Por Aldana Alonso
Fotografía: Camila Meconi, Cristina Sille, María Bessone, Mariana Chichel - ARCHIVO ANCCOM, Milagros Gonzalez

Declararon su madre, la expareja del acusado Luis Ramos y varios de sus vecinos. En total, una centena de testigos intentarán dilusidar ¿dónde está Tehuel?

Este 15 de julio, en el Tribunal Oral Criminal 2 de La Plata, tuvo lugar la primera de las audiencias del juicio oral y público contra Luis Alberto Ramos, acusado por la desaparición y el asesinato del joven trans Tehuel de la Torre, ocurrido en 2021. La expareja de Ramos declaró que “acosaba a las mujeres y era violento con los hombres”.

El proceso judicial –que tiene a otro imputado, Oscar Montes, quién se someterá a otro juicio pero por jurados– estaba previsto para 2027, pero la presión de la familia, sus abogados y diversas organizaciones, asociaciones y organismos de derechos LGBTINB+ lograron adelantar la fecha. Al mismo tiempo, vienen bregando por la importancia de visibilizar el proceso y exigir a la justicia que adopte una perspectiva de género. 

A los pies del estrado donde se sentarían luego los jueces Claudio Joaquín Bernard, Silvia Edit Hoerr y Ramiro Fernández Lorenzo se apilaban numerosas carpetas de expedientes. Si bien el juicio se encontraba programado para las diez de la mañana, no fue hasta las diez y media que llegó Luis Ramos, esposado y escoltado por cuatro oficiales del Servicio Penitenciario Bonaerense, para tomar su lugar en el banco de los acusados. Veinte minutos después, hizo su aparición Norma Nahuelcura, la madre del joven desaparecido, vistiendo una pechera de la asociación civil Amigos y Familiares de Tehuel, con la pregunta que desde hace tres años se escucha en las calles y hoy es un grito de lucha: “¿Dónde está Tehuel?”. Recién a las once de la mañana, luego de que se acomodaron los allegados de la víctima en la sala, los jueces dieron inicio a la primera jornada. 

Este proceso de diez audiencias y cuyo último encuentro se prevé para el viernes 26, en plena feria judicial, consta inicialmente de dos jornadas de apertura, para luego dar lugar a un juicio técnico por el cual pasarán casi un centenar de testigos, donde se expresarán los alegatos y, finalmente, será dictada la sentencia. Por otro lado, el juicio por jurados al que se someterá Montes aún no posee una fecha confirmada.

A lo largo de estos diez encuentros, el equipo de abogados de Norma Nahuelcura, la mamá de Tehuel, conformado por Flavia Centurión, Cristian Ariel González, María Dolores Amaya y Pilar Rodríguez Genin, intentará probar que no solo se trata de un homicidio, sino que este fue motivado por odio hacia la identidad de género de la víctima. Esto, además de ser un agravante, establecería un precedente en la historia de la justicia penal argentina al ser la primera sentencia por trans-homicidio del país. Por otro lado, la defensa buscará negar la participación de Luis Ramos en la desaparición de Tehuel, y utilizará la negación del padre del joven, Andrés de la Torre, de la necesidad de un juicio como argumento para la inocencia de Ramos.

Los testigos

En una primera jornada, que se extendió hasta las tres y veinte de la tarde, se presentaron seis testigos: Norma Nahuelcurá, la madre de Tehuel, Michelle Leyes, la novia del joven, Catalina Solás, expareja de Ramos, Julio Aguero y Romina Soledad Loboso, vecinos del barrio, y Ricardo García, quien vivió unos meses junto a Ramos y su madre. Excepto el último de los testigos, todos coincidieron en pedir a los jueces dar testimonio sin Ramos presente, con un motivo unánime: miedo a sufrir represalias por parte del acusado, en venganza por sus declaraciones.

La primera en hablar fue Nahuelcurá, dando cuenta de la infancia de Tehuel y cómo este, desde pequeño, había expresado su identidad de género: “Desde chico se vestía como varón; no le gustaba usar pollera y jugaba al fútbol con varones. Con Michelle llevaban dos años juntos, y Tehuel siempre fue el varón. Michelle tiene un nenito que lo llamaba [a Tehuel] papá”. 

A continuación, Nahuelcurá realizó una cronología desde el jueves 10 de marzo de 2021, la última vez que vio a su hijo con vida. “Las siguientes novedades que tuve fueron el sábado, porque vi que desde el jueves no le llegaban los mensajes a Tehuel ni se había vuelto a comunicar conmigo, así que hablé con Michelle y le pedí que haga la denuncia a la comisaría”, comenta Norma, y agrega: “Michelle me dijo que se había ido a hacer una changa como mesero con un tal “Luigi”. Después me enteré que era Luis Ramos”.

Tanto Norma como Michelle hicieron hincapié en la situación de desocupación que vivía Tehuel, y cómo la falta de un ingreso fijo lo preocupaba. “Su situación económica era nada. No podía conseguir trabajo y eso lo tenía incómodo al sentirse cabeza de un hogar”, comentó la mamá, y continuó relatando que “se ofrecía a hacer changas para sobrevivir”. En consonancia con esto, Leyes habló de las complicaciones económicas del joven: “Tehuel no conseguía trabajo por su orientación, por ser transexual. No lo quisieron tomar en un comercio porque según ellos capaz un día se arrepentía y quedaba embarazado”. 

Por otro lado, y en referencia al acusado, Julio Aguero habló sobre el carácter violento de Ramos. “Nosotros estábamos en la canchita jugando a la pelota. Ramos pasó caminando mientras nos gritaba para buscar problemas, con un cuchillo en la mano”, compartió Aguero. “Nos persiguió como dos cuadras y después se fue con una chica de pelo corto”, agregó. En referencia a esto último, se barajó la posibilidad de que el acompañante de Ramos en ese momento hubiera sido Tehuel, ya que la descripción de su vestimenta coincide con la del testimonio de Leyes, la última vez que vió a su pareja.

El retrato de “el odio”

Entre los testigos que pidieron la ausencia de Ramos en la sala, se encontraba Catalina Salas, ex pareja del acusado. “Acosaba a las mujeres y era violento con los hombres, no le gustaba que los hombres estuvieran con hombres ni las mujeres con otras mujeres”, dijo sobre su homofobia.

Los abogados de la familia de Tehuel pidieron a los jueces la obligatoriedad de juzgar con una perspectiva de género, sosteniendo que se trata de un trans-homicidio. El asesinato de Tehuel se encontró motivado por el odio, lo que sirve de agravante al homicidio. Según compartió Cristian González, el desafío más grande de este proceso es probar ante la justicia este odio. En consonancia con esto, Flavia Centurión afirmó: “Tenemos pruebas suficiente para demostrar un homicidio cuyo motivo fue el odio y la falta de tolerancia hacia una persona que tiene un género no binario”.

Salas compartió a los jueces que Ramos, durante su noviazgo la había golpeado reiteradas veces, incluso habiendo llegado a causarle un aborto espontáneo. Además, acusó a su ex pareja de haber abusado sexualmente de su hijo y afirmó que si bien realizó la denuncia en su momento, aún se encuentra sin respuestas por parte de la justicia. “Se lo conoce en el barrio como el loco del cuchillo”, compartió Michelle Leyes.

En línea con lo expuesto por Salas, Leyes declaró que “Tehuel me contó sobre la denuncia por abuso a un menor que tenía Ramos, y que tenía comentarios babosos sobre las chicas con las que militaba“. Leyes confió a la justicia que esto la hacía sentir desconfianza hacia el acusado. Por otro lado, la pareja de Tehuel sostuvo que Ramos se refería a Tehuel en femenino: “Averigüé a través de los vecinos dónde vivía Ramos y le di el dato a la policía. Fuimos a su casa y nos dijo que Tehuel no estaba ahí, que pasemos a buscarla, en términos femeninos”. 

Más adelante, Leyes recordó que en un llamado telefónico con Ramos, el acusado le dijo “cómo me vas a decir eso si yo la quiero mucho”, a pesar de que Michelle sostiene que solo le había preguntado si conocía el paradero de Tehuel, ya que había sido el último en tener contacto con él. 

Además, sobre la situación económica de Tehuel, tanto su madre como su pareja coincidieron sobre las dificultades que sufría. Leyes declaró que Ramos le daba plata semanalmente a Tehuel, afirmando que no hacía falta que la devuelva. Además, habló sobre un préstamo de 2000 pesos que le había hecho el acusado a Tehuel.

“Michelle pareja de Tehuel describió la angustia que este sentía por no conseguir trabajo y ser sostén de hogar”, afirmó González en diálogo con ANCCOM. “Esta situación era aprovechada por Ramos para generar una dependencia económica, dándole dinero cada dos semanas, ofreciéndole changas, situándolo en una posición de proveedor a quien se le debía solicitar el sustento para la familia de Tehuel”, apuntó.

El equipo de abogados de la familia de Tehuel hizo hincapié en la violencia, manipulación psicológica y sujeción económica que ejercía Ramos sobre Tehuel, todo como prueba de que se trató de un homicidio agravado por odio.

“Los testimonios de hoy han marcado el perfil violento, agresivo, machista y patriarcal de Ramos”, reconoce González. “La defensa trató de mostrar que Ramos lo consideraba un par, que lo trataba de “Bro”, pero todas las personas que testificaron dijeron que Ramos al momento de hablar de Tehuel, hablaba de la “chica-chico”, o se refería a Tehuel en femenino, algo que también ha quedado comprobado por los chats que fueron enviados desde el teléfono de Ramos a la pareja de Tehuel.

En las calles

Afuera, en las calle donde se ubica el Tribunal, se encontraron acompañando el minuto a minuto del juicio diversas organizaciones sociales y representantes de organismos, entre ellos, el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), el frente de Orgullo y Lucha, Pan y Rosas, Rosario Castelli en representación del exministerio de Mujeres y Diversidad de la Provincia de Buenos Aires, entre otros. 

En medio de carteles con el interrogante “¿Dónde está Tehuel?” o frases como “No hay justicia si lxs trans están vivxs de pedo”, la convocatoria contó con dos intervenciones de los abogados de la familia de Tehuel y Norma, una durante el almuerzo y la otra hacia el final de la jornada, para compartir la situación de la audiencia y para agradecer el apoyo. 

Rosario Castelli dijo a ANCCOM que “este juicio va a sentar un precedente para todos. Si no hubiéramos hecho presión, no se estaría dando el juicio ahora. Es fundamental ocupar la calle”. Por otro lado, agregó que espera que “la justicia contemple el odio hacia la identidad de género en el fallo. Esto sentaría un precedente, sobre todo en este momento en que los crímenes de odio son promovidos incluso desde el gobierno nacional que cerró todas las áreas de género”.

Finalmente, Nahuelcurá cerró la jornada dando las gracias por el apoyo. “Me siento muy contenida”, afirmó. “Agradezco el acompañamiento que me están dando. Me siento muy entera”.