Por Maria Miel Griguoli
Fotografía: ANCCOM

El camino a Iguazú, uno de los lugares más turísticos del país, refleja la abatida pero repetida realidad de los trabajadores tareferos de Misiones. A lo lejos, se los alcanza a ver con banderas y carteles,  desde una fila interminable que mezcla autos con gendarmes. Hace dos meses que no les pagan el sueldo, la interzafra -mejor conocida como la cosecha de cuatro meses- y la tarjeta social.

“Desde el año pasado que no vienen cumpliendo con los trabajadores de Wanda. El corte que estamos haciendo es para cobrar la intercosecha de yerba y también la tarjeta social que no les pagaron a los compañeros tareferos que realmente lo están necesitando. La medida de fuerza también es llevada a cabo para lograr una suba salarial digna. Estamos en una época difícil, hay mucho aumento de tarifas y los compañeros siguen trabajando por kilo”, explica uno de los trabajadores, apodado El Gordo, que le pone el cuerpo no solo a la medida de fuerza sino a los 40 grados que marca el clima misionero.

Los tareferos trabajan bajo el sol entre 9 y 10 horas por día, aquellos que están en blanco cobran 4.600 pesos por mes pero más del 50 por ciento está en negro: “Es una mísera lo que nos pagan, no cubre ni la canasta básica porque tampoco  tenemos un Ministerio de Trabajo presente que regule y corrija a las patronales y respete nuestros derechos laborales. Los gobiernos, tanto nacional como provincial, están desviando la atención con nosotros: llevamos el sufrimiento con el cuerpo y somos los relegados, los marginados”, agrega uno de los tareferos que prefiere mantener en reserva su nombre. En esta lucha recurrente, los tareferos trabajan en conjunto con el Sindicato Único de Obreros Rurales (SOUR) y la Asociación de tareferos de Wanda.

“Vamos a continuar hasta que tengamos una respuesta favorable, una respuesta por escrito y no por palabra, una lista con todos los nombres de los compañeros y compañeras  que asegure que van a cobrar la interzafra, que van a tener esa tarjeta social y recién si llegamos a ese punto en un acuerdo con el gobierno nacional y provincial seguramente liberemos la ruta”, concluye uno de los tareferos apostados en la ruta.