Los trabajadores de El Grito del Sur denunciaron que el gobierno nacional pretende desalojarlos del Espacio para la Memoria Virrey Cevallos, donde funcionan desde 2017, como una manera de silenciar voces disidentes a la gestión oficial.

Trabajadores del medio digital y autogestivoEl Grito del Sur realizaron una conferencia de prensa, ayer, en las puertas del Espacio para la Memoria Virrey Cevallos -donde funcionó un Centro Clandestino de Detención durante la última dictadura- lugar en donde es sede la redacción desde 2017, para denunciar los abusos y atropellos por parte del gobierno nacional, que busca desalojarlos.
“El gobierno de Javier Milei, a través de la nueva directora de Sitios, Emilse Gallo, informó a la redacción su expulsión del lugar vía WhatsApp”, indicó el director de El Grito del Sur, Yair Cybel. Como es sabido, el desmantelamiento de los Espacios de Memoria forma parte de la cotidianidad política del gobierno de La Libertad Avanza.
El funcionamiento de la redacción de El Grito del Sur en el Espacio para la Memoria Virrey Cevallos está respaldado por un convenio suscripto por Osvaldo López, excoordinador del lugar. Este acuerdo se enmarca en lo establecido por la Ley de Sitios de Memoria (Ley 26.691), que tiene como objetivo principal proteger, preservar y conservar los espacios vinculados con el terrorismo de Estado. Dicha norma declara de interés nacional la señalización y preservación de los excentros clandestinos de detención, tortura y exterminio, así como de otros espacios representativos de la memoria.

Los trabajadores presentaron un amparo administrativo para que cese el hostigamiento a la redacción, ya que consideran que se están vulnerando tanto el derecho a la libertad de expresión como lo establecido por la Ley de Sitios. “Estamos ejerciendo el periodismo, dándole voz al pueblo que está sufriendo el ajuste de Milei”, declaró la trabajadora Belén del Huerto. La conferencia de prensa contó con el acompañamiento de SIPREBA, diversas organizaciones sociales, de derechos humanos, sindicatos, universidades y referentes políticos de distintos espacios, además de otros medios digitales.
Victoria Montenegro, quien asistió a la conferencia de prensa, declaró: “Esta es una nueva investida por parte del gobierno nacional: la decisión de cercenar todo, el derecho a la memoria, a la comunicación, el derecho de que otras voces que no sean las que ellos quieren imponer puedan multiplicarse. Que la redacción funcione en un sitio de memoria tiene que ver con la apropiación del sector por parte de la comunidad”.
Lucía Cámpora, secretaria general de La Cámpora, también declaró su apoyo a los trabajadores de la redacción: “El Grito visibiliza situaciones de injusticia que los grandes medios no le cuentan a la sociedad, por eso al gobierno nacional le interesa sacarlos, además de continuar con su política de censura y desmantelamiento de los espacios de memoria”.
Gabriel Solano, actual legislador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires del Partido Obrero, también expresó su apoyo: “El Grito informa con una mirada distinta a la mirada de los medios oficiales. Necesitamos medios que informen a la población sobre lo que realmente pasa. El desalojo de la cooperativa comunicacional es especial, forma parte del vaciamiento más amplio en los Espacios de Memoria”.
