13N: una pelea contra el grooming

13N: una pelea contra el grooming

Menor de edad mirando un celularMañana se celebrará por primera vez el Día Nacional de la Lucha contra el Grooming, sancionado por el Senado de la Nación el 10 octubre de este año. Las ONG Grooming Argentina y Mamá en línea realizarán encuentros y congresos en todo el país para concientizar a la población.

Ambas organizaciones trabajan por un objetivo común: combatir el grooming entendido como el ciberacoso infantil y educar a padres y niños sobre este delito que crece, como consecuencia del avance de las redes sociales en nuestra sociedad.

El ciberacoso infantil es definido según Grooming Argentina como “el acoso sexual virtual a niños y adolescentes que consiste en acciones deliberadas por parte de un adulto para establecer lazos de amistad con un niño con fines sexuales”. En este sentido, desde ambas asociaciones aseguran que las charlas educativas, las aplicaciones para denunciar el grooming y el apoyo de los padres son importantes para prevenir este delito.

La ONG Mamá en Línea está compuesta por mamás y víctimas del ciberacoso infantil y tiene como objetivo alertar sobre los riesgos que pueden enfrentar los menores de edad en las redes sociales. Su directora Roxana Domínguez, en conversación con ANCCOM afirma que “ante el rol que cumplen hoy las redes sociales en donde la interacción de los niños es con muchísima gente, los padres tienen el derecho y la obligación de conocer este sistema de navegación para entender cómo cuidar a sus hijos. No prohibimos el uso de la tecnología, pero sí exigimos su uso responsable”.

Domínguez relata cómo el día después en que se aprobó el Día Nacional de la Lucha Contra el Grooming, decidieron escribir a todos los municipios de Argentina invitándolos a adherirse y a replicar, de alguna manera, la prevención. En este sentido, junto con la concejal Jimena de Lara de la Municipalidad de Malvinas Argentinas presentaron el proyecto por el cual se declara al grooming de interés municipal. También dieron charlas educativas en distintas escuelas de la zona para niños y padres.

“La devolución de los chicos es excelente. Ellos no saben lo que significa grooming, pero cuando la charla avanza saben de lo que estamos hablando”, dice Domínguez. “Contar en primera persona lo que vivimos hace que  muchos se animen a hablar de situaciones que han vivido. Incluso pasa que los mismos chicos piden a los adultos que nos llamen para saber qué hacer, cómo denunciar, dónde hacerlo.”

Por otro lado, Grooming Argentina también fomenta la promoción, prevención y erradicación de este tema. Su presidente, Hernán Navarro, en el 1° Congreso Nacional de Grooming y Ciberbullyng, desarrollado hace una semana en la Universidad Nacional de Santiago del Estero, planteó que siete de cada diez personas desconocen de qué se trata el grooming y que muchos adultos se encuentran ante una situación totalmente desconocida, que no saben cómo manejar o ante la que creen tener una falsa percepción de control.

A pesar del aumento de episodios de ciberacoso infantil, la mayoría de las denuncias se reciben por reportes de la organización Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) -programa de Estados Unidos que tiene un convenio de coparticipación en las causas- mientras que son muy pocas las que llegan directamente de los padres de los chicos.

La Fiscalía de la Ciudad especializada en Delitos Informáticos  es la encargada de recibir las denuncias de esta clase de crímenes y en su último informe, del año 2017, registró un fuerte aumento con respecto al año anterior. El registro de denuncias del NCMEC durante el año pasado en la Argentina es de un total de 19.214, que se convirtieron en casos de pornografía infantil y grooming. En comparación con las 8821 denuncias registradas en  2016.

Ante este escenario y a pesar de que el grooming es considerado en Argentina un delito penal desde 2013, gracias a la ley 26.904 que establece penas desde 6 meses a 4 años de prisión, Mamá en Línea insiste en la necesidad de educar en la temática para evitar que los niños, niñas y adolescentes sufran este tipo de situaciones.

En este sentido el senador nacional Dalmacio Mera y la diputada nacional Gabriela Burgos, con el apoyo del Programa de Modernización Parlamentaria de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación y la ONG Mamá en Línea, preparan una jornada de concientización para el martes 13 noviembre bajo el lema de “Hablemos de grooming”. El evento tendrá lugar en el Anexo “A” de la Cámara de Diputados de la Nación ubicado en Avda. Rivadavia al 1841 a partir de las 9:30 hasta las 12.

“Esperamos que en todo nuestro país no queden escuelas sin que toquen el tema, estoy totalmente agradecida a todos aquellos que nos apoyaron”, dice Domínguez. Por otro lado, sumándose a ésta causa Sebastián Bortnik, presidente de Argentina Cibersegura, una organización sin fines de lucro que trabaja para crear un espacio digital protegido, a través de actividades de concientización y educación, informa que los lugares para denunciar los delitos de ciberacoso son la División Delitos Tecnológicos de la Policía Federal Argentina (4800 – 1120/4370 – 5899) o a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (11 5071 – 0040). También puede acudir al Área de Cibercrimen de la Policía Metropolitana (4309 – 9700) o a la Fiscalía de la Ciudad de Buenos Aires (0800 – 33 – 347225).

El fin del piropo

El fin del piropo

Mientras esperan. Mientras pasean. Mientras corren o caminan. Día a día, son miles las mujeres que sufren acoso callejero. Los mal denominados “piropos” -que comprenden desde elogios poéticos a breves relatos sexuales- enfrentan a grandes y chicas con miradas lascivas, con palabras que irrumpen sin pedir permiso. Pero se les pide soportar. Soportar la inhibición, el miedo, la incomodidad. Ser inteligente a la hora de resolver el dilema de cruzar de calle o pasar frente a un grupo de hombres. La visión del cuerpo femenino como dominio público es uno de los tantos problemas de la sociedad patriarcal.

“La temática de género la venimos trabajando desde hace años presentando distintos proyectos que buscan terminar con la violencia que provoca la muerte de una mujer cada treinta horas”, explica la diputada Victoria Donda. “En ese marco es que elaboramos el proyecto que sanciona el acoso sexual callejero”, agrega sobre la problemática que genera cien denuncias por mes, según la ONG Bullying Sin Fronteras.

El momento era propicio. El video-denuncia de la joven Aixa Rizzo -hostigada cotidianamente por un grupo de obreros que trabajaban frente a su casa- se viralizó en las redes sociales hasta filtrarse en la agenda de los medios masivos de comunicación. El hartazgo de la adolescente con 300 mil reproducciones instalaba un debate necesario.

Una encuesta de espacio público realizada a mil cien mujeres por la organización Acción Respeto, demostró que el 94,4% de las que transitan las calles reciben comentarios sobre su apariencia o su sexualidad y el 89% manifiesta que no le gusta.

Además, se destaca en el informe que el 38,2% de la muestra tuvo su primer contacto con estas conductas antes de los trece años. Otro 38,2% las padecen desde los trece y los quince. Si bien la problemática no conoce de edades, el 75% de las afectadas tienen entre 18 y 30 años: “La ley es sólo un puntapié, un punto de partida para comenzar a discutir el tema, comenzar a dar el debate acerca de los “piropos”, del rol de la mujer en el espacio público”, desarrolla la diputada.

acoso callejero

Si bien existen dos proyectos en la Legislatura porteña del Frente para la Victoria (FPV), éste es el único de alcance nacional.

Presentado por Libres del Sur y las organizaciones sociales Acción Respeto y Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá) el pasado 23 de abril, -y a diferencia del resto- se busca modificar el código penal con la creación del artículo 129 bis el cual considerará como acoso a “Toda conducta u acción, física o verbal, con connotación sexual y no deseada, realizada por una o más personas en contra de toda mujer o persona que se autoperciba como mujer, llevada adelante en lugares o espacios públicos, o de acceso público, que de manera directa o indirecta afecten y/o perturben su vida, dignidad, libertad, integridad física y/o psicológica y/o el libre tránsito, creando en ellas intimidación, hostilidad, degradación, humillación y/o un ambiente ofensivo en los espacios públicos, siempre y cuando no configure un delito más severamente penado”, según detalla en el proyecto que -de aprobarse- instalará multas de entre 100 y 7 mil pesos, dinero que apuntará a paliar el déficit presupuestario que sufre el Consejo Nacional de la Mujer: “El Consejo tiene un presupuesto de $0,80 centavos por mujer para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres. Contamos con la ley de protección integral de la mujer sancionada en el año 2009, una excelente ley, pero sin presupuesto es una mera declaración de deseos que no se ve reflejada en la realidad cotidiana. Claramente, la lucha contra la violencia de género no es un tema de agenda para el gobierno nacional”, señala Donda.

Pero sí lo es para las organizaciones sociales. Acción Respeto surge como movimiento en el marco de la Semana Internacional Contra el Acoso Callejero de 2014. A través de campañas gráficas y diversas actividades, cuestionan la naturalización con la que funciona. Su objetivo es lograr un cambio que lo incluya como forma de violencia: “Creemos que, como todo proceso, lleva tiempo y necesita de mucha paciencia y constancia. Que el tema no deje de estar presente, trabajarse y expandirse en cada sector de la sociedad. ¿Es posible? Si, lo es”, asegura Paula, integrante del movimiento. Y agrega: “En ese punto pensamos que el proyecto presentado por Victoria Donda es útil, favorable. Tuvimos la oportunidad de participar y colaboramos con el armado”.

La finalidad sociocultural también se contempla en el proyecto de ley: “Lo que más trascendió en los medios es la multa pero, personalmente, creo que lo principal es el trabajo de prevención y concientización que incorporamos”, comenta la diputada. Se busca incorporar campañas y luchas contra el abuso sexual en el espacio público, así como también que se incluya en las currículas de las escuelas para que, como dice Paula: “Se eduque en el respeto”.

Además, el proyecto propone que se instale oficialmente la Semana Nacional del Acoso Callejero, a realizarse del 12 al 18 de abril de cada año.

“El cambio es cultural, y desde nuestra posición lo que tratamos es, justamente, de empezar a transitar ese camino tan ansiado”, cierra Donda.