Una cantata para Evita

Una cantata para Evita

«Evamérica» se estrena el 7 de mayo en el Teatro Empire.

 

Hace cincuenta años, cuando Cátulo Castillo, poeta y letrista de tango, y Rubén Mazza, compositor musical, se embarcaron en la tarea de componer una obra conjunta, jamás pensaron en Eva Perón como su figura central. Más bien, su elección como personaje llegó como una sugerencia: “Evamérica es una obra que surgió allá por el año 1969 como una idea de la esposa de Rubén Mazza. Un día, Cátulo Castillo fue a cenar a la casa del matrimonio y les comentó: “Tengo ganas de hacer un tema sobre un héroe patrio”, y ella, – paradójicamente simpatizante radical- le dijo: “¿Por qué no de Eva, Cátulo?”. Y ahí, nació la cantata”. Así recuerda la anécdota Guillermo Asencio, director general de la obra que se estrena en el Teatro Empire el próximo 7 de mayo, cuando se conmemore el centenario del nacimiento de la Jefa Espiritual de la Nación.

Pero como la historia misma del peronismo en la Argentina de los años ´60, el destino de Evamérica estaría también marcado por el prohibicionismo y la censura. Es que cuando Castillo y Mazza aceptaron gustosos la propuesta, nunca dimensionaron lo difícil que podría llegar a ser estrenar un espectáculo íntegramente centrado en la figura de Evita, con el gobierno dictatorial de la Revolución Argentina en el poder. “Los avatares de la vida hicieron que nunca se pudiera estrenar. Por cuestiones políticas, entre las dictaduras del `69 al `73 fue imposible; en el `73-`74 había un funcionario que se opuso y después, hubo algunas desavenencias entre los herederos que hizo que tampoco se pueda armar algo en los 12 años de mandato kirchnerista”, explica Asencio y comenta que fue finalmente Carlos Castillo, hijo de Cátulo, quien decidió asumir la producción general y estrenar la obra.

El espectáculo es una cantata lírico-popular que narra la vida de Eva; desde su nacimiento e infancia en Junín y su encuentro con el cantor de tango Agustín Magaldi, quien la introduce en el mundo actoral, hasta el posterior traslado a Buenos Aires donde conoce a Juan Domingo Perón. “Lo que trato de mostrar en esta obra es la relación mítica entre Eva Perón y el pueblo, que no es tanto su parte política sino más bien cómo este personaje, que no fue nunca funcionario de gobierno, que nunca vivió de la política en sí, quedó tan arraigado como la fuerza del amor rebelde, de la lucha”, explica Asencio. “Eva es América. Ella es esa América del Sur que lamentablemente hoy se está perdiendo como región. Es esa idea de la Patria Grande sinónimo de lucha, de rebeldía ante el statu quo, ante la oscuridad”, agrega el director.

Evamérica se presentó por primera vez en el 2015 con dos únicas funciones en el teatro San Martín en oportunidad de cumplirse 63 años del fallecimiento de Eva. Y,  si bien en esencia se trata de la misma poesía y música, la puesta en escena se renovó completamente para el que será su reestreno el 7 de mayo: “Me pareció que era una obra maravillosa con la cual había que hacer todo un relato”, cuenta Asencio.  “La función del San Martín no tenía puesta en escena, era más bien una especie de oratoria con algunas danzas típicas. Lo que yo intenté ahora es darle un sentido correlativo en el que tres voces -el barítono, la soprano y el relator- narran la historia”, continua el director.

Constanza Leone, soprano, y Juan Feico, barítono, son las voces solistas. Al tratarse de una cantata, Constanza y Juan explican que su rol no es actuar de Juan y Eva, como podría esperarse en un musical tradicional: “Somos relatores que van contando la historia pero nunca realmente interpretamos a los personajes”, explica Feico. “Hay momentos, claro, en los que nos hacemos pasar, por ejemplo, por la madre de Eva o por Eva misma, pero solo somos narradores”, agrega Leone. Por su parte, Osvaldo Malizia, actor, pone su voz como relator principal: “La idea que aparezca como si fuera la imagen de Cátulo Castillo que va creando en escena mientras van pasando cosas, vestido con el sombrero que él usaba siempre, porque era pelado”, explica Malizia sobre su rol en la obra.

Los tres intérpretes son acompañados, además, por ocho coreutas que representan la voz del pueblo. La orquesta, también protagonista central de la obra, está integrada por nueve músicos dirigidos por Constanza Antunica y con arreglos de Federico Guinzburg. María Inés Natalucci, directora musical, fue la encargada de hacer los arreglos generales de la partitura original compuesta por Mazza.

Encontrar el diferencial sin caer en el partidismo político es el horizonte y desafío del director en esta semblanza romántica: “Hace años que trabajo de esto y nunca encontré una poesía tan llena de metáforas como la de esta obra de Cátulo”, afirma Guillermo Asencio: “Es maravilloso porque no sea un panfleto y no hacer un panfleto con la vida de Eva, es de lo más complicado para cualquiera”.  Y agrega: “Como el Che, Eva también quedó arraigada como marca de un romanticismo rebelde del siglo XX y eso es lo que me interesa destacar: la rebeldía, no la ideología peronista”.

Por su parte, los artistas creen que la gran apuesta es que Evamérica logré penetrar en un público variado, quizás incluso, poco acostumbrado a este tipo de espectáculos. “Al ser una ópera es atemporal, va a trascender y quién esté viendo va a tener la oportunidad de sacar su propia conclusión. Me parece importante que cualquier público pueda acceder a este tipo de obras”, afirma Juan Feico “Si esto es para un grupo selecto de personas, no sirve de nada”, concuerda Osvaldo Malizia. Sara Melul, asistente de dirección, también ve con entusiasmo el futuro de Evamérica y adelanta que existen posibilidades de que se realice una gira nacional: “Tenemos muchas ganas de llevarla al interior del país; obviamente a Junín y Los Toldos, y a las provincias que tengan un buen teatro y ganas de contar con la obra”.

***

Evamérica se estrena el martes 7 de mayo a las 21 con una función especial por el Aniversario nacimiento de Eva Perón, en el Teatro Empire (Hipólito Yrigoyen 1934, CABA). Estará en cartel durante los meses de mayo y junio con funciones regulares los jueves a las 21 y los domingos a las 20.