Por Federico Arrigone
Fotografía: Pamela Pezo Malpica y Clara Pérez Colman

En medio de una profunda crisis económica, el 55 por ciento de los argentinos eligió al candidato negacionista que propone la dolarización, el cierre del Banco Central y la ruptura de relaciones con China y Brasil. El mismo que descree del cambio climático y promueve la libre venta de armas y de órganos. «No hay lugar para el gradualismo y la tibieza», dijo en su primer discurso como mandatario electo.

Tras un clima electoral lleno de incertidumbre, el búnker de La Libertad Avanza (LLA) recibió los rumores de victoria con alegría. Aún sin resultados oficiales, dirigentes de LLA salieron a vitorear junto a los manifestantes, frente al Hotel Libertador: Ramiro Marra y Victoria Villarruel fueron de los primeros. Expectantes a la salida del “Peluca”, los presentes pedían por la presencia del candidato.

Finalmente, antes de las 20, con los resultados oficiales disponibles, la multitud explotó: Javier Milei sería el próximo presidente. Todavía faltaban dos horas para que la fórmula ganadora Milei – Villarruel saliera al escenario construido en la Avenida Córdoba 690.

Por más de 11 puntos porcentuales de diferencia, los argentinos decidieron que Milei será el encargado de presidir al país hasta 2027. El candidato libertario obtuvo el 55 por ciento de los sufragios contra 44 de Massa. En su búnker, los candidatos de LLA vivieron su victoria acompañados de periodistas y militantes. “Estamos con mucha expectativa. Es un día histórico y muy importante para nosotros”, comentaban previo a los resultados oficiales algunos de los militantes a las afueras de la sede libertaria. “Pensamos en el día después, en cómo va a reaccionar la economía y cómo va a seguir el país: esto necesita cambiar”, repetían algunos presentes al ser consultados por sus preferencias a la hora de elegir la opción libertaria.

Entre la multitud reunida, tal cual ocurrió en la primera vuelta, personas de diversas inclinaciones ideológicas y posturas políticas se reunieron bajo las premisas de LLA. Entre ellos se encontraba Maxi Trusso, artista y DJ argentino: “Acá hay algo extraño, noté genuinidad, que no había un exceso de marketing, ni de nada; es una persona sola hablándole a la gente, insistiendo, creyendo mucho en sí mismo con mucha fuerza y acá llegó”, le comentaba a la prensa.

En otra parte de la concentración banderas cubanas y venezolanas flamearon junto a la argentina. “Yo hace 50 años que vivo en Argentina. No quiero que pasen por lo mismo que mi país. Esta es su posibilidad de salvarse”, explicaba a ANCCOM una de las militantes cubanas.

Entre los pañuelos amarillos y muñequitos del candidato electo, militantes de Patricia Bullrich se hicieron presentes. “No hay que tener mezquindad en este momento. Ella decidió apoyar a Javier y yo dije que hay que apoyarlo porque Argentina no va a salir adelante sola”, aseguró la militante del PRO. “Lo ideal sería que Javier conduzca al país y que la oposición acompañe”, aclaró.

Presentado por su hermana, el presidente electo salió al escenario a cinco minutos de las diez de la noche. Abrazados y entre lágrimas, se tomaron un minuto para contener la emoción mientras la gente no paraba de alentar. Milei, en una chicana política en referencia al último debate con Sergio Massa, inauguró su discurso con una interacción con su público. “Javier sos el presidente ¿sí o no? ¡Parece que sí!”.

Las voces de los votantes

por Roberto Hernán Olivera, Laura Alcaraz y Eliana Rossi.

Superada la intervención, el nuevo presidente de la Argentina agradeció el apoyo que permitió “el milagro de tener un presidente liberal-libertario”. Entre sus agradecimientos mencionó a su hermana Karina, al “gigante en la oscuridad”, Santiago Caputo, al presidente Macri y a los fiscales de LLA y del PRO. “Los votos estaban, había que cuidarlos y vaya que los cuidaron”, aclaró Milei en relación a la denuncia por fraude en primera vuelta.

En su discurso, el “Peluca” aclaró que se termina el “modelo empobrecedor de la casta” y afirmó que en 35 años pretende que el país vuelva a ser potencia mundial. Tras esas palabras el público empezó a cantar “que se vayan todos, que no quede ni uno solo”.

En búsqueda de asegurar la gobernabilidad, el candidato electo convocó a todo aquel que quiera sumarse a hacerlo. “Es más importante lo que nos une que lo que nos separa” afirmó. Aclaró que se aplicará “dentro de la ley todo, fuera de la ley nada” a quienes se resistan al cambio.

Resaltó que el gobierno actual debe hacerse cargo hasta el 10 de diciembre y que “no hay lugar para el gradualismo, ni la tibieza”. Habló de cambios estructurales o crisis.

“Se ha terminado una forma de hacer política y empieza otra”, aclaró Milei.

En otra parte se refirió a la sociedad abandonada por la clase política. “Se ha terminado una forma de hacer política y empieza otra”, aclaró.

Como partido político remarcó que su compromiso es con el comercio libre y la paz y que, a pesar de lo sombrío, “la Argentina tiene futuro, pero ese futuro existe si es liberal”.

En el cierre del discurso llamó a festejar, “que mañana se trabaja todos juntos para sacar a la Argentina adelante”. El público lo acompañó vitoreando “¡Peluca presidente!”. El final quedó para su clásica arenga, repetida y coreada por sus seguidores tres veces: “¡Viva la libertad, carajo!”