Por Ornella Rapallini
Fotografía: Florencia Ferioli

Después de haber sido denunciado por discriminación laboral ante el INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación, la xenofobia y el racismo) por un grupo de “aspirantas” a conductoras de tren de la Línea Sarmiento, el sindicato ferroviario La Fraternidad accedió a recibir formalmente las solicitudes para ocupar esos puestos de trabajo, desempeñados tradicional y exclusivamente por hombres.

Las partes involucradas se reunieron en una audiencia de mediación en la sede del Inadi el viernes pasado. Las 21 “aspirantas” a conductoras estuvieron representadas por la delegada Mónica Schlotthauer, que acudió acompañada por otras diez trabajadoras. Por la otra parte se presentó Horacio Caminos, secretario de Prensa de La Fraternidad, acompañado por el abogado apoderado del sindicato, Matías Mascitti. Después de haber reclamado en vano ante la empresa estatal Trenes Argentinos (SOFSE) y de haber realizado dos reuniones infructuosas en La Fraternidad, el grupo de trabajadoras presentó una denuncia ante el Inadi. Como consecuencia, ambas partes fueron citadas a una audiencia que duró cuatro horas. En el cónclave no hubo representantes de SOFSE. Si bien la empresa comunicó que emitirá una respuesta por escrito sobre la situación, una vez más postergó su participación en la resolución del reclamo.

El puesto de maquinista fue desempeñado históricamente por hombres. Hasta el día de la fecha las mujeres ferroviarias no fueron inscriptas en los cursos para pre-conductores que iniciarán en marzo de 2016. Por convenio, La Fraternidad administra la bolsa de trabajo y también capacita y examina a los postulantes que hacen carrera para ser maquinistas. Los aspirantes deben respetar  ciertos requisitos: secundario completo, aprobación del examen psicotécnico, del curso de capacitación, y tener la edad igual o menor a 25 años.

“Lo que estamos pidiendo es que entremos en un proceso donde sean incorporadas las mujeres para terminar con esa deuda social y que no sean discriminadas por ser feministas o por pedir igualdad. Porque también corremos el riesgo de que por haber hecho la denuncia en el Inadi, las 21 postulantes no entren”, dijo a ANCCOM Schlotthauer , que además es candidata a diputada por el Frente de Izquierda. “Nosotras -agregó- no tenemos otra que pedirle al Inadi que intervenga y dictamine, porque la empresa no dictamina, y en La Fraternidad nos dicen ‘sí, pero…’

“Nosotros nos preguntamos por qué motivo vienen al Inadi, cuando en el convenio ya hemos expresado la no discriminación”, dijo Caminos a ANCCOM luego de la audiencia. Aproximadamente un mes antes de la denuncia de las mujeres en el INADI, el 8 de septiembre, hubo una reunión de las 21 “aspirantas” con Caminos en la seccional Haedo de La Fraternidad y también otra anterior con Caminos y Omar Maturano, secretario general del gremio, en Capital, donde se dialogó sobre el tema.

«No tenemos otra que pedirle al INADI que intervenga y dictamine, porque la empresa no dictamina, y en La Fraternidad nos dicen ‘sí, pero…'», afirma la delegada Mónica Schlotthauer.

 

En el encuentro de Haedo se les comunicó a las ferroviarias que se incorporó una cláusula en el convenio colectivo de trabajo, marcando una posición de alineamiento a la igualdad de género y contra cualquier discriminación. Esa reunión tuvo como resolución paliativa la confección de una nota dirigida a Carla Giracca, encargada de Recursos Humanos en Trenes Argentinos, en donde “a pedido de las postulantes” se solicitó a SOFSE una respuesta –en este caso- para ambos sindicatos que se prestaron al diálogo. La respuesta de la empresa nunca llegó.

Días más tarde, el 2 de octubre, el sindicato fraternal abrió la convocatoria para el ingreso de hombres y mujeres: “Se comunica que se diligencian en las seccionales Haedo y Castelar las solicitudes de ingreso de aspirantes/as a postulantes con vista a completar los planteles del personal de conducción proyectados al año 2016, conforme a los porcentajes del convenio colectivo de trabajo”.

Sin embargo, las mujeres del Sarmiento señalan que cuando se acercaron a las seccionales a anotarse no fueron atendidas. “Fui el 7 de octubre a la seccional de Castelar de la Fraternidad, entre las 9 y 10 de la mañana, y no me atendió nadie; golpeé varias veces, esperé y no tuve respuesta, y había gente adentro”, dice a ANCCOM la postulante Yanina Agüero, de 23 años, luego de la audiencia en el INADI y completa: “Ahí supuestamente tenía que llenar un formulario para postularme. Este señor Caminos me dice que yo le estoy mintiendo, que hay que ver las cámaras para confirmar que yo estuve ahí. Pero en Castelar, lamentablemente, no hay cámaras. Ando con el  currículum todo el tiempo bajo el brazo para anotarme y no me atienden. Hay chicas que también fueron a Haedo”.

«Lo que subyace en este debate es el proporcional de cupos que le están pidiendo a la Unión Ferroviaria», sostiene Mónica Schlotthauer.

Históricamente, por diferencias entre la Unión Ferroviaria y La Fraternidad, se fue limitando la capacidad de acceso de otros sindicatos a puestos de conducción. El convenio colectivo del gremio de conductores actualmente contempla que el 80% de los ingresantes serán de esa organización, un 15 para otros sindicatos y un 5 para particulares no agremiados. “Lo que subyace en este debate -dice Schlotthauer a ANCCOM– es el proporcional de cupos que le están pidiendo a la Unión Ferroviaria. Yo opino que ningún compañero tiene que quedarse en la calle pero también  que no se puede usar la petición de mujeres para lograr eso. No se trata de ‘si te meto quince, méteme veinte”.

En este sentido, ANCCOM le preguntó a Caminos si considera que subyace la cuestión de cupos sindicales por sobre el ingreso de mujeres a la conducción de trenes. “Primero, la cuestión del ingreso de mujeres tiene que ver con una cuestión cultural –contestó el vocero-, por usos y costumbres hay actividades totalmente masculinizadas. En el ferrocarril, únicamente se superó eso en el Tren de la Costa y no hubo más discusiones sobre el tema hasta ahora. La Fraternidad es el primer gremio del país y es nacional: no es lo mismo Capital Federal o Gran Buenos Aires que Salta o Santiago del Estero. Hay patrones culturales muy rígidos y hay muchos compañeros que entendían la posibilidad de que entre una mujer, pero hay otros que no. Igualmente estamos rompiendo la cuestión cultural con la incorporación de la cláusula en el convenio”.

Están inscribiendo mujeres familiares de conductores: ¿Cómo es el mecanismo para que se anoten otras mujeres? ¿Por qué no recibieron a las de la Lista Bordó?-, le preguntó ANCCOM.

Hoy me enteré que no inscribieron a las compañeras de la Bordó, respondió Caminos. Deben completar la solicitud y, a medida que van llegando, se van teniendo en cuenta si hay bajas vegetativas. Cuando se jubilan maquinistas, van empezando los ayudantes de conductor. Una vez que ingresa la solicitud, entra a la nómina  respetando el 80% de fraternales, el 15% de otros sindicatos, y el 5% de particulares. La determinación del plantel para el año que viene son 50 personas. Pero no se puede decir que no las recibimos: tocaron la puerta y justo no había nadie para atender.

«Pero no se puede decir que no las recibimos: tocaron la puerta y justo no había nadie para atender», ofreció Caminos como explicación.

Finalmente, el viernes se firmó un acuerdo en el que el sindicato de conductores ofrece recibir las solicitudes de las denunciantes, La Fraternidad negó haber adoptado una actitud discriminatoria hacia las postulantes y rechazó la denuncia en sí misma. Las mujeres de la Línea Sarmiento, por su parte, manifestaron que si el acuerdo no se cumple se movilizarán el próximo 25 de noviembre, Día Internacional de la eliminación de la violencia hacia la mujer.