Por Tais Grimberg
Fotografía: Clara Pérez Colman y Valentina Gómez

Dirigentes gremiales de las más diversas extracciones, como Pablo Moyano, Hugo Yasky y Ricardo Peidró estuvieron en el acto contra el cierre de la Agencia Nacional de Noticias. También se movilizaron organizaciones sociales y cientos de periodistas. El gobierno de Javier Milei quiere terminar con una institución que lleva casi 80 años brindando servicios informativos a todo el país y al mundo. Más de 700 trabajadores pueden quedar en la calle.

Tras el anuncio del viernes pasado del cierre de Télam por parte del presidente Javier Milei en su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Parlamento, SiPreBA y FATPREN convocaron a un abrazo simbólico en frente del histórico edificio de la calle Bolívar para el lunes 4 de marzo. Sin embargo, la noche anterior a la convocatoria, el gobierno valló dicho edificio e impidió el ingreso de los trabajadores. La empresa detuvo el funcionamiento del portal digital de Télam y envió un comunicado a todo el personal en el que les informó que dispensa de ellos por los próximos siete días. De todas formas, se llevó a cabo el abrazo simbólico con una gran convocatoria y la presencia de dirigentes sindicales, legisladores de diferentes bloques y organismos de derechos humanos en defensa de la Agencia Nacional de Noticias.

El mismo viernes los trabajadores y las trabajadoras comenzaron a idear el abrazo simbólico, el cual fue convocado el domingo después del anuncio. En diálogo con ANCCOM, las delegadas gremiales de Télam Alicia Gallizzi y Andrea Delfino describieron los sucesos desde el anuncio: “Milei, a la hora de ser presidente electo, eligió señalar a los medios públicos y su intención de privatizar, entonces lo que sentimos el viernes es que se aceleraron todos los tiempos y que había que tomar acciones” dijo Delfino.

“En ese momento estuvimos en alerta, claramente, y pasamos por los dos edificios para estar con los compañeros sábado y domingo” dijo Gallizzi, y Delfino agregó que “Lo primero que resolvimos el viernes fue contener a los trabajadores, porque el impacto de tener que escribir el cable  en el cual el presidente decía que iba a cerrar tu empresa fue muy duro para los compañeros, lo hicieron con un altísimo nivel de profesionalidad”.

Sin embargo, al poco tiempo de volver a sus casas el día domingo, recibieron malas noticias de parte de sus colegas que aún permanecían en el edificio: “Había un camión en la puerta de Bolívar con vallas, llegamos justo cuando ponían la última valla y pudimos entrar a la agencia con ningún motivo más que cuidar nuestro puesto de trabajo”, describió Gallizzi “A las cero horas se cae el servicio y a la una y media de la mañana recibimos por correo corporativo el mensaje que decía que nos dispensaban por siete días”. Delfino coincidió y agregó: “Tenemos una gestión de gobierno que resuelve no permitir el acceso de los clientes al contenido y no permitir a los trabajadores generar más contenido. Es una situación muy ilógica, muy poco coherente y que nosotros estamos rechazando”.

Las delegadas también hablaron sobre cómo seguirán enfrentando este ataque: “Nosotros ya tuvimos la experiencia en 2018 de, desde la cuenta @somostelam, poder visibilizar el conflicto que tuvimos en ese momento, pero también mostrar, con contenido generado por los compañeros, la calidad del trabajo de los profesionales de Télam. Es muy probable que hagamos algo parecido” dijo Delfino. Por su parte, Galizzi expresó: “Nosotros encaramos los conflictos con tres puntas, que son la parte gremial, la parte judicial y la parte política, porque son las tres cosas que creemos que siempre van de la mano. Por lo pronto vamos a hacer un acampe en Bolívar y Belgrano por estos siete días que dure la dispensa”.

Ambas delegadas también destacaron el gran apoyo que recibió la agencia: “El tema de las vallas obviamente potenció el abrazo solidario, vino mucha más gente de la que nosotros esperábamos. Nosotros siempre sentimos la solidaridad de los compañeros y compañeras, vienen a cada una de las cosas que hacemos porque es recíproco; nosotros estamos en todos y cada uno de los conflictos” expresó Gallizzi, y Delfino coincidió: “Sabíamos que íbamos a contar con la solidaridad y el apoyo de todo el movimiento obrero organizado de todas sus distintas líneas políticas, porque siempre nos han acompañado cuando Télam estuvo en riesgo”.

Aunque el abrazo solidario estaba programado para las 12:30 del mediodía, la colocación de vallas alrededor de la entrada del edificio hizo que muchos lleguen temprano; bajo el sol del mediodía ya se encontraban reunidos miembros de SiPreBA, FATPREN y otros sindicatos. Miembros de SiPreBA tocaban bombos en el medio de la calle Bolívar al ritmo del canto “unidad de los trabajadores y al que no le gusta, se jode, se jode”. Frente a la bloqueada entrada al edificio, se preparaba un espacio con un micrófono que funcionó como escenario.

La primera en tomar la palabra fue Carla Gaudensi, secretaria general de FATPREN, secretaria adjunta de SiPreBA y trabajadora de Télam, quien expresó que “el gobierno de Milei viene a intentar cerrar una agencia que en el mes de abril va a cumplir 79 años de historia”, que “nunca vivimos un ataque tan brutal y tan violento” y que “el mismo día en que el presidente estaba diciendo que iba a cerrar la agencia de noticias Télam, nuestros compañeros estaban informando y estaban dando la noticia para que saliera en todos los medios privados, porque esto no solo afecta a la libertad de expresión, al pluralismo, sino que también afecta al mapa comunicacional de medios”. Y concluyó: “Esto no es un cierre por algo económico; lo dijo el presidente, es simbólico, están generando un show con 770 familias que se pueden quedar en la calle, es la deshumanidad total”.

Después de Gaudensi, tomó la palabra Pablo Moyano, secretario general de la CGT, quien señaló que esta medida acelera los tiempos de una convocatoria a un nuevo paro general y declaró que “creo que la bronca que hemos vivido el día viernes por el show que ha hecho este personaje, gerente de las grandes corporaciones, anunciando el cierre de Télam y atacando a los dirigentes gremiales, nos fortalece mucho más”. Luego Gaudensi volvió a tomar el micrófono para leer las palabras de Taty Almeida, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, quien señaló que este se trata de “uno de los peores ataques a la libertad de expresión en estos cuarenta años de democracia” y que “Milei, con su gobierno, está permanentemente atacando, destruyendo esta democracia que nos costó tanto conseguir”.

El siguiente en tomar la palabra fue Hugo Yasky, secretario general de la CTA y diputado del Frente de Todos, quien dijo que “El ataque a los trabajadores y trabajadoras de Télam es para eliminar la única agencia que siempre estuvo presente cubriendo los conflictos de los trabajadores”. Lo siguió Agustín Lecchi, secretario general de SiPreBA, quien agradeció la solidaridad y declaró, respecto a los dichos de Milei el viernes, que “a nosotros nos tiene sin cuidado si nuestros compañeros y compañeras son kirchneristas, si son radicales, si son trotskistas, o lo que sea; son profesionales, son periodistas, son trabajadores y los vamos a defender”.