May 5, 2016 | inicio
Una patota se instaló anoche en el Consejo Consultivo de la Comuna 4, en Nueva Pompeya, y en medio de una asamblea atacó a militantes y miembros de agrupaciones vecinales que discutían la privatización de los terrenos linderos al Club Atlético Boca Juniors, en los que los dirigentes pretende llevar adelante un megaproyecto inmobiliario. Durante el ataque, perpetrado sin fuerzas de seguridad a la vista, fue apuñalado Matías Scinica, de la agrupación Boca es Pueblo, y Fernando Abal Medina, de Descamisados, hermano del senador nacional kirchnerista, Juan Manuel: ambos debieron ser internados en el hospital Penna. Testigos de la agresión vincularon al grupo de choque con el macrismo, Carlos Yoshinaga, miembro de la agrupación Boca es Pueblo, contó a ANCCOM: “Actuaron con una impunidad total, desde antes de ingresar a la sede sabíamos que portaban armas blancas”.
La agrupación responsabilizó por el ataque, en un comunicado, al gobierno de la ciudad de Buenos Aires, encabezado por Horacio Rodríguez Larreta. «Una patota que responde a un puntero del PRO comenzó a agredirnos física y verbalmente –sostiene el escrito difundido por la organización-. Uno de ellos sacó un objeto cortante con el que hirió gravemente en la garganta a un compañero de Boca Es Pueblo». Consultada por ANCCOM, una fuente de la agrupación prefirió “por el momento” no dar el nombre del agresor, aunque aseguró que quien manejaba el objeto cortante “es conocido” en la comuna.

Matías Scínica
“La reunión fue tensa desde el primer minuto –describió Yoshinaga-. Cuando nosotros llegamos la patota ya estaba; eran entre diez y quince personas y en cada intervención que se intentaba hacer referida al tema de la entrega de las tierras de Casa Amarilla sobrevenían insultos desmedidos”. El ataque se desencadenó cuando llegó el turno de tratar el conflicto en profundidad. “Estábamos aterrados, por mi parte creí que mi compañero iba a desangrarse ahí mismo –narró-. La ambulancia tardó una eternidad en llegar, casi media hora, y la Policía recién llegó después, pero los tipos se retiraron riéndose de nosotros y gritando que nos iban a matar a todos”. El militante insistió en que las agresiones fueron posibles por la complicidad policial.
En diálogo con ANCCOM Matías Daglio, otro integrante de Boca Es Pueblo, aseguró que el ataque se produjo en el momento en el que se reclamaba la realización de una audiencia pública para tratar el traspaso de los terrenos al club xeneize, que, como publicó este mismo medio a principios de marzo pasado, se presentó como único oferente en la “Licitación con Iniciativa Privada para el Desarrollo y Mejoramiento Urbano Casa Amarilla” que puso en venta 3,2 hectáreas. La adjudicación se concretó el 25 de febrero pasado. “Nosotros pretendemos llevar hasta la Legislatura la voluntad de los vecinos y de algunos legisladores, porque los terrenos fueron directamente transferidos en su momento a la Corporación del Sur y luego a Boca, sin debatirlo con la comunidad”, subrayó Daglio. Según asegura un informe de la ONG Observatorio del Derecho a la Ciudad, la venta de los terrenos a Boca es “ilegal e inconstitucional”, porque de acuerdo a las normativas vigentes “no se puede vender tierra pública de la Ciudad sin aprobación de la Legislatura” y en este caso la transferencia se hizo de manera directa a través del Instituto de Vivienda porteño.

El conflicto se remonta a más de tres décadas, cuando en 1981 los terrenos situados a pocas cuadras de La Bombonera fueron adquiridos por la Ciudad para paliar el déficit habitacional en el barrio de La Boca. Pero en los ’90, el entonces intendente porteño Carlos Grosso cedió a Boca Juniors parte de las tierras, en los días de Mauricio Macri como máxima autoridad de la entidad. Luego, durante las gestiones de Fernando de la Rúa y Aníbal Ibarra al frente de la Capital Federal, se estableció por ley que el resto del terreno sería destinado a viviendas sociales. En total, se habían proyectado unas 4.000, pero en 2007 Macri resultó electo jefe de Gobierno y luego reelecto, en 2011: desde entonces hasta la fecha apenas se levantaron unas 400, es decir, el 10 por ciento.
La adjudicación de las tierras de La Boca se concretó pocos días antes de que el gobierno del PRO intentara –aunque infructuosamente- aprobar la Ley de creación de Agencia de Bienes Sociedad del Estado para avanzar en el traspaso a manos privadas de otros predios que aún continúan bajo dominio público. La discusión no es novedosa: se trata de qué hacer con el espacio público de la ciudad, cuáles son los intereses en juego y cuáles los legítimos actores que deberían decidir sobre el destino de dichos recursos. Un proyecto pionero en la materia tuvo lugar en 1989, cuando el gobierno de Carlos Menem, en el marco de su “reforma del Estado” –que consistió en la privatización y desregulación de los servicios públicos a nivel nacional- avanzó en la urbanización de la zona de Puerto Madero a través de la corporación Antiguo Puerto Madero Sociedad Anónima, creada por el decreto N° 1279 del Poder Ejecutivo, en noviembre de aquel año.

Poco más de una década después, en 2000, se aprobó en la Capital Federal, por medio de la Ley N° 470, la creación de la Corporación Buenos Aires del Sur Sociedad del Estado, a la que se reservó el área delimitada por la Avenida Directorio hacia el Riachuelo, con el fin de “desarrollar actividades de carácter industrial, comercial, explotar servicios públicos con el objeto de favorecer el desarrollo humano, económico y urbano integral de la zona”. La porción del mapa porteño en cuestión incluye vastas extensiones de espacios verdes, como el Parque Avellaneda o el Parque General Roca, ubicado en los límites de los barrios Villa Soldati y Villa Lugano.
El conflicto en Boca Juniors ocurre también a pocos meses de que Macri alcanzara el cénit del Poder Ejecutivo Nacional y su aliado Daniel Angelici, sindicado como un operador judicial clave del Presidente, la reelección en Boca. Sin embargo, para Boca Es Pueblo la gestión de Angelici en Boca sólo ha contribuido a que el club se volviera más exclusivo y con cada vez menos actividades sociales. “Desde que está Angelici no sólo se han cerrado actividades profesionales, como la participación de Boca en la Liga Nacional de Voleibol, sino que no se ha abierto una sola actividad amateur”, aseguró a ANCCOM Daglio.

Los planes del presidente xeneize apuntarían a que sobre los terrenos adjudicados se levante un nuevo “estadio-shopping”, lo que ha desatado en el seno de la comunidad boquense un debate tanto en términos económicos como culturales, porque si el negocio prospera automáticamente se abre el interrogante sobre cuál será el destino de la Bombonera, que los simpatizantes del club de la ribera reivindican orgullosamente como patrimonio indelegable del ser boquense. Al mismo tiempo, el episodio de anoche en Pompeya ofreció una respuesta a otra de las preguntas que atraviesan la discusión: ¿hasta dónde son capaces de llegar los defensores del negocio millonario para concretar sus ambiciones?
Actualizado 05/05/2016
Abr 5, 2016 | inicio
Entre el mito del arma sobre la mesa de la gestión de Guillermo Moreno y la confianza en la buena voluntad de los empresarios que proclama el gobierno de Cambiemos, la Secretaría de Comercio desarrolló desde 2013 hasta finales de 2015 diferentes programas para el control de precios y la protección de los consumidores que, en las últimas semanas, fueron desmantelados con despidos masivos en el área.
Por estos días circulan por las redes sociales videos que retratan la reducción de personal que ya afectó a 400 trabajadores. El modelo se repitió en dos oportunidades, en diciembre y marzo: un supuesto gerente de elegante sport sale de su oficina a encontrarse con la multitud de trabajadores, a punto de ser despedidos algunos, con la noticia confirmada otros. Al principio silencio y brazos cruzados, hasta que los primeros se animan con voces entrecortadas que desafían al poder. Una de las chicas sale del grupo y la cámara gira hacia ella:
– Desde el 10 de diciembre en esta Secretaría no se homologó un sólo acuerdo, no se pagó una sola…
– No se pagó ni una sola multa –la interrumpe otra, completando la idea- porque vienen las empresas y dicen ‘informen un CBU, quiero pagar la multa, ¿dónde deposito la plata?’ ¿Y qué se le contesta? Que en el proceso de cambio de cambio de Ministerio responsable, de Economía a Producción, no tuvieron en cuenta las cajas. No hay una caja donde depositar la plata, por eso no se cobran las multas…
https://www.youtube.com/watch?v=nnAAKGEujkQ&feature=youtu.be&t=3m28s
Las multas del diálogo son los cargos que las empresas deben -o debían- pagar cuando la Justicia falla en contra de una compañía en una mediación por incumplimiento en acuerdos de precios. Esas multas se enmarcan en el programa de consumo protegido, uno de los planes cuyo equipo de trabajo fue desarticulado por la gestión macrista. Y tienen historia.
“El gran avance en materia de defensa de los derechos de los consumidores fue la sanción de la Ley que crea el Sistema de Resolución de Conflictos en las Relaciones de Consumo, que dio lugar al programa Consumo Protegido”, explica el ex secretario de Comercio Interior Augusto Costa, en diálogo con ANCCOM.
El programa creó un mecanismo rápido y eficaz de conciliaciones obligatorias ante conflictos relacionados con actos de compra-venta de bienes y servicios.
“El principal objetivo de nuestra gestión fue dotar de mayores herramientas a los consumidores para que puedan ejercer plenamente sus derechos. Hay que tener en cuenta que durante la década del ´90 millones de argentinos fueron marginados de los circuitos de producción y consumo y vieron disminuida su capacidad de hacer valer sus derechos ante los abusos empresarios”, completa el ex funcionario.

Las denuncias en la Secretaría del Comercio por incumplimiento de los empresas habían pasado de 1000 a 50 mil en menos de un año.
A cargo del área desde noviembre de 2013 hasta el final de la gestión kirchnerista, Costa asegura que “en menos de un año, las denuncias en la Secretaría de Comercio respecto a incumplimientos por parte de las empresas pasaron de 1000 a más de 50 mil, lo que muestra el gran éxito que tuvo el sistema.” Y subraya: “Los consumidores comenzaron a discutir cara a cara con las empresas”.
El programa “Precios Cuidados” fue una de las grandes víctimas de la nueva política de vaciamiento en el área. El plan contemplaba un acuerdo tripartito entre proveedores, cadenas de supermercados y Secretaría de Comercio para garantizar el abastecimiento de ciertos productos a un precio determinado y con una renovación trimestral. “Con los diferentes programas de Precios Cuidados (supermercados, almacenes y comercios de barrios, motos, construcción, telefonía celular) los consumidores recuperaron referencias de precios para poder tomar sus decisiones de consumo”, resume Costa a esta agencia.
En su inicio, el 6 de enero de 2014, el programa contaba con 194 productos pertenecientes a 60 empresas. Para diciembre de 2015, la canasta llegaba a 512 productos de 112 compañías proveedoras. Hoy, el convenio bajó a 300 productos, pero no tiene relevadores ni inspectores que controlen que el acuerdo se cumpla.
También se reemplazaron algunas primeras marcas por segundas. Es el caso de la leche: hasta diciembre la marca que participaba del convenio era ‘La Serenísima’, con un precio de $10,50 el sachet. Una segunda marca (‘Santa Brígida’), fuera del programa, tenía un precio de $8,50.
En la última actualización y primera de la gestión de Miguel Braun, tras reemplazar la primera marca por la segunda que ingresó con un precio de $11,20 (+32%), se liberó el camino para que la primera marca (ahora fuera del programa) defina libremente su precio, hoy en $15,50, 55% por encima de su precio en diciembre.
Falsas promesas, empresas ganadoras
“En la transición entre una gestión y la otra se habló de la necesidad de mantener y extender estas herramientas, que ya se habían incorporado a la vida cotidiana de los consumidores”, recuerda Costa.
Sin embargo, la realidad posterior desmintió los acuerdos y promesas políticas. “Lamentablemente, las nuevas autoridades vinieron con otra idea y desarticularon o le restaron impacto a la mayoría de los programas, respondiendo más a la agenda empresaria y de las grandes corporaciones que a las necesidades y derechos de los consumidores”, subraya.
En los primeros 60 días del gobierno de PRO-Cambiemos, la Secretaría autorizó subas, sacó productos y marcas de convenio y despidió en dos etapas al personal, desde aquellos que se sentaban a negociar un precio con las empresas, hasta los que iban supermercado por supermercado a controlar la presencia de los productos en las góndolas y de los carteles que indican el “precio cuidado”.
El desmembramiento de la Secretaría de Comercio, incluido el programa de Precios Cuidados, se hizo en tres etapas. La primera fue, tras la renuncia de Augusto Costa y los directores nacionales, con el pedido de renuncia a subdirectores y directores de áreas.
Luego hubo dos etapas de despidos masivos. La primera fue el 15 de diciembre con la desvinculación de 150 empleados. La segunda se produjo el el miércoles 2 de marzo. Ese día -cuando fue grabado el video que rescata esta crónica- fueron despedidos otros 250 trabajadores. Algunos no estaban en el listado original, pero fueron despedidos días después por haber filmado o discutido con directores nacionales por el ajuste en la planta.
Uno de los despedidos de la segunda etapa es Guillermo Rabinovich. Es economista, tiene 32 años y trabajaba en la Secretaría de Comercio desde hacía cinco. A partir del nombramiento de Costa, tuvo a su cargo la negociación con algunas de las empresas que trimestralmente firmaban el acuerdo de un listado de precios. “En enero de 2014 se creó toda una estructura para gestionar y administrar el programa. Yo participaba de la negociación con empresas pero al mismo tiempo tenía otras tareas”, reflexiona.
Las funciones del equipo que trabajaba en Precios Cuidados eran múltiples: la negociación con las empresas, actualización del listado de productos y precios, la relación con las cadenas de supermercados y de un sistema llamado “Alerta temprana” que permitía a los supermercados poner un sustituto cuidando el precio de convenio, ante una falta de abastecimiento. El equipo de relevadores e inspectores era otra pieza fundamental: tenía poder de policía para multar fallas en la señalética, desabastecimientos no informados o cualquier incumplimiento del convenio.

En los primeros 60 días del gobierno de PRO-Cambiemos, la Secretaría autorizó subas, sacó productos y marcas de convenio y despidió en dos etapas al personal.
“Hoy casi no existe ‘Precios Cuidados’ en todas sus variantes y el cumplimiento del limitado esquema vigente es muy pobre”, reflexiona Costa.
Y completa: “No existen inspectores ni relevadores de precios en las calles que puedan garantizar el cumplimiento de los acuerdos, eliminaron las normativas que obligaban a las empresas a informar los cambios en los precios; y se frenó el programa Consumo Protegido, que pasó de atender 300 casos diarios a menos de 20”.
Más allá del programa por el control de precios, las nuevas autoridades también discontinuaron otros planes clave como el de “Fiscalización de rótulos” que apuntaba a evitar que los consumidores sean engañados por pequeños cambios en las etiquetas y que obligaba a que un producto tenga por lo menos un 20 por ciento de la superficie de la etiqueta distinto al anterior.
También quedó sin aplicación el conocido como “SUBEneficio”, un convenio entre la Secretaría de Comercio y algunas empresas (comida rápida, cines, heladerías, indumentaria) para que ofrecieran descuento a los usuarios de la tarjeta SUBE (sistema único de boleto electrónico). Y tampoco sobrevivió el “Sistema Informático del Régimen Informativo de Precios” (SIRIP), un esquema de monitoreo de la cadena de valor de los productos de consumo masivo que permitía saber de forma aproximada cuál era el costo de producción de algunos productos y, en la comparación entre ese costo y el precio de venta al consumidor, evitar los márgenes abusivos. La Dirección Nacional de Precios, a cargo de este programa, también fue desintegrada.
El nuevo gobierno también desmanteló el denominado “Servicio de Conciliación Previa en las Relaciones de Consumo” (COPREC) que buscaba articular un sistema de resolución de conflictos entre consumidores y empresas por compra de productos defectuosos o con fallas. El equipo fue desarticulado y los 12 mil reclamos acumulados y pendientes de mediación quedaron archivados.
Actualizado 05/04/2015
Feb 24, 2016 | inicio
Analía y Josefina trabajan en la Casa del Bicentenario. Llevaron a la plaza una réplica de la pintura Manifestación (1934) de Antonio Berni. En el centro del cuadro un niño tiene un pan bajo el brazo. Alrededor del niño: hombres y mujeres manifestándose con el ceño fruncido y la mirada cansada. En el fondo del cuadro una pancarta pide “Pan y trabajo”. Ese cuadro fue creado por Berni durante los masivos despidos de la década del ’30 y ahora se vuelve muy actual. “Nosotras estamos empleadas –dicen Analía y Josefina a ANCCOM– pero tenemos diez compañeros despedidos que cubrían espacios que nadie más puede cubrir, como por ejemplo el ciclo de cine, clases de folklore, educación, técnica”.
A una semana de cumplirse el vencimiento de cientos de contratos del Ministerio de Cultura, el sábado por la tarde se realizó una jornada cultural frente al Museo Nacional de Bellas Artes. La manifestación estuvo organizada por la Asociación de Trabajadores de Museos (ATM), que decidieron movilizarse con la consigna “La cultura no se achica”. El pedido central es la reincorporación de los despedidos del Ministerio de Cultura, terminar con la –histórica- precarización laboral en el Estado: muchos trabajadores contratados realizan la misma tarea que los de planta permanente, pero están fuera de convenio, sin obra social, aportes jubilatorios, asignaciones familiares, vacaciones, aguinaldo, ni continuidad laboral garantizada. Por lo tanto, también exigen el pase a planta permanente de todos los trabajadores.
Más de dos mil personas asistieron el sábado a la plaza ubicada sobre Av. Libertador al 1400. La jornada empezó a las 17, se abrió el micrófono para los trabajadores despedidos, se hicieron actividades participativas, representaciones teatrales y tocaron música en vivo. La única bandera levantada fue la de “La cultura no se achica”. Representantes de diferentes museos nacionales, programas y centros culturales se instalaron con propuestas para reflexionar y dar cuenta de su vocación de servicio.

La jornada cultural organizada por la Asociación de Trabajadores de Museos convocó a más de dos mil personas.
Históricamente el Estado, que debería luchar -entre otras cosas- contra el trabajo precarizado, lo convirtió en hábito. No sólo desvalorizando a las personas sino también desvalorizándose a sí mismo. Es paradójico, por ejemplo, que en el Ministerio de Trabajo no se garanticen los derechos de cientos de trabajadores.
Actualmente, y una vez más, en el contexto de un achicamiento del Estado que lleva adelante el gobierno de Mauricio Macri en todas las áreas bajo el eufemismo de “modernización”, el 29 de enero la gestión de Pablo Avelluto, nuevo Ministro de Cultura, echó a casi 500 personas. Los trabajadores se enteraron ante la imposibilidad de ingreso a las oficinas públicas. En declaraciones mediáticas, Avelluto desconcertó con la frase: “Es una decisión espantosa, pero necesaria”, refiriéndose a los despidos.
Otra de las justificaciones del Ministro fue que en los últimos tres años hubo un aumento de personal de 2500 a 4000. En su argumento, el titular de la cartera ignoró que -mediante decreto de la expresidenta Cristinta Fernández de Kirchner- la dependencia cambió de rango y paso de una mera secretaría a un ministerio.
El día 15 de febrero ATM había enviado a Avelluto y Américo Castilla, Secretario Nacional del Patrimonio, un comunicado de repudio a los despidos y el reclamo de reincorporación de todos los cesanteados, del cual hasta la fecha no obtuvieron respuesta. El documento cuenta con la firma de alrededor de 200 trabajadores de 80 museos, archivos y bibliotecas de la Argentina. Asimismo se sumaron también 300 adhesiones de docentes e investigadores de distintas universidades nacionales, referentes del movimiento defensor de los derechos humanos, delegados sindicales, empleados del sector público y privado, organizaciones y renombrados profesionales del extranjero (Alemania, Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Francia, Inglaterra y Uruguay).

Bajo el eufemismo de la «modernización», fueron echados casi 500 trabajadores del Ministerio de Cultura.
De los 500 despedidos de Cultura, alrededor de 150 fueron empleados de Museos Nacionales, la mayoría de establecimientos ubicados en la Ciudad de Buenos Aires. No hubo motivos explícitos de parte del Ministerio para despedir a los trabajadores. Si bien Avelluto expresó que el criterio sería cesantear sobre todo a los contratados en 2015, también se echó a personas con más antigüedad. Todas las áreas dentro de los museos tuvieron cesanteados, sin excepción: museografía, restauración, prensa y difusión, registro del patrimonio, investigación, guías, sistemas, infraestructura, cine, coordinación, educación, mantenimiento, administración, dirección, biblioteca, reserva, diseño gráfico y documentación.
Las voces de quienes conservan nuestro patrimonio cultural
Juliana estudió Museología en la Escuela Nacional de Museología. Cuenta que cuesta mucho conseguir trabajo en esa profesión y que durante varios años realizó pasantías no rentadas en el Museo Histórico Nacional (MHN) para finalmente ser contratada de forma precarizada hace tres años. Allí ella está a cargo de 1800 piezas textiles. Su contrato será revisado en marzo como lo determinó el decreto 254/15 del gobierno de Mauricio Macri, por haberse efectivizado en 2013.
El decreto, que entró en vigencia en diciembre de 2015, ordena “revisar las contrataciones de personal efectuadas” en ministerios u organismos “durante los últimos TRES (3) años”. Esto comprende a todos los trabajadores contratados bajo artículo 9° del Anexo de la Ley N° 25.164 y en el Decreto N° 2345/08. Los empleados ingresados en los años 2013, 2014 o 2015 solo tendrán una renovación por tres meses, cuando previamente el plazo era anual.
A Juliana le dijeron que la iban a evaluar pero nadie lo está haciendo, hasta ahora nadie la entrevistó. Teme llegar al trabajo y encontrarse con una persona que la mande a su casa porque tener en sus manos una lista donde aparezca su nombre. Está alerta esperando que la actual gestión llame a concurso, aunque nadie le garantiza que haya concurso para su puesto.

De los 500 despedidos, 150 se empleaban en Museos Nacionales. No obtuvieron explicaciones sobre la causa de su desvinculación.
Gilda trabaja desde el 2009 en el Museo Histórico Nacional. Si bien hasta ahora no fue despedida, se siente afectada por la situación de incertidumbre. Ella observa y empatiza con otros colegas, “parece que estuvieran echando por sorteo”, explica a ANCCOM. Hubo casos de despedidos con más antigüedad que ella. “Cualquiera puede caer, es al azar, no tiene ningún criterio, no estudiaron cada caso, no evaluaron desempeño”.
En el MHN despidieron a 12 empleados de diferentes áreas. Tiene 13 salas en total, de las cuales dos eran interactivas y fueron cerradas ante el despido de sus empleados a cargo. Allí fue despedida también una persona que realizaba visitas guiadas, la única que habla cuatro idiomas. Su caso es más particular que el de los demás, tiene una hija discapacitada, es sostén de familia. Ante esta situación tan delicada sus compañeros del Museo decidieron ayudarlo haciendo una colecta para que pueda pagar el alquiler. Por otro lado, el área de prensa quedó directamente desmantelada.
“Trajimos a esta jornada dos exhibiciones de fotografías –muestran a ANCCOM Gilda y Juliana-: una donde se visibiliza el detrás de escena de los objetos que los visitantes ven en los museos porque, para que esos objetos estén allí, atrás estamos nosotros que los conservamos, los restauramos si es necesario y los investigamos. La otra es una muestra de fotografías históricas con la temática los conflictos laborales a lo largo de la historia, para eso elegimos la Semana Trágica, el Cordobazo, la Carpa Blanca en los noventa, entre otras y la última foto es bien reciente, es de una marcha que hicimos al Ministerio de Modernización el 4 de febrero, para dar cuenta que un museo nos tiene que mostrar los procesos sociales e históricos para ayudarnos a entender el presente”.
***
Milena lleva en su cabeza una galera. “Esto que trajimos a la plaza es para recordar cómo la voluntad popular cambió el curso de la historia”, le explica a una nena que apenas alcanza la altura de la mesa. Sobre el mantel rojo que la cubre se exhibe una copia del petitorio del 24 de mayo 1810. Con este documento se solicitó la conformación de la Junta de Gobierno mediante firmas. La pluma y el tintero reafirman la escenografía colonial. Hasta el 29 de enero ella era guía en el Museo Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo. Antes de ocupar ese puesto –contratada como monotributista- se formó como guía de turismo en el Instituto de Formación Técnica N°7 del Gobierno de la Ciudad. Son más de 200 escuelas por año las que visitan ese museo: en 2015 cerca de 12 mil chicos fueron con visitas guiadas programadas, y más de 10 mil entraron de forma particular, pero igualmente requirieron de sus saberes para conocer la historia que albergan las salas.

De las cuatro guías del Museo del Cabildo, quedaron sólo dos, la otra despedida era quien se ocupaba de los contenidos pedagógicos para las visitas de escolares. Milena no cobró el mes de enero, ni tiene noticias de cuándo lo cobrará. Le comunicaron con un mes de preaviso que el 29 de febrero prescindirán de sus servicios, y la dejaron eximida de trabajar desde el 29 de enero. Sin embargo ella sigue yendo.
Además, echaron también al encargado de manejar la oruga, sistema necesario para que las personas con sillas de ruedas –entre ellas la vicepresidenta de la Nación- puedan ingresar a la planta alta, donde se encuentra el documento histórico de jura de la Primera Junta de Gobierno. “Mis compañeros y yo seguimos yendo porque queremos defender nuestro puesto de trabajo –explica Milena a ANCCOM-, queremos quitar de la idea colectiva que somos ñoquis. Siempre cumplimos nuestras funciones y nadie de la actual gestión se acercó a relevar si eso es cierto. Nadie sobra del Ministerio: ahora seguramente se recorten los horarios de visitas programadas, cualquier persona que esté en silla de ruedas no podrá ingresar a la planta alta del edificio, y no habrán contenidos pedagógicos para trabajar previo a la visita, porque nosotros, como no queremos que la visita sea un paseo más, enviamos contenido pedagógico para que lo trabajen en el aula antes de visitarnos”.
***
“¿Y si a vos también te dejan en calzones?”, interpela un cartel junto a un maniquí vestido con una réplica de ropa interior del año 1900. Sabrina montó la escenografía. Ella trabaja como diseñadora gráfica hace doce años en el Museo Nacional de la Historia del Traje. “Se nos ocurrió traer ropa interior porque así como la ropa interior se oculta bajo otras ropas –explica Sabrina a ANCCOM-, las exhibiciones en los museos son el resultado del trabajo de personas que no están a la vista de la comunidad y cumplen con una labor imprescindible para preservar el patrimonio”. Cuando ingresó en el 2005 estuvo tres años con contrato de locación de obra y en el 2008 le dieron una “48” –Ley Marco-. Si bien -por ahora- no fue despedida está pidiendo la reincorporación de seis compañeros. “Esas personas fueron despedidas sin ningún tipo de criterio, nadie del Ministerio habló con el Director para corroborar qué tareas desempeñaba cada uno”.
***
Ronda Cultural era un programa que, desde hace dos años, hacía paseos culturales guiados y gratuitos. Era para todo público y trabajaba con 17 museos nacionales. Más de 33 mil personas pasearon con ellos. La importancia de Ronda era promover y generar el acceso a la cultura, desde la movilidad hasta la formación de espectadores, pensando a los museos como un lugar para todos y no sólo para unos pocos entendidos. A bordo de minibuses ofrecían una nueva forma de conocer los establecimientos a personas mayores, personas con capacidades diferentes y el público en general, fusionando el relato del guía con intervenciones artísticas diseñadas en base al guión museográfico.

Son un equipo de 26 personas que trabajaban para el Ministerio de Cultura. Los despidieron a todos y anularon el Programa. “Somos profesionales en Historia del Arte, Guía Turística, Filosofía, Gestión Cultural, todos idóneos -explica a ANCCOM Valeria Escolar, coordinadora de Ronda-, cada uno hacía diversidad de tareas, generábamos nuestros propios contenidos, lo construimos desde cero, no pertenecemos a agrupaciones políticas, todos entramos siendo entrevistados. No era solamente un trabajo, no era voy a a la oficina de 9 a 18… no había horario”. Para los traslados de las personas a los museos el Ministerio de Planificación les proveía los minibuses. Se los dejaron proveer el 9 de diciembre. El viernes 29 despidieron a todo el equipo. “No pudimos ingresar al edificio en donde trabajamos y nos notificaron mediante una lista en la puerta del lugar. Nosotros estamos acá por la reincorporación, hay una secretaría de Patrimonio Cultural a cargo de Américo Castilla, que nos iba a recibir en dos ocasiones, y no nos recibió. Entendemos que si hay una iniciativa de tener esa secretaría, Ronda Cultural es un programa que cumple con todas las características de lo que ellos están queriendo hacer”.
Tal como este programa, existe un extenso listado de otros que fueron desmantelados.
***
Del Palais de Glace fueron despedidas tres personas. “Somos 35 trabajadores de los cuales solamente cinco son de planta – cuenta Gisel, empleada del Palais, a ANCCOM– eso refleja la irregularidad con la que estamos trabajando todos. Situación que se replica en todos los museos”.

***
Mariana es una de los 12 despedidos del Museo Malvinas. Ella era la única museóloga. El museo en este momento no tiene a una persona que se haga cargo de la conservación y la documentación del patrimonio, lo que le da sentido a su existencia. Desde el 10 de diciembre están sin director y ningún representante del Ministerio corroboró qué tareas hacía cada uno. Ella empezó a trabajar a principios de 2015, es egresada de la Escuela Nacional de Museología, sigue presentándose a trabajar, lo hará hasta el 29 de febrero. “Estamos exigiendo que se nos reincorpore porque en el museo no sobra nadie, todo lo contrario, están echando a la gente que entró en 2015 pero si echan también a los de 2014 el museo queda vacío básicamente porque se creó a mediados de 2014”.
***
La gente hace fila para sacarse la foto y ser, por unos segundos, protagonista de una representación del cuadro Sin pan y sin trabajo (1894) de Ernesto De La Cárcova. Una vez que se sientan de a dos conformando una escena, el fotógrafo apunta al marco dorado ubicado a una corta distancia de su trípode. El marco encuadra las dos personas recreando –con vestimenta incluida- esta pintura y de fondo, en vez de la fábrica cerrada -como en el original-, aparece el Museo Nacional de Bellas Artes. “Si bien el Bellas Artes no está cerrado, –aclara a ANCCOM un trabajador del museo que llevó esta actividad participativa de manera particular- sí tenemos ocho despidos y eso es lo que queremos visibilizar”. En Asamblea, los trabajadores del Bellas Artes decidieron no participar de esta Jornada cultural porque la mayoría de los 110 empleados entendió que esta actividad podía entorpecer las negociaciones para reincorporar a los ocho trabajadores. Sin embargo, una minoría llegó de forma particular y con sus propios recursos decidió asistir.
***
Natalia Rizzo es artista visual, milita en el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), y junto con La Caja Roja, agrupación de ilustradores y artistas visuales que trabajan dentro de La Izquierda Diario, plantearon a los organizadores de la Jornada cultural la iniciativa de convocar a artistas para intervenir platos, “porque en la movilización del 4 de febrero que hicieron los trabajadores despedidos del Ministerio de Cultura al Ministerio de Modernización habían puesto en una bandera 500 platos vacíos”, explica Natalia a ANCCOM. “La idea es hacer una subasta de los platos intervenidos por artistas conocidos y con ese dinero aportar al fondo de lucha de los trabajadores de Cultura”, agrega.
***
Desde atrás del Bellas Artes asomó la luna, las luces del museo se encendieron al igual que los faroles de la plaza. En el cierre los trabajadores de la cultura anunciaron que se sumarán al paro nacional convocado por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) para el miércoles 24 de febrero, en repudio a los despidos en el sector público y en reclamo de paritarias sin techo.
El acto terminó con batucada, aplausos y toda la gente rodeando la bandera de los 500 platos vacíos.
Dic 22, 2015 | inicio
Tras una jornada de tensión y dos represiones desproporcionadas de Gendarmería Nacional, los trabajadores de la avícola Cresta Roja levantaron el corte que mantenían en la Autopista Riccheri, en la entrada al aeropuerto de Ezeiza, luego de llegar a un principio de acuerdo con el macrismo.
En las últimas horas de la tarde del martes, la jueza Valeria Perez Casado decretó la quiebra de Cresta Roja. La información se dio a conocer mientras estaban reunidos el ministro de Trabajo Jorge Triaca con Cristian Villalba, uno de los delegados de los trabajadores, que volvió de Ezeiza especialmente para acudir al encuentro. Luego de una hora, ofrecieron una conferencia de prensa en la entrada de la cartera laboral en la que señalaron que el gobierno entregará a los operarios una suma fija de 6.000 pesos durante el mes de enero y les entregará un bolsón de comida para las fiestas. Además, se comprometió a buscar inversores que compren la empresa quebrada.

Represión de Gendarmería en el reclamo de Cresta Roja.
«¿Este es el cambio? ¿Este es el cambio?», gritaban ante las cámaras, a media tarde, los trabajadores de la firma Rasic Hermanos, que comercializa pollos a través del sello Cresta Roja. Los operarios se encontraban acampando desde el miércoles pasado a un costado de la autopista Riccheri, cercados por un cordón de gendarmes y camiones hidrantes. Uno de los manifestantes exhibía múltiples heridas de bala de goma luego del segundo episodio de una desmedida represión por parte de Gendarmería durante el martes: el primero a las nueve de la mañana, y el segundo a las dos de la tarde.
Tanto a la mañana como después del mediodía, el ataque de los gendarmes –una práctica que parecía olvidada por las fuerzas estatales- se inició luego de un incidente poco claro entre uno de los manifestantes y un agente. Varios operarios coinciden en que se sumaron manifestantes que no se estaban acoplando a su reclamo de manera pacífica. Estos pudieron haber dado el puntapié inicial a la agitación que tuvo una respuesta con gases lacrimógenos, camiones hidrantes, bastonazos y balas de goma.
Luego del segundo episodio de violencia, los delegados reunieron a la multitud y pidieron que las agrupaciones que se acercaron para solidarizarse no interfirieran con el reclamo de los trabajadores. De acuerdo con un oficial de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que también estuvo presente en la escena, la fuerza comenzó a reprimir nuevamente cuando se acercó a los gendarmes una persona con una mochila que supuestamente contenía materiales peligrosos, algo que nunca fue constatado.

Trabajadores de Cresta Roja reclaman el pago de un mes de sueldo y aguinaldo.
La explicación oficial a la represión llegó a través de una conferencia de prensa que dieron esta mañana la vicepresidenta Gabriela Michetti y el ministro de Trabajo Jorge Triaca en la Casa Rosada. La vicepresidenta aseguró que la acción de la fuerza de seguridad fue «sin situaciones dramáticas de violencia», afirmación se contrapone a lo que efectivamente sucedió en el lugar de los hechos. «Hace mucho tiempo que el Estado se había corrido del rol de regular entre dos derechos que colisionan. Y en realidad es el único que lo puede hacer, porque si no estamos en la ley de la selva, y entonces el más poderoso o patotero termina imponiéndose sobre el resto», subrayó. «Si se vuelve a cortar la ruta –agregó-, se vuelve a trabajar de la misma manera, siempre intentando hacerlo a través del diálogo, pero cuando no haya diálogo del otro lado, se actuará como se actuó hoy».
En ningún momento de la jornada, el tránsito había sido interrumpido de manera total. De acuerdo con declaraciones del trabajador Carlos Mansilla, que también presenta heridas, ayer se había acordado que los manifestantes podían ocupar dos carriles y dejar uno libre para que se liberara el acceso al aeropuerto. La versión del ministro de Trabajo es algo distinta: asegura que llegó una orden del juez que establecía que había que abandonar los carriles ocupados, y la agrupación de trabajadores se negó a cumplirla.
«No nos pagan el sueldo hace un mes, tampoco el aguinaldo, no me mandaron telegrama de despido, ¿a quién le tengo que reclamar?», se pregunta Javier, trabajador de Cresta Roja desde hace diecinueve años, que se encuentra reunido junto a sus compañeros desde hace una semana a la espera de una resolución al problema.
El conflicto comenzó hace dos años cuando la compañía comenzó a bajar el nivel de producción y atrasarse con los pagos tanto a proveedores como a empleados, pero recrudeció en las últimas semanas, cuando los dueños de la empresa se negaron a abonar los salarios de sus 3500 empleados.
Al reclamo por los sueldos se suma la incertidumbre laboral de los trabajadores. La empresa aún cuenta con maquinaria pero hace meses que no compra los insumos necesarios para producir de manera adecuada, empezando por el alimento balanceado para los animales. «A los dueños solo les interesa llevarse los subsidios que les entrega el gobierno, no les interesa que la empresa funcione. Estaban acomodados durante el menemismo, después se acomodaron al siguiente gobierno, y ahora lo único que quieren es que les sigan dando plata del Estado, ¿Dónde están los subsidios que les dieron hasta acá?», insiste Javier.
Al ser interpelado acerca de la posibilidad de continuar reprimiendo, el Ministro de Trabajo respondió que se encuentra “abierto al diálogo” y que no hace falta cortar las rutas. No obstante, no explicó por qué recién recibió a los trabajadores después de la represión.
Triacca agregó que el problema fue heredado del gobierno anterior y que se investigará acerca de la mala gestión de los fondos destinados a Cresta Roja durante ese mandato, como también el uso que los dueños de la empresa hicieron del dinero otorgado por el Estado. Por el momento, la firma queda bajo control del juzgado, y se adelantó que hay varios interesados en adquirirla, pero no se hizo mención concreta a la continuidad laboral de los trabajadores.
Dic 15, 2015 | destacadas
“Me parece que ha habido una derrota pero no estamos derrotados”, expresó Pedro Brieger con respecto a la victoria de Mauricio Macri en la reciente elección presidencial y continuó trazando un paralelismo entre la situación actual de la región latinoamericana y distintos momentos históricos que a su juicio son muy importantes para pensar la actualidad. “Si uno piensa en 1955, Perón se tuvo que ir al exilio y el movimiento quedó desarticulado por la represión que vino después. Si uno piensa en 1973 en Chile, Salvador Allende fue asesinado y la represión posterior desarticuló también a los movimientos sociales. Si uno piensa en el golpe de Estado en la Argentina, de la presidenta del momento, al margen de lo que pensemos de ella, fue arrestada y también la represión desarticuló a los movimientos sociales”.
El sociólogo y periodista especializado en Política Internacional realizó esta afirmación en el inicio de un ciclo de charlas organizado por el portal Noticias de América Latina y el Caribe (NODAL) y el Centro Cultural de la Cooperación. El propósito de estos encuentros consiste encrear y consolidar un espacio de discusión y reflexión acerca de la coyuntura y actualidad regional.

“Me parece que ha habido una derrota pero no estamos derrotados”, expresó Pedro Brieger.
Además de Brieger, director de NODAL, en este primer debate -denominado “América Latina en Disputa”- participaron la periodista Telma Luzzani y Aram Aharonian, director del periódico Miradas al Sur y fundador de la cadena de televisión Telesur.
Luzzani fue la encargada de poner en contexto el ascenso del conservadurismo en la región: “Creo que el triunfo de Macri tal vez no sea exactamente el primero, también (Horacio) Cartes sucedió a (Fernando) Lugo. No es la primera vez que pasa pero si en un país del peso de la Argentina en un momento como el que estamos atravesando de una Dilma (Rousseff) y un (Nicolás) Maduro con un acoso por parte de la derecha brutal”.
Por otro lado, Brieger remarcó un elemento ventajoso que se da hoy en el contexto latinoamericano: “Hay un elemento muy novedoso en este traspaso de mando y es que la presidenta forma parte de un movimiento derrotado pero donde ella sobrevive a la derrota”. Subraya que el movimiento es derrotado en las urnas pero no en el sentido profundo del término y que los momentos históricos analizados más arriba, no tuvieron demasiado tiempo para construir: “En los casos del 73 en Chile y el 76 en Argentina, los movimientos derrotados y derrocados habían tenido un proceso muy corto, no habían tenido la posibilidad de construir. Allende tuvo apenas tres años, si uno lo compara con estos doce años, la diferencia es inmensa”.
El periodista destacó que reflexionar retrospectivamente la historia ayuda a pensar y señaló tres hechos novedosos que se construyeron en la región políticamente. La primera, la aparición de los zapatistas en 1994 como reacción a las políticas neoliberales. La segunda, el surgimiento de Hugo Chávez con el proceso electoral de diciembre de 1998: “Esa jura tan simbólica que en ese momento impactó, llamó la atención, cuando dijo: ‘Juro sobre esta moribunda Constitución’”, recordó. Y tercero: el estallido del 19 y 20 de diciembre de 2001 en Argentina: “A mi juicio es fundamental para entender dónde estamos parados y que muchas veces nosotros en la Argentina lo olvidamos porque fuimos protagonistas. A nivel latinoamericano fue percibido como una derrota del neoliberalismo”.

“El candidato de aquellos que se supone que son el pueblo, se disfrazó de clase media opositora, nos llenaron la cabeza con que estábamos mal, de que estamos en crisis”, definió Aram.
A su turno, Aram analizó las elecciones en Argentina y las calificó como la pérdida de una batalla dentro de la guerra cultural: “El candidato de aquellos que se supone que son el pueblo, se disfrazó de clase media opositora, nos llenaron la cabeza con que estábamos mal, de que estamos en crisis”. Recalcó que hay muchos jóvenes que necesitan que se les hable de futuro y que es muy importante recuperar la memoria histórica para saber de dónde venimos y sobre todo hacia dónde vamos: “Si solamente recuperamos para saber de dónde venimos es lo más retrógrado que podemos hacer, no construye futuro, no da esperanzas, limita a saber qué pasó y nada más”. En este sentido subrayó que es hora de construir una alternativa diferente desde abajo y que los gobiernos que salen de los movimientos sociales no han entendido el tiempo histórico en que vive la región y que ese es uno de los grandes problemas de América Latina: “No hemos entendido que tenemos un cambio de época, que se terminó la época de la resistencia, estuvimos 520 años resistiendo a todos, tenemos postgrados en lloriqueos y denunciología y no aprendimos que estamos construyendo nuevas sociedades y para ello hay que estar todos juntos. Volvamos a la construcción, crear los organismos desde abajo para poder llevar adelante una sociedad diferente, una democracia participativa, un continente que sea para todos”.
Brieger retomó la idea del fundador de Telesur y lo mezcló con el recuerdo del 2001 y los movimientos políticos que aparecieron tras el levantamiento popular: “El desafío era construir, aquello que Aram -siempre de manera provocadora- dijo: ‘Basta de lloriqueo, tenemos doctorados en llorar, tenemos grandes dificultades para construir’. Creo que es bastante más complejo y me parece que los gobiernos progresistas no terminan de responder, porque además creo que la respuesta no es sencilla”.
En este sentido, el periodista -columnista junto a Luzzani del programa Visión Siete Internacional– analizó cómo se va transformando la tarea de los dirigentes de los movimientos sociales una vez que acceden al poder y pasan a cumplir una función en el gobierno y en el parlamento y pone como ejemplo al actual presidente de Bolivia, Evo Morales: “Evo llega al poder y por supuesto que su relación con el sindicato se deterioró, no tiene tiempo de hacer el trabajo sindical que hacía antes”. Asimismo, analizó el caso de Ecuador: “Recordemos que Rafael Correa es elegido presidente la primera vez sin tener candidatos a diputados y a senadores, porque su movimiento político no existía, era él. Consciente de esta falencia lo primero que hace es movilizar en un proceso constituyente, no sólo para cambiar la legislación, sino para construir mayorías porque no las tenía”.
Brieger subrayó cuál fue, a su juicio, el gran mérito de Hugo Chávez, Evo Morales y Rafael Correa, tomando en cuenta sus propias necesidades y diferencias históricas y coyunturales: “Los tres entienden que tienen que refundar el país y se lo proponen. Para hacerlo en estas condiciones históricas, la mejor manera era a través de una Asamblea Constituyente porque efectivamente se construye poder popular y, a su vez, los procesos constituyentes se hacen a través de la movilización popular”.

“No hemos entendido que tenemos un cambio de época, que se terminó la época de la resistencia, estuvimos 520 años resistiendo a todos, tenemos postgrados en lloriqueos y denunciología», afirmó Aram.
Con respecto a otros casos latinoamericanos, en donde no se dio una reforma constitucional sino que los gobernantes electos eligieron otro camino, el periodista comentó el caso de Brasil: “Lula en vez de avanzar hacia un proceso constituyente lo que hace es pactar y negociar. Es verdad que él llega al gobierno ganando la presidencia sin tener mayoría ni en Senadores ni en Diputados. Es más, llega también a contramano porque pierde San Pablo y Porto Alegre que eran los dos bastiones del Partido de los Trabajadores, llega al poder muy debilitado”. Con respecto a los casos de Nicaragua y Argentina expresó: “Salvando las distancias, el Daniel Ortega que llegó después, pactó y negoció con la derecha, no hablo del Daniel Ortega de 1979. El caso argentino fue particular porque no se produce eso de refundar y movilizar ni de pactar y negociar, tiene un camino diferente, pero que sí tiene un punto de convergencia con el camino brasileño y es en cierta medida diferente, el abandono de las calles. Digo en cierta medida, porque acá especialmente después de la muerte de Néstor Kirchner hay un movimiento nuevo de recuperación de las calles”.
Con respecto a la aparición de Mauricio Macri y sus expresiones acerca de una posible suspensión de Venezuela en el MERCOSUR, Brieger declaró: “Dejemos de subestimarlo, muchos lo han subestimado, lo he discutido durante años, su formación es otra y tiene cuadros políticos por todos lados. No hay que pensar que no tiene cuadros, que no saben de política y que sólo tienen globos amarillos, los globos amarillos son parte de la estrategia política y cuando él dice ‘suspender’ estoy casi seguro de que sabe perfectamente que no se puede aplicar aquello que ni siquiera existe porque no hay cláusula democrática en el Protocolo de Ushuaia firmado en 1998, ni siquiera se llama así, es parte de una frase”. Y amplió: “No son ingenuos, lo que buscan obviamente es instalar el tema, quebrar MERCOSUR, UNASUR, es parte de una estrategia política”.

“Dejemos de subestimarlo a Mauricio Macri, muchos lo han subestimado, lo he discutido durante años, su formación es otra y tiene cuadros políticos por todos lados», sostuvo Brieger.
En esta línea, en diálogo con ANCCOM, Brieger opinó acerca de cuál cree que sería el peligro más latente para la región, ante el ascenso de un gobierno conservador en la Argentina: “Creo que a corto plazo, la atomización de los organismos internacionales, principalmente UNASUR y CELAC más que MERCOSUR, éste es un organismo más económico que político, pero si el nuevo gobierno argentino decide intervenir fuertemente en UNASUR puede contribuir a congelar aún más proyectos que están caminando muy lentamente como el Banco del Sur y el Consejo de Defensa Suramericano, creo que ese sería el objetivo de ellos”.
Por su parte, Telma Luzzani comentó: “El regreso del neoliberalismo con una nueva figura y con características diferentes a las que conocemos antes me parece que entraña un peligro en la medida de que es un modelo conocido y que podría llegar a ser usado como ejemplo para otros países de América del Sur. Podemos decir que los países que tal vez tengan más importancia son Brasil en primer lugar, Argentina y Venezuela, también Ecuador y Bolivia por supuesto, pero son países más chicos y me parece que entonces puede ser tomado Argentina como plataforma para cercar a Brasil y acosar todavía más a Venezuela”.
En este sentido, Aram Aharonian comentó a ANCCOM sobre este escenario en Argentina: “El problema es que se rompe una tradición de doce años de estar junto a los gobiernos progresistas de la región, Argentina es uno de los países principales y hoy parece que va a abandonar esa posición, va a tener que acomodarse a la realidad latinoamericana, no es tan fácil tampoco para el gobierno conservador. El problema es que no hay que quedarse solamente en las declaraciones, hay que ver los hechos, vamos a ver cómo va a ser la política exterior. Tampoco tiene tanto margen, ni Argentina es líder de nada en este momento en América Latina como para decir que deja tal cosa. Hay que ver, yo creo que no hay que ser tremendista ni nada por el estilo”.
Brieger recordó cuando el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, fue el único que votó en contra del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) en la III Cumbre de las Américas, en la ciudad de Quebec, Canadá: “Chávez llega al contexto regional del ALCA, rodeado de Menem, Fujimori y Zedillo en México, era el neoliberalismo en su máxima expresión. Era un extraterrestre, no podía actuar, se va construyendo a medida que explota la Argentina en el 2001, aparecen Lula, Kirchner, Tabaré Vázquez”. Asimismo, recalcó: “Es interesante lo que pasó en 2005 en esa Cumbre de las Américas, porque había dos referentes conservadores muy fuertes: (Vicente) Fox y (Álvaro) Uribe, pero que no tenían ni siquiera en ese momento la capacidad de construir una corriente conservadora que se opusiera a lo que estaba germinando y que se construye como muy fuerte”. En esta línea, Brieger explicó: “Macri entra en el escenario regional donde le es desfavorable por ahora y no hay elecciones presidenciales importantes -salvo Perú- a corto plazo. Y aunque Evo Morales pierda el referéndum en febrero, va a seguir siendo presidente, así como Rafael Correa hasta el 2017. En ese contexto, Macri se va a tener que mover y esto quiere decir que entra, salvando las distancias, como Chávez en el 99, solo”.
El director de NODAL explicó que se abre un contexto interesante y todo un desafío: “No sé cómo podremos responder, pero tiene que ver más con la Argentina de seguir construyendo, creo que es un desafío y es novedoso también. Debemos tomar en cuenta que estos doce años fueron muy importantes porque Macri no recibe un país en estallido, ni con la hiperinflación del 89 que logró disciplinar y generar consenso para que se privatice absolutamente todo. Esa transición, además, venía después de las diferentes crisis del alfonsinismo que, a su vez, venía después de la dictadura. Si nosotros juntamos alfonsinismo y dictadura son más o menos los mismos años de kirchnerismo. Sirve para dimensionar lo importante que han sido estos doce años y que me imagino que Macri toma en cuenta respecto de las medidas que quiera tomar”.
El periodista finalizó su exposición con la idea de que el gran desafío de la construcción tiene que ver con construir cosas bellas, atractivas e interesantes para la sociedad en su conjunto: “Construir algo que sea transformador y que genere esperanza porque si no, ganarán los globitos de colores que son mucho más lindos”.