Por Federico Arrigone y Fiona González
Fotografía: Pamela Pezo Malpica

Para sorpresa de sus dirigentes, La Libertad Avanza no sumó más votos que en las PASO y quedó en segundo lugar, de cara al balotaje. En su discurso de largada, Javier Milei mutó su libreto para convocar a los militantes de Juntos por el Cambio en su cruzada contra Massa.

El candidato de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, disputará el balotaje junto a Sergio Massa, de Unión por la Patria (UxP), el próximo 19 de noviembre. Con un crecimiento de 8% en el presentismo electoral repecto a las PASO, UxP sorprendió creciendo casi un 8% mientras que LLA se mantuvo en los mismos guarismos. La sorpresa de llegar al balotaje en segundo lugar se sintió entre los libertarios que se reunieron en Libertador Hotel, en Avenida Córdoba 690.

En el búnker libertario se vivió la noche de las elecciones como una fiesta llena de expectativas y altibajos emocionales, casi en las mismas proporciones. Sobre la calle paralela al escenario montado en la avenida se amontonaron los numerosos periodistas que los organizadores no dejaron entrar al búnker, algo que obligó a los representantes libertarios a reducir su paso en la entrada para atenderlos. Los candidatos Lilia Lemoine y Ramiro Marra y Eduardo Bolsonaro, el hijo del expresidente brasileño, fueron algunos de los que llegaron al lugar antes de las siete de la tarde.

Luego de esa hora, lo que ocurría puertas adentro estaba reservado para los invitados del partido y ciertos medios elegidos a dedo. ANCCOM, vía un contacto al interior del búnker, fue testigo del clima tras el bombazo de los resultados: “Caras largas… Mucha música electrónica, pero nadie festeja”.

Expectantes a las pantallas, aunque sin querer mirarlas, los dirigentes políticos se encontraron sin respuestas. Por otro lado, en las calles la música de las batucadas era acompañadas por un grupo de militantes felices junto a algún que otro cosplayer, disfrazados de personajes irreconocibles o personas con estilos muy personales.

Resultados poco alentadores comenzaron a agitar al público que desde las 22:30 comenzó a cantar «¡Que salga Javi la puta que lo parió!». Ramiro Marra se sumó a la multitud y logró calmarla un poco.

Finalmente, a minutos de las once de la noche, con casi el 90% de los votos escrutados, Javier Milei subió al escenario mientras le cantaban el feliz cumpleaños. Sin seguir el protocolo de felicitaciones a los demás contendientes o a quienes participaron de las elecciones, fue directamente a recapitular lo ocurrido estos dos últimos años: “Estamos ante un logro histórico. Haber hecho la mejor elección de historia del liberalismo es algo que nos llena de orgullo a los liberales”. En una jugada política evidente reabrió la oferta de asociarse al bloque de Patricia Bullrich, saludó a Jorge Macri y afianzó su intención de captar el voto antikirchnerista. También felicitó a Frigerio y prometió tabula rasa para terminar con el enfrentamiento con los dirigentes que apoyaban a Patricia Bullrich y tomo el discurso de su adversaria para invitar a “acabar para siempre” con el kirchnerismo.

Milei insistió hasta el final con que es el único que queda en pie para terminar con el oficialismo: “Más allá de nuestras diferencias, enfrente tenemos una banda criminal. Insaurralde no es la excepción, es la regla”, “o cambiamos o nos hundimos” concluyó su breve discurso y se despidió junto a su habitual arenga de “¡Viva la libertad, carajo!”.

Bajo las luces de las bengalas, el fanatismo por Milei era comparado por los presentes como el que se sentía por la selección argentina. En las calles se vendían muñecos del candidato, banderas y pines. Los militantes dejaban la garganta en coros, canciones de cancha e insultos que casi tapaban el silencio total unos pisos por sobre ellos. Para cerrar la noche, luego de pedir un aplauso para los fiscales, Milei llamó a sus votantes a fiscalizar porque, según ellos, al menos cinco mil votos no se contabilizaron como correspondía.

Javier Milei tiene el desafío de sumar votos de acá a cuatro semanas. Ya Victoria Villarruel había dado señales en ese sentido en una entrevista al canal LN+ e intentó una salida elegante cuando Viviana Canosa le preguntó cómo iban a hacer para pedirle el voto a los «viejos meados».

La evidencia indica que pretende acercarse a sectores de Juntos por el Cambio, pero luego de una agresiva campaña en la que distribuyó insultos a granel no se sabe que tan receptivo esté el electorado para sumarse a su propuesta. Queda estar atentos a las repercusiones que tendrá el día de hoy en las elecciones del 19 de noviembre y la postura a tomar en el último debate presidencial del año.