Si hay un rasgo que caracteriza al referente de la revista La garganta poderosa y militante de la organización La Poderosa, Nacho Levy, es su afán por ser un orador vivaz e interpelador. Y son esos mismos rasgos, los que se vieron ayer en el Club Ferrocarril Oeste frente a cientos de personas, al momento de encabezar la charla titulada “Derecho a la información, medios de comunicación y democracia”, en el Primer Foro Mundial de Pensamiento Crítico organizado por el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).
Levy participó de la charla junto a Felipe Silva, integrante de Mídia Ninja, una organización brasileña de periodistas, una red de comunicación libre y popular. En principio, el encuentro tenía como invitados al periodista y fundador de Le monde diplomatique, Ignacio Ramonet, y a la directora del canal de televisión Telesur, Patricia Villegas. Sin embargo, Ramonet, finalmente no asistió al foro a causa de haber perdido el vuelo en avión para llegar al país –personalidad a la que, de todas formas, Levy le dedicó unas palabras de aprecio al recordar su libro sobre la biografía de Fidel Castro.
Pero más allá de los infortunios, a Levy le bastó con menos de veinte minutos para dejar en claro para qué estaba presente en CLACSO, y soslayar así las irregularidades que acontecieron a la charla. “Para nosotros hablar de comunicación no es hablar de periodistas –afirmó-, hablar de comunicación es hablar, y el periodismo no se dice, se hace. Por eso este espacio lo aprovechamos para contar qué nos está pasando”.
El discurso de Levy comprendió aspectos que rondaron fuertemente la crítica a la manipulación mediática sobre la imagen de los pobres, y su construcción de trasfondo. Pero además habló de una contraposición entre “sentimientos de pertenencia”, y una oposición crítica frente a la ideología derechista y su relación con los medios de comunicación hegemónicos. Rescató fervientemente rasgos auténticos del discurso de la comunicación popular, desde su posición como editor de La garganta poderosa: “Si vos, en tu legítimo derecho individual, le tenés miedo a la sangre, no podés ser cirujano. Y si vos le tenés miedo al pueblo, no podés ser periodista”, sostuvo Levy en la mitad de su oratoria.
El encuentro con Levy y Silva fue de gran asistencia, ya que se agendó en medio de una entrevista previa a la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff y a la presentación de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, por la cual se esperaba una masiva convocatoria. Debido a esa razón, académicos y políticos estuvieron presentes en el recinto a la espera de CFK.
En diálogo con ANCCOM, el diputado nacional del Frente Para la Victoria, Agustín Rossi, quien presenció el encuentro Derecho a la información, medios de comunicación y democracia, valoró “la importante interpelación del lugar desde el cual se quiere comunicar”, haciendo mención a los dichos de Levy. “Es importante escuchar a quienes están autorizados para hablar sobre la pobreza -agregó Rossi-, ya que sus mecanismos y plataformas de comunicación conviven con eso”.
No obstante, la charla sostenida casi en su totalidad por el propio Levy, logró ser constructiva, pertinente, crítica, y concisa, en virtud de argumentos. En ese sentido resaltó la importancia que la comunicación popular comparta un escenario disruptivo con los academicistas en CLACSO. En esa línea, sostuvo Levy: “No nos trajeron para lucirse, nos trajeron a un foro de pensamiento crítico, y a veces la academia también necesita que la ayuden a deconstruirse. Entonces nosotros venimos por ese camino”.
Como cierre, Levy resaltó el valor de poder entender desde una posición disidente y de tener un pensamiento crítico, y enfocó en la construcción desacertada que se manifiesta en los medios de comunicación al referirse a los pobres: “Pobres sí faltan, en la política y en estos paneles. Basta de mirar por TV a quienes solo conocen la pobreza por TV; basta de leer en los libros a los que sólo conocen a la pobreza en los libros; y basta de que nos quieran explicar el mundo desde adentro de un hotel, o desde adentro de un avión: hay que romper el aislamiento, porque el terror se basa en la incomunicación”.