Por Lourdes Saucedo
Fotografía: Gentileza Maia Pauro

A días de las elecciones legislativas porteñas, ANCCOM dialogó con Vanina Biasi, Celeste Fierro y Agustín Romero candidatos a legisladores del Frente de Izquierda de Trabajadores-Unidad para conocer sus propuestas. ¿Qué hacer con las viviendas ociosas?

“Hay que construir una verdadera alternativa por izquierda, democrática y hecha por y para las y los trabajadores, que no arrugue con los empresarios y corporaciones”, dice Celeste Fierro, militante del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y candidata por el Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad (FIT-U) de cara a las próximas elecciones legislativas para la Ciudad de Buenos. En un territorio que durante años ha sido gobernado por el PRO y que actualmente tiene a Jorge Macri como Jefe de Gobierno, el FIT-U busca sumar más bancas en la Legislatura para hacer frente a la derecha. Al respecto de este contexto, Vanina Biasi, actual diputada nacional y quien encabeza la lista del FIT-U, señala que en la ciudad “hace falta defender realmente los intereses de quienes vienen siendo golpeados por estos gobiernos. Por eso planteamos que a Macri y a Milei hay que pegarles con la izquierda, porque tanto en las bancas que ocupa el FIT-U como en cada movilización somos consecuentes con lo que planteamos y la defensa incondicional de los trabajadores”.

Con la eliminación de las PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y la fragmentación de los partidos tradicionales, como el peronismo, el PRO e incluso La Libertad Avanza, los habitantes de la ciudad tienen un total de 17 listas para elegir en las próximas elecciones. Ante este escenario, Biasi afirma que esta “fragmentación es producto de la crisis política de varios de los partidos tradicionales e incluso de los que gobiernan hace tan solo dos años. La situación económica a la que nos han llevado y el rechazo de la población a estas medidas ha producido esta pelea por ver quién se salva y logra capitalizar este descontento”.

“Una ciudad para unos pocos”

Estas elecciones porteñas se realizan en un periodo en donde la gestión actual (el PRO) está siendo fuertemente cuestionada por varios espacios políticos, incluida obviamente la izquierda. “La reforma antieducativa, la precarización del sistema de salud, trabajadores municipales que cobran por debajo de la línea de pobreza y en muchos casos sin estabilidad laboral, entre tantos otros motivos. Son suficientes para evaluar la gestión del PRO como pésima”, señala Biasi. Y agrega: “Esa es la orientación que han sostenido estos 18 años de gobierno: una ciudad para unos pocos y expulsiva para las mayorías”. Al mismo tiempo, Fierro reflexiona sobre la relación entre el gobierno de la Ciudad y el nacional: “En represión, Jorge Macri ha sido el mejor alumno de Milei y Bullrich, es más hasta le entregó la autonomía de la Ciudad en ese sentido, todo para reprimir a jubilados y a quienes luchan por sus derechos”.

Para hacer frente a esta situación, entre las principales propuestas que se plantea la izquierda se encuentran tres problemáticas a abordar: la salud, la educación y la vivienda. Agustín Romero, quien también se presenta como candidato a legislador y es militante del MST, recalca que las propuestas fueron realizadas de manera colectiva: “Fuimos elaborando con vecinos, trabajadores, estudiantes, mujeres y disidencias, porque nuestra manera de hacer política es colectiva, las bancas abiertas y siempre al servicio de quienes nunca fueron y son escuchados”.

Por otra parte, Biasi destaca tanto la urgencia de incorporar a las enfermeras y enfermeros a la carrera profesional de salud como la real aplicación de la Ley 448 sobre salud mental. Asimismo, Fierro expresa la necesidad de llevar adelante un sistema único de salud en donde se ponga fin a los negociados privados en la materia.

También, para hacer frente a la situación habitacional en la ciudad, la izquierda plantea la incorporación de los más de 200 mil inmuebles ociosos en la ciudad al mercado de alquileres. Esto sería sobre la base de un impuesto progresivo a la vivienda ociosa para los grandes acaparadores que hacen negocio sobre la base de la expulsión de los trabajadores en el territorio. En simultáneo, Fierro habla sobre la idea de establecer “alquileres sociales, es decir sea solo el 15% del salario del inquilino”.

Y sobre la educación, Biasi menciona la derogación de la reforma “BA Aprende”, que no solo degrada los contenidos que se enseñan, sino que ataca la estabilidad docente de la mano del cierre de varios cursos. Además, “sostenemos -afirma Biasi- la defensa de la ESI frente al intento de imponer una regimentación de los estudiantes ante la realidad que viven con la educación pseudoemocional, aprobada en la Legislatura con el apoyo de todos los bloques políticos, con excepción del FITU, a fines del año pasado”.

Una alternativa

“La izquierda tiene que organizar la pelea para que se vaya Milei, un gobierno incompatible con los reclamos populares, que desde que asumió mantuvo un ataque constante sobre las mayorías, y para que los trabajadores intervengan con sus propios reclamos por el salario, las jubilaciones, el derecho a la salud, la educación y la vivienda”, dice Biasi. Y añade: “Nuestro lugar en la Legislatura servirá como punto de apoyo para las luchas que se den fuera del recinto y un canal para su organización. En la medida que logremos desarrollar esa perspectiva crecerá el voto al Frente de Izquierda”.

Además, Fierro subraya la necesidad de la unidad y cuestiona la oposición encabezada por el peronismo en la ciudad: “La salida hoy para echar a Milei es la unidad en las calles. Es organizar la bronca desde abajo, autoconvocarnos en cada sector de laburo, de estudio, en cada barrio, porque la CGT ya demostró no estar a la altura de esta tarea. Ni tampoco los dirigentes políticos del peronismo, como Santoro, que ni una palabra dijo desde que es diputado nacional y ahora se planta como la salvación de la derecha”.

En sintonía, Romero concluye: “Es necesario que la izquierda se postule como una alternativa, no solo electoral, sino también en todos los espacios que intervenimos. El proyecto de la izquierda no es personalista, sino que se construye colectivamente, democráticamente y sobre todo desde las bases. Porque la pelea contra la derecha, su plan de ajuste y de represión se lo enfrenta en las calles, así como lo hacen los jubilados, los sectores en lucha como el Bonaparte, el Hospital Garrahan y los piqueteros”.