Por Juan Ressel
Fotografía: Pamela Pezo Malpica y Prensa Consagradas

En el marco de los Juegos Olímpicos vuelve a escena “Consagrada”, creada y dirigida por Florencia Micha e interpretada por la actriz y exgimnasta del seleccionado nacional, Gabriela Parigi. La obra teatral pone en cuestión la sociedad en que vivimos.

 

La multipremiada obra de teatro, Consagrada, el fracaso del éxito realizará una Temporada Olímpica durante el mes de agosto en Timbre 4 en sintonía con los Juegos de París 2024. Para promocionarla se realizó una función especial con una posterior charla debate de la que participaron personalidades del deporte como la exnadadora olímpica Delfina Pignatiello, la exfutbolista Mónica Santino y Fernando Signorini, quien fuera preparador físico de Diego Maradona.

Creada por la directora Florencia Micha y, por la actriz y exgimnasta del seleccionado nacional de gimnasia, Gabriela Parigi, la pieza es un unipersonal que pone en evidencia y cuestiona los retos, sacrificios y exigencias del deporte de alto rendimiento. En diálogo con ANCCOM Parigi –que protagoniza la escena- explica: “La obra surgió a partir de una serie de temáticas que hacía rato quería tratar, como la lógica de la competencia en todo lo que hacemos, la lógica del podio, del sacrificio, de la meritocracia, del capitalismo, del extractivismo en los cuerpos, en las subjetividades, como era muy amplio empezamos con ejercicios e improvisaciones, hasta que en un momento se hizo evidente que había que partir de mi historia personal como deportista de alto rendimiento y hablar desde ahí”.

Durante los 60 minutos que dura la obra, la sala se convierte en un gimnasio en el que Parigi realiza un desgaste físico importante el que combina gimnasia, acrobacia, danza y circo durante momentos de drama y otros que rozan el humor hilarante. La actriz, con más de 15 años dedicados al alto rendimiento, reconoce que  “si bien es una obra biodramática documental en la que hay momentos que se toca el llanto, está muy despegada de mí, está ficcionalizada para universalizar el mensaje y, desde mi historia singular, abrirlo porque, en algún punto, todos padecemos la lógica del alto rendimiento en esta sociedad consumista, capitalista, individualista y alienada”.

Parigi resalta que fue un proceso muy fuerte y movilizante el de reconstruir su camino: “Hace mucho que siento que me mudé del ecosistema deportivo, entonces lo tenía bastante alejado de la memoria física y, en algún punto, fue bueno volver a ponerlo sobre la mesa, volver a mirarlo, a relatarlo, a nombrarlo y reírme de eso, tomar distancia y poder caricaturizarlo, ridiculizarlo, sensibilizarlo y entenderlo”, detalla la artista, que utiliza elementos de su pasado para la utilería y para escenificar la obra que han sido resignificados: “Uso el bastón de mi abuela para entrar y el cajón que está en escena es el taburete con el que yo entrené toda mi vida”, detalla.

Por último, la protagonista relató cómo se prepara para esta temporada que comenzará en agosto: “Me gusta mucho hacer esta obra, le estamos poniendo mucha pila, es un momento muy complejo para el país y en el teatro lo estamos viviendo muchísimo, se nota que la gente no tiene plata para salir, para comprarse una entrada, entonces estamos como todos muy atentos para defender y cuidar los lugares porque es importantísimo que los países tengan sus espacios de cultura para expresarse”.

«No todos los atletas de alto rendimiento tienen las mismas posibilidades que en el fútbol», dijo Pignatiello.

El debate

Luego del espectáculo comenzó una charla debate de la que participaron Pignatiello, exnadadora olímpica y medallista de los Juegos Panamericanos 2019; Santino, exfutbolista y fundadora de La Nuestra Fútbol Feminista Villa 31; el preparador físico Signorini y la propia Parigi. Con la mediación de Jorge Dubatti los invitados dieron su punto de vista sobre el deporte de alto rendimiento y también se animaron a hablar del contexto actual. Pignatiello se refirió al inicio de los Juegos Olímpicos: “A mí me gusta recordar siempre, sobre todo por el país donde vivimos y a las expectativas que se tienen en cuanto al deporte, que no todos los atletas de alto rendimiento en este país, sobre todo en el deporte amateur, tienen las mismas posibilidades que en el fútbol o que en otros deportes donde se da mucha más importancia”. En esta misma línea la autora y actriz de la obra hizo una reflexión en torno a la enseñanza deportiva: “Tenemos que pensar desde nuestro lugar de poder como docentes, como dirigentes ¿qué valores estamos impulsando? Si son valores humanistas o valores productivistas, extractivistas, de alienación, de individualismo, que terminan atentando contra la sociedad”.
Por otro lado, Santino, puso el foco en el aspecto político: “El deporte argentino está pasando un momento muy difícil, como tantos otros rubros en actividad, hace poco presenciamos una despedida de un presidente de la comitiva dándole la espalda a los deportistas”, detalló. Además, la exfutbolista alertó sobre las intenciones del gobierno con el Centro Nacional de Alto Rendimiento (CeNARD) para cederlo a negocios inmobiliarios y se manifestó en contra de la privatización de los clubes: ”El próximo paso es defender nuestros clubes contra cualquier intento de sociedad anónima deportiva, porque eso es lo que viene”, afirmó.

En esta misma línea continúo Signorini, quien aprovechó para cuestionar la designación de Daniel Scioli como secretario de Deportes de la Nación. Además, el profe, como se lo conoce, definió al éxito como “todo aquello que se consigue dando el máximo de uno mismo. Muchas veces se consiguen cosas a través de la especulación o a través de recursos que nada tienen que ver con lo positivo y agradable de la vida y eso no está bien”, luego cerró: “El deporte tiene que servir para hacernos mejores personas, mejores seres humanos con el de al lado, si no sirve para eso no sirve para nada”.

“El deporte tiene que servir para hacernos mejores personas, mejores seres humanos con el de al lado, si no sirve para eso no sirve para nada”, dijo Signorini.

Por último, antes de finalizar la charla y tras la pregunta de un espectador, Parigi se refirió a sus sentimientos con la obra: “Consagrada tiene todo un recorrido, por algo es parida después de 18 años de dedicarme a esto, después de haber sido entrenadora, después de ser docente, después de ser madre, hay como una condensación de camino que hace que esté más metida que nunca, pero al mismo tiempo desapegada en el sentido de que no siento que es algo catártico, sino que está trabajada por una directora y por todo el equipo para que trascienda de mi historia personal y logre transmitir al público la idea”.

En cuanto a la charla, explicó: “La intención de hoy era terminar con una energía de poder transformadora, no solamente que se evidencie el lado de lo oculto del deporte, que la obra critica y deja manifiesto, sino que además quedara repicando una energía de ganas de hacer diferente, que diera power, que despierte preguntas y permita ver que cuando estamos en un rol de poder se puede hacer de otra forma, no replicar esa lógica alienada, eso era importante en el final, digamos terminar transformada”.

En el marco de los Juegos Olímpicos de París 2024 que comenzaron el viernes 26 de julio, la obra realizará una serie de presentaciones durante los primeros cuatro jueves de agosto a las 21 en la sala del barrio de Boedo (México 3554). Las entradas están a la venta por medio de Alternativa Teatral o por la web de Timbre4.

 

“¿Qué valores estamos impulsando? ¿Son valores humanistas o valores productivistas, extractivistas, de alienación, de individualismo, que terminan atentando contra la sociedad?”, se preguntó Parigi.