Los consultores Analía del Franco, Artemio López y Federico González opinan sobre el resultado de los comicios del domingo y desarrollan los desafíos y responsabilidades que le toca asumir a Frente Patria.

Este domingo 7 de septiembre se celebraron las elecciones legislativas locales de las ocho secciones electorales de la provincia de Buenos Aires, por primera vez separadas del calendario nacional. Con una contundente victoria de Fuerza Patria, el peronismo ganó por amplia diferencia: con el 98,96% de la mesas escrutadas Fuerza Patria se impuso con un 47,28% de los votos, frente a La Libertad Avanza que consiguió un 33,71%.
Artemio Lopez, director de Consultora Equis, indica que “las expectativas eran más modestas que lo que resultó siendo el triunfo de Fuerza Patria. Nadie pensaba que se iba a ganar en prácticamente todas las secciones electorales. Y mucho menos por casi 14 puntos de diferencia. Sí sabíamos que no había empate técnico, muchos ya suponíamos que eso podía pasar.”
En relación a esta diferencia, Analia Del Franco, socióloga, analista política y titular de Analia del Franco Consultores, reflexiona que el resultado fue un “mensaje contundente que se le dio al gobierno nacional, una advertencia, una alerta respecto a lo que tiene que ver con el rumbo económico. Son muchos factores que llevaron a la desilusión por parte de los votantes de Milei, pero lo que es básico es lo que tiene que ver con el desencanto sobre la situación económica, que finalmente en los últimos 20 días se coronó con la quita de presupuesto para la Agencia de Discapacidad (ANDIS), agravado por el escándalo de corrupción.”

Jornada electoral en la tercera sección de La Matanza.
Sobre la posición del gobierno nacional acerca de la lectura del resultado, Del Franco se pregunta si realmente lo entiende: “Por lo que dijo ayer Milei, lo entiende a medias. Entiende que hay que cambiar cosas pero me quedan dudas respecto a qué cosas, porque si lo económico que es la gran demanda no la quiere cambiar, no sé qué es lo que va a modificar. Puede cambiar los modales, pero va a seguir dando prioridad al déficit a cualquier costo”, indica la socióloga.
El consultor y analista político Federico González indica que el resultado fue una “crónica de un final anunciado”, muy previsible: “Hicieron todo mal. Y los resultados son estos: crisis económica, penurias ciudadanas y un manto de sospecha muy verosímil de que enarbolaron las banderas de la ética y la lucha contra la casta y al final la tuvieron ahí adentro, en el corazón del Ejecutivo”.

Jornada electoral en Isidro Casanova.
“Es un piso para nosotros y un techo para ellos”, declaró Javier Milei desde el búnker de La Libertad Avanza. En relación a su declaración contradictoria en la que a la vez que afirma que el resultado es “el piso sobre el cual vamos a empezar a trabajar de cara a las elecciones nacionales” con “profunda autocrítica” a la par que indica que “el rumbo no se va a modificar, se va a redoblar”, coincide Gonzalez con Del Franco: “Me parece que lo convencieron e hizo el esfuerzo. Fue muy paradójico porque dijo ´voy a hacer la autocrítica´ pero al final terminó diciendo que está todo bien. El metamensaje es ´tengo que jugar a ser ecuánime, pero no voy a cambiar nada´. El triángulo de hierro de (Santiago) Caputo, Milei y Karina quedó oxidado y del otro lado emerge un triángulo a futuro conformado por Axel Kicillof, Cristina Kirchner y Sergio Massa, cada uno aportando lo suyo.”
Al respecto, Del Franco agrega que el peronismo tiene un “desafío y responsabilidad” de acá en adelante. Analiza que hizo un buen trabajo hasta el momento en construir una “alianza estratégica electoral” que se puede ir fortaleciendo y no desestabilizarse de cara a octubre. Además, considera que hay que mantener la cautela y seguir trabajando como se lo estuvo haciendo hasta ahora, con sencillez, sobre el territorio, con los intendentes. “Estoy segura de que los intendentes fueron claves en esta situación”, sostuvo.

Por su lado, Artemio López invita a “construir la derrota no solo electoral sino política del paradigma que llevó adelante el gobierno de Javier Milei. Un paradigma conocido en Argentina porque rastrea sus orígenes en la dictadura militar de 1976. Con lo cual no hay que solo contentarse con los términos electorales.” Considera que hay que “replicar en octubre este triunfo electoral e ir por la construcción de un triunfo electoral de cara a 2027 que sea capaz de revertir el paradigma que encarna hoy Javier Milei, que se desplegó durante la democracia con continuidad, con la excepción de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.” Para el analista, “los resultados de ayer confirmaron en términos electorales que este modelo no funciona.”
Con tal fin en mente, el consultor afirma que “la construcción de la derrota política supone muchos temas. Hay que efectivamente cambiar el paradigma que impregna una parte muy importante de la dirigencia política argentina, no sólo del partido La Libertad Avanza y eventualmente Juntos por el Cambio, sino que también interviene al interior del peronismo en general y en parte en Fuerza Patria. Siempre el neoliberalismo fue hegemónico, y esta es una fase final mucho más autoritaria, en democracia. Hay una discusión fuerte por la hegemonía a nivel planetario, no sólo entre China y Estados Unidos. Hay otras economías emergentes como la india, la rusa, la de Corea, que efectivamente están en la disputa”.
Con respecto a las figuras de la jornada, González consideró que Cristina “está puesta en el lugar de la mártir estoica: tiene votos, tiene mística y tiene voz”. Mientras que señala que Axel Kicillof “fue el protagonista de la noche”: “Le salió bien ‘desdoblar’. Y creo que fue muy bueno su discurso porque, como contraste, puso de manifiesto algo que no es una categoría política sino humana, que es una persona sensible, capaz de emocionarse y de tener una mirada amorosa sobre la política, sobre la gente. Fue un discurso muy constructivo”. Por su parte, analizó que Sergio Massa tiene “un rol que no es muy visible, aunque ha sido y va a ser importante. Es el arquitecto de la unión entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof. Fue el que tejió esa posibilidad. Es un árbitro.”