Los secundarios no levantan sus reclamos

Los secundarios no levantan sus reclamos

Dentro de la gran extensión de verde del Parque Avellaneda se encuentra la Escuela N°2 Ernesto Che Guevara. El sábado último fue la elegida para la reunión de la Coordinadora de Estudiantes de Base (CEB), la organización en la que se nuclean los representantes de los centros de estudiantes de los colegios secundarios públicos de la Ciudad de Buenos Aires. Cuando se reúnen, hablan de las problemáticas que implican a sus colegios, pero desde que conocieron los lineamientos de la reforma Escuela Secundaria del Futuro, impulsada por el Gobierno porteño, las reuniones se dieron con más asiduidad y comenzaron a nuclear a más estudiantes, como no ocurría desde hace cinco años cuando apareció la anterior reforma en 2012, denominada Nueva Escuela Secundaria (NES), sistema que actualmente transita el cuarto año en las escuelas piloto, y el tercero en las demás.

Los estudiantes están a la espera de la resolución del recurso de amparo presentado la semana pasada por la asesora tutelar de primera instancia, Mabel López Oliva, y el asesor tutelar de la cámara, Gustavo Moreno. Este amparo pidió la suspensión de la implantación de la reforma educativa en todas las escuelas para que se garantice un procedimiento previo con acceso a la información pública de la reforma  y un espacio para el debate. La jueza porteña en lo Contencioso Administrativo, Andrea Danas, no dictó una medida cautelar contra la reforma educativa en la Ciudad de Buenos Aires pero citó a los interesados a que en el plazo de 10 días se presenten a declarar en el expediente para hacer valer sus derechos.

Los estudiantes, si bien entienden que se necesita una reforma educativa, piden la anulación total de esta por los puntos que vienen cuestionando desde que se iniciaron las tomas: las prácticas pre-profesionalizantes gratuitas como tiempo de estudio durante un cuatrimestre del último año de la escuela media (sumado a la formación en emprendedurismo); el modelo de clase que contempla un 70 por ciento de aprendizaje autónomo del alumno, por sobre un 30 por ciento de tiempo con su docente; la pérdida de contenidos, la organización de contenidos en áreas temáticas en vez de materias y la falta de información de cómo se va a realizar la reforma.

Hoy, miércoles, se realizó una movilización desde el Congreso de la Nación, para continuar con la visibilización del reclamo que subsiste aunque las tomas cesaron. «Las tomas fueron una manera de romper el cerco mediático. A partir de la lucha logramos que mucha gente se entere de que se quería imponer una reforma en la escuela secundaria», dijo un integrante de la Coordinadora de Estudiantes de Base. Un alumno de la Escuela Lenguas Vivas explicó que lo que más cuestionan, además de los puntos de la reforma, es que no haya una instancia de diálogo real en donde se puedan plantear estos problemas, ya que las reuniones que tuvieron con el Ministerio de Educación fueron más bien informativas. «Nosotros planteamos la anulación total de la reforma Escuela Secundaria del Futuro porque con la NES pusieron una prórroga y finalmente fueron solo jornadas informativas. Las reuniones tienen que ser resolutivas», dijo en la misma línea un alumno de la Escuela Técnica Ingeniero Eduardo Latzina para explicar que, aunque el recurso de amparo presentado por la asesoría tutelar es un paso importante, el espíritu de la reforma podría ser el mismo si no se hacen reuniones que ejecuten las propuestas de otros sectores de la comunidad educativa.

Para una joven de la Escuela Técnica Química N°27 Hipólito Yrigoyen, el paso a seguir es hablar con la gente en los barrios, ya que como las tomas se hicieron muy rápido, mucha gente no conoce bien por qué se realizó la medida: «Algunos centros de estudiantes no pudimos hacer toma porque no nos dio el tiempo para poder informar y que se sumaran alumnos. Hay colegios con centros más fuertes y de mayor tradición política, en cambio, en mi escuela es difícil hacer política».

Un tema central en la reunión la CEB de esta semana fue el caso del abuso ocurrido que tomó relevancia mediática la semana pasada. Una alumna del Colegio Nacional Buenos Aires contó angustiada a los demás: «Mi compañera quedó expuesta. Hay casos de abusos en todos los colegios y no se dice nada. El lío que se armó es porque fue en una toma, no por el abuso en sí». Además, explicó a ANCCOM que se había pedido que se tratara el tema institucionalmente y que no se explicitara que fue en situación de toma pero, a partir de una carta que realizó el director, llegó a la comunidad educativa y luego a los medios.

Una joven de la Escuela de Bellas Artes Rogelio Yrurtia compartió con sus compañeros que sigue cursando con un alumno que la violó. En mayo hizo la denuncia, pero la abogada del alumno no permitió que fuera el alumno se cambie de turno. Mientras la alumna hablaba, algunas de sus compañeras se conmovían.

Los alumnos siguen debatiendo en sus colegios cómo seguir la lucha respecto a la reforma educativa, principalmente porque temen que se sigan profundizando los problemas que ya tuvieron con la anterior reforma, ya que el plan Escuela Secundaria del Futuro no es un cambio curricular, sino una profundización metodológica de la misma NES, y propone seguir implementando la organización de los contenidos por áreas. Intenta integrar las distintas materias, sin afectar los contenidos de cada una, en cuatro áreas de conocimiento: Ciencias Naturales y Exactas, Ciencias Sociales y Humanidades, Comunicación y Expresión.

El alumno de la Escuela Nº35 Eduardo Latzina, que ya transitó uno de los cambios de la NES que se implementó en 2012, explicó que con la anterior reforma le sacaron dos horas curriculares de Matemática y que su escuela está especializada en automotores y computación. Desde la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, un alumno explicó que a ellos la reforma no los implica porque su colegio depende de la Universidad de Buenos Aires (UBA) pero que apoyan por solidaridad con los colegios y en defensa de la educación pública. Además, considera que a futuro podría afectarles, ya que con la reforma NES, la UBA luego implementó una reforma parecida. Otra alumna, integrante de la Coordinadora de Estudiantes Base dijo que la NES trajo problemas en cuanto a las correlatividades y muchos compañeros no entendían contenidos de las materias por esta razón.

Los problemas edilicios son otro punto importante que integrantes de la comunidad educativa buscan resolver antes de pensar en una reforma. Padres y docentes de la Escuela de Bellas Artes Rogelio Yrurtia organizaron un festival barrial el sábado último, para manifestarse en contra de la reforma Escuela Secundaria del Futuro, y para pedir por la continuación de la obra donde se estaba realizando el nuevo edificio para la escuela. La obra fue suspendida en marzo de este año. Un alumno del profesorado de Bellas Artes que cursa en el colegio explicó que piden el edificio desde hace casi quince años, ya que el anterior quedó chico porque se empezó a cursar el profesorado de su disciplina. «Faltaban seis meses para que termine la obra, pero rescindieron el contrato a la empresa por una supuesta sobrefacturación. Ahora la obra se está llenando de humedad», dijo a ANCCOM un delegado de los cooperadores escolares de la Comuna 9. En la Escuela Nº 2 Ernesto Che Guevara hay problemas edilicios que todavía no se resuelven, según una alumna el techo de una parte del edificio está muy deteriorado, y temen que se caiga. Una estudiante de la Escuela Técnica Química Nº 27 Hipólito Yrigoyen dijo que con la implementación de la reforma NES se les había prometido un laboratorio que nunca se hizo. A su vez, esta alumna quiso reflexionar sobre el movimiento del alumnado frente a la reforma en general: «Para mí, falta más enojo. Somos pibes todavía, y al mismo tiempo nos preocupa terminar bien el año, no tener más faltas y aprobar los exámenes. Yo creo que si pudiéramos difundir más la información de la reforma, muchos más se darían cuenta que vale la pena luchar y que aunque ahora implique tiempo, realmente a futuro esta lucha, en contra de la reforma, va a servir».

Actualizado 04/10/2017

La reforma secundaria en debate

La reforma secundaria en debate

Desde hace un mes, la reforma educativa «Escuela Secundaria del Futuro» se instaló en la agenda pública a partir de las movilizaciones y protestas de colegios lideradas por los estudiantes que reclaman un debate sobre su educación y el de las futuras generaciones. Hoy se conoció un recurso de amparo presentado por la asesora tutelar de primera instancia Mabel López Oliva, y el asesor tutelar de cámara, Gustavo Moreno, que pide la suspensión de la implantación de la reforma educativa en todas las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires para que se garantice un procedimiento previo, con acceso a la información pública completa, que permita un espacio para el debate sobre la reforma.

Los puntos más cuestionados de la reforma son principalmente los que establecen las prácticas profesionalizantes gratuitas como tiempo de estudio del último año de la escuela media; también se critica el modelo de clase que contempla un 70 por ciento de autonomía del alumno, por sobre el 30 por ciento de tiempo con su docente, sumado a la pérdida de contenidos, y la falta de información acerca de cómo se llevará a cabo la reforma, ya que hasta el momento no abunda información al respecto.  A partir de estos puntos ANCCOM dialogó con fuentes especializadas y trabajadores de la educación para conocer  las preocupaciones y debates que despierta la reforma educativa.

Patricia Sadovsky es profesora de la Universidad Pedagógica Nacional e Integrante de la Secretaría de Cultura del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA). En diálogo con ANCCOM planteó que la formación de la escuela secundaria tiene que ser principalmente en tres líneas: para la ciudadanía, para el trabajo y para la cultura. «Estas tres formaciones tienen que interactuar entre sí. No pueden perderse las demás por enfatizarse una de ellas», explicó Sadovsky en referencia al punto de la reforma que busca que en quinto año los alumnos realicen una porción de la currícula en prácticas para empresas e instituciones, y la otra en formación sobre emprendedurismo.

Los puntos más cuestionados de la reforma son principalmente los que establecen las prácticas profesionalizantes gratuitas como tiempo de estudio del último año de la escuela media.

Una fuente de la estructura educativa del área media del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que prefirió reservar su identidad, explicó que todavía no hay demasiada información de cómo se llevará a cabo la reforma. «Cuando preguntamos todo lo que tenga que ver con el cómo se va a implementar, por ejemplo, las prácticas preprofesionales, nos dicen que todavía falta para que los chicos de primer año lleguen a quinto. Hay cosas desprolijas». Además, confesó que recién la semana pasada –en medio del reclamo de diálogo e información de estudiantes, padres, docentes y gremios- se abrió el espacio a los demás integrantes de la comunidad educativa, ya que hasta el momento sólo se habían realizado mesas de trabajo con algunos supervisores educativos.

Respecto a la necesidad de cambiar la escuela, Patricia Sadovsky explica que hay un gran consenso en todos los sectores de la educación, pero no de la manera en que se ha propuesto hasta el momento, ya que debe haber una planificación en los cambios. Además, considera que la formación para el trabajo excede a que un alumno asista a una empresa. «Aparece una cierta liviandad de que todos los chicos de quinto año van a hacer una práctica y no se garantiza que realmente lo vayan a poder hacer. Se pone el énfasis en la formación de recursos humanos, se prioriza que se construya un vínculo con los establecimientos de trabajo, pero en realidad el acceso al trabajo lo tienen que garantizar las políticas públicas». Jorge Adaro, Secretario General de la Asociación de docentes de Ademys agregó sobre este punto: «Desde el sindicato no concebimos a las escuelas como apéndices de las cámaras empresariales». Opinó además que la prórroga de la reforma no va a cambiar el espíritu que tiene actualmente, por eso el gremio mantiene su total oposición.

Otro de los puntos más significativos de la transformación que impulsa el gobierno, como se mencionó anteriormente, es el modelo clases con un 70 por ciento de autonomía del alumno, y un 30 por ciento del rol docente. La profesora de la Universidad Pedagógica Nacional explicó que hay una tergiversación cuando se piensa en que construir alumnos autónomos implica desvincularlos del docente. «La autonomía intelectual pasa por poder tomar decisiones y ser activo como estudiante. Pero no hay que pensar que el docente no tiene que estar. Tiene que haber un vínculo cooperativo. El docente es un vínculo, un lazo con la cultura».

Uno de los puntos más significativos de la transformación que impulsa el gobierno es el modelo clases con un 70 por ciento de autonomía del alumno, y un 30 por ciento del rol docente.

Otra preocupación de los especialistas es bajo qué régimen quedarán los docentes en la estructura educativa, ya que no queda claro si van a estar normados bajo el Estatuto Docente, mediante el que se regula los derechos y deberes de los trabajadores de la educación. Jorge Adaro indicó que toda la reforma se enmarca dentro del «Plan Maestro» (en referencia al plan del gobierno nacional), al que atribuye una marcada tendencia  hacia el modelo de productividad: «Este año probaron proponer que parte del aumento de sueldo estuviera vinculado a la asistencias del docente», recordó Adaro. Explicó que ésto puede ir en línea con otros modelos educativos de Latinoamérica como el de Chile, en donde hay una correspondencia entre el sueldo del docente y el rendimiento de los alumnos. Desde la estructura del área media, la fuente con reserva dijo que todavía no queda claro si los docentes de este nuevo plan se plantean como facilitadores, si formarán parte de la planta orgánica funcional, o si van a ser trabajadores externos. También agregó: «Hay muchas cosas del cómo se va a llevar a cabo la reforma que siguen sin plantearse. En los documentos ya se cambió el nombre y no aparece como ‘Escuela Secundaria del Futuro’, sino como ‘Profundización de la Nueva Escuela Secundaria (NES)’, la reforma que se realizó en 2012», describió Adaro.

La profesora de la Universidad Nacional Pedagógica hizo hincapié en otro punto central: «Lo más alarmante es lo improvisado, propagandístico y lo mercantilizado de la reforma. No están claramente planteados cuáles son los puntos que se quieren transformar. No se puede pensar que los recursos son novedosos por sí solos, como es el caso de lo que se piensa de las plataformas virtuales. Lo que importa es lo que se pone adentro de esas plataformas. No se puede pensar una reforma sin una perspectiva clara».

«Nosotros elegimos nuestro futuro», una de las consignas que llevan adelante los estudiantes.

 

Actualizada 26/09/2017.

“La rectora defiende la escuela pública y no se arrodilla”

“La rectora defiende la escuela pública y no se arrodilla”

Dos meses después de las denuncias efectuadas por la rectora Raquel Papalardo tras la irrupción de policías en la escuela Mariano Acosta, fue cesanteada de su cargo. La comunidad educativa organizó el lunes último al mediodía un abrazo a la institución para exigir la reincorporación de su rectora. Papalardo no pudo participar del acto porque, tras recibir la comunicación oficial, sufrió un pico de presión y los médicos le indicaron reposo. Al día siguiente, los estudiantes cortaron las calles Urquiza y Moreno en solidaridad con la histórica rectora y denunciaron que la supervisora los amedrentó cuanto intentaban realizar una asamblea.

El abrazo fue presidido por Eduardo López, secretario general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), quien aclaró que a Papalardo no la jubilaron sino que la cesantearon. “Raquel tiene cuarenta años de docencia en esta institución, no había nacido la Ministra que la cesó cuando ella ya estaba dando clases aquí”, dijo indignado López. También, recordó que dos meses atrás la rectora impidió que las fuerzas de seguridad hicieran inteligencia en actividades escolares controlando los centros de estudiantes y afirmó que el motivo de su despido se debe a que la rectora defiende la escuela pública y no se arrodilla.

El próximo paso que dará la comunidad educativa será presentar acciones legales. “Vamos a ir a la Justicia, a la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, vamos a pedir una entrevista con Rodríguez Larreta para que se avenga a derecho y garantice no la restitución, sino la continuidad de Raquel Papalardo en el establecimiento”, dijo López.

La comunidad educativa organizó el lunes último al mediodía un abrazo a la institución para exigir la reincorporación de su rectora.

Silvina Hermosa, presidenta de la Asociación Cooperadora del Colegio Mariano Acosta y madre de un alumno, leyó una carta que Raquel escribió para el abrazo. Según las palabras de la rectora, que desea jubilarse en ejercicio, el mismo Ministerio que hoy la deja cesante, es el que este año, mediante una resolución interna, le prorrogó su cargo hasta el 31 de diciembre del 2017, con el incremento de horas a desempeñar en el Mariano Acosta. “Por ello permanecí en la escuela entre 10 y 12 horas diarias, todos saben de mi pertenencia y compromiso con la visión pedagógica y formadora de ésta escuela. Lo público no da lugar a trenzas ni oportunidades fáciles para conseguir cargos, lo público y educativo se construye artesanalmente y día a día, no cumpliendo solo un horario. Todos saben que durante mi gestión se regularizó el funcionamiento administrativo y nunca tuve sumario ni irregularidades en ninguna gestión política. En lo pedagógico se ampliaron los proyectos educativos. Seguramente no todo es elogiable, pero en cada acción que llevo a cabo, sea con el personal docente, no docente, con los estudiantes o con las familias, evalúo las consecuencias humanas e institucionales”, escribió Papalardo. En la carta Raquel señaló que, en dos instancias, y por concurso, tuvo la oportunidad  de desempeñar un cargo como supervisora, pero no lo aceptó porque cree en la valorización de la escuela como instancia pedagógica. “Cuando el viernes 30 de julio llegué a mi casa alrededor de las veinte horas y el portero me hizo entrega de unas fotocopias de cédulas de notificación de carácter no urgente, dejadas en el buzón por alguien, comencé a leerlas y tuve una conmoción, temí por mi salud, experimenté el miedo a perder mi trabajo, circunstancia social extendida que preocupa a todos. Inmediatamente registré la pérdida de remuneración y suspensión de la obra social. El Ministerio de Educación ha decidido comunicar de este modo y hacer uso ciego de un procedimiento administrativo, pero sinceramente creo que me cesan, porque soy referente de la defensa de los estudiantes, de la escuela pública y de la demanda de los docentes”, relató Papalardo. Según la rectora se observan errores en la resolución de la Ministra cuando dice que Papalardo estaba de licencia el 22 de mayo, ya que se reintegró el 17 de abril a sus tareas habituales después de una fractura. Además, Papalardo denunció la forma en que fue notificada y dijo: “Existen medios habituales de comunicación mediados por la secretaría, pero eligieron esta modalidad, un camino de torpeza gerencial, un camino que pone a todos los niveles de decisión humanamente oscuros. Por ello puede ser entendido como persecución personal. Esto se conecta con una política educativa más amplia, hay prácticas de amenaza ante demandas docentes, se los desprestigia, arremetiendo con discursos de ineficiencia para instalar la idea de la educación como un gasto, sustituyen los expertos locales por consultoras externas. En estas circunstancias han decidido unilateralmente que yo no pertenezca más a ninguna escuela de la Ciudad, en términos de cese administrativo, sin siquiera esperar a que se haga la consulta correspondiente a un trámite en curso”.

En la carta Raquel también expresó sus deseos de jubilarse estando en la escuela, esperando su último día de trabajo al frente de ella y por eso solicitó su continuidad. El discurso de la directora finalizó con una dedicatoria: “A los funcionarios que han roto el clima de bienestar que sostiene el normal desarrollo de maestros, profesores, alumnos y de las familias del colegio Mariano Acosta desequilibrando el proceso educativo, mínimo para el derecho a la educación. No vamos a bajar los brazos, haremos todo lo que tengamos que hacer, no se puede destruir lo que se hizo durante toda una  vida”. Silvina Hermosa agregó: “Desde la Asociación Cooperadora y desde nuestro lugar como padres pedimos la continuidad de la rectora, porque trabajamos en conjunto con ella todos los proyectos educativos y las necesidades que tiene esta institución. A veces nos íbamos a las nueve de la noche de las reuniones y Raquel seguía trabajando y atendiendo las necesidades de esta comunidad educativa”.

Los estudiantes cortaron las calles Urquiza y Moreno en solidaridad con la histórica rectora y denunciaron que la supervisora los amedrentó cuanto intentaban realizar una asamblea.

Agustín Prieto, presidente del Centro de Estudiantes habló con ANCCOM de la reacción de la comunidad educativa al conocer la noticia: » El viernes a la diez de la noche nos enteramos que nuestra rectora de un día para otro había cesado su cargo y todas sus actividades. Fue desconcertante y tan impactante que generó este abrazo con más de doscientas personas, en el que no sólo participó gente de la escuela, sino vecinos del barrio de Balvanera, porque es un emblema del colegio y de toda la comuna tres por participar en los diversos espacios de la comunidad”.  Con respecto a los motivos del despido, Prieto dijo: “Están en contra de la educación pública como herramienta emancipadora, no es casualidad que esto suceda una semana después del anuncio de un paro docente. Tampoco lo es que Raquel, una de las rectoras más importantes de los colegios de la Capital Federal, con una intachable carrera de defensa a la educación pública, haya sido una de las primeras a la que le toca vivir este grado de violencia institucional por parte del Gobierno de la Ciudad y del Ministerio de Educación. Desde principio de año que los docentes vienen sufriendo sin paritarias nacional, se caen los techos de los colegios, no hay viandas ni calefacción. En este contexto no podemos dejar pasar esto, Raquel tiene que volver a ser la rectora del Acosta”.

Néstor Mascaro, profesor y representante de UTE expresó su descontento ante el despido de Papalardo y las razones por las cuales fue tomada esa decisión: “Lo que está ocurriendo es una gran vergüenza, no es una casualidad lo que estamos viendo sino otro amedrentamiento más a la educación pública por parte de este gobierno. Nadie puede creer que a Raquel la separaron del cargo por excederse en sus años para jubilarse. Se la ataca porque el Mariano Acosta levanta la bandera de la educación pública con ella como rectora hace diez años. Una década atrás la escuela se caía a pedazos, fue ella la que nos devolvió al instituto, abrió un aula museo, un archivo histórico, un teatro, una radio, y como si fuera poco también un jardín de infantes. Todo eso en una educación pública que no es la que quiere el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Pero el Mariano Acosta es una escuela a la que no se le tuerce el brazo así nomás, acá le vamos a dar pelea porque este es el comienzo de un plan de lucha para que vuelva la rectora Raquel Papalardo. Ella se va a ir por la puerta grande como lo merece una persona de sus características”.

El próximo paso que dará la comunidad educativa será presentar acciones legales. Mientras, las familias se acercaron a la movilización.

Diego Fernández, docente primario de Lengua con más de veinte años de antigüedad, dijo que la idea del abrazo fue demostrar el descontento y que hay una necesidad de movilizarse porque si no se quejan, “ellos” avanzan, refiriéndose a las autoridades del Gobierno de la Ciudad. Por un lado, Fernández repudió la forma en que se dejó cesante a la rectora: “Si los tiempos legales y administrativos para que se jubile ya se cumplieron, tampoco es la manera de que una persona de su calidad humana y con su capacidad de gestión se entere, por medio de una nota que le llegó a su casa advirtiendo que ese mismo día cesaban sus actividades. La tendrían que haber notificado que si no presentaba los papeles en tiempo y forma se le iba a dar curso al cese administrativo. Y si bien puede llegar la notificación al domicilio particular o a la escuela debe ser entregado en mano al interesado”. Por otro lado, Fernández dijo que más allá de que los tiempos legales se hubiesen cumplido resulta contradictorio reubicar a una persona y a los dos meses darle el cese. El docente reivindicó la gestión de Papalardo: “Por primera vez en muchos años los docentes del nivel primario nos hemos sentido representados, escuchados y contenidos”. Para él, esto es una persecución política e ideológica que data desde que Raquel asumió como rectora. “No se le perdona que este colegio sea participativo y abierto, que aquí hayan estado (el ex juez Eugenio) Zaffaroni, (la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo) Estela de Carlotto, (la Madre de Plaza de Mayo) Nora Morales de Cortiñas y que a los familiares de los detenidos desaparecidos de ésta institución se les haya entregado el título, en un acto que se hizo en 2013 en el que participó parte del Gabinete Nacional de ese entonces. La denuncia por el ingreso de los policías a la institución fue sólo la gota que colmó el vaso, la persecución viene de años”, dijo Fernández.

En la misma línea, Matías Zalduendo, maestro de cuarto grado de matemáticas del Acosta y secretario de derechos humanos de UTE- CETERA dijo que a Raquel la cesaron del cargo como parte de una persecución política. Zalduendo hace hincapié en que la situación ocurrió después de que la rectora denunció fuertemente el ingreso de la policía a las escuelas. Pero también cree que la represalia se debe a cuestiones anteriores: “No le perdonan que hace más de diez años viene enseñando a generaciones y generaciones que las convicciones no se dejan en la puerta de la escuela, la importancia de que nos organicemos para cambiar la realidad, que luchar tiene sentido y que las mejores clases las damos unidos en defensa de la Educación Pública”. Mariano Mango, en calidad de miembro de la Comisión Directiva del Sindicato UTE, maestro de la escuela, ex alumno del terciario de la escuela y papá de una alumna reclamó: “Nosotros creemos que fue cesada como un modo de disciplinamiento, como consecuencia de la forma en que ha luchado Raquel, sobre todo en estos últimos meses, al haber defendido a los pibes de ese intento de hacer inteligencia por parte de la Policía Federal. Exigimos la continuidad de Papalardo al frente de esta institución como rectora”.

Después de cantar el Himno Nacional argentino, se realizó un abrazo simbólico al colegio por el que alumnos, exalumnos, docentes y no docentes dieron una vuelta a la manzana del colegio con la bandera nacional cantando: “Somos de Plaza Miserere, la escuela normal, Acosta”. Luego tanto alumnos como docentes se retiraron a las aulas, ya que como dijo Eduardo López: “El mejor homenaje que le podemos hacer a Raquel es continuar enseñando”.

 

Actualizada 04/07/2017

Secundarios en guardia

Secundarios en guardia

Al grito de “con un pueblo que camina para adelante y un gobierno que camina para atrás”, estudiantes, docentes y familias reclamaron una respuesta institucional ante el acoso policial a jóvenes secundarios y repudiaron la seguidilla de casos que se intensificaron desde abril de este año con hechos de represión y presencia de fuerzas de seguridad en establecimientos educativos.

“Si no querés que te pasen estas cosas no andes con ese pin”, amenazó un policía de civil a un estudiante de primer año de la Escuela Carlos Pellegrini al que había detenido en Callao y Córdoba para pedir documentos. El pin del chico era un escudo del Partido Comunista. El episodio aceleró los tiempos de la protesta que ayer finalmente protagonizaron los centros de estudiantes secundarios con el respaldo de docentes y madres y padres. Todos repitieron la misma consigna: “No al acoso policial”.

A las 14:30 los secundarios empezaron a amontonarse. Córdoba y Callao. Fue el lugar de encuentro donde alumnos de las escuelas Pellegrini, Antonio Mentruy (ENAM), Esnaola, Mariano Acosta, Manuel Belgrano, Mariano Moreno, Normal 1, Liceo 9, entre otros, eligieron para decirle que no a la represión. Ya son 35 los casos registrados de acoso policial hacia menores de edad de escuelas públicas de la Ciudad y el Conurbano, según el relevamiento de padres y estudiantes.

A las 14:30 los secundarios empezaron a amontonarse en Córdoba y Callao para repudiar el acoso policial.

A las 14:30 los secundarios empezaron a amontonarse en Córdoba y Callao para repudiar el acoso policial.

La mayoría de los estudiantes que ayer cortaron una de las esquinas principales de la Ciudad de Buenos Aires para reclamar por sus derechos no llegan a los 18 años. La movilización callejera también tendrá una secuencia en la Justicia: en los próximos días los centros de estudiantes tienen previsto formalizar una denuncia para que se tomen medidas sobre el tema.

Los casos de mayor violencia se registraron en escuelas de la Provincia. Los estudiantes de la Escuela Media número 1 de Berisso se habían movilizado para reclamar mejoras edilicias, y mientras esperaban afuera de la sede municipal un grupo de policías se les tiró encima con violencia. Varios jóvenes resultaron heridos. La semana pasada la fuerza policial ingresó a la ENAM y realizó disparos de balas de goma luego de perseguir a dos alumnos hasta el interior del establecimento con el argumento de que “tenían un arma”.

La fuerzas policiales de la Ciudad no se quedan atrás. Un alumno del  Liceo 9, de la zona de Belgrano, pasó doce horas dentro del Instituto de Menores “donde lo metieron adentro de una celda, lo hicieron bañarse, sacarse la ropa”, según afirmó Nahuel D’Angelo, presidente del centro de estudiantes de esta institución, en diálogo con ANCCOM.

El método de ingreso a las escuelas públicas por parte de las fuerzas policiales es siempre igual: sin orden judicial. Según Carolina, madre de dos estudiantes que ayer se sumó a la marcha, la policía está llevando a cabo “una especie de inteligencia” dado que se han creado sumarios sobre los menores. “Fuimos cinco padres y pedimos los expedientes, algunos chicos estaban marcados con un círculo. Nos preocupamos”, le contó a esta agencia.

“Buscan disciplinar a todo aquel que levanta una voz distinta”, razonó Sebastián, alumno del Pellegrini, en diálogo con ANCCOM. Las columnas de estudiantes comenzaban a dispersarse. Los instructivos contra el abuso policial y con recomendaciones sobre qué hacer en caso de una detención pasaban de mano en mano.

Los estudiantes se proclamaron bajo la consigna "Basta de persecución".

Los estudiantes se proclamaron bajo la consigna «Basta de persecución».

 

Actualizada 25/05/2017

La deserción invisible

La deserción invisible

El debate público por el impacto del ajuste presupuestario y los tarifazos en los servicios en las Universidades eclipsó en las últimas semanas una consecuencia inmediata del ajuste en las unidades académicas del Conurbano bonaerense: la lenta pero sostenida deserción de jóvenes estudiantes que ya no pueden afrontar los gastos de traslados básicos para continuar con sus estudios.

Referentes educativos y estudiantiles de las Universidades Nacionales de La Matanza (Unlam), de Lanús (UnLa) y de Avellaneda (Undav) consultados por ANCCOM describieron el nuevo escenario y plantearon los desafíos de la comunidad académica para intentar retener a sus estudiantes. Aunque las casas de altos estudios todavía no manejan estadísticas definitivas sobre el abandono, la caída de la matrícula ya está instalada como una tendencia que preocupa a las autoridades universitarias.

“No nos alcanza la plata para cargar la sube”, afirmó Emiliano Grillo, estudiante de la carrera de Trabajo Social y vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Nacional de Lanús.

En el Conurbano, describió Grillo, la mayoría  de los estudiantes “son hijos de laburantes, muchos son la primera generación de su familia  que puede ir a la Universidad por lo que  tienen recursos limitados”. Y subrayó: “Son laburantes, trabajan ocho horas y tienen que tomar dos o tres colectivos para ir a laburar. Y a eso se le suma el gasto del boleto para venir a la Universidad”.

Al fuerte aumento en el transporte, se le sumaron también las subas en materiales necesarios para poder estudiar como fotocopias y libros. “Muchos estudiantes se encontraron con una disyuntiva, en el análisis de ver qué hacen, si continúan o no estudiando, si cursan menos materias, si dan libres”, describió el referente estudiantil.

“Hay una gran incertidumbre sobre lo que va a pasar, por eso tuvimos una marcha en La Plata por el boleto educativo en la provincia de Buenos Aires. Frente a todo este tarifazo, principalmente en el transporte, lo mínimo que puede hacer el gobierno es pensar un poco en los estudiantes”, manifestó Grillo.

El boleto educativo en la provincia de Buenos Aires fue sancionado el año pasado por amplia mayoría parlamentaria y publicado en el Boletín Oficial bonaerense por Daniel Scioli al final de su mandato.  La actual gobernadora provincial, María Eugenia Vidal, debía reglamentarlo para su ejecución en febrero pasado, pero decidió ponerle un freno con el viejo argumento de la escasez de recursos presupuestarios.

 Aunque las casas de altos estudios todavía no manejan estadísticas definitivas sobre el abandono, la caída de la matrícula ya está instalada como una tendencia que preocupa a las autoridades universitarias.

Aunque las casas de altos estudios todavía no manejan estadísticas definitivas sobre el abandono, la caída de la matrícula ya está instalada como una tendencia que preocupa a las autoridades universitarias.

“Algunos alumnos ya empezaron a abandonar”, manifestó a ANCCOM Ana Moreno, docente de la UnLa y licenciada en Trabajo Social de esa casa de estudios. “Ya hay varios docentes que comenzamos a dar clases virtuales”, describió.

Ante esta situación, se sigue “promoviendo el sistema de becas que tiene la Universidad, un sistema de fondo solidario, que fue creado con la idea de acompañar a los estudiantes, para que puedan terminar sus estudios”.

La socióloga y docente Gabriela Mariño, referente de la junta promotora de la gremial docente ADUNA de la Undav, trazó un diagnóstico similar. “Estamos teniendo deserción de estudiantes que no están pudiendo llegar a la Universidad para pagar su boleto”, puntualizó en diálogo con esta agencia.

Nicolás Lozza, estudiante de la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional de La Matanza y referente de la agrupación estudiantil La Demo, sostuvo que el aumento del boleto “afectó más a los estudiantes que los propios cierres de cursos y que el propio presupuesto que pueda recibir la Universidad”.

“Hablé con estudiantes que me dijeron que directamente no podían estudiar o que tenían que dejar materias porque no les alcanzaba para pagar el boleto, hay estudiantes que tienen que viajar una hora, tomarse uno, dos, hasta tres colectivos en muchos casos y no pueden afrontar el gasto, entonces, obligatoriamente tienen que dejar de cursar alguna materia”, remarcó ante la consulta de ANCCOM.

Durante los últimos años, la implementación de  un conjunto de políticas inclusivas en Educación Superior como la creación de nuevas Universidades Nacionales o la ampliación del sistema de becas e incentivos económicos llevaron a un exponencial crecimiento de la matrícula universitaria.

En el último anuario publicado por la Secretaría de Políticas Universitaria, en el año 2013 las Universidades Nacionales de la región metropolitana poseían un total 540.485 alumnos, con una inscripción de 11.978 nuevos jóvenes y  un total de 27.942 egresados.

En la UnLa, la cantidad de estudiantes registrados pasó de 5.971 inscriptos en el 2002 a 12.825 en el año 2013, un crecimiento del 7,9% anual, según el anuario. Un proceso similar se registró en la Universidad nacional de La Matanza, en donde la población universitaria pasó de 20.515 en el 2002 a 36.338 en el 2013, un incremento del 5,8 %.

En el mismo informe, se indica que las becas destinadas a la educación superior, pasaron de 2.452 otorgadas en el 2002 a 45.513 durante el 2013, de las cuales 16.669 corresponden a las dadas directamente por las universidades y 28.664 formaron parte de las Becas del Bicentenario, entregadas por el gobierno nacional.

Los ajustes y aumentos definidos por el gobierno de Cambiemos basados en el  “sinceramiento” de la economía pusieron en jaque tanto el funcionamiento de las instituciones públicas como la posibilidad de ingresar, permanecer y finalizar los estudios superiores a sus estudiantes.

El recorte presupuestario fue negado tanto por voceros como por el propio ministro de Educación nacional Esteban Bullrich quien, en declaraciones recientes a la agencia estatal Télam, sostuvo que “no hubo recortes ni desvíos de fondos de las universidades”, al referirse al envió de recursos a las provincias por unos 800 millones de pesos, los cuales tenían como objetivo primario, la inversión en educación primaria, secundaria y superior.

“Estamos teniendo deserción de estudiantes que no están pudiendo llegar a la Universidad para pagar su boleto”, dijo Mariño.

A las dificultades presupuestarias como consecuencia de las subas en los costos de los servicios públicos se sumó también la decisión de la Secretaría de Políticas Universitarias de “congelar” las obras destinadas a ampliación o mejoras. Nuevas aulas en el campus de la UnLa, una sede descentralizada de la misma Universidad en la localidad de González Catán y un polideportivo que fue devengado del presupuesto pero cuya construcción, por la suba de los costos en materiales, está detenida, sólo son algunos ejemplos del cuadro actual.

“Al ser universidades jóvenes se caracterizan por estar todo el tiempo en obra, se están construyendo”, enunció Grillo.Y agregó: “Se están haciendo aulas pero las obras están frenados, porque no está el presupuesto destinado. Al aumentar todos los precios, varió el presupuesto para esa obra”.

Además, explicó, se detuvieron “por una decisión de la Secretaría de Políticas Universitarias del actual gobierno, que quiere hacer una revisión y saber para qué están destinados esos fondos”.

En este mismo sentido, Mariño expresó que las universidades nacionales del conurbano “recién nacen y necesitan de un empujón un poco más fuerte por parte del Estado. Tenemos cinco obras en las distintas sedes de la Universidad que están paradas”, graficó.

Nacidas con el objetivo de establecer un vínculo profundo con los lugares en donde fueron creadas, las universidades del conurbano pasaron de pensar e implementar políticas educativas a imaginar cómo subsistir, a como pagar los servicios y mantener su funcionamiento.

La Unla (1989) y la Unlam (1995) forman parte de las seis universidades que fueron inauguradas en el período 1989 y 1995, durante los gobiernos de Carlos Menem y bajo el paradigma neoliberal, que se plasmó en la ley de Educación Superior de 1995.

La Undav (2009) forma parte de segundo momento de ampliación de las Universidades Nacionales, constituidas por el nuevo vínculo  que se estableció entre el Estado y las universidades en las gestiones kirchneristas. A partir del 2009, se crearon también las Universidades de Moreno, del Oeste con cabecera en el partido de Merlo, la Universidad Arturo Jauretche en Florencio Varela, y la Universidad Nacional de José C. Paz.

La generación de recursos propios es una tarea en construcción.  “La mayoría de las universidades del conurbano no tiene un recurso propio, no es que tienen fotocopiadoras como la UBA, no es que manejan comedores, las universidades del conurbano no manejan nada, no manejan un solo peso”, sostuvo Grillo.

“Nuestra Universidad tiene apenas recién años de vida. No trabaja con recursos propios, durante estos años nos hemos preocupado por implementar políticas públicas que siguieron sosteniendo una matrícula universitaria, que en nuestro caso es un 80 % de primera generación de universitarios, no estábamos preocupados en generar recursos propios, de todos modos la Undav si tiene una cooperadora”, aseguró Mariño.

Actualización 08/06/2016