«Soriano aguanta y resiste»

«Soriano aguanta y resiste»

Angel Berlanga es periodista, docente y autor de “Soriano: una historia”, libro que presentará este 4 de septiembre en la Biblioteca Nacional. La primera biografía del reconocido escritor argentino rememora sus comienzos en Tandil y llega hasta su muerte. Un centenar de entrevistas, cartas, documentos personales, diarios y revistas para reconstruir la vida de un fabulador.

Este 4 de septiembre, a 50 años del aniversario de Triste, solitario y final, Angel Berlanga, periodista –editor de ANCCOM– y docente en la Universidad de Buenos Aires, presentará su libro Soriano: una historia. La cita es en la Biblioteca Nacional, a las 19, en el Auditorio Jorge Luis Borges. La biografía recorre los comienzos de Osvaldo Soriano como periodista en la revista Primera Plana hasta su muerte en 1997. La historia se toma su tiempo en momentos clave de la carrera del escritor y en otros más personales, como la relación con su padre, siempre acompañado por comentarios de familiares y amigos del escritor.

Soriano es autor de novelas, cuentos y crónicas periodísticas publicadas en varias partes del mundo. Muchos de sus libros fueron best-seller y también pasaron a la pantalla grande como ocurrió con “No habrá penas ni olvido” (1983) y “Cuarteles de invierno” (1984). Nació en Mar del Plata aunque en su infancia se mudó varias veces. A los 18 años se estableció en Tandil, lugar del que partiría ocho años después para vivir en Buenos Aires, donde su carrera se disparó.

Soriano fue un autodidacta que llegó a la literatura de grande, cuando comenzó a leer ficción por primera vez y luego a escribir. Su paso del periodismo a la literatura es una característica que Berlanga comparte pero partiendo desde su profesión como arquitecto. El periodista creció en Santa Teresita y se mudó a Capital Federal a los 18 años, donde comenzó a estudiar en la UBA. Descubrió a Soriano leyendo sus publicaciones en Página/12 y en las revistas El porteño y Crisis, pero no fue hasta que encontró Cuarteles de invierno en una librería de usados que decidió dedicarse al periodismo.

¿Arrancaste en Página/12 escribiendo sobre Soriano?

 No, ¿sabés que no? Sin embargo, desemboqué en Página/12 por él. Soriano muere en enero de 1997 y yo escribí un número especial de Soriano para la revista La Maga que salió en septiembre de ese año en donde tuve que entrevistar a Rodrigo Fresán y Juan Fort, que eran allegados a él pero más jóvenes. Para cuando se cumplió un año de la muerte de Soriano, en Página/12 hicieron otro especial que se llamaba “Soriano por Soriano”. Era parecido a lo que yo había hecho. En ese momento lo llamé por teléfono a Ford para decirle: “Che, mirá, yo tengo materiales que no entraron en La Maga, por ahí les pueden servir”. Me dijeron que no porque no había un mango para pagar colaboraciones. Entonces le dije: “Bueno, si te parece, yo te paso el material, no me pagues nada por eso pero al mismo tiempo te ofrezco una serie de propuestas de notas para ver si alguna les interesa”. Así entré a Página/12: le llevé un sumario que todavía tengo y lo uso a veces en las clases que doy. No empecé escribiendo sobre Soriano pero la puerta de entrada a Página/12 fue por él.

 ¿Cómo definirías al Soriano escritor?

Siempre lo defino como un muy buen “proyector”. Te presenta las cosas de un modo que la lectura resulta entretenida mientras te da curiosidad para seguir indagando. No es fácil hacer eso, pero se lee muy sencillo. Creo que ese es uno de los roles de los medios ¿No? Contar algo de un modo tal que te den ganas de sumergirte.

 Resulta interesante como empezó con una cosa y terminó con otra…o las combinó al hacerse periodista y después escritor.

Sí. Esto en el libro está desarrollado: cómo algunos temas que aparecen desde el periodismo luego pasan a su literatura. Es un asunto que a mí me parece muy atractivo y que en sectores de la academia generaba rechazo. Me parece que tiene una lectura política: porque desde su impronta y su quehacer te incita. Del otro lado es como si se establecieran podios, templos del saber, que expulsan a veces por complejidad o por el lenguaje.

 ¿Hay algo de ficción en la biografía? En el libro se pueden encontrar sentimientos o pensamientos que no se pueden corroborar del todo.

A mí en particular me interesaba mucho esta bajadita o, como dice el subtítulo de mi libro, encontrar una historia. Yo tengo una cantidad tremenda de material. Es una tonelada. De ese material elegí partes que son las que están acá. Esas partes que componen la historia ya forman una subjetividad. Lo que cuento por mi parte son testimonios o cosas que leí. Eso por un lado. Luego claro, uno cuando habla con alguien no sabés hasta qué punto eso que está narrando es un invento o algo que efectivamente pasó. Soriano fabulaba mucho. Él compuso bastante su personaje. Algunas de las personas que hablan sobre él en particular también fabulaban, de modo que es un escritor que reivindicaba esto de construirse como personaje.

Soriano fabulaba mucho. Él compuso bastante su personaje. Algunas de las personas que hablan sobre él en particular también fabulaban, de modo que es un escritor que reivindicaba esto de construirse como personaje.

Ángel Berlanga

¿Tenía está tendencia a embellecer las historias, como hacía cuando hablaba del padre?

Viste que en algún tramo está dicho: “Yo no sé escribir aburrido. Apenas empiezo a ver que ésto está pesado, largo”. Yo creo que en función de esa narrativa, le pone sus condimentos. Yo no sé si el padre era tan parecido a Dashiell Hammett como él decía que era. Pero si lo decís, ya tenés un elemento de peso mucho más contundente. Creo que él ponía sus agregados para que la historia funcione. Lo he visto en muchos sitios. En un punto tiene que ver con su papel de narrador, de abrazarse a su papel más allá del detallecito de la historia, siempre y cuando no termine tergiversando todo el sentido. Lo hacía para llegar al interlocutor. Ese rol de fabulador que aparece a lo largo del libro lo retoman las primas, los compañeros de fútbol. Los compañeros en el diario decían que era todo un espectáculo ver cómo en la apertura que se armaban los sábados en La opinión, Soriano contaba sus historias. Eso lo ves a lo largo de muchos tramos de su vida con muchos testigos. Es algo innato que tiene él.

 ¿Tenés algún número aproximado de la cantidad de entrevistas o archivos que recopilaste?

En el libro figuran como unos ochenta entrevistados, pero debo haber hecho cien. Hay muchas entrevistas personales. Yo empecé la biografía hace diez años, pero juntaba materiales desde hace mucho tiempo, a lo mejor hace treinta años. Son esas cosas que uno hace por gusto. Es más: en la época del videocasete, por ejemplo, grababa entrevistas que aparecían en televisión. ¿Viste esas entrevistas que no están por ningún lado? Las tengo yo. Tengo infinidad de cosas. Para el laburo en sí, fui a la hemeroteca y a la Biblioteca Nacional y rastreé toda la obra periodística. Ahí me encontré con muchos materiales. Incluso el libro tenía una versión mucho más grande donde aparecían más referencias a esa obra periodística porque incluía qué pasaba en esa época. Él escribía muchas cosas al mismo tiempo. Un asesinato, alguna cuestión deportiva o alguna cuestión político-económica, que en esa versión aparecía contextualizada. Después está todo lo del exilio. Su mujer me permitió acceder a correspondencia, por ejemplo. Esa es otra de las vertientes del libro. También vi todos los pasaportes. Eso me ayudó mucho a establecer en qué momento, por ejemplo, se fue exactamente al exilio o en qué día volvió, y volvió a irse. Todos esos recorridos los pude establecer por los sellos de los pasaportes.

¿Cómo fue organizar todo ese material para el libro teniendo en cuenta lo que era cierto y lo que era mentira?

Eso fue todo un asunto y desde el principio fue una inquietud, porque pensaba: “Si esto una biografía tiene que ir con la premisa de la verdad». Pero en un momento renuncié a eso. Es muy difícil establecer la verdad. Muchas veces tiene distintas caras y depende de quién las interprete. Entonces por un lado me interesaba que la voz de él apareciera. No solamente las entrevistas de radio y televisión sino también las entrevistas gráficas. Por lo que renuncié a ponerme en investigador hasta las últimas consecuencias de cómo habían sido las cosas.

 ¿Cuál fue el aprendizaje que más te quedó de Soriano?

Primero la cuestión de abordar cualquier tema o muchos y a la vez tratar de ser entretenido para el lector. Yo creo que él ponía muy en práctica eso. Buscar ser entretenido y abrir una perspectiva para seguir indagando cuestiones. También, por una cuestión de estar tanto tiempo laburando sobre esto, y como él abarcó tantos temas, me aparecen situaciones que dialogan con cosas que escribió él. Por ejemplo, hoy por hoy las caracterizaciones que Soriano hacía de Menem las veo en Milei. Mil situaciones así vinculadas al fútbol, a la economía, a la prepotencia del fascismo, del poder económico. Pero es como le pasa a mi viejo, que es un español de 86 años que todo el tiempo le aparecen refranes para aplicar a cualquier situación. Bueno, a mi me aparecen posturas de Soriano (risas).

 ¿Lo seguís leyendo?

Lo leo, sí. Porque también el laburo hizo que descubriera otras dimensiones. Yo creo que muchas de sus novelas, no todas, obvio, siguen hablando y teniendo sentido. Exceden la mera historia que cuentan. Hablan muy fuertemente de la condición humana y de nuestra identidad. Ahora ya hace rato que no agarro una novela de nuevo, pero para este trabajo tuve que releer y me sigue gustando. Muchas veces pasa que cuando uno ve una película que ya viste no te sorprende, o el efecto es distinto. Pero en la lectura de Soriano aparecen otras cosas. Aguanta. Resiste.

La otra mirada de Página/12

La otra mirada de Página/12

El día del 35º aniversario del diario, sus trabajadores realizaron un acto para reclamar por salarios que estén por encima de la línea de pobreza.      

 “Celebramos luchando para que decir ‘la otra mirada’ tenga sentido. Para ser consecuentes con lo que predicamos, luchamos por salarios y condiciones dignas”, bajo esta consigna, trabajadores y trabajadoras de Página/12 se congregaron hoy, a partir de las 16, en las puertas de la redacción del diario, en Venezuela 356, para exigir una inmediata recomposición salarial. La manifestación contó con un fuerte apoyo de parte de colegas  de prensa de otros medios, organizaciones gremiales, algunos movimientos sociales, la comunidad de lectores del diario y dirigentes políticos y sindicales.

La jornada de reclamos se realizó el mismo día en que el diario cumplió 35 años desde su primera publicación y se inscribe en la “Semana de lucha con paro” que impulsa el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) en busca de visibilizar las múltiples formas de precarización y mejorar las condiciones laborales y salariales en la industria periodística. Por otra parte, el sindicato, nucleado en la Federación Argentina de Prensa (FATPREN) aprovechó para sumar a la lista de reclamos la necesidad de obtener la personería gremial para discutir paritarias. “Si los trabajadores y trabajadoras de prensa no estamos sentados en la paritaria, es una discusión renga”, comentó a ANCCOM Agustín Lecchi, secretario general del SiPreBa.

“Si seguimos sin obtener respuesta del Grupo Octubre, la bronca va a seguir creciendo y las medidas de fuerza continuarán. El descontento ya es generalizado y se hace extensivo a las redacciones de otros medios que atraviesan situaciones igual de desastrosas. Es regla en todo el gremio que los salarios se ubiquen por debajo de la línea de pobreza. Estamos pidiendo recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos seis años”, dijo a este medio Diego Martínez, delegado gremial en Página/12.

Además, Martínez también insistió en la necesidad de suprimir la figura del “colaborador”. “Hay un ejército de compañeros precarizados que son mal llamados colaboradores. En los hechos son redactores pero para la empresa son colaboradores. ¿Qué significa eso? Que trabajan a destajo, que cobran por nota. Esto es, si les aceptan la nota que proponen y se las publican, cobran, de no ser así, no cobran. No tienen salarios. En consecuencia, decidimos crear un fondo de lucha para cubrir la necesidad de estos compañeros que quieren trabajar, dándoles la posibilidad de cobrar por trabajo realizado, y, además, porque necesitamos que adhieran a las medidas de fuerza, porque la lucha es colectiva”.

Para las 16.30, la angosta calle adoquinada del microcentro porteño fue ocupada por los manifestantes. Un grupo de ellos, al ritmo de los bombos, hacía ondear bien alto las banderas del sindicato. La larga serie de oradores y oradoras fue inaugurada por Paula “Poli” Sabatés, secretaria de Cultura y Juventud en el SiPreBa y delegada gremial en Página/12, quien sostuvo que “para que exista la otra mirada los trabajadores y las trabajadoras tienen que estar en condiciones dignas, con salarios dignos, y eso hoy no está ocurriendo. Por eso estamos acá. Para celebrar luchando”.

Seguidamente, dieron su testimonio algunos integrantes de la comisión interna del diario perteneciente al Grupo Octubre. Ana Paoletti remarcó que “Pagína/12 somos sus trabajadores”. A continuación,  Martínez se hizo del micrófono y agradeció el respaldo de todas las personas presentes. Resaltó la “depreciación brutal de los salarios. El trabajo a destajo es realidad en prensa. Debemos desnaturalizar que tengamos dos o tres trabajos”. Y agregó: “Hacer nuestro trabajo bien implica acceder a nuestros derechos laborales. Además, nuestro gremio tiene una particularidad. Como trabajadores de prensa tenemos la obligación de darle voz a las demás luchas. Las empresas no dialogan puertas adentro. Lo único que conciben es la sumisión. Nosotros, como trabajadores, mal podríamos cumplir nuestra función de difundir las luchas ajenas si no nos plantamos con dignidad ante nuestros patrones. Vamos a seguir luchando hasta que no haya nadie por debajo de la línea de pobreza y a terminar con la vergonzosa precarización”.

Aplausos y el fuerte grito que clama: “Unidad de los trabajadores. Y al que no le gusta, se jode, se jode”. Presente en el acto, la periodista de Página/12  Adriana Meyer le afirmó a este medio que “no hay libertad de expresión posible con los trabajadores por debajo de la línea de pobreza”.

Mientras el dueto encargado de la locución hacía lectura de una extensa lista de saludos, apoyos y mensajes solidarios, la agrupación Serigrafistas Queer atravesó un hilo blanco a lo ancho de la calle para formar un tendal del que colgaron telas con el rezo “cuerpos desobedientes, producción parada”. También, el músico correntino Yacaré Manso acompañó los reclamos con su guitarra y su canto.

Otro de los oradores fue Edgardo Carmona, secretario general del Sindicato de Prensa de Rosario (SPR), quien en un efusivo discurso recalcó que “estamos acá para abrazarnos en una lucha común. Por el futuro de nuestra clase. No solo defendemos salario, defendemos la dignidad de escribir lo que vemos”. Y decretó: “El pueblo argentino necesita de una prensa libre e independiente. Somos voceros de las necesidades de nuestro pueblo”.

Por su parte, la diputada nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), Myriam Bregman, dirigió un mensaje de agradecimiento a los trabajadores y las trabajadores de Página/12. “Le debemos muchísimo quienes luchamos contra la impunidad, quienes luchamos contra la represión, quienes damos esas batallas que no son mediáticas, que a los grandes medios no les interesan o que directamente los perjudica. Les debemos muchísimo a los trabajadores y trabajadoras de Página/12. Cuando desapareció Julio López ahí estuvieron para recoger nuestras denuncias, recoger esa voz.”

Ya en la etapa final del acto, Carlos Rodríguez, periodista histórico de Pagina/12 y delegado honorario, concentró sus críticas en Víctor Santa María, responsable principal del Grupo Octubre. “Desde que está Santa María en este lugar todo está peor. Hay que cambiar esta dirigencia. Hoy más que nunca tenemos que pelear”, indicó. Dondero, miembro fundador de Página/12 y líder sindical, aprovechó la ocasión para recordar y homenajear a excompañeros y excompañeras del diario: Osvaldo Soriano, Miguel Briante, Lía Levit, Rubén Levenberg, Salvador Benesdra, Marcelo Zlotogwiazda, Lilia Ferreyra, Julio Nudler e Hilda Cabrera. “Ellos nos marcaron el camino, nos dieron una responsabilidad. Dieron todo lo que pudieron en lo profesional y en lo gremial. La semilla se sembró y el único camino es estar unidos”.

Por último, Lecchi y Carla Gaudensi, secretaria general de FATPREN, anunciaron la continuidad del plan de lucha para romper el círculo de un trabajo precarizado que desvaloriza la labor periodística. “Que se note que a los trabajadores de prensa no los callan nunca. Por lo tanto, vamos a seguir en pie de lucha en las calles defendiendo nuestras fuentes de trabajo, nuestras condiciones dignas de trabajo”, sentenció Gaudensi.

Ajuste/12

Ajuste/12

La semana pasada el Grupo Octubre anunció el cierre de los suplementos Sátira 12, Turismo 12 y M2, del diario Página 12, el achicamiento de Radar, Las 12 y Soy y que el suplemento No saldrá solo en la web. Los trabajadores difundieron su rechazo a la medida en un comunicado: “Exigimos la continuidad de los suplementos en formato web y reclamamos a Víctor Santa María (CEO del Grupo Octubre) que se garanticen no sólo los puestos de trabajo sino también los ingresos de todos/as los/as afectados/as”.

Más allá del reclamo de los periodistas, la empresa ratificó el cierre de los suplementos. Desde el Grupo Octubre plantean que “es una medida tomada en un marco de decisión editorial”. ANCCOM habló con Francisco Meritello, CEO de Página/12, quien  prometió que “no se perderá ningún puesto de trabajo con esta medida”. “No vemos viable que todos sigan laburando”, dijo, sin embargo, el secretario general del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, Fernando “Tato” Dondero.  “Seguiremos viendo y discutiendo cada caso en particular, cada suplemento es distinto”, anunció.

Trabajadores de Página 12 sosteniendo carteles con letras que juntos  conforman la frase "No al cierre del suplemento".

Los trabajadores rechazan la medida tomada por el Grupo Octubre de cerrar los suplementos Sátira 12, Turismo 12 y M2.

El comunicado que publicaron los trabajadores del diario afirma que la decisión “es un golpe directo al eslabón más débil de la cadena de producción”, en referencia a los “mal llamados colaboradores”, que perderían su trabajo. “La decisión implica demandar menos trabajo a quienes cobran por nota, que por ende verán disminuidos sus ingresos”, aclara el comunicado.

Según las primeras comunicaciones de la empresa, los suplementos Soy y Las12 serían fusionados. Rápidamente los trabajadores reaccionaron: “Rechazamos en particular el achicamiento de Las 12 y Soy, imprescindibles herramientas de lucha en tiempos cruciales para el movimiento feminista y la comunidad lgbtiq”. Ante la reacción de diferentes colectivos que militan por la diversidad, las autoridades del diario se comunicaron este martes con los delegados y les aseguraron que, por ahora, ambos suplementos continuarán apareciendo como hasta ahora. “Cualquier cambio se consensuará con las editoras”, prometieron. Cuando se lo consultó sobre este tema Meritello sostuvo, en tono desafiante: “Esperemos a que salga, yo creo que va quedar muy bien”.

un dibujo donde aparecen tres hombres. uno sostiene un cartel que dice "Sátira/12" y dos que sosteniendo una bandera que dice "No nos cierren"

Los trabajadores exigen la continuidad de los suplementos en formato web y que se garanticen los ingresos y puestos de trabajo.

Los periodistas y fotógrafos que se encargan del suplemento Turismo12 publicaron su rechazo al cierre. “Si solo fuera por los costos industriales y no laborales, como argumentan los responsables del diario, el suplemento bien podría sostenerse en web, manteniendo nuestros puestos de trabajo”, explican. Dondero anunció que  “sacaremos el suplemento Turismo12 con notas presentadas antes del cierre, será por fuera del diario”. El suplemento saldría el domingo.

El conflicto entre el Grupo Octubre y los trabajadores de Página 12 viene desde hace tiempo. En septiembre pasado expresaron su “rechazo y legítima preocupación frente a la decisión de la empresa de abrir una lista de retiros voluntarios”; en octubre reclamaron que se les pague el sueldo que les debían desde mayo, en agosto difundieron que sus salarios quedaron 15 puntos por debajo de la inflación, entre otros conflictos.

 imagen de una ruta argentina en donde se aprecia un paisaje montañoso, con una gáfica que dice "No al cierre/Turismo 12/por trabajadores de Turismo 12"

El Grupo Octubre plantea el cierre de los suplementos como una medida tomada en un marco de decisión editorial.

En algo sí están de acuerdo los trabajadores y los empresarios: ambas partes coinciden en que están sufriendo una persecución de parte del gobierno de Mauricio Macri. Según los trabajadores esto se da por la línea editorial del diario y sus contenidos. El año pasado el periodista emblema de Página 12, Horacio Verbitsky, decidió dejar de publicar sus columnas dominicales luego de recibir amenazas por haber publicado algunos de los blanqueos de capitales de socios, amigos y familiares del presidente Mauricio Macri

A principios de este año, se dio a conocer cuánto dinero le daba el gobierno actual, en forma de pauta publicitaria, a cada grupo de medios y se destacan los cambios que hubo para el Grupo Octubre. En el período de julio-diciembre de 2016 recibieron 12.5 millones de pesos, mientras que en enero-julio recibieron 4.3 millones, una tercera parte. En ese mismo período, el Grupo Clarín cobró 350 millones. “Denunciamos y repudiamos las presiones del gobierno de Mauricio Macri contra el diario”, expresaron los trabajadores el año pasado en otro comunicado.

fondo blanco, en la parte superior escrito "m2" y en la parte inferior un lápiz partido a la mitad

Pese a los conflictos entre los trabajadores de Página 12 y el Grupo Octubre, ambos coinciden en que están sufriendo una persecución por parte del gobierno.

 

“Hay peligro de que se pierda el pluralismo”

“Hay peligro de que se pierda el pluralismo”

El ajuste que aplica el gobierno afecta también a los medios de comunicación. En los casos del diario Página 12 y de Radio Del Plata lejos de caer sobre los dueños, perjudica a sus trabajadores. Pago de salario en cuotas y con demora, adeudamiento de aguinaldos y retraso en el pago de haberes previsionales son los mayores problemas con los que deben lidiar, por lo que el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) exige una solución inmediata.

Tanto Página 12 como Del Plata tenían afinidad editorial con el kirchnerismo, que distribuía la pauta oficial de manera diferente a la que lo hace el gobierno encabezado por Mauricio Macri y permitía que hubiese medios que se sostuvieran con ese ingreso primario. Fernando Dondero, secretario general de Sipreba, destacó esto como uno de los disparadores de la crisis y dijo: “Se da un quiebre con la gestión de Cambiemos y cómo manejan la pauta oficial”. Además, en el caso de Del Plata agregó: “La radio recibía bastante dinero porque tuvo un uso político”.

Aparte de secretario general, Dondero es delegado de Sipreba en Página 12 y en ese rol expresó que, si bien tienen trato con los directivos del Grupo Octubre, de Víctor Santa María (titular del sindicato de porteros y del Partido Justicialista porteño), no responde a sus demandas. “La patronal está abierta al diálogo, pero no se soluciona el problema. Con quién más nos reunimos es con el director ejecutivo del grupo, Francisco Meritello”, afirmó.

Reclamo salarial de los trabajadores de Radio Del Plata.

Ana Paoletti, otra delegada de Sipreba en Página 12, contó que hace dos semanas se canceló el aguinaldo pagado en cuatro cuotas y también se solucionó la falta de viáticos para los fotógrafos que los llevó a hacer un paro el 7 de julio. Sin embargo, aún tienen reclamos sin respuesta y destacó: “Deben pagar un 12% de aumento correspondiente al insuficiente acuerdo que hicieron con la UTPBA (Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires) del 20% firmado en mayo (se dará en tres cuotas) y es retroactivo desde ese mes hasta hoy, pero no lo han hecho. Además, se comprometieron a blanquear a los compañeros del portal digital Diario Z y que dependan de Página/12 desde agosto”.

Paoletti dijo que los problemas se desataron el año pasado a partir del pago diferido de sueldos y aguinaldo en cuotas y relató que el Ministerio de Trabajo los convocó varias veces, pero no les ofrecen soluciones concretas. Debido al conflicto, han tomado distintas medidas de fuerza. “Hemos hecho paros, ediciones con retiro de firmas, una mateada en la puerta y hay asambleas constantes”, expresó. Además, marcó que la primera semana de agosto deben pagarles los sueldos y saldarles lo adeudado, “si no cumplen, vamos a seguir con los reclamos hasta que brinden una solución real”, añadió.

La situación en Radio Del Plata es un poco más compleja. Desde diciembre de 2015 se iniciaron las irregularidades, con el pago en cuotas de los salarios. Al principio, si bien fraccionaban el sueldo, pagaban su totalidad dentro del mes, pero a partir de febrero de este año reina la incertidumbre y los trabajadores no saben cuándo van a cobrar. Se les adeudan tres meses de salario, dos aguinaldos, hay falta de pago de haberes previsionales y de obra social que llegan al año. Este último ítem constituye un delito penal, pero pareciera no ser tomado en cuenta.

“La patronal está abierta al diálogo, pero no se soluciona el problema», dijo el delegado de SipreBa.

El miércoles pasado hubo una audiencia en el Ministerio de Trabajo para exigir que intervengan y les den respuestas a los trabajadores damnificados. En esa reunión, los dueños se comprometieron a pagar algunas deudas, pero no han cumplido. “La patronal alega que busca compradores para la radio y que se hagan cargo de la deuda porque no tienen dinero”, dijo Dondero.

La empresa responsable de Del Plata es Electroingeniería, de Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta. Legalmente, el dueño es el Grupo Empresarial Argentino S.A. que componen Sebastián Ferreyra, Santiago Acosta, hijos de los ya citados, y otros accionistas minoritarios como el Swiss Medical Group, de Claudio Belocopitt, y Marcelo Tinelli.

Los 150 trabajadores de la radio (entre contratados y efectivos) esperan una definición de la situación de una emisora que parece agonizar. Paros rotativos y que no salga la programación completa son algunas de las medidas de fuerza que se han tomado durante el conflicto. “Del Plata llegó a ser cuarta en cantidad de oyentes y esto la afectó. Se le fueron conductores, columnistas y se achicó el personal porque algunos se consideraron despedidos por falta de pago”, expresó Dondero.

El viernes pasado otro conflicto gremial de prensa se hizo público, cuando se viralizaron las imágenes de un ruidazo en la redacción del bisemanario Perfil, la forma que utilizaron los periodistas de reclamar el pago atrasado de su aguinaldo.

El secretario general de Sipreba alertó que hubo 1.400 despidos en el área de prensa en la ciudad y 2.500 en el país durante los últimos dos años. “Hay peligro de que se pierda el pluralismo y se escuchen solo unas pocas voces. Sin trabajo no hay libertad de expresión”, reflexionó.

 

Actualizada 26/07/2017

Reporterazo

Reporterazo

En mayo de este año, el Grupo Octubre -encabezado por el secretario general del gremio de los trabajadores de edificios, Víctor Santa María- presentó su fusión con el diario Página/12. Desde entonces, los trabajadores mantienen un conflicto paritario con la empresa, que ofreció aplicar un aumento del 24,9% anual, sin otorgar ningún bono a los trabajadores, una cifra que está casi 20 puntos por debajo la inflación. Por esta razón, desde la semana pasada y hasta este miércoles la publicación salió sin firmas como señal de protesta.

El secretario General del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SIPREBA), Tato Dondero, denuncia que la cifra del aumento fue impuesta por la cámara de la Asociación de Editores de Diarios de la Ciudad de Buenos Aires (AEDBA), entidad que “no representa los intereses de los trabajadores de prensa”. Como contrapartida, el personal Página/12 exige un salario digno. Diego Martínez, delegado de la comisión interna del diario y redactor en la sección política, manifestó en diálogo con ANCCOM, que “el Grupo Octubre no da respuestas” y “que ha apelado por tercera vez al Ministerio de Trabajo, en donde el jefe de esa cartera, Jorge Triaca, volvió a dictar la conciliación obligatoria”. Para Martínez, “la conciliación planchó el reclamo” porque “el abogado que representa a la empresa, en la mesa de negociación con el Ministro y los representantes de los trabajadores, sigue sin ofrecer nada”. El Grupo Octubre tampoco dio ninguna respuesta ante la requisitoria de este medio para dialogar sobre el tema.

 

 

Este miércoles, termina la tercera semana de la última conciliación obligatoria dictada el mes anterior, y el Grupo Octubre se mantiene firme en su postura de darle a los trabajadores un 27% de aumento a cobrarse en cuotas durante trece meses, lo que anualizado da solo un 24,9% de incremento. Mientras tanto, los trabajadores de Página/12 publicaron una edición paródica del diario titulada “Caras y Caretas”. Los empleados subrayan que, además del titular del Grupo Octubre, Santa María es  Secretario de estadísticas en la CGT. “Reclama para su gremio lo que en su empresa no aplica”, dicen los delegados del diario en referencia al acuerdo paritario firmado por SUTERH, donde se detalla un 27,5 % de aumento hasta noviembre de este año, fecha fijada para la reapertura de paritarias. Por eso, como novedosa acción de protesta a la que denominaron Reporterazo, periodistas y administrativos decidieron baldear las veredas “para ver si Santa María registra que somos trabajadores”.

 

 

Actualizado 09/11/2016