y la testimonial de ayer, estuvieron presentes los tres imputados, que ingresaron a la sala con esposas acompañados de fuerzas policiales. Uno de ellos, Luis Tomás Trillo, presentaba vendas en sus manos a raíz de un accidente doméstico que había tenido días atrás. En el momento de la desaparición de Patricia y José, se desempeñaba como titular de la RIBA -Regional de Inteligencia de Buenos Aires, perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina- reemplazando al comodoro Oscar Sende, ya fallecido. Fue en ese lugar, en el partido de Morón, donde la pareja estuvo secuestrada. Hoy la casa pertenece al municipio gracias a la gestión del entonces intendente Martín Sabatella junto con organismos de derechos humanos. Allí también trabajaba Francisco Gómez, el apropiador de Guillermo, otro de los acusados en este juicio. Al tercero, Omar Rubens Graffigna, se le imputa responsabilidad en la causa por haber sido Jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea desde fines de diciembre de 1975 hasta enero de 1979, de la cual según las pruebas presentadas era dependiente la RIBA.

Guillermo Rodolfo Pérez Roisinblit espera la llegada de su abuela al TOF Nº 5 de San Martín.

Guillermo Rodolfo Pérez Roisinblit espera la llegada de su abuela al TOF Nº 5 de San Martín.

«No se admitirán hechos desagradables en la sala», advirtió Ruiz Paz desde el primer minuto, como previendo algunos climas tensos que se generarían durante el proceso. Uno de ellos tuvo lugar durante la declaración de Mariana, cuando el defensor de Trillo y Graffigna -Guillermo Miari-, le preguntó, invocando las generales de la ley, si consideraba que los acusados eran sus enemigos. Luego de un breve tumulto en el público que fue censurado por el presidente, la testigo afirmó: «Nunca me lo pregunté en esos términos. Creo que yo y mi familia éramos para ellos un enemigo, destruyeron a mi familia y eso continúa hasta el día de hoy. Ustedes, en este juicio, no ven una familia feliz, ven una familia que llegó a esta instancia como puede, por eso creo que ellos nos han tratado a nosotros como el enemigo».

Luis Tomas Trillo, jefe de la Regional de Inteligencia de Buenos Aires, (RIBA) imputado en la causa.

Mariana volvió a residir en el país hace pocos meses, luego de haber vivido cinco años en Alemania. Este es el primer testimonio que brinda en un juicio público acerca de cómo fue el proceso de averiguar acerca de la identidad de sus padres y su hermano, en definitiva su propia identidad: «Encontrar a mi hermano era el motivo de mi vida», le dijo al juez. Luego explicó lo difícil que le resultó buscarlo, y lamentó las dificultades que encontró para conectar con él: «Después me di cuenta de que una relación de hermanos no se puede militar como una causa, tenemos que construir una relación de verdad, de dos personas».  A modo de cierre eligió leer una carta que Argentina, su abuela paterna fallecida en 2005, le había escrito a su hijo José.

Francisco Gómez, imputado, fue personal civil de Inteligencia de la RIBA.

 

Su declaración fue un recorrido que comenzó desde sus primeros recuerdos en casa de sus abuelos viendo fotos de sus papás a través del vidrio de un aparador: «Siempre supe que no estaban», aclaró. Contó cómo ese hecho la afectó en su infancia y marcó el rumbo de su vida. Aseguró que la búsqueda le llevó a postergar proyectos personales y le generó temores como no poder estar sola en su departamento con su hijo de dos años, así como ella había estado con su madre Patricia al momento del secuestro de ambas.

«Les arrebataron la vida pero también la muerte porque están desaparecidos», reclamó la nieta de Rosa sobre sus padres. Manifestó su descontento con el hecho de que a los acusados no se los esté juzgando también por tormentos por falta de pruebas: «Yo sé exactamente lo que le hicieron a mi padre», dijo con convicción. Explicó que para ella también se debería considerar tortura al hecho de que a su madre embarazada de nueve meses se la tuviera en cautiverio, con los ojos vendados y pasando hambre. Acusó a Gómez de mentir sobre sus tareas en la RIBA: «En su legajo decía que ‘colaboraba más allá de su función específica’. Luego agregó: «La RIBA parece que era un taller literario», en alusión al hecho de que en su indagatoria de abril de 2013, los acusados negaron que se hubiera torturado gente en ese centro de detención.

Luego del testimonio de Mariana se llamó a un cuarto intermedio. La esperaban su marido, amigos y representantes de organismos defensores de los derechos humanos para saludarla. La felicitaban. Se veía emocionada. Dos días atrás, antes de entrar a la primera audiencia, había dicho que no tenía registro de sentimientos, pero durante su relato ante el Tribunal se reconocieron emociones en ella y en el público más de una vez. Quienes no la conocían personalmente también se conmovieron.

Graffigna es trasladado por la custodia antes de ser llamado a declarar.

Graffigna es trasladado por la custodia antes de ser llamado a declarar.

 

Guillermo salió rápido del juzgado a buscar empanadas para que su abuela almorzara. Rosa había estado esperando a ser llamada a declarar desde las diez de la mañana. Su turno llegó recién a la una y media de la tarde, cuando ingresó a la sala con bastón, a paso lento pero con energía. «¿Jura decir la verdad?», le preguntó el Presidente del tribunal, a lo que respondió: «Juro. Nunca dejo de decir la verdad, es una característica mía». Luego, interrogada por su abogado Pablo Lachener, relató la desaparición y búsqueda de su hija, su yerno y su nieto desde su desaparición. «Antes de que mi hija diera a luz me llamaron y me dijeron que fuera preparando la ropita para el bebé, que me lo iban a traer cuando naciera», evocó. Cuando se dio cuenta de que eso no ocurriría -ayudada por un rabino- se contactó con las primeras agrupaciones de derechos humanos y comenzó a militar en la organización ‘Abuelas con nietitos desaparecidos’. «Después nos pareció que el nombre era demasiado largo y por eso lo cambiamos», comentó riendo.

Rosa denunció que el negocio de su yerno y su departamento fueron saqueados por fuerzas militares luego del secuestro: «En el departamento de Gurruchaga solamente quedó la cuna de Mariana». Reiteró varias veces que ella inició esta causa en 1979: «Como ya soy muy mayor, algunos detalles se me escaparon», bromeó y afirmó que va a seguir luchando por todos los nietos que faltan. En cuanto a la causa, reclamó la aparición de los restos de su hija y su yerno, y recalcó la responsabilidad estatal: «Vivos no lo voy a encontrar, pero que me lo diga el Estado». Destacó el hecho de que los acusados tenían una defensa: «Nuestros hijos no tuvieron la posibilidad de un juicio. ¿Quién los juzgó y los condenó?».

Una vez finalizada la audiencia, Rosa declaró a ANCCOM: «Yo no espero mucho. Lo único que me interesa en este momento es que haya justicia y memoria, no solo en mi caso sino en todos los casos. Pido trabajo para encontrar a los nietos». Luego se subió al auto de Alan Iud, otro de sus abogados, y fue llevada de regreso a su casa.

En la primera audiencia, los tres acusados se negaron a declarar pero debieron responder preguntas personales. «¿Tiene hijos?», le preguntó Ruiz Paz a Fernando Gómez, el apropiador de Guillermo. «Tenía uno», contestó. Cuando se le preguntó a Trillo si había realizado actividades luego de su retiro, afirmó haber desempeñado «tareas de beneficencia». En cuanto a Graffigna, de 90 años, sus respuestas no fueron llamativas pero en la segunda audiencia se tropezó y cayó al suelo, y el Tribunal debió llamar a la ambulancia por si acaso.

Se sabe a partir de las declaraciones indagatorias que Gómez niega haber conocido a los padres de Mariana y Guillermo, y que sostiene que sólo realizaba tareas de jardinería y mantenimiento en la RIBA. En cuanto a Trillo, desconoce haber estado a cargo del centro de detención durante el tiempo que la pareja estuvo secuestrada y Graffigna sostiene que la Regional no dependía de su jefatura. Las querellas han presentado pruebas para demostrar que mienten.

El juicio continuará el lunes 16 de mayo con la declaración de Guillermo Pérez Roisinblit, y las siguientes audiencias de testigos se prevén para el 26, 27, 28 y 30 de mayo. Por parte de la querella declararán sobrevivientes de la ex Esma que conocieron a Patricia -entre ellos Miriam Lewin que asistió a Patricia en el parto- y los familiares que estaban presentes el día que devolvieron a Mariana a la casa de sus parientes en Olivos. Por parte de la defensa, solo se conoce por el momento que se presentará a declarar Teodora Jofré, la ex-esposa de Gómez y apropiadora del nieto recuperado.

Actualizado 05/05/2016

Ni una menos, capítulo under

Ni una menos, capítulo under

La Plaza de Mayo, cubierta del rocío de un otoño que pronto será  un invierno crudo, se viste del enojo feminista. Mientras la agenda de los medios masivos se ocupa de las muertes ocurridas en la Time Warp, un grupo de personas se reúne en la histórica plaza para  reclamar por justicia. Es el mismo suelo lustrado por los resabios de la memoria colectiva el que ahora se embarra de pisadas feministas. Menos de una semana antes, en las redes sociales comenzó a viralizarse un video de Mailén Frías en el que denunciaba el abuso sexual y psicológico por parte de José Miguel del Pópolo, cantante de la banda under La Ola Que Quería Ser Chau. Ese mismo día, un par de horas más tarde, se dio a conocer el testimonio de Rocío Marquez, otra ex novia del cantante que confesó haber sufrido los mismos abusos por parte del artista. Y como una fila de fichas de dominó en delicado orden y equilibrio, cuando cayó una, comenzaron a caer todas las demás. A las denuncias contra Miguel del Pópolo se sumó un colectivo de jóvenes que armaron un sitio en Facebook para denunciar por abusos a Cristian Aldana, cantante de “El otro yo”, así como los discutidos comentarios de Walas, cantante de Massacre, que sin esperar a que se secaran los pañuelos de las víctimas, esa misma noche en su show de Mendoza dejó dicho: “¿Qué hicieron entre violación y violación? ¿Se fumaron un pucho?”. Las preguntas de Walas se suman al repertorio de frases del sentido común como “algo habrá hecho”, “mirá cómo está vestida”, “si es la novia, no hay abuso”, “¿para qué fue a la casa?”. La denuncia de Mailén en el Juzgado Criminal n° 25 es la visibilización de algo que hace tiempo se sabe y se calla en el mundo del under.

Bajo la consigna "¡Basta de abusos y violaciones, violencia en el rock!" el sábado 23 de abril se realizó en Plaza de Mayo una protesta luego de que victimas de abuso sexual hicieran publicas sus denuncias a través de las redes sociales.

Bajo la consigna «¡Basta de abusos y violaciones, violencia en el rock!» el sábado 23 de abril se realizó en Plaza de Mayo una protesta luego de que victimas de abuso sexual hicieran publicas sus denuncias a través de las redes sociales.

 

No es de sorprender que tanta gente haya ido a la Plaza de Mayo el pasado 23 de abril  a acompañar a las víctimas. Hacer audible sus testimonios, abogar por la justicia y porque las denuncias no mueran en la vorágine de los ritmos de las redes sociales y los hashtags, es lo que preocupa, ahora, a muchos de quienes partciparon, a casi dos semanas de la movida. “No es un contexto de frases vacías como ‘Amor sí, Macri no’, sino que estamos hablando de abusos y violaciones, y lo que sentimos es que necesariamente teníamos que estar organizadas para poder contener a las compañeras, para poder darles un mínimo de seguridad. Estos eventos hay que pensarlos en clave feminista”, expuso a ANCCOM Maruh García, referente feminista, militante por la Campaña por el Derecho de Aborto y una de las organizadoras de la convocatoria que se hizo bajo el polémico título “Basta de abusos y violaciones en el rock. “El título de un evento en Facebook es lo de menos, el nombre es indistinto”, planteó Maruh. “Aunque muchas personas se molestaron porque el rock es o no es o no quieren que sea así, el eje central es que estamos hablando de abusos y violaciones, y eso es lo que nos tiene que molestar”.  

Las nubes negras, detrás de la Casa Rosada, avisan que pronto va a llover. Pero no todavía. Todavía queda algo por decir. Maruh toma el micrófono y habla de Rocío, de Mailén y de muchas otras que no pudieron hacer audible sus voces. Les pide que no tengan miedo. Las invita a contar sus testimonios y verdades, a confiar en que todas las mujeres allí presentes serán una casa y un hogar para su seguridad, porque muchas de ellas han sufrido, aunque sea alguna vez, el peso de ser una mujer en una sociedad estructurada desde fundamentos machistas. Con el micrófono aún en mano, Maruh se proclama feminista y autoconvocada. No se tapa con ninguna bandera. Su cara, su voz y su experiencia como militante es todo lo que le queda. Su voz aleja las nubes. Su lucha viene de mucho antes, desde la concentración frente a la Casa de Mar del Plata en contra de la represión en el Encuentro Nacional de Mujeres del año pasado; de la movilización autoconvocada del #NiUnaMenos; de su propia experiencia como mujer, como militante y como feminista.

Militante de la agrupación "Las Rojas" da su apoyo a la causa.

Militante de la agrupación «Las Rojas» da su apoyo a la causa.

 

Esta tarde, no obstante, Maruh no está sola. Muchos artistas se solidarizaron con las víctimas y decidieron tomar una postura al respecto. La cantante de La Ola que Quería ser Chau, haciendo público su apoyo a Mailén y Rocío, acompañó las denuncias y visitó la plaza. Ya no queda nada de la antigua banda y muchos gritan, a modo de repudio, “La Ola que fue Chau”. A ella se sumaron otros músicos como Nahuel Briones, Mily Star y Jazmín Pimentel, a veces con canciones y otras veces con comentarios y opiniones; algunas activistas trans como Guillermo Celina, una de las organizadoras de la convocatoria que usa un nombre no binario, como su vestido y su barba, y que recuerda que “hay que acostumbrarse a preguntar cómo se autopercibe una persona porque el cuerpo, por sí sólo, no dice nada”;  un gran número de poetas, entre ellos Micaela Barsi que leyó alterada y atravesada por los acontecimientos, una poesía de su propia autoría: “Sonoridad / Empoderamiento / Hoy las pibas todas en movimiento / Porque si tocan a una, saltamos todas / Porque somos muchas y estamos cansada / Porque de ahora en más, el que tiene que tener miedo es el agresor / Porque si te caés, te levanto / Y al machito que te tiró / Entre todas lo aplastamos”.

 

Ya pasado el mediodía, Maruh vuelve a tomar la palabra para cerrar lo que llama “una jornada de visibilización y concientización”. La lluvia espera a que termine su discurso: “Es un camino que recién se empieza a andar. Hay una gran necesidad de acompañar, sabiendo que la Justicia no da respuestas. Hay que acompañar la denuncia y, en forma feminista, ir deconstruyendo y resignificando la cultura de la violación”. Sólo cuando calla, las primeras gotas de la tarde comienzan a caer.

“Quieren curar una uña encarnada cortando una pierna”

“Quieren curar una uña encarnada cortando una pierna”

El gobierno nacional tiene un extraño mérito. Haber logrado la unidad, si bien precaria, de las cinco centrales sindicales del país en un acto común por el Día del Trabajador.  Será el viernes, cuando las tres CGT y las dos CTA marchen y se movilicen en el centro de la Ciudad con una lista de reclamos hacia la administración de Mauricio Macri. Será el primer acto que contará con la presencia de Hugo Moyano (CGT Azopardo), Antonio Caló (CGT Alsina), Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca), Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores) y Pablo Micheli (CTA Autónoma). La movilización también contará con la adhesión de organizaciones de la economía social, como la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), organizaciones sociales y partidos políticos.

En el centro de la escena estará el pedido de las centrales para declarar la emergencia en materia laboral. Hugo Yasky, secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) pronosticó que, un eventual veto del Ejecutivo a las iniciativas que se discuten en esa dirección en el Congreso, dejaría a las centrales sindicales “ante la obligación de convocar a un paro general”.

En una entrevista exclusiva con ANCCOM, Yasky cuestionó la promesa de Macri de terminar con la precariedad laboral en medio de una ola de despidos. “Quiere curar una uña encarnada cortándote la pierna”, graficó.

El cuadro de “La manifestación” de Antonio Berni, y la camiseta de River firmada por el plantel visten las paredes de la oficina del dirigente sindical. Yasky sirve los vasos de agua y amplía su crudo diagnóstico a las últimas medidas sociales anunciadas por la gestión Cambiemos. “Son casi como grajeas homeopáticas para alguien que ha sufrido la embestida de un tractor”, juzga.

¿Cómo observa la situación social a cuatro meses de la asunción del gobierno de Mauricio Macri?

Los primeros cuatro meses del gobierno de Macri le han mostrado a los trabajadores el rostro del ajuste; hubo un aumento desmedido del precio de los alimentos, vino la devaluación que siempre tiende a licuar el poder adquisitivo de los salarios. A eso se le sumó el aumento de las tarifas de los servicios, y ahora el incremento del transporte. Todo esto no tuvo una compensación en términos de alguna política social que tendiera a mitigar el ajuste. Por el contrario, apareció de entrada un tema que generó rechazo y movilizaciones como fueron los despidos en el sector público, que ya suman 30 mil, y que generan un contagio en el sector privado, porque la actividad económica tiende a retraerse, producto del retroceso en el poder adquisitivo del salario.

Las grandes empresas, además de los despidos, están implementando suspensiones y cierre de turnos, ¿qué pasa con las pequeñas y medianas que tienen una situación más crítica?

Las grandes empresas tienen mayor elasticidad porque pueden manejar variables como el adelantamiento de las vacaciones o las suspensiones, pero las pequeñas empresas, de cinco o nueve empleados, tienen un margen muy reducido para eso y sienten de manera muy fuerte tanto la caída del consumo, porque no pueden acumular stock, como el aumento de las tarifas. Están entrando en un cuello de botella porque les cuesta hacer frente al aumento. El cuadro es muy preocupante porque el gobierno anuncia medidas que benefician  sobre todo a sectores poderosos de la economía pero no tiene una agenda para las PyMEs ni para los trabajadores, entonces todo se agota en una suerte de imprecación, te dicen que tenemos que esperar a que lluevan dólares o que vengan las inversiones. Pero nadie va a invertir productivamente en un país que hoy ofrece la posibilidad de obtener grandes tasas de ganancias en corto plazo especulando financieramente. Estamos en un problema de concepción de quienes gobiernan, que aplican esto como si fuera un dogma, porque es lo que desde las empresas que dirigen siempre han sostenido, y, lamentablemente, esto tiene arrinconado a grandes sectores de nuestro pueblo que empiezan a sentir las consecuencias.

¿Hay un exceso de confianza en la llegada de inversiones para reactivar la economía?

La denuncia de las sociedades de la familia Macri en Panamá nos pone frente a una contradicción. El presidente pretende que los inversores externos vengan a generar empleo, cuando los argentinos, incluido él, optan por los paraísos fiscales sacando la plata del país. Hoy en la Argentina se pueden hacer grandes negocios financieros, en tres o seis meses, y nadie va a correr el riesgo cuando las tasas de ganancia productiva están por debajo de las financieras. Está claro que el pago a los fondos buitre y el inicio del ciclo de endeudamiento les va a servir a los que siempre tuvieron el capital para hacer negocios y obtener tener más capital. A los que siempre tuvimos salarios de hambre,  nos va a servir para tener, todavía, más salarios de hambre.

¿Cuál es la situación de los empleados públicos que entraron en la revisión de contratos y que vencieron en marzo?

Macri heredó una situación de precariedad laboral en el Estado, que es una de las asignaturas pendientes que dejó el anterior gobierno y le facilitó esta sangría de despidos. Porque como eran contratados, ni siquiera se hicieron cargo de mandarles telegrama de despidos. Por eso el trámite fue tan grotesco, de hacer listas, con policías en la puerta que decían ´este entra y este no entra´ y no mandaron los telegramas. Lamentablemente esto nos dejó en una situación de vulnerabilidad total y los que siguen trabajando saben que tienen una inestabilidad absoluta en términos laborales. Porque a pesar de que Macri dice que ha venido al gobierno a terminar con la precariedad, su manera de hacerlo es echando a todos los precarios. Esto es como decir que vas a curar una uña encarnada cortando la pierna.

¿Se niega esta situación de forma deliberada?

Creo que la política del gobierno para los trabajadores, para los sectores populares, por un lado consiste en negar la realidad y utilizar el blindaje mediático para que los grandes medios de comunicación se dediquen a mostrar la caza de los corruptos como un deporte nacional y hablen de cualquier cosa menos de lo que están sufriendo los trabajadores. Y por otro lado, a tratar de montar escenas como la que hicieron en el Centro Cultural Néstor Kirchner donde trajeron al gurú de la felicidad para explicarles a los opulentos qué digna puede llegar a ser la pobreza cuando uno sigue los consejos de los manuales de autoayuda. Es lamentable que un gobierno en la campaña electoral dijera que no venía a hacer el ajuste, que no se dejaran correr por la política del miedo, y ahora están haciendo estas cosas.

¿Son suficientes las medidas que anunció el gobierno para los sectores populares, como la quita del IVA de los productos de la canasta básica de alimentos?

Son medidas casi como grajeas homeopáticas para alguien que ha sufrido la embestida de un tractor. Se ha hecho mucho daño con estas políticas, y el gradualismo ha brillado por su ausencia en lo que es más sensible a los sectores de menor poder adquisitivo como son  las tarifas de gas, electricidad y los alimentos. Hoy tenemos, por ejemplo, aumento de demanda en los comedores escolares como no lo veíamos en mucho tiempo, o vemos sectores de la clase media que van  retrocediendo en su nivel de consumo para limitarse a los alimentos.

El Centro CIFRA de la CTA está dedicado a la investigación del mercado de trabajo, el desarrollo económico y problemáticas sociales. ¿Qué importancia tiene contar con mediciones y estudios propios en contextos como el actual?

Al INDEC antes se lo ha criticado porque publicaba cifras que no se correspondían con la realidad. Ahora directamente no hay cifras, es clara la parálisis y el hecho de que algunas consultoras privadas prefieran no dar a conocer públicamente los números que registran porque implica mostrar un panorama que al gobierno no le conviene. Carecemos de parámetros objetivos. De todas formas, CIFRA (Centro de Investigación y Formación de la República Argentina) y CEPA (Centro de Economía Política Argentina) están dando datos sobre el incremento de la pobreza, el descenso de los salarios, los aumentos de los niveles de desocupación, que demuestran claramente que el efecto del ajuste es nocivo para los sectores populares. Dentro de los despidos hay algunas áreas que son muy sensibles, que tienen que ver con las prestaciones sociales y con las políticas para los sectores más vulnerables de la economía, que garantizaban desde los camiones sanitarios que recorrían los barrios, hasta los empleados del sector público que tenían a cargo tareas sociales como los planes de vacunación. Son muchas cuestiones que para un CEO de una multinacional deben ser absolutamente prescindibles. Acá se había logrado que las políticas públicas penetraran en sectores donde culturalmente es muy difícil que se puedan dar con la continuidad y seguimiento, como por ejemplo los planes de vacunación, Ahora se ha producido un daño que tiende a consolidar las desigualdades y las zonas de exclusión de la pobreza estructural.

En este contexto de ajuste para los sectores sociales más vulnerables, se postula la unidad de las cinco centrales el 29 de abril…

Se pudo, en un proceso que no fue fácil, acercar las posiciones de las cinco vertientes, tres de la CGT y dos de la CTA, y converger en la convocatoria a un acto el 29 de abril que, más allá de conmemorar el Día del Trabajador, puso en la mira la demanda de políticas sociales frente a este panorama de destrucción y avasallamiento de las conquistas de los más vulnerables. En ese sentido, el eje fue una ley de emergencia ocupacional que permita ponerle freno a los despidos que actualmente se están produciendo en el sector público y en el privado. Se busca generar una serie de instrumentos que les permita a las PyMEs hacer frente al pago de salarios con recursos del sector público para sostener el empleo mientras dure la crisis. En el caso del empleo público se prohíbe directamente el despido sin causa, y se plantea que esta emergencia se extienda por doce meses para evitar que se produzcan despidos en ese período. De alguna manera es tomar el argumento que da el propio gobierno, de que dentro de seis meses o un año la activación económica y las inversiones van a generar fuentes de trabajo. Nosotros decimos que hay que proteger durante ese período a quienes pueden quedar desempleados, porque hoy no hay condiciones para que el que pierda un trabajo pueda encontrar otro en lo inmediato. De todos modos, es asombroso que el gobierno se niegue a que haya una ley de estas características, porque se trata de una ley de emergencia, transitoria, y que permitiría a los que pierdan el trabajo en este período sostenerse hasta que llegue ese tiempo de reactivación que el gobierno dice que va a venir.

¿Por qué los proyectos de emergencia laboral plantean la reincorporación de los despidos a partir de marzo, si empezaron en diciembre? ¿Fue el límite del acuerdo que lograron?

En parte porque legalmente una ley no puede ser retroactiva en su aplicación, así que por más que pusiésemos el 1 de febrero, cualquier presentación ante la Justicia la haría vulnerable, y hasta se podría vetar ese artículo con un argumento legal. Entonces se acordó establecer un  corte el 1 de marzo. De todos formas, si se pudiera aprobar esa ley en un tiempo razonable –porque no serviría de mucho si se tarda tres o cuatro meses en sancionarla- sería muy útil porque muchos despedidos podrían ser revisados, otros tendrían el derecho a una suerte de indemnización que hoy se les niega porque eran contratados, y además significaría un paraguas abierto para ambos sectores. Esto es clave, porque los despidos no llegaron a 30 mil y terminaron, sino que es un proceso que tiende a avanzar.

El macrismo ya se manifestó en contra de una ley de emergencia laboral y de hecho está trabajando un proyecto alternativo…

Yo creo que están tratando de generar un efecto de distracción en la opinión pública, plantean ahora una ley de primer empleo que puede llegar a ser complementaria de la emergencia laboral, pero si no paras la sangría de los despidos qué sentido tiene hablar de una ley de primer empleo. Es una incoherencia absoluta. Está claro que quieren mostrar, ´nosotros tenemos iniciativa, sensibilidad social, acá está la prueba, tenemos la ley de primer empleo, pero la otra la vamos a vetar´. Es actuar de mala fe, porque si uno tiene realmente la preocupación de garantizarles el primer empleo a los jóvenes, lo primero que tienen que  hacer es parar con los despidos que  están haciendo en el nivel público, porque muchos de los que están despidiendo eran jóvenes que por primera vez tenían un trabajo estable.

De hecho el oficialismo está negociando con el Frente Renovador, que apoyaba la declaración de emergencia laboral, para llegar con los votos que necesita la nueva iniciativa…

Lo del Frente Renovador es preocupante porque si bien los diputados que componen ese bloque, integrado por muchos que vienen del sindicalismo, advirtieron que van a sostener el proyecto de ley, Sergio  Massa, que es el referente del bloque, en este momento parece haber sido seducido por la idea del oficialismo de que esta ley no tiene que avanzar. Lamentablemente se ha prestado a este juego, porque él tuvo un protagonismo muy grande el día que fuimos las cinco centrales al Congreso, donde se comprometió públicamente a apoyar la iniciativa, pero parece que ahora se inclina por un proyecto que, al igual que el del primer empleo, es complementario de la ley de emergencia. Se trata de un proyecto de asistir con créditos y otros incentivos a la pequeña empresa. Esto es absolutamente complementario, sería un excelente paquete de leyes de una agenda social muy necesaria. El viraje de Sergio Massa es reciente, de manera que todavía estamos midiendo qué efecto se produjo hacia adentro. Lo que sí sabemos, porque hemos hablado con ellos y otros lo han dicho públicamente, es que van a seguir sosteniendo el proyecto, tanto Facundo Moyano, como Daer por ejemplo. Ellos dicen que el bloque puede ir a una votación dividida y que ellos pueden llegar a traccionar muchos votos para conseguir la mayoría que hace falta. Y si se da la escena del veto presidencial, ahí ya estaríamos jugando en otra pantalla. Porque sin lugar a dudas, las cinco centrales estarían frente a la obligación de convocar a un paro general y una movilización a Plaza de Mayo, y quizás entraríamos a una escala de lucha que interpreten mejor la necesidad de los que hoy están acorralados por el ajuste.

¿Todos los sectores sindicales van a por lo mismo el 29?

Creo que va a haber matices que se van a advertir en los discursos y en el palco, pero en la calle va a haber homogeneidad absoluta. Sea del gremio que sea, quienes vayan saben que van a protestar contra el ajuste, a pedir una ley que pare los despidos, para lograr un respiro en una situación que asfixia cada vez más al bolsillo de los trabajadores. En ese sentido será un excelente acto y creo que es lo mejor y más inteligente que podríamos haber hecho: unificar las centrales y hacer una demostración de fuerza hacia el gobierno. Después, hacia adentro, habrá lecturas que tendrá que ver con los espacios de disputa dentro de la CGT a cargo de las tres vertientes que hoy se expresan, algunos especularán con los matices o cuánta gente movió cada una. Pero creo que la lectura más importante es la de pensar que si se trata de una multitud de trabajadores la que se expresa en las calles y lo hace en unidad, habremos dado un paso importantísimo para no estar tan desválidos frente a este gobierno que tiene la potencia de ser el gobierno que apoyan los grandes grupos económicos, la clase dominante, los sectores más opulentos, los dueños de medios de comunicación y los jueces que forman parte de una casta que defienden los intereses de las minorías de privilegio.

¿Hay conversaciones con la otra CTA sobre una posible unificación?

Sí, es un tema que se está conversando. Con Pablo Micheli hemos coincidido en la necesidad de que esta unidad en la acción que se ha venido llevando adelante, hemos estado juntos en varios actos con compañeros estatales, en el de CTERA con el paro y movilización, y ahora vamos a volver a estar juntos en la marcha convocada por las cinco centrales. La idea es que todos estos episodios en los que nos unifica la acción, nos vayan llevando hacia  un camino de unidad orgánica. Eso está en la agenda y creo que tendríamos que pensar que a lo largo de este año, se puedan dar pasos en concreto.

Publicado 27/04/2016