Tras amagar con incumplir la conciliación obligatoria, Clarín acató la medida

Tras amagar con incumplir la conciliación obligatoria, Clarín acató la medida

El lunes la empresa no asistió a la mesa de diálogo ni reincorporó a los 48 despedidos, como le ordenó el gobierno. El martes dio marcha atrás y se abrió una instancia de negociación.

Después de no asistir a la primera audiencia de conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo ni retrotraer la situación de los periodistas despedidos como indicaba la orden gubernamental, Clarín finalmente aceptó sentarse a la mesa de negociaciones. “Se abrió una instancia de diálogo con el gremio”, manifestaron en el SiPreBA, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires.

No obstante, SiPreBa sostiene el estado de alerta y movilización y continuará con las medidas previstas en todo el gremio para exigir una recomposición salarial. Por eso, anunció para el próximo viernes un cese de tareas en la prensa escrita entre las 14 y las 18, así como también una asamblea general frente a la redacción de Clarín, en Tacuarí al 1.800.

La mañana de este martes había comenzado con una conferencia de prensa llevada a cabo por los miembros del SiPreBA y de la Comisión Interna de Trabajadores de AGEA (Grupo Clarín), luego de que en un principio Clarín incumpliera la conciliación obligatoria.

SiPreBa convocó a un cese de tareas en todas las redacciones para el próximo viernes entre las 14 y las 18.

Como respuesta a los despidos de 48 trabajadores del diario Clarín, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días que debía llevar a retrotraer las desvinculaciones y convocó una audiencia entre la empresa y SiPreBA para el día de ayer. Clarín desacató ambas medidas. “Se cree que está por encima de la ley”, había declarado en la conferencia Sebastian Díaz, delegado de SiPreBA en la puerta del diario.

Lo que dicta la conciliación obligatoria es que los trabajadores despedidos continúen con sus actividades habituales, ya sea de manera presencial, remota o mixta. A pesar de que Clarín mandó un correo electrónico a sus empleados asegurando que acataría la medida, el edificio continúa vallado y los despedidos no fueron admitidos. “Recién intenté entrar porque supuestamente hoy es mi día presencial y el de seguridad me dijo ‘tenés que conectarte remoto’”, comentó Sandra Commisso, una de las redactoras despedidas por el medio.

Durante la conferencia de prensa, se hicieron oír las voces de algunos de los trabajadores despedidos como Cecilia Vecchiarelli, editora de video que había sido víctima de los conflictos de 2019, que aseguró estar acostumbrada a ese trato por parte de la empresa, “a sentir que somos simplemente un número para ellos”. Según Rodolfo Del Percio, encargado de armar el estudio de televisión dentro de la redacción, ya no importa la idoneidad de los trabajadores sino que sean obedientes.

Sandra Comisso, una de las periodistas despedidas, llevaba 31 años trabajando en Clarín.

Distintos sectores se acercaron a apoyar la lucha de los trabajadores. Entre ellos estaba el diputado nacional por la Izquierda Socialista Juan Carlos Giordano, para quien en esta y otras redacciones hay una esclavitud laboral y persecución enormes. Para el diputado, el caso de Clarín debe quedar como un “conflicto testigo” para que la historia no se repita en otras empresas. Este conflicto, cabe aclarar, se da también en el marco de la lucha salarial convocada por la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (Fatpren).

Otro de los despedidos, también de la sección audiovisual, Leo Torresi, desacreditó que la medida se deba a una reconversión digital ya que ésta “empezó hace más de veinte años cuando Clarín tuvo su primera página web”. Desde sus comienzos como redactor en la empresa, hace casi 29 años, tuvo que adaptarse muchas veces: “Si no nos hubiéramos reconvertido, no podríamos haber estado laburando hasta ahora”.

SiPreBA también negó que los despidos se debieran a razones económicas ya que, como declaró el delegado Martín Cervilla, “la masa salarial del total de los compañeros despedidos equivale solamente a 5 pesos de cada 100 que ganan los directivos del Grupo Clarín”. Como afirmó el secretario general del sindicato, Agustín Lecchi, se trata de un mensaje político contra todo el gremio y los trabajadores que, por primera vez, en el marco de la lucha salarial, iban a discutir paritarias.

Carla Gaudensi, la secretaria general de Fatpren, afirmó que no es casual que la Subsecretaría de Trabajo de la ciudad quiera convocarlos a una audiencia —desconociendo que el problema salarial es a nivel nacional—, sino que se debe a que, a diferencia de 2019, esta vez el Ministerio de Trabajo reaccionó frente a los pedidos: “Esto es plenamente político y disciplinario para el movimiento obrero, nos quieren de rodillas en un año electoral”.

Por el momento, Clarín declaró vía correo electrónico que su ausencia ante el Ministerio de Trabajo se debió a la presencia de inspectores en el edificio de la redacción. “Nosotros somos ocho en la Comisión Interna y pudimos estar en los dos lugares”, denunció Díaz.

Bienvenido SiPreBA

Bienvenido SiPreBA

Después de nueve años el SiPreBA obtuvo su personería gremial. Luego del largo camino los trabajadores de prensa cuentan su lucha y explican cómo sigue su reclamo por mejores condiciones laborales.

Luego de años de lucha el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) obtuvo la personería gremial. Así quedó asentado en la resolución N° 21/2023 del Boletín Oficial. SiPreBa había sumado más votos de afiliados que la Unión Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA). Fueron ocho años de lucha que comienzan en el 2015 cuando un grupo de periodistas creó el SiPreBA ante la falta de representatividad en los reclamos del sindicato autorizado a negociar con las patronales y que contaba con numerosas denuncias de fraude electoral.

Francisco Rabini, delegado gremial en Clarín/AGEA, cuenta: “Fue un proceso de más de diez años para tratar de sacar a la cúpula de la UTPBA que estaba enquistada hace cuarenta. Nosotros fundamos el sindicato el 7 de junio de 2015 a través de un plebiscito que hicimos en diciembre de 2014. Durante el macrismo estuvimos bloqueados porque ni siquiera nos rubricaban los libros en blanco para que vos llenes y te controlen cuando fundás un sindicato. Tardamos más de dos años en lograrlo para luego pedir la compulsa. El trámite lo hicimos en junio de 2020 y esto tampoco es azaroso porque cuando presentás la compulsa te evalúan seis meses para atrás. En 2019 fue cuando cambió el gobierno y no tuvimos chances de hacer progresar ningún trámite porque todo estaba bloqueado, no solo lo nuestro sino de varios sindicatos”.

En las paritarias la UTPBA era el sindicato que negociaba con la cámara que nuclea a las patronales de los diarios en AEDBA (Asociación de Editores de Diarios de Buenos Aires). Diego Martínez es delegado en Página/12 y sostiene que «esa personería gremial es lo que le permitió a Clarín y La Nación firmar cualquier cosa sin contraparte y que lo padezcan los trabajadores, porque el sindicato que lo firma después no tiene que darle explicaciones a nadie ya que no tiene presencia en ninguna redacción».

ANCCOM intentó comunicarse con la secretaria general de UTPBA, Lidia Fagale, para conocer su opinión pero no obtuvo respuesta.

Tarda en llegar

Para cotejar la cantidad de afiliados que trabajan bajo el Estatuto del Periodista, los tres sindicatos de la ciudad de Buenos Aires, el ya mencionado UTPBA, el sindicato que funciona en la agencia Télam y el SiPreBA presentaron sus papeles ante el Ministerio de Trabajo de la Nación como lo marca la Ley de Asociaciones Sindicales, siendo el SiPreBA ganador de la compulsa superando el 10%. Rabini recuerda que: “Por la urgencia salarial que tenemos nos ganaba la impaciencia. Para los que saben de estos trámites el proceso fue rapidísimo porque en general a veces se traba o se enturbia y no se puede resolver”.

En Página/12, como en otros medios, los trabajadores llevan años luchando por la recomposición de un salario que se aleja cada vez más de la inflación. Martínez recuerda que: «La caída en en el poder adquisitivo coincide con el año en que Cambiemos asume el gobierno y Víctor Santamaría compra Página/12, en 2016. Estos cuatro años no solo fueron demoledores para los compañeros sino para todo el colectivo de prensa en particular».

Los números son fríos pero no mienten: actualmente los redactores y redactoras precarizados, -mal llamados colaboradores- cobran cifras muy bajas. En Página 12 una colaboración en la sección Cultura y Espectáculos se paga entre $4.000 y $4.500, en fotografía son $3.000 por una nota. Sobre este tema Martínez asegura: «Las últimas veces planteamos que ninguna colaboración se pague menos del 10% del sueldo básico del redactor. Con lo cual pensá que hoy el básico sin antigüedad y sin adicional está en $94.000 de bolsillo. En los hechos se está pagando la mitad cuando es algo bajísimo en el mercado y hay miles de compañeros que ansían trabajar y publicar en los diarios». Además agrega: “No es solo el valor de una nota, mal llamada ‘colaboración’, sino un sistema sumamente perverso que hace que muchos periodistas trabajen a destajo cobrando por nota y sin acceder a los derechos más elementales como vacaciones, licencias y antigüedades”.

Cómo se sigue

Sobre los pasos a seguir luego de la personería, Rabini concluye: “Lo principal está en la paritaria. Hay una revisión en el último acuerdo paritario para la última semana de febrero. Pretendemos estar ahí y negociar el acuerdo paritario, el anual y tratar de ir año a año mejorando el salario y ganarle a la inflación para recuperar la actividad que está destrozada. Todas estas décadas de inoperancia y desidia de la UTPBA nos dejaron en una situación crítica de precarización, de salarios por debajo de la canasta básica, de multiempleo para poder ganar un salario digno y eso hay que saldarlo. Es muy difícil hacerlo de un día para el otro, hay que trazarse un plan, un cronograma, e ir mejorando la situación para tener un futuro en la actividad”.

La crisis de los trabajadores de prensa ocurre también en Perfil, Diario Popular y otras publicaciones que se editan en la ciudad de Buenos Aires con el mismo reclamo. En el caso del diario Olé los trabajadores lograron cubrir el 25% del sueldo que les habían quitado por protestar durante el Mundial de Qatar. Lo lograron a través de un fondo de lucha organizado por el SiPreBA con aportes de compañeros, figuras de la política y el periodismo, entre otros sindicatos.

A las problemáticas generales se le suman las estrategias de los medios de prensa para ganar suscriptores ante la merma de las ventas en los kioscos de diarios y revistas como también la incursión en negocios del entretenimiento y otros rubros fuera de la gráfica. Rabini marca como ejemplo que: “En el 2022 abrieron una billetera virtual llamada Bimo fondeada con plata de AGEA (Arte Gráfico Editorial Argentino) e hicieron transferencias por cientos de millones de pesos cada equis cantidad de meses hasta que se fundió; pero cuando vamos a exigir recomposición salarial la empresa dice que no tiene plata. En resumen cargan sus aventuras empresariales sobre nuestros salarios”.

Respecto del futuro, Martínez explica: «Por supuesto nosotros siempre tenemos expectativas y seguimos luchando por lo que consideramos justo y lo que nos corresponde, que es cobrar sueldos dignos. Como piso no queremos ningún sueldo por debajo de la línea de pobreza o de la canasta básica del INDEC. Estamos haciendo una pausa con los paros hasta febrero y la empresa lo sabe. Esperamos que aprovechen esta pausa y que nos propongan un cronograma de aumento serio. Porque además hay un agravante y es que esta paritaria en curso no tiene un centavo de aumento previsto para los primeros cuatro meses de 2023, o sea enero, febrero, marzo y abril». El deseo es que tengan una respuesta de parte del Grupo Octubre, dueño de Página/12 entre otros medios, y afrontar el año con menos medidas de fuerza que el anterior. Para eso necesitan no solo dejar de perder poder adquisitivo, sino también empezar a recuperarlo.

Rabini tiene la esperanza de que en el próximo encuentro con las patronales haya “un diálogo maduro, constructivo, lógico. Argumentos nos sobran y entendemos que hay mucho por discutir, mucho por negociar y mucho por crecer. Nosotros no queremos que a las empresas les vaya mal: todo lo contrario. Por eso tiene que haber un espacio en donde nos vaya bien a todos. No creemos que puedan existir las empresas exitosas cuyos trabajadores pasan hambre”.

La otra mirada de Página/12

La otra mirada de Página/12

El día del 35º aniversario del diario, sus trabajadores realizaron un acto para reclamar por salarios que estén por encima de la línea de pobreza.      

 “Celebramos luchando para que decir ‘la otra mirada’ tenga sentido. Para ser consecuentes con lo que predicamos, luchamos por salarios y condiciones dignas”, bajo esta consigna, trabajadores y trabajadoras de Página/12 se congregaron hoy, a partir de las 16, en las puertas de la redacción del diario, en Venezuela 356, para exigir una inmediata recomposición salarial. La manifestación contó con un fuerte apoyo de parte de colegas  de prensa de otros medios, organizaciones gremiales, algunos movimientos sociales, la comunidad de lectores del diario y dirigentes políticos y sindicales.

La jornada de reclamos se realizó el mismo día en que el diario cumplió 35 años desde su primera publicación y se inscribe en la “Semana de lucha con paro” que impulsa el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) en busca de visibilizar las múltiples formas de precarización y mejorar las condiciones laborales y salariales en la industria periodística. Por otra parte, el sindicato, nucleado en la Federación Argentina de Prensa (FATPREN) aprovechó para sumar a la lista de reclamos la necesidad de obtener la personería gremial para discutir paritarias. “Si los trabajadores y trabajadoras de prensa no estamos sentados en la paritaria, es una discusión renga”, comentó a ANCCOM Agustín Lecchi, secretario general del SiPreBa.

“Si seguimos sin obtener respuesta del Grupo Octubre, la bronca va a seguir creciendo y las medidas de fuerza continuarán. El descontento ya es generalizado y se hace extensivo a las redacciones de otros medios que atraviesan situaciones igual de desastrosas. Es regla en todo el gremio que los salarios se ubiquen por debajo de la línea de pobreza. Estamos pidiendo recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos seis años”, dijo a este medio Diego Martínez, delegado gremial en Página/12.

Además, Martínez también insistió en la necesidad de suprimir la figura del “colaborador”. “Hay un ejército de compañeros precarizados que son mal llamados colaboradores. En los hechos son redactores pero para la empresa son colaboradores. ¿Qué significa eso? Que trabajan a destajo, que cobran por nota. Esto es, si les aceptan la nota que proponen y se las publican, cobran, de no ser así, no cobran. No tienen salarios. En consecuencia, decidimos crear un fondo de lucha para cubrir la necesidad de estos compañeros que quieren trabajar, dándoles la posibilidad de cobrar por trabajo realizado, y, además, porque necesitamos que adhieran a las medidas de fuerza, porque la lucha es colectiva”.

Para las 16.30, la angosta calle adoquinada del microcentro porteño fue ocupada por los manifestantes. Un grupo de ellos, al ritmo de los bombos, hacía ondear bien alto las banderas del sindicato. La larga serie de oradores y oradoras fue inaugurada por Paula “Poli” Sabatés, secretaria de Cultura y Juventud en el SiPreBa y delegada gremial en Página/12, quien sostuvo que “para que exista la otra mirada los trabajadores y las trabajadoras tienen que estar en condiciones dignas, con salarios dignos, y eso hoy no está ocurriendo. Por eso estamos acá. Para celebrar luchando”.

Seguidamente, dieron su testimonio algunos integrantes de la comisión interna del diario perteneciente al Grupo Octubre. Ana Paoletti remarcó que “Pagína/12 somos sus trabajadores”. A continuación,  Martínez se hizo del micrófono y agradeció el respaldo de todas las personas presentes. Resaltó la “depreciación brutal de los salarios. El trabajo a destajo es realidad en prensa. Debemos desnaturalizar que tengamos dos o tres trabajos”. Y agregó: “Hacer nuestro trabajo bien implica acceder a nuestros derechos laborales. Además, nuestro gremio tiene una particularidad. Como trabajadores de prensa tenemos la obligación de darle voz a las demás luchas. Las empresas no dialogan puertas adentro. Lo único que conciben es la sumisión. Nosotros, como trabajadores, mal podríamos cumplir nuestra función de difundir las luchas ajenas si no nos plantamos con dignidad ante nuestros patrones. Vamos a seguir luchando hasta que no haya nadie por debajo de la línea de pobreza y a terminar con la vergonzosa precarización”.

Aplausos y el fuerte grito que clama: “Unidad de los trabajadores. Y al que no le gusta, se jode, se jode”. Presente en el acto, la periodista de Página/12  Adriana Meyer le afirmó a este medio que “no hay libertad de expresión posible con los trabajadores por debajo de la línea de pobreza”.

Mientras el dueto encargado de la locución hacía lectura de una extensa lista de saludos, apoyos y mensajes solidarios, la agrupación Serigrafistas Queer atravesó un hilo blanco a lo ancho de la calle para formar un tendal del que colgaron telas con el rezo “cuerpos desobedientes, producción parada”. También, el músico correntino Yacaré Manso acompañó los reclamos con su guitarra y su canto.

Otro de los oradores fue Edgardo Carmona, secretario general del Sindicato de Prensa de Rosario (SPR), quien en un efusivo discurso recalcó que “estamos acá para abrazarnos en una lucha común. Por el futuro de nuestra clase. No solo defendemos salario, defendemos la dignidad de escribir lo que vemos”. Y decretó: “El pueblo argentino necesita de una prensa libre e independiente. Somos voceros de las necesidades de nuestro pueblo”.

Por su parte, la diputada nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), Myriam Bregman, dirigió un mensaje de agradecimiento a los trabajadores y las trabajadores de Página/12. “Le debemos muchísimo quienes luchamos contra la impunidad, quienes luchamos contra la represión, quienes damos esas batallas que no son mediáticas, que a los grandes medios no les interesan o que directamente los perjudica. Les debemos muchísimo a los trabajadores y trabajadoras de Página/12. Cuando desapareció Julio López ahí estuvieron para recoger nuestras denuncias, recoger esa voz.”

Ya en la etapa final del acto, Carlos Rodríguez, periodista histórico de Pagina/12 y delegado honorario, concentró sus críticas en Víctor Santa María, responsable principal del Grupo Octubre. “Desde que está Santa María en este lugar todo está peor. Hay que cambiar esta dirigencia. Hoy más que nunca tenemos que pelear”, indicó. Dondero, miembro fundador de Página/12 y líder sindical, aprovechó la ocasión para recordar y homenajear a excompañeros y excompañeras del diario: Osvaldo Soriano, Miguel Briante, Lía Levit, Rubén Levenberg, Salvador Benesdra, Marcelo Zlotogwiazda, Lilia Ferreyra, Julio Nudler e Hilda Cabrera. “Ellos nos marcaron el camino, nos dieron una responsabilidad. Dieron todo lo que pudieron en lo profesional y en lo gremial. La semilla se sembró y el único camino es estar unidos”.

Por último, Lecchi y Carla Gaudensi, secretaria general de FATPREN, anunciaron la continuidad del plan de lucha para romper el círculo de un trabajo precarizado que desvaloriza la labor periodística. “Que se note que a los trabajadores de prensa no los callan nunca. Por lo tanto, vamos a seguir en pie de lucha en las calles defendiendo nuestras fuentes de trabajo, nuestras condiciones dignas de trabajo”, sentenció Gaudensi.

«No existe periodismo de calidad con sueldos de hambre»

«No existe periodismo de calidad con sueldos de hambre»

El Sindicato de Prensa de Buenos Aires manifestó frente a las puertas de Clarín para reclamar mejoras salariales. Apuesta a obtener la personería jurídica para discutir paritarias.

Dos pequeños grupos de la Policía Metropolitana se reparten los ingresos del edificio del Grupo Clarín en el barrio porteño de Barracas. En la vereda de enfrente, un muchacho trepa un muro para amarrar las banderas del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba). Un cielo grisáceo que deja que se cuele algún rayo de sol. Un par de manifestantes despliegan a lo ancho de la mesa varías docenas de churros rellenos de dulce de leche acompañados por un termo que contiene unos veinte litros de chocolate caliente. Promediando las 15 horas, la calzada se reduce y sobre el asfalto se tiende un trapo de arpillera que reza: “El sueldo no alcanza”. Con esta consigna, trabajadores y trabajadoras de prensa de Clarín enrolados en la comisión interna de AGEA y el Sipreba, realizaron una protesta durante la tarde de hoy en Tacuarí 1846 exigiendo la urgente recomposición salarial.

“Es inaceptable que un trabajador del diario de mayor tirada del país, que pertenece a la empresa de medios más poderosa del país, trabaje jornadas de ocho horas y gane un sueldo que lo ubica por debajo de la línea de pobreza”, dijo a ANCCOM Matías Cervilla, integrante de la Comisión Interna de Clarín/AGEA.

Este sentimiento también fue compartido por Diego Martínez, delegado gremial en Página/12, quien se sumó a la manifestación y dio testimonio a este medio sobre la crisis generalizada de los trabajadores de prensa escrita: La situacion de Página/12 no es demasiado diferente a la de La Nacion, Clarín y Perfil. Es igual de desastrosa, salvo por el plan de lucha mucho más fuerte que estamos llevando adelante, con medidas de fuerza que incluyen paros de 24 y 72 horas, llegando a provocar que no saliera el diario del día domingo. A nosotros, como delegados, no nos responden. El diálogo con el Grupo Octubre no existe, ni cuando no hacíamos medidas ni ahora, cuando hacemos medidas. Eligen no dialogar”.

Por último, destacó la importancia de la unidad de los trabajadores y el rol del Estado a través del Ministerio de Trabajo: Tenemos que estar todos hoy en las calles y el día que tengamos la personería gremial, que ojalá sea la conquista que tengamos en este año, también nos sentemos en la paritaria. Esa conquista, que los trabajadores de prensa tengamos representantes legítimos en la paritaria, dependerá, en gran parte, de la pasividad o no del Ministerio de Trabajo”.

En la manifestación también estuvo presente Carla Gaudensi, Secretaria General de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), quien dijo a este medio: “Hoy estamos dando continuidad al plan de lucha que se inició hace un par de semanas. Primero fue en las puertas de Página/12, la semana pasada en Perfíl y ahora aquí, en Clarín, denunciando un atraso salarial que no se aguanta más”.

La dirigente gremial agregó: “La situación de los trabajadores y trabajadoras de prensa es preocupante. No se puede vivir con un salario que no llega a cubrir la canasta básica familiar. Es por eso que decidimos estar en las puertas, además de puertas adentro seguir organizándonos para dar esta discusión tan importante como trabajadores. Desde las empresas, lo único que nos imponen siempre es un techo en una discusion paritaria en la que no participan los trabajadores y es por ello que cada año tenemos que recurrir a este tipo de acciones, para que nos escuchen y se den cuenta que la situacion es insostenible. No puede existir un periodismo de calidad con trabajadores precarizados y sueldos de hambre”.

 

Después del reparto de churros y chocolate, y en momentos separados, tomaron el megáfono y hablaron al público Francisco “Paco” Rabini, delegado gremial en Clarín y dirigente de Sipreba y FATPREN, y Agustín Lecchi, Secretario General del sindicato. Rabini insistió en la necesidad de “pelear por la personeria y, mientras tanto, pelear por mejorar lo que firma la UTPBA, como venimos haciendo todos estos años”. Además, instó a los trabajadores y trabajadoras a seguir esforzándose en “pelear por nuestro salario, porque sabemos que si no lo hacemos nosotros, no lo va a hacer nadie”. Por último, y a modo de cierre, realizó una petición a los y las presentes para ayudar en la tarea colectiva de pensar ideas para este plan de lucha”, ya que “sabemos que charlando encontramos las mejores ideas y las mejores medidas. ¡Hasta la victoria siempre!”.

 

A su turno, Lecchi planteó la necesidad imperiosa de una democratización de la pauta publicitaria: No puede ser que los empresarios de medios sigan recibiendo millones en concepto de pauta publicitaria oficial y a nuestros compañeros les niegan las paritarias y les desdoblen el salario”. También resaltó la necesidad de fortalecer la organización sindical y nacionalizar las luchas: “Esta situacion no es exclusiva de la Ciudad de Buenos Aires. Por eso nos estamos organizando a nivel nacional. La semana pasada estuvimos en Córdaba. Estamos reconstruyendo el sindicato en todo el país.”

El acto se cerró con aplausos, abrazos, cantos y una foto grupal, mientras un cuarteto de jóvenes con chalecos celestes hacía sonar bombos y redoblantes, llenando de ruido la calle.

Exigen democratizar y federalizar la pauta publicitaria oficial

Exigen democratizar y federalizar la pauta publicitaria oficial

Federalizar las comunicaciones y democratizar la distribución de la publicidad oficial fueron las consignas sobre las que alzaron sus voces distintos sindicatos de prensa, agrupaciones de trabajadores de la comunicación y medios autogestivos audiovisuales, gráficos, y digitales. La actividad, que se autodenominó como una “Feria de Medios Comunitarios y Populares”, se desarrolló entre las 16 y las 19 de ayer frente a la plaza del Congreso de la Nación. El leitmotiv de la jornada fue presentar la semilla de lo que será un proyecto de ley que busca regular cuánto y a quiénes corresponde la asignación de esos recursos. 

La iniciativa nació hace ocho meses y concluyó en un documento que, a partir del debate entre distintos protagonistas que buscan democratizar la comunicación, reúne en doce puntos los lineamientos principales de la propuesta. Su norte es que la distribución de la pauta oficial esté regulada de manera transparente, democrática y federal. Actualmente, no existe un marco legislativo-judicial que exija una rendición de cuentas sobre cómo se administran los fondos destinados a ella.

“Cuando hablamos de la democratización de la pauta también hablamos de la democratización de la palabra”, afirmó en el acto Carla Gaudensi, secretaria general de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), una de las promotoras del proyecto, junto a la Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO), el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), la Coalición por una Comunicación Democrática, la Red de Carreras de Comunicación (REDCOM), los canales comunitarios Barricada TV, Pares TV de Luján, 4 de Mar de Ajó y Giramundo de Mendoza, entre muchos otros actores.

“Cuando la TV asustaba en la pandemia, los medios comunitarios visibilizábamos las ollas populares», dice Vinelli.

Contemplando la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual Nº 26.522, el proyecto reclama que, por extensión a los servicios gráficos y digitales, el 33% del total de la pauta oficial se asigne a medios de comunicación sin fines de lucro; que se establezca un tope del 3% del monto total para la inversión en una empresa o grupo empresario; que solamente los titulares de cada uno de los medios puedan contratar ese tipo de publicidad, para evitar que se facture con distintas personas jurídicas; y cumplir con lo que dice el Estatuto del Periodista en materia de garantizar los derechos de sus trabajadores.

“Lo que pedimos es que se establezcan pisos y techos, que todos los medios de las provincias reciban pauta y que no pase como ahora, que lamentablemente está concentrada en la Ciudad de Buenos Aires, en medios que se autodenominan nacionales”, aseguró Pablo Antonini, presidente del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO), organización que nuclea entre 120 y 150 radios asociadas en veintidós provincias. Y agregó: “A la vez establece criterios que entendemos son necesarios, como la producción de contenidos locales y de identidad. No puede ser que una repetidora reciba lo mismo o mucho más que un medio que se esfuerza en generar contenidos propios”.

Desde FATPREN se realizó un relevamiento que pudo registrar más de doscientos medios autogestivos en todo el país, con 2370 trabajadoras y trabajadores que los sostienen, de los cuales la mitad no percibe ningún tipo de remuneración. “Nos consideramos trabajadores de prensa igual, porque también somos medios de comunicación. Somos los que garantizamos que la sociedad pueda generar sus propias ideas y proyectos, y que no esté todo siempre en manos de unos pocos que nos cuentan siempre lo mismo, de un lado y del otro”, reflexionó Martina Noailles, secretaria de Medios Autogestivos del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), en diálogo con ANCCOM.

«Garantizamos que la sociedad pueda generar sus propias y que unos pocos no cuentan siempre lo mismo», dice Noailles.

El impulso federal que ordena el proyecto persigue siempre la promoción de la diversidad y pluralidad de voces para llegar a toda la población asegurando la libertad de expresión y el derecho a la información. En este sentido, propone que la distribución de pauta replique la misma lógica con la que se distribuye la Coparticipación Federal. “Marchamos frente al Congreso porque queremos que esto se impulse en cada provincia y en cada municipio”, señaló la representante de SiPreBA.

Natalia Vinelli, directora de Barricada TV, destacó la importancia de los medios comunitarios al afirmar que son generadores de empleo que construyen una comunicación desde otra perspectiva, que están junto a los vecinos, junto al  pueblo y que producen “comunicación de calidad”. Y particularmente hizo referencia al rol de estos medios en un contexto de incertidumbre informativa como lo fue el comienzo de la pandemia, donde se trató de dar un abordaje enfocado en la solidaridad y la organización popular de los barrios.

En esta línea, Vinelli pronunció: “Cuando la televisión asustaba, los medios comunitarios estábamos sosteniendo las ollas populares, acompañando y visibilizando el trabajo de las organizaciones sociales. Por eso creo que justamente una ley de pautas es necesaria para que los medios comunitarios podamos funcionar en el sistema de medios que tenemos. No siempre afuera, cayéndose, sino dentro del sistema de medios”.

El encuentro en la histórica plaza estuvo acompañado por una transmisión de TeleRed que contó con la presencia virtual de una amplia red de medios provinciales, con representantes de Mendoza y Córdoba que se hicieron eco del pedido y demostraron su apoyo a la causa.

El sol cayó al son de las canciones que entonaron chicas y chicos que participan de un taller que dicta FM Reconquista (89.5) de la localidad bonaerense de José León Suárez, emisora que, según sus conductores, sufre interferencias por parte de una radio del Grupo Octubre.