A pesar del desmantelamiento de las políticas públicas de Memoria, Verdad y Justicia, las Abuelas de Plaza de Mayo lograron restituir la identidad de otra nieta apropiada. Es el caso resuelto número 139, hija de Daniel Inama y Noemí Macedo.
Las Abuelas de Plaza de Mayo dieron a conocer la restitución de la identidad de una nueva nieta. En la Casa por la Identidad del Espacio Memoria y Derechos Humanos ex-Esma, Estela de Carlotto y Buscarita Roa, presidenta y vicepresidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, llevaron adelante la conferencia de prensa donde dieron a conocer los detalles sobre la búsqueda y la familia biológica. “Inexorablemente la verdad sobre los crímenes de la dictadura sigue saliendo a la luz“, afirmó Carlotto al comenzar, rodeada por Taty Almeida, Madre de Plaza de Mayo; Manuel Gonçalves Granada, nieto recuperado e integrante del directorio de Abuelas, y Ramón Inama, hermano de la nieta 139.
La nieta 139 es la hija de Noemí Macedo y Daniel Inama y nació en cautiverio entre enero y febrero de 1978. Daniel y Noemí, oriunda de Mar del Plata, militaban en el Partido Comunista Marxista Leninista (PCML) y se conocieron en La Plata. Fueron secuestrados el 2 de noviembre de 1977 cuando Macedo, se estima, estaba embarazada de 6 o 7 meses. Ambos fueron vistos por sobrevivientes en el Centro Clandestino Club Atlético.
Antes de su secuestro y desaparición, Daniel tuvo dos hijos, Ramón y Paula, quienes se criaron juntos gracias al buen vínculo entre sus madres y siempre supieron del embarazo de Noemí. Ellos llevaron adelante una búsqueda que se extendió durante años, hasta ahora. “Mi viejo y Noemí se conocieron en Mar del Plata, militando en ese partido que era una organización política maoísta, muy pequeña, que fue diezmada” contó Inama. “Esa organización tiene muchísimos desaparecidos, militantes revolucionarios que dieron la vida por lo que creían. Noemí y Daniel son un ejemplo de eso, dos personas comprometidas con su realidad y con ganas de vida”, afirmó.
Noemí Macedo, la mamá de la nieta 139, fue secuestrada cuando cursaba el sexto o séptimo mes de embarazo.
Manuel Gonçalves Granada fue quien detalló el proceso de búsqueda que se llevó adelante para poder celebrar la restitución de la nieta 139. “Abuelas de Plaza de Mayo recibió información anónima. Luego de la articulación con la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI) se continuó con el abordaje del caso. Desde la CONADI se requirió la información a las diferentes dependencias nacionales y provinciales, cuya respuesta en tiempo y forma fueron fundamentales para la resolución de esta búsqueda”, destacó Gonçalves Granada. “A partir de todo este exhaustivo trabajo se logró contactar a la posible nieta. En este marco la mujer fue convocada por la CONADI en noviembre de 2024. Ella accedió a asistir al Banco Nacional de Datos Genéticos para dejar su muestra de ADN y ayer el Banco confirmó que es hija de Noemí y Daniel” relató.
Gonçalves Granada, nieto recuperado número 57, también remarcó la importancia y la motivación de tantos años de trabajo incansable por la verdad. “Al fin y al cabo, de eso se trata esta lucha, de reparar lo que el Terrorismo de Estado quiso destruir, nos impulsa el amor, la ternura, la certeza de que la verdad, aunque parezca dolorosa, puede sanar en parte las heridas y eso lo hemos comprobado en estos 139 casos” concluyó.
En el mismo sentido se expresó Inama. “En La Plata buscamos a esta hermana muchísimo y pensamos que habíamos agotado todas las instancias, que era un caso cerrado, pero las Abuelas nos demuestran 139 veces que nunca es la última esperanza”. En una intervención cargada de emotividad, donde recordó los largos años de búsqueda, preguntándose cómo sería su hermana o hermano, si tendría dudas sobre su identidad o si alguna vez, sin saberlo, se habrían cruzado, Inama afirmó: “Esto es un acto de justicia, es una reparación, es una certeza que nunca más va a ser incertidumbre, hoy alguien más puede decir quién es, porque lo sabe”.
«Noemí y Daniel (los padres desaparecidos de mi hermana) son un ejemplo de dos personas comprometidas con su realidad y con ganas de vida”, afirmó el hermano de la nieta restituida 139.
Buscarita Roa resaltó la urgencia que sienten las Abuelas, pero también la tarea y la lucha que se heredan. “Ustedes saben que los años pasan muy rápido, y estamos muy viejitas, quedamos poquitas, entonces estamos desesperadas porque los nietos vayan apareciendo lo antes posible. Igual, van a quedar todos ustedes con el compromiso de seguir adelante buscando los nietos que nos faltan”.
A pesar del vaciamiento, siguen los hallazgos
Es ineludible enmarcar la restitución de esta nueva nieta en el contexto de desmantelamiento y desguace de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia por parte del gobierno nacional, con su posición negacionista y apologética de la dictadura. A pocos días de terminar el año, cientos de trabajadores de la secretaría de Derechos Humanos fueron informados que no iban a renovar su contrato a partir del 1 de enero, y lo mismo sucedió con las y los trabajadores del Centro Cultural Harlodo Conti, quienes se enteraron el 31 de diciembre a través de Whatsapp del cierre del espacio.
“Nada hubiéramos podido lograr solas, esta es una lucha colectiva, la continuidad de las políticas de estado es fundamental para terminar con los delitos de lesa humanidad” afirmó Carlotto. Y resaltó que “por eso es central el papel de las instituciones como la secretaría de Derechos Humanos de la Nación, sus políticas deben seguir siendo sostenidas por el gobierno con la totalidad de sus trabajadores y trabajadoras, y mantener sus instrumentos para poder continuar con el proceso Memoria Verdad y Justicia”. En ese momento, las palabras de la presidenta de Abuelas fueron interrumpidas por un extenso aplauso de quienes se encontraban presentes. “Todo esto ha sido fruto del diálogo entre el Estado y la sociedad civil, un verdadero consenso democrático para que los derechos de todos y todas y de las futuras generaciones estén garantizados. ¡Bienvenida a la verdad querida nieta!” concluyó.
“Inexorablemente la verdad sobre los crímenes de la dictadura sigue saliendo a la luz“, dijo Carlotto.
Taty Almeida también se expresó sobre el tema. “Le pregunto a la señora Villarruel y a sus amigos los genocidas ¿va a negar que las Abuelas y todas y todos hemos encontrado una nieta? ¿Cómo se van a atrever los negacionistas a negar esto que es evidente?”, se preguntó. “Sepan que se va a seguir buscando y van a seguir apareciendo nietos”, desafió la Madre de Plaza de Mayo.
La jornada concluyó en el hall de la Casa por la Identidad, donde entre aplausos, cantos y vitoreos las Abuelas, junto con Inama, cambiaron el 8 por el 9 en la cartelera de la entrada, que ahora dice: “Gracias a esa lucha son ya 139 los nietos que recuperaron su verdadera identidad”. Al salir por la calle arbolada que separa la Casa por la Identidad de la salida del predio se escucharon risas, charlas animadas, aplausos. Los presentes coincidieron en cuán necesarias resultan esas noticias, se abrazaron, y así pusieron en evidencia el poder de la lucha de Abuelas, que en tiempos como los que corren, siguen dando buenas noticias.