La voz después del llanto

La voz después del llanto

“Informamos la restitución de otro nieto, el caso número 119 que logramos resolver”, anunció Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo. Minutos después del inicio de la conferencia de prensa, destacó que esta es la quinta vez que una madre puede recuperar a su hijo apropiado durante la dictadura. En este caso, Sara había sido secuestrada en julio de 1975 en Tucumán: fue de una comisaría a la Jefatura de la Policía Provincial y luego a la Cárcel de Villa Urquiza, donde la mantuvieron secuestrada en calidad de detenida-desaparecida. En ese mismo lugar dio a luz entre mayo y junio de 1976. Apenas alcanzó a escuchar el llanto de su bebé cuando un enfermero se lo llevó. En noviembre de ese mismo año fue liberada.

Décadas más tarde, en 2004, Sara se puso en contacto con la Secretaría de Derechos Humanos de su provincia. Dos años después, llegó a la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI) comenzó una investigación sobre el caso. En 2007, su sangre fue ingresada al Banco Nacional de Datos Genéticos. Claudia Carlotto, titular de la CONADI, explicó a ANCCOM: “Es un caso especial porque no es de los históricos de Abuelas, que toda la vida estuvieron en el Banco de Datos. Tenemos bastantes casos de desaparecidos que no estaban denunciados por diferentes razones. Ella está un poco amedrentada, porque no la mataron pero la dañaron mucho, pero más que eso pudieron las ganas de estar con su hijo. Ahora van a empezar a tener la relación que tienen que tener”. Mario, por su parte, contó: “Siempre ves que encuentran a otro y otro. Pero hoy me toca a mí, no puedo no creer esto. Yo me encontraba a la noche revisando la página de Abuelas, mirando fotos de desaparecidos y pensando de quién sería. Y claro, nunca me iba a encontrar si mi mamá estaba viva”.

El nieto recuperado 119, Mario Bravo.

El nieto recuperado 119, Mario Bravo.

Mario vive en Las Rosas, Santa Fe, pero viajó a Buenos Aires y aquí se reencontró con su madre biológica. Respecto del abrazo guardado durante casi cuarenta años, Carlotto expresó: “Este encuentro fue de dos adultos, pero era la mamá abrazando al bebé. Yo los visualicé como que no se podían separar. Casi estaba naciendo él de esa madre, nuevamente. Mientras ella le susurraba a este hijo cosas que él sabrá, y yo alcancé a escuchar que nunca más se iban a separar”. El hombre, al mismo tiempo, estaba acompañado por su esposa y su hijo, el mayor de tres: “Mi mamá me hablaba mucho en su panza, todos esos meses. Es una madre que me vio después de 38 años y escuchó mi voz después del llanto. El click se hizo cuando decidí acercarme a Abuelas. Recibís un apoyo increíble, acá hay gente que trabaja en serio, que trabaja con amor”. La decisión fue tomada en febrero de este año, cuando se acercó a la sede de Abuelas en Rosario y se derivó su caso a la CONADI. Meses más tarde, se llevó a cabo la extracción de sangre que, en noviembre, confirmó que es hijo de Sara.

De todas maneras, el hombre manifestó que desde chico tenía sospechas sobre su verdadero origen. Había sido inscripto como nacido en 1977 con el apellido Bravo, en la localidad santafecina en la que se crió, que cuenta con 15 mil habitantes. Es uno de los cinco casos en los que un hijo apropiado durante el terrorismo de Estado logra reencontrarse con sus padres biológicos. Destacó la contención y el acompañamiento que le brindaron las personas de los organismos estatales que intervinieron en su investigación y búsqueda, sobretodo el apoyo de otros nietos restituidos que colaboran con estas instituciones y juegan un papel central en el proceso de recuperación de la identidad. Al plantearse la posibilidad de que alguien con dudas lo estuviera escuchando, relató: “Cuando empecé todo esto, mi madre de crianza estaba viva y yo no quería dañarla de ninguna manera. Pero hay gente que te va a contener muchísimo y además somos iguales, porque venimos del mismo lugar. Ellos también son hijos de desaparecidos. Entonces, hablan desde adentro”.

“Cuando empecé todo esto, mi madre de crianza estaba viva y yo no quería dañarla de ninguna manera", dijo el nieto 119, Mario Bravo.

“Cuando empecé todo esto, mi madre de crianza estaba viva y yo no quería dañarla de ninguna manera», dijo el nieto 119, Mario Bravo.

Mariana Zaffaroni, una mujer que recuperó su identidad en 1992, manifestó a ANCCOM: “Cada edad tiene lo suyo. Me parece que cuanto más grande sos, es más fácil aceptar algunas cosas y a la vez todo se vuelve más complicado por los hijos”. Por su parte, Mario dijo en relación a esto, que buscaba saber quién era, más por sus hijos que por él mismo. Y agregó: “Estamos siendo padres y necesitamos dar respuestas, porque los hijos van preguntando y quieren saber. Hay que ser consciente también de que te están buscando. Pensá en tu hijo, que lo podés perder y lo vas a buscar. Es duro. Pensás que te buscaban, y pensás que faltaste, que le faltaste a esa familia durante todos estos años, en tantos momentos”. En relación al logro de la restitución de la identidad de un nuevo nieto, Carlotto manifestó: “Esto nos da fuerzas para seguir. Es lo que nos anima a saber que no estamos haciendo mal las cosas”.

“Cada edad tiene lo suyo. Me parece que cuanto más grande sos, es más fácil aceptar algunas cosas y a la vez todo se vuelve más complicado por los hijos”, dijo Mario Bravo.

“Cada edad tiene lo suyo. Me parece que cuanto más grande sos, es más fácil aceptar algunas cosas y a la vez todo se vuelve más complicado por los hijos”, dijo Mario Bravo.

Leonardo Fossati, otro nieto restituido presente en la conferencia de prensa, habló con ANCCOM y se refirió a los hechos vandálicos que tuvieron lugar en el predio del Centro Clandestino de Detención Mansión Seré, ubicado en Morón, semanas atrás: “Esta es una reivindicación más, y de las más fuertes. Haber encontrado un nieto más demuestra que el trabajo está intacto, que seguimos para adelante y que la sociedad entera festeja estos hechos. Ante semejantes actos de cobardía, la mejor respuesta que puede haber es encontrar un nuevo nieto, llenar estos espacios de alegría, de contenido, de historia, de memoria, de verdad, de justicia. Hay personas que verdaderamente quieren volver atrás, que sienten sed de venganza. Es gente que no cree en la justicia, porque justamente en su momento no pidió justicia, sino que pidió asesinatos, desapariciones, torturas”. Minutos antes, Estela de Carlotto había hecho referencia a esos aires de revancha en el comunicado institucional: “Hoy, que desde algunos sectores políticos, mediáticos y judiciales se intenta dar voz a la idea de reconciliación, se evidencia una vez más la necesidad de profundizar las investigaciones. Aún hay desaparecidos con vida y graves delitos por juzgar” y aseguró que “por todos los nietos y nietas que desconocen su verdadero origen, por todas las víctimas que aún no alcanzaron justicia y para que estos crímenes nunca más se repitan” no permitirán “dar ni un paso atrás”.  

A días del inicio de un nuevo gobierno que comenzará el 10 de diciembre con Mauricio Macri como presidente de los argentinos, Fossati reflexionó: “La nueva etapa va a ser todo un desafío. Ellos (por el gobierno electo) tienen en sus manos la posibilidad de acompañar a los organismos de Derechos Humanos en su gestión, de continuar políticas de Estado que surgieron en estos doce años. Sabemos que son la derecha, sabemos a quiénes representan, pero también sabemos (y ellos saben) que tiene un costo grande ir para atrás con ciertos derechos ganados del pueblo”.

Los muchachos publicistas

Los muchachos publicistas

En alusión a una lectura que el escritor argentino Carlos Gamerro hace sobre un cuento de Julio Cortázar, si el peronismo fuera definido como lo que llenó de discursos a la cultura argentina, es plausible suponer que existió todo un aparato comunicacional del Estado que, en buena medida, contribuyó a dar cuenta de este movimiento de masas. Con el propósito de que los interesados de hoy puedan conocer o rememorar la realidad comunicativa de la primera década peronista, la Biblioteca Nacional Mariano Moreno exhibe, de manera inédita, una muestra con el material impreso de aquellos años,  en particular folletos.

“La incesante publicística. Folletos del primer peronismo (1945-1955)” se denomina la exposición, que comprende una recopilación de 237 impresos del período, bajo la curaduría de Roberto Baschetti, propietario de buena parte del material y sociólogo, archivista, historiador e investigador especializado en peronismo.

En diálogo con ANCCOM, Baschetti contó el origen de la muestra: “No hay antecedentes de exhibición de los folletos del peronismo y este año se cumplía el 70 aniversario del 17 de Octubre. Por eso, cuando a comienzos de año, le ofrecí al director de la Biblioteca, Horacio González, no sólo aceptó enseguida sino que aumentó la apuesta ofreciendo un catálogo, que, como sabemos, es lo que queda como valor histórico, lo que queda registrado en el tiempo. Las colecciones pasan, los catálogos quedan”.

Entre los temas que han sido referenciados en los folletos, se hallan las Fuerzas Armadas y de seguridad, el Tercer Mundo y la Tercera Posición, la economía (la industria, el campo y el agro), la salud, los deportes, la política, la nueva doctrina peronista y, por supuesto, el sindicalismo y la clase trabajadora. En relación a cuánto hay de actividad propagandística y cuánto de política concreta, Baschetti asegura que en estos documentos no hay un desfasaje entre lo que se comunica y el hecho fáctico: “Los folletos han sido dados a conocer una vez que el acontecimiento ha sido concretado”. Y ejemplificó: “Está reflejado el Estatuto del Peón, el Estatuto del Periodista, la normativa gremial que reúne a los docentes, la reforma de la Constitución en el 49, tan importante porque suma muchas mejoras a los derechos de los trabajadores”, entre otros acontecimientos.  

Antes que peronista, Olga, a los 84 años, se asume como “evitista”. Al recorrer la colección, con su andar pausado, no pudo evitar la añoranza por aquel período de novedad política y transformación social. Detuvo su mirada en un pliego con un  índice de precios máximos y de inmediato recordó la actual medida de Precios Cuidados, el acuerdo que la Secretaría de Comercio de la Nación ha logrado establecer con los proveedores comerciales para la canasta básica de artículos. “Habla de las posiciones de un gobierno por tomar decisiones para el pueblo en general. Cuando yo era chica no era raro que se impongan cuáles eran los precios que había que pagar por los alimentos”, señaló la mujer que suele visitar las bibliotecas junto a su hijo.  

María Elena (38) está acompañada por su marido y su pequeña hija. Está vinculada al peronismo, primero, desde lo afectivo, por tradición familiar, y, después, por una decisión personal. Conforme a sus palabras, en la colección “hay cosas que me contaban mis padres de la época en que eran chicos, como la defensa de la soberanía, Braden o Perón, la lucha contra el clero, la recuperación de los ferrocarriles o la inauguración de hospitales y escuelas”.

Ariel (24) estudia Historia. Una parte de su familia se declara peronista, con lo cual siempre ha tenido presente el gran cambio que significó dicho movimiento de masas. Sin embargo, con el correr de la carrera, prefirió adoptar un espíritu más crítico sin dejar de destacar los logros que beneficiaron a las clases populares. “El peronismo siempre terminó siendo la opción más potable y más valiosa, aún con sus defectos”, explicó Ariel. Y añadió su opinión comparativa sobre la política comunicacional del presente: “Encontré mucha publicidad de un Gobierno que se presenta de forma potenciada como defensor del obrero, algo que no se ve tanto en la publicidad actual. Aunque en este último tiempo, con la campaña electoral, se retomó esa mística del peronismo y es posible ver exacerbadas esas cuestiones: la lucha contra la oligarquía, la defensa de los derechos del trabajador, el apoyo a la educación”, por nombrar algunas. Ariel hace una pausa y se toma su tiempo, entre tantos anuncios y estímulos visuales, se pregunta qué repercusión y grado de efectividad tuvo todo este mensaje en sus receptores.

 

Para Baschetti (65), que desde los 25 años colecciona documentación de valor histórico, el trabajo de la Subsecretaría de Informaciones y Prensa de la Nación era capital ya que se hacía necesaria una comunicación acerca de la nueva realidad que se estaba desarrollando, a mucha velocidad, en aquel entonces. Hay que recordar que la Subsecretaría mantenía una actividad intensa, sobre todo a partir de 1949, en que estuvo a cargo del polémico Raúl Alejandro Apold, con un funcionamiento incesante durante las 24 horas en tres turnos rotativos por día.         

El padre de Alejandra (47) fue abogado de Juan D. Perón: Alejandro Díaz Bialet. En 1973 Bialet fue el senador que al momento de renunciar Héctor Cámpora y Vicente Solano Lima debía haber asumido provisionalmente la presidencia, pero que fue exiliado del país para permitir que Raúl Lastiri ocupara ese cargo. Por eso, esta muestra -a la que destacó como “brillantemente montada”-, le caló de manera muy melancólica. Observó una carátula que le suscitó de inmediato mucha emoción: la que alude al Día de la Lealtad. Atenta a las actividades de la biblioteca, se quedó con la sensación de que efectivamente existió “el amor de un pueblo por su líder Perón y, obviamente, por Evita”. Y especificó: “Vas viendo qué es lo que se iba haciendo en educación, en deporte, en salud, en economía. Todo eso que recibía un pueblo por primera vez en su vida”.

Puede apreciarse, entre marcos y cristales, las más variopintas imágenes que tenía la finalidad de no solo informar el novedoso proceso sino también cimentar entre los trabajadores un sentimiento de identidad y pertenencia nacional. La creatividad artística se basaba en una estética muy de la época que resaltaba los valores más positivos del movimiento. Un obrero vestido de overol azul sosteniendo, con mirada orgullosa al horizonte, un escudo protector de las fábricas y la leyenda “17 de Octubre”; un libro que semeja la Constitución rodeada de una escarapela en cuyo fondo las fábricas están funcionando a todo vapor y en la que puede leerse “Perón, cuatro años de su Gobierno”; “Perón cumple” y la foto del líder alzado a una locomotora; o “Los muchachos peronistas – Marcha Canción” y el dibujo de unos jóvenes alegres movidos bajo el impulso de la música. A estos mensajes se agregan también los folletos que fueron divulgados durante los tres años en que Perón se desempeñó en la Secretaría de Trabajo y Previsión, período que va de 1943 a 1946.  

Salvando la diferencia de coyuntura, es plausible establecer algún punto de contacto con la realidad del país. La posición de Baschetti está bien definida: “Los logros que se reflejaron en folletos en aquel primer peronismo podría bien ser retomado por los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández y también ser comunicados como conquistas sociales que, antes de estos doce años, no existían”, puntualizó el curador.  

Por su parte, no todos los visitantes sintieron una emoción positiva al recordar la época. A Luis (70), la muestra le retrotrajo a una sensación de pesadumbre al que describió como “el trabajo de adoctrinamiento de Apold”, y agregó: “Perón habla siempre al pueblo, a los maestros, al Congreso, al Ejército, pero no se los ve nunca ni a Perón ni a Evita escucharlos a ellos; con lo cual me recuerda un dicho de Carlos Zannini (n. del. r.: ex candidato a vicepresidente por el Frente para la Victoria): ´A la Presidenta no se le habla, a la Presidenta se la escucha’”.

En la presentación quedó afuera el material gráfico y de difusión que para Baschetti ameritaría otra exhibición: la propaganda opositora al peronismo. Es decir, “aquellos partidos que enfocaban la realidad de manera antojadiza a sus intereses y que al hacerlo quedaban descolocados ante esa misma realidad”, especificó el historiador.  

“La incesante publicística” tuvo su inauguración el 21 de octubre pasado y se mantendrá abierta al público hasta el domingo 13 de diciembre en el 1er piso de la Biblioteca Nacional “Mariano Moreno”, ubicada en Agüero 2502, en el barrio porteño de Palermo. Un compendio de imágenes que no es solo puro sentimiento peronista sino también documento de la memoria histórica de todo un pueblo.    

Sábados en la escuela

Sábados en la escuela

Los chicos están sentados, concentrados en sus cuadernos. La profesora acaba de leer un cuento y los garabatos surgen y se multiplican a toda velocidad en los cuadernos. La coordinadora pregunta si falta mucho, junta las hojas y los inquietos estudiantes pueden salir al patio. Todos a la carrera. Afuera los espera la tallerista de Capoeira. Es un hermoso sábado por la mañana en la escuela n°25 de Wilde, en el partido de Avellaneda, y el Centro de Actividades Juveniles (CAJ) funciona  a pleno.

Enmarcados en el Plan Nacional de Educación Obligatoria y Formación Docente 2012-2016, los CAJs tienen como propósito ampliar y mejorar las condiciones y formas de acceso, permanencia y egreso de los jóvenes en las escuelas. También fortalecer sus trayectorias educativas a través de la participación en diferentes acciones organizadas en tiempos y espacios complementarios y alternativos a la jornada y al horario escolar.

Según datos oficiales, 190 mil jóvenes de 2.542 escuelas de todo el país asisten a los CAJs, financiados íntegramente por el Ministerio de Educación de la Nación. En el programa trabajan unos 12 mil talleristas de distintas áreas.

La principal responsable del programa desde 2012 es Patricia Rodríguez. La coordinadora por el Ministerio de Educación destaca la implementación del programa en casi todo el territorio nacional, aunque lamenta que en la Ciudad de Buenos Aires no se haya puesto en marcha. “Participan 23 provincias y la única jurisdicción donde no tenemos potestad es en la Capital Federal. El Ministerio de Educación porteño nunca quiso firmar convenio, nosotros sí. Los CAJs son una política de Estado, se proponen anualmente y en la Ciudad –aunque no abiertamente- siempre se rechazó la propuesta. No se lograron avances de ningún tipo”, puntualiza en diálogo con ANCCOM.

Centros de Actividades Juveniles (CAJ). COL JORGE W. ABALOS , LOS TELARES , SGO. DEL ESTERO . 2015   FOTOS GENTILEZA CAJ.

Los participantes del CAJ de Los Telares, Santiago del Estero. 

En la implementación de los CAJs intervienen, aportan recursos y equipos técnicos, la Dirección Nacional de Políticas Socioeducativas del Ministerio de Educación de la Nación y las direcciones de Nivel, direcciones y coordinaciones de Políticas Socioeducativas de los ministerios provinciales.

A nivel programático, los objetivos principales son contribuir con la calidad educativa; generar las condiciones adecuadas para la construcción de aprendizajes significativos para los jóvenes en la escuela; fortalecer estrategias de inclusión escolar y pertenencia institucional de adolescentes y jóvenes que, por distintos motivos, no están cursando estudios en el nivel secundario; y promover el recorrido por espacios complementarios a los curriculares para la apropiación de conocimientos. “La idea no es pensar que el CAJ es el espacio para la realización de estos fines y la escuela no, sino poder trabajar en conjunto y ver qué está pasando con los jóvenes. También es una manera de interpelar a la escuela secundaria. En este sentido, los CAJ vienen a cuestionar un poco lo que es el origen de la escuela, su matriz conservadora. La finalidad es que haya un diálogo entre estos dos formatos y que se interpelen y dialoguen”, reflexiona Rodríguez.  

El trámite para poner en marcha los talleres que dan vida a las escuelas cada sábado supone una articulación entre el Ministerio de Educación de la Nación  y cada una de las jurisdicciones. Tras la firma de los convenios marco entre la Nación y los distritos, las instituciones educativas que desean incorporarse formalizan la solicitud a las autoridades provinciales y al Equipo Jurisdiccional. Cada distrito puede definir los días y horarios de funcionamiento en los CAJs, privilegiando los sábados para el desarrollo de las actividades. En todos los casos deben cumplir por lo menos con una jornada semanal de cinco horas para llevar adelante las actividades.

Centros de Actividades Juveniles (CAJ). Escuela Secundaria N°17, Villaguay, Entre Rios. 2015   FOTOS GENTILEZA CAJ.

Las participantes del CAJ de la Escuela Secundaria N°17, Villaguay, Entre Rios. 

 

Los CAJs están abiertos para los estudiantes de las escuelas donde se desarrollan las actividades y jóvenes de la comunidad que pertenezcan a otras instituciones educativas. También para aquellos que no asistan a ninguna escuela. Además, el Programa se implementa bajo la modalidad de Educación en Contextos de Encierro, lo que implica el trabajo con jóvenes involucrados en procesos judiciales pendientes de resolución o resueltos y que se encuentren alojados en instituciones de encierro.

Cada escuela puede optar entre las orientaciones de Educación Ambiental, Arte, Comunicación y Nuevas Tecnologías, Ciencia y Deportes. A su vez, el Programa retoma la propuesta del Ministerio y propone el trabajo de tres ejes transversales: Participación Juvenil y Derechos Humanos, Prevención del Consumo Problemático de Drogas y Educación Sexual Integral. “Tanto las orientaciones como los ejes transversales fueron seleccionados en función de los lineamientos trabajados por el Ministerio y que están presentes en todas sus políticas”, afirma Rodríguez.

El programa también contempla un Proyecto Transversal de Lectura y Escritura, con prácticas que amplíen la formación literaria y multipliquen los encuentros con la cultura escrita. “Una de las cosas más importantes es que los chicos pueden tomar la palabra, porque en definitiva todos los talleres del CAJ tienen que ver con apropiarse e ir construyendo ellos y con los demás su propia subjetividad, ya sea desde la palabra, el canto, el baile o cualquier actividad física. Otra cuestión fundamental es la reivindicación del placer: no estar pendientes de la nota, de lo ‘correcto’ o ‘incorrecto’ que en el caso de la lectura y la escritura están muy asociadas a la práctica escolar. Poder volver al disfrute de eso y vincularlo con lo lúdico. Creo que ahí hay un componente creativo e imaginativo inmenso”, subraya  Micaela González, profesora de Escritura Creativa, en diálogo con ANCCOM.

Centros de Actividades Juveniles (CAJ). Escuela Corbeta Uruguay , Pinamar, Buenos Aires,  2015   FOTOS GENTILEZA CAJ.

Participantes del CAJ de la escuela Corbeta Uruguay en Pinamar, Buenos Aires.

 

Otro proyecto dentro de los CAJs -y que está vinculado con la orientación de Comunicación y Nuevas Tecnologías- es el de Radios Escolares, que se realiza en conjunto con la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) y la Autoridad Federal de Servicios Audiovisuales (AFSCA) y propone el desarrollo de diferentes estrategias y ámbitos de trabajo escolar que estimulen la investigación, la expresión y el intercambio entre los alumnos, los educadores y la comunidad.

El proyecto impulsa el uso del medio para la comunicación y el aprendizaje, y se lleva adelante a partir de experiencias regionales o provinciales con equipamiento básico para la comunicación radiofónica.  “Hay 197 radios escolares al aire y son una herramienta pedagógica fantástica para los jóvenes. A partir de esto también se han dado muchas cuestiones de acreditación de contenidos con trabajo con los docentes, capacitación y asistencia técnica. Este año vamos a terminar de instalar 240 radios en convenio con el AFSCA”, señala Rodríguez.  

En las escuelas, los alcances del programa se traducen en el vínculo con los estudiantes. Así, lo explicita la coordinadora de la Escuela n°25 de Wilde. Belén Gessaroli traza la historia del establecimiento con los ‘talleres de los sábados’. “Comenzamos hace poquito, unos tres meses aproximadamente, pero lo que más rescato es el vínculo que se va formando con los chicos. Desde entrar la primera clase sin conocernos y brindarse, empezar de a poquito, tímidos, sin demasiada confianza; al día de hoy, se nota muchísima diferencia: se sienten mucho más cómodos, nos cuentan cosas bastante personales y nosotros tratamos de orientarlos. Eso también es lo bueno del Centro de Actividades, no solamente lo lúdico sino  también la parte emocional, espiritual, los valores, que puedan expresarse, que puedan decir lo que sienten , ya sea a través de la escritura, la radio o el cuerpo y salir un poco de la rutina de ellos que quizás no es tan buena”, subraya.

Centros de Actividades Juveniles (CAJ). Corbeta Uruguay , Pinamar, Buenos Aires,  2015   FOTOS GENTILEZA CAJ.

Pintando murales con el CAJ de la escuela Corbeta Uruguay, Pinamar, Buenos Aires. 

Los chicos se toman su tiempo para entrar en confianza con sus talleristas. Los abrazan, se dejan abrazar, hacen chistes y colaboran aunque quizás la actividad de ese día no sea su favorita. Tamara Goncálvez, de 13 años,  pasó de no querer saber “nada” con la radio porque le daba vergüenza, a acompañar a la tallerista de Radio cantando jingles en las tandas comerciales. “Al principio venía para no estar en casa ayudando a limpiar o aburrida. Pero ahora me gusta estar con la gente del CAJ y compartir las reuniones de los sábados junto a mi amiga Antonela y uno de mis hermanos”, reflexiona. Cada tanto sorprende a todos con sus riquísimas tortas fritas caseras.

 

La complicidad empresaria con la dictadura

La complicidad empresaria con la dictadura

El Senado aprobó, el pasado 25 de noviembre, la creación de una Comisión Bicameral para investigar las complicidades empresarias en los crímenes de lesa humanidad cometidos en la Argentina durante la última dictadura cívico militar.

La creación del organismo fue aprobada por los legisladores del FPV y parte del interbloque socialista liderado por Rubén Giustiniani. El PRO y la UCR, en cambio, se retiraron del recinto.

La nueva comisión estará compuesta por cinco diputados y cinco senadores nacionales, de los cuales tres de cada cámara serán de la primera minoría, uno de la segunda minoría y uno por la tercera minoría. El cuerpo se propondrá confeccionar un documento que identifique a «los actores económicos y técnicos que contribuyeron o se beneficiaron con la dictadura aportando apoyo económico, técnico, político, logístico o de otra naturaleza». Además, la norma crea, dentro del ámbito del Parlamento, el Archivo Nacional de la Memoria, la Verdad y la Justicia, con el objeto de poner a disposición gratuita del público toda la documentación vinculada al tema, utilizada por la bicameral.

El autor del proyecto recientemente convertido en ley fue el diputado nacional del FPV Héctor Recalde y la Cámara Baja lo había aprobado en noviembre pasado. En diálogo con ANCCOM, Recalde dijo que es necesario hablar de la participación y complicidad de los empresarios con los militares, ya sea “marcando” a trabajadores o aportando infraestructura o logística que permitió la violación de los derechos humanos. Según el legislador, estas maniobras tenían un triple fin: ideológico, económico y de sometimiento. “Ideológico porque estaban de acuerdo con el ministro de Economía Alfredo Martínez de Hoz, económico porque maximizaban la rentabilidad empresarial, y de sometimiento porque era mucho más fácil para ellos conducir una empresa con trabajadores que no reclamen nada”. Además, especificó: “Hay ejemplos muy claros, uno es Carlos Blaquier, del ingenio jujeño Ledesma, y el otro es Vicente Massot, directivo del diario La Nueva Provincia”.

Hector Recalde en la Carpa de la Resistencia ubicada frente al palacio de tribunales en la plaza Lavalle durante el repudio nacional a "La noche del apagón" ocurrido en Ledesma el 20 de julio de 1976.

Hector Recalde en la Carpa de la Resistencia ubicada frente al palacio de tribunales en la plaza Lavalle durante el repudio nacional a «La noche del apagón» ocurrido en Ledesma el 20 de julio de 1976.

Recalde enumeró otros posibles casos a investigar, algunos de los cuales ya ingresaron en la justicia: Papel Prensa, Loma Negra, Ledesma, Mercedes Benz, Molinos Río de la Plata, Grupo Bunge y Born, Editorial Atlántida –especialmente las revistas Para Ti, Gente y Somos-, La Veloz del Norte, Celulosa, Grafa, Sociedad Rural de Junín, la ceramista Lozadur Cattaneo, los astilleros Mestrina y Astarsa, y la metalúrgica Bovapi.

Walter Bosisio, sociólogo y co-autor del libro La dictadura del capital financiero, explicó a ANCCOM que la única manera de poder investigar judicialmente las complicidades del sector civil es que aparezcan atadas a delitos de lesa humanidad, dado que no prescriben.

Participación civil

Según Bosisio, el armado de la estructura económica y el manejo de los recursos financieros del Estado estuvieron a cargo de civiles que representaban los intereses del capital privado, tanto nacional como extranjero. A su vez, el autor comentó que el proyecto económico de la dictadura había tenido antecedentes en el gobierno de facto anterior y en las políticas económicas del ex ministro de Economía de Isabel Perón, José Celestino Rodrigo. Pero, subraya, que a partir del 76 se acabaron los escrúpulos: “Esta vez estaban dispuestos a todo. Los derechos humanos se vieron afectados, no solo en el plano civil y político, sino que también los derechos económicos, sociales y culturales porque no había  garantía de nada, ni siquiera del derecho a la vida, ni al trabajo”. En esa misma tónica, Eduardo Codianni, investigador y miembro de la subgerencia de derechos humanos del Banco Central (BCRA), coincidió con la postura de enfocar la cuestión desde otro ángulo: “La teoría puede ser distinta: el poder económico usó a los militares para imponer un nuevo sistema. La única forma que había para derrumbar la organización de los trabajadores existente en ese momento era mediante la represión.”

Santiago Kosiner, politólogo y también miembro de esa Subgerencia del Central, amplió respecto de la vinculación de las violaciones de los derechos humanos con el sector civil: “Colaboración y complicidad son sinónimos, pero de lo que nosotros hablamos es de participación civil concreta. Acá están Santiago Soldati, Juan Alemann, Alfredo Diz, personas de distintos grupos económicos que estuvieron en el directorio del BCRA, todo el sector privado manejando el órgano de control financiero y haciendo una reforma profunda del sistema desde el Estado que beneficia a los privados”.

Marcha y escrache de agrupación HIJOS a Vicente Massot y Carlos Blaquier  el 23 de mayo de 2015.

Marcha y escrache de agrupación HIJOS a Vicente Massot y Carlos Blaquier el 23 de mayo de 2015.

En la conformación del gabinete de Martínez de Hoz puede verse el tejido de alianzas con las grandes corporaciones. Bosisio especificó la continuidad con el presente: “Personas muy cercanas a Martínez de Hoz, como Guillermo Walter Klein -jefe de la Cámara Argentina de Comercio- y Héctor Maidal -abogado especializado en defender a multinacionales-, quedan a cargo de sectores importantes de la economía nacional”.

Estos dos funcionarios se asociaron en un estudio jurídico y hoy forman parte de los bufetes más importantes del país. Entre sus clientes se encuentran corporaciones como Citibank o CEO de multinacionales como el flamante ministro de Energía, Juan José Aranguren. Bosisio explicó que Maidal y Klein  tenían un doble juego:, mientras ocupaban cargos públicos, defendían desde sus estudios jurídicos a las multinacionales y sobre todo a bancos extranjeros.

Otro nombre rutilante acusado de complicidad con los militares es el de Jorge Zorreguieta -padre de Máxima, la reina de Holanda-, quien fuera miembro de la Sociedad Rural, a cargo de la Secretaria de Agricultura. También pueden agregarse el primer interventor del BCRA, Alfredo Cassino, y su sucesor, Alfredo Diz, un economista neoliberal discípulo de Milton Friedman. También formaron parte del aparato económico estatal el dueño de la fábrica de electrodomésticos Longvie, Christian Zimmerman, quien fuera viceministro de Economía; Narciso y Juan Ocampo –autoridades del Banco Ganadero Argentino- que asumieron al frente del Banco Nación y Juan Alfredo Echebarne –mano derecha de Martínez de Hoz y amigo del por entonces ministro del Interior Albano Harguindeguy- que estuvo a cargo de la Comisión Nacional de Valores.

Los Ocampo, además, fueron investigados por el secuestro y los tormentos sufridos por los hermanos Iaccarino, empresarios que fueron extorsionados para desprenderse de sus bienes económicos. Por su parte, Echebarne se encuentra actualmente en prisión por haber sido cómplice de delitos de lesa humanidad en el caso Banco de Hurlingham. La situación de este último funcionario fue estudiada a fondo por Bruno Nápoli, Celeste Perosino y Bosisio en una investigación publicada en 2013 por la Comisión Nacional de Valores. Estos aportes permitieron documentar que Echebarne presenció torturas y extorsiones: “Empresarios secuestrados reconocen las voces de Echebarne y René Garris, y si bien no saben si aplicaron ellos las torturas, estuvieron presentes y preguntaban. Por ende, son partícipes de delitos de lesa humanidad. Los militares sabían qué preguntarle a los militantes, pero no a los empresarios, entonces llegaban los técnicos y participaban. Veían un cuerpo torturado, cómo se violentaban los derechos humanos y no decían ni hacían nada para detener eso porque son partícipes”, detalló Bosisio, y agregó: “Con el informe que nosotros armamos, mostramos con pruebas cómo hubo participación directa en la toma de decisiones de favorecer a una empresa u otra. Cabe suponer que beneficiaron a algunos grupos y hasta aprovecharon la información extraída bajo tortura para tomar ciertas decisiones. En ese sentido, la justicia pudo obrar y meterlo preso a Echebarne, pero a Garris todavía no, y uno puede suponer que como él hubo otros personajes similares”.

Marcha y escrache de agrupación HIJOS a Vicente Massot y Carlos Blaquier el 23 de mayo de 2015.

Marcha y escrache de agrupación HIJOS a Vicente Massot y Carlos Blaquier el 23 de mayo de 2015.

Casos notables

Entre los casos paradigmáticos, aparecen en primera instancia los vinculados directamente a Martínez de Hoz como empresario: la siderúrgica Acindar y la Compañía Ítalo-Argentina de Electricidad. En la primera firma, Martínez de Hoz abandona el directorio dos semanas antes de que se diera el golpe y deja en su lugar al general retirado Alcides López Aufranc a cargo de la empresa. López Aufranc –fallecido en abril de este año- participó de la represión en una huelga ocurrida el año anterior a su asunción y poco después se jactaba de que 23 empleados ya no darían problemas porque “estaban bajo tierra”. “En el caso de la Ítalo –explica Kosiner- Martínez de Hoz era uno de sus accionistas. Y en un momento en que la política militar se caracterizaba por reducir el gasto público, decidió contradictoriamente estatizar la empresa y pagar cuatro veces más de lo que valía. El Estado compró cables viejos que no tenían ningún valor, hicieron un negociado enorme”.

En el caso del Banco de Hurlingham, veintinueve personas correspondientes al directorio de la entidad fueron secuestradas y llevadas a Campo de Mayo. Allí fueron torturadas e interrogadas por miembros de la Comisión Nacional de Valores, dato que fue corroborado por el juez federal Daniel Rafecas en 2010, a partir de una nota en la cual el Teniente Coronel Raldes agradecía al organismo por los servicios prestados de cuatro técnicos de esa institución.

El caso de Papel Prensa –que permitió el despegue de Clarín hasta obtener una posición dominante en el mercado- también es paradigmático. En ese caso, Lidia Papaleo de Graiver denunció haber sido secuestrada y obligada a vender a precio vil su paquete accionario, tanto ella como los demás socios. Casos como los de las automotrices Ford y Mercedes Benz, donde desaparecieron obreros sindicalizados y militantes, también marcan una clara participación entre los civiles y los militares para la violación de derechos humanos.

Futuro

Celeste Perosino, titular de la subgerencia de derechos humanos del Banco Central, opina que es necesario continuar abriendo la agenda de los derechos humanos: “Hay que saldar deudas históricas y mirar para la dictadura, porque aquellas políticas proyectaron continuidades en democracia. De hecho, por ejemplo, en la CNV muchos de los que llegaron con los militares siguieron trabajando hasta los 90”. Codianni complementó: “Cuanto más se hable de las cuestiones, más se abran los archivos, más servirá. Aunque sea para la historia y para que las cosas no se repitan. Y, por supuesto, se juzgue lo que tenga que juzgarse”.

El proyecto de Recalde recientemente aprobado había recibido el rechazo de las grandes corporaciones: los primeros en quejarse fueron UIA, IDEA, AEA y la Cámara Argentina de Comercio.  Una de las críticas fundamentales fueron que se buscaba perseguir y estigmatizar a los empresarios y que el Poder Legislativo buscaba suplir funciones del Judicial. “La comisión bicameral –respondió Recalde- no juzga, ni lesiona garantías constitucionales ni afectan la división de poderes establecida por la Constitución”.

“Uno podría preguntarse por qué ahora –completa Perosino- Me parece que tiene que ver con una cuestión histórica, hubo otras urgencias de investigar antes de meterse en la pata económica. Hubo que tapar otros baches, tratar de avanzar por lo más urgente, y me parece que eso también tiene que ver con un cambio de poder y hurgar en la pata cívica del asunto”.

Mauricio Macri, presidente electo

Mauricio Macri, presidente electo

Mauricio Macri es el nuevo presidente de la Nación. El representante de la Alianza Cambiemos obtuvo el 51,4% de los votos frente al 48,6%  que eligió a Daniel Scioli, del Frente para la Victoria. Luego de doce años de gobiernos kirchneristas, el próximo 10 de diciembre asumirá por primera vez el país el representante de una fuerza de derecha que llegará a la Casa Rosada a través de elecciones democráticas. Será también, en la historia política moderna, el primer mandatario que no es radical ni peronista y el primero egresado de una universidad privada. Encuentra a un país con un notable equilibrio de fuerzas: no contará con mayoría en las cámaras legislativas, casi todas las provincias quedarán en manos de su oposición, aunque su puñado de gobernadores tendrá a cargo al 78% de la población. Y, como finalizó evidenciado en el primer balotaje presidencial, el electorado quedó dividido en partes casi iguales. Sobre 25 millones de votos, la diferencia fue apenas de 705.000 sufragios.

“Tendría que agradecerle a tantos, porque hace más de diez años que venimos soñando con contribuir”, comenzó su discurso Mauricio Macri.

“Tendría que agradecerle a tantos, porque hace más de diez años que venimos soñando con contribuir”  dijo el presidente electo Mauricio Macri, luego de ser presentado por la nueva vicepresidenta, Gabriela Michetti, ante una multitud que venía generando un clima de fiesta en Costa Salguero desde temprano. Casi la mitad de sus palabras fueron dedicadas a agradecerle a todas las personas que lo acompañaron en su camino a la Casa Rosada, con Lilita Carrió y Ernesto Sanz encabezando la lista, seguidos por “mi querida Gabi”, refiriéndose a su compañera de fórmula, a María Eugenia Vidal, sus hermanos, esposa e hijos, sus padres -por “darme tantas oportunidades”-, sus amigos, y hasta Anita, ex secretaria de su papá Franco y actual suya.

El nuevo presidente de Argentina se encargó de remarcar que “hoy es un día histórico, un cambio de época. Yo les dije que si ustedes creían iba a ser maravilloso”. Pidió que todos se sumen al cambio, aún quienes no lo votaron, y apeló a evitar el “revanchismo”. Luego les habló a todos aquellos que le abrieron las puertas de sus casas y permitieron que “vea el mundo a través de sus ojos”. Especuló con que ahora se estarían preguntando “¿Será verdad que con nuestro voto vamos a cambiar la historia?” Él mismo se apresuró a responder: “Sí, es la verdad, lo hicimos.”

Por último, apenas pasadas las 22 y con Tan Biónica como banda de sonido, pidió una “agenda de cooperación” para impulsar todo lo que el pueblo argentino tiene para aportarle al mundo.

Minutos antes de esto, había hablado una triunfante Gabriela Michetti, encargada de abrir la palabra victoriosa: “Vamos a trabajar fervientemente, duramente, con alegría y esfuerzo también, para que todos podamos vivir mejor. Sé que hoy hay muchos hogares de la Argentina que están festejando, pero también sé que probablemente haya muchos en los que la gente esté preocupada y con sensaciones de temor. Yo le quiero decir a ellos, que especialmente para ustedes vamos a trabajar.” Y remató: “Lo que más necesitamos es paz, lo que más necesitamos es amor.”

“Lo que más necesitamos es paz, lo que más necesitamos es amor», remató Mauricio Macri.

En el búnker de Cambiemos, ubicado en la Costanera, el clima del primer balotaje de la historia política del país ya se constituía como triunfalista desde el inicio de la jornada: al ingresar al complejo Costa Salguero todo indicaba que se estaba asistiendo más a una fiesta que al centro de campaña de un candidato presidencial. Desde las 17, cuando ANCCOM se hizo presente en el lugar, ya sonaba música de festejo, de a ratos se encendían las cámaras de canales de noticias para transmitir en vivo y la gente corría desde cualquier punto en que se encontraran del recinto para agolparse y mostrarse en la pantalla sonriente y confiada.

A las 18, comenzaron a aparecer en las pantallas gigantes instaladas en el lugar letras gigantescas que aseveraban “Argentina ya eligió Presidente”, momento que se sincronizó con una nueva transmisión en vivo de las cámaras y el revuelo de todos los presentes.

Unos 15 minutos después tuvieron lugar las primeras declaraciones en el escenario montado en el centro del búnker, con una gran pantalla de fondo y globos celestes y blancos suspendidos en lo alto. Marcos Peña, jefe de campaña, subió a la plataforma y agradeció a los fiscales por su compromiso con el escrutinio “hasta el último voto”.

“La democracia argentina recuperó equilibrio y a la noche sabremos si habrá alternancia,” afirmó Ernesto Sanz.

El segundo en tomar la palabra, ante el canto envalentonado de los presentes, fue Ernesto Sanz, ex candidato a la presidencia por la UCR y posible Ministro de Justicia por Cambiemos, quien celebró la fiesta de la democracia que se vivió durante la jornada electoral: “La democracia argentina recuperó equilibrio y a la noche sabremos si habrá alternancia.”

Apenas pasadas las 19:30, cuando ya habían circulado desde temprano varias bocas de urna no oficiales que daban a Cambiemos como ganador, se asomó al escenario Alfredo Cornejo, dirigente radical y electo gobernador de Mendoza. Abrió la segunda tanda de declaraciones agradeciendo en nombre de la provincia que representa a los ciudadanos que se animaron a cambiar: “Nos merecíamos una democracia con alternancia, no una de un solo color que hacía lo que quería con los argentinos. Hemos dado un gran paso eligiendo a Mauricio Macri como Presidente de los argentinos.”

Lo siguió, tras una ovación, la reciente electa gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal: “¡Qué alegría! ¡Cómo millones nos volvimos a encontrar en las urnas y nos estamos abrazando con esperanza!”. Vidal agradeció a los fiscales por estar desde temprano contando los votos, remarcó lo histórica e inolvidable que esta noche resultaría, e invitó a los presentes a esperar con paz los resultados oficiales, como ya había hecho durante la primera vuelta: “Venimos bien, venimos muy bien.”

Los asistentes cantaban: “Oh le le, oh la la, Mauricio Presidente, Horacio en la ciudad”.

Después de algunas palabras de Gerardo Morales, electo gobernador de Jujuy por Cambiemos, habló el jefe de Gobierno electo por la Ciudad de Buenos Aires:  “Queremos vivir en paz y recuperar la unión del pueblo argentino”.” Mientras tanto, los asistentes ya cantaban: “Oh le le, oh la la, Mauricio Presidente, Horacio en la ciudad”.

A las 20:30 el búnker ya estaba completamente lleno, y al canto de “se siente, se siente, Mauricio Presidente” las pantallas iban mostrando los resultados parciales en cada una de las provincias, ante los festejos y abucheos de la multitud, dependiendo el resultado. Los primeros cómputos, poco representativos del resultado final, estiraban la ventaja a nueve puntos y ayudaban a exaltar a la concurrencia.

Ya desde la mañana, cuando Mauricio Macri se presentó a votar en la Escuela N° 16 de porteño barrio de Palermo, se mostró muy confiado y contó que el resto del día iba a estar muy relajado, con planes de ir a jugar al fútbol y comer en su casa con su familia y amigos, entre los cuales se incluía a Elisa “Lilita” Carrió, líder de la Coalición Cívica y diputada por Cambiemos. Mientras colocó el voto en la urna se mostró sonriente y confiado: “Comienza una nueva etapa en la Argentina”.

En el bunker de Costa Salguero, las pantallas mostraron en reiteradas oportunidades el discurso del cierre de campaña de apenas 11 minutos que Macri había dado el pasado jueves 19 al pie de la Quebrada de Humahuaca, frente al monumento de los Héroes de la Independencia, en el que adelantaba: “Confío en cada uno de ustedes y necesito que ustedes también confíen en ustedes y su capacidad (…) eso nos va a llevar a esa Argentina inmensa con oportunidades de trabajo y pobr… progreso para todos.”

Mauricio Macri concluyó la nocha al grito de “¡Cambiemos! ¡Cambiemos! ¡Cambiemos!”

El pequeño furcio entre las palabras “pobreza” y “progreso” se había dado en uno de los picos más emblemáticos del discurso que efectuó el por entonces candidato del PRO frente a unas 15.000 personas en Jujuy, y fue luego comentado en los medios e infinitas publicaciones en las redes sociales. También, haciendo alusión al monumento que lo observaba, mencionó la posibilidad de que todos pueden ser “héroes de la Independencia”, refiriéndose a la posibilidad de convertirse en los protagonistas de la historia: “Llegó una etapa en la Argentina en que necesitamos más escuchar que hablar, trabajar juntos, decir que esto es posible.” Y concluyó: “Se acabó la hora de las banderas que nos ponen de un lado o del otro, ahora es todos juntos trabajando por esta Argentina que soñamos.”

Tanto en aquella ocasión como ante el reciente triunfo, sin mencionar muchas propuestas concretas más que expresiones de deseo como “pobreza cero” o la necesidad de “combatir y echar al narcotráfico del país”, cerró sus palabras con una suerte de mantra estilo PRO, al grito de “Cambiemos Argentina. Los quiero, los amo, vamos todos juntos.” Hoy, ya Presidente, concluyó nuevamente gritando desaforado: “¡Cambiemos! ¡Cambiemos! ¡Cambiemos!”