Por Carla Effenberger
Fotografía: Valentina Gomez

Dramática jornada electoral para Juntos para el Cambio: con el 23,85 por ciento de los votos, Patricia Bullrich quedó fuera del balotaje presidencial y se abre una incógnita respecto al futuro de la coalición. Grindetti quedó lejos en la elección bonaerense y Jorge Macri, favorito para gobernar CABA, disputará una segunda vuelta con Leandro Santoro.

El domingo fue gris incluso cuando cayó la noche en el salón Goldcenter de Parque Norte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En el búnker de Juntos por el Cambio se reconoció la derrota a las 22:20, con palabras de la candidata Patricia Bullrich: «Quizás nuestros valores hoy se han quedado dormidos, pero nosotros los vamos a despertar en nuevos días de lucha por la Argentina». Rodeada por Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal, Elisa Carrió, Mauricio Macri y los principales dirigentes del PRO, la candidata presidencial aceptó la contundente derrota en las elecciones presidenciales. Con el 96,68 por ciento de las mesas escrutadas, Bullrich quedó en tercer lugar y fuera del balotaje con un 23,85 por ciento de los votos. Sergio Massa de Unión por la Patria quedó primero en estas elecciones presidenciales con un 36,56 por ciento de votos a nivel nacional, seguido por Javier Milei de La Libertad Avanza con 30,05 por ciento, ambos se medirán el próximo 19 de noviembre para definir la presidencia del país en los próximos cuatro años. A diferencia de las PASO, en donde se dio una participación del 69,62 por ciento, en esta oportunidad la actuación cívica de los ciudadanos democráticos fue de un 77,65 por ciento, y sigue siendo motivo de celebración en vísperas de los 40 años de la democracia.

“En esta noche donde no hemos logrado los objetivos que queríamos para nuestra Argentina, venimos a ratificar con toda la fuerza los valores de nuestra causa”, sostuvo Bullrich al reconocer su derrota. “Lo aceptamos pero tenemos la convicción profunda de que los valores que llevamos dentro de la república, (para que se lleven a cabo) los valores de la transparencia, de la lucha contra la corrupción, se debe abandonar el populismo”, expresó Bullrich con tono serio y con una mirada firme al público. La candidata afirmó severamente que el populismo es el causante de la pobreza, la corrupción y la decadencia del país y dejó en claro que no iba a felicitarlos (a quienes ganen en esta contienda) por el ascenso al poder. “Hemos tenido buenos y malos momentos. Pero jamás vamos a dejar de ser lo que somos para la Argentina. Nunca vamos a ser cómplices del populismo para la Argentina. Y nunca vamos a ser cómplices de las mafias que destruyeron este país. Desde el lugar que me toque no me voy a rendir nunca y nadie de Juntos por el Cambio se va a rendir nunca”.

Al final de su discurso, Bullrich expresó con esperanzas, que tal vez haya un momento en el que aquellos argentinos que no la votaron, vuelvan más adelante hacia su fuerza. “Estamos convencidos de que va a haber una comprensión de lo que hemos planteado y vamos a volver a tener una oportunidad”, cerró la candidata. 

En el escenario también estaba el candidato de Juntos por el Cambio para la gobernación bonaerense, Néstor Grindetti, que con el 26,66 por ciento quedó lejos del gobernador reelecto Axel Kicillof, de Unión por la Patria, que obtuvo un 44,86 por ciento. En tercer lugar se posicionó Carolina Píparo, de La Libertad Avanza, con 24,60 por ciento.

También se eligieron los cargos de jefe y vicejefe de Gobierno porteño: no le alcanzó aún a Jorge Macri, candidato del equipo de Bullrich, para ser electo en primera vuelta: obtuvo un 49,61 por ciento y disputará el balotaje frente a Leandro Santoro, candidato de Unión por la Patria, que llegó en segundo lugar con un 32,20 por ciento. En tercer lugar quedó Ramiro Marra, candidato de Milei, con un 13,89 por ciento de votos.

Las voces

Martín Yeza, candidato a diputado para la Provincia de Buenos Aires e intendente de Pinamar, había aparecido temprano en el búnker, cuando aún la incertidumbre reinaba en el país, y en la temprana tarde sostenía, optimista, que estaba totalmente convencido de que la Argentina necesita una nueva cultura del poder. En aquellas horas, todavía tenía “mucha fe” en que su fuerza contaba con el equipo para gobernar Argentina. Faltaba que avanzara el reloj para saber que no iban a llegar a obtener los números que les habilitaran la oportunidad. Por su parte, Damián Arabia, candidato a diputado de CABA, fue otro de los que asistió temprano. También en esos primeros momentos de especulaciones sin datos aseguraba que “a los argentinos les hemos brindado la mejor opción que tenía la Argentina”. Por entonces creía que los argentinos los iban a acompañar. Aún faltaba tiempo para conocer los resultados que le indicarían que la mayoría de los argentinos y las argentinas no elegirían esa opción.

Por aquel mismo momento, Fernando de Andreis, jefe de prensa de Jorge Macri, había brindado una conferencia a las 19 y resaltaba que que en Ciudad de Buenos Aires el resultado era muy positivo para Juntos por el Cambio, con una sonrisa no demasiado convencida. Frente a los números obtenidos, a las 22 Jorge Macri dedicó algunas palabras a todos aquellos ciudadanos porteños que confiaron en él para llevar a cabo la tarea de jefe de Gobierno de la Ciudad. “Ahí vamos a estar unidos, defendiéndonos como lo hicimos en el pasado y como lo seguiremos haciendo en el futuro. Porteños: muchas gracias por esta chance de gobernar nuestra ciudad”, cerró.