Jubiladas, docentes, trabajadoras sexuales, cocineras de comedores populares, estudiantes, lesbianas y niñas, entre muchas otras, marcharon en la 9ª edición del Niunamenos. Acá te cuentan por qué se movilizaron.
Hoy se cumplen 9 años desde que la consigna “Ni Una Menos” se usó por primera vez como respuesta al aumento de las violencias contra las mujeres y su consecuencia más fatal: los femicidios. Este año no es la excepción. Desde el colectivo Ni Una Menos, se convocó a marchar desde las 16:30 de este lunes al Congreso. ¿Por qué marchamos esta vez?.
Ana María Tapia y Nancy Yural, de jubilados insurgentes.
“No quisiéramos ser la última generación de jubiladas. Queremos que nuestras hijas y nietas también se puedan jubilar. Esta es una ley que ataca fundamentalmente a las trabajadoras”, afirma Nancy Yural. Agrega Ana María Tapia: “Este gobierno nos quita lo esencial: la moratoria. Vamos a quedar 9 de cada 10 mujeres sin jubilarse”.
Maria La Emperatriz, trabajadora sexual.
“Estamos acá por las cosas que están pasando, están vendiendo Argentina. Además, nos están matando a todos: no alcanza para vivir ni para comer y todos los días asesinan a una chica”..
Andrea Gallo, cocinera para chicos en barrios populares e integrante de la UTEP y Barrios de Pie.
“No están entregando mercadería para los chicos que tienen hambre, vienen a buscar al merendero y no tenemos para darles. Ahora tres veces por semana se está haciendo el merendero, pero con ayuda de los vecinos y nuestra, porque sí o sí los chicos tienen que comer”.
Jesi Hernández, integrante de la Organización de Lesbianas Autoconvocadas por la Masacre de Barracas.
“En este momento me trae esta masacre. Se me revuelve el estómago de solo pensar que nuestras vidas no valen nada. Pienso en estas cuatro compañeras que fueron prendidas fuego mientras dormían. Pienso en el privilegio de lo que es dormir, darse la mano, darse un beso por la calle. Todo eso en un contexto actual, donde tenemos un INADI desmantelado y no tenemos un Ministerio de Género y Diversidades, donde tenemos discursos de odio que no cesan. Tenemos un amigo del presidente que dice que somos insanos, que somos personas que no somos naturales. Estos discursos de odio no son gratuitos: se llevan la vida de las personas que formamos parte del colectivo LGBT y eso no puede suceder”.
Bianca Levato, 16 años, referenta del centro de estudiantes de Lenguas Vivas.
“Venimos acá con las pibas para defender nuestros derechos. Estamos todos los días en el colegio expresandonos con mucha libertad, no queríamos dejar de salir a la calle. Sabemos la importancia de lo que fue la marea verde en el 2018. Por las futuras generaciones y también por los que estuvieron antes y conquistaron lo que hoy disfrutamos nosotras”.
Virginia Silveira, cofundadora de la Asociación Civil Mocha Celis
“Nos convoca visibilizar a nuestras compañeras que fueron asesinadas. También porque los discursos de odio matan y el presidente sigue refiriéndose a nuestras identidades con discursos de odio tremendos. Nuestras compañeras la están pasando mal por esos discursos de odio. Porque no es solamente lo que el presidente dice, sino lo que la gente toma de eso para hacernos cosas en las calles”.
Jaqueline, junto a su hija Pilar de 5 años
Jacqueline se encuentra junto a su hija que dibuja en el piso, en la hoja dice “no hay que crecer con miedo” escrito con lápices de colores. Cuenta Jaqueline: “Vengo siempre. Es la tercera vez que la traigo a ella. Vengo para que crezca en un mundo y en una Argentina mejor, más libre”.
Alicia, docente jubilada, participante del grupo Bordadoras por la Memoria.
“Armamos un grupo de bordadoras por la memoria para el 24 de marzo. Se nos ocurrió bordar y expresar nuestro deseo de que la memoria siga vigente. Y a partir de ahí empezamos a bordar un proyecto diferente cada mes. Parte de lo que venimos bordando son docentes víctimas de femicidios. Bordarlas implica hacerles memoria”.
Mora de 9 años
Está en el piso pintando. Uno de los carteles dice “ni una menos”, en otro dibujó la cara de Milei lleno de moscas y lo acompaña escrito “Milei basura”. Dice: “Vine primero, porque mi mamá me quería traer, segundo para hacer justicia.”