Por Camila O. Correa
Fotografía: Clara Pérez Colman, María Isabel Cortez, Pamela Pezo Malpica
Multimedia: Laura Alcaraz, Marina Ampuero y Eliana Rossi

Con una marcha masiva de Plaza de Mayo a Congreso, el movimiento feminista recuperó las calles en defensa de los derechos logrados, y ante la amenaza que representa un eventual gobierno de la derecha.

Colores estridentes, brillos en las caras y bailes exagerados vistieron de festividad la Avenida de Mayo y el Congreso de la Nación en el Día de Acción Global por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Miles de mujeres y disidencias decidieron ocupar las calles, -su lugar de lucha- para hacer visible su descontento ante los resultados de las PASO y enfrentar de forma conjunta la amenaza de Javier Milei al poder. 

La convocatoria de este 28 de septiembre hizo que Buenos Aires, después de una pandemia que redujo los números en movilizaciones feministas y un silencio como nunca antes visto, se vuelva a pintar de verde: colgados en las mochilas, en la cabeza como vinchas, en el cuello como una bufanda o flameando por los aires. En cualquier lado que se mirase, la ciudad porteña contaba con un pañuelo abortista. 

“Si avanzó tanto la reacción patriarcal, si avanzó tanto el ajuste principalmente para las mujeres, es porque abandonamos las calles y eso no puede volver a pasar. Hay que mostrar que cuando nos movilizamos somos imparables” explica Myriam Bregman, candidata a presidenta por Frente de Izquierda por los Trabajadores – Unidad y dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS).

El lema principal de la movilización pedía por el cumplimiento de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en todo el país, la ESI, las vidas dignas e ir contra las derechas, el ajuste y el FMI.

Las veredas, los edificios y los lugares de comida se llenaron de afiches con la palabra libertad. Había una diferencia: las feministas hicieron que el término se apropiase de ellas, sus cuerpos y voces para gritar bien fuerte y todas juntas: “¡La libertad es nuestra!”

“Libertad es que tu vieja haya podido jubilarse”, se lee en uno de los carteles que se entremezclan con la multitud; “Libertad es que la educación siga siendo laica, pública y gratuita”, “Libertad es que el 80% de las infancias que sufrieron abusos, pudieron contarlo gracias a la ESI”. 

“Denunciamos que quienes quieren cerrar el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades buscan avanzar en una censura contra nuestros derechos. Reclamamos más presupuesto para la implementación de políticas de género efectivas”, expresa una integrante del Movimiento Ni Una Menos, en contraposición a la idea de Javier Milei acerca de cerrar ministerios, incluidos el de mujeres,  derogar el derecho al aborto y evitar la implementacion de la ESI en las escuelas. 

Detrás de cientos de tambores, murgas y coreografías, se desprendía una alegría compartida: volver todas juntas a la calle. Miradas cómplices, sonrisas de oreja a oreja, bailes al compás de la música y mates de por medio. Mujeres con sus hijos e hijas, jóvenes entre amigas o “La revolución de las viejas” como se hacían llamar un grupo de mujeres adultas. Todas ellas tenían algo en común y era ese brillo en los ojos que denotaba la emoción de reencontrarse con sus compañeras para aferrarse a sus derechos conquistados. 

“Exigimos el acceso pleno a la interrupción voluntaria del embarazo en todo el sistema de salud privado y público. Por un aborto cuidado, libre de violencias y obstaculizaciones”, reclama la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, encabezada por la presencia de Nina Brugo, una pionera del movimiento y declarada Personalidad Destacada los Derechos Humanos por la Legislatura porteña. 

Con el bajar del sol, llegaron las bebidas, los choripanes y las ronditas en el medio de la calle. Si no eran brillos, eran vinchas de flores, pelucas o máscaras que formaban un ambiente festivo, de alegría y tranquilidad. Con un par de conos y una pelota, se armó un partido de fútbol y se sumaba quien quería, en el medio de Avenida de Mayo.  

Exponiendo los pañuelos al aire y en un grito unánime, tan fuerte que erizaba los vellos del cuerpo y retumbaba en el corazón de las presentes, se repitió la consigna que hizo nacer a la Campaña del Aborto Legal, Seguro y Gratuito: “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir”. Como si fuera un ritual, hicieron sonar sus bocas como indias y resonaron en todo el Congreso de la Nación bajo la luna llena del jueves.

Las voces de la marcha en el micrófono de ANCCOM Podcast.

Las voces de la marcha realizada el jueves 28 de septiembre convocada por los movimientos feministas.

por Producción: Laura Alcaraz, Marina Ampuero y Eliana Rossi