Por Agustina Pasaragua
Fotografía: Gentileza Andrés Jones

 «Lo primero que hice cuando tuve una cámara fue apuntar al espacio”, cuenta Andrés Jones, realizador visual de efectos especiales, publicista, astrónomo aficionado desde pequeño y… ¿primer argentino en ir a la luna? Es pronto para decirlo, pero asegura que quiere ser uno de los ocho turistas que viaje al satélite terrestre en 2023.

Con sus primeros trabajos audiovisuales Jones compró su primera cámara reflex para capturar el cielo nocturno. Esta pasión no es mera casualidad porque estaba predestinada. Todo comenzó cuando Andres tenía unos cinco años y jugaba con un compañero, a quien su padre le regalaba juguetes de la NASA. A partir de ese momento, empezó a interesarse por el cielo. El punto de quiebre fue cuando llevó su libro favorito de astronomía al colegio y su maestra de primaria le dio una palmadita en la espalda de aprobación. Ese empuje, pero también curiosidad, sembró una semilla que creció hasta hoy, convirtiéndolo en un profesional de la fotografía.

Su pasión por el cielo se desarrolló a la par de producciones fotográficas y hasta el momento su único vínculo con el espacio era la recreación visual del espacio para documentales. Luego de unos años y ya con su Reflex en la mano, decidió dedicarse a la astrofotografía sin saber que su vida cambiaría tras el anuncio de Yusaku Maezawa, fundador CEO del negocio de moda más grande de Japón, ZozoTown: “Les invito a acompañarme en esta misión. Ocho de ustedes, procedentes de todo el mundo, viajarán conmigo a la luna”, dice el multimillonario en el video de su página oficial. El japonés habría comprado en 2018 todos los boletos para llevar a cabo el viaje privado de SpaceX que pertenece a la compañía de Elon Musk, la cual transportará a diez o doce personas.

 

Para muchos, esta propuesta fue descabellada. Andrés, por el contrario, no tardó ni tres segundos para inscribirse: «Estaba con mi pareja y le dije ‘Me inscribí para ir a la luna’. Ella incluso se anotó», comienza narrando. «Después le mandé un mensaje a mi hija contándole que me había anotado y me respondió ‘No es normal que a uno le llegue un mensaje así’”. Aun así, Andres cuenta con el apoyo de su familia para emprender esta travesía.

La última vez que los humanos alunizaron fue en diciembre de 1972, durante la misión Apolo 17, tripulada por los astronautas de la NASA Eugene Cernan, Harrison Schmitt y Ronald Evans. Durante la conferencia de prensa de lanzamiento de este proyecto, Musk dijo: “La intención es ayudar a avanzar en la tecnología de cohetes hasta convertirnos en una especie de múltiples planetas y una verdadera civilización espacial».

 

En este caso, la idea principal del japonés era que participaran pintores tradicionales. Sin embargo, cuenta en un video que durante años reflexionó sobre el concepto de «artista” llegando a la conclusión de que es “cualquier persona que haga algo creativo”. Para el astrofotógrafo esta particularidad se debe a que el empresario pone el ojo en la creatividad y no tanto en el arte clásico: “El artífice siempre transmite cosas pero en este caso, él no habla de ramas como podría ser un pintor sino de personas creativas. En este caso, yo soy creador audiovisual pero hoy me dedico de lleno a la fotografía nocturna. Esto es lo que me apasiona y por eso busco la creatividad en mis trabajos”.

 

Respecto al proceso de selección en curso, Jones detalla como fundamental el uso de computadoras actualizadas con un sistema operativo sólido para realizar diversas tareas en la página DearMoon. “Una de las primeras fue redactar nuestro proyecto de vida justificando como este viaje lo potenciaría. También tenías que enviar tres fotos personales, información sobre redes sociales y número de seguidores». En este sentido, es interesante pensar por que sería necesaria esta información para poder participar. Asimismo, detalló Spacex, la intención es generar turismo espacial con un aeropuerto en la luna. Hasta el momento, no está esa estructura así que este sería un vuelo orbital similar a lo que hizo la famosa misión del Apolo 11.

Como explicó el empresario nipón, quienes queden seleccionados, pasarán por tres instancias más que incluyen tareas, videoconferencias y chequeos médicos; a su vez Maezawa se hará cargo de todos los gastos, tanto del entrenamiento como del viaje. En cuanto a la confirmación, se estima que para junio estén los seleccionados para empezar el entrenamiento en EE.UU. “Si yo no quedo, me gustaría que algún argentino o latinoamericano quede seleccionado: esta es una gran experiencia para vivirla de cerca”, cierra el entrevistado.

 

Viajar a la luna es uno de los proyectos con más interés en los últimos años. Esto quiere decir que SpaceX no es la única compañía que trabaja en brindar unas vacaciones fuera de la Tierra, ya que otras empresas privadas han estado construyendo diversas formas de llevar turistas al espacio. Una de esas empresas es Orion Span que pertenece a Amazon y permitiría a partir del 2022 visitar la Estación Espacial Aurora. La pregunta central es qué tan caros serán los viajes y quienes estarían en condiciones de pagarlo. Las reservas ya están abiertas por 80.000 dólares, que formarán parte del total del precio, que asciende hasta los 9,5 millones de dólares por cabeza. La compañía asegura que seiscientas personas ya compraron sus pasajes, incluidas celebridades como Leonardo DiCaprio.

Todavía es pronto para saber con exactitud cuál de estas compañías encabezará este viaje. ¿Estamos más cerca de poder pasar las vacaciones fuera del planeta? En el mejor de los casos, algunos podrán hacerlo. ¿Quién ganará la carrera espacial, en versión privada, de llevar a los primeros turistas? ¿Será Andres Jones uno de los primeros junto a SpaceX y Yusaku Maezawa?